Sep 24, 2021 | Sin categorizar
Mensajes del Cardenal Kurt Koch, Presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, Justin Welby, Primado de la Iglesia Anglicana, y Bartolomé I, Patriarca Ecuménico de Constantinopla, a los Obispos de varias Iglesias amigas del Movimiento de los Focolares durante la conferencia “Atrévete a ser uno”. “Permaneced en mí y yo en vosotros” (Jn 15, 4). Una imagen elocuente es la de la vid y los sarmientos que acompaña la invitación de Jesús a los suyos. Un llamado a “quedarse” para dar frutos, el mismo que impulsó el congreso internacional de los obispos amigos de los Focolares, de diferentes Iglesias cristianas, en estos días, en Castel Gandolfo con el título: “Atreverse a ser uno. El don de la unidad en un mundo dividido”. Recibir este don, en el contexto del compromiso ecuménico “forma parte de la misión de los obispos de estar al servicio de la unidad, pero no sólo de la unidad de la propia Iglesia, sino de la unidad de todos los bautizados, en el nombre del Dios Trino. El bautismo nos une a Cristo y nos hace miembros de su único cuerpo”, dijo el cardenal Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los cristianos, en su mensaje a este encuentro. Animando a los obispos de las Iglesias reunidas a recorrer el camino en el amor recíproco para afrontar los desafíos del mundo, subraya el papel fundamental que juega la oración: “los cristianos no somos capaces de lograr la unidad con nuestras propias fuerzas. Los cristianos somos capaces de producir divisiones, como lo demuestra la historia y, lamentablemente, también el presente. La unidad, por otra parte, solo se nos puede dar como un regalo. (…) Debemos reflexionar siempre sobre el hecho de que Jesús no ordenó la unidad a sus discípulos, ni se las pidió, sino que ha rezado por la unidad”. Apuntar a ser una sola cosa en Él y con el hermano es convertirse en una llama viva, un faro, una fuente de luz que atrae a quien está al lado. Este es el verdadero significado de este encuentro: dar luz al mundo. Una esperanza que también encontramos en las palabras del reverendo y honorable Justin Welby, arzobispo de Canterbury: “‘Atreverse a ser Uno’ toca la vida de muchos cristianos, animándolos también a crecer en comunión mutua. (…) Nunca antes el mundo ha necesitado la unidad de los cristianos como hoy. En tiempos de crisis ambiental y de pandemia mundial, sin mencionar los múltiples desafíos económicos y políticos que enfrenta el mundo, es cada vez más claro que nadie está a salvo hasta que todos estén a salvo, y que nuestras acciones realmente se influencian entre sí. La unidad entre los cristianos puede ser el cemento que consolida la solidaridad de los seres humanos, convirtiéndose así en el fundamento de soluciones duraderas”. Para que “todos sean uno”, por tanto, hay que tomar decisiones concretas, vivir el diálogo, cuidar del otro, reconociéndolo como hermano. El mensaje de saludo de Su santidad Bartolomé, arzobispo de Constantinopla-Nueva Roma, Patriarca Ecuménico, a los Obispos amigos de los Focolares, traza un rumbo que, gracias a las páginas del Evangelio de Mateo (Mt 14,24-33) da esperanza y consuelo: “En el transcurso de la historia, la barca de los discípulos de Jesús encuentra vientos y tormentas contrarias: e incluso entre los propios discípulos de Jesús se desatan a menudo oposiciones, enemistades, persecuciones. (…) En la parábola, Jesús camina sobre el agua yendo hacia los discípulos (…): “Ánimo, soy yo, no teman”. (…) Si tenemos valor – prosigue – entonces no tendremos miedo de dialogar con los demás, porque todos somos de Cristo (…). Cuando ya no tengamos miedo, no necesitaremos coraje, porque seremos uno en el Uno, reunidos en torno a un banquete con el Pan y el Vino del que nos dirá “Soy yo”.
Maria Grazia Berretta
Sep 24, 2021 | Sin categorizar
Streaming internacional en directo Sábado 25 de septiembre de 2021 traducido a seis idiomas para profundizar el curso de formación – del Movimiento de los Focolares – sobre la educación en sexualidad y afectividad, para un desarrollo armónico de la persona en todas sus dimensiones, dirigido a niños, adolescentes y padres. “Up2Me me ha dejado una mayor conciencia de quién soy, en mi esfera emocional y física y en cuanto al proyecto de vida que me gustaría construir, así como la importancia de las relaciones con los demás”. “El programa me ha ayudado especialmente a relacionarme con las chicas. Me enseñó a respetarlas. Estoy más dispuesto a ayudar en la casa y estoy feliz de colaborar con mi madre y mi hermana sin sentirme inferior”. “Esta experiencia me permitió hablar con chicos de mi edad sobre temas que son importantes para nosotros, pude expresarme libremente, sin miedo a ser juzgado”. Estos son algunos de los testimonios de cientos de chicos que en diversas partes del mundo pudieron participar en Up2Me, el curso de formación en afectividad y educación sexual, que tiene como objetivo el desarrollo armónico de la persona en todas sus dimensiones. El programa se basa en la “persona-relación”. El estar en relación es la esencia de la persona humana, el fundamento ontológico para promover un crecimiento integral que ve a los niños y jóvenes, según las características de su edad, protagonistas de opciones conscientes y capaces de vivir relaciones positivas.
Sábado 25 de septiembre de 2021 a las 14.00 h. (hora italiana) será una oportunidad, para quienes lo deseen, para conocer un poco más a través de una transmisión en vivo en este este link, traducido a seis idiomas simultáneamente: inglés, francés, español, holandés, portugués, italiano. Nacido en el contexto del Movimiento de los Focolares, Up2Me se ha desarrollado en veintiocho países y responde a una clara solicitud de niños y adolescentes que se enfrentan a grandes temas (vida, salud, sexualidad, estilos de vida modernos, emociones, opciones para su futuro…) y no disponen de las herramientas adecuadas. Los padres a menudo no se sienten preparados para responder a estos requerimientos. En consecuencia, las redes sociales se convierten en la fuente principal, sin formar al valor de la persona en su conjunto. “Estas cosas nunca las he encontrado en Internet” fue el “estallido” de una chica al final de una sesión de Up2Me sobre el conocimiento de la belleza y delicadeza de su cuerpo. Up2Me pretende dar respuesta a estos retos y ayudar a los padres en esta fase de acompañar a los niños y adolescentes en un itinerario de formación integral. ¿Cuáles son los principales temas que se abordan? Para los niños: emociones; corporeidad; amistad; vida y muerte… Para preadolescentes y adolescentes: la belleza y delicadeza del propio cuerpo; la maravilla del nacimiento de la vida; respeto por la vida humana y el planeta; higiene personal; aborto; anticoncepción; técnicas de reproducción asistida; adicciones; pornografía; estudios de género; estilos de vida saludables (deporte, nutrición, descanso…); oportunidades y problemas de Internet; importancia del aspecto espiritual para el ser humano; medios de comunicación; bullying; amistad; emociones; enamoramiento; el proyecto de vida… Para padres de preadolescentes y adolescentes: educar en tiempos de crisis; autoridad; comunicar bien; adolescencia, edad de oportunidades; cómo hablar con los niños sobre sexualidad, adicciones (sustancias, pornografía, smartphones …), estilos de vida (alcohol, tabaquismo, nutrición…), las redes… El curso de formación también está dirigido a quienes quieran convertirse en “tutor Up2Me” a través de la participación en una escuela internacional con formación teórica y experimentación práctica. Up2Me está coordinado internacionalmente por un equipo central conectado con varios equipos locales. Cuenta con una comisión científica multidisciplinaria internacional, con profesores de psicología, pedagogía, medicina, teología y derecho.
Lorenzo Russo
Sep 23, 2021 | Sin categorizar
Ha empezado hoy el encuentro de los Obispos de distintas Iglesias amigos de los Focolares. El sábado por la mañana serán recibidos en audiencia por el Papa Francisco. “Debemos tener el coraje de arriesgar”, “Los testimonios nos dan la fuerza para ser uno”, “Hemos asistido a una experiencia de ecumenismo vivido”; he allí algunas impresiones espontáneas de los 181 obispos de 70 Iglesias y 45 países reunidos en el primer día del encuentro de Obispos de varias Iglesias amigos del Movimiento de los Focolares.
Brendan Leahy, obispo católico de Irlanda y Matti Repo, obispo luterano de Finlandia, moderadores del encuentro, tras haber saludado a los participantes, en su mayoría conectados a través de una conexión web, con 15 traducciones simultáneas, le dieron la palabra a Margaret Karram, Presidente de los Focolares que, después de darles la bienvenida, dijo: “Mi deseo –que es también una certeza– es que este encuentro conduzca a reforzar entre todos los aquí reunidos esa maravillosa realidad de escucha y acogida recíprocas, en donde el Espíritu Santo se vuelve el protagonista de nuestras relaciones. Sólo él es capaz de producir la renovación en la realidad eclesial y social, él sabe abrir el camino y hacer que todo proceso de reconciliación sea constructivo. La presencia de ustedes en este Congreso es de por sí un signo de los tiempos, revela el anhelo de cada uno de ustedes hacia la unidad, un horizonte que no está tan lejos porque la vida en común del Evangelio lo hace tangible entre hermanos”.
El Obispo Christian Krause, ex Presidente de la Federación Luterana Mundial, tras haber explicado la génesis del encuentro hizo una mención al título: “’Dare to be one’ (Atreverse a ser uno). Es un humilde aporte a un diálogo y a una iniciativa en curso para compartir, para entenderse y para mantener entre nosotros el mensaje de Jesús en el camino hacia la paz”. Luego invitó a todos a no fijarse en mantener su poder institucional, sino “a abrir las puertas a la compartición del carisma de la unidad y de la hospitalidad eucarística de los hijos de Dios. Por ello, una vez más – por amor al cielo – ¡atrévanse a ser uno!”. Después de un momento de encuentro por grupos lingüísticos para conocerse e intercambiar las primeras impresiones se profundizó la vida de la Palabra de Dios en la espiritualidad de los Focolares. Un trozo de Chiara Lubich leído por la focolarina anglicana Sarah Finch fue enriquecido luego por las varias intervenciones del obispo luterano Dr. Matti Repo, de la Dra. Mervat Kelly, focolarina siro-ortodoxa y de la Dra. Sandra Ferreira, focolarina católica. A continuación, los obispos donaron sus testimonios, que hacían visible lo que se había dicho. Una sucesión de experiencias vividas en primera persona que demuestran el esfuerzo de comprometerse para construir la unidad entre las distintas Iglesias. Conmovedoras, concretas en las distintas situaciones pastorales. Resuenan las palabras de Chiara Lubich que se habían escuchado antes: “Un fruto es que la Palabra nos hace uno: provoca la unidad. Como en las plantas con el injerto, dos ramas descortezadas, por el contacto vivo de las dos partes vivas, se vuelven una sola cosa, de la misma manera dos almas descortezadas de lo humano mediante la Palabra de Vida vivida, se convierten mejor en una sola cosa”. Cuatro horas que incluyeron a personas de todo el mundo, de Australia, EE.UU., Brasil, Ucrania, Madagascar, países europeos y asiáticos, con la variedad de husos horarios, condiciones políticas y sociales. Mañana, 24 de septiembre, la segunda jornada y el sábado 25 serán recibidos en Audiencia por el Papa Francisco.
Carlos Mana
Sep 22, 2021 | Sin categorizar
Sinodalidad, ecumenismo y paz son los temas que afrontarán los 170 obispos de 44 países del mundo y de70 Iglesias y comunidades eclesiales que se reunirán del 23 al 25 de septiembre próximos en Castel Gandolfo (Italia). El Papa Francisco los recibirá en audiencia el 25 de septiembre. “Atreverse a ser uno. El coraje de la unidad en un mundo dividido” es el título del próximo congreso internacional de Obispos amigos de los Focolares, pertenecientes a distintas Iglesias cristianas. Un título que expresa bien la urgencia que los obispos sienten en estos tiempos en que la pandemia ha agravado rupturas, violencias y formas de soledad viejas y nuevas en todo el mundo. “A ello hay que agregarle la injusta distribución de la riqueza y la pobreza, la dramática divergencia entre libertad y opresión, las crecientes amenazas del ambiente natural. Todo ello nos ha impulsado a formular con pasión este llamado: ‘¡Atrévanse a ser uno!’. Lo dirigimos a nosotros mismos y a nuestros hermanos obispos para que lo hagan propio en sus respectivas Iglesias y comunidades”. Con estas palabras el Obispo Christian Krause, ex – Presidente de la Federación Mundial Luterana, uno de los ideadores de este evento, sintetiza el significado del Congreso. “Esta cita está promovida por la red mundial de Obispos de distintas Iglesias amigos de los Focolares –explica Mons. Brendan Leahy, obispo católico de Limerick (Irlanda), que es el coordinador– que se encuentran regularmente desde hace 38 años para profundizar la comunión entre ellos sobre la base de la espiritualidad de la unidad de los Focolares. El objetivo es estar unidos en Cristo y si está la presencia de Jesús entre nosotros, el viaje hacia la unidad está asegurado”. El encuentro se llevará cabo con una modalidad mixta: 10 obispos estarán físicamente presentes en Castel Gandolfo, mientras que otros 170 seguirán el congreso online, solos o reunidos en pequeños grupos, en el respeto de las reglas sanitarias. El 25 de septiembre próximo serán recibidos en audiencia por el Papa Francisco quien, por streaming, también llegará a todos los participantes conectados en forma remota. Intervendrán en los trabajos: Margaret Karram, Presidente del Movimiento de los Focolares y Jesús Morán, Co-Presidente del Movimiento; Nelson Luiz Leite Campos, Obispo emérito de la Iglesia Metodista de Brasil; Stefan Tobler, teólogo de la Iglesia Reformada Suiza, profesor de teología evangélica en la Universidad Lucian Blaga de Sibiu (Rumania); Piero Coda, teólogo católico, miembro de la Comisión Mixta Internacional para el diálogo teológico entre la Iglesia Católica y la Iglesia Ortodoxa, docente en el Instituto Universitario Sophia de Loppiano (Italia). El programa prevé profundizaciones sobre la espiritualidad de la unidad de Chiara Lubich, testimonios de vida presentados por obispos de distintas Iglesias que tendrán como tema la Palabra de Dios, el misterio de Jesús crucificado, abandonado y resucitado, el carisma de la unidad y su encarnación en las llagas de la humanidad contemporánea. El momento central y sin duda el más característico de los congresos de Obispos amigos de los Focolares es el “Pacto de amor recíproco”. Éste consiste en un compromiso solemne a amarse mutuamente teniendo como base la invitación de Jesús en el “mandamiento nuevo” (cf. Juan 15,17). Los obispos se comprometerán, a continuación, a recibir los dones ofrecidos por la Iglesia del otro y a compartir sus dolores y sus alegrías, sintiéndolos propios para que cada vez más se acerque y sea visible el proceso de unidad entre las Iglesias. Obispos amigos de los Focolares: desde la década de 1980 hasta nuestros días. En 1982 Klaus Hemmerle, obispo católico de Aquisgrán (Alemania) empezó a promover encuentros de obispos pertenecientes a distintas Iglesias. Ya desde la década de 1960 numerosos obispos, identificándose con la espiritualidad de los Focolares, se habían comprometido a caminar juntos hacia la unidad y a promoverla a todos los niveles. Pero las palabras del entonces Papa Juan Pablo II a un grupo de obispos católicos amigos de los Focolares, con ocasión de una audiencia, representaron un ulterior impulso a la realización de encuentros periódicos con obispos de diferentes Iglesias. Hoy estos encuentros se desarrollan periódicamente en lugares símbolo para el diálogo ecuménico. Un itinerario no sólo espiritual, sino también ocasión concreta para los obispos de conocerse y acogerse los unos con los otros ofreciéndoles a todos la posibilidad de hacer una experiencia de vida cristiana con las distintas Iglesias.
Oficina Comunicación Focolares
Stefania Tanesini
Sep 22, 2021 | Sin categorizar
El pasado 10 de septiembre la Alcaldía de Grottaferrata (Roma-Italia) otorgó a Chiara Lubich la ciudadanía honoraria póstuma, se trata de un reconocimiento que renueva en forma visible la amistad entre la fundadora del Movimiento de los Focolares y este territorio, que ella quiso tanto, donde surgieron las primeras estructuras del Movimiento. La placa la recogió Magaret Karram, la actual Presidente. Una “ciudad madre”, un lugar donde “recoger en un único pueblo a personas de las distintas vocaciones”. La de Chiara Lubich es una inspiración que la impulsó a reconocer en los Castillos Romanos y, específicamente, en la ciudad de Grottaferrata (Roma-Italia), el terreno fértil donde había florecido una nueva casa del Movimiento de los Focolares, después del de Trento su ciudad natal, y de Roma. En Grottaferrata, en 1959, se inauguró una sala de encuentros en la Villa María Assunta, una bellísima casa que fue puesta a disposición del Movimiento de los Focolares por la marquesa Rossignani Pacelli, hermana del Papa Pio XII. Una casa que poco después se convirtió en el corazón de la Obra, de la viva y entusiasta “ciudadela de María”. Chiara Lubich, si bien seguía viviendo en Roma, transcurrió algunos períodos en Grottaferrata en el lapso de tiempo que va de 1956 a 1964.
Son imágenes de una historia conducida por Dios y recordadas por la Presidente del Movimiento de los Focolares, Margaret Karram, con motivo de la ceremonia de entrega de la ciudadanía honoraria póstuma de Grottaferrata a Chiara Lubich, que tuvo lugar el pasado 10 de septiembre. Estaban presentes en el evento: Luciano Andreotti, Alcalde de Grottaferrata, Angelo Viticchiè, ex-alcalde de la ciudad, Sergio Lubich, sobrino de Chiara y Veronica Cimmino, Alcaldesa de Rocca di Papa. Como conclusión se proyectó la película “Chiara Lubich: el Amor vence todo”. Estaban presentes también el director de cine Giacomo Campiotti, el productor artístico Saverio D’Ercole, el productor de la película Luca Barbareschi y la actriz Valentina Ghelfi. La cita, que ya estaba programada en el 2004 y que fue postergada debido a la enfermedad y a la muerte de Chiara, tuvo como protagonistas al sentido de comunidad y de fraternidad. Estos valores, radicados en la vida del Movimiento, pueden llegar a ser, como lo recordó el Alcalde de Grottaferrata, el único “instrumento de comunión” también dentro de la vida pública de una ciudad, donde la “búsqueda del bien común” sigue siendo el objetivo principal.
Lo que parecía un arduo camino encuentra su confirmación en la “unidad a través del amor” y en las palabras inéditas que Chiara habría querido donar recibiendo este reconocimiento, y que regresan a nosotros gracias a la voz de Margaret Karram: “Quisiera ofrecer este Arte de Amar a la atención de todos los presentes en especial a los ciudadanos de Grottaferrata para que, si lo desean, puedan ayudarnos a vivirla y difundirla por doquier”. Es una herencia de la que todos disponemos y de la que cada uno, desde su pequeño espacio, se convierte en custodio, ayer y hoy; una experiencia que, como concluyó la Presidente del Movimiento de los Focolares, “no se limita a los confines de nuestra ciudad, sino que se extiende a través de las relaciones de colaboración fraterna también con otras alcaldías, para hacer crecer y hacer que sea cada vez más luminosa la red de las ciudades por la fraternidad”.
Maria Grazia Berretta
Sep 20, 2021 | Sin categorizar
El 17 de septiembre de 1948, Chiara Lubich por primera vez conoció en Roma (Italia) a Igino Giordani[1], al que más tarde llamó Foco. Era una terciaria franciscana y estaba acompañada por algunos religiosos de distintas familias franciscanas. Giordani tenía 54 años y era ya un hombre afirmado en el ámbito político y cultural cuando conoció a Chiara Lubich, de 28 años, reconociendo en ella un carisma. Giordani se adhirió inmediatamente a los Focolares y, por su contribución al desarrollo del Movimiento, Chiara Lubich lo consideró cofundador. A continuación el relato de aquel encuentro, extraído del diario de Giordani. “Ver unidos y en armonía a un conventual un menor, un capuchino y un terciario y una terciaria de san Francisco me pareció ya un milagro de unidad, y así lo dije. La señorita habló; (…) ya desde sus primeras palabras advertí algo nuevo. Había un timbre inusitado en aquella voz: el timbre de una convicción profunda y segura que nacía de un sentimiento sobrenatural. (…) Cuando, al cabo de media hora, terminó de hablar, yo estaba sobrecogido en una atmósfera encantada: como en un nimbo de luz y de felicidad; y hubiese querido que aquella voz continuase. Era la voz que, sin darme cuenta de ello, había esperado. Ponía la santidad al alcance de todos; quitaba las verjas que separan el mundo laical de la vida mística. Sacaba a la luz los tesoros de un castillo al que solo pocos eran admitidos. Acercaba a Dios: lo hacía sentir Padre, hermano, amigo, presente en la humanidad. (…) Me sucedió una cosa. Sucedió que aquellos retazos de cultura yuxtapuestos se pusieron a moverse y a animarse, enlazándose hasta formar un cuerpo vivo, recorrido por una sangre generosa: ¿la sangre de la que ardía santa Catalina? Había penetrado el amor embistiendo las ideas, y trayéndolas a una órbita de alegría. Había sucedido que la idea de Dios había hecho sitio al amor de Dios, la imagen ideal al Dios vivo. En Chiara había encontrado no a alguien que hablaba de Dios, sino una que hablaba con Dios: hija que, en el amor, conversaba con el Padre. (…) Todo se iluminó. El dolor asumió un significado salvífico, o se transformó en amor. La vida resultó ser un designio adorable de la voluntad de Dios y cada uno de sus instantes adquirió plenitud y una belleza propia. La naturaleza y la historia se desplegaron en entramados ricos de armonía y sabiduría. Y para vivir esta nueva vida, para nacer en Dios, no tenía que renunciar a mis doctrinas: solo tenía que ponerlas a la llama de la caridad, para vivificarlas. A través del hermano, comencé a vivir a Dios. La gracia brotó libremente, y los diafragmas entre lo sobrenatural y lo natural se derrumbaron. Toda la existencia se convirtió en una aventura, vivida conscientemente en unión con el Creador, que es la vida”.
Igino Giordani
(Igino Giordani, Memorias de un cristiano ingenuo, Ciudad Nueva, Madrid, 2ª ed. 2005, pp. 143-147). [1] Igino Giordani (1894 – 1980) fue un escritor, periodista y político italiano. En 1946 fue elegido miembro de la Asamblea Constituyente y en 1948 diputado como miembro del Partido Democrático en el Parlamento italiano, donde se distinguió por su compromiso en favor de la paz y de la justicia social.