Mucho más que un concierto

 
Vivimos junto a Gen Verde, la jornada del 15 de febrero. Un día con espectáculo en Cáceres.

Marcelo Muriel, nos cuenta cómo fue el día del espectáculo en Cáceres para el Grupo Internacional Gen Verde. Un día largo e intenso.

El pasado sábado día 15, los mas de 1.100 extremeños que tuvimos la suerte de asistir al concierto Start Now a cargo del Grupo Internacional Gen Verde, salimos del mismo con la sensación de haber asistido a uno de esos raros momentos en los que la calidad artística unida a la profundidad del mensaje, hacen vibrar la fibra mas sensible tanto de los jóvenes y adultos, que nos dimos cita en el Palacio de Congresos de nuestra ciudad.

La jornada comenzó con el alba, a las siete y media de la mañana las 21 mujeres de 14 nacionalidades componentes del Grupo Gen Verdee, bajaban en sus furgonetas de su residencia de la Montaña. En primer lugar tuvieron que realizar el montaje de todo el escenario e instalar todos los equipos de luz y sonido. Que ellas mismas traían. A continuación, sin un minuto de descanso, realizaron dos ensayos generales de todo el concierto completo; el primero, ellas solas, por que esta representación iba a ser el estreno mundial de la obra en español y no podían fallar en la dicción. Una frugal comida y a las 15h 30 inician el segundo ensayo general, esta vez con los mas de 100 jóvenes procedentes de diez centros educativos de la región con los que habían realizado distintos talleres el jueves y viernes anterior. Durante tres horas encajaron en su espectáculo las actuaciones de todos los jóvenes en distintas fases del mismo. A las 19 horas sesión de maquillaje y cambio e vestuario para iniciar la función a las 20 horas.

Durante dos horas y haciendo frente al gélido frio que reina en el escenario de este por dos veces remozado Palacio de Congresos, transmitieron una energía que enseguida prendió en tan diverso público que llenaba el auditorio.

Pasearon sus espléndidas voces por géneros tan diversos como el rock, el pop, pasando a momentos de una gran profundidad plástica y de contenidos; con temas de música étnica y representaciones teatrales que reflejaban la soledad en la que los individuos viven en la sociedad actual. La emoción se palpaba en el ambiente y un silencio sobrecogedor acompañaba las frases de una joven perdida en una estación de trenes de cualquier gran ciudad rodeada de sombras anónimas que iban sin rumbo de un lugar a otro.

En el momento de mayor tensión emocional el concierto dio un giro de nuevo a músicas y mensajes de optimismo y alegría, proponiendo y consiguiendo que los asistente superáramos esa fase pesimista con ritmos tipo dance y salsa y mensajes de que si la persona quiere puede superar esas situaciones de aislamiento; buscando al “otro” y compartiendo con él proyectos e ilusiones. Los jóvenes salieron a escena demostrando que, en solo dos días habían conseguido aprehender el mensaje del trabajo en equipo y aflorando aptitudes que ni ellos mismos creían tener antes de haber vivido esta experiencia.

El concierto termina con una explosión de alegría con todo el auditorio, jóvenes y no tan jóvenes, puesto en pié bailando al ritmo de la música vital de estas 21 increíbles mujeres.

Los asistentes al concierto abandonan lentamente la sala con el rostro satisfecho por haber asistido a unos momentos memorables.

Cuando todo el mundo ha partido, estas mujeres, con tres conciertos consecutivos realizados a sus espaldas, catorce horas de trabajo ininterrumpido y algunas de ellas con la garganta destrozada por el frio y el esfuerzo realizado, se ponen el casco de obra e inician el desmontaje total de todas las instalaciones y decorados, lo embalan cuidadosamente en mas de un centenar de cajones perfectamente identificados y los cargan en los tres camiones con los que recorren el mundo.

Pasada la una de la madrugada, diecisiete horas después de haber comenzado la jornada estas 21 mujeres emprenden el retorno hasta el santuario de la Montaña con una sonrisa en el rostro y ni una sola queja de cansancio o malestar. A los que vivimos de cerca toda esta experiencia; técnicos del Auditorio, jóvenes voluntarios que ayudaron en la realización del espectáculo, profesores y alumnos de los Centros de Secundaria y a los que tuvimos la suerte de acompañarlas durante estas jornadas, nos han dado una lección muy difícil de olvidar, por que el proyecto Start Now del Grupo Internacional Gen Verde es mucho mas que un simple concierto, es una lección de que otro mundo es posible y que hay que “Comenzarlo Ahora”.

Marcelo Muriel

Regulación(500)