Su salud se precipitó repentinamente en pocos días, y hoy en la noche, a las 0.30, Oreste nos dejó. Su vida, su gran humanidad y su sonrisa quedan grabadas en miles de corazones de las personas que tuvieron la posibilidad de encontrarlo en estos largos años concedidos al servicio de Dios y del ideal de la unidad, que él conoció en Milán en los años de su juventud.
Sobre su historia escribiremos más adelante. En tanto, quienes quieran rendirle homenaje podrán acercarse a la capilla del Centro Internacional del Movimiento de los Focolares, en Rocca di Papa, donde a partir de las 2.00 p.m. de hoy, se preparará la capilla ardiente.
Los funerales será mañana 15 de abril, a las 3.00 p.m., siempre en el Centro Internacional de los Focolares en Rocca di Papa.
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