Concordia después de la inundación: un paisaje de abandono, pero lleno de esperanza

 
Concordia, muy castigada por la inundación de diciembre poco a poco va volviendo a recuperar su fisonomía. Nos llega a través de los referentes de los Focolares de esa ciudad una “rendición de cuentas” de los $ 15.500 que se recaudaron.

Escriben Daniela y Roly Fernández:

A través del teléfono nos mantuvimos en contacto y logramos conocer situaciones y personas que necesitaban ayuda.

  • IMG-20160109-WA0000Una directora de escuela que por sus evacuados nos dice “Necesitamos botas de goma y la Municipalidad eso no da, son de familias muy pobres, casitas ranchos, mucho barro”. Enseguida le dijimos: “Nosotros podemos ayudar con eso”. Averiguamos precios y encontramos distintos negocios y así concretamos la compra.
  • El sábado visitamos a Natalia -una joven de la comunidad- que ya estaba en el retorno anunciado. La sencillez y austeridad de la casa tiene una hermosa dignidad. Convenimos la necesidad de pintura. Nos conmovió su actitud ya que nos dijo que si bien les hacía falta sabía que hay familias que perdieron muchos muebles o que piden alimentos. Solo le dijimos que ese era el amor de Dios para ella y su familia, que si lo necesitaba eso bastaba para recibirlo. Fuimos y compramos el látex. Se lo llevamos y estuvimos en ese momento con sus padres, su mamá nos dio un abrazo en el que se mezclaba el cariño, el agradecimiento por el aporte y la confianza en Dios. ¡Hermoso fue ese breve momento!
  • IMG-20160109-WA0002También visitamos a una mujer joven, Esther, madre sola de Nazareno de 10 años. A ella llegamos por mi cuñada que conoce su problemática y necesidades de inundada. Era la primera vez que la veíamos, su casita consiste en un par de piezas al fondo de otra casa, todo pequeño, todo humedecido y sin embargo en su cocinita nos sentamos y charlamos un ratito. Nos encantó ese gesto, esa apertura. Compartimos su realidad, la mamá con un cáncer extraño, en los inicios del tratamiento, yendo y viniendo a Buenos Aires, su hermana también madre sola de una niña pequeñita. Contó cómo la creciente los sorprendió, fue la primera vez que les llegó el agua -fue una creciente que no se daba desde hace 50 años-. Ella vive ahí desde niña. Sus necesidades eran un par de muebles, un roperito y otro para libros y un colchón para el niño. Cosas que no pudo salvar y se arruinaron completamente. Por estas necesidades fuimos hasta la mueblería de Fernando -un joven del Movimiento- quien nos comentó a su vez cómo desde su negocio tuvo muchas oportunidades para ser concreto en el amor, dar y vender con rebajas ha sido una constante para él en estas semanas. ¡Otra vez una pequeña comunión de experiencias! Nuestra compra también tuvo su rebaja y ya está en la casita de Esther y Nazareno. Ella solo responde “Bendiciones, bendiciones, gracias”.
  • IMG-20160109-WA0003El Padre José Temón nos llamó estos días para ver si nos quedaban fondos porque había una familia que necesitaba alimentos y agua principalmente. Así que partimos con Roly al supermercado y de ahí hasta la familia. Nos parecía importante conocerlos, porque dejar la compra en la Parroquia era lo más sencillo… Era la una del mediodía, la familia vive en una rotonda de ingreso a la ciudad, pegaditos a la vía del tren. Una casa de material muy añosa, llena de vegetación alrededor… Nos recibieron tan bien, el matrimonio (tal vez de nuestra edad, más o menos) y dos hijos adolescentes, varón y mujer. Estuvimos en su patio, conversando, escuchando su experiencia con esta creciente. El señor es ordenanza en una escuela Técnica de oficios que está cerquita, así que allí se alojaron como autoevacuados, recibieron la ayuda de los docentes de la casa pero no de la red de Defensa Civil. La vuelta a casa la hicieron ellos mismos con la mayoría de las cosas, usando una carretilla de la escuela para todo lo pequeño y luego en un carro lo más grande. En la limpieza tuvieron el hallazgo de una yarará, historia repetida en la zona. Varios gatos y perros son parte de la familia con un pato sirirí re domesticado. Ellos no sabían cómo el Padre Temón conoció sus necesidades, así que estaban sorprendidos. Muy cálidos contaron que el Padre los había casado y bautizado a sus hijos, tres en total. El varón ahí presente contó cómo participa de los grupos parroquiales y estuvo en la ayuda a otros inundados. ¡Hermoso descubrir esa red que se entramaba con todos! Nos invitaron a volver, esperanzados de que su patio va a reverdecer pronto. Les hará falta más agua potable, así que quedamos en llevarles entre lunes y martes más bidones.
  • Yendo a lo de Esther después de haber estado con Natalia pudimos recorrer unas cuadras donde la gente está volviendo lentamente, muchos limpiando, algunos ya instalados, otros no. Nada de verde tiene el paisaje, todo arrasado por las aguas sucias ha quedado marrón. Se ven colchones tirados por haber quedado en las casas, restos de muebles…. Un paisaje de Jesús Abandonado pero lleno de esperanza.
  • 567d4ca1d7f8dRoly vio que frente a la casa de Nati vive una compañera docente de su escuela que él sabía que había sido evacuada. Fuimos a visitarla un ratito y compartimos también con ella su experiencia, a la que nunca en 35 años le había entrado el agua. Su cocina completamente desarmada, muebles que también perdió… Nos contaba de su aturdimiento en el momento crítico en que debió salir, de cómo sus hijos reaccionaron para hacer la mudanza… Nos pusimos a disposición, nos agradeció y tal vez no necesite algo con urgencia, pero estamos seguros de que la visita fue importante para ella, para nosotros fue “hacernos uno” con cada hermano, ser constructores de fraternidad…

Detallamos a continuación los fondos recibidos y su utilización. Verán que nos queda aún, pero las necesidades se van presentando día a día y antes de fin de mes seguro llegarán a destino.

Recibimos hasta el 7 de enero un total de $ 15.500 (quince mil quinientos pesos)

Se utilizaron:

$ 2934 (dos mil novecientos treinta y cuatro pesos) en las botas.

$ 568.27 (quinientos sesenta y ocho pesos con veintisiete centavos) en la compra del Supermercado

$ 3076.30 (tres mil setenta y seis pesos con treinta centavos) en pintura látex, fijador y cal.

$ 3000 (tres mil pesos) en mueblería: un colchón de una plaza, un ropero pequeño, una estantería para libros.

Total de gastos hasta la fecha: $9.578,57 (nueve mil quinientos setenta y ocho pesos con cincuenta y siete centavos)

Saldo: $ 5.921,43 (cinco mil novecientos veintiún pesos con cuarenta y tres centavos)

Normas(500)