Vida Rus y Andrew Camillieri son los encargados, en el Centro del Movimiento de los Focolares del diálogo con personas de otras convicciones. Entre los últimos días de junio y principios de julio visitaron el Cono Sur donde tuvieron distintos momentos de encuentro. Una recorrida por las ciudades visitadas.
Buenos Aires (Argentina)
“Estoy muy contenta de haber venido a esta jornada, escuche cosas nuevas que me permiten valorar mis propias experiencias a partir de escuchar las de los demás. Resultó muy motivador para emprender ese camino de diálogo, que hace que podamos cambiar la sociedad”. Estas son algunas impresiones de la jornada que se realizó en Buenos Aires el 22 de junio.
El tema central fue el Diálogo, con especial énfasis en “La indiferencia en la sociedad de hoy”. ¿Qué significa permanecer indiferente?. ¿Qué impacto tiene en la sociedad de hoy?. ¿Un fenómeno que crece?
También se compartieron los principios para el Dialogo que el Grupo de Buenos Aires ha desarrollado hace 10 años y sienta las bases para las actividades de este grupo.
- Todos creemos en la fuerza del amor, con el deseo de poner las propias fuerzas y los propios talentos al servicio de los demás, y del bien común.
- Se aporta desde la propia cultura, es decir, sin perder la propia identidad, apuntando a los valores comunes que pueden ser vividos por todos, como la solidaridad, la paz, los derechos humanos, la fraternidad universal. Se busca primero lo que nos une.
- En el diálogo todos tenemos algo para dar y algo que recibir. Cada uno trata de dar lo mejor de sí mismo y, de la misma manera, está abierto a lo que ofrece el otro.
- En el diálogo las diferencias se convierten en una riqueza.
- En este diálogo entre creyentes y no creyentes no hay lugar para el proselitismo. No puede haber en absoluto segundas intenciones. No debe haber ánimo de conquista en ningún sentido. En todo caso, sí, deseo de que el otro pueda comprender y vivir lo que a uno más lo realiza, lo hace vivir con mayor plenitud.
- El diálogo se funda en el respeto profundo del otro y en el esfuerzo de actuar siguiendo la propia conciencia.
- El diálogo no se reduce a un número limitado de personas, no es un fin en sí mismo. Cada uno, cualquiera sea su cultura, debe esforzarse por ser un fermento de transformación en su propio ambiente, construyendo allí la unidad. El objetivo de máxima es la unidad de todos, la fraternidad universal, el mundo unido.
Al día siguiente se encontraron con el Grupo de Diálogo de Buenos Aires y permitió conocerse más ya que cada uno de los presentes compartió su experiencia y su vida.
El miércoles 26 de Junio el Centro Latinoamericano de Evangelización Social (CLAdeES) recibió la visita Vida Rus y Andrew Camilleri.
El CLAdeES pretende ser un espacio abierto a todos los movimientos e instituciones eclesiales y a todos los hombres de buena voluntad preocupados por construir un mundo más justo donde las relaciones humanas sean verdaderamente fraternas y solidarias.
De este conversatorio participaron cerca de 30 personas de las más variadas procedencias.
Algunos pertenecientes a movimientos de la Iglesia Católica (Mov. De la Palabra de Dios, Mov. De Shoensttat, Mov. De los focolares), laicos de Iglesia no pertenecientes a movimientos, una rabina judía (Silvina Chemen), y otros participantes sin ninguna identificación religiosa.
A través del intercambio de comentarios y preguntas entre los asistentes se abrió aún más la posibilidad de pensarnos como comunidad preocupada y ocupada en generar dialogo, que no deje caer en la indiferencia que es en última instancia desconocimiento del otro como tal.
Mariápolis Lía (O’Higgins, Buenos Aires)
Una breve visita a la ciudadela les dió una idea de lo que se ha construido en estos 51 años de vida.
El momento más espeerado fue el encuentro con los jóvenes de 22 nacionalidades que viven en la Mariápolis este año, tratando de ser hombres y mujeres nuevos construyendo la Mariápois. El encuentro con ellos fue rico y profundo. Andrew y Vida les contaron sus “vidas” desde el ángulo de la donación que suscitó en los jóvenes múltiples preguntas basadas en sus experiencias o de sus amigos o parientes cercanos sobre el significado de vivir sin Dios. Las respuestas fueron claras, sin vacilaciones y ayudaron también a los adultos presentes a entrar en este diálogo amplio.
Para concluir un encuentro con los adultos de la Mariápolis y del tierritorio circundante.
“Nos quedamos con un sabor de apertura -dicen-, con una renovada comprensión del diálogo con las personas sin convicciones religiosas”.
Neuquén (Argentina)



Montevideo (Uruguay)
“Desde el martes 2 al 3 de julio de este año -escriben desde Montevideo-, hemos tenido la aparentemente breve, pero intensa y proficua, visita de Vida y Andrew a la ciudad de Montevideo.
A compañados por los delegados para el 4º Diálogo del Cono Sur, Ana y Horacio, tuvimos dos instancias claves. Un encuentro abierto a los Amigos del Diálogo y algunos de la comunidad local, con el objetivo de conocernos mutuamente. Y otro momento con los más comprometidos en esta diálogo, para ir más en profundidad, además de los clásicos paseos por la ciudad y almuerzo compartido.
Pudimos presentarnos y hacer conocer algunos de nuestros instrumentos y actividades que nos van mancomunando: la práctica del Pensamiento del día, la realización del Timeout por la paz, el Cine Debate mensual ininterrumpido (12 por año desde hace 25 años); una tarde en el Centro Mariápolis El Pelícano; la Columna de Gaspar que publicamos mensualmente en Ciudad Nueva (y van 88 columnas); la Zona de Diálogo -una página mensual, también en Ciudad Nueva con elementos teóricos de formación al diálogo (y ya van 22 artículos); la Idea del Mes, versión laica de la Palabra de Vida que llega en una decena de lenguas a una veintena de países; Grupos de Diálogo para un intercambio más específico; la Jornada de Primavera que se ofrece a los jóvenes; actividades especiales como Seminarios de Formación y Talleres.”