Movimiento de los Focolares

La parroquia, testimonio del amor de Dios

Abr 13, 2010

Más de 1500 los inscritos en el Convenio del Movimiento parroquial y diocesano

1.544 los participantes, entre los cuales 140 provenientes de países extra europeos. Son estas las “cifras” del convenio del Movimiento parroquial y diocesano que se llevará a cabo del 16 al 18 de abril en Castel Gandolfo (Roma). Nacido en 1966, gracias al impulso del Papa Pablo VI, el Movimiento está actualmente presente en más de 3.000 parroquias de 41 naciones, en los 5 continentes. Se desarrolla basado en la conciencia de que la espiritualidad de los Focolares no sólo puede renovar la vida de las personas individualmente, sino también hacer que la comunidad vuelva a florecer, y por lo tanto también las comunidades parroquiales y diocesanas, según la vida de comunión que caracterizaba las primeras comunidades cristianas.

Se escogió como título de reflexión para el convenio de este año: “La parroquia, testimonio del amor de Dios”. Palabras – explican los promotores de la iniciativa – que responden “a una realidad que ha subrayado fuertemente el S. Padre con la Encíclica Deus Caritas est”. En su primera carta encíclica, Benedicto XVI escribía: “En la liturgia de la Iglesia, en su oración, en la comunidad viva de los creyentes, nosotros experimentamos el amor de Dios, percibimos su presencia y aprendemos de este modo también a reconocerla en nuestra cotidianidad. Él nos ha amado de primero y sigue siendo el primero en amarnos; por esto, también nosotros podemos responder con el amor. Dios no nos ordena un sentimiento que nosotros no podemos suscitar en nosotros mismos. Él nos ama, nos hace ver y experimentar su amor y, ante esta «iniciativa» de Dios, puede hacer florecer también en nosotros el amor como respuesta”.

El convenio de Castel Gandolfo se lleva a cabo en un momento crucial para la vida de la Iglesia y para sus comunidades esparcidas en el mundo. Estarán presentes también personas provenientes de Brasil, Argentina, Colombia, Uruguay, Canadá, África del Sur, Corea, Filipinas. “Benedicto XVI – afirman los organizadores del convenio – invita a anunciar a todos que Dios nos ama. Es ésta la chisma inspiradora del Movimiento de los Focolares. Es importante que en nuestras comunidades parroquiales se descubra y se reencuentre el rostro de Dios amor, de manera tal que se conviertan en testigos auténticos del amor de Dios, sea porque Dios reina en medio de ellas, sea porque desbordan el amor sobre todos”. En el programa se alternarán meditaciones de Chiara Lubich sobre Dios Amor y experiencias de comunidades animadas por este espíritu.

Inmediatamente después del convenio (del 18 al 22) tendrá lugar una escuela de profundización de la espiritualidad de la unidad y de su irradiación en las comunidades parroquiales para los animadores del Movimiento Parroquial que provienen de Asia, África y América.

 

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