Abr 5, 2012 | Focolare Worldwide
Tengo 21 años y asisto al 3er año de medicina. Conocí el Movimiento gracias a los Jóvenes por un Mundo Unido que eran compañeros de clase en el liceo. Apenas sentí la necesidad de profundizar en mi espiritualidad y en mis ideales le pedí consejo a un amigo gen. Me gustaba el movimiento y sentía un gran deseo de amar concretamente pero tenía miedo de no poderme acercar al Ideal de la Unidad porque estaba alejado de la religión. Mis amigos enseguida me tranquilizaron pues hay ideales que van más allá de la religión. No me gusta que me llamen ateo, porque hoy en día el ateísmo está siendo considerado en feroz oposición a la Iglesia y a las religiones. Yo en cambio trato de tener respeto delante de cada persona y cada cosa, por esto prefiero que me llamen “no creyente”. Vivir cada momento amando es lo que me hace sentir un verdadero Gen, brillar lo más que puedo, de forma que alguien quede impresionado de mi luz. Vivir en medio de tanta gente que está siempre pronta a amar, me llevó a comprender que no se necesita ser héroe para salvar vidas. Si se ama en el momento presente en cualquier lugar, las personas cambian. Un pequeño gesto de amabilidad puede despertar la sonrisa en alguien, y puede desatar una serie de acontecimientos positivos en cadena, se crea una porción de mundo unido. Un día, cuando estaba de excursión en la montaña, un señor decidió unirse a nuestra comitiva porque sufría de vértigo y tenía miedo de bajar con la aerosilla. A pesar de que sus zapatos estaban rotos decidí cambiarle los zapatos continuando yo con un pie descalzo y el otro con un zapato roto. … Cuando una acción es impulsada por el amor desinteresado y vivida con cotidianidad, a nosotros tal vez no nos cambie el día pero a muchos otros sí. Mi elección de vivir como Gen, como joven que vive este Ideal no es tan simple: cada día trato de hacer lo que es justo. A menudo sin embargo, me encuentro en dificultades en el intercambiar mis ideas o conceptos con fundamentos religiosos que no comparto plenamente o no logro comprender, o simplemente me resulta difícil amar concretamente en el momento presente. A todas las personas que tienen dudas de fe o piensan que ser no creyente quiera decir estar marcado en la vida, quisiera decirles que no es así. Sobre todo aquí, en este ambiente , me he sentido siempre recibido como en una familia, al máximo…. Se arriesga de tener que hablar en un palco como lo estoy haciendo yo ahora. A. O. – Italia (Testimonio contado en ocasión del evento “Chiara Lubich y las nuevas generaciones” – Castelgandolfo, 11 de marzo 2012)
Abr 5, 2012 | Sin categorizar
Una biografía de Victorio Sabbione Autor: Rey Honorio Contada con el ritmo casi de una novela, la historia de Victorio Sabbione resulta, como bien dice el título de esta biografía, un viaje no sólo en el espacio y el tiempo, sino por el interior de una personalidad sin duda original y subyugante. Desde las inquietudes intelectuales y sociales de su juventud en Turín, Italia, su participación en la resistencia partisana contra el fascismo, su compromiso político, su profesión de abogado, la intensa experiencia matrimonial, el dolor de una pérdida irreparable hasta el encuentro con un Ideal que colma sus aspiraciones más hondas, su vida nos va abriendo siempre nuevos horizontes. En el relato de su trayectoria de apóstol de la fraternidad desde su arribo a la Argentina, en 1962, confluyen innumerables historias que van tejiendo la trama del Movimiento de los Focolares, extendido hoy por toda Hispanoamérica y otras partes del mundo. Salpicado de datos coyunturales, lenguaje realista y testimonios directos, de la mano de Victorio se termina recorriendo también buena parte de la historia de nuestra sociedad en el siglo XX, con las puertas abiertas a la esperanza en el que estamos transitando. Datos del autor: Honorio Rey, quien, como él mismo dice, “ha tenido el privilegio de hilvanar los testimonios que integran esta biografía”, es periodista de profesión. Redactor y luego director de la revista Ciudad nueva por cuarenta años, tuvo ocasión de conocer de primera mano el anuncio y desarrollo del ideal de la Unidad, encarnado por el Movimiento de los focolares en estas tierras. Testigo, como pocos, de toda la trayectoria de Victorio Sabbione, incluso como estrecho colaborador suyo, ha sumado a su particular conocimiento de los hechos y de la personalidad del protagonista de estas páginas, la minuciosa recopilación del centenar de entrevistas que nutren esta obra. A Honorio Rey se debe también la redacción, de estilo diario-entrevista, de La aventura de Lía Brunet. Entre sus trabajos se destaca, además, como coautor, la biografía de Jorge Haddad, Sólo de noche se ven las estrellas y la recopilación de experiencias familiares en ¿Por qué sos mi papá?, todas obras de esta misma editorial, además de sus numerosas colaboraciones en distintas publicaciones. Editorial Ciudad Nueva – Buenos Aires, Argentina
Abr 4, 2012 | Sin categorizar
Visita de María Voce y Giancarlo Faletti a América Latina, a las comunidades de los Focolares de lengua española.
Abr 4, 2012 | Sin categorizar
Es al matrimonio Anna María y Danilo Zanzucchi,
focolarinos casados y entre las primeras parejas en seguir el espíritu de fraternidad propuesto por Chiara Lubich, que el Papa Benedicto XVI ha dado el trabajo este año de redactar los textos de las meditaciones de las Estaciones del Vía Crucis, que se celebrará el Viernes Santo (6 abril) en el Coliseo. Ya asesores del Pontificio Consejo por la Familia, Anna María y Danilo Zanzucchi han sido durante cerca de 40 años responsables del movimiento Familias Nuevas, donde siguen dando su valiosa contribución. En el año pastoral dedicado a la familia, en el que tendrá lugar también el VII Encuentro Mundial de la Familia (Milán, 30 mayo-3 junio 2012), las reflexiones que acompañarán a la tradicional cita harán, por tanto, referencia al tema de la familia. Es la primera vez que el Papa confía esta labor a un matrimonio. Prensa: El matrimonio Zanzucchi preparará las meditaciones del Vía Crucis Meditaciones
Abr 4, 2012 | Sin categorizar
Abr 4, 2012 | Sin categorizar
Autor: Ighina Domingo “O inventamos o erramos” dijo el tremendo maestro de Bolívar, Simón Rodríguez. Su mandato no era una apelación vaga a despegarnos de las madejas difíciles de la colonia ibérica sino más bien la constatación de la posibilidad de un futuro hasta ese momento inédito en la historia moderna de la humanidad. América, como nunca otra región del globo, recibía en su seno doloroso todas las tradiciones del hombre y esa era una riqueza nueva, tan nueva que necesitaba nuevas formas, nuevas palabras. Este libro quiere responder al imperativo de don Simón utilizando, quizás, uno de los conceptos más valiosos de ese Occidente tan contradictorio. La Fraternidad surge en los textos de los independentistas y discurre hasta nuestros días como una novedad reinventada en América para dar respuesta a aquello que los otros sólo vieron en estos suelos: la posibilidad de una humanidad en plenitud de justicia y libertad. Si el ideal de integración continental es entendido aún hoy como la garantía, la utopía universal para América Latina, cabe explorar qué papel juega el principio de Fraternidad en esa construcción. Nuestra América, a pesar de su cambiante historia, siempre expresó el deseo de la emancipación de y con todos los oprimidos, y creemos que la idea de Fraternidad intenta constantemente reunir en la misma esperanzatodos los esfuerzos para dar realidad a la Patria Grande latinoamericana, nuestra forma de la utopía. Precisamente ese viaje de lo universal a lo latinoamericano y de ahí a la experiencia conflictiva y por eso fraternal de los pueblos constituye el objeto de este ensayo. Se trata de la “invención” de la Fraternidad, la recreación histórica de un principio milenario de comunidad forjado desde hace dos milenios por los pobres de la tierra. La brasa bajo la ceniza. La Fraternidad en el pensamiento de la integración latinoamericana continúa la serie de libros que desde 2009 intentan dar cuenta del principio político olvidado por Occidente y que emerge renovado en nuestros tiempos. La Fraternidad, exigencia y perspectiva, ofrece entonces respuestas y caminos a los desafíos del siglo XXI. Datos del autor: Domingo Ighina (1969) es licenciado y doctor en Letras Modernas por la Universidad Nacional de Córdoba. Profesor por concurso en la cátedra de Pensamiento Latinoamericano de la Facultad de Filosofía y Humanidades. Investigador del Centro de Investigaciones “María Saleme de Bournichon” de esa Universidad. Docente de posgrado en universidades de Argentina, Brasil y España. Sus áreas de trabajo son el nacionalismo argentino y el ensayo del Cono Sur, y la cultura popular desde una perspectiva geocultural y descolonial. Entre sus últimos trabajos mencionamos: Ver con los ojos cerrados. Crisis de las ontologías nacionales criollas, geocultura y fagocitación (2010) y Las apuestas epistemológicas del ensayismo militante (2010). Desde 1992 codirige el Grupo de Estudios Literarios del Cono Sur. Es miembro del Comité Editorial de Silabario. Revista de estudios y ensayos geoculturales desde 1998. Participa en la RUEF desde sus comienzos y ha editado trabajos sobre Fraternidad y Pensamiento Latinoamericano en el marco de los Seminarios Internacionales sobre Fraternidad. Editorial Ciudad Nueva – Argentina
Abr 4, 2012 | Sin categorizar
Autores: Blanc
o de Di Lascio Cecilia; Gatti Isabel; López Verónica FRATERNIDAD Y ACCIÓN POLÍTICA ofrece un abanico de experiencias muy diversas: por su geografía, sus referencias políticas y sociales. Sin embargo, algo las une. Todos los políticos entrevistados, y también los entrevistadores, hacen parte de una misma propuesta de vida y de acción política, originada en el Movimiento Políticos por la Unidad. Estos políticos y ciudadanos, frente al desánimo de muchos, encontraron en este espacio la posibilidad de comprometerse en acciones transformadoras de lo social desde una lógica innovadora. El Movimiento Políticos por la Unidad es una asociación a la que adhieren políticos y ciudadanos de distintos partidos y tendencias, con el compromiso común de contribuir a la construcción de un orden social y político más justo y fraterno. Quienes la integran, reconocen en la fraternidad universal el fin, el contenido y el método específico del compromiso político. El MPPU se inspira en el pensamiento y la doctrina espiritual de Chiara Lubich, caracterizados por promover la unidad y la comunión entre las personas más allá de sus credos e ideologías. En un discurso al parlamento catalán, ella misma afirmó que el MPPU “no es un partido nuevo, sino el portador de una cultura y una praxis política nuevas. (…) El fin específico del Movimiento de la unidad, entonces, es ayudar y ayudarse a vivir siempre la fraternidad; basándose sobre ella, creer en los valores profundos, eternos del hombre, y sólo después comenzar la acción política” (Barcelona, 29 de noviembre de 2002). Gracias a esta concepción, los miembros del movimiento consideran la política como un instrumento privilegiado para alcanzar el bien común de una sociedad fraterna que promueve la unidad en la diversidad. De esta manera, con la fraternidad como paradigma, nace un nuevo estilo de acción política que explicita los grandes objetivos del bien común y favorece prácticas políticas que, en su medio y en su fin, tienden a la unidad de la familia humana, sin exclusiones, superando desde esta lógica cada barrera; ofreciendo una alternativa a una de las llagas más importantes de nuestro tiempo: la fragmentación social. Datos del autor: COORDINACIÓN DE LA OBRA: Blanco de Di Lascio, Cecilia: Licenciada en Filosofía por la Universidad del Salvador. Magister en Doctrina Social de la Iglesia por la Universidad Pontificia de Salamanca. Profesora en Filosofía y Pedagogía por el CONSUDEC. Presidenta nacional del Movimiento Políticos por la Unidad (MPPU) desde 2001hasta la fecha. Gatti, Isabel: Magister en Comunicación y Educación por la Universidad Autónoma de Barcelona. Licenciada en Ciencias de la Comunicación Social (UBA). Coordinadora de Relaciones Institucionales del MPPU. López, Verónica: Licenciada en Ciencia Política por la Universidad Católica Argentina de Córdoba. Responsable del MPPU, región Salta. Docente de la Escuela para Jóvenes del MPPU. SISTEMATIZADORES DE LAS EXPERIENCIAS: Andrián, Melissa Luisina (Entre Ríos). Blanco, María Laura (Córdoba). Lic. Cáceres, Malvina (Santa Fe). Candusso, Santiago Luis (Buenos Aires). Lic. Duffard Evangelista, Irene (Buenos Aires). Lic. Gordillo, Claudia Lucrecia (Mendoza). Lic. Paniagua, María Noelia (Buenos Aires). Rabbia, Sebastián (Entre Ríos). Lic. Sanguineti, Mercedes (Buenos Aires). Editorial Ciudad Nueva – Buenos Aires
Abr 3, 2012 | Focolare Worldwide
¡Estos jóvenes! Llevaron al co-presidente Faletti al jardín de afuera de la sala del encuentro, lo vendaron y le pusieron en la mano un palo para golpear una olla de barro con siete rayos que estaba colgada por un largo cable tironeado por dos jóvenes, uno de cada lado. Es un juego de antigua tradición maya, asumido por el cristianismo con nuevo significado.
Y aquí está Giancarlo dando prueba de habilidad y de fe (no ve nada) para lograr golpear los siete vicios capitales (los rayos) y romper la piñata, haciendo que bajen sobre los presentes las gracias del Cielo, simbolizadas por fruta y caramelos. Empresa que no es fácil porque el blanco al que debe pegar, es levantado y bajado por los cuatro “bandidos” colocados en el extremo de la cuerda. Alegría final y reparto de las exquisiteces entre los 180 jóvenes del Movimiento que lograron llegar a la ciudadela “El diamante” desde todas las regiones de México.
El encuentro había comenzado tres horas antes, con un recibimiento musical de gran ritmo, y un cartel colgado en la sala “Y nosotros hemos creído en el amor”. Una frase del Evangelio que hizo propia la fundadora de los Focolares, en el alba del Movimiento, y convertida en hecho comunitario de fe y fundamento de toda iniciativa.
Estos jóvenes han recogido el testimonio y el desafío demostrándolo con los argumentos que han querido enfrentar al ilustre huésped, sin ningún temor reverencial.
La violencia en las ciudades, la imponente y condicionante presencia del narcotráfico, la disgregación social, la tibieza de muchos coetáneos en luchar por grandes ideales, la competencia por el éxito a toda costa, la relación de súbdito ante la autoridad, incluidos los padres, han sido los temas enfrentados. También se habló de las parejas gay, de la cultura libertaria imperante, del condicionamiento que imponen los mass media en manos de pocos.
En las respuestas de Faletti los jóvenes apreciaron lo concreto de cada indicación. Inclusive al final, les dijo que no sean alumnos de la televisión, ni de Internet, sino más bien comprometerse a poseer la cultura que nace del carisma de la unidad, una luz para los temas de actualidad y para los tradicionales.
“Los desafíos modernos –pronosticó al atento auditorio–, nos dan más trabajo, exigen conocimiento interdisciplinario y profundizaciones continuas, pero esto es parte de la vida de Jesús en el 2012. Es fundamental comprender juntos y hasta el fondo, lo que estamos viviendo como hijos de Chiara y porqué lo estamos viviendo. En este compromiso pueden aprovechar toda la competencia y disponibilidad de los expertos del Movimiento”
Parecía que había terminado. Pero el co-presidente pide de nuevo la palabra, se refiere al Mensaje de Benedicto XVI para la jornada mundial de la juventud, en la cual habla de Chiara Luce Badano y resalta el testimonio de esta joven de la Liguria, fallecida por un tumor en 1990, y beatificada en el 2010. Faletti la conoció personalmente: “Chiara Luce hablará al corazón de cada uno, les contará sobre su relación con Chiara Lubich y sobre la espiritualidad del carisma de la unidad que la condujo en esta época a la santidad”
El desafío propuesto por el papa de ser testimonios de la alegría no es fácil de aceptar en un México atravesado por la violencia, condicionado por la abrumadora presencia del narcotráfico, pero también influido por una cultura fuertemente libertaria. Aquí nace el compromiso de estrecharse cada vez más en un vínculo de amistad con Chiara Badano y proponerla a muchos coetáneos como referencia, interlocutora modelo.
Paolo Lóriga, enviado
Abr 3, 2012 | Focolare Worldwide
“La ciudadela se convertirá aún más en un punto de referencia para vuestros coetáneos si los jóvenes del Movimiento manifiestan su amistad con Chiara Luce Badano, que ha vivido la espiritualidad de la unidad hasta la santidad”. Giancarlo Faletti habla en medio de jóvenes que están apiñados con tal de estarle cerca. Recién terminó la Misa del Domingo de Ramos, y se celebra, como de costumbre, en simultáneo, la Jornada mundial de la Juventud. También en México conocen a la beata italiana de dieciocho años. Para la ciudadela se abren nuevos horizontes, pero también para la comunidad de los Focolares en México, la jornada de encuentro les regaló no menores perspectivas para el futuro. Era una cita esperada, la de hoy, que comenzó de la forma más post-moderna, un ícono de un tablero sobre el cual Giancarlo hizo presión con el índice. Así comenzó su viaje por todas las regiones del País. Nada virtual, pues en cada rincón del jardín de la ciudadela lo esperaban representaciones de las diversas comunidades, con vestimenta de colores vivos, canciones y mapa geográfico en los hombros. Danzas, coros, trajes de las formas más variadas, se fueron alternando en el palco bajo la gran carpa blanca que alojaba más de 1.200 personas, que llegaron también de Torrión (a 16 horas de ómnibus) para no perderse el final del rico programa, o sea, el diálogo con Giancarlo antes y luego sucesivamente con la presidente Maria Voce, en conexión skype desde Guatemala.
Las preguntas rondaron sobre los grandes argumentos de actualidad y sobre la vida del Movimiento, pero fue la primera pregunta, hecha a la presidente por Gabriel, un pequeñito de Guadalajara, sumergido dentro de un sombrero negro, la que orientó el ánimo de todos: ¿Cómo hacer para ser santo?. Maria Voce le respondió como si estuvieran en un coloquio de tu a tu: “Debes preocuparte no tanto por ser santo, sino por ser Jesús. Jesús era hijo de Dios, era todo amor. Entonces debes amar, debes aprender todos los puntos del arte de amar. Más amas, más santo serás”. Gabriel asintió convencido. A todos, la presidente, en su saludo final, les confió: “Les repito mi gratitud. El augurio es que la vida vuestra de testimonio del carisma de la unidad transforme cada vez más los ambientes en los cuales viven, para contribuir como Movimiento a la renovación de México”. El silencio en la sala era profundo, las cabezas asentían. La nueva frontera los esperaba. Luego se produjo la explosión del folklore. Pero describirlo es una tarea ardua. Lo mejor es ir a México. de Paolo Lóriga, enviado
Abr 2, 2012 | Focolare Worldwide
¿Una gota en el océano o un signo profético? En las varias latitudes del planeta se encuentran admirables iniciativas sociales, también obra del Movimiento de los Focolares, que hacen brotar esta pregunta. Al pasar el portón de entrada de la Escuela Santa María y al apreciar el esfuerzo organizativo y económico – en una zona rural caracterizada por la pobreza, la sequedad, los pies desnudos -, inevitablemente aparece esta pregunta. La escuela está ubicada a pocos centenares de metros de la ciudadela de los Focolares “El Diamante”, que queda a 50 Km de Puebla, y es una aventura educativa ya consolidada, con veinte años de experiencia. La escuela ya se puede jactar de tener tres ex alumnas, ya laureadas y que ahora son docentes.
Y son muchos más los resultados cuando pasa así, como es en este caso, que un proyecto educativo atienda a la persona en su dimensión integral. Ojos bajos, sentido de inferioridad, baja estima, resignación, son las características de la vida de la población con respecto a las clases sociales superiores. Santa María es uno de esos lugares donde en cambio, los niños te miran a los ojos en una relación abierta e igualitaria, sin esconder su propia condición. “El intento –nos explica María Teresa Sánchez, una de las coordinadoras de la escuela-, es hacer tomar conciencia de la dignidad personal, valorando a cada uno y logrando que surja su potencialidad”. Laura Romo, otra coordinadora agrega: “Desarrollamos la creatividad en la lógica de la cultura del dar, privilegiando la sociabilidad y la cooperación por encima del individualismo y la competitividad” En los últimos veinte años, más de 7.500 jóvenes han recibido esta educación escolar y una formación humana y civil que está influyendo en el ambiente y en sus familias de origen, con frecuencia llagadas por el alcoholismo del padre y por la violencia hacia la esposa y los hijos. Entre todos estos alumnos 110 llegaron a laurearse y ahora son profesores, ingenieros, abogados, que no olvidan lo que han recibido, de forma que también se organizó una red de ex alumnos. La experiencia de Santa María, a decir la verdad, ha también contribuido a la elección de una vida de donación: dos eligieron el focolar, una eligió el convento, otro el seminario. Incluso sin laurearse, todos los demás se abrieron camino aportando una nueva sociabilidad. Es una cultura que anima a las chicas a romper la costumbre de estudiar lo estrictamente indispensable. Los estudiantes de este año son 404, desde el pre escolar al liceo. Las niñas más chiquitas, electrizadas por el acontecimiento, de la llegada de Giancarlo Faletti al complejo escolar, saltan como grillos, teniendo en la mano brillantes pompones rojos. Se abren los festejos por su visita. Hay también un buen número de padres. Aquí no se habla tanto de un cuerpo docente sino de una comunidad educativa, donde también los padres están llamados a la responsabilidad, cuidando la higiene, la vestimenta, la educación de los hijos y siguiendo también un curso en la escuela para poder acompañar a sus hijos. Este es un compromiso que no todas las parejas desean asumir, pero es como un reglamento del ingreso o permanencia en la Santa María. 180 son los alumnos que reciben ayuda del Sostén a Distancia que promueve la Asociación Familias Nuevas de los Focolares, pero también sus padres son invitados a colaborar en la escolaridad de sus hijos, de manera que estén responsabilizados, siguiendo la lógica presente en la Santa María. Y en efecto los papás han respondido de varias maneras, por ejemplo construyendo el cerco que rodea la Escuela o colocando el piso en algunas partes externas de los edificios. Giancarlo Faletti, luego de haber visto varias danzas folklóricas, canciones e intervenciones de directivos o profesores, expresó su admiración sin medias palabras: “La Presidente María Voce habría gozado profundamente si hubiese podido estar aquí. Ustedes son un ejemplo y un estímulo para vuestro País. Son un gran regalo. Existe un vínculo grande y profundo entre escuela, padres e instituciones, que permite desarrollar lo mejor de cada alumno”. Hace veinte años, con la generosidad de muchas familias, se compró el terreno y con el sostén de la Asociación mundo unido de Luxemburgo, se construyó todo el complejo educativo. ¿Gota en el océano o signo profético? Paolo Lóriga, enviado