9 de junio 2011 – «Escribimos estas notas mientras estamos en el vuelo de vuelta de Estrasburgo. Hace apenas unas horas estábamos en la sala ‘Low N3.4’ del Parlamento europeo, donde se desarrollaba un seminario con el título “Europa y diálogo. Un valor político para un mundo globalizado”, promovido por el Movimiento político por la unidad (Mppu). Eran 32 participantes, entre los cuales siete euro-parlamentarios de tres partidos diferentes (PPE, S&D, Verdi) –cinco italianos, un alemán, una austriaca- junto a tres representantes de Ong del Consejo de Europa y algunos asistentes parlamentarios. El encuentro ha tenido su significado: teniendo en cuenta el típico “nomadismo” de los parlamentarios europeos, aquellos que han alcanzado aquella pequeña sala (acondicionada para apenas 40 personas), lo han hecho realmente con convicción, y otros diputados de varias naciones han querido igualmente hacerse presentes, por email o por SMS, lamentando no poder participar por otros compromisos análogos: y esto habla de su búsqueda y de su estima por la política de comunión inspirada por el carisma de Chiara Lubich. Ahora nos parece posible iniciar una pequeña red de parlamentarios también a nivel europeo, agregada a la de los diputados de los distintos parlamentos nacionales, particularmente con la perspectiva del proyecto “Juntos por Europa”.Cada parte del programa ha sido importante para ofrecer el sentido del diálogo entre identidades diversas, sostenido por la categoría de la fraternidad, que es la aportación del Mppu a la política. Paolo Giusta (funcionario de la UE en Bruselas) fue el moderador del encuentro, introduciendo y presentando las líneas fundamentales del Mppu, de las cuales, sucesivamente, Marco Fatuzzo (Presidente internacional del Movimiento Político por la Unidad) comunicó algunas actuaciones concretar, deteniéndose en particular sobre los “laboratorios de fraternidad” iniciados hace tiempo en los parlamentos nacionales de Italia, Brasil y Corea del Sur. La ponencia principal contó con la contribución de Jesús Morán –responsable de las actividades culturales del Movimiento de los Focolares –sobre algunos aspectos antropológicos y culturales del diálogo. Otra aportación valiosa fue la presencia de Gérard Testard y de Severin Schmidt –del Comité de orientación de ‘Juntos por Europa’ -, que presentaron el camino del “JpE” y la próxima cita en Bruselas, trazando el hilo de esta experiencia extraordinaria, cuyas etapas fundamentales han sido los eventos Stuttgart 2004 y Stuttgart 2007. La diputada italiana Silvia Costa (S&D) afirmaba en la conclusión: “… estamos muy interesados en este diálogo y estoy segura de que también los ‘no creyentes’ se sentirán interpelados por el Proyecto que se nos ha presentado” La diputada austriaca Ulrike Lunacek, del partido de los Verdes, decía haber tenido ocasión anteriormente de conocer el proyecto de “Juntos por Europa” en su nación y que se consideraba ya invitada a la Jornada del 5 de mayo 2012 en Bruselas. Volveremos al Parlamento de Estrasburgo, apuntando únicamente a la unidad como objetivo posible, para que las instituciones políticas en Europa se abran cada vez más a la fuerza de los “carismas”, seguros de que este encuentro será uno de los motores de la fraternidad universal por la que Chiara Lubich ha dado su vida. Realmente, como ella solía decir: “¡si un pequeño grupo de personas son uno, el mundo será uno!”
Dejarse sorprender
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