Movimiento de los Focolares
Un saludo especial desde Siria

Un saludo especial desde Siria

20150530-01Homs, Banias, Kfarbo y Tartous, llegaron desde Damasco, Alepo. ¿Quién hubiera imaginado pasar un fin de semana con jóvenes de todas partes de Siria? ¿Una locura? Esto se preguntan los organizadores. Tal vez, pero fue una realidad. El número de participantes fue creciendo día a día hasta que llegaron a ser 67. «Nuestra aventura comenzó así», cuentan. «Elegimos un lugar seguro al cual todos pudiéramos llegar, aún teniendo que viajar durante 10 horas. La idea era pasar tres días juntos y vivir, compartir, rezar, llorar, jugar, disfrutar la naturaleza, pero siempre con el amor recíproco entre nosotros» «¿Qué es lo que importa en mi vida?» fue el lema del fin de semana. Una pregunta que resuena más fuerte en una situación precaria como la que están viviendo los jóvenes sirios. Se dividieron en cuatro grupos con distintos temas: “UnMovimento dei Focolaria amistad especial con el Padre”, “Cada día donde Jesús”, “El Amor que nos hace libres”, “El Amor a María”. Los jóvenes profundizaron estos temas en base a fragmentos de la Sagrada Escritura, de los Papas y de los Santos, que acompañaron con historias verdaderas de jóvenes que los precedieron en la carrera hacia la santidad. Cuando llegué al fin de semana estaba cansada por la guerra – confiesa Fátima- y sentía que la vida estaba como estancada, pero allí experimenté nuevamente la presencia de Dios en mi vida y su Amor por mí a través del amor de los demás. Ahora cuando paso momentos difíciles, me es suficiente pensar que hay alguien que está rezando por mí y que está tratando de vivir del mismo modo. Esto me da una gran paz interior. Comprendí que lo más importante es vivir la vida… amando a Jesús en cada prójimo» DSCF5730El primer día profundizaron uno de los puntos fundamentales de la espiritualidad de la unidad, «Dios Amor». Recordando la historia de los comienzos de los Focolares en Trento durante la segunda guerra mundial, cuando todo se derrumbaba, simultáneamente fueron iban reviviendo la realidad de Siria hoy. «Todo cae; sólo Dios queda», afirmaba alguien, por lo tanto, «¿Qué es lo que importa de verdad en mi vida?». Uno de ellos dijo: «Vivir el cristianismo de forma radical». El segundo día, a partir de un histórico discurso de Chiara Lubich dirigido a los jóvenes en la década del ’70, «Jesús Maestro», se puso en evidencia la sed que todos tenían de Dios. «No faltaron noches con cantos, danzas y juegos que nos hicieron sentir que somos una verdadera familia», escriben Murad y Lina. Cuando partían para sus ciudades alguno decía: «Agradezco a Jesús por todos los momentos de alegría y de dolor». «Sentí de nuevo la caricia de Dios – escribe Haashim- siento la responsabilidad de llevar esta gracia a todos los que están alrededor nuestro». Fueron días inolvidables para todos. «Fueron días»- escribe Samir- «en los que recibimos paz, serenidad y que nos han dado la fuerza para volver a vivir en esta situación dramática». «A pesar de todo lo absurdo de la guerra – concluye Nahda- no me siento sola».

Eslovaquia: el desafío de un joven sacerdote

Eslovaquia: el desafío de un joven sacerdote

20150528-01«Mi actual parroquia está ubicada en uno de los barrios de Bratislava, capital de Eslovaquia – dice el padre Ludovit –. Cuenta con unos 4.300 habitantes aproximadamente, entre los cuales, 3.500 son cristianos, en continuo incremento. Llegué aquí en julio de 2009 y sabía que mi primera tarea era la de amar a las personas con el amor de Jesús. Ahora puedo decir que estoy feliz, porque se ha creado una hermosa comunidad entre personas de distintas edades y categorías sociales, procedentes a su vez de distintas ciudades de Eslovaquia, que han descubierto una nueva relación con Dios, no sólo a través de la Biblia y la oración, sino también a través de la comunidad y de las distintas actividades parroquiales. Aquí han encontrado la alegría de la fe por la cual vale la pena vivir. Cuando llegué faltaban los jóvenes. En efecto, el Estado había prohibido la construcción de viviendas nuevas, por lo tanto, las parejas jóvenes se habían trasladado a otros sectores. Por otra parte, no se había hecho un trabajo de formación en la fe para los pocos chicos que aún quedaban. Encontré a tres jóvenes con ganas de colaborar, pero estaban sumergidas en sus estudios y trabajos. Entonces invité a los chicos y a los jóvenes recién confirmados a un asado. Vinieron por respeto, pero nunca más volvieron: “Ya recibimos la confirmación, por lo tanto ya no necesitamos ir a misa”, me dijeron. Le confié a Jesús toda esta situación. Desde septiembre de 2009 doy clases de Catecismo en todos los grados de la primaria y del bachillerato (en total a unos 150 chicos). Simultáneamente, empecé a celebrar la misa dominical para las familias. Trataba de aprovechar todas las ocasiones para crear relaciones: saludar por la calle, ir a visitar a una persona a la casa, cruzar unas palabras en la tienda, en la oficina o en la escuela. Y también, invitar a un asado y a hacer deporte en la cancha de la parroquia, etc. Poco a poco las personas empezaron a participar. Paulatinamente se ha ido creando una comunidad. Los niños no quieren faltar, algunas jóvenes mamás han empezado a descubir muchas cosas en común entre ellas por la edad de sus hijos, los papás se invitaban recíprocamente para realizar algunos trabajos en la iglesia y en la casa parroquial, pero también para ir a jugar tenis o a tomar una cerveza juntos. Incluso el alcalde y algunos diputados han empezado a estar presentes. Un día Jesús me envió también a Blanka, la actual directora del coro parroquial y animadora de muchos eventos». «Muchos dicen que la nuestra es “una parroquia viva” – afirma Blanka –. Más allá de nuestras diferencias individuales, buscamos constantemente lo que nos une, y volvemos siempre a la fuente de la unidad, del amor y del perdón, que es Jesús. Nosotros, padres de familia, tratamos de crear las condiciones prácticas para que puedan desarrollarse muchas actividades. A menudo sucede que estas actividades van en detrimento de nuestro tiempo, del descanso o de los trabajos domésticos, pero es realmente hermoso ver que todos apoyan no sólo a los propios hijos, sino a todos “nuestros” chicos. Como pasó con Michele, uno de nuestros hijos ya adolescente que es autista. Me alegra mucho ver que los demás chicos le abren la puerta, lo invitan y lo tratan por igual. Michele los ama mucho y los siente a todos como su gran familia»­. «Soy médico imuno-alergóloga, trabajo en consulta privada y en el Hospital pediátrico universitario de Bratislava – agrega Dagmar –. El Centro pastoral y el Preescolar parroquial que se construyeron, se han convertido en centros de apoyo para varias actividades para nuestros niños, chicos y jóvenes, cuyo número crece constantemente. Un día, en mayo de 2012, el padre Ludo me preguntó si estaba disponible para participar como médico en un campamento de verano para los chicos de nuestra parroquia. En un primero momento contesté que no. Pero luego, recordé los rostros de los chicos que ya conocía. Al final dije que sí, ¡y ahora son ya 4 años que lo hago! Me he vuelto más sensible al dolor de los niños y a sus temores por la salud cuando se encuentran lejos de sus padres. Esta experiencia me ha ayudado también a profundizar el sentido del servicio a los demás». «Un encuentro muy importante – concluye el Padre Ludo – se llevó a cabo el año pasado en Benevento (Italia), organizado por el Movimiento Parroquial. Nuestros jóvenes trajeron de allí “una nueva fuerza espiritual, una relación con Dios más directa, – decían – y, sobre todo, las ganas de vivir ‘comprometidos en el amor’, porque cualquier cosa hagamos, si no es por amor, pierde su valor y su significado”. Para mí era una confirmación de que la comunidad no sólo ha nacido y se ha consolidado, sino que se basa también en la fe de los jóvenes. El futuro, por lo tanto, está garantizado».

En Polonia, siguiendo las huellas del Gen Verde

En Polonia, siguiendo las huellas del Gen Verde

Gen Verde_01Città del dialogo, è uno dei nomi di Katowice – nel sud della PoloniaCiudad del diálogo, es uno de los nombres de Katowice –localidad del sur de Polonia, ciudad minera por excelencia- se llama así porque es el municipio polaco con mayor representación interreligiosa. Es allí donde está, además de un Centro de Cultura islámica destinado a la oración y a la formación, el Centro de Cultura y Diálogo ‘Doha’, destinado en primera instancia al diálogo. El centro celebra el 29 de mayo la ‘III jornada del cristianismo entre los musulmanes’, con el tema ‘Jesús hermano de cada uno de nosotros’, en la perspectiva cristiana y musulmana. Participarán, entre otras personas, también María Voce y Jesús Morán, presidente y copresidente de los Focolares, quienes en estos días se encuentran de viaje por Bielorrusia y Polonia para visitar las comunidades del Movimiento. Pero damos un paso atrás. En Katowice, un grupo de personas desde hace tiempo está tejiendo una red de relaciones fraternas y de colaboración entre cristianos de varias iglesias, judíos y musulmanes, del ámbito académico y de las instituciones civiles. En ocasión de los 150 años de fundación de la ciudad, invitaron al conjunto internacional Gen Verde, que transmite con su música un mensaje de fraternidad. Desde hace algunos años propone un proyecto artístico educativo que, a través de talleres, lleva a los jóvenes al escenario y junto a las artistas se ejercitan en varias disciplinas: danza, canto, teatro, percusión con instrumentos varios e incluso “body percussion”. En Polonia fueron 140 los chicos y chicas que, con sus talentos, contribuyeron con el espectáculo. Pero lo que suscitó un auténtico interés fue que en el proyecto participaron jóvenes musulmanes, judíos y cristianos de varias denominaciones. Los afiches que anunciaban el evento llamaron la atención de muchos, tanto que después de 6 horas de haber comenzado a vender, las 1450 entradas se habían agotado. Gen Verde_04Una chica musulmana que participó en los talleres y después en el espectáculo, agradecía porque nunca se había “sentido tan escuchada”. Y esto se evidenció aún más por el marco de los recientes hechos terroristas. «En los talleres trabajamos con 140 chicos maravillosos, talentosos, que son la expresión de un pueblo abierto, profundo y sensible, forjado en una fe probada por tantos sufrimientos. Los jóvenes nos dijeron que experimentaron una unidad y una confianza que los transformó y los hizo volar», escriben del Gen Verde a su regreso de Polonia. «El espectáculo fue en la NOSPR, una novísima sala construida sobre una antigua mina, templo de la música sinfónica que se abrió (por primera vez en su historia) a nuestro rock. El público apiñado por todas partes vibró con nosotros desde el inicio y después cada vez más; después de las primeras palabras cantadas en polaco (tradujimos el estribillo de dos piezas) estalló en un aplauso emocionado; al final del concierto había una gran alegría». Espectáculo en el espectáculo, fue ver al final, en el escenario, al alcalde, a un representante de la comunidad católica, a un representante de la comunidad judía y al imán que se abrazaron, expresando con este gesto, el testimonio de una fraternidad cultivada durante años. Un sacerdote comentaba: “Quizás somos testigos de un milagro. Si tenemos entre nosotros a estos jóvenes, como los hemos visto hoy, el mundo no morirá. Con este método de diálogo pueden salvar al mundo”. Y un rabino agregaba: “No tenemos que tener miedo del futuro”, porque estamos juntos”.

Economía de Comunión: ¿un camino para África?

Economía de Comunión: ¿un camino para África?

EdC_Nairobi_011«Somos una nueva generación que quiere tomar las riendas de la Economía de Comunión. Somos conscientes de nuestra falta de experiencia y de nuestra inmadurez, pero también estamos felices de experimentar que ésta es exactamente nuestra fuerza, no queremos dejar de soñar». Liliane Mugombozi, periodista de Kenia, recoge la voz de un joven camerunés, uno de los participantes de la escuela internacional de Economía de Comunión (EdC) que está en curso desde el 22 al 26 de mayo en la Mariápolis Piero, ciudadela de los Focolares situada cerca de Nairobi, Kenia. «Entrando en esa aula–escribe- era imposible, no darse cuenta de la energía de un pueblo joven: vigoroso, lleno de expectativas, esperanzas, aspiraciones y sueños casi impensables en medio de todos los desafíos del continente». Los participantes son estudiantes de Economía, Desarrollo, Ciencias Sociales, empresarios e interesados en el tema, provenientes de todas las regiones sub-saharianas y de Líbano, Egipto, Italia, Hungría, Argentina, Brasil, Chile, México y Australia. Entre los saludos que llegaron de distintas partes del mundo, fueron recibidos con un aplauso los saludos y el mensaje de la Rectora de la Universidad de Cagliari, la profesora María Del Zompo, que, recordando el dolorosísimo evento de la masacre de los jóvenes estudiantes de Garissa, quiso recordar a los jóvenes presentes la importancia de las estructuras de instrucción, alentándolos en su deseo de vivir y difundir los ideales de la EdC. Vittorio Pelligra, uno de los docentes, presentó el método y el programa de estos días: la reciprocidad aplicada: «Es una escuela especial de diálogo, de intercambio, donde compartimos nuestras intuiciones, nuestras dudas, nuestros proyectos y sueños. Aquí todos somos protagonistas, estando dispuestos ¡a donar todo y a recibir todo de todos!». 20150526-01Después de una breve historia de la Economía de Comunión, de su nacimiento y desarrollo desde 1991 hasta hoy, surgió una pregunta: ¿La EdC es un camino para África? El diálogo entre los docentes y los asistentes suscitó en el auditorio un entusiasmo contagioso.  «¿Cómo hacer para influenciar nuestros gobiernos?», se pregunta alguien. «Nosotros los jóvenes estamos cansados de ser usados por nuestros políticos como el objeto de sus declaraciones. No sólo nosotros, sino que el mundo espera hoy nuevas formas de relación… la EdC es una de las soluciones, nosotros lo sentimos así». No falta el momento para echar una mirada a los desafíos y a los recursos de los jóvenes del continente: la crisis de identidad en la sociedad globalizada, la pobreza, los conflictos y la familia extendida, la fuga de cerebros del continente y la falta de trabajo, la educación cada vez más internacional que no piensa en cómo dar una solución a las necesidades actuales de la sociedad que nos rodea. Estos son sólo los primeros pasos de la escuela, comenta Liliane Mubomobozi «pero los jóvenes presentes al conocer categorías económicas nuevas, descubren ya un futuro mejor y no ven la hora de volver a sus países para difundirlo a la mayor cantidad de personas posible». 20150526-02Los docentes comparten también sus propias historias de vida que los condujeron a realizar elecciones comprometedoras. Nace un diálogo profundo: docentes y estudiantes comparten sueños, frustraciones, desilusiones, pero también pequeñas y grandes historias de éxitos. Pasan por temas como la crisis económica mundial y su impacto en los países en vías de desarrollo. Se refieren a las multinacionales a la ONU, a grandes temas como el del “cambio climático”, las relaciones internacionales. Los jóvenes procedentes de la región minera de Katanga (RDC), demuestran ser hábiles conocedores del drama que los afecta. Y un gran sueño toma forma: jóvenes, es más adolescentes, llenos de entusiasmo y de vida, creen fuertemente en el Ideal del Mundo Unido que comparten con muchos otros jóvenes en el mundo entero y no sólo con ellos. Se trata nada menos que “el sueño de un Dios”, como le dijo una vez Chiara Lubich precisamente a ellos, a los jóvenes. Un sueño que no han de perder de vista ni siquiera cuando se trata de las elecciones importantes de la vida como la de la carrera universitaria, para poder tener un impacto en la sociedad y para realizar en la vida concreta, y no sólo con las palabras, una sociedad justa, digna para cada ser humano. Después de la escuela, que concluye el 26 de mayo, comenzará el Congreso Internacional de EdC: en el cual empresas, empresarios y trabajadores debatirán, en un espacio donde el ideal se transforma en prácticas empresariales, en desafíos que están presentes en el mundo del trabajo, en elecciones creativas. Entre los temas a tratar se verán algunos como la creatividad y la comunión, la cultura de comunión, la empresa y el trabajo, la pobreza y la riqueza y el sí a una Economía de Comunión. Son temas que se trabajarán en los talleres sobre Política, microfinanzas y pobreza; startup (empresas emergentes); expertos y jóvenes investigadores; gerencia; redes empresariales y la EdC en diálogo con las culturas africanas. Pagina Facebook del evento Lee también: Nota de prensa sobre el Congreso internacional de EdC, Nairobi 27-31 mayo de 2015 Conexión streaming en directo Live streaming: http://live.focolare.org/eoc/ on 27.5.2015, 15.00 – 18.30  (Kenyan time, 14.00 – 17.30pm), and then morning sessions of the scheduled program 9.00am -12.30pm Kenyan time.

Ser una mujer exitosa en Indonesia

Ser una mujer exitosa en Indonesia

MardianaMardiana. Así se le llama sencillamente, un nombre que, como sucede algunas veces en Indonesia, es también apellido. También en los documentos. Actualmente es vice-presidente a nivel nacional de una importante compañía multinacional de seguros. Recientemente Heryento, un periodista del Indopost, la señaló como una de las mujeres más exitosas de Jakarta, y le hizo una entrevista para su columna. Su historia es interesante, y el punto central es una profunda espiritualidad, vivida con sencillez y convicción desde cuándo, siendo chica, encontró a los Focolares. En 1997 se graduó en Economía en el Universidad de Medan (Isla de Sumatra), al año siguiente Mardiana se casó con Mulianta, también él quedó fascinado por la espiritualidad de la unidad. Juntos quieren fundar una familia con bases profundamente cristianas. Nacen dos espléndidos niños. En un momento dado la compañía de seguros donde trabaja Mardiana tiene que cerrar, pero surge una nueva oportunidad; entra en Reliance Insurance, otra compañía de seguros con varias sedes en el mundo. A menudo Mardiana tiene que viajar a la capital, Jakarta (Isla de Java), para participar en reuniones de trabajo. Es un gran sacrificio para ella, que desea tanto estar con sus hijos. Pero Mulianta le ofrece su confianza y la apoya, alternándose en el cuidado de los niños. Después de un ascenso a Mulianta le proponen asumir un cargo en Jakarta, que sin embargo él rechaza para permanecer al lado de su esposa y de sus hijos y con su agudo espíritu empresarial abre una empresa propia en Medan. Trascurren seis años, en los que la agencia donde trabaja Mardiana registra un buen índice de ventas y un alto grado de satisfacción por parte de sus dependientes. Y en ese momento le hacen la propuesta a Mardiana de transferirse a Jakarta para asumir el cargo de vice-presidente de Reliance Insurance Indonesia. Mulianta y Mardiana reflexionan: también lo podrían rechazar. En realidad en Medan todo está yendo bien. “Pero –se dicen- no tenemos que mirarnos sólo a nosotros mismos. Tenemos que interrogarnos cuál es la misión que Dios nos quiere confiar a cada uno de nosotros”. Y es precisamente Mulianda quien anima a Mardiana a que acepte, a pesar de que él tiene que dejar la empresa de Medan y encontrar un nuevo trabajo en Jakarta. Durante los primeros meses Mardiana viaja continuamente para dar las debidas consignas al nuevo responsable y hacer que el cambio de administración en el mercado de Medan no tenga traspiés. «¡Le agradezco a Dios por tener un marido increíble! –confía Mardiana al periodista de Indopost- Si no me hubiese dado la confianza, no lo habría logrado». «Juntos compartimos todo –sigue contando- sobre todo el compromiso de poner en práctica el amor del Evangelio que nos lleva a ver a cada prójimo como a un hermano para amar. Por eso nosotros no discriminamos a nadie, no importa su posición social: somos todos iguales. Cualquiera sea el color de su piel, su etnia o religión, para nosotros todos son hermanos». Y le cuenta al periodista una experiencia personal: «Nuestra empleada, que desde hace tiempo está con nosotros, es musulmana. Además de ser honesta y laboriosa, es inteligente. Por eso le propusimos –y ella aceptó con gusto-, que estudiara en la universidad. Muchos nos dijeron: cuanto tenga una buena posición los va a dejar y olvidar. Pero para nosotros amar significa darle a los demás oportunidades, ocuparnos de su futuro. Ella siempre será parte de nuestra familia, pero no tenemos que pensar que una empleada tienen que quedarse siempre como tal, igual nuestro chofer, también ellos tienen que tener una vida mejor». Es significativo el comentario del periodista, musulmán, en uno de los dos artículos publicados en Indopost: «Para Mardiana ser gerente regional de Reliance estaba en los planes de Dios, aunque el cargo es muy estresante, con problemas de todo tipo. Pero ella logra afrontarlos serenamente porque en la base de su vida está el amor que aprendió de la espiritualidad del Movimiento de los Focolares del que ella y su marido forman parte. Ciertamente el hecho de que ponga toda la confianza en Dios, no quiere decir que se quede sólo viendo, sino que realiza el trabajo con gran compromiso, cosa que hace desde que era estudiante de colegio y ya trabajaba».