Movimiento de los Focolares
Anne: mi noche no conoce oscuridad

Anne: mi noche no conoce oscuridad

IMG_1556_Anne and Eleanor Shepherd

Anne junto con su mamá, Eleanor.

«Habiendo nacido prematuramente a las 14 semanas de gestación, en el momento de mi nacimiento pesaba sólo un kilo y medio. Los médicos dijeron que tenía una mínima posibilidad de sobrevivir y por ello mi madre llamó a un sacerdote para que me bautizara. Estuve en la incubadora durante cuatro meses y, a causa de la excesiva exposición al oxígeno, mi audición sufrió una pérdida del 80% en los dos oídos. Durante mi adolescencia empecé a preguntarme por qué no morí enseguida, por el enorme sufrimiento que esta grave pérdida auditiva me provocaba. Mis padres, que viven la espiritualidad de los Focolares, siempre me daban la misma respuesta: “Anne, Dios te ama inmensamente y te tiene reservado un proyecto sólo para ti”. Esta frase me hizo nacer el deseo de descubrir cuál era el proyecto que Él me reservaba. A  los 18 años comencé a trabajar en la oficina de correos. Mi tarea era, entre otra cosas, la de responder al teléfono y esto me resultaba difícil porque era complicado para mí lograr entender las diferentes solicitudes. Muchas veces las personas, en el otro extremo de la línea telefónica, me tomaban el pelo diciendo que era estúpida y por eso volvía a casa llorando y le gritaba a mi mamá preguntándole ¡por qué la vida tenía que ser tan difícil para mí! IMG_1265Su respuesta me tomó por sorpresa: “Prueba a dar tú el primer paso. Mañana, cuando respondas al teléfono, explica con sencillez a quien te escucha que tienes una deficiencia auditiva e invita a las personas a hablar lentamente y vocalizando”. Estas palabras me obligaron a enfrentarme sobre todo conmigo misma, pues no quería que se supiera que era sorda; de hecho quería mostrarme “normal” como todos los demás. Al día siguiente cuando el teléfono sonó, al mismo tiempo una voz en mi corazón me dijo “da el primer paso”. Por primera vez en mi vida respondí al teléfono invitando a hablar de forma clara porque tenía un déficit auditivo. Para mi sorpresa, la persona que me hablaba desde la otra parte del teléfono fue muy amable y comprensiva y, desde ese momento, esto me animó a llevar a cabo mi trabajo con más seguridad. Mis colegas, viendo mis dificultades y los esfuerzos que hacía para superarlas, trataron también ellos de ayudarme, respondiendo inmediatamente a las llamadas. Fue como tirar un guijarro en el agua que provocó un efecto en cadena. Recuerdo que fui a casa y le dije a mi mamá: “¡Funcionó!” Aquel día marcó un cambio radical en mi vida: entendí que tenía que aceptar mis límites día tras día y, tratando de dar el primer paso, siendo “la primera en amar” a los demás como Dios hizo con nosotros, encontraría una relación con el mundo y con las personas, además de una paz interior y una nueva libertad.
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Anne en Melbourne con las focolarinas con las que vive.

El sufrimiento me ha llevado cerca de Dios, quien me ayuda siempre a ponerme a disposición de los demás. Después de un tiempo, sentí el deseo de darle mi vida en el camino del focolar. Las dificultades no faltaron, como la de aprender la lengua italiana para recibir mi formación. Pero he experimentado que no hay nada imposible para Dios. Aún ahora no es fácil. Por ejemplo, con las amigas con las que vivo en el focolar, hemos tenido que dar cotidianamente pequeños pasos. Quien hablaba casi murmurando, ahora se esfuerza en pronunciar bien las palabras de manera que pueda leerle los labios. ¡Al final vence el amor recíproco! Recibí de mi padre, fallecido hace nueve años, un mensaje personal que tenía que abrir después de su muerte, en el que estaba escrita esta frase: “Mi noche no conoce oscuridad”. Esta es mi experiencia diaria: cada vez que opto por amar y servir a quien está a mi lado, no existen tinieblas y experimento el amor que Dios me tiene».

Madaba: con los refugiados en Jordania

Madaba: con los refugiados en Jordania

20161004-01«No vinimos aquí para enseñar, sino para aprender; no para hablar, sino para escuchar. Luego, ya en nuestros países, quisiéramos contarles a muchos lo que vimos y vivimos. Llegamos de distintos países europeos, de Medio Oriente, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Argentina. Esforzarse por entrar en la cultura del otro, comprender su punto de vista, es un ejercicio que empezó ya entre nosotros, de manera profunda y sincera», explica Marco Desalvo, presidente de New Humanity, al finalizar los días vividos en Madaba (Jordania). Se quedó en ese país del 7 al 19 de agosto junto con 55 jóvenes de varios países europeos y de oriente medio para empezar la primera fase del proyecto “Host Spot”, en un centro de acogida para refugiados sirios e iraquíes. «Aquí hay lugares significativos para las tres grandes religiones monoteístas – cuenta Desalvo – . Visitando el río Jordán, el lugar en el que Jesús fue bautizado, me impresionó saber que es el punto más bajo de la tierra. Me pareció un signo de la actitud que deberíamos asumir ante cada persona que encontremos. Empezábamos el día con un lema para vivir, nuestro “daily input”. El primer día: tratar de comprender al otro, poniéndonos a su servicio, con la conciencia de que tenemos mucho por aprender. Luego, el encuentro con los refugiados sirios e iraquíes: historias de inmenso dolor, familias, niños… Compartir el sufrimiento nos unió más con ellos y entre nosotros. Jamás olvidaré a Saheed y su relato: el 6 de agosto de hace dos años, con toda su familia, incluida su mamá que no estaba en condiciones de caminar, tuvieron que dejar a toda prisa su propia casa, su país, sin poderse llevar nada. Puedo sólo intuir todo lo que sufrieron y vivieron en estos meses, su esperanza de regresar y, ahora, la infinita espera de la llamada telefónica que les comunique la posibilidad de ser acogidos o no en otro país». 20161004-03El presidente de New Humanity confiesa haber quedado muy impresionado por el trabajo de los voluntarios de Caritas Jordania: «Insustituible, precioso, discreto, fuente de esperanza, de vida, de amor concreto, medicina para quienes los encuentran. Sin ellos, miles de refugiados no tendrían un techo y los medios de sustento, que les permiten volver a encontrar la esperanza. Junto con ellos, palpamos el sentido más profundo de la palabra “Caritas”: amor concreto. Hace dos semanas me encontraba en Polonia, para la Jornada Mundial de la Juventud y sigue muy vivo en mi corazón lo que el Papa Francisco les deseó a los dos millones de jóvenes presentes: “No os jubiléis a los 25 años, (…) no seáis gente de sofá, (…) apuntad hacia lo alto. (…) Puede que os juzguen como unos soñadores, porque creéis en una nueva humanidad, que no acepta el odio entre los pueblos, ni ve las fronteras de los países como una barrera y custodia las propias tradiciones sin egoísmo y resentimiento. No os desaniméis: con vuestra sonrisa y vuestros brazos abiertos predicáis la esperanza y sois una bendición para la única familia humana”. Aquí, en Jordania, conocí a jóvenes  que ponen en práctica estas palabras. Su compromiso es seguramente una gota ante los problemas que estamos afrontando. Pero estoy seguro de que, con jóvenes como éstos, el mundo será distinto. Estos días nos han transformado en embajadores de los refugiados, de su sufrimiento, de un mundo de Paz». 13996160_1667580330228501_7097858906827142546_oEl Proyecto “Host Spot”  es promovido por New Humanity y otras asociaciones de 9 países, y co-financiado por el programa Erasmus+ . Su objetivo es el de difundir una cultura de la promoción de los derechos humanos. Jóvenes de procedencias e historias distintas, dispuestos a adquirir competencias y conocimientos para defender el derecho a la libertad de expresión, y a involucrarse en la producción de documentales que relaten las historias de vida de los refugiados. Después de Jordania, el proyecto prevé también un curso de formación en Alemania (marzo de 2017) para desarrollar competencias técnicas en la producción de documentales sociales; habrá un encuentro con los refugiados hospedados en los campos alemanes y se hará una comparación entre los distintos sistemas de acogida. Lee también: Voluntariado en los campos de refugiados en Jordania Facebook: www.facebook.com/hostspot9/

30° aniversario del “Centro Mariápolis” de Castel Gandolfo

30° aniversario del “Centro Mariápolis” de Castel Gandolfo

Un poco de historia. En 1982, Juan Pablo II puso a disposición del Movimiento de los Focolares la sala de las audiencias papales en Castel Gandolfo (Roma). A partir de esa estructura grande y vacía, se construyó, con la colaboración de todos los miembros del Movimiento (también de los más pequeños), el actual Centro Mariápolis Internacional, que, desde 1986, recibe cada año a millares de personas. Llegan de las más variadas procedencias, jóvenes y adultos, que se reúnen en congresos, simposios, cursos de formación y de todo tipo, también con espacios calificados de diálogo ecuménico e interreligioso. Todos mancomunados por el mismo objetivo: contribuir a realizar y hacer visible la fraternidad; vivir a la luz de los valores universales del Evangelio, laboratorios de fraternidad; “una ciudad-casa”, como escribía en aquel entonces Chiara Lubich.   invito 30 anni Centro Mariapoliinvito

Pablo VI: profeta, apóstol, mediador

Pablo VI: profeta, apóstol, mediador

PaoloVI_ChiaraLubichPersonalidades de la Iglesia Católica, representantes del mundo islámico, autoridades civiles, representantes de asociaciones y personas de Brescia y de las ciudades cercanas, el pasado 23 de septiembre llenaron la catedral de la ciudad italiana para participar en el evento “Pablo VI, un retrato espiritual”, con el testimonio de Maria Voce, presidente del Movimiento de los Focolares, presentado por Rosi Bertolassi del mismo Movimiento. La intervención toca tres aspectos de la personalidad de Giovanni Battista Montini: profeta, apóstol, mediador. En ella, la presidente de los Focolares expresa, ante todo, una  profunda gratitud que une el Movimiento que ella representa al beato Pablo VI, “uno de los dones que Dios ha querido hacer a la Humanidad en nuestro tiempo”. Y recuerda el periodo en el cual la Iglesia estudiaba el Movimiento naciente: «Siendo Papa, su función fue determinante para discernir acerca del carisma de Chiara Lubich y para hacer posible lo que a inicios de los años sesenta parecía todavía “imposible”, individuando sapientemente vías jurídicamente factibles para expresar la fisonomía específica de esta Obra nueva en la Iglesia». Por tanto, subraya que, precisamente porque «impregnada de la Palabra, la figura de Giovanni Battista Montini – Pablo VI – se nos presenta en su triple dimensión de profeta, apóstol, mediador. En la dimensión profética, Maria Voce evidencia «la capacidad de abrir con valor y sabiduría nuevos caminos» y de «derribar muros y expresar la renovación de la Iglesia que su alma anhelaba». Como el histórico abrazo de paz con el patriarca Atenágoras en enero de 1964 en Tierra Santa; en 1970, cuando con una histórica decisión, elevó a doctora de la Iglesia – título otorgado desde siempre sólo a los hombres – a dos mujeres: Teresa de Ávila y Catalina de Siena; o todavía cuando, en el Año Santo de 1975, se arrodilló para besar los pies del metropolita ortodoxo Melitón. «Pablo VI fue verdaderamente el Papa del diálogo» así se expresó Juan Pablo II en Concesio durante su visita pastoral en 1982, subrayando en su predecesor la capacidad de dialogar con la Humanidad entera». Maria Voce subraya también su dimensión apostólica: «En Ecclesiam Suam (…) sentimos vibrar el pensamiento y el ánimo del apóstol del cual había elegido el nombre, el apóstol misionero y el primer teólogo de Cristo, aquél que se había hecho todo a todos y nada se había ahorrado para que el anuncio del Evangelio llegase a todas las gentes». A este respecto, Maria Voce recuerda los viajes apostólicos «que lo acercaron a los pueblos de la Tierra, haciendo a Iglesia más una y más “católica” como le gustaba subrayar a Pablo VI, en el sentido etimológico del término. De gran nivel y significación universal permanece el histórico y profundamente humano discurso pronunciado en la ONU. Me gusta señalar todavía la innovadora inserción de los laicos en puntos vitales de la institución eclesiástica, su confianza en las aportaciones de las ideas de ellos y su reconocimiento, en la Octogesima adveniens,  de la legitimidad de la pluralidad de opciones en el campo político aun en la fidelidad a los principios evangélicos». Por último, su capacidad de “Mediador en el único Mediador”:  después de haber recordado  la sorprendente carta a las Brigadas Rojas «brotada de su alma en el tiempo doloroso del secuestro del diputado y amigo Aldo Moro», la presidente afirma su función de mediador y añade: «Pablo VI –  siguiendo las huellas del Maestro – toma sobre sí la angustia y el tormento del mundo sintiéndolo profundamente suyo, carga con su pecado advirtiendo realmente el peso de éste y sufriéndolo hasta el fondo, como a menudo delata su rostro. Y es así como, en él, la paternidad de Dios se manifiesta nítidamente, anulando toda distancia entre el Cielo y la Tierra, sanando heridas, enjugando lágrimas, llevando paz y unidad». Lee el discurso integral.

Premio “Chiara Lubich para la fraternidad”

En el concurso – promovido por la Asociación Ciudades para la Fraternidad – pueden participar todas las entidades de administración local, de cualquier parte del mundo. Los proyectos e iniciativas pueden concursar si:

  • instituyen y/o difunden, a nivel local, pero también nacional e internacional, prácticas de fraternidad universal, según las distintas acepciones de significado de dicho principio;
  • estimulan a los ciudadanos para que se comprometan a favor del bien común y a participar en la vida de la comunidad civil,
  • favorecen el desarrollo de una cultura de la ciudadanía activa e incluyente.

El proyecto debe ser representativo de un estilo de administración y no de un episodio aislado  y cada vez más consciente del valor del principio de la fraternidad universal. Las administraciones públicas y demás sujetos sociales, económicos, culturales, pueden tanto auto-postularse, o indicar proyectos de otras personas. Todas las postulaciones deben ser enviadas antes del 10 de enero de 2017 a la Presidencia de la Asociación “Ciudades para la Fraternidad”, c/o Municipio de Castel Gandolfo, Piazza Libertà, 7 00040 Castel Gandolfo (Rm). Descargar la convocatoria en italiano Para más informaciones: http://www.cittaperlafraternita.org/