Movimiento de los Focolares

Perú, desde hace dos meses bajo el agua

Abr 1, 2017

Una emergencia esperada para el año pasado y que estalló ahora. Lluvias torrenciales nunca vistas. Un centenar de muertos y desaparecidos, miles de casas destruidas. La solidaridad gana.

Photo Ministry for Environment PeruFrente al «desastre ambiental que afecta a Perú (…) creemos en el Amor de Dios rezando juntos por las víctimas y confiando a todos los que sufren por causa de los numerosos desastres y dificultades». Así, escribe María Voce, presidente de los Focolares, a la comunidad del Movimiento del país sudamericano que sufre violentas tormentas e inundaciones. Días antes el Papa, durante el Angelus, rezó y aseguró su cercanía a la población afectada. «El fenómeno conocido como del “Niño costero” – escriben desde Perú-  produjo un incremento de 10º de la temperatura del mar del Pacífico, que normalmente es frío. Unido a una masa de aire caliente procedente del Caribe causó una condensación de enormes masas de vapor sobre los Andes, en la zona central de Perú, provocando lluvias continuas, y también verdaderas tempestades y violentos temporales. Una enorme masa de agua inundó las ciudades de la costa. Las cifras hablan hoy de un  centenar de muertos y desaparecidos, más de 200 heridos, casi 800 mil son las personas que perdieron su casa o sufrieron daños. El Gobierno no estaba preparado para semejante catástrofe, tardando en sus primeras intervenciones, pero ahora está en plena actividad». «Hay que registrar la magnífica reacción de las instituciones, las empresas públicas y privadas y sobre todo, la respuesta de la gente “común”- continúan.  No terminaríamos de escribir páginas de verdadera solidaridad y caridad que brotan del corazón del hombre en momentos como éstos. Mientras tanto naciones vecinas, y no tanto, enviaron auxilios: Ecuador (que fue en parte afectado por eventos similares en el sur del País), Colombia, Chile, Bolivia, Argentina, Paraguay, Brasil, Uruguay, Estados Unidos, y ¡más de 100 mil dólares llegaron del Papa! Photo_Notiminuto24.3.17Los municipios, los supermercados, las parroquias, las instituciones de distintas iglesias cristianas y de otras religiones, formaron centros de acopio de artículos de primera necesidad, alimentos no perecederos, productos de limpieza, frazadas, etc. También los Focolares abrieron un Centro de Colecta en Lima. «Algunas familias de la comunidad- nos dicen- sufrieron inundaciones, sobre todo en el norte del país. En particular, una comunidad muy pobre que vive en los alrededores de Lima, sufrió lluvias intensas para las cuales no estaban preparados, ya que desde hace 60 años no llovía en ese lugar. Las religiosas de una comunidad cercana, que ayudan en un proyecto nuestro de adopciones, nos dicen que muchos de nuestros niños quedaron sin techo, pero que están todos vivos…» En todo el país hay poca electricidad y escasez de agua. «Un hombre de 70 años sufrió una isquemia cerebral, pero no fue posible llevarlo al hospital que quedaba a casi 50 km…. Es impresionante la caridad entre los miembros que genera enseguida también la reciprocidad. Hemos hecho llegar nuestra ayuda a una familia de Chulucanas a quien se le dañó el techo y las paredes de la casa, pero supimos que con otras familias de la parroquia y del Movimiento se pusieron a ayudar a otros con mayores necesidades»      

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