Movimiento de los Focolares
Espacios para la vida: un llamado a la unidad de Juntos por Europa en Timisoara

Espacios para la vida: un llamado a la unidad de Juntos por Europa en Timisoara

La ciudad de Tamisoara, Rumania, ha sido anfitriona recientemente del encuentro anual de “Juntos por Europa” (JpE) con el tema “Llamados a la unidad”.  Este encuentro reunió a 51 movimientos en representación de las más de 300 realidades cristianas que están dentro de la red de JpE. Crear espacios de vida en las grietas En el complejo contexto sociopolítico que Europa está atravesando, los líderes de “Juntos por Europa” (JpE) se reunieron del 16 al 18 de noviembre de 2023 en  Timisoara (Rumania) para responder a una pregunta importante:   “¿Cuál es el rol de las comunidades cristianas en Europa actualmente?”.  Esta pregunta ha adquirido relevancia frente a cuestiones globales como los varios conflictos actuales, las dinámicas migratorias y la crisis climática. Herbert Lauenroth, historiador y miembro de la Comisión Directiva de JpE, destacó la crisis que sacude a todas las Iglesias  y evidenció el peso de este momento:  “¿Dónde están hoy Europa y Juntos por Europa? ¿Hacia qué tipo de Europa, hacia qué tipo de ‘juntos’ estamos yendo?”. En un contexto de creciente incertidumbre, los participantes dialogaron sobre lo que significa “Juntos por Europa”, tratando de discernir su orientación  y sus perspectivas futuras. Desde las primeras sesiones era evidente que haber escogido la ciudad de Timisoara como sede del encuentro añadió un ulterior nivel de significado. La Capital de la cultura 2023 es un testimonio de la coexistencia armoniosa de distintas confesiones cristianas, en la que comunidades diferentes se encuentran y prosperan en unidad. Gerhard Proß, moderador de JpE y responsable del  CVJM (Christlicher Verein junger Menschen- Asociación cristiana de jóvenes) de Esslingen (Alemania), ofreció una perspectiva a partir de la fe cristiana: “Dios crea espacio entre las grietas”, dijo.  “El mismo Jesús entró en las grietas más profundas de este mundo”. Luego explicó que “la imagen de Cristo, con sus brazos abiertos entre el cielo y la tierra, simboliza una entrada profunda en las fracturas entre Dios y la humanidad, entre individuos, grupos, denominaciones y naciones. Jesús bajó a lo más profundo. Y “allí creó un espacio de vida”. Palabras que tuvieron una resonancia profunda, suscitando reflexiones sobre cómo, frente a los retos contemporáneos, las comunidades cristianas pueden crear espacios de vida en medio de las fracturas, tensiones e incertidumbres. Cultivar la unidad Los participantes tuvieron sesiones de diálogo, presentaron temas intelectuales, talleres experienciales y momentos de oración. Seis talleres exploraron temas como la integración social, las perspectivas de los jóvenes, la ética y la no violencia, promoviendo una más profunda comprensión de la diversidad dentro de la comunidad cristiana. Un momento importante fue la visita al Museo de la Catedral Ortodoxa, seguida de la oración de las Vísperas, en donde estuvieron autoridades y líderes religiosos de las diferentes Iglesias presentes. Esos momentos de oración común favorecieron un clima armonioso, en donde la unidad y la diversidad convivían. Los discursos y las actividades tuvieron intervalos de música y oración, y se creó así un hilo conductor que caracterizó toda la conferencia. Durante uno de sus cantos, el Coro Ecuménico Juvenil invitó a todos a abrazar los distintos modos de oración: “Sabemos que todos rezamos con nuestro estilo propio. Abrámonos para experimentar la oración del otro durante estos días en Timisoara”.  En especial, fue muy fuerte el momento de la plegaria por la paz en la que se mencionaron los conflictos de todo el mundo, con particular atención a Ucrania y Medio Oriente. Todos los participantes prometieron su compromiso por la unidad, estableciendo un pacto de amor recíproco.  Un momento que quiso simbolizar la piedra angular sobre la cual se funda una Europa fraterna. Relacionar los valores con las políticas En el ámbito del proyecto DialogUE, financiado por la Unión Europea, el encuentro anual de “Juntos por Europa” afrontó también temáticas encaminadas a desarrollar consejos y recomendaciones para las políticas sociales de la Unión Europea. El profesor Philip McDonagh, exdiplomático irlandés y director del “Centro para la religión, los valores humanos y las relaciones internacionales” de la Universidad de Dublín destacó la importancia del artículo 17 del Tratado sobre el funcionamiento de la Unión Europea (TFUE). Este artículo promueve un diálogo abierto y transparente sobre las principales cuestiones sociales que Europa tiene que afrontar a través de encuentros de alto nivel y seminarios de diálogo y trabajo entre las instituciones europeas y las Iglesias, así como las organizaciones no confesionales y filosóficas. El profesor remarcó el aporte de las Iglesias en el debate público, acudiendo a sus fundamentos filosóficos, a los valores de compasión, cuidado, solidaridad y respeto por el pluralismo.  Recomendó que las Iglesias se esfuercen por llenar la división entre valores de alto nivel y las políticas cotidianas, ofreciendo una perspectiva necesaria sobre cuestiones como la paz, la inclusión y la integración.  Invitando a un enfoque multilateral, hizo hincapié en la necesidad de que Europa sea percibida positivamente por la comunidad global y evidenció la responsabilidad de considerar las perspectivas del Sur del planeta. Speranza nell’unità Margaret Karram, presidente del Movimiento de los Focolares, estaba presente junto con el Copresidente  Jesús Morán y habló dando palabras de esperanza: “Junto a todos ustedes, quisiera tener la siguiente convicción: ¡todo es posible!”.  Sus palabras invitaron a tener una mirada optimista, a reconocer que la humanidad está dividida y a crear redes de fraternidad.  Karram  encomendó a la red “Juntos por Europa” que abrazara los carismas nacidos del Evangelio, que se comprometiera en el diálogo y abriera espacios para obtener respuestas tangibles a los retos contemporáneos. El obispo Josef-Csaba Pál de Timisoara expresó su gratitud por estos días: “Una pequeña semilla de esta fraternidad, unidad y amor ha sido colocada en nosotros, en nuestras Iglesias, pero también en la sociedad.  La red Juntos por Europa es una de esas maravillosas iniciativas en las que Dios permitió que cosas buenas crecieran a lo largo de los años.  ¡Sigamos trabajando junto a todas las personas de buena voluntad!”. Mirando hacia el futuro, se anunció que el próximo encuentro anual de Juntos por Europa se hará en  Graz-Seckau, Austria,  del 31 de octubre al 2 de noviembre de 2024. Las confesiones cristianas presentes eran: ortodoxos griegos, rumanos, armenios, rusos, y romanos;  vetero-católicos, protestantes, luteranos, reformados, anglicanos e Iglesias libres.

Ana Clara Giovani