Chiara Lubich definió a las Gen4 como los “brotecitos” del gran árbol del Movimiento de los focolares. En 1988 dio el lanzamiento a este evento único: su congreso internacional.

Este año eran más de 400, que aterrizaron sin ningún miedo, a pesar de su edad (desde los 4 a los 9 años), de Argentina,  Panamá, Venezuela y varios países de Europa. Un verdadero y auténtico congreso: dos empresarios de la “Cooperativa Loppiano Prima” explican como viven ellos por una “nueva economía”  respondiendo a varias preguntas que les hicieron las Gen4. A través de juegos y concursos ven con profundidad la vida de los primeros cristianos. Además  está el gran juego de “La ciudad invadida por el Amor”: clown,  empleados, concursantes, banqueros, intendente y muchos más, se encuentran mancomunados por una única ley, tratar de “ver a Jesús en el hermano” y comprender cual podrían ser las necesidades de esta ciudad tan especial.

“El que me pasa al lado es Jesús” y “Lo han hecho a mi”, son los slogan de estos días. Prepararon dos canciones especialmente para el congreso. Las cantan, inventan escenas y se crea un mini musical que presentan el viernes de mañana, cuando la presidente de los Focolares, María Voce, va a verse con ellas. Le hacen algunas preguntas, ansiosas de saber  lo que dirá:

“Hola, Emmaus, ¿cómo es el Paraíso y cómo es el Infierno?”, “¿Por  qué Dios creó el mundo?”, “A través de la vida de los primeros cristianos hemos conocido a los mártires. También hoy, ¿tenemos que ser mártires por Jesús?”, “¿Cómo comprendió Chiara que Jesús está entre nosotros?”. “¿Podrías explicarnos que es el Focolar?” Y otras preguntas más.

Una de ellas, el primer día nos dice: “Tengo en mi corazón una gran alegría, porque he soñado que Jesús, venía a este congreso, que estaba aquí con nosotros, en medio nuestro”. Un sueño que se hizo realidad en los días siguientes. A pesar de los idiomas y culturas distintas, se comprenden, hablan, inventan juegos que juegan juntas, se intercambian regalos. Durante la Misa del último día le ofrecen a Jesús los actos de amor de cada una: centenares de hojas coloreadas llenan las canastas colocadas en el palco. Hay también canastas donde se recoge su comunión de bienes para los pobres, es el Evangelio que se hace vida.

Antes de irse, escriben muchas cartas, hacen dibujos para Jesús, para Emmaus. Cada una se expresa a su manera: “Gracias Emmaus, la jornada del viernes en el Centro Mariápolis fue fantástica. Espero que el año próximo  si se hace el Congreso en Castel Gandolfo tu vengas. Estos días me divertí mucho aunque el viernes estaba de verdad conmovida”. “Soy Miriam de Bélgica, tengo cinco años y medio y es mi primer congreso Gen4, es la primera vez que vengo a Roma! Me gustó cuando te saludamos” “Me gustó el día pasado contigo, sentí la alegría en el corazón! Muchísimos saludos!” “Gracias por haber venido a vernos y respondido nuestras preguntas! También yo quería saber porqué Dios creó el mundo y tu respuesta me gustó mucho. Te saludo con afecto! Eva de Polonia”. Un gen de 5 años: “No vi nunca a Chiara, pero ella está en mi corazón”.Otra: “El 27 de mayor por primera vez recibí la Comunión.  Cuando Jesús vino a mi corazón sentí una gran alegría. Ahora siempre que voy a la Iglesia trato de comulgar. Estoy muy contenta de estar aquí y de amar a Jesús siempre, un abrazo”

“Querido Jesús, yo te quiero mucho, tanto como un universo! Tu eres mi mejor Amigo!”, “Querido Jesús, quisiera que el congreso comenzara de vuelta, pero no se puede hacer. Pensaba que podía ser aburrido y difícil dormir sin mi mamá, pero no fue así!” “Gracias Jesús, hice muchos actos de amor, hice 7 en total. Gracias por la Misa”; “Querido Jesús, te llevaré a mi ciudad y en mi corazón, y cuando alguien pelee los frenaré”; “Hola Jesús, te escribo desde la tierra. El amor es algo importantísimo porque tu eres importantísimo. Tu eres el Rey de la paz y te queremos mucho porque has dado tu vida por nosotros”; “Jesús, es realmente verdad, que el que pasa a mi lado eres tu? Chau, nos veremos en el Paraíso!!!”; “Gracias Jesús, por este magnífico congreso, disculpa si estuve un poco rezongona y un poco difícil”; “Te quiero mucho Jesús, mucho, y quisiera estar siempre al lado tuyo y no quisiera dejarte nunca”

Escrito por el Centro Gen4

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