
Padre Heinrich Walter, Presidente de Schoenstatt.
Están representantes de otros movimientos cristianos, hermanos y hermanas de diversos credos religiosos y también personas no creyentes. Algunos de ellos debieron realizar un largo viaje para participar esta tarde. Tal es el caso de
Emily Soloff, de Chicago, de la American Jewish Committee (
(AJC)) y de algunos otros que conociendo la importancia de su participación, han debido dejar de lado otros compromisos, como el Padre
Heinrich Walter, Presidente de
Schönstatt. Está también presente Jurif Pismak, de
Rusia, amigo de convicciones no religiosas que alcanzado la sede de Castel Gandolfo, donde desde el 1º al 28 de septiembre transcurrirá la Asamblea General de los Focolares.
La Asamblea es el testimonio de un camino que tiene raíces lejanas.
Un camino que está instalado en el mundo y que aquí se manifiesta. “En una asamblea como la nuestra que mira hacia el futuro, que está bien anclada en la fuente, no podía faltar un momento como éste. Una velada inolvidable. Con ustedes somos más nosotros mismos”, comentó concluyendo el recién elegido
copresidente de los Focolares, el español
Jesús Morán.

Maria Voce con Gerard Pross, responsable de una red de más de 100 movimientos evangélicos.
Los presentes hablan representando una red de diálogo muy amplia, “que consideramos un verdadero soporte para la construcción de la fraternidad universal”, afirmó
Maria Voce. Dentro de”
Juntos por Europa”, por ejemplo, hay otros 300 movimientos cristianos, ligados por un pacto de unidad que “articula lo espiritual y lo ‘político’, que deja de lado los prejuicios para trabajar por la paz”, como declaró el francés
Gérard Testard, quien fue presidente de
Fondácio. Junto con él hay también otras personas que comenzaron este camino con
Chiara Lubich desde hace 15 años. Por ejemplo
Thomas Romer del
Ymca de Mónaco y
Gerhard Pross responsable de una red de más de 100 movimientos evangélicos. Se encuentran también
Cesare Zucconi y
Valeria Martano de la
Comunidad de Sant’Egidio, quienes
recién están volviendo de Anversa donde se desarrolló el 28º meeting internacional para la paz en el espíritu de Asís. Ellos traen los saludos de
Andrea Riccardi y todos alientan a los Focolares para que vivan con mayor fuerza este ideal de fraternidad. Desde el Oriente llegan también las voces de los monjes budistas de tradición Teravada de Tailandia, y de los japoneses de la Risho-Kosei Kai.

Christina Lee, Mustafa Cenape, Shahrzad Houshmand, Adnane Mokrani, Hiromasa Tanaka, Katsuotishi Mizumo
Juntos, como protagonistas del diálogo. Esta es la visión que brota de los testimonios de los musulmanes como el
Dr. Adnane Mokrani, y la
Prof. Shahrzad Houshmand, teóloga iraní que ha confesado su propia experiencia con Chiara Lubich: “De ella aprendí la fuerza de la fe universal que llega al corazón de todos los creyentes; también al corazón de los musulmanes”. Se trata de una “nueva evangelización que trabaja no tanto por la conversión formal de los corazones, sino por la conversión profunda de las almas”. La teóloga deja también un encargo a la Asamblea de los Focolares, que, representada por sus nuevas autoridades, tendrá una audiencia con el Papa el 26 de septiembre próximo: asegurar al papa Francisco nuestro apoyo para frenar las tragedias de este momento, pues “la sangre de Cristo se derrama aún hoy”. Otro rasgo distintivo del diálogo: la vida. Quien lo subraya es la americana
Emily Soloff, de fe judía: “Veo una asamblea
impregnada de vida. Para mí, gracias al focolar, el diálogo con los judíos, musulmanes, budistas, gracias al focolar es siempre un diálogo de vida”, que parte de la experiencia de cada uno, desde la comprensión del otro, antes que desde el discurso teológico, doctrinal o filosófico. “Siempre me impresionó – especifica
Lisa Palmieri Billig, también ella del American Jewish Committee – la idea de ustedes de ser los primeros en amar e ir al encuentro del otro ofreciendo amor: ustedes amor. Ustedes, al ofrecer empatía, dan ya un remedio al odio que existe en la sociedad de hoy”.

“
Chiara Lubich comprendió desde el primer momento que la unidad se construye con los otros, no en contra de los otros, y no podía dejar afuera la parte del mundo que no se encuentra en ninguna fe religiosa”. Quien así habla es
Luciana Scalacci, no creyente, que dice que “es afortundada por haber sido invitada a la Asamblea”. En estas semanas participó en varias etapas de los trabajos. Recordando la enseñanza de Chiara Lubich, exhorta a los presentes a que tengan siempre presente a las otras culturas
Las distintas intervenciones fueron “perlas preciosas que enriquecen el patrimonio que poseemos”, afirmó la presidente María Voce. Un patrimonio que “tenemos que custodiar juntos y multiplicarlo en bien de la humanidad”, subrayando – frente a la elección de los nuevos dirigentes del
Movimiento de los Focolares –que este camino se recorre juntos. Y concluye con una imagen: “el abrazo de Chiara que contiene a todos, y lleva a todos a Dios; un abrazo que gracias a la presencia de todos ustedes, hoy se hace visible”
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