Movimiento de los Focolares
Azir Selmani, maestro del  diálogo

Azir Selmani, maestro del diálogo

AZIR SELMANI«Un hombre de gran estatura moral y de una cultura  excepcional: ¡fue un privilegio haberlo conocido!» Son innumerables los ecos que llegan de todas partes del mundo al enterarse de su fallecimiento, personas que, llenas de gratitud, testimonian que cada encuentro con Azir fue un “momento de Dios”. Originario de Kosovo, profesor, casado y padre de tres hijos, Azir Selmani (9.5.1947-17.4.2016) es el primer musulmán que en Skopje (en Macedonia, lugar a donde tuvo que trasladarse por motivos políticos) conoce a los Focolares. «En 1990 – cuenta él mismo – daba clases en un grupo donde todos eran musulmanes, había solamente un católico y yo sentí la necesidad de protegerlo. Como signo de gratitud sus padres me invitaron a la Mariápolis en Eslovenia.  Cuando estaba con ellos me preguntaba: pero ¿quiénes son estas personas? Probé abrir mi corazón y el amor lentamente me transformó. El último día me llené de coraje y frente a una sala de 300 personas admití que gracias a ellos había encontrado el amor, ¡el Dios Uno, el Omnipotente! A la luz de Dios vi mi pasado lleno de fracasos. Me disgustaba yo mismo por haber explicado a todas las generaciones de alumnos que había tenido que en el mundo la fuerza más grande era la fuerza atómica, mientras que ahora estaba convencido de que la fuerza más grande es la del amor. Poco a poco delante mío se fue abriendo una vida nueva, comencé a leer el Corán y a conocer a Dios. Traté de transmitir mi descubrimiento a los colegas y amigos y pronto éramos una veintena los musulmanes que queríamos vivir la espiritualidad del Movimiento». Azir abre su casa para que en ella se realicen encuentros. Está siempre dispuesto para dialogar y dar su testimonio, y se ofrece  para traducir los textos de Chiara Lubich a los amigos albaneses. Impresionadas por el testimonio de Azir y de Behije su esposa, parejas con dificultades de relación se dirigen a ellos que con sabiduría y delicadeza los acompañan hacia la reconciliación. Azir y Behije participan en varios encuentros interreligiosos del Movimiento, en su país y también a nivel internacional, durante los cuales Azir establece relaciones de unidad y amistad con personas de todo el mundo. En Roma tiene modo de conocer personalmente a Chiara a quien inmediatamente le comunica sus sentimientos más profundos. Le escribe a Chiara hermosas cartas que comienzan siempre con: «Queridísima mamá, te escribo con alegría y libertad… no puedo agradecerte lo suficiente…». En una de estas cartas le confiesa: «Durante el último Ramadán leía atentamente el Corán y el Evangelio. Estoy cada vez más convencido de que el islam y el cristianismo esconden un tesoro común que se puede descubrir con la buena voluntad y el amor». En 2007 adhiere enseguida a la invitación de Chiara de estrechar con ella y entre los musulmanes del Movimiento, el pacto del amor recíproco «de forma de poder experimentar – augura Chiara – Dios que se hace presente entre nosotros. Y Él nos guiará por el camino de la unidad». Viendo los efectos de este diálogo lleno de coraje y rico de comunión que se practica en el Movimiento, Azir testimonia: «Puedo decir que el sueño de Chiara se está realizando». Él no se conforma nunca con la mediocridad y la diversidad no le da miedo. Al contrario, quiere enfrentarla, convencido de encontrar en todos lados la semilla de la Verdad. Cuando hubo un simposio interreligioso en Roma, en el 2014, Azir logra saludar personalmente al papa Francisco: «¡Se cumplió el sueño de mi vida!», comentó feliz. En los últimos seis meses Azir lucha con la enfermedad, pero nunca deja de vivir por la unidad. Y, de acuerdo con su exquisita sensibilidad por el otro, nunca niega una visita que cada vez se convierte en un momento sagrado. Sus palabras sobre la Libertad, sobre lo Esencial, sobre la Eternidad, sobre la Verdad – valores que siempre persiguió auténticamente – permanecen indelebles en los corazones de sus interlocutores. Este “maestro del diálogo”, de mirada profunda y amplios horizontes, con su alma rica de poesía, nos deja muchas cartas, escritos, poesías sobre la misericordia, sobre María de Nazareth en el islam y sobre puntos de encuentro con el cristianismo.

Semana Mundo Unido 2016

Semana Mundo Unido 2016

PrimoMaggio_01«Debemos seguir adelante, ser fuentes de luz, respuesta a los que viven en el dolor. Muchos se sienten frustrados por no poder hacer nada. Les damos la oportunidad de ayudar». Estas palabras de una joven ecuatoriana, en el contexto de la emergencia humanitaria en el país después del terremoto del pasado 16 de abril, indican la nueva ruta de las acciones de la Semana Mundo Unido 2016, que precisamente en Ecuador ve su punto central. En el camino plurianual de la Semana Mundo Unido, nacida de los jóvenes de los Focolares después del Genfest de 1995 y que involucra a todo el Movimiento, la edición del 2016, durante mucho tiempo en preparación centrado en Ecuador y en la interculturalidad, tan inherente en los países andinos. El objetivo de la iniciativa: dar voz a la cultura de la fraternidad presente en el mundo, capaz de activar lo mejor de cada uno. «Haremos un Festival por la Paz el 7 de mayo en Quito, para expresar la interculturalidad, con el título «La solidaridad es un camino por la paz». Participa y da esperanza: es lo que más necesitamos ahora y lo que cada uno seguramente puede dar». Con esta convocatoria los jóvenes de Ecuador ofrecen una respuesta mundial a los que quieran adherirse, participando en la actual recaudación de fondos, así como publicando en la página de Facebook un video saludo que testimonie la fraternidad y sea motivo de esperanza (fb.com/JMUEcuador). El Festival por la Paz es sólo una de las muchas acciones implementadas desde el mismo día del terremoto, cuando inmediatamente pusieron al servicio de la difusión de información oficial de emergencia sus redes sociales. Los chicos, en muchas partes del mundo, llevarán a cabo otra acción de la Semana Mundo Unido: el Run4unity, en todas las latitudes, de 11:00 a 12:00. Realizarán una carrera a pie, en bicicleta, roller, canoa. En la conclusión un time-out, un minuto de silencio o de oración por la paz. Recorrerán algunos lugares símbolos: Mexicali, en México, ciudad fronteriza con Estados Unidos, el Run4unity se llevará a cabo a lo largo del muro que divide los dos países, como muestra de unidad y paz; en Bari, Italia, se realizará en el Instituto penal de menores Fornelli; en Sopron, Hungría, una ciudad en la frontera con Austria, Run4unity participa en la carrera que cruza la frontera, con la participación de jóvenes de un campamento de refugiados en Austria (http://www.run4unity.net/2016/es/). También hace parte de la Semana Mundo Unido el proyecto Living Peace, promovido por El Rowad American College del Cairo y por la ONG de los Focolares New Humanity: red de escuelas secundarias de 103 países con más de 50 mil chicos, que promueve en diferentes ambientes de aprendizaje el compromiso de vivir para la paz (http://living-peace.blogspot.it/p/espanol.html). IMG_3331_BrazilLa jornada del 1° de mayo engloba diversas citas ya tradicionales para los jóvenes en Loppiano, Italia y en Abrigada, Portugal. «Muchas personas en un único planeta, somos hermanos. Vivir y trabajar para que la fraternidad se vuelva concreta en política, economía, en lo social y cultural. Para llegar a un mundo mejor en el que somos familia porque somos seres humanos», es la idea que anima la preparación del programa de Loppiano. En Abrigada, la jornada se centra en la idea de la paz como punto focal, que permite ver la realidad en «alta definición». El ámbito de la Semana Mundo Unido es el mundo y las iniciativas locales se viven con este horizonte. Desde el concierto por la paz en Medan, Indonesia, a las visitas a una casa de ancianos en Nueva Zelanda en medio del debate sobre la legalización de la eutanasia. Desde el Festival Amani de Goma, en la República Democrática del Congo, al taller ecuménico querido por jóvenes y sacerdotes de las Iglesias católica, rusaortodoxa, armenia, luterana y evangélica «para ir más allá de prejuicios». Significativo el saludo video enviado por los chicos de Alepo, Siria, a sus pares de Argentina (fb.com/focolaresconosur). Se pueden seguir muchas de las iniciativas a través de http://www.unitedworldproject.org/en/ y fb.com/uwpofficial. También se puede participar a través de las redes sociales publicando post, fotos y vídeos con el hashtag #4peace, para dar voz a todas las iniciativas, grandes y pequeñas, que cada día «construyen puentes de fraternidad entre las personas». Fuente: Comunicado de prensa SIF Foto galleria: https://flic.kr/ps/2NHsu5 https://vimeo.com/164901348 https://vimeo.com/164386643

Australia, el deporte para crear unidad

Australia, el deporte para crear unidad

20160502-01Melbourne, Australia Latitud: 37°52’S Longitud: 145°08’E En el 2005, Tom, un señor alto y, según sus amigos, simpático, se vio obligado a mudarse, con su familia, a un barrio de Melbourne recién edificado, donde escaseaban las estructuras y los programas recreacionales. Podía decidir irse, en cambio buscó la manera de hacer algo por su comunidad, para que la gente del barrio tuviera la oportunidad de reunirse, compartir, encontrarse. «No hay nada mejor que el deporte para congregar a las personas y a las distintas generaciones. En ese nuevo barrio – cuenta – había un parque vacío. Empecé entonces a divulgar la idea que se me había ocurrido: crear un espacio donde se pudiera jugar fútbol. No sabía quién hubiera aceptado mi propuesta y corría seriamente el riesgo de quedarme solo. En cambio me di cuenta que eran muchas las familias que tenían el mismo deseo y entusiasmo. Así muy pronto, los participantes fueron tan numerosos que pudimos conformar un equipo y luego, ¡incluso un soccer club! Ahora somos 38 equipos con más de 400 niños y 40 ancianos. Cada semana nos encontramos para jugar. El parque fue restructurado y ahora hay varias canchas con su propia iluminación. Pero esto no es todo, porque se añadieron también los vestuarios, una cocina y un comedor. En fin, se volvió realmente un punto de agregación». Fuente:  uniitedworldproject

Giordani: ¿Cuál dignidad para el trabajo?

Giordani: ¿Cuál dignidad para el trabajo?

20160501-01«Al ser humano le fue impuesto el trabajo como castigo; pero también como redención. Mientras tiene la finalidad inmediata de la obtención del pan de cada día, concurre también  a la finalidad última de la consecución del Reino eterno. Concierne entonces tanto a la economía, como a la teología; de hecho, el ser humano es hijo de Dios, destinado a Dios, también cuando trabaja. Si el problema se redujera a pura economía, el trabajador se convertiría en pura máquina; su dignidad de persona se reduciría a la de un utensilio. Hoy en día se habla mucho de la dignidad del trabajo, hasta el punto que se ha vuelto un tópico. Pero no está asegurado que la mentalidad esclavista se haya extinguido, ni que falten empresarios, de pronto bautizados, a los cuales les parece que, porque pagan un sueldo, tienen el derecho a humillar a quienes viven de ese sueldo, tratándolos con desprecio y desconfianza, así sea un trabajador intelectual o bien una empleada doméstica casi analfabeta. Pero el trabajo no sirve sólo para conseguir una retribución en dinero. El trabajo realizado con un deseo de redención moral, de participación con los sufrimientos de Cristo, se convierte en producción de santidad, entra en la economía de las cosas eternas, de lo que deriva una dignidad que transforma a los constructores de maquinarias, a los agricultores, a los estudiantes, a los profesionales, a los empleados y a las amas de casa, en constructores del Cristo integral. «Cada buen obrero – escribió San Ambrosio – es una mano de Cristo». Es decir, Cristo trabaja en la sociedad con las manos de sus obreros. En otras palabras, quien obra bien edifica en la tierra una construcción celestial, es el artífice humano de una arquitectura divina. Y esto eleva a una dignidad inmensa a quien hace y a lo que hace, si lo hace en el espíritu y bajo la ley de Cristo. Así se ve que lo divino obra en la sociedad por medio del ser humano, asociado a participar del prodigio vivo de la Encarnación, la cual, si fue el milagro de la humanización del hijo de Dios, trae consigo también el milagro de cada día de una divinización de todos los hijos del hombre y por lo tanto, hijos de Dios. Un movimiento que va desde la tierra al encuentro de Cristo que viene del cielo. De tal manera que la vida en los caminos atormentados del planeta es, sí, totalmente humana, pero también, si se vive en el espíritu de la Redención, está plenamente injertada en lo divino, es totalmente divina. Esta dignidad no se limita sólo a las obras del espíritu, sino que abarca a toda la persona humana, cuerpo y espíritu, en todo lo que hace. El oficio, la profesión, la oficina…. estas cosas melancólicas y a veces trágicas y a menudo aburridas, se transfiguran, de golpe, en Valores insospechados, en elementos de nuestro destino. Se convierten en medios de nuestra redención. El trabajo era nuestro castigo; y, por la humanidad de Cristo, se vuelve nuestro rescate. Es nuestra contribución a la Redención. Se escala el cielo con los materiales de la tierra. Nada se pierde, ni una jornada mal pagada, ni una palabra dicha, ni un vaso de agua ofrecido por Cristo. Con estas simples cosas, la mayoría edifica el Reino de Dios. Porque la mayoría no se va de misión, ni se encierra en los yermos, ni escribe tratados de teología, sino que todos trabajan, todos sirven. Ahora bien, sirviendo a los demás, si se actúa en el espíritu de Cristo, se sirve a Dios, Quien no se nos presenta todavía en su luz, ya que encandilaría nuestra vista, sino a través de esa imagen suya, que son los seres humanos, su representación y hechura». Igino Giordani, La società cristiana, Città Nuova, Roma (1942) 2010, pp. 72-82