Al igual que los adultos, los más jóvenes de los Focolares, también viven la Palabra de Vida. La de este mes es un comentario a la frase de Pablo: “Todo lo puedo en Aquel que me conforta” (Flp 4, 13)

Además de contar una experiencia de un chico, incluye el comentario evangélico con una propuesta para vivir mejor cada día: “Todo lo puedo cuando acojo y pongo en práctica las palabras del Evangelio: me ayudan a discernir el camino que tengo que recorrer día a día, me enseñan cómo tengo que vivir, me dan confianza”.

A la Palabra de Vida adaptada a chicos y adolescentes se accede bajo la Palabra de Vida para adultos o desde este enlace.