Son múltiples las iniciativas puestas en marcha a lo largo y ancho del globo para asistir a los miles de personas que han sufrido las consecuencias del tifón Haiyán.

En Torrelodones (Madrid) la ONG Acciones Familias nuevas ha organizado una venta de chocolate bajo el título: ¡Un chocolate por Filipinas!; será los días 30 de noviembre y 1 de diciembre, en la iglesia Nuestra Señora de la Merced después de cada misa (sábado a las 19 h. y domingo a las 12, 13 y 19 h.).

Múltiples y cuantiosas las donaciones que llegan también a las cuentas que la Fundación Igino Giordani y la ONG Acciones Familias Nuevas han habilitado para la ocasión. Desde ambas instituciones se agradece enormemente estas muestras de solidaridad que se traducen en contribuciones monetarias y en el asegurar oraciones. A fecha de hoy -18 de noviembre- se han recibido 9.760,00 € que serán transferidos a Filipinas lo antes posible.

Se pueden hacer llegar las ayudas económicas a través de la Fundación Igino Giordani – Cuenta corriente: La Caixa – 2100 5615 79 0200056937 – Concepto: Emergencia Filipinas

Y a través de Acciones Familias Nuevas en las siguientes bancos:

ING – 1465 0100 92 1900034148
La Caixa – 2100 1748 94 0200131988
Caja Madrid – 2038-2293-79-6000349954 (o donativos ONG)

Concepto: EMERGENCIA TIFON “YOLANDA” FILIPINAS

También en Filipinas se trabaja intensamente para paliar los efectos del desastre natural. Tita -responsable del Proyecto Bukas Palad de desarrollo de la infancia- cuenta que están ofreciendo ayuda a las familias, asistencia psicológica y microcrédito para el mejoramiento habitacional; al tiempo que administran un Centro Social que cuenta con un ambulatorio y laboratorios de distinto tipo. “Queremos informar a quienes ayudan a los niños del proyecto ‘Apoyo a Distancia’ de Tambo, Tramo, Sulyap y La Union – prosigue Tita – que afortunadamente Metro Manila y Luzón no se vieron afectadas por el tifón. Nuestras comunidades locales están ayudando a las víctimas a través de varias iniciativas: un signo de amor concreto y solidaridad entre todos».

Gina desde Cebú afirma que “el tifón afectó especialmente las islas de Leyte y de Samar  dejando una auténtica devastación. No se logran contar los muertos… y ¡¡falta todo, todo!! Estamos rogando que la ayuda llegue y se pueda distribuir porque las calles están intransitables. En Tacloban, la capital de la isla de Leyte, hay muchos miembros de los Focolares. ¡Gracias a Dios, estamos descubriendo poco a poco que todos están vivos!”

Ding, una focolarina presente en Cebú, escribe: “Estamos yendo a las ciudades de Sigma y Aklan a distribuir alimentos, ropa y artículos de primera necesidad. Consideramos importante empezar cuanto antes la reconstrucción de las casas que quedaron completamente destruidas en las dos ciudades”.