Queridos lectores:
Hay experiencias que se graban a fuego en nuestros corazones. Uno de estas ha sido para mí el viaje del 30 de abril al 17 de mayo en el que he acompañado a Maria Voce y a Jesús Morán a Siria y el Líbano. La presidente y el copresidente tenían la intención de llevar esperanza, como ellos mismos señalaron, a las comunidades de los Focolares que han vivido y viven en condiciones muy difíciles. Pero sucedió lo contrario. Fueron ellos: familias, jóvenes, niños, quienes, con sus vidas, nos dieron esperanza.
Encontrarán los artículos nacidos durante este viaje en las páginas 3-6. Pero recomendaría, – si tienen la posibilidad – ver también la última Conexión CH, la transmisión-video que conecta a los Focolares de todo el mundo (http://collegamentoch.focolare.org). Es una conmovedora oportunidad de conocer a “los nuestros” de Siria y el Líbano, es decir, personas que comparten el gran ideal de unidad, de una fraternidad sin fronteras, de un amor que no se detiene ante el dolor.
Confieso de buena gana: ¡estas personas me han robado el corazón! ¡Gracias, queridos amigos de estas tierras, bendecidas por vuestra presencia!
Joachim Schwind
Oficina Comunicación Focolares
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