Movimiento de los Focolares
“Vosotros sois la luz del mundo”, el motu proprio de Francisco sobre los abusos

“Vosotros sois la luz del mundo”, el motu proprio de Francisco sobre los abusos

El Papa promulga las nuevas normas para toda la comunidad eclesial contra quienes cometen abusos y quienes los encubren. Las medidas y la orientación de los Focolares en el surco de la Iglesia. La intervención del copresidente Jesús Morán y el servicio para la Conexión CH. Está fechado el 7 de mayo y se titula Vos estis lux mundi. Este documento en forma de motu proprio, es decir, un instrumento que el Papa usa cuando quiere introducir novedades personalmente o dar instrucciones a los fieles, es el último acto del papa Francisco en la lucha contra el abuso infantil y las personas vulnerables en la Iglesia. Una etapa de importancia primaria que forma parte de un itinerario. Al final de la reunión sobre la protección de los menores en el Vaticano en febrero pasado, se anunciaron algunas disposiciones legislativas para la Curia Romana y el Estado del Vaticano. Este último documento normativo está dirigido a toda la Iglesia: establece nuevos procedimientos para denunciar acoso y violencia y para garantizar que los obispos y los superiores religiosos informen sobre su trabajo. Introduce la obligación para los clérigos y religiosos de denunciar los abusos; una disposición que también alienta a los laicos a denunciar abusos y acoso a la autoridad eclesiástica competente. También solicita a las diócesis que establezcan un sistema que sea fácilmente accesible al público para recibir las denuncias. Un gesto que va más allá de los confines de la Iglesia y es un estímulo para la sociedad civil, porque, sabemos, el escándalo de los abusos tiene sus propias raíces, tanto históricamente como en los últimos tiempos, en los diferentes ámbitos de la familia, la escuela, el deporte, etc. A pesar del tema serio y devastador que trata, el Papa abre el documento con una cita evangélica que recuerda la esperanza y la luz: “Nuestro Señor Jesucristo llama a todos los fieles a ser un ejemplo luminoso de virtud, integridad y santidad” . Son estas virtudes las que comprometen a todas las personas, tanto más a los consagrados, quienes, por elección de vida, nunca deben traicionar la confianza de nadie, familias o menores de edad en primer lugar. Como hemos comunicado precedentemente, el Movimiento de los Focolares, dolorosamente, no es inmune a este escándalo. El 26 de marzo, la presidente Maria Voce y el copresidente Jesús Morán enviaron una carta a todos los miembros del Movimiento en el mundo sobre el compromiso de los Focolares en este campo. Comunican que es con profundo sufrimiento que es necesario reconocer “que incluso en nuestra gran familia de los Focolares ha habido algunos casos de abuso contra menores (unos veinte), causados por personas del Movimiento o por personas que han asistido a eventos organizados por nosotros. La mayoría de los episodios han ocurrido en un pasado lejano (incluso más de 20 años), pero desafortunadamente algunos han ocurrido en un pasado reciente. Y los miembros consagrados también estuvieron involucrados”. 20190317 COBETU copia 2Reiteran la “tolerancia cero” del Movimiento hacia cualquier forma de violencia o abuso y el deber de cada miembro de los Focolares de estar en primera línea en la defensa de las personas más débiles de cualquier forma de maltrato o bullyng, provocado directamente o a través de la web, con especial atención a los menores y adultos vulnerables. Exhortan abiertamente a informar a la Comisión Central para la protección y el bienestar de los niños, instituida en 2014 en el Centro Internacional de los Focolares y a las comisiones locales, cualquier sospecha de abuso o violencia y consideran “una verdadera tentación pensar en no informar casos por el bien de nuestro Movimiento, para evitar un escándalo, para proteger la buena reputación de alguien”. En una entrevista reciente concedida durante la Conexión CH, el copresidente reiteró firmemente la total adhesión a la línea actual de la Iglesia. Morán explica que “hemos querido reconocer públicamente que este drama también nos ha tocado a nosotros y que esto nos lleva a acciones concretas para hacer justicia a las víctimas también iniciando un proceso de acompañamiento en un nivel general y concreto”. Reconoce que esta es una gran purificación para el Movimiento y finalmente reitera que el compromiso de proteger a los menores no se puede reducir al ámbito de los Focolares. “Con esta carta hemos querido decir a todos los miembros que es importante comprometerse en todos los niveles para que este drama, este inmenso dolor, que es un drama social y moral, acabe lo antes posible y estos casos de abuso ya no ocurran”. El compromiso del Movimiento se centra ahora en la prevención y capacitación de todos los miembros, en particular de los que trabajan con menores; por esta razón, es importante colaborar con las otras agencias del Movimiento que trabajan con menores de edad: desde los centros Gen 3 y Gen 4 al Movimiento Familias Nuevas. Mire el servicio de la Conexión CH: Tutela de los menores: transparencia, prevención, formación https://vimeo.com/333331566

Jean Vanier: los pobres, la riqueza de la Iglesia

Jean Vanier: los pobres, la riqueza de la Iglesia

Nos ha dejado el fundador de L’Arche y el apóstol de los últimos. Estaba en la Plaza San Pedro durante el histórico encuentro de Pentecostés 1998 junto a Chiara Lubich y a otros fundadores de Movimientos y nuevas comunidades. El recuerdo y la gratitud de los Focolares. El 30 de mayo de 1998 quedará en la memoria de muchos como “el encuentro de Pentecostés”. Fue entonces que el Papa Juan Pablo II convocó por primera vez en la historia a todos los Movimientos eclesiales y las nuevas comunidades en la Plaza San Pedro. vanierEntre los fundadores que tomaron la palabra delante del Papa, junto a Chiara Lubich, Kiko Arguello y el Padre Luigi Giussani estaba también Jean Vanier, fundador de la comunidad L’Arche quien nos dejó la noche del 7 de mayo pasado a los 90 años. Queremos recordarlo, además de por su gran obra a favor de los últimos y de los discapacitados –desde 1964, había dado vida a más de 150 centros en todo el mundo-, por la amistad entre el fundador de L’Arche y los Focolares, y por el apoyo que con su constante presencia dio también a las citas de “Juntos por Europa”. Desde las palabras que pronunció en la Plaza San Pedro fue clara la común pasión por la palabra evangélica de la unidad: “Acogiendo personas con discapacidad provenientes de confesiones cristianas diversas, acogiendo también a personas musulmanas, judías o hindús, descubrimos cuánto el pobre nos ayuda a unirnos. Hombres y mujeres pertenecientes a distintas Iglesias y a diferentes religiones nos han hecho descubrir el misterio de nuestra común humanidad. (…) Descubrimos que, si acogemos aun pobre, él nos conduce hacia el Dios del amor, nos conduce a Jesús”. En noviembre del 2013, en Montmartre, Francia, Jean Vanier tomó la palabra durante el encuentro de los amigos de “Juntos por Europa”, cuyo tema era precisamente la pobreza y el aporte que las comunidades y Movimientos cristianos podían dar para derrotar la indigencia y la marginación en Europa. Empezó el relato de su experiencia con estas palabras: “Jesús dijo: ‘El Reino de Dios es como un banquete de bodas –pero todos estaban demasiado ocupados- y el rey que había hecho la invitación mandó a sus siervos a buscar a los lisiados y cojos a los largo de las calles y en los cruces de los caminos- es esto lo que he tratado de hacer a lo largo de mi vida”. Jean Vanier se dedicó especialmente a los discapacitados mentales, a quienes él definió como “el pueblo más oprimido”. “Ellos me han transformado, he visto que el Reino de Dios es de ellos”. Estamos cerca de su familia espiritual en todo el mundo, seguros de que Dios y la multitud de los últimos a quienes dio casa y amor, lo han acogido en el cielo.

Stefania Tanesini

Macedonia: tierra de diálogo

Macedonia: tierra de diálogo

También en la pequeña república balcánica visitada por el papa Francisco del 5 al 7 de mayo, hay una comunidad de Focolares que ha trabajado intensamente para este evento. Mato Mikulec nos habla de ello. 21f5174f b6c9 47f2 b600 853057e3620f“La característica principal de esta tierra siempre ha sido el diálogo y la comunidad de los Focolares está compuesta por cristianos (católicos y ortodoxos) y musulmanes”. Mato Mikulec es un pionero del movimiento en Skopje, es de origen croata y hace 30 años se mudó a Macedonia por motivos de trabajo. Vive con inquietud y gran alegría la visita del Papa: “Como Francisco tiene muy en cuenta las periferias, su primer objetivo es apoyar y alentar a la pequeña comunidad católica, pero no solo a ella. Para él, cada hombre tiene un valor inmenso y, por lo tanto, viene aquí como amigo de todas las personas de este país. Por supuesto, también lo alienta el espíritu de tolerancia y convivencia que forma parte de la naturaleza de este pueblo”. Mato considera que esta es su tierra: la mayoría de la población es macedona (64%), luego están los albaneses (25%), los turcos (4%) y un pequeño porcentaje de otros pueblos. Las dos religiones principales son el cristianismo (99% de la Iglesia ortodoxa) y el islam, mientras que los católicos de los dos ritos occidental y oriental son solo el 1%. La historia dice que en Macedonia, la tradición cristiana se remonta a la época del apóstol Pablo, fortalecida y difundida en los siglos siguientes, por grandes figuras de evangelizadores como los dos hermanos Cirilo y Metodio en el siglo IX y por muchos otros que posteriormente dieron una contribución inestimable al desarrollo de la religiosidad y alfabetización de los pueblos eslavos. Pero la región balcánica también es testigo de la dolorosa división de las iglesias, los conflictos entre poderes e intereses políticos, como la ocupación otomana que duró más de 500 años. “A pesar de todo – continúa Mato – la gente aquí ha conservado muchos valores, una profunda religiosidad, una gran apertura a la diversidad y una profunda aspiración a la comunión. Entonces, no es sorprendente que una flor tan hermosa como la Madre Teresa haya brotado en esta tierra”. f20e2bec 0cdc 43f6 bec0 2716429a4c90Luego relata que la visita del papa Francisco se realizó por invitación del obispo local Kiro Stojanov y las autoridades estatales. “Una hermosa tradición quiere que cada año una delegación del Estado vaya a Roma a la tumba de San Cirilo en la Basílica de San Clemente. También se incluyen representantes de las Iglesias católica y ortodoxa. También está la audiencia con el Santo Padre, y en esta ocasión fue invitado a visitarnos”. Luego nos dice que los primeros contactos con los Focolares en Macedonia y Kosovo se remontan a la década de 1970, cuando uno de los primeros focolarinos, Antonio Petrilli, fue a visitar a su amigo el sacerdote p. Luka Cirimotić. Más tarde, en la década de 1980, una familia originaria de Zagreb se establece en Skopje y así nació la primera comunidad, compuesta por jóvenes y adultos, familias y personas consagradas, personas de varias Iglesias y religiones, o sin una orientación religiosa. Fue gracias al compromiso del Obispo Kiro Stojanov que en 2006 se abrió el focolar femenino, el último que Chiara Lubich aprobó personalmente antes de dejarnos. “Vemos que la diversidad no es un obstáculo para la comunión sincera y la fraternidad – continúa Mato – que se está haciendo cada vez más visible y apreciada incluso por los líderes de las comunidades religiosas. Para nosotros en el Movimiento de los Focolares, este evento es una alegría especial, creemos que el Papa también se siente atraído por nuestro amor y la comunión entre nosotros. Sentimos que el Papa nos trae el nuevo rostro y el abrazo de la Iglesia donde nuestra comunidad también tiene su lugar”.

Stefania Tanesini

Siria/3: Un pueblo fuerte y tierno

Siria/3: Un pueblo fuerte y tierno

Maria Voce a los jóvenes sirios: “No se dejen robar sus valores y únanse a todos los jóvenes que quieren un mundo mejor. El mundo los espera”. “Gracias por la esperanza y la fuerza vital que nos han traído”. Estas son las palabras que Maria Voce dirigió a las comunidades de los Focolares a través de un video mensaje, al final de su viaje a Siria del 1 al 8 de mayo. Días intensos en los que la presidente y el copresidente de los Focolares, Jesús Morán, han visitado las ciudades de Homs, Kafarbo, Seydnaya y Damasco. Se han reunido con comunidades, personas comprometidas en parroquias o en la sociedad, familias, niños, jóvenes, sacerdotes y religiosos. Han sido recibidos por obispos y por el nuncio apostólico, cardenal Mario Zenari. Emmaus Damasco GiovaniHan visto y experimentaron de primera mano las terribles heridas que la guerra ha dejado en las estructuras y en las almas de los sirios: traumas y tragedias de todo tipo. Han conocido desde dentro la difícil y casi desesperada situación de un país que se convirtió en el títere de los muchos intereses de fuerzas externas, que sufre una fuerte guerra económica, mientras que el conflicto militar aún no ha terminado. Entonces, ¿cómo es posible terminar el viaje agradeciendo la esperanza y la fuerza recibidas? Una de las claves de la lectura es, sin duda, la última etapa. Por invitación del patriarca melkita, monseñor Youssef Absi, 230 jóvenes católicos y varias iglesias se reunieron el lunes 6 de mayo en la catedral católica griega de Damasco. En esta ocasión, respondiendo a algunas preguntas, Maria Voce hizo un fuerte llamado a la juventud siria: “No se dejen robar sus valores y únanse a todos los jóvenes que quieren un mundo mejor. El mundo los espera”. Más tarde el copresidente, Jesús Morán, explicará la profunda motivación de estas palabras: “Estos jóvenes han experimentado que todo se derrumba; sin embargo, han conservado una profunda sed de Dios y un verdadero sentido de la comunidad. Quizás no estén completamente conscientes de ello, pero se encuentren en una situación espiritual óptima, de la cual pueden nacer grandes cosas”. ¿Qué hacer, entonces, para crear las condiciones en las cuales estas semillas de esperanza puedan crecer y germinar en Siria? Quien conoce al menos un poco la historia pasada y reciente de este país, tal vez sugiera una doble solución: dejar a Siria y a los sirios en paz, porque sobre todo es necesario que cesen los conflictos. Después, serían las grandes fuerzas de Medio Oriente y de otras partes del mundo que quieren aprovecharse, que dejen que el país encuentre su propio camino. Este pueblo, fuerte y tierno al mismo tiempo, como lo describió Maria Voce, es más que capaz de tomar su destino en sus propias manos.

Joachim Schwind

Siria /2: Queremos dar vuelta la á

Siria /2: Queremos dar vuelta la á

El sábado 4 de mayo, la presidente y el co-presidente de los Focolares se encontraron con la comunidad siria del movimiento: en los testimonios hay dolor, sentimientos de pérdida y duelo, pero también riqueza de cultura, tradiciones y deseo de vivir y reconstruir la patria. Desde las primeras horas, la jornada del sábado 4 de mayo se preanunciaba como algo fuerte. Trescientos miembros de la comunidad siria de los Focolares se habían dado cita en el convento de San Efraín el Sirio, en Seydnaya, a unos 40 kilómetros al Norte de Damasco. Se inicia con la historia del movimiento, contada con las mismas palabras que Chiara Lubich usó muchísimas veces y como las comunidades en el mundo conocen casi de memoria. “Eran tiempos de guerra y todo se derrumbaba… ”. Pero la particularidad de la narración de hoy es que después de contar cada episodio de la vida de Chiara, la palabra pasaba a alguien que la ilustraba con su propia experiencia vivida recientemente en esta tierra tan sufrida. Schermata 2019 05 05 alle 22.02.45Hay quien, volviendo a su ciudad, no volvió a encontrar su casa; o quien perdió su trabajo, o está el que perdió la salud física o psíquica, el que vio que le robaban su futuro, o la fe en Dios y en las relaciones; o el que – y son muchos – perdió a las personas más queridas. Y a menudo, hasta hoy, estas pérdidas no se han visto compensadas. “Estamos muertos por dentro”, dice uno de ellos, resumiendo el estado de ánimo de muchos, acaso de todos. Pero, sin embargo, como fondo del escenario puede leerse en árabe la frase que Chiara Lubich y sus compañeras querían ver escritas en sus tumbas ya desde los primeros tiempos cuando el movimiento daba sus primeros pasos, en plena segunda guerra mundial: “Y nosotros hemos creído en el amor”. Lo subraya también la canción final que canta el famoso “Arte de amar”, explicado muchas veces por Chiara Lubich: amar a todos, ser los primeros en amar, ver a Jesús en cada prójimo, amar a los enemigos. Los presentes se ponen de pie, empiezan a bailar y expresan con sus sentidos un deseo común, el de dar vuelta la página. Delante de nuestros ojos están una vez más las dos realidades que han marcado el viaje de la delegación del Centro Internacional de los Focolares a Siria: por un lado el encuentro con el dolor: heridas, traumas, desesperación, preocupación por el futuro, sobre todo por sus hijos; por el otro el deseo de seguir esperando, de retomar la riendas de su vida con libertad. Para sostener ambas realidades hay una espiritualidad que se apoya en una fe que puede decir: hemos creído en el amor. 8679f12a 673e 487d b0af 7167d6324739Esta vida, que se mueve entre la desesperación y la esperanza, la muerte y la resurrección, se manifiesta también en el breve discurso del Nuncio Apostólico en Siria, cardenal Mario Zennari y en las respuestas de María Voce y Jesús Morán. El cardenal Zennari invita a los presentes a acoger hoy el mensaje que el Crucifijo le dirigió hace 800 años a San Francisco, el de reparar la Iglesia. “Pero aquí – agrega el cardenal – no se trata sólo de reparar la Iglesia, sino de reparar la patria. Hay que construir una nueva”. Jesús Morán, co-presidente de los Focolares, presenta a la comunidad siria del movimiento el ejemplo de María, la madre de Jesús, que en su mayor desesperación “Creyó en lo imposible” o sea en la fuerza de la resurrección. 59836919 d942 41ba 86d9 b38909cf1a62Pero, ¿qué hay que hacer hoy en Siria: quedarse o emigrar? Formula la pregunta fundamental de muchos la misma María Voce: más allá de esta elección que hay que hacer, y que seguramente no es fácil, la presidente invita a los presentes a vivir este momento presente, a quedar fijos en lo que parece ser “la voluntad de Dios” y vivirla con autenticidad y coherencia, “por más que cada tanto Dios permite que vivamos en el misterio”. La jornada se concluye con una gran fiesta en la que las distintas regiones representadas y sobre todo el gran número de niños y jóvenes suscitan una cierta sorpresa en quien, tal vez, había llegado aquí pensando que encontraría un pueblo pobre. Puede ser que no haya bienestar material, pero hay riqueza de vida, de tradiciones, costumbres, danzas, canciones, expresiones de alegría, ganas de vivir. ¡Qué bella esta gente que – a pesar de todo – ha creído en el amor!

Joachim Schwind