Publicamos las notas de viaje de Jorge Pollola (Rosario) para participar del encuentro anual de los Voluntarios de Uruguay
Partimos rumbo a Montevideo junto con Pablo Loyola, el miércoles 8 de abril, para participar como miembros del Centro de Voluntarios del Cono Sur, en el Encuentro anual que los voluntarios de Uruguay realizan, esta vez en el Centro Mariápolis El Pelicano, ubicado a unos 20 km del centro de Montevideo.
Apenas llegados fuimos recibidos por Julio Marmol y Ramón Perdomo. En camino al focolar masculino, lugar donde nos alojaríamos, recorrimos toda la rambla de Montevideo y el Parque Rodo, lugares de una belleza destacable, enmarcados por el imponente Río de la Plata .
Cómodamente alojados en el focolar, recibimos toda la calidez de quienes allí viven.
Sobre el final de la tarde y luego de la misa, algunos voluntarios se acercaron al focolar para saludarnos e intercambiar las primeras impresiones sobre la actualidad de los mismos y el retiro a realizar. Un lindo momento que nos permitió ir vislumbrando la realidad de los voluntarios en Uruguay.
En la mañana del día jueves, nos recibió con un buen mate, Selso Lima que nos preparó un programa de encuentros con personas y visitas que abarcó casi todo ese día.
Un momento fuerte de esa mañana fue ponernos en contacto mediante escritos y videos con aquellos hermanos del santo viaje, que nos han precedido, así aparecieron con un relieve de personas jugadas por la vocación el compromiso de voluntarios: Alejo Perdomo, Guillermo Piñeyro, Juan Calderara, Eduardo Schâffer y otros. Como así también conocer y recorrer las instalaciones de la revista Ciudad Nueva de Uruguay.
Luego fuimos hacia el barrio el Borro, donde se encuentra en pleno desarrollo una experiencia social llamada Nueva Vida, sostenida por algunos voluntarios. Recorrimos todas sus instalaciones y ya entrada la tarde volvimos a Montevideo junto con Selso y Ramón aprovechando para degustar un almuerzo en lo que se denomina el Puerto Viejo .-
El viernes, una vez instalados en el Centro Mariápolis, comenzamos a recibir uno a uno a los voluntarios que llegaban de distintos lugares. Por la noche después de una cena a la canasta incluida una de frutas, se realizó una recreación, con la proyección de una película y debate posterior.
El sábado por la mañana comenzamos formalmente el Retiro en un ambiente de expectativas y esfuerzos por generar la presencia de Jesús en Medio.
Pablo, presenta al Centro Cono Sur, y realiza una detallada explicación de las conclusiones de la última Asamblea de los Voluntarios en Roma.
Momentos de intercambio y comunión que nos permiten conocer a fondo el alma y el pensamiento de estos hermanos uruguayos. Remarco aquí el aspecto cultural que tiene fuerte incidencia en este.
En este clima de profundización de nuestra vocación y de verdadera búsqueda de una mayor integración como Cono Sur, pudimos exponer con claridad el verdadero objetivo del nuevo Centro Cono Sur que no es otro que el de estar al Servicio de todos los voluntarios, ayudando a recrear nuevos escenarios y soluciones.
El domingo ya de noche nos despedimos, prometiéndonos ser fieles a la comunión / comunicación y al intercambio como muestra de que este nuevo camino, ya está en marcha.
Cuando nos pusimos en viaje de regreso, con algún signo de cansancio físico, nuestras almas estaban felices por haber “dado todo”, en pos de esta vocación de voluntarios de Dios, y seguros de llevarnos en nuestro corazón a cada uno de estos hermanos uruguayos con quienes compartimos el “santo viaje” de la vida.
