Se repiten los enfrentamientos y se reanudan las tensiones. El 22 de septiembre y el 1º de octubre el ejército reprimió las manifestaciones pacíficas, causando muertes y heridos entre los manifestantes que pedían la independencia de las regiones angloparlantes. El mismo día, en las regiones del Noroeste y del Sudoeste (habitadas por la minoría inglesa, que es el 20% de la población de Camerún) fue nuevamente disturbada la conexión a Internet.
El “problema anglófono” tiene raíces antiguas. En octubre de 2016, la población de lengua inglesa comenzó a organizar protestas contra su progresiva marginación. Después de meses de tensiones y acusaciones de discriminación, continuaron duras represiones y acciones de verdadera y continua guerrilla.
El Padre Antonio Mascia escribe desde Fontem: «Estamos viviendo un momento delicado e incierto desde el punto de vista socio político, y no sabemos hacia donde podrá desembocar. En varias ciudades, soldados del ejército dispararon contra la multitud que manifestaba pacíficamente y arrestaron a muchas personas. Contamos mucho con sus oraciones».
La nostra unità e preghiera per questo popolo a noi molto caro. Che la Madonna aiuti a trovare strade per la pace.