Sep 4, 2016 | Sin categorizar
«La Madre Teresa es (…) una maestra excelsa del arte de amar. Amaba de verdad a todos. No preguntaba a su prójimo si era católico, hindú o musulmán, etc. (…). La Madre Teresa era, sin duda, la primera en amar. Era ella la que iba en busca de aquellos para los que Dios la había enviado. La Madre Teresa veía, quizás como nadie más, a Jesús en cada uno. Precisamente su lema era «A mí me lo hiciste». La Madre Teresa se hacía uno con todos. Se hizo pobre con los pobres, pero, sobre todo, como los pobres (…). No aceptaba nada que no pudiesen tener también los pobres. Por ejemplo, es conocida su renuncia y la de sus monjas a una simple lavadora, renuncia que muchos no entendían, diciendo ¡en estos tiempos!, Pero ella lo hacía porque los pobres no la tenían, por tanto, tampoco la quería tener ella. Cargó e hizo suya la miseria de los pobres, sus penas, sus enfermedades y su muerte. La Madre Teresa amaba a todos como a sí misma, hasta ofrecerles a ellos su propio ideal. Por ejemplo, invitaba a los voluntarios, los que prestaban servicio en su Obra durante un cierto tiempo, a buscar su propia “Calcuta” en el lugar al que cada uno volvía. Porque – decía – hay pobres por todas partes. La Madre Teresa, sin lugar a dudas, amaba a sus enemigos. Nunca se detuvo a contestar las acusaciones absurdas que le hacían, sino que rezaba por sus enemigos. Sí, en ella puede verse « el arte de amar» encarnado a la perfección. Era una (…) reina de la caridad». Chiara Lubich Conferencia telefónica del 25 de septiembre de 1997 publicada en: Chiara Lubich, Construir el castillo exterior, Ciudad Nueva, Roma 2004, pp. 29-30 Leer también:
Sep 3, 2016 | Focolare Worldwide
Año 1959. En el pueblito trentino de Fiera di Primiero se desarrollaba la última de las primeras Mariápolis, etimológicamente “ciudad de María”, una de las citas típicas del Movimiento de los Focolares, en las cuales, por algunos días, adultos, jóvenes y niños, personas de las más variadas procedencias, se reencuentran con el fin de vivir una experiencia de fraternidad, a la luz de los valores universales del Evangelio. Hoy estos encuentros se desarrollan cada año en numerosos países del mundo proponiendo, en contextos muy distintos, la “regla de oro” que invita a hacer a los demás lo que quisieras que te hicieran a ti mismo. El 22 de agosto de aquel año, en plena “guerra fría” que oponía el bloque occidental al soviético, los participantes de la Mariápolis, procedentes de más de 27 naciones, decidieron consagrarse a María, ellos mismos y los propios pueblos a los que pertenecían. La fórmula de consagración se leyó en los nueve idiomas presentes y ese “pueblo” comprendió que el camino de la unidad, descubierto y experimentado en Primiero, estaba destinado a difundirse en todo el mundo. Hoy, en momentos de “colisión de incivilidades” , las relaciones entre los Estados parecen estar en el máximo desorden y esto muestra aún más la importancia de los propósitos de aquel evento del ’59, tanto es así, que la nueva Alcaldía de Primiero, recién constituida, abrió sus puertas los días 27 y 28 de agosto, al encuentro “Los Pueblos en la Familia humana”, que tuvo como relatores al Juez Gianni Caso, presidente honorario de la Corte de Casación, y a Vincenzo Bonomo, director del curso de licenciatura en Jurisprudencia en la Pontificia Universidad Lateranense. En este tiempo no se habla de pueblos, en todo caso se habla de Estados. Los pueblos son agrupaciones naturales con derecho a la autodeterminación; los Estados llegan incluso a negar la existencia de los pueblos indígenas, que sin embargo existen, para no tener eventualmente que reconocer el derecho a la autodeterminación de los indígenas. Se prefiere hablar de “sociedad civil” que tiene, al máximo, una opinión: los pueblos no tienen una opinión, tienen un derecho de autodeterminarse y pueden, y a menudo lo quisieran, reivindicar. «La paz de los pueblos es el orden querido por Dios», afirmaba Chiara Lubich y confiaba los pueblos a María, no los Estados. Los confiaba a María para que Ella los defendiera porque los pueblos tienen derecho a la defensa. «Hoy no existe más la guerra fría – afirma Bonomo- pero existe una paz fría que es tal vez peor porque es una paz, o presunción de paz, que no está basada en los valores compartidos». ¿Qué queda hoy de aquel “pacto” del ’59? El enunciado de aquellos principios es hoy más que nunca actual para orientarse en el difícil panorama geopolítico. Según los relatores queda el método de lectura de los hechos; queda el importante instrumento que supone tener la visión de un mundo unido que no anula las diferencias sino que las exalta. Existe hoy el deseo de redescubrir los valores proféticos sellados en aquél lejano ’59 y las personas presentes en el encuentro manifestaron pasión y convicción. Uno de los políticos locales, alcalde de uno de los ex municipios que han confluido en el municipio único de Primiero, afirmó que la Mariápolis de Primiero no debe ser para ese valle una atracción turística sino que debe finalmente, con sus valores “cambiar nuestra vida”. Se desea que crezca el patrimonio de valores que Chiara Lubich dejó y que Primiero sea un laboratorio de fraternidad entre los pueblos. Un ejemplo de este laboratorio se vio en la reciente, no fácil, unificación de los cuatro municipios, (Fiera di Primiero, Siror, Tonadico y Transacqua), cuatro pequeños “pueblos” que, por el bien común, eligieron la comunión. Los que vivieron aquella experiencia de 50 años atrás hablan de «semillas sembradas que hay que seguir regando». En la discusión se establece una conexión ideal entre el “Espíritu de Asís”, en las relaciones entre las religiones y el “Espíritu de Primiero” en las relaciones entre los pueblos. En la mañana del domingo 28 de agosto de 2016, en la repleta Pieve di Fiera, se repitió el acto de consagración con la “fórmula” recitada en 1959 en aquella misma iglesia. Una señal de fiesta para una nueva profunda, responsable idea de paz. Roberto Di Pietro Fuente: Cittá Nuova
Sep 2, 2016 | Focolare Worldwide
La Mariápolis 2016 nigeriana – 400 personas que del 2 al 7 de julio vivieron una intensa comunión entre jóvenes y adultos, niños, sacerdotes, personas de varias Iglesias y religiones – se desarrolló lejos de los reflectores. Porque el bien no hace ruido. Y también porque a menudo los medios de comunicación, cuando se trata de hablar de Nigeria, se encargan de contar historias muy distintas de ésta: violencias, abusos, secuestros, atentados. Sin embargo, hay que reconocer también el otro rostro de este gran país. Por ejemplo, la estructura que hospedó la Mariápolis: el Brigard National Seminary de Enugu, que es el seminario mayor de la Iglesia católica más grande del mundo, lo cual habla muy bien de la fe vivida con gran intensidad en este país. Los que dieron inicio al encuentro fueron los jóvenes, unos cincuenta, quienes llenaron el escenario y presentaron un popurrí de canciones con base góspel, cantadas y danzadas con fuerza y mucho ritmo. Luego, inesperadamente, se separaron en dos grupos de los que salían numerosas parejas que llevaban puestos los trajes tradicionales de las distintas regiones del país. Y mientras éstas desfilaban, los correspondientes grupos, presentes en la sala, se ponían de pie y todos los aplaudían. La coreografía concluyó con el himno nacional entonado por todos los presentes. Fue una explosión de alegría, que reflejó hasta visualmente la invitación que el Obispo lanzó en su homilía, para que vivieran con “energía creativa, típica de la juventud” el tema de la Mariápolis: “Unidad: don, compromiso, meta”. Un tema, este de la unidad, que a él le interesa de forma especial porque lo considera un valor, según dijo, “muy necesario aquí en Nigeria”. Luego el Obispo de Enugu, Callistus Chukwuma Valentine Onaga, exhortó a todos para que vivieran la unidad en el país según tres objetivos: solidaridad, subsidiariedad y bien común.
Con un inicio tan alto, los temas sobre la espiritualidad y su aplicación en la vida concreta, encontraron realmente terreno fértil. De manera especial fueron eficaces los testimonios, algunos incluso conmovedores, ofrecidos por personas o parejas, comprometidos en vivir el Evangelio en sus aventuras y desventuras cotidianas. Especialmente significativo fue el testimonio de un miembro de una Iglesia pentecostal y el de un joven musulmán, quienes dieron un aporte a la comprensión de los temas que se fueron presentando. Las tardes se dedicaron a una gran variedad de talleres, cada uno de los cuales ponía de relieve cómo la unidad es capaz de mejorar la vida personal y la de la sociedad. En un grupo se intercambiaron ideas y experiencias acerca de los tesoros y los desafíos de la vida familiar, en otro, se reflexionó sobre cómo vivir la unidad en medio de los problemas que actualmente atraviesa la nación, etc. Encontraron espacio también una serie de actividades en las que se les ofrecía a los participantes la oportunidad de adquirir nuevas habilidades: un mini curso para electricistas, uno de estética, otro de peluquería, etc. Estas iniciativas fueron percibidas por los participantes como un don que se les ofrecía para mejorar sus propias capacidades, trayendo a su mente la visión de Chiara Lubich y su proyecto de Economía de Comunión. “No se trata de personas ricas – dijo la fundadora de los Focolares en Piacenza (Italia) en 1999 – que actúan de manera filantrópica, sino de personas que comparten, es decir, cuando todos, iguales en dignidad, dan y reciben en un contexto de reciprocidad”. Durante la Mariápolis, para sellar el propósito de vivir por la unidad, todos los participantes quisieron pasar por la Puerta Santa (la entrada a la Capilla del Seminario) abrazando la gracia de este año especial de la misericordia de Dios y renovando el compromiso, consciente y solemne, de ser misericordia los unos hacia los otros y con todos. Video con imágenes de la Mariápolis de Enugu https://vimeo.com/181015319
Sep 1, 2016 | Sin categorizar
La diócesis de Mamfe, la familia de los Focolares y la Asociación de los ex-alumnos de la escuela “Our Lady Seat of Wisdom” (Sede de la Sabiduría), invitan a todos a las celebraciones del 50° aniversario (1966-2016) de la llegada del Movimiento de los Focolares a Fontem (Camerun) y de la apertura de la escuela. Los festejos se llevarán a cabo del 14 al 17 de diciembre de 2016, en la ciudadela “Mariapoli Mafua Ndem Chiara Lubich” (Fontem). Para más información: info@focolare-fontem.org Sitio web: www.focolare-fontem.org
Sep 1, 2016 | Sin categorizar
De la misma manera que, naciendo en un establo, Jesús se quiso incluir en seguida en el más humilde substrato social, entre gente sin casa, refugiados, expulsados, así también, dejándose crucificar, abandonado, se colocó en medio de la multitud que sufría – los oprimidos, los decepcionados, los hambrientos, los derrotados de toda época y país – justo en el centro de la humanidad de todos los tiempos. Ese centrarse en la miseria, les da a los seres humanos la medida de su amor. Pero ésta era la forma extrema de injertarse en la tragedia de la humanidad desgarrada, la manera de hacerse el último, el más cobarde, el más degradado, para estar en la base de toda miseria, una base que se eleva hacia el cielo. Lo infinito que por amor se anonada. Él había creado el universo, y lo desarrollaba y lo regía; y universo significa una producción de grandeza ilimitada, proporcionada, de alguna forma, a la grandeza de su mente: un mundo hecho de mundos, uno más maravilloso que los demás, de los cuales el ser humano — minúscula criatura de un pequeñísimo planeta, — después de siglos de estudios, se ha hecho alguna minúscula idea; con estrellas que sólo en nuestra Galaxia distan entre ellas aproximadamente 4 años-luz y que de la periferia de la Galaxia al centro de la misma cuentan una distancia de 30 años-luz, la cual puede recorrerse 1500 veces, en los dos sentidos, en tan sólo mil millones de años. En este universo, infinitamente más grande de lo que es posible imaginar con mente humana, Él había visto también la miseria del pequeño grupo de habitantes del planeta tierra, y se había anonadado para hacerse uno de ellos y los había asistido hasta darles como alimento el evangelio y su misma persona. La redención restablece el designio de la creación, lo cual conlleva que la existencia de las constelaciones y de los átomos en el universo, como la de las criaturas en la tierra y en cualquier parte del mundo, es una obra de armonización constante para realizar siempre la unidad. Por eso el Creador inyectó, como aliento vital, el amor. Bienestar, paz, salud, florecen proporcionalmente a este precepto. (Igino Giordani, L’unico amore, Città Nuova, 1974, pp. 64 e 105)
Ago 31, 2016 | Focolare Worldwide, Senza categoria
«Una llamada inesperada de mi hermano: su hijo había quedado involucrado en un accidente vial. Mi sobrino estaba yendo a buscarlo al lugar de trabajo, pero mientras manejaba tuvo un ataque de sueño y fue a dar con una moto en la que viajaban dos colegas que quedaron sin vida. Ambos estaban casados y tenían hijos. Para mí fue un shock, un dolor desgarrador. En seguida fui a la cárcel a ver a mi sobrino. No tenía palabras. Podía sólo llorar con él. Era de mañana y mi sobrino y los demás presos no habían desayunado. Fui a comprar algo de comida y luego le pedí al guardia si podía limpiar su celda. Más tarde llegó mi hermano llorando y me quedé a su lado, en silencio. Entendí que el paso siguiente tenía que ser el de pedir perdón a las familias de las dos víctimas. Pero ¿cómo hacer? Mi hermano, superando todos los temores, aceptó ir a ver a las familias afectadas y pedirles su perdón. Fuimos juntos donde vivía la primera familia y encontramos a la viuda realmente enfurecida. Traté de escucharla y asumir su dolor; luego la abracé diciendo: “Estamos aquí para pedirles perdón, sin esperar ser perdonados. No logramos comprender el por qué de esta tragedia… pero tratamos de creer en el misterioso amor de Dios”. Después queríamos pedir perdón a los padres, pero sus familiares nos habían aconsejado no hacerlo, porque se imaginaban que la madre estaría fuera de sí. Sin embargo, aunque fuera difícil, sentíamos que teníamos que hacerlo. En efecto, ella se dirigió hacia nosotros gritando; en silencio y confiando en Dios la abracé fuerte pidiéndole que nos perdonara, también en nombre de mi sobrino. Le aseguré que encontraríamos la manera de cuidar de su familia, encargándonos de los estudios de las tres hijas. Experimentaba profundamente su dolor, pero al mismo tiempo sentía que sólo Dios puede dar la paz… y a Él los encomendé a ellos y a nosotros mismos, sostenida por la unidad de la comunidad del Movimiento. Con la familia de la otra víctima pasó algo parecido. Mi sobrino fue puesto en libertad tres semanas más tarde. Las familias de las víctimas aceptaron no presentar la denuncia, a cambio de una indemnización económica. Con mis hermanos y hermanas recogimos y juntamos todo lo que teníamos y así alcanzamos el monto necesario. Esta tragedia produjo mayor unidad en nuestra familia. Un año más tarde, me puse nuevamente en contacto con la viuda. Para mi gran sorpresa, me dijo: “Quiero disculparme por como los traté a usted y a su hermano”. Desde entonces nos volvimos amigas y pude hablarle de mi fe en el amor de Dios. Ahora le envío el “pasapalabra” (una frase para vivir el Evangelio) y ella a su vez la reenvía a sus amigos. Hace dos meses, me invitó a una reunión familiar para celebrar el título obtenido por su hija mayor. Durante una Mariápolis en la que participó, me dijo: “Si no hubiera sido por ese accidente, nunca te hubiera encontrado a ti y a los Focolares. Esto le dio un vuelco a mi vida, me siento más cerca de Dios”. Sentí entonces que podía preguntarle si lograba perdonar a mi sobrino. Me contestó: “Ya lo perdoné. No hay rastros de odio ni por tu sobrino ni por su familia”. Me di cuenta de que realmente es un don enorme recibir la misericordia de Dios y, ayudados por Él, ofrecer el perdón a los demás». M.R. Fuente: New City Philippines
Ago 30, 2016 | Sin categorizar
En el sitio de la Conexión CH, los días previos a la cita, estará disponible el resumen de las noticias. En el mismo sitio es también posible acceder a las ediciones íntegras y a las noticias particulares de las Conexiones CH anteriores. Video spot
Ago 30, 2016 | Focolare Worldwide
- Desde el 7 de septiembre hasta el 17, encuentro de América Latina, Norteamérica y Oceanía.
- Desde el 28 de septiembre hasta el 8 de octubre, encuentro de África, Asia y Oriente Medio
- Desde el 15 al 23 de octubre, encuentro para Europa
Los participantes previstos en cada encuentro son casi un centenar (en el Centro Mariápolis de Castel Gandolfo, RM), con una parte del programa en común, mientras que en la otra se tratarán argumentos distintos según los intereses y exigencias de cada área geográfica. Se tratará desde el tema de la inculturación en África, hasta la emergencia prófugos y diálogo con el Islam que vive Europa; se pondrá la atención sobre los desafíos existentes en América Latina, en Asia, Medio Oriente, Norteamérica y Oceanía en el ámbito social y eclesial, desde la perspectiva de la familia, de las nuevas generaciones, del diálogo ecuménico e interreligioso, entre otros temas.
Ago 30, 2016 | Focolare Worldwide
- Desde el 7 de septiembre hasta el 17, encuentro de América Latina, Norteamérica y Oceanía.
- Desde el 28 de septiembre hasta el 8 de octubre, encuentro de África, Asia y Medio Oriente.
- Desde el 15 al 23 de octubre, encuentro para Europa.
Los participantes previstos para cada encuentro son casi un centenar (en el Centro Mariápolis de Castel Gandolfo, RM), con una parte del programa en común, mientras que en la otra se tratarán argumentos distintos según los intereses y exigencias de cada área geográfica. Se tratará desde el tema de la inculturación en África, hasta la emergencia prófugos y diálogo con el Islam que vive Europa; se pondrá la atención sobre los desafíos existentes en América Latina, en Asia, Medio Oriente, Norteamérica y Oceanía en el ámbito social y eclesial, desde la perspectiva de la familia, de las nuevas generaciones, del diálogo ecuménico e interreligioso, entre otros temas.
Ago 30, 2016 | Focolare Worldwide
- Desde el 7 de septiembre hasta el 17, encuentro de América Latina, Norteamérica y Oceanía.
- Desde el 28 de septiembre hasta el 8 de octubre, encuentro de África, Asia y Medio Oriente.
- Desde el 15 al 23 de octubre, encuentro para Europa
Los participantes previstos para cada encuentro son casi un centenar (en el Centro Mariápolis de Castel Gandolfo, RM), con una parte del programa en común, mientras que en la otra se tratarán argumentos distintos según los intereses y exigencias de cada área geográfica. Se tratará desde el tema de la inculturación en África, hasta la emergencia prófugos y diálogo con el Islam que vive Europa; se pondrá la atención sobre los desafíos existentes en América Latina, en Asia, Medio Oriente, Norteamérica y Oceanía en el ámbito social y eclesial, desde la perspectiva de la familia, de las nuevas generaciones, del diálogo ecuménico e interreligioso, entre otros temas.