Movimiento de los Focolares

Diálogo y relaciones

“Una vida por la unidad”: éste es el título de la noticia con la cual el Movimiento de Schönstatt anuncia el fallecimiento del Padre Michael Johannes Marmann, que fuera su presidente general, acaecido la noche del 26 de febrero de 2019. Con el Padre Marmann este movimiento apostólico, nacido en 1914 en Alemania, pierde una figura central. Había nacido en 1937 en Berlín y era el mayor de tres hermanos. Después de estudiar Filosofía y Teología se ordenó sacerdote en 1963 en Colonia y continuó con ulteriores estudios en Tubinga y Ratisbona. En 1973 concluyó un doctorado bajo la guía del entonces profesor Josef Ratzinger. La relación del papa Benedicto XVI con sus ex-alumnos, y también con el Padre Marmann, duró toda la vida. Se encontraban, de hecho, cada año – últimamente a menudo en el Centro Mariápolis de Castelgandolfo – para profundizar temas teológicos de actualidad. En el contexto de su ordenación sacerdotal, el Padre Marmann conoció el Movimiento de Schönstatt y a su fundador, el Padre Josef Kentenich, que en ese momento se encontraba aún en el exilio en Milwaukee (USA) por orden de las autoridades eclesiásticas. Tras un encuentro personal con él, el Padre Marmann decidió entrar en el instituto secular de los Padres de Schönstatt, pasando más tarde a ser el padre espiritual de la rama de las jóvenes. Luego, trabajó activamente en la pastoral para sacerdotes, familias y madres y desde 1983 a 1991 llegó a ser responsable del Movimiento en Alemania. En 1990 los Padres de Schönstatt lo eligieron superior general, una tarea a la que está vinculada también la función de la presidencia del presidio general. El Padre Marmann realizó estos servicios con gran apertura al diálogo y atención a las relaciones tanto dentro del Movimiento como fuera. Su compromiso por la unidad de la grande y diversificada obra de Kentenich se extiendió luego de manera natural a la comunión con otros Movimientos: primero en la Iglesia de Alemania y luego sobre todo en la red de “Juntos por Europa”. Nacieron relaciones de profunda amistad y unidad espiritual con representantes de otros movimientos entre los cuales Helmut Niklas del YMCA (Asociación Cristiana de Jóvenes) de Munich, Andrea Riccardi de la Comunidad de Sant’Egidio y Chiara Lubich. En su mensaje de condolencia, Maria Voce, presidenta del Movimiento de los Focolares, recuerda las muchas “etapas importantes de este camino”, como en 1999 la Alianza de amor expresada por Chiara Lubich, Andrea Riccardi y el P. Marmann en el Santuario de Schönstatt, en la tumba del Padre Kentenich, y expresa la certeza de que “María, Madre Tres veces Admirable, lo habrá acompañado al feliz encuentro con Cristo en Su Reino de paz”.

Joachim Schwind

Evangelio vivido: perdonar y reconciliarse

En la vida personal y social respiramos una atmósfera de creciente hostilidad y competitividad. Como cristianos podemos dar un testimonio contracorriente empezando por reconstruir vínculos dañados o rotos. Separación Después de dos años de matrimonio, nuestra hija y su esposo decidieron separarse. La acogimos nuevamente en nuestra casa y en los momentos de tensión tratábamos de mantener la calma, manteniendo el perdón y la comprensión en el corazón, conservando una relación abierta con ella y su marido, sobre todo tratando de no juzgar a nadie. Después de tres meses de continua escucha, de ayuda discreta, de tantas oraciones, volvieron a estar juntos con una nueva conciencia, confianza y esperanza. (M.L. – Malta) Un signo de perdón Pensaba que había hecho mi deber de cristiano, como Alcalde de mi ciudad y como padre. Pero cuando mi primogénito, de 33 años, casado y padre de dos niños pequeños fue asesinado durante un asalto, me rebelé contra Dios. ¿Por qué había sucedido esto? Después empecé un camino de verdadera conversión, durante el cual entendí que Dios mismo había dado a su Hijo por amor nuestro. Cinco años después se abrió el proceso. Estando en la Corte evitaba mirar a los imputados, pero cuando crucé la mirada con el más joven de los asesinos, me acerqué a él y le tendí la mano para estrechar la suya, en signo de perdón. (C.S. – Italia) Nueva atmósfera en el departamento Son el responsable de un departamento de una empresa y al final del año tenía que entregar un informe con la evaluación de mis subalternos. Una dependiente había ofrecido pocos elementos para ser evaluada, por lo que le pedí un coloquio, gracias al cual descubrí que no conocía muchas cosas de ella. Este encuentro me abrió los ojos y me empujó a cambiar las cosas, promoviendo varias iniciativas para valorar a los empleados, festejar sus cumpleaños, organizar fiestas con sus familias. No sólo mejoró el ambiente de trabajo, sino que también aumentó el rendimiento. (M.T. – Hungría) La pelota Tenemos dos niños muy vivaces. Una mañana vi que Nathan lloraba y Claire tenía su pelota en las manos. Enseguida la tomé para devolvérsela, pero entonces ella empezó a llorar. Entonces la llevé aparte para explicarle que Jesús nos enseñó a amar y a compartir. Aunque ella es todavía una niña lo entendió y le dio la pelota a su hermanito. Hay tantas situaciones en las que he estado por castigarla, pero logro encontrar en mí el amor y la paciencia. Ahora ella siempre está dispuesta a ayudarme. (J.N.J. – Filipinas)

Brasil, más allá de la polarización político-ideológica/2

Brasil, más allá de la polarización político-ideológica/2

La imagen de un país impregnado de disputas políticas e ideológicas, ampliamente difundidas por los medios de comunicación brasileños en general, tiende a esconder la realidad de quienes actúan por el bien común, afrontando las divergencias de opinión a través del diálogo y con acciones concretas de solidaridad. Aun marcado por una fuerte polarización político-ideológica, Brasil cultiva, muchas veces en silencio, los gérmenes de una sociedad renovada, abierta al diálogo, solidaria, que tiende a la construcción de relaciones de fraternidad. En los espacios político y socio-cultural más amplios. Tras haber contado las iniciativas puestas en acción por los varios organismos – eclesiales y de otro tipo – para promover una reflexión política fundada sobre el diálogo (entendida como respuesta a la demanda creciente de una nueva cultura democrática y participativa) queremos ahora poner en luz el compromiso de muchos en el campo de la solidaridad y del voluntariado. A menudo, en efecto, la acción política está guiada por un sentido de solidaridad con los que sufren. Desde 2016, cuando el Gobierno del Estado de Río de Janeiro empezó a atrasarse en el pago de los sueldos de los empleados públicos, además de la lucha en la Justicia y de los numerosos actos políticos de protesta contra esa medida, surgió una red de solidaridad en favor de los trabajadores y sus familias que más sufrieron por esa situación. Los gestos se multiplicaron en todo el Estado, tanto por parte de las personas individualmente como de la colectividad. Para ayudar a las familias en dificultad una serie de organizaciones se movilizaron para recoger recursos y preparar viandas de alimentos básicos, comprar medicamentos y satisfacer otras necesidades primarias. La Arquidiócesis y las demás diócesis católicas de Rio de Janeiro, como así también las otras Iglesias, actuaron en colaboración con el llamado Movimiento Unificado de Funcionarios Públicos de Estado (Muspe). Una situación similar vio a cerca de 40 entidades brasileñas, entre religiosas y civiles, trabajar juntos para acoger refugiados provenientes sobre todo de Venezuela. Algunos de esos entes llevan a cabo acciones de emergencia (ofrecimiento de alimentos y medicamentos, tratamientos médicos y psicológicos), mientras otros ayudan a obtener la residencia en Brasil a través del acceso a la documentación necesaria, cursos de lengua portuguesa, alojamiento y trabajo. Estas entidades han sido particularmente activas en la región de frontera entre los dos países, pero también en otras regiones adonde fueron enviadas familias de refugiados en el intento de ofrecerles mejores oportunidades de trabajo y vivienda. Iniciativas de este tipo reflejan el deseo de muchos brasileños de “llegar” siempre a quienes tienen más necesidad de ayuda. Tal vez es este impulso lo que justifica los datos de la consulta “Other Forms of Work”, elaborada en 2017 y publicada recientemente por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). Según esta investigación, 7,4 millones de personas hicieron voluntariado este año, el equivalente al 4,4% de la población de 14 años o más. Por voluntariado los investigadores entienden el trabajo no obligatorio, realizado al menos una hora a la semana, sin recibir una retribución o beneficio en cambio, por personas que no viven en la misma familia del voluntario. Siempre según la investigación, el perfil de los voluntarios en Brasil describe principalmente a mujeres que junto con la actividad de voluntariado se ocupan de trabajo profesional y doméstico. Otro ejemplo que viene del Movimiento de los Focolares es Milonga, un programa que pone en contacto las organizaciones no gubernamentales de carácter social de siete países con jóvenes que quieren integrar su formación humana con el voluntariado, donando su tiempo y su trabajo. En octubre de 2018, 75 voluntarios del proyecto trabajaron en 19 organizaciones en Brasil, Argentina, Bolivia, México, Paraguay, Venezuela, Uruguay, Kenya y Jordania. “Aprendí que la esencia de la vida no es tener, sino ser. A veces estamos llenos de muchas cosas, pero lo que cuenta realmente son esas cosas que quedan en la eternidad del momento presente”, dijo Rarison Gomes, 30 años, originario de Manaus.  La experiencia del voluntariado coincide con un cierto protagonismo juvenil en crecimiento entre chicos brasileños que desean pasar de la reflexión política a la acción. Un ejemplo significativo es la experiencia del Colectivo Juventude Campo Cidade, nacido hace más de diez años de una conversación entre amigos en la pequeña ciudad de Poço Redondo, en el Estado de Sergipe, en el Nordeste de Brasil. Algunos de esos jóvenes eran ya activos en movimientos sociales en el Alto Sertão Sergipano, como se la llama a esa región. Motivados por el proceso electoral de 2008, estos muchachos decidieron hacer nacer un programa de formación política para los jóvenes de la región. Aun sin recursos y con escaso apoyo, el grupo organizó un curso en 11 etapas de la duración de un año y medio. En el origen del proyecto, una clara toma de conciencia: era necesario formarse, conocer la realidad, para asumir el protagonismo social en la región. “Teníamos la sensación de querer transformar la sociedad y eso se fue consolidando en todas las etapas del curso”, dice Damião Rodrigues Souza, uno de los que idearon la iniciativa. Al terminar el primer curso, los jóvenes llegaron a la conclusión de que la experiencia iniciada allí tendría que continuar, basándose en tres pilares: formación, organización y lucha. El último de estos pilares se concretizó en una serie de iniciativas que produjeron resultados eficaces: la instalación de un campus de una universidad pública federal en la región; la construcción de un teatro popular con una capacidad para 200 personas en la ciudad de Poço Redondo (construido por los mismos jóvenes); la concesión por parte del Gobierno Federal de un pedazo de tierra, hasta ahora inactivo, que se destinará al cultivo de productos biológicos por parte de los jóvenes. Aunque aislados y dispersos a lo largo de los más de ocho millones de kilómetros cuadrados de Brasil, éstos y muchos otros ejemplos de diálogo y participación política, así como de acción concreta para la construcción de una sociedad justa y fraterna, dan testimonio de un cuadro mucho más sano que el de la simple polarización política adonde fue conducida gran parte de la sociedad brasileña. Para los protagonistas de estas acciones, la esperanza está en la convicción de que los ejemplos y los frutos concretos están en condiciones de capturar “seguidores” y potenciar ese protagonismo, que es fundamental para unir a las personas en favor del bien común más allá de las diferencias político-ideológicas.

Luís Henrique Marques

Brasil, más allá de la polarización político-ideológica/1

Brasil, más allá de la polarización político-ideológica/1

Un Brasil impregnado de disputas políticas e ideológicas es la imagen que parecería prevalecer hoy en el mundo, por efecto de la lectura mediática. Luís Henrique Marques, jefe de redacción de Cidade Nova nos acompaña en un viaje por la sociedad brasileña, para descubrir la realidad, a menudo desconocida, de los muchos que actúan por el bien común. A juzgar por lo que los medios de comunicación comerciales divulgan a diario, Brasil parece sumergido en la polarización político-ideológica, como sucede también en varias regiones del globo. Pero lo que los medios mainstream no muestran es que la realidad brasileña no está hecha sólo de disputas políticas e ideológicas. La performance silenciosa de muchos “pioneros” de esta democracia aún joven e inexperta revela que hay un potencial capaz de hacer que las relaciones políticas sean un espacio de diálogo y un lugar para la construcción de la ciudadanía. La revista Cidade Nova es uno de los vehículos comprometidos en mostrar esta otra cara de la realidad brasileña, aún acaso tímida, limitada a hechos aislados, pero que – en su conjunto – muestra un Brasil que está más allá de la polarización político-ideológica. Espacios para el diálogo Ante todo, tenemos que reconocer que a pesar de la crisis creada por las posiciones polarizadas en el debate político-ideológico, muchos analistas tienden a mirar con optimismo y esperanza el actual escenario brasileño. El motivo principal es que muchos ciudadanos brasileños se han interesado en comprender y discutir cuestiones políticas y referidas a la administración pública, convencidos de la necesidad de asumir su rol de ciudadanos conscientes y participativos respecto de la “cosa pública”. Se han multiplicado e intensificado los llamados grupos de diálogo, promovidos por parroquias o grupos pastorales de la Iglesia católica, grupos de otras Iglesias cristianas y otras religiones (incluso iniciativas ecuménicas e interreligiosas), organizaciones no gubernamentales, colectivos y otras entidades de la sociedad civil. El objetivo es promover la reflexión política a través del diálogo y el intercambio de experiencias, que se ha intensificado sobre todo en la segunda mitad de 2018 tras el período electoral. Son pequeñas “islas”, pero reflejan el potencial de participación democrática de los ciudadanos brasileños. Es el caso de los grupos del Movimiento de los Focolares, esparcidos en diversas regiones del Brasil. Motivados por un tema específico, jóvenes y adultos de distintas convicciones religiosas y políticas y de distintas condiciones sociales han iniciado un proceso de diálogo acerca del escenario político actual, sus obstáculos y sus posibilidades. Muchos de estos encuentros fueron más allá de la discusión sobre el proceso electoral, y se abrieron a acciones concretas para la promoción de políticas públicas que favorezcan la comunidad local. La “Escuela de la Ciudadanía”, promovida siempre por los Focolares, es un curso online cuyos temas responden a la demanda difundida de una nueva cultura democrática y participativa. El primer bloque de clases tuvo como tema justamente el diálogo. (www.focolares.org.br/escoladecidadania). Otra iniciativa fue el fruto de la acción conjunta de distintas organizaciones de la sociedad civil brasileña, entre las cuales el Movimiento Político por la Unidad (MPpU): el “Pacto por la democracia”. La iniciativa nació con el objetivo de afirmar el pluralismo, la tolerancia y la convivencia con la diversidad en el espacio público, y actúa en tres direcciones: reafirmar el diálogo para una confrontación virtuosa de las ideas; defender elecciones limpias que puedan representar eficazmente la ciudadanía y restituir las bases de confianza y legitimidad al contexto político; realizar una amplia reforma política al terminar el proceso electoral. Por último, la tradicional Campaña de Fraternidad, promovida anualmente por la Conferencia Episcopal de los obispos de Brasil (CNBBB) durante la Cuaresma, también se presenta como un espacio de diálogo y promoción de acciones concretas en las comunidades parroquiales sobre cuestiones religiosas, culturales, sociales, económicas y políticas de la sociedad brasileña. Para este año, la Campaña propone que los fieles reflexionen sobre el tema “Políticas públicas y fraternidad”. (continúa)

Luís Henrique Marques

Chicos unidos para decir no al bullying

Chicos unidos para decir no al bullying

El proyecto “Why fai il bullo?” (“¿Por qué eres un matón?”) enseña a los adolescentes a ayudar a sus coetáneos a afrontar este fenómeno con acciones y prevención a partir de las causas que lo generan. Un abuso sistemático, con ofensas y hostigamiento realizado por chicos en relación con sus coetáneos. Esto es el bullying, un fenómeno creciente entre adolescentes, tanto a nivel personal como a través de la web. En el mismo se ven involucrados los chicos matones, las víctimas y los grupos de amigos que a menudo participan asustados o cómplices. ¿Qué hacer? Un proyecto de la asociación bNET, promotora de la “Red Proyecto Paz”, una red internacional de escuelas, instituciones y asociaciones que colaboran para promover una cultura de paz. El objetivo es responsabilizar a los chicos, que ellos mismos, oportunamente formados, ayuden a sus coetáneos a salir del bullying. Hablamos al respecto con el Presidente de la asociación Marco Provenzale. – ¿Qué es el proyecto “Why fai il bullo”? (¿Por qué eres un matón?) Todo episodio de bullying nace de un conflicto. Nosotros creemos que haciendo entender a los chicos su origen y dándoles los instrumentos para comprender los conflictos y resolverlos ayudándose entre pares es la mejor forma de resolver el fenómeno. El corazón del proyecto es la creación en cada escuela de un grupo de estudiantes, el “Grupo de Mediación entre Pares”, en el cual los chicos adquieren las competencias para manejar y resolver los conflictos, reconociendo en la vida cotidiana de la clase cuando se verifican potenciales situaciones de peligro antes de que degeneren en tensiones más graves. Después el Grupo ofrece un servicio de mediación a través de una “ventanilla” que se abre en cada escuela. Los chicos con los que trabajamos tienen entre 11 y 15 años. Se trata de un proyecto europeo, nacido en el 2015 después de que algunas asociaciones participaron en la convocatoria “Joining Forces to Combat Cyber Bullying in School”, pero podría realizarse también en otros países. – ¿El proyecto también prevé actividades paralelas? Si, mediante encuentros formativos mensuales y eventos anuales entre los cuales un viaje intercultural y humanitario. Están previstos momentos de formación también para los docentes y los padres de familia. Consideramos que esta co-participación de varias asociaciones, la escuela y las familias es uno de los valores agregados de la iniciativa. – El proyecto es promovido por la Asociación bNET, líder de la “Red Proyecto Paz”, ¿cuáles son sus objetivos? La “Red Proyecto Paz” lleva adelante desde hace casi treinta años una formación integral para los chicos. Favorece la colaboración entre instituciones educativas y asociaciones, a nivel local e internacional; desarrolla la capacidad reflexiva en los jóvenes sobre temáticas de actualidad; promueve experiencias de voluntariado; valora los talentos artísticos y expresivos, las capacidades de liderazgo y las habilidades tecnológicas también para un uso positivo de los medios. Para mayores informaciones: visitar el sitio www.reteprogettopace.it o escribir a direttivo@reteprogettopace.it.

Anna Lisa Innocenti

Un maestro de la escucha

Era un hombre de gran equilibrio y sentido común. Siendo casi ciego, Klaus Purkott realizaba su donación a Dios ofreciendo su escucha a muchos. Era casi ciego y era un hombre de pocas palabras, pero tenía una gran capacidad para escuchar, para una escucha profunda. Así fue como Klaus Purkott entablaba relaciones, ayudaba y acompañaba a las personas; en resumen, vivía su donación a Dios como focolarino. Lo hacía en particular a través del trabajo que hizo en Berlín durante más de 20 años como abogado en una oficina estatal en el Tribunal Civil. Recibía a las personas, especialmente a las personas pobres, que no podían pagar un asesor legal y era estimado y querido por los clientes y colegas, porque podía resolver incluso los casos difíciles de manera inesperada y no convencional. De hecho, tenía una atención especial para quienes se encontraban en situaciones aparentemente sin solución. Este amor preferencial por aquellos que se encontraban en dificultad, Klaus lo había heredado de su pasado comunista. Nació el 31 de diciembre 1936 en la Alta Silesia, una tierra con mayoría alemana, que después de la guerra fue asignada a Polonia. A pesar de su ceguera congénita (tenía una capacidad visual de alrededor del 5 por ciento) logró hacer el secundario y continuó sus estudios en la universidad, siguiendo curso de filosofía marxista. Al igual que su padre, fabricante de cestas y uno de los fundadores del Partido comunista de Polonia, Klaus también esperaba encontrar en el comunismo la verdadera vida. “Pero Dios, como me dijo una vez, a través de mi ceguera, enseguida me hizo comprender la inutilidad de todos mis esfuerzos y me preparó para el encuentro con Él”. Aun en la oscuridad de su vida, Klaus encontró una luz en la figura de Jesús en la cruz, que, precisamente en el máximo de la oscuridad, se abandona en el Padre. Este descubrimiento, que tuvo lugar a través del encuentro con la espiritualidad de los Focolares, cambió su vida y lo llevó a otra opción radical: vivir como un focolarino consagrado con una vida dedicada a los demás. Vive esta opción además que en el ambiente de trabajo en otros campos: en acompañar a personas que confían fácilmente en él, en ofrecer su conocimiento profundo y sabio de la Biblia a través de temas y artículos, o contar experiencias sencillas de su vida. Era estimado por su vasta cultura, su lenguaje extremadamente sencillo, pero también por su humor típico con el que lograba disolver las tensiones. En 1999, ahora retirado, Klaus es llamado a Ottmaring en la Ciudadela Ecuménica de los Focolares en Alemania. Allí también gozaba de autoridad moral. “Era un hermano mayor, – como lo llaman los focolarinos – construía relaciones de manera discreta”. Sus otras características fueron el equilibrio, el sentido común, la sinceridad y una relación profunda con Dios. En 2008 Klaus regresa a Berlín. Hace poco más de dos años se lesionó en un grave accidente, tanto que fue necesario su traslado a un asilo de ancianos. Allí continúa su testimonio de vida vivida según la Palabra de Dios. Pronto se formará un grupo de la “Palabra de vida” a su alrededor y se manifiesta su vivir bien el momento presente; un estilo de vida que le abrió el camino para que llegara dignamente al encuentro con el Padre el 18 de enero de 2019, inesperadamente y sin clamor, durante la acostumbrada siesta después del almuerzo.

Joachim Schwind

Evangelio vivido: pequeños pasos hacia la paz

Pequeños gestos pueden transformar la sociedad en la que vivimos Condominio En mi condominio, hubo una fuerte tensión cuando un vecino mío, ausente en la última reunión, envió a todos una advertencia para impugnar las obras que se habían llevado a cabo en el edificio, según él, de manera ilegal. Para aclarar la situación, traté de convencer al administrador para que convocara la asamblea nuevamente. Finalmente, después de muchas dificultades, la asamblea se reunió y en esa ocasión se resolvió la cuestión. Desde entonces, la situación ha cambiado, el vecino saluda a todos y se ha creado un nuevo entendimiento en el condominio. (Alessandra – Italia) El abuelo Hemos recibido a nuestro abuelo en casa, tiene un problema en los ojos y necesita un chequeo todos los meses. Un día, mientras estábamos en el consultorio médico, abro mi bolso y me doy cuenta de que me había olvidado la billetera en casa. Al no saber cómo pagar la visita, me encomiendo a Dios. Al salir, el médico me lleva a un lado y me dice: “Esta vez no tiene que pagar”, y también me ofrece algunos medicamentos de muestra. Entendí que si actúo por amor, Dios no me abandona. (Arze – Líbano) El paquete En la casa de estudiantes donde vivía, recibí un paquete que contenía mermeladas, conservas y varias prendas de vestir. Mis padres no habían mencionado ningún envío. De acuerdo con otros estudiantes, con quienes compartimos el deseo de vivir el Evangelio, decidimos destinar todo a aquellos que entre los estudiantes nos parecían más necesitados. Días después, en la portería, escuché casualmente a un estudiante que preguntaba por un paquete. Entendí el error, debido a que tenemos un apellido similar. Le conté todo y nos reímos juntos. Habiendo contado la historia a mi familia, me enviaron un paquete aún más grande para él. Ese día nació una verdadera amistad entre nosotros. (C.d.F. – República Checa) Los carros Después de comprar en el supermercado, mientras iba a poner el carrito en su lugar, me di cuenta de que en otros carros había guantes y bolsas de verduras inutilizables. Se me ocurrió que podía recogerlos y tirarlos a la basura. Un pequeño gesto de amor para los clientes posteriores. (Annalisa – Suiza)

Recopilados por Chiara Favotti

Eliminar la pobreza: una semana de sensibilización

Con la acción “End Poverty Week” los Jóvenes por un Mundo Unido promueven acciones concretas y una campaña social en pro de un mundo más equitativo. “La tendencia de hoy evidencia que se ha enlentecido el proceso de reducción de la pobreza extrema y el aumento de la concentración de la riqueza en manos de pocos. Lamentablemente pocos tienen demasiado y demasiados tienen poco. Muchos no tienen alimentos y van a la deriva, mientras pocos nadan en el exceso. Esta perversa corriente de desigualdad es desastrosa para el futuro de la humanidad”. Estas palabras que Papa Francisco dirigió la semana pasada el Fondo Internacional para el desarrollo agrícola describen bien la situación mundial de la lucha contra la pobreza. De hecho, las cifras presentadas en el informe del 2018 de la ONU sobre la llaga de la pobreza son alarmantes: 821 millones de personas en el mundo fueron víctimas del hambre en el 2017, 6 millones más respecto al 2016. Una de cada diez personas vive en condiciones de pobreza extrema, es decir con menos de 1,25 dólares al día. Pero la pobreza se puede derrotar si se realizan acciones decididas. ¿Cuáles son las causas? Los conflictos, las enfermedades, la sequía y la desocupación. Del 17 al 23 de febrero de 2019, en el ámbito del itinerario “Pathways of Economy, Work and Communion”, los Jóvenes por un Mundo Unido convocaron a la “End Poverty Week”, una semana de sensibilización para la eliminación de la pobreza. La propuesta se injerta dentro del United World Project, y prevé la promoción de acciones dirigidas a superar las desigualdades en favor de los pobres de un territorio; momentos de sensibilización a una mayor conciencia en el consumo; la promoción de finanzas éticas. “Soñamos con un mundo en donde no haya personas necesitadas y todos tengan la posibilidad de desarrollar plenamente el propio potencial humano, espiritual, económico y laboral” – explica Andrés Piccinini, argentino, de los Jóvenes por un Mundo Unido. También está en programa la formación de personas que quieran comprometerse en el proyecto. En el Polo Lionello Bonfanti (Loppiano, Italia) se desarrollarán una serie de encuentros con el título Economía, Trabajo y Comunión. La propuesta se orienta a promover personalmente o colectivamente también pequeños gestos cotidianos, acciones ya en curso que localmente puedan incidir en la opinión pública. El método: actuar y después compartir las acciones en las redes sociales, usando los hashtag #Pathways4unitedworld, #pathway2018, #endpoverty, #unitedworldproject, escriben los Jóvenes por un Mundo Unido en su página de Facebook y de Instagram.

Patrizia Mazzola

Brotes que dan esperanza

Brotes que dan esperanza

El Consejo General de los Focolares visitó durante dos días los lugares santos: la gruta de la Natividad de Belén, el Cenáculo, el huerto de los olivos, el Calvario. Con momentos de encuentro con personalidades para profundizar cuestiones de gran actualidad para la Tierra Santa.

el rabino Ron Kronish y el obispo luterano emérito, Munib Younan

El 14 y 15 de febrero fueron días de una full immersion en la situación política y religiosa de Tierra Santa. El Consejo General se puso en marcha, junto a los miles de peregrinos que acuden cotidianamente a Jerusalén, para visitar algunos de los lugares santos. Pero no sólo para eso: estos días fueron dedicados también a profundizar la situación política y religiosa de esta tierra. Los acompañaron durante este recorrido dos personalidades de excepción: el rabino Ron Kronish y el obispo luterano emérito, Munib Younan. “La guerra entre judíos y cristianos ha terminado” observó el rabino Kronish hablando del diálogo judeo-cristiano. Tanto él como el obispo Younan, luego, focalizaron su discurso en las condiciones políticas necesarias para una convivencia pacífica, no sólo entre Israel y Palestina, sino en todo el Medio Oriente. “Dos pueblos – dos Estados” es el slogan que expresa, según la opinión concorde de estos hombres de diálogo, amigos de muchos años, la base indispensable sobre la cual construir una paz verdadera. “Sólo con dos Estados – dice Kronish – lograremos ponerle fin a la violencia”. Y una vez terminada la guerra – es la convicción expresada por el rabino Kronish, fundador de muchas iniciativas de diálogo – surgirán también los recursos económicos necesarios para una política de educación y formación a la convivencia pacífica. Munib Younan, nacido en una familia de refugiados palestinos, agrega otros elementos necesarios, según su opinión, para una paz duradera: una Jerusalén que pertenezca igualmente a las tres grandes religiones (judía, musulmana y cristiana) y a dos pueblos (judío y palestino) y una solución para los refugiados palestinos. Él también está de acuerdo en que, tras las opciones políticas, se requiere una estrategia de formación sobre todo para los jóvenes. “Empiecen un Movimiento laico como el de ustedes entre cristianos palestinos – es la invitación que dirige a los Focolares – lo necesitamos mucho”. Pierbattista Pizzaballa, Administrador Apostólico en Tierra Santa, recibió al Consejo General el jueves pasado en la sede del Patriarcado Latino. En su saludo hizo hincapié en la fuerza de lo que es pequeño. “Nosotros cristianos en Tierra Santa somos pocos, débiles y frágiles – explicó – y justamente por eso podemos hacer la propuesta, que se presenta como una provocación, de una Jerusalén no sólo celestial, sino también terrestre, que tiene, como dice el Apocalipsis, todas las puertas abiertas.” La tarea de los cristianos sería la de sembrar, sin pretender ver los efectos. Lanzar semillas, incluso pequeñas, y dejar a la Divina Providencia que las haga crecer y fructificar. Esa invitación del Arzobispo pareció hacerse realidad algunas horas más tarde; al lado de la Iglesia de San Pedro en Gallicantu, adyacente a la escalera en la cual Jesús, según la tradición, expresó su oración por la unidad, María Voce, Presidente de los Focolares, depositó en la tierra una pequeña medalla. Es la primera semilla de un “Centro Internacional para la Unidad y la Paz” en Jerusalén, que está por nacer justamente allí, como la realización de un sueño que Chiara Lubich, fundadora de los Focolares expresara ya durante una visita a Tierra Santa en 1956. “Chiara – afirmó María Voce – desde el Cielo bendecirá este proyecto y lo llevará adelante”. Un momento profundo, en el que estaban presentes también 170 miembros de las comunidades de los Focolares en Tierra Santa. Testigos, estos últimos, de que la pequeña semilla lanzada en esta tierra a lo largo de los años, está mostrando ya sus primeros brotes.

Joachim Schwind

Llevar el Resucitado al mundo

Llevar el Resucitado al mundo

En el retiro del Consejo General en Tierra Santa se han concluido los tres días de trabajo sobre: comunión de bienes, nuevas generaciones y Asamblea General 2020.   “Ese Jesús que estuvo sepultado aquí y resucitó, ahora quiere vivir en medio de nosotros y que nosotros lo llevemos a todo el mundo”. Así expresó su emoción el Copresidente del Movimiento de los Focolares, Jesús Morán, ante el Santo Sepulcro donde celebró la Eucaristía junto al Consejo General. Una jornada intensa, rica, la del 13 de febrero que comenzó despertando al amanecer para entrar en este lugar extraordinario, que parece tener muchos puntos en común con la semana de retiro que el Consejo General está viviendo en Tierra Santa. En el Santo Sepulcro, de hecho, nos encontramos ante la tumba que Jesús Resucitado dejó vacía. Y, así como en los discípulos de Jesús provocó tantas preguntas sobre el futuro, de igual modo en estos días también el Consejo General se ha dejado interpelar dando espacio a los interrogantes sobre el futuro: ¿Adónde el Resucitado –también a través de los Focolares– querrá llegar hoy? Y por consiguiente ¿Dónde deberían concentrarse las fuerzas, las energías y los recursos? Interrogantes que han impregnado los tres grandes argumentos afrontados en estos días en Jerusalén. Sobre el aspecto “comunión de bienes, economía y trabajo”, el Consejo General ha constatado en todas las expresiones del Movimiento un gran deseo de volver a la radicalidad de los primeros tiempos y de vivir con nuevo compromiso y nueva coherencia la comunión de bienes. Se ha planteado cómo concretar este deseo. La reflexión sobre las nuevas generaciones de los Focolares, segundo argumento tratado, se ha enriquecido con la retrospectiva del Genfest en Manila y la reciente JMJ en Panamá, dos etapas que han puesto de relieve todo el potencial de los chicos y de los jóvenes. Lo demuestran también algunas iniciativas que están difundiéndose ampliamente como el proyecto “Pathways for a United World” o bien el compromiso con “Fame Zero” para derrotar el hambre antes de 2030. Entre los argumentos de reflexión, cómo dar continuidad a las distintas iniciativas en curso para adherirse a estos compromisos. Por último el tercer tema: la preparación de la próxima Asamblea General de 2020. El Consejo ha puesto una particular atención, por un lado, en cómo hacer para que la Asamblea refleje la variedad geográfica, cultural y de vocaciones presentes en el Movimiento; por el otro, se ha interrogado sobre cómo conciliar las exigencias de continuidad y las de novedad que caracterizan el momento actual del Movimiento. Pronto se constituirá una comisión preparatoria que empezará a trabajar a partir de estas dos pistas. Descrito de esta manera podría parecer, sin más, un retiro hecho de tantos interrogantes, pero sin respuestas. No ha sido así. No se ha querido estructurar el resultado en un documento o en líneas programáticas. Pero se ha evidenciado un camino, ya en marcha, fruto de la vida del Movimiento presente en todo el mundo. Dejarse interpelar sobre este camino, dejarse interrogar por los grandes cuestionamientos de la humanidad de hoy y buscar nuevas respuestas, recurrir al itinerario recorrido para mirar al futuro, puede producir efectos inesperados, puede hacer encontrar al Resucitado en vías insospechadas, precisamente como les sucedió a aquellos dos discípulos que, dejando atrás la tumba vacía, se habían encaminado hacia Emaús.

                                                                                         Joachim Schwind