Publicamos a continuación el informe del año 2024 sobre las actividades del Movimiento de los Focolares en el ámbito de la Protección de la persona. Lo hemos introducido con las palabras que el papa Francisco dirigió recientemente a la Comisión Pontificia para la Protección de los Menores y con las que, de hecho, actualizó el mandato con el que la había constituido hace 10 años. Nos sentimos fuertemente llamados a realizar esta “conversión integral” a la que apela el Santo Padre, que nunca se llega a realizar plenamente, pero que nos pide que continuamente nos cuestionemos, que tengamos una mirada humilde, siempre atenta, protectora y acogedora hacia cada persona; nos pide continuar con perseverancia en el camino de la formación y de la auténtica cercanía, conscientes de la necesidad de cambio, para que cada persona se sienta segura, amada y respetada en nuestros ambientes y en nuestras diversas actividades.
2024: escucha, formación, reglamentación
Desde el punto de vista de la Protección, fueron tres los elementos que caracterizaron el año pasado el Movimiento de los Focolares: la escucha y la participación de víctimas y testigos ─ de diferentes modos─ en los procesos de reparación y formación de los responsables; la ampliación de los cursos y de los eventos formativos para todos los participantes; y la prosecución de la elaboración del marco normativo, con la actualización del Protocolo para los casos de abuso y la redacción de las Líneas guía para los servicios de escucha y acogida.
Importancia fundamental tuvo, en noviembre del año pasado, el encuentro de los dirigentes del Movimiento en el mundo con algunas personas, víctimas de abusos sexuales o de poder, por parte de miembros del Movimiento de los Focolares. Las víctimas relataron sus historias de gran sufrimiento y las graves consecuencias en sus vidas y en las comunidades de las que formaban o siguen formando parte. También estuvieron presentes algunos familiares de una de las víctimas, que testimoniaron los graves efectos que los abusos tienen en todos los miembros de la familia. Las palabras de uno de los participantes expresan bien la importancia de ese momento: “ Escuchar a estas personas marcó un antes y un después. Con delicadeza y claridad nos dijeron hasta qué punto el Movimiento había fallado en lo que es el corazón de su carisma: la unidad, el amor al prójimo, porque en muchos casos no solo hemos sido de alguna manera corresponsables de los abusos cometidos, sino que además hemos dejado solas a las personas que afrontaban este dolor. ”.
Además, el aporte de las víctimas, junto con la participación de profesionales de diversas disciplinas –ajenos al Movimiento–, fueron fundamentales en el trabajo realizado en el Centro Internacional y en los territorios, es decir: los documentos elaborados; la formación a la Protección realizada en las comunidades de los Focolares en el mundo; y la planificación y apertura de algunos espacios de escucha y acogida.
También se constituyó una Comisión de Estudio sobre los abusos de poder y espirituales producidos dentro del Movimiento. Su objetivo es investigar las causas, para poder cambiar las praxis perjudiciales y aplicar una prevención adecuada. El estudio, todavía en curso, cuenta también con el asesoramiento externo de especialistas en diversos campos: psicológico, pedagógico y jurídico. Este análisis está siendo apoyado y alentado por el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida; y aun estando en sus fases iniciales, se reconoce su gran relevancia, pues evidentemente no basta con la creación y aplicación de normas y protocolos, sino que hay que investigar las dinámicas que llevaron a las distintas formas de abuso.
Por último, se actualizaron, aplicaron y elaboraron documentos normativos y Líneas guía (como se ilustra a continuación), que también han sido fruto de una proficua colaboración con la Comisión Pontificia para la Protección de los Menores, que han acompañado y promovido los nuevos pasos dados.
El continente africano está formado por 54 Estados. Está atravesado por el Ecuador y los trópicos de Cáncer y Capricornio, por lo que gran parte del territorio se ubica en la zona tórrida y se caracteriza por desiertos, sabanas y selvas tropicales. Es el continente con mayor superficie afectada por clima árido y cálido. Treinta millones de kilómetros cuadrados con aproximadamente mil cuatrocientos millones de habitantes.
Jesús Morán, copresidente del Movimiento de los Focolares, acompañado de algunos miembros del Centro internacional visitó algunos países del este y oeste del continente entre el 13 de enero y el 9 de febrero de 2025. Margaret Karram, presidente del Movimiento de los Focolares, se conectó en directo en nueve ocasiones, especialmente durante los días dedicados a los encuentros con las comunidades locales.
“Un viaje que recordaremos durante mucho tiempo”, ha dicho Jesús Morán. “Este viaje ha quedado grabado en nuestros corazones”, añadió Margaret Karram “Muchos lo han definido como un ‘viaje histórico’. Yo todavía tengo presente, aunque los he visto a través de las conexiones, sus rostros, sus sonrisas, su decisión”. “Me ha impactado mucho el testimonio de las comunidades del Movimiento al vivir el Evangelio con radicalidad. Creo que pueden enseñarnos mucho”.
Costa de Marfil, Sierra Leona, Kenia, Ruanda, Burundi fueron las etapas de este viaje, pero a muchas de las reuniones asistieron muchas otras personas de varios otros países africanos.
Es imposible resumir la intensidad y riqueza de la vida que se vive en cada comunidad. Volvemos a proponer aquí una parte de la Conexión del 15 de marzo de 2025 en la que repasamos este viaje, una inmersión en la vida y la cultura del continente africano.
El Movimiento de los Focolares acaba de publicar su segundo balance de misión llamado “Balance de Comunión”. Tema: el diálogo. Para saber más, entrevistamos a los concejeros para el aspecto de la Economía y Trabajo del Centro Internacional del Movimiento, Ruperto Battiston y Geneviève Sanze.
Hace un año, en enero de 2023, en Roma (Italia), en el “Focolare meeting point”, se presentó el primer “Balance de Comunión” del Movimiento de los Focolares, un panorama de las actividades e iniciativas promovidas por el Movimiento en el mundo en el Bienio 2020-2021. Este año el Movimiento presenta un nuevo Balance de Comunión del año 2022 centrado en el tema del diálogo que publicamos en este sitio. El documento nace como una verdadera narración, no sólo del compartir espontáneo de bienes, sino de experiencias y necesidades inspiradas en el amor evangélico que se convierte en camino de vida. Ruperto Battiston y Geneviève Sanze, consejeros para el aspecto de la Economía y Trabajo del Centro Internacional de los Focolares, nos hablan de ello.
Ruperto, ¿cuáles son los objetivos que este texto se propone alcanzar? ¿Hay continuidad entre el presupuesto anterior y este?
Estos balances de misión nacieron de la necesidad de hacer participar más a todos y dar a conocer lo que se logra concretamente con la comunión de bienes entre todos los miembros del Movimiento de los Focolares y con los aportes que personas o instituciones desean compartir con nosotros. Se dirige ante todo a todos los miembros del Movimiento de los Focolares, con gratitud por los frutos que sigue generando la vida y el trabajo conjunto de tantas personas en todo el mundo; y con gratitud a Dios por lo que trabaja y sigue trabajando. También está dirigido a quienes están felices de conocernos y colaboran activamente por un mundo más fraterno y más pacífico. Por este motivo elegimos el nombre típico y quizás un poco inusual de ‘Balance de Comunión’ porque es lo que nos pareció que mejor expresaba nuestra experiencia de caminar juntos hacia un mundo unido. Este es el segundo ‘Balance de Comunión’ y se refiere a las actividades apoyadas por la comunión de bienes, compartidas a nivel internacional, y a los datos contables de 2022 del Centro Internacional del Movimiento de los Focolares, es decir, la parte de la comunión de bienes que llegó al Centro del Movimiento en Rocca di Papa (Italia). Este Balance sigue al de 2021 en el que se destacaron las numerosas actividades que las comunidades del Movimiento de los Focolares realizan en todo el mundo en todos los campos y aspectos. Para 2022 nos centramos en un documento más temático y con una perspectiva específica sobre el diálogo, ofreciendo una visión de lo que intentamos aportar a la sociedad, en el camino hacia la fraternidad, hacia esa unidad en la que se puede enriquecer la diversidad, creando colaboraciones en armonía. Este Balance se presenta, por tanto, como una herramienta de comunión abierta y participativa a la que todos pueden añadir una página, una historia, una sugerencia, “En diálogo” con la humanidad y con nuestro planeta.
Geneviève, ¿cómo se armoniza el tema del diálogo, corazón de este texto, con esta herramienta de información?
Nos parece interesante retomar lo que encontramos en la introducción: “Estar en diálogo es la característica de cada persona y de cada proyecto que se reconoce en el Movimiento de los Focolares y se inspira en su espiritualidad de comunión. Por lo tanto, no sólo hacer, sino vivir apoyado y fundamentado en la escucha, la aceptación, la compasión, la caridad y la misericordia, como se resume en el principio clave de toda cultura y religión: la llamada Regla de Oro: “Haz a los demás lo que quisieras que te hicieran a ti”. El Presupuesto de Comunión quiere contar cómo hemos contribuido, con muchos en el mundo, a curar las heridas de las divisiones y polarizaciones y a avanzar en el camino de la fraternidad evangélica, y expresamos el diálogo en 5 grandes directrices: en la Iglesia católica, entre las Iglesias cristianas, en el ámbito del diálogo interreligioso, con personas sin un referente religioso, en diferentes ámbitos culturales. Estas directivas son para nosotros los principales caminos hacia la fraternidad. Chiara Lubich definió los diálogos como “las autopistas para un mundo unido”. No ha sido fácil recoger y elegir entre tantas iniciativas, pequeñas y grandes, pero todas ellas importantes porque son semillas de futuro y portadoras de un cambio concreto en las relaciones entre las personas y que mejoran la atmósfera del mundo. Nosotros mismos nos sorprendimos por la cantidad de iniciativas y el florecimiento generalizado de esta vida, que quizás no hace ruido, pero sostiene el mundo y construye nuevas relaciones entre las personas. Estar “En diálogo” con los demás valoriza la diversidad, resalta las características de cada uno, exige una profunda escucha mutua, construye la paz. El diálogo es más relevante que nunca. Para leer el Balance de Comunión haga clic aquí.