Movimiento de los Focolares
Un alivio en las emergencias humanitarias

Un alivio en las emergencias humanitarias

Gracias a las donaciones de muchos, fue posible realizar intervenciones para aliviar el sufrimiento de las poblaciones afectadas por desastres naturales o guerras. La Coordinación de Emergencias de los Focolares hace balance de la situación de la recaudación de fondos en favor de Siria, Turquía, Ucrania, Italia, Paquistán y Filipinas. Los conflictos armados, las epidemias y los desastres ambientales como inundaciones o terremotos pueden poner a poblaciones enteras en graves dificultades con efectos inmediatos y a largo plazo. Para hacer frente a estas graves situaciones, en el seno del Movimiento de los Focolares se creó la Coordinación de Emergencias que, tras situaciones de emergencia humanitaria, lanza campañas de recaudación de fondos para ayudar a las poblaciones afectadas a través de programas apoyados por miembros del Movimiento de los Focolares o por organizaciones de los Focolares en todo el mundo, que operan por cuenta propia o en colaboración con otros. Recientemente, la Coordinación de Emergencias presentó el Informe 2023 donde resulta que, desde 2016 hasta finales de 2023, se recaudaron un total de 5.361.505 euros para emergencias en Siria, Turquía, Ucrania, Italia, Paquistán y Filipinas. En Siria, el proyecto “Semillas de Esperanza”, iniciado en septiembre de 2018, ha permitido ofrecer asistencia sociosanitaria a las familias, acceso a medicamentos esenciales, servicios sanitarios y quirúrgicos básicos para pacientes con enfermedades crónicas, apoyo educativo a los niños y adolescentes. Hasta el momento, 23.170 personas se han beneficiado del programa. Durante el terremoto de Siria y Turquía, ocurrido en febrero de 2023, 6.273 personas recibieron ayuda de diversas formas: asistencia financiera a 405 familias, distribución de detergentes a 490 familias y alimentos y ropa a 712 familias, además de apoyo psicológico a personas mayores, adultos y jóvenes y asistencia médica. Además, Work Empowerment (poniendo en valor las competencias laborales que cada uno tiene con el incentivo de los microcréditos) para 16 familias y 32 personas e intervenciones habitacionales para 138 familias. También se puso en marcha una granja comunitaria para proporcionar leche y generar ingresos para las familias de una aldea turca habitada por refugiados afganos. En Ucrania, en cambio, la situación de emergencia evoluciona constantemente: el conflicto se prolonga y las necesidades de la población son muchas y crecientes. En los últimos años, se ha proporcionado atención sanitaria básica a unas 12.000 personas y se ha proporcionado apoyo económico extraordinario a más de 2.000 familias. En Italia se han realizado diversas actividades de acogida para familias y niños desplazados de este país. También se realizó un campamento escolar en Austria con 30 niños de una escuela primaria de Kiev. Se ha inaugurado un centro de día protegido para niños y madres. Otra emergencia de este año fueron las inundaciones que azotaron varias regiones del planeta. En particular, durante la que afectó a Paquistán, se pudo contribuir con materiales de construcción para la restauración de 20 viviendas destruidas y apoyo a 1.150 personas. Durante la inundación de Emilia-Romaña (Italia) de 2023, se pudo ayudar a 16 familias con la compra o reparación de bienes materiales dañados por el agua y se realizaron obras de renovación en las viviendas de 7 familias. Además, se creó un campo de trabajo y se renovó una granja educativa. La Coordinación de Emergencia del Movimiento de los Focolares gestiona estos proyectos a través de Amu (Acción por un Mundo Unido) y AFN (Acción para Nuevas Familias), dos ONG nacidas del Movimiento de los Focolares que actúan en el sector social. Hasta la fecha, la recaudación de fondos sigue activa para las emergencias en Ucrania y después del terremoto en Siria y Turquía.

Carlos Mana

Chiara Lubich: la fraternidad se realiza solamente con una amor especial

Hoy, 14 de marzo, día en que recordamos la partida al Cielo de Chiara Lubich, publicamos algunas de sus palabras, pronunciadas durante el encuentro del Movimiento Político por la Unidad, en Berna (Suiza), el 4 de septiembre de 2004. Una reflexión sobre el tipo de “amor” necesario para que sea posible la fraternidad universal. […] La fraternidad se realiza solamente con un amor especial. Es un amor que se dirige a todos, como Dios Padre que manda la lluvia y el sol sobre los sombríos malos y sobre los buenos. No es un amor que se dirige solamente a los parientes, a los amigos, a algunas personas, sino que se dirige a todos, y esto ya requiere una gimnasia. Si nos llevásemos hoy de esta sala únicamente el propósito de amar a todas las personas que encontremos, si es posible, y como somos cristianos, viendo a Cristo en ellos – porque Él dirá: “a mí me lo hiciste”, “a mí me lo hiciste”, “a mí me lo hiciste” -, a mi parecer, ya habríamos ganado mucho, porque de aquí partiría la revolución cristiana. Pero después, este amor que es necesario para la fraternidad, que no es tolerancia, pero es también tolerante; que no es solidaridad, pero también es solidaridad; es algo distinto, porque es el mismo amor de Dios – los cristianos decimos, difundido en nuestro corazón por el Espíritu Santo -, es un amor que es el primero en amar, no espera a ser amado, es el primero que se lanza, que se interesa por las personas, cuando… naturalmente, no hay que turbarlas. Éste es el primero que parte, no espera ser amado. En general, cuando uno ama, siempre espera ser amado para poder amar, en cambio éste es un amor que es el primero, que debe empezar… Y aquí está la revolución. Es por lo que nuestro Movimiento ha llegado, gracias a un carisma de Dios, no por nosotros, ha llegado hasta los últimos confines de la Tierra, porque si partimos de aquí pensando en amar a todos, en ser siempre los primeros, sin esperar, ¿eh? Aquí ya está el Evangelio, ¿Entienden lo que es el Evangelio? Esto es Evangelio. Además es un amor, que no es un amor sentimental,  no un amor platónico, no es un amor evanescente, sino un amor concreto, que se hace uno con la persona amada: si está enfermo, se siente enfermo con ella; si goza, goza con ella; si conquista algo, la conquista también es suya. Como dice San Pablo: “Hacerse todo a todos”, “Hacerse todo a todos”, hacerse pobre, enfermo con los demás. Compartir, así es este amor, un amor concreto. Por lo tanto, un amor que se dirige a todos, que es el primero en amar, y un amor que debe ser concreto. Además, hay que amar a los demás como a uno mismo, así dice el Evangelio. A Eli, mi compañera, a quien veo en la sala, soy yo, porque debo amarla como a mí,  como a Chiara, como amo a mí misma. Y lo mismo a Clara, debo amarla como a mí; a la otra señora, debo amarla como a mí,  a la otra señora, como a mí, porque esto es Evangelio. También esto es fuerte, ¿quién ama al otro como a sí mismo? Y en cierto modo, casi que se traslada uno mismo a los otros para amarlos como a sí mismo. Además, es un amor que si lo viven más personas, se hace recíproco, porque yo amo a Marius, Marius me ama a mí; yo amo a Clara, y Clara me ama a mí. Este amor recíproco que es la perla del Evangelio – Jesús dijo: les doy un mandamiento nuevo: que se amen unos a otros como yo les he amado” y dijo que es el mandamiento suyo y nuevo, suyo, por tanto, sintetiza el Evangelio -, es la base de la fraternidad. ¿Qué queremos…? ¿Cómo podemos hacer para ser hermanos unos de otros sino amarnos, y amarnos como Él nos amó, dispuesto incluso a dar la vida por nosotros? Hay que tener presente todas estas cosas. Teniendo presente cómo es este amor, así respondo al señor que me ha hecho la pregunta ¿cómo hay que plantear la relación con los demás? Hay que plantearla como un diálogo. Yo tengo que ver al otro como alguien con quien tengo que dialogar pero, para poder dialogar, tengo que conocerlo, por lo tanto, tengo que entrar en el otro, no para imponerme, sino para tratar de entenderlo, dejar que el otro se exprese. […]  es necesario entrar en el otro, dejar que se abra, dejar que hable y que sienta el vacío en nosotros, la capacidad de comprenderlo, de entenderlo. Entonces  sucede – es nuestra experiencia – que también el otro comprende que es amado y entonces escucha con gusto también nuestro discurso. Y aquí el Papa dice una frase estupenda para el diálogo. Entonces es necesario que demos nuestra verdad, en la que creemos, pero que sea un “respetuoso anuncio”, es decir, un anuncio que respete el pensamiento del otro, que no quiere hacer proselitismo, en fin, que no quiere mortificar al otro. Éste es el diálogo que hay que hacer y es la base de nuestra vida, de la fraternidad universal.

Chiara Lubich

https://youtu.be/57DICJjVjj8

Oikoumene – de toda la tierra

Oikoumene – de toda la tierra

El viernes  1 de marzo concluyó en la histórica ciudad de Augsburgo (Alemania) el 40° Congreso ecuménico de Obispos amigos del Movimiento de los Focolares. Eran 60 los participantes provenientes de 26 países y pertenecientes a 29 Iglesias cristianas. “Dare to Be One. A call from Jesus to live the future, now” (Animarnos a Ser Uno. Un llamado de Jesús a vivir el futuro, ahora) fue el título y más aún la realidad del encuentro. 1518 – En Augsburgo se encuentran discutiendo el Cardenal romano Cayetano, conocido teólogo tomista, y el monje agustino Martín Lutero, docente de Sagrada Escritura en la Universidad de Wittenberg, sobre las 95 tesis acerca de las indulgencias que ha presentado Lutero. No hay nada que hacer. No se entienden. Lutero teme por su vida y en la noche se escapa. 1530 – La Dieta del Sagrado Imperio Romano conduce a Augsburgo al emperador Carlos V que quiere volver a juntar a protestantes y católicos, ya divididos. Para la ocasión Felipe Melanchthon, teólogo amigo de Lutero, ha preparado la Confessio Augustana, una confesión de fe redactada para poner a todos de acuerdo. El intento fracasa. 1555 – Durante una ulterior Dieta en Augsburgo se firma la Paz religiosa que asegura la coexistencia de católicos y luteranos. Cada uno de los príncipes del Imperio establece qué confesión se seguirá en su territorio, una decisión resumida en la expresión latina cuius regio eius religio (de quien es la región es la religión). 1650 -Tras la sanguinaria guerra de los 30 años, que ha impactado a Augsburgo también, se sanciona la libertad de expresión religiosa y la paridad de protestantes y católicos en todas las oficinas públicas. Nace la Alta Fiesta de la Paz que se celebra aún hoy cada 8 de agosto. En este sitio cargado de historia, Augsburgo –y por invitación del Obispo católico del lugar Bertram Meier– se llevó a cabo del 27 de febrero al 1 de marzo el 40° Congreso ecuménico de Obispos amigos del Movimiento de los Focolares.  De él participaron 60 Obispos de 26 países, pertenecientes a todas las grandes familias de Iglesias: ortodoxos, Iglesias orientales ortodoxas, anglicanos, metodistas, evangélicos, reformados, católicos de rito latino, armenio y bizantino. Nunca habían sido tantos y con una proveniencia tan universal, que fue destacada también por la Alcaldesa de la ciudad, Eva Weber, cuando recibió a los Obispos en el Municipio. Ya viéndolos llegar, impresionaba ver la relación entre estos Obispos, entre los cuales también dos mujeres, Obispos de Iglesias nacidas de la Reforma. Cada Iglesia es recibida así como es. Un espíritu simple de fraternidad penetra esas jornadas, sin desconocer las heridas que aún existen y los puntos en donde no hay acuerdo entre las Iglesias. Pero todo está sostenido por ese pacto de amor recíproco que ha caracterizado desde el comienzo estos Congresos y que los Obispos renuevan solemnemente este año también, prometiéndose compartir las alegrías y las cruces el uno del otro. De allí nace una original sinodalidad ecuménica, como ha sido definida por varios participantes. Dare to Be One. A call from Jesus to live the future, now  (Animarnos a Ser Uno. Un llamado de Jesús a vivir el futuro, ahora) es el osado lema del congreso y, más aún, del camino del que participan también la Presidente y el Copresidente de los Focolares, Margaret Karram y Jesús Morán. Los temas que se profundizaron fueron tres, cada uno de los cuales fue ilustrado con experiencias: el ecumenismo receptivo como metodología ecuménica, que lleva a aprender los unos de los otros; el común llamado a dar testimonio del Evangelio en un mundo dividido en busca de paz; Jesús Crucificado y abandonado como camino para afrontar la noche del mundo y responder de una manera generativa. Una fecha más: el 31 de octubre de 1999. Se cumplen 25 años de cuando la Federación Luterana Mundial y la Iglesia católica firmaron justamente en Augsburgo la “Declaración  conjunta sobre la doctrina de la justificación”, reconociendo que sobre ese punto clave del disenso en el siglo XVI, hoy ya no hay motivo de separación. Una Oración ecuménica conmemora el histórico evento en el lugar de la firma: la iglesia evangélica de Santa Ana. Al día siguiente una mesa redonda profundiza el alcance de todo ello. El Reverendo Ismael Noko, en ese entonces secretario general de la Federación Luterana Mundial, ilustra el camino humilde y tenaz que ha hecho posible la firma y ha visto la sucesiva adhesión de otras tres Comuniones Mundiales (metodista, reformada y anglicana).  El Doctor Ernst Öffner, en ese momento Obispo evangélico regional de Augsburgo, cuenta cómo había trabajado, junto con el Obispo católico de entonces, para hacer participar a la población y que toda la ciudad estaba de fiesta. El Obispo católico Bertram Meier habla de los retos y de las oportunidades del camino que ahora tenemos delante. Durante todo el congreso siempre se han puesto en la mira las actuales amenazas a la paz y a la justicia. A este respecto, ha sido muy importante el mensaje vídeo acerca de la situación que se vive en Tierra Santa, que el Cardenal Pizzaballa envió a los Obispos participantes del congreso. Con todo ello como fondo, hubo dos realidades que dieron una particular esperanza: el desarrollo de la red ecuménica “Juntos por Europa” que involucra a alrededor de 300 Movimientos y comunidades de varias Iglesias, y la visita a la Ciudadela ecuménica de Ottmaring (Alemania) en donde desde hace 56 años católicos y luteranos de distintos Movimientos dan un testimonio de unidad en la diversidad, un camino no siempre fácil en el que de cada crisis nacieron nuevos desarrollos. Pensando en el futuro se apunta al crecimiento de las redes locales, a la conexión entre todos a través de periódicos encuentros online y  newsletters,  previendo un próximo encuentro internacional dentro de dos o tres años.

Hubertus Blaumeiser

La IA: un camino hacia la paz mundial y el desarrollo humano integral

La IA: un camino hacia la paz mundial y el desarrollo humano integral

NetOne, asociación internacional de profesionales de los medios de comunicación, del cine y de los operadores de tecnologías de la información, junto a New Humanity, Organización No Gubernamental (ONG), realidades fundadas en el espíritu y los valores que animan al Movimiento de los Focolares, en colaboración con la Misión de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, lanzaron la iniciativa “IA: un camino hacia la paz mundial y el desarrollo humano integral”, una reflexión sobre la ética de la inteligencia artificial y sus implicancias. El miércoles 21 de febrero, NetOne junto con la ONG New Humanity, en colaboración con la Misión de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, coorganizaron la iniciativa «AI: un camino hacia la paz global y el desarrollo humano integral», que tuvo lugar en Nueva York, UNHQ, Sala de Conferencias 6, de 13.15 a 14.45 horas y fue seguida online desde distintas partes del mundo El discurso de apertura de Su Excelencia el Arzobispo Gabriele Caccia, Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, marcó el tono de las reflexiones: «Estamos al borde de una revolución tecnológica sin precedentes en la historia de la humanidad. La aparición de la inteligencia artificial está transformando nuestro mundo de un modo profundo y sin precedentes. Desde revolucionar las industrias hasta transformar nuestra forma de vivir, trabajar e interactuar, la IA se ha convertido en una fuerza impulsora del cambio en el siglo XXI». En los últimos años, el progreso digital ha traído consigo importantes oportunidades y retos, con serias implicaciones en todos los ámbitos de la sociedad. En esta era de rápidos cambios tecnológicos, la Inteligencia Artificial (IA) ha surgido como una de las herramientas más poderosas con potencial para transformar las sociedades, hacer avanzar la paz y lograr un desarrollo sostenible. Sin embargo, sus implicaciones éticas siguen siendo objeto de intenso debate. MaddalenaMaltese, periodista y representante de la ONG New Humanity, moderadora de la mesa redonda del evento, recordó que «el 1 de enero, el Papa Francisco, en su mensaje para el Día Internacional de la Paz, planteó preguntas urgentes sobre la IA: «¿Cuáles serán las consecuencias, a medio y largo plazo, de estas nuevas tecnologías digitales? ¿Y qué impacto tendrán sobre las vidas individuales y las sociedades, así como sobre la estabilidad y la paz internacionales?». También señaló que el Secretario General Antonio Guterres, al debatir las prioridades para 2024, hizo hincapié en que la IA afectará a toda la humanidad, reiterando la necesidad de un enfoque universal para abordarla. En la mesa redonda multilateral sobre los retos éticos que plantean la IA y las estrategias se debatió sobre la interacción entre consideraciones técnicas, éticas, políticas, jurídicas y económicas. El Padre Philip Larrey, Profesor de Filosofía en el Boston College, antiguo Decano de Filosofía en la Pontificia Universidad Lateranense y Presidente de Humanity 2.0. expuso una serie de cuestiones acuciantes empezando por el tema de la paz. «ChatGPT o Géminis podrían escribir un plan de paz perfecto, teniendo en cuenta las situaciones que vivimos, pero ¿estaríamos dispuestos a seguir sus indicaciones?», dijo Larrey, haciendo hincapié en el factor humano como decisivo en las decisiones que hay que tomar, incluso cuando se trata de armas letales. Otro tema central de su charla fue la empatía que pueden demostrar las máquinas y que a veces se prefiere al elemento humano. «Los humanos entienden los significados. Las máquinas no, sin embargo, las máquinas se están volviendo muy, muy buenas simulando lo que consideramos significativo», insistió el profesor del Boston College, advirtiendo del reto cada vez más difícil de discernir lo que pertenece a los humanos y lo que pertenece a la tecnología, con máquinas que en el futuro podrían incluso estar programadas para sentir sentimientos. Laura Gherlone, investigadora en semiótica del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina y profesora de la Universidad Católica Argentina, miembro de la Comisión Internacional de NetOne, habló de la Inteligencia Artificial y, más en general, de las tecnologías digitales a la luz del pensamiento de la descolonización digital. Argumentó que: «hoy en día, los contextos poscoloniales se encuentran en una encrucijada: quedarse atrás o ponerse al día. Se ven obligados a acelerar drásticamente ciertos procesos que ahora encarnan un modelo tecno-céntrico y supuestamente universal del conocimiento: la digitalización y la implementación de sistemas de inteligencia artificial se encuentran entre estos procesos». Afirma que este proceso «siempre tiene un coste muy elevado, al menos a tres niveles: a nivel económico y técnico-estructural, a nivel social y, por último, la adopción acelerada y forzada del progreso tecnológico como vía hacia un modelo universal de conocimiento». Sugiere que «el debate ético sobre la IA podría enriquecerse enormemente con una reflexión decolonial, integrando, por ejemplo, el trabajo de aquellos movimientos colectivos comprometidos con repensar y rediseñar arquitecturas técnicas «desde el Sur», es decir, soluciones teórico-metodológicas y prácticas que a menudo se dejan de lado por estar alejadas de la lógica del beneficio». Cerraron el acto dos buenas prácticas de la sociedad civil. Marianne Najm, ingeniera de comunicaciones afincada en Beirut, habló sobre la ética de la IA y el concepto de juramento digital para ingenieros y cualquier persona activa en el mundo digital. El proyecto comenzó en 2019 inspirado en el Juramento Hipocrático, el juramento que la mayoría de los médicos y doctoras hacen al final de su carrera académica. Al igual que el juramento hipocrático pretende despertar la obligación humana de los médicos, el juramento digital pretende despertar la obligación humana de los actores digitales orientando su trabajo hacia un diseño éticamente centrado en el ser humano. Marcelle Momha, camerunesa residente en Estados Unidos, analista de investigación y política tecnológica especializada en inteligencia artificial, tecnologías emergentes y ciberseguridad, había preparado una charla sobre la comunidad AI 2030, que por motivos de agenda no pudo ser ilustrada, pero está disponible en este enlace. «AI 2030 es una vibrante comunidad de líderes empresariales, científicos de datos, constructores técnicos e investigadores pioneros dedicados a aprovechar el poder transformador de la inteligencia artificial en beneficio de la humanidad, minimizando al mismo tiempo su potencial impacto negativo», explica Marcelle en su ensayo. En su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz, el Santo Padre recordó que «los desarrollos tecnológicos que no conducen a una mejora de la calidad de vida de toda la humanidad, sino que, por el contrario, exacerban las desigualdades y los conflictos, nunca pueden considerarse un verdadero progreso». Como organizaciones de la sociedad civil, queremos acompañar los esfuerzos de Naciones Unidas y de todas aquellas instituciones que trabajan por un compromiso ético con la tecnología que apoye los desarrollos digitales como contribución a la promoción de los principios humanos de paz y fraternidad. Para ver la conferencia puede acceder a este enlace: https://webtv.un.org/en/asset/k1h/ Para leer los discursos y obtener más información, acceda a: https://www.net-one.org/ia-una-via-per-la-pace-globale-e-lo-sviluppo-umano-integrale/

Fuente https://www.net-one.org

Los jóvenes y la trata de personas

Los jóvenes y la trata de personas

Del 2 al 8 de febrero de 2024, una semana de movilización y oración contra la trata de personas. En Roma (Italia) se celebró el encuentro de 50 jóvenes de todos los continentes, entre ellos algunos chicos y chicas del Movimiento de los Focolares. La trata de personas es el proceso mediante el cual las personas son coaccionadas o atraídas por perspectivas falsas, reclutadas, transferidas y obligadas a trabajar y vivir en condiciones de explotación o abuso. Se trata de un fenómeno, como advierten los recientes informes de las Naciones Unidas, en continua y dramática evolución. La semana de oración contra la trata de personas tuvo lugar del 2 al 8 de febrero de 2024. Instituida por el papa Francisco en 2015, la semana incluye siempre el 8 de febrero, fiesta de Santa Bakhita, una monja sudanesa que de joven fue esclava, vendida y maltratada, víctima de trata y símbolo universal de la lucha contra este flagelo de la humanidad. El tema de este año fue Caminar por la dignidad. Escuchar, soñar y actuar. Miles de personas en todo el mundo se han reunido para reflexionar, orar y compartir sus experiencias en la lucha contra este fenómeno global. En Roma (Italia) muchos jóvenes de diferentes países – Kenia, Japón, Estados Unidos, Tailandia, Albania, Canadá, México, Francia, Italia – participaron en conferencias, flash mobs, momentos de oración sobre el tema, en el Ángelus y en la audiencia con el Papa Francisco celebrada durante la semana. Entre ellos también algunos Gen2, jóvenes del Movimiento de los Focolares. Prisque Dipinda, de la República Democrática del Congo, dice: “El acontecimiento más significativo para mí fue la vigilia de oración en la Iglesia de Santa María en Trastevere, en el corazón de Roma. Fue un momento importante ante Dios, la emoción de compartirlo junto a otros jóvenes que llevan en su corazón el desafío de la trata de personas. Pero también una responsabilidad de ser parte de los protagonistas contra este fenómeno. Creo que para los jóvenes que participaron sirvió también para tomar conciencia de que muchos en el mundo sufren por diversas razones: económicas, políticas, religiosas. Fue una oportunidad para reflexionar y empezar a planificar juntos algo contra el sufrimiento”. Entre los Gen2 presentes también estaban Michel Haroun, un libanés francés y Miriana Dante, una italiana. “Nunca he tenido un compromiso particular contra la trata de seres humanos – afirma Michel -. Tengo cierta experiencia en atención a migrantes que llegan a mi ciudad o en las fronteras entre estados. Por ejemplo, hace unos años estuve en Trieste (Italia), punto de llegada de la ruta de los Balcanes por la que llegan a Italia inmigrantes procedentes de muchas partes del mundo devastadas por conflictos. Pero no era suficientemente consciente del hecho de que los refugiados, antes de llegar a Europa – pero esto también vale para América Latina, los Estados Unidos u otras partes del mundo – sufren violencia y abusos de forma organizada. Estos días pasados ​​en Roma junto con otros jóvenes de diferentes continentes, lenguas, culturas, pertenecientes a diversas Iglesias cristianas, fueron una experiencia rica en relaciones personales que espero duren, porque al final afrontaremos (pero ya afrontamos) el mundo juntos, como parte de una misma generación”. ​“Me emocionó descubrir la historia de Santa Bakhita, dice Miriana. Había sido esclava, fue vendida. Posteriormente afrontó con valentía todo lo vivido en el pasado, enviando mensajes contra la trata de personas. Me preguntaba de dónde sacó toda esa fuerza. Fue muy bueno para mí haber conocido a tantos jóvenes que están comprometidos con estos temas. No adultos con una larga experiencia a sus espaldas, sino jóvenes de mi edad, de todo el mundo, que tienen sueños y esperanzas de un futuro mejor. No sentíamos la diferencia cultural, porque nos unía la unidad entre nosotros gracias al objetivo común: luchar contra la trata de personas”.

Lorenzo Russo

Informe abusos 2023: consciencia, reparación, prevención

Informe abusos 2023: consciencia, reparación, prevención

El Movimiento de los Focolares publica el informe sobre las actividades realizadas para la protección de la persona y los datos sobre los casos de abuso en 2023. Entrevista a Catherine Belzung, profesora de Neurociencias y coordinadora de la Cátedra UNESCO sobre Maltrato Infantil. El 1 de marzo se publica el segundo informe anual del Movimiento de los Focolares sobre las actividades y los datos relativos a los casos de abuso sexual de menores, personas en condición de vulnerabilidad, abusos de conciencia, espirituales y de autoridad. Hemos pedido una lectura y evaluación del documento a Catherine Belzung. Profesora titular universitaria de Neurociencias en Francia, miembro sénior del Instituto Universitario de Francia (2014) y presidenta del centro de investigación multidisciplinar iBrain, desde 2022 coordina la Cátedra UNESCO sobre Maltrato Infantil, formada por una asociación de universidades e instituciones de 16 países. También es corresponsable del Centro Internacional para el Diálogo con la Cultura Contemporánea del Movimiento de los Focolares. Desde 2023, el Movimiento de los Focolares ha optado por publicar un informe anual sobre las actividades y los datos relativos a los casos de abuso sexual a menores y también sobre abusos de conciencia, espirituales y de autoridad. Desde su punto de observación internacional, ¿qué opina de esta decisión? ¿Qué valoración hace de este segundo informe? Creo que este informe representa un verdadero paso adelante. De hecho, el informe de 2023 había sido criticado, sobre todo porque no se mencionaban los lugares y las fechas de los abusos sexuales. El nuevo informe se refiere a los casos reportados en los últimos 10 años y añade estas puntualizaciones: se observa que los abusos sexuales se han perpetrado en los 5 continentes (una veintena de países), con un pico de casos en los años 90-99, así como en la década anterior y la siguiente. Los hechos a veces se repiten durante varias décadas, lo que sugiere que se trata de autores multirreincidentes, cuya sucesión de abusos no se había interrumpido. Algunos hechos ocurrieron y se trataron hacia 2020, lo que indica que las víctimas pudieron denunciar abusos casi en tiempo real, lo cual es ya un progreso. Todos los abusos sexuales denunciados han sido perpetrados por hombres. Es lo contrario de cuanto acontece en los abusos de autoridad, que en el 77% de los casos son cometidos por mujeres, lo que hay que relacionar con las proporciones más significativas de mujeres entre los miembros de este Movimiento. El informe también contiene una sección detallada y clara, sobre las medidas implementadas durante el año, en particular en lo que respecta a la formación. Queda por entender cuáles son las causas profundas de estos abusos: más allá de las medidas de prevención y de las sanciones, habría que seguir trabajando para identificar las causas sistémicas que podrían explicar estas cifras, con el objetivo de poner en marcha una estrategia que permita ponerles fin. En este segundo informe, los autores se han clasificado en base a criterios precisos, establecidos por la Política de Información publicada recientemente por los Focolares. ¿Qué opina de esta decisión? Se trata de un conflicto ético. Por un lado, en efecto, hay que confiar en la experiencia de las víctimas, tomar en serio las denuncias que hacen y poner en marcha rápidamente medidas que permitan protegerlas. Por otro lado, hay que respetar la presunción de inocencia de los presuntos autores, evitar la difamación cuando no se haya pronunciado ninguna condena penal definitiva. La cuestión es compleja y encontrar una solución satisfactoria requerirá sin duda mucha escucha y diálogo. La cátedra de la UNESCO sobre el abuso de menores, que usted coordina, nació porque usted misma entró en contacto con un caso de abuso infantil del que conocía tanto a una de las víctimas como a su autor. Se trata de un caso ocurrido en la Iglesia católica en Francia. La comunidad social o religiosa es definida como “víctima secundaria”. ¿Qué significa esto? ¿Cuáles son las heridas que las personas sufren y cómo ayudar a cicatrizarlas a nivel social y comunitario? Sí, esta cátedra nació efectivamente, como resultado del contacto con una víctima, contacto que me marcó muy profundamente: este sufrimiento me afectó en lo más profundo, y de ahí nació el deseo de hacer algo. Los abusos afectan en primer lugar a la víctima, que a menudo sufrirá consecuencias psicológicas duraderas. A veces la revelación de los hechos puede abrir una ventana de gran vulnerabilidad en la persona, que requiere un acompañamiento específico. Como consecuencia, esto afecta a los familiares de la víctima, como el cónyuge, los hijos, pero también a los padres que se sienten responsables de haber confiado el hijo a una institución que no lo ha protegido. Los efectos devastadores también afectan a toda la comunidad, ya que los miembros a menudo no tienen conocimiento de que en su interior se escondiera un depredador multirreincidente, con el que podían tener un vínculo de cercanía, de amistad. Surge espontáneamente la pregunta: ¿Por qué no he visto nada? Otro aspecto se refiere a la relación con la institución que puede haber protegido al agresor, a veces en buena fe, suscitando un sentimiento de traición y desconfianza. Y por último, la comunidad también puede dividirse, dependiendo de los análisis divergentes de unos y otros, entre los que se refugian en la negación, y los que quieren luchar para evitar que eso vuelva a suceder. Reparar todo esto requiere un amplio arsenal de medidas: es fundamental hacerse cargo del acompañamiento de las víctimas y de sus familias, pero también es necesario restablecer la confianza en la institución que ha demostrado haber sido deficiente, cuando esta muestra una sincera voluntad de aprender de sus errores pasados. Para hacerlo, cuentan solamente los actos: la institución debe promover la transparencia comunicando informaciones muy precisas, implementar procedimientos claros, crear lugares de escucha, establecer procedimientos de reparación y, para las comunidades, espacios de diálogo donde intercambiarse opiniones incluso contrapuestas. El Movimiento de los Focolares es una organización mundial, al que pertenecen personas de diferentes culturas, religiones, sujetas a diversos ordenamientos jurídicos y que adoptan diferentes estilos de vida. ¿Cómo es posible realizar prácticas contra el abuso en un entorno caracterizado por una multiculturalidad y diversidades tan grandes? En primer lugar, las consecuencias de los abusos sexuales a menores existen en todas las culturas, son universales. Además de las secuelas psicológicas y sociales, las víctimas pueden presentar secuelas biológicas, como un aumento de las hormonas del estrés, una alteración de la expresión de ciertos genes, así como de la morfología y el funcionamiento cerebral: estas disfunciones persisten durante toda la existencia del sobreviviente y pueden transmitirse a la siguiente generación. Por lo tanto, no se puede decir que haya variaciones culturales en la gravedad de las consecuencias sobre las víctimas, que haya culturas en las que las víctimas sufran menos: es devastador siempre y en todas partes. Por lo tanto, es necesario poner en marcha medidas de prevención, pero también de reparación en todo el mundo. Se puede observar que la consciencia de la gravedad de estas situaciones está creciendo: por ejemplo, en la Iglesia católica se han instituido comisiones nacionales de investigación en muchos países de Europa, América del Norte, América Latina, pero también en Australia, India y Sudáfrica. Si el sufrimiento no varía, lo que sí puede variar es la resistencia a denunciar los hechos y la capacidad de implementar medidas de protección y reparación. Esto puede estar relacionado con el hecho de que en algunas culturas hablar de sexualidad es un tabú. El primer paso es sensibilizar a las poblaciones sobre las consecuencias de los abusos: ya existen programas promovidos por diferentes asociaciones que tienen en cuenta la representación de la sexualidad en las diversas culturas. Por ejemplo, proponer escuchar el sufrimiento de las víctimas que pertenecen a la misma cultura puede suscitar empatía y hacer surgir el deseo de actuar. La prevención también puede dirigirse directamente a los niños, a través de una educación sobre sus derechos: también en este caso existen programas basados, por ejemplo, en canciones. Otra cosa que varía es la capacidad de los Estados y de las instituciones para adoptar medidas de protección y reparación. Un diálogo respetuoso y no estigmatizante con los protagonistas es el camino a seguir: esto permitirá a cada uno comprender la gravedad de los abusos, pero también encontrar las modalidades específicas de cada cultura para liberar la palabra, para concretar las reparaciones y formar a los miembros de la comunidad. Tanto dentro del Movimiento de los Focolares como también en otros contextos, hay quienes expresan la convicción de que haya llegado el momento de seguir adelante; es decir, que no es necesario seguir hablando solo de abusos, sino centrarse en la “misión” del Movimiento y en todo lo bello y positivo que la realización de este carisma genera en el mundo. ¿Qué opina al respecto? ¿Cuál es la «misión»? ¿No es acaso avanzar hacia la fraternidad universal, hacia una cultura que ponga en primer lugar el sufrimiento de los más débiles, una cultura del diálogo, de la apertura, de la humildad? Me parece que la lucha contra los abusos de todo tipo es precisamente una forma de realizar este deseo de poner en primer lugar a quienes lo sufren. Ayudar a sanar las heridas de las víctimas es precisamente una forma de avanzar hacia la fraternidad universal. Esto también implica acompañar a los autores de los abusos, con el fin de evitar la reincidencia. Reconocer los propios errores, la propia vulnerabilidad, para construir soluciones teniendo en cuenta las opiniones de los expertos del sector, es justamente una manera de construir una cultura del diálogo. Luchar con determinación contra los abusos y acompañar a las víctimas están, precisamente, en el centro de esta «misión». Así que no hay que elegir entre la lucha contra el abuso y la «misión», porque esta lucha es un elemento central de la «misión». Se trata de una prioridad dolorosa pero necesaria en el contexto actual.

Stefania Tanesini

Informe 2023: “La protección de la persona en el Movimiento de los Focolares” (Descargar el PDF)