Conozca a los participantes: Augustine Doronila
Cómo ver los subtítulos en español, haga clic aquí https://youtu.be/4gp92udqK0U
Cómo ver los subtítulos en español, haga clic aquí https://youtu.be/4gp92udqK0U
Vivir por la unidad, significa contribuir en primera persona, cotidianamente, empezando por las relaciones familiares, en el trabajo, seguros que así se transforman las situaciones, se crea comunión, fraternidad y solidaridad. Otra lógica Aquella mañana, regresando de la misa dominical, encontré un caos en la cocina, evidencia de que nuestro hijo y sus amigos habían estado parrandeando dejando un caos. Habría sido justo y educativo dejar las cosas como estaban para que se «vieran», así después habríamos hablado. Pero la lectura del Evangelio que recién habían escuchado no me dejaba en paz, se refería al perdón. Perdonar setenta veces siete. Mientras empezaba a poner orden, sentía que se habría paso en mi una «justicia» diferente, según otra lógica. Era como si ese desorden externo tuviese que encontrar primero un espacio dentro de mí. El enojo y la desilusión que sentía hacia nuestro hijo fueron perdiendo fuerza. Cuando el chico se despertó, me preguntó por qué estaba tan feliz. No advirtiendo un reproche, después de un momento de silencio se abrió, había entrado en el círculo de la droga y pedía ayuda. Más tarde lo conversamos con el papá. Como una semilla, la Palabra empezaba a germinar. A partir se ese momento la situación de nuestro hijo y, como consecuencia, de toda la familia, cambió. (M. J. – Noruega) La lección de mi hija Como responsable de un importante sector de la empresa en la que trabajo, mi primer compromiso ha sido ayudar a los empleados a dar el máximo con competencia y precisión. Pero después de algunos años alguno prefirió que lo despidieran, otros se quejaban. ¿Qué era lo que no funcionaba? No entendía… un día mi hija más pequeña me dio una gran lección. Estaba ayudándola a hacer las tareas y revisando su cuaderno, le hice notar las correcciones de la maestra. Ella, entre lágrimas me dijo: “Papá, ¿tú ves sólo los errores? ¿No ves las páginas con la nota máxima?”. Era el mismo error que estaba cometiendo en el trabajo, ver sólo los defectos de los demás. Fue una luz. A partir de ese momento traté de ponerme otro par de lentes, los que da el amor. No fue fácil. En secreto empecé a contar cuántas veces lo lograba y cada día el número aumentaba. Un día uno de mis trabajadores me preguntó por qué estaba tan contento. Fue la ocasión para contarle de la lección que me había dado mi hija. (J. G. – Portugal) Marido alcohólico Con un marido adicto al alcohol, ya no había fiestas, aniversarios ni amistades. Y esto habría sido soportable si no hubiese tenido también exabruptos violentos. Vivíamos de su pensión (cuando lográramos que no se la gastara) y del trabajo de limpieza que yo hacía en el edificio. En algunos momentos seguir adelante en estas condiciones requería heroísmo. «¿Por qué no lo dejas?», me repetían mis parientes y hasta mis hijos, que se habían ido de la casa por culpa suya. Pero después habría terminado en la calle. Esto me hacía quedarme, era el padre de mis hijos. Durante un periodo en el que tuvo que someterse a una operación, la falta de alcohol lo ponía todavía más agitado. Sin embargo aceptó someterse a un tratamiento para desintoxicarse. Fue largo, pero empezó a dar algunos pasos. Me parecía ver a un niño que está aprendiendo a caminar. Después de algunos años volvió a sentir ganas de vivir, de gozar de su familia y también de su primer nieto. Nos encaminamos hacia el final de la vida. Puedo decir que sin la fe no habría tenido la fuerza de permanecer a su lado. (M. D. – Hungría)
a cargo de Stefania Tanesini
(Tomado de “Il Vangelo del Giorno” (El Evangelio del día), Città Nuova, año VII, n.1, enero-febrero 2021)
Diario de la Asamblea general / 3, del 26 de enero de 2021
Stefan Tobler
Silvina Chemen
Paula Luengo
Luigino Bruni
Diario de la Asamblea general /2, del 25 de enero de 2021 El segundo día de la Asamblea general de los Focolares comenzó con una oración ecuménica presentada por los participantes de distintas Iglesias. Se dirigieron a Jesús en su abandono en la cruz, para que ayude a cada uno a “crecer en la escucha recíproca”; enseñe a “acoger juntos al Espíritu Santo” y “el grito actual de la humanidad” para “ser instrumentos de unidad”. Después se procede a algunas votaciones -que ayer no pudieron hacerse- necesarias para adaptar el reglamento de la Asamblea a la modalidad telemática. Con un breve retraso, por lo tanto, se abre el retiro espiritual para todos los participantes que terminará el miércoles 27 de enero. Se trata de un momento constitutivo de la Asamblea como expresan los Estatutos del Movimiento, “para que los electores (…) sean dóciles a la gracia del Espíritu Santo”.
El primer tema elegido sitúa a los participantes frente a la que se podría definir como la clave de acceso a la mística de Chiara Lubich: un pacto solemne, que la fundadora hizo el 16 de julio de 1949 en las montañas, las Dolomitas (en el norte de Italia), con el escritor y político Igino Giordani, cofundador del Movimiento. En ese pacto -subraya el Padre Fabio Ciardi, Oblato de María Inmaculada y teólogo de la vida consagrada- Chiara Lubich e Igino Giordani habían pedido a Jesús, que habían recibido poco antes en la Eucaristía, que creara él mismo la unidad entre ellos, sirviéndose de su plena y recíproca disponibilidad a recibir al otro, a dar valor al pensamiento del otro y abrir así un espacio que permita al Espíritu Santo abrirse camino.
Vicky y Vic
Somjit, budista tailandés
Rassim, musulmán de Argelia
Oficina de Comunicación Focolares
Diario de la Asamblea general – 1, del 24 de enero de 2021 ¡Comenzó! A las 12.30 (hora de Italia) se dio inicio a la Asamblea general del Movimiento de los Focolares: muy esperada y preparada con gran participación de los miembros y adherentes de los Focolares en todo el mundo. Había sido convocada para principios de septiembre de 2020, pero tuvo que ser pospuesta por la pandemia y se está desarrollando de forma telemática. La elección de esta fecha es muy significativa: hace dos días, el 22 de enero, fecha del nacimiento de Chiara Lubich, se concluyó el año del centenario de la fundadora del Movimiento, mientras que hoy, 24 de enero, se recuerda el día en el que Chiara, en el 1944, “descubrió” la realidad de Jesús en su abandono en la cruz, ese Jesús que se habría convertido en el “esposo de su alma” y la habría empujado a “buscarlo” en los sufrimientos y dolores de la humanidad para construir relaciones y puentes de unidad. La Asamblea -según lo que está definido en su reglamento- es “el primero y más importante órgano de gobierno del Movimiento de los Focolares”. Cuenta con 360 participantes, de los cuales 139 por derecho, 181 elegidos y 40 invitados por la Presidente. Aun si están distribuidos en todo el mundo, los participantes ingresaron a la única gran sala virtual, conscientes de la solemnidad y la importancia de este momento, constructores del gozoso clima de familia mundial que se expresa también en la plataforma virtual.
Maria Voce, presidente saliente del Movimiento al terminar su segundo mandato, abrió la Asamblea con una invitación solemne. Instó a todos los participantes a ponerse en la actitud de Jesús en la última cena y lavar los pies los unos a los otros, que significa estar dispuestos “a escucharnos, a comprendernos, a ir más allá de las diferencias, para ser realmente hermanos, es decir verdaderamente iguales, con la máxima dignidad que nos da Jesús porque nos hace hijos de Dios y todos hermanos y hermanas”.
Siguiendo el reglamento, la sesión de hoy preveía distintas votaciones: la primera fue la elección de los dos moderadores que coordinarán y conducirán los trabajos. Fueron elegidos Uschi Schmitt, alemana, médica y Andrea Ponta, ingeniero italiano. Seguidamente fue aprobada la comisión electoral, compuesta por Danilo Virdis, Flavia Cerino, Waldery Hilgeman, Laura Bozzi e Suor Tiziana Merletti, todos residentes en Italia y por motivos legales presentes en la sede oficial de la Asamblea, el Centro internacional de los Focolares en Rocca di Papa (Italia). En las siguientes votaciones la Asamblea aprobó el programa de estos días y una modificación a los Estatutos generales del Movimiento que reduce el número mínimo de consejeros a elegir de 30 a 20. Mañana comenzarán tres días de retiro espiritual para los participantes.
Oficina de Comunicación Focolares
22 de enero de 2020-22 de enero de 2021: hoy se concluye el año del Centenario del nacimiento de Chiara Lubich, 365 días distintos de los que estaba previsto, en plena pandemia, pero que han abierto caminos y perspectivas nuevas. “Celebrar para encontrar” ha sido el lema elegido para el Centenario del nacimiento de Chiara Lubich (1920-2020), fundadora de los Focolares. Inaugurándolo, hace un año, se habían planificado muchas iniciativas en el mundo, sin imaginar que la pandemia habría marcado un antes y un después también para el Centenario, pero sin detener, todo lo contrario, en algunos casos casi potenciando, las posibilidades de “encontrar” a Chiara. Pero empecemos desde el inicio, el 7 de diciembre de 2019 el Centenario se abrió con la inauguración de la Exposición “Chiara Lubich Ciudad Mundo” en las Galerías de Trento (Italia) su ciudad natal. Una exposición patrocinada por el Presidente de la República italiana, promovida por la Fundación Museo histórico del trentino en colaboración con el Centro Chiara Lubich. Ese día la Provincia autónoma de Trento quiso distinguir a María Voce, Presidente de los Focolares, con el “Sigilo de San Wenceslao”. Al día siguiente fue inaugurada también una sección de la exposición en Tonadico, en la Alcaldía de Primiero San Martino di Castrozza (Italia) dedicada especialmente a los años 1949-1959. Las semanas siguientes, en varios países del mundo, la exposición se fue multiplicando, repitiendo la italiana, pero enriqueciéndose con peculiaridades locales. En Nairobi (Kenia) el itinerario de la exposición puso de relieve el desarrollo de los Focolares en tierras africanas; en Jerusalén una sección fue dedicada a la relación entre Lubich y esta ciudad y su sueño que hoy se está concretando de un centro de espiritualidad, estudio, diálogo y formación a la unidad. Chiara Lubich nació el 22 de enero y precisamente ese día en el 2020 fue en Roma donde se celebró el Centenario con una velada dedicada a ella veinte años después de que la capital italiana le otorgara la ciudadanía honoraria. “A partir de ese 22 de enero de 2000 Chiara -dijo el exalcalde Francesco Rutelli- asumió el compromiso de dedicarse más y mejor a Roma, encarnando el amor recíproco por doquier. No hay nada más bello que hacer nuestras esas palabras suyas hoy”. Algunos días más tarde el Presidente de la República italiana Sergio Mattarella participó en el Centro Mariápolis “Chiara Lubich” de Cadine (Trento) en un evento del Centenario en el cual participaron, además de la Presidente del Movimiento María Voce, del Co-presidente Jesús Morán y de las autoridades locales, más de 900 personas. La transmisión vía streaming llegó a más de 20 mil visualizaciones. En su intervención Matarella identificó especialmente en la fraternidad, aplicada en la acción civil y política, la característica distintiva de la espiritualidad de Chiara Lubich. Trento fue también el marco del Congreso internacional “Un Carisma al servicio de la Iglesia y de la humanidad” en el que participaron 7 Cardenales y 137 Obispos, amigos del Movimiento de los Focolares de 50 países que después y prosiguió en la ciudadela internacional de los Focolares de Loppiano (Incisa Figline in Valdarno – Italia). En su mensaje el Papa Francisco se alegró mucho por este encuentro expresando “su gratitud a Dios por el don del carisma de la unidad a través del testimonio y de la enseñanza (…) de Chiara Lubich”. Los mismos días en el Centro Mariápolis de Castel Gandolfo (Italia) más de 400 entre religiosos/as, consagrados/as y laicos católicos -con una representación ortodoxa- provenientes de casi 100 familias religiosas y 33 países, fueron protagonistas de otro evento vinculado al Centenario: “Carismas en comunión: la profecía de Chiara Lubich”, un taller de diálogo entre distintos carismas para favorecer la comunión entre las familias religiosas mediante la espiritualidad de la unidad. Después la pandemia empezó a difundirse por el mundo. Y también para el Centenario llegaron los cambios: algunos eventos fueron cancelados, otros migraron a la web. La exposición de Trento se enriqueció con un itinerario virtual, la que estaba prevista en Brasil, gracias a un equipo intergeneracional se transformó en un itinerario dedicado a Chiara Lubich al que se podía acceder a través de las redes sociales de @focolaresbrasil (Facebook, Instagram y Youtube). Las iniciativas por Internet le permitieron a muchas más personas de las que lo habrían hecho presencialmente visitar las exposiciones de Lubich. Otros eventos en cambio se logran llevar adelante, como la emisión de dos estampillas dedicadas a Chiara Lubich en la República Checa o el Concurso para las escuelas italianas sobre el tema: “Una ciudad no basta” promovido por el Centro Chiara Lubich/New Humanity y por la Fundación del Museo histórico del Trentino, en colaboración con el Ministerio de Educación, la Universidad y el Departamento de Investigación, en donde participaron ___ escuelas italianas. El 16 de febrero de 2021 tendrá lugar la premiación a través de la web. El confinamiento obligó a que durante algunos períodos del 2020 se tuviera que cerrar el Centro Internacional de los Focolares de Rocca di Papa (Italia). Pero desde hace algunos meses son posibles las visitas respetando las normas sanitarias vigentes. Entre las de mayor relieve está la de su Santidad el Patriarca de Constantinopla Bartolomé I, quien vino a rezar a la tumba de Chiara Lubich. También varias novedades editoriales están vinculadas al Centenario y a sus eventos para presentarlas y promoverlas, presenciales y on line. Una nueva edición -la vigesimonovena- del libro “Meditaciones” de Chiara Lubich; dos textos de la colección “Obras de Chiara Lubich”, editada por Cittá Nuova, “Conversaciones. En conexión telefónica” a cargo de Michel Vandeleene y “Discursos en el ámbito civil y eclesial” a cargo de Vera Araújo; la nueva bibliografía de Chiara Lubich, “El camino de la unidad, entre historia y profecía” escrita por Maurizio Gentilini. La edición en inglés de este último texto fue presentada en el Consulado italiano de Mumbai, en India, en un evento transmitido via streaming dedicado al Centenario de Chiara Lubich. Estaba presente la cónsul italiana de Mumbai Stefania Constanza, Vinu Aram, directora del Shanti Ashram de Coimbatore y Maurizio Gentilini. En cambio se eligió una modalidad “mixta” -una parte presencial en Trento y una parte on line- para el encuentro de investigación “Chiara Lubich en diálogo con el mundo. Un enfoque lingüístico, filológico y literario de sus escritos” realizado por el Centro Chiara Lubich y el Grupo de estudio e investigación de la Lingüística, Filología y Literatura de la Escuela Abbá (Centro de estudios interdisciplinarios del Movimiento de los Focolares) con expertos de varios países. Algunas de las intervenciones están disponibles en el espacio “Documentos Congresos” del sitio del Centro Chiara Lubich. Casi en la clausura del centenario, el 3 de enero de 2021, RAI Uno, la primera red televisiva italiana transmitió la película “Chiara Lubich. “El Amor lo vence todo” dirigida por Giacomo Campiotti. La Lubich fue interpretada por Cristiana Capotondi. Realizada por Rai Fiction y Eliseo Multimedia ha sido visto por 5 millones 641 espectadores. Muchos han podido verlo desde otros países del mundo gracias a RaiPlay y Rai Italia. Y hoy, 22 de enero de 2021, se cierra el Centenario. Pero -nos preguntamos- ¿realmente se concluye? Sobre esto habló recientemente la Presidente de los Focolares María Voce explicando que “el encuentro vivo con Chiara no se puede limitar a 100 años, ni tampoco a un año centenario. Éste no ha terminado, proseguirá mientras en la tierra haya alguien de la familia de Chiara que siga haciendo encuentros para dar testimonio de que Chiara está viva y que el carisma de Chiara tiene algo que decir al mundo”.
Anna Lisa Innocenti