Juan escribe a las comunidades cristianas fundadas por él en un momento de grave dificultad. Comenzaban de hecho a despuntar las herejías y las falsas doctrinas en materia de fe y de moral y había también un ambiente pagano, duro y hostil al espíritu del Evangelio, en el cual los cristianos debían vivir.

Queriendo ayudar a los suyos, el apóstol les indica el remedio radical: amar a los hermanos, vivir el mandamiento del amor recibido desde el inicio en el cual están resumidos todos los mandamientos.

Haciendo así conocerán que es “la vida”, estarán de ese modo cada vez más en unión con Dios, harán la experiencia de Dios-Amor. Y haciendo esta experiencia, se confirmarán en la fe y podrán hacer frente a todos los ataques, sobretodo en tiempo de crisis.

«Nosotros sabemos que hemos pasado de la muerte a la vida, porque amamos a los hermanos.»

«Nosotros sabemos…». El apóstol hace referencia a un conocimiento que viene de la experiencia. Es como si dijera: nosotros lo hemos probado, lo hemos tocado con la mano. Es la experiencia que los cristianos evangelizados por él han hecho al inicio de su conversión; es decir, que cuando se ponen en práctica los mandamientos de Dios, en particular el mandamiento del amor hacia los hermanos, se entra en la misma vida de Dios.

¿Pero los cristianos de hoy conocen esta experiencia? Ellos saben ciertamente que los mandamientos del Señor tienen una finalidad práctica. Continuamente Jesús insiste en que no es suficiente escuchar, si no que es necesario poner en práctica la Palabra de Dios. (cf Mt 5,19 – 7,21 – 7,26).

Sin embargo lo que no está tan claro para la mayor parte de ellos – o porque no lo saben o porque tienen una conciencia solamente teórica, es decir sin haber hecho la experiencia – es este aspecto maravilloso de la vida cristiana puesto en luz aquí por el apóstol y es que cuando nosotros vivimos el mandamiento del amor, Dios toma posesión de nosotros, y es un signo inconfundible aquella vida, aquella paz, aquella alegría que nos hace experimentar ya desde esta tierra. Entonces todo se ilumina, todo se vuelve armonioso. Ya no hay separación entre la fe y la vida. La fe se vuelve aquella fuerza que compenetra y une entre ellas todas nuestras acciones.

 «Nosotros sabemos que hemos pasado de la muerte a la vida, porque amamos a los hermanos.»

Esta Palabra de vida nos dice que el amor al prójimo es el camino real que nos lleva a Dios. Y como todos somos hijos suyos nada le agrada más que el amor a los hermanos. Nosotros no le podemos dar una alegría más grande de aquella que le damos cuando amamos a nuestros hermanos.

Y el amor fraterno porque nos da la unión con Dios es una fuente inagotable de luz interior, y fuente de vida, de fecundidad espiritual, de renovación continua. Impide que se forme en el pueblo gangrenas, esclerosis, estancamientos; en una palabra «nos hace pasar de la muerte a la vida». Cuando nos falta la caridad, todo se marchita y muere. Y se comprende entonces ciertos síntomas tan difundidos en el mundo en el que vivimos: la falta de entusiasmo, de ideales, la mediocridad, el aburrimiento, el deseo de evasión, la pérdida de valores, etc.

 «Nosotros sabemos que hemos pasado de la muerte a la vida, porque amamos a los hermanos.»

Los hermanos, de los que nos habla aquí el apóstol, son sobre todo los miembros de la comunidad de la cual hacemos parte. Si es verdad que tenemos que amar a todos los hombres, es también verdad que este amor debe comenzar por aquellos que habitualmente viven con nosotros para extenderse después a toda la humanidad. Debemos pensar antes que nada en nuestros familiares, en nuestros compañeros de trabajo, en los miembros de la parroquia, de la asociación o comunidad religiosa a la cual pertenecemos. El amor a los hermanos no sería autentico y bien ordenado si no empezase por aquí. De todas las partes que nos encontremos, estamos llamados a construir la familia de los hijos de Dios.

 «Nosotros sabemos que hemos pasado de la muerte a la vida, porque amamos a los hermanos.»

Esta Palabra de vida nos abre prospectivas inmensas. Nos empuja en la divina aventura del amor cristiano a una apertura imprevisible. Antes que nada nos recuerda que para un mundo como el nuestro, en el cual se teoriza la lucha, la ley del más fuerte, del más astuto, del que no tiene prejuicios y donde a veces todo parece paralizado por el materialismo y el egoísmo, la respuesta es el amor al prójimo. Es esta la medicina que lo puede sanar. Cuando vivamos el mandamiento del amor, de hecho, no solo nuestra vida será tonificada, sino que todo a nuestro alrededor lo siente; es como una ola de calor divino, que se irradia y propaga, entrando en las relaciones entre personas, entre grupos transformando poco a poco la sociedad.

Decidámonos entonces. Hermanos para amar en nombre de Jesús tenemos todos, tendremos siempre. Seamos fieles a este amor. Ayudemos a muchos a serlo. Conoceremos entonces en nuestra alma que significa la unión con Dios, la fe se reavivará, las dudas desaparecerán, no sabremos más que es el aburrimiento. La vida será completa, completa.

Chiara Lubich

Descarga el audio de la Palavra de VidaPdVFeb13audio

9 Comments

  • ”passamos da morte para vida porque amamos o irmão”
    Ola, é com essa frase que começo a contar uma experiência que fiz a pouco tempo.
    Alguns dias atrás improvisadamente soube que uma amiga que compartilhamos o mesmo estilo de vida, viver o evangelho radicalmente, teve que se operar as presas. Foi um susto para todos nós. Assim junta com uma outra amiga combinamos em lhe fazer uma visita para vermos com estava e lhe levar um presentinho. Quando estava saindo de casa começou chover, na cidade onde moro chover é muito comum, mas tudo se torna mais difícil. Enquanto ia para a parada de ônibus me lembrei da frase: ”passamos da morte para vida porque amamos o irmão” então pensei essa dificuldade, da chuva, é a minha ”morte” como vou visitar a minha amiga para ama-la passarei para ”vida”. Para minha surpresa, ao chegar na parada estava passando o ônibus que deveria pegar e vazio uma coisa assim é realmente um milagre. Sentir o centuplo, em poder ter amado o irmão. Ver a alegria da minha amiga com a nossa visita me fazia ainda mais feliz.
    Anne Carolina (Belém/PA Gen 3)

  • Cristo es el Centro de Nuestra Vida!!! Tengamos el Amor de Jesús en Medio Nuestro y Todo será posible!!! Dio ci Benedica Oggi e Sempre!!!

  • This WOL is an ecouragement to me because it reminds me also of my own Word of life (1John 2:10)

    I am on earth to simply LOVE, LOVE and LOVE.

    Thank you.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *