
El puntapié inicial para el proyecto surgió de la Beca Internacional de Diálogos de Kaiciid, de la que estoy participando, y fue acompañado desde el primer momento por el Movimiento de los Focolares. ¿Qué proyecto local proponer? –me preguntaba al principio-. ¿Una conferencia? ¿Cursos virtuales o presenciales? ¿Capacitaciones? Llegué a la conclusión de que se conoce más de Judaísmo, por ejemplo, conociendo una sinagoga y conversando con un judío, que leyendo libros o mirando videos en youtube. Lo mismo con las otras comunidades… No porque de los libros no se aprenda, al contrario! Pero la sensación de descalzarnos y cubrirnos la cabeza para entrar en una mezquita, y sentarnos separadas de los hombres… o las incertidumbres o emociones al entrar en un lugar nuevo, o una oración conjunta por la paz del mundo, con los musulmanes… esas se quedan grabadas en el corazón!! Por eso, esa fue la propuesta: salir, viajar, conocer, descalzarnos, dejarnos sorprender… Como decía una frase de un poema de San Juan de la Cruz que recordé mucho estos días: “Para ir a donde no sabes, has de andar por donde no sabes. Para ir a donde no conoces, has de andar por donde no conoces. Para ir a donde no eres, has de andar por donde no eres.”

No es que no conocíamos la región que recorrimos: lugares del norte argentino: Salta o Tucumán o los valles… las rutas las conocemos algunos desde la niñez, pero, aun así, era un camino hacia lo nuevo, hacia lo desconocido.
Para participar convocamos a jóvenes de distintas instituciones de Salta (Argentina): Franciscanos, Salesianos, Focolares, Acción Católica, Palestra, Instituto Tavella de Ciencias Sagradas, Universidad Católica y Oajnu (Organización Argentina de Jóvenes para las Naciones Unidas).
El viernes 30 de septiembre nos encontramos todos, 18 en total, con nuestros bolsos pequeños, según lo solicitado, pero con un corazón grande, abierto, expectante. Primero, llegamos a la comunidad Menonita de Metán, en seguida al templo Sikh de Rosario de la Frontera, todos en la provincia de Salta. Después fuimos a la provincia de Tucumán: donde está el Focolar, donde hemos escuchado los ecos del diálogo ecuménico e interreligioso desde hace bastante tiempo, y por si fuera poco, donde hace exactamente 200 años se declaró la Independencia de nuestro país. Una emoción grande ir a la Cuna de la Independencia en el año del Bicentenario! En esta ciudad visitamos a los Musulmanes y a los Budistas. Y luego decidimos volver por los valles calchaquíes, Amaicha del Valle y Cafayate… para encontrarnos también con los pueblos originarios, y para sumergirnos en la belleza de la naturaleza, ya que habíamos elegido como eje del diálogo “el cuidado de la casa común, el medio ambiente” para charlar con los que nos fuéramos encontrando.

Las resonancias de los jóvenes participantes fueron intensas y profundas. Compartimos algunas de ellas:
“Yo comencé estos días con una frase de la que hablamos en los encuentros de preparación: “la otra persona es un misterio, ante quien nos tenemos que sacar las sandalias”. Me acordaba de eso en cada comunidad que visitábamos. El hecho de que nos hayan recibido, es ya un diálogo, aunque sea en silencio. Me impactó lo de los musulmanes, que sólo quieren creer, rezar y vivir en comunidad. Ellos mismos están viviendo esa paz y quieren transmitirla.” Belén
“Esta experiencia ha arrojado luz en mi camino… El tema central del cuidado de la casa común, me lleva a descubrir la armonía que existe entre la naturaleza, el prójimo y nosotros mismos.” Daniel
“La paz empieza con una sonrisa. El diálogo no se da solamente con las palabras, sino también con un abrazo, un gesto, una sonrisa… saliendo del egoísmo de ser yo, para ser nosotros. Me pone muy feliz que en la humanidad existan estas personas que conocí estos días. Depende de nosotros contagiarlo.” Melisa
Damos gracias a Dios, al Movimiento de los Focolares, a Kaiciid, a las comunidades que nos recibieron y nos donaron parte de su sabiduría y su vida y a los jóvenes que se animaron a vivir a fondo esta divina aventura! Gracias de corazón!
(Mily Dallacaminá – Salta-Argentina)