Movimiento de los Focolares

Septiembre 2013

Ago 26, 2013

«No amemos de palabra ni de boca, sino con obras y según la verdad» (1 Jn 3,18).

 «No amemos de palabra ni de boca, sino con obras y según la verdad»

Debemos amar entonces, dice el apóstol, además que con los hechos, también en la verdad. El amor cristiano, mientras intenta traducirse en hechos concretos, se preocupa por inspirarse en la verdad del amor que encontramos en Jesús; se preocupa por hacer obras conformes a sus sentimientos y enseñanzas. Debemos amar en la línea y en la medida mostrada por Jesús.

 «No amemos de palabra ni de boca, sino con obras y según la verdad»

¿Cómo vivir entonces la Palabra de vida de este mes? Su mensaje es muy claro. Es una llamada a la autenticidad cristiana, sobre la cual Jesús ha insistido tanto. ¿Pero no es ésta también la gran expectativa del mundo? ¿No es cierto que el mundo de hoy quiere ver testimonios del amor de Jesús?

Amemos entonces con hechos y no con palabras, comenzando por los humildes servicios que nos piden cada día las personas que nos encontramos.

Y amemos en la verdad. Jesús actuaba siempre en línea con la voluntad del Padre; de la misma manera también nosotros debemos actuar siempre en línea con la palabra de Jesús. Él quiere que lo veamos en cada prójimo. De hecho, lo que hagamos a cada uno lo considera hecho a sí mismo. Quiere que amemos a los demás como a nosotros mismos, y que nos amemos entre nosotros estando dispuestos a dar la vida uno por el otro.

Amemos así para ser también instrumentos de Jesús para la salvación del mundo.

Chiara Lubich

_________________________

Palabra de vida publicada en Città Nuova, 1988/8, p.11.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Suscríbete a la Newsletter

Pensamiento del día

Artículos relacionados

Evangelio vivido: con el tesoro en el corazón

Evangelio vivido: con el tesoro en el corazón

En la vida cotidiana se presentan situaciones imprevistas que alteran nuestros planes. Podemos dejarnos tomar por ellas y al final nos quedará una sensación de amargura por lo que hemos vivido. En cambio, si tenemos presente el “tesoro”, el amor por el prójimo, encontraremos la manera de gestionarlas y en el corazón quedará el sabor dulce de la paz.

Una red de familias: el diálogo crea comunidad

Una red de familias: el diálogo crea comunidad

Una experiencia de diálogo y acogida que se ha transformado en una red de apoyo y amistad por el bien común. Es lo que nos cuenta Andreja de Eslovenia, miembro del Movimiento de los Focolares, que junto con su marido forma parte de Familias Nuevas. En el video la voz de los protagonistas de esta experiencia.