En Aquisgrana el Movimiento de los Focolares de Alemania entregó el Premio Klaus Hemmerle al Arzobispo Anastasios de Tirana, Albania.

El rostro del dulce anciano con barba blanca, que el viernes 14 de febrero recibió en Aquisgrana (Alemania) el “Premio Klaus Hemmerle”, que le otorgó el Movimiento de los Focolares de Alemania, no es conocido en los titulares de los periódicos. Pero Anastasios Yannoulatos, Arzobispo greco-ortodoxo de Tirana (Albania) es una personalidad bien conocida y estimada tanto a nivel eclesial internacional como a nivel político, sobre todo en Europa oriental.

En su discurso de agradecimiento auguró una “coexistencia pacífica en un mundo multi-religioso”. Declaró que le había fascinado una frase de Albert Einstein sobre la fuerza del amor: “Cada uno lleva e sí un generador de amor, pequeño pero eficiente, cuya energía sólo necesita ser liberada, porque el amor es la quinta esencia de la vida”. Y recordó que fue precisamente el amor el que impulsó al obispo Klaus Hemmerle (1929 – 1994) a comprometerse tenazmente por la paz y la reconciliación del mundo. Un compromiso que caracteriza también la vida y la acción del Metropolita Anastasios.

Mons. Helmut Dieser, como actual Obispo de Aquisgrana y uno de los sucesores de Klaus Hemmerle, le dio la bienvenida a los 300 huéspedes reunidos en la Catedral Imperial en la ciudad de Carlo Magno, presentando al premiado como un “pionero de la fe y del ecumenismo”. Lo confirmó en Metropolita Augoustinos Lambardakis, presidente de la Conferencia Episcopal ortodoxa de Alemania, subrayando la estima de la que goza el Metropolita Anastasios en el mundo ortodoxo, donde su palabra es escuchada a pesar de las tensiones entre las distintas Iglesias autocéfalas.

Maria Voce, Presidente de los Focolares, también subrayó en su mensaje el incansable compromiso del Metropolita Anastasios con el diálogo entre cristianos y musulmanes, agradeciéndole su capacidad de suscitar comunión, fraternidad y solidaridad.

En el panegírico el card. Kurt Koch, Presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, esbozó el itinerario del Metropolita Anastasios, que lo ha llevado de Grecia a Albania, pasando por África, donde demostró cómo “el diálogo interreligioso y el compromiso misionero no deben estar en contraste”. Y subrayó además cómo desde 1992 se comprometió, con prudencia, a reconstruir y reforzar la Iglesia Ortodoxa en Albania contribuyendo a la disminución de las fuertes tensiones en los Balcanes.

Con el “Premio Klaus Hemmerle” el Movimiento de los Focolares en Alemania quiere honrar cada dos años a una personalidad autorizada en el campo del diálogo entre las Iglesias, las religiones y las convicciones ideológicas. Entre los premiados están el expresidente de la Federación Luterana Mundial, el obispo emérito Christian Krause (2006); el Patriarca ecuménico de Constantinopla Bartolomé I (2008); la doctora musulmana Noorjehan Abdul Majid de Mozambique (2016) y el Rabino alemán Henry Brandt de Augsburg en Alemania (2018).

Andrea Fleming

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