“Hemos vivido una jornada llena del Amor de Dios”, resumen los responsables del Movimiento Parroquial de los Focolares del conourbano sur de Buenos Aires. Y lo confirman las impresiones que espontáneamente cada uno fue expresando, como Ana María de Rafael Calzada, con sus joviales 72 años expresa que se trató de un “hermoso encuentro de hermanos, para tomar impulso con más fuerza en el camino de la unidad. Hacer que nuestras comunidades perciban el flujo del amor”. O Carlos Alberto, catequista familar de Berazategui quien afirma que fue “muy positivo” y a raíz del intercambio de ese día dice que “tenemos que seguir trabajando por la unidad”.
El día de la bandera, en Argentina, el jueves 20, se reunieron un centenar de personas de distintas parroquias en el Centro Mariápolis de José C. Paz para compartir una jornada dedicada a reflexionar sobre el ámbito parroquial, sobre cómo vivir y ser generadores de fraternidad para que la comunidad sea cada vez más una familia.
Así, se comenzó con el padre Marino Giampetruzzi quien “nos ayudó a comprender y profundizar a través de sus experiencias en distintas parroquias, cómo Jesús Abandonado renueva y transforma la vida de las comunidades parroquiales”.
Luego algunos laicos donaron sus experiencias, en las cuales se evidenciaba que Jesús Abandonado se hace presente en distintas situaciones y cómo, si lo reconocemos y amamos a El aún en situaciones muy difíciles, podemos pasar del dolor al amor, de la oscuridad a la luz, de la tristeza a la alegría, generando vínculos nuevos en donde estamos.
Una novedad para muchos fue el “Dado de la Paz“, presentado por algunas focolarinas, ayudándo a todos a comprender cómo nació y cómo se va extendiendo en colegios, comunidades eclesiales, clubes, etc. la propuesta de ser generadores de vínculos, que promuevan la paz en cada ámbito social.
Significó un momento importante para la Hna. Ana Matilde, de la diócesis de Lomas de Zamora, que si dudar dice: “todo excelente. Conocí, descubrí, a Jesús Abandonado real”. Y Pamela de Burzaco, “es la primera vez que vengo, muy hermosa y bendecida jornada .impactada y sorprendida por los testimonios dados. Gracias por todo el amor en cada detalle”.