Movimiento de los Focolares
Comunión y Derecho: Escuela de Verano 2016 en Sicilia

Comunión y Derecho: Escuela de Verano 2016 en Sicilia

C&DOrganiza: Comunión y Derecho Participantes: 25/30 jóvenes (existe la posibilidad de becas de participación para jóvenes estudiantes) La Escuela de Verano está dedicada principalmente a estudiantes de materias jurídicas y jóvenes profesionales (edad prevista: 20-35 años) que permitirá, junto con sesiones de estudio y de diálogo, tomar contacto directamente con las realidades del ambiente siciliano y la emigración. Es un itinerario que se está diseñando con un grupo de jóvenes y desea ser una continuación del Congreso desarrollado en Castel Gandolfo en el mes de noviembre de 2015: Ambiente y “derechos”: entre responsabilidades y participación. Programa Info: info@comunionediritto.org www.comunionediritto.org

Filipinas: Semana de la Armonía

Filipinas: Semana de la Armonía

World Interfaith Harmony Week

Foto: Roman Catholic Archdiocese of Manila

“Amor, misericordia y compasión como fuentes de paz y de esperanza”. Es éste el tema central elegido para el 2016, de la Semana mundial de la Armonía entre las religiones. Se celebró entre el 1º y 7 de febrero. En Filipinas tuvo especial relieve por el apoyo del Cardenal Luis Antonio Tagle, arzobispo de Manila. Fue él, efectivamente, quien promovió la manifestación, comenzando con un almuerzo de trabajo con los distintos líderes religiosos, altos funcionarios del gobierno y miembros del cuerpo diplomático. Fue un momento para reencontrarse juntos entre religiones distintas. Para conocerse y dialogar. A través de esta perspectiva de intercambio, mediante fórum y mesas redondas, se afrontaron varias temáticas en el transcurso de la semana, entre ellas el calentamiento del planeta. Para muchos de los que asistieron a este programa – a los Focolares se les pidió que coordinaran el aspecto interreligioso– significó descubrir los numerosos puntos de vista y los fuertes desafíos que esta problemática representa, expresando gran interés sobre las propuestas de cómo los gobiernos, pero también cada uno de nosotros,  podemos custodiar el ambiente. 20160411También fue muy interesante el simposio sobre María de Nazaret presentada tanto en la Biblia como en el Corán. Y fue unánime la conclusión: María, mujer de amor, de misericordia y compasión, es madre de los cristianos y de los musulmanes. Fue significativo también el evento en el que participaron 80 pacientes enfermos y sobrevivientes del cáncer , quienes en su relato se refirieron a cuánto los ayudó vivir la espiritualidad de Chiara Lubich. En el Templo budista Fo Guang Shan Mabuhay tuvo lugar la premiación de un concurso, que fue organizado en colaboración con la Asociación budista de Manila, que consistió en la producción de pancartas digitales sobre el tema “Crear la paz y la esperanza a través de hechos de bondad”. 20160411-03En Quezon City, en el Metro Manila, fue también organizada una actividad, donde desde hace ya algunos años surge el Sulyap ng Pag-asa (Destello de Esperanza), una aldea construida por los Focolares para dar vivienda a familias sin techo. Aquí unos noventa niños, entre cristianos y musulmanes, ofrecieron un show de canciones, bailes, juegos sobre cómo construir  puentes de fraternidad a pesar de la diversidad de las culturas y religiones. El Festival de la Armonía fue un momento culminante de la Semana, el cual se realizó en un gran centro comercial en Mandaluyong, Metro Manila. La participación fue multitudinaria. Al Cardenal Tagle y a los participantes en el desayuno inaugural, se agregaron otras personalidades institucionales, personas que en el curso de la semana habían participado en las varias manifestaciones, gente común. Después de poner en evidencia el compromiso del Gobierno, de las Instituciones y de los líderes religiosos para alcanzar una mayor cooperación en la promoción de la libertad religiosa, el diálogo y la paz, el programa continuó con números musicales de jóvenes y niños. Un joven de los Focolares, introduciendo una coreografía, subrayó que “para alcanzar el amor, la misericordia y la compasión como fuente de paz, hay que superar las diversidades y tender a la unidad entre todos”. Una chica que había sido elegida para hablar junto con sus coetáneos de otras religiones en nombre de la iglesia católica, dijo: “Para mí la paz es la armonía y el amor. Cuando Dios creó el mundo todo iba bien. Entre las plantas y los animales existía equilibrio y armonía. Cuando apareció el ser humano, todo fue bien por poco tiempo. De hecho el ser humano mostró su avidez cortando árboles, aplanando colinas, y ahora hay cemento por doquier. Los animales se están extinguiendo. Ya no hay equilibrio ni armonía. Yo sueño con la armonía de la naturaleza y con un mundo sin guerras”. Fue impactante el discurso con el que concluyó el Cardenal Tagle, en el que, con evidente emoción y gratitud hacia los muchachos que habían hablado, retomó todos estos argumentos expresándolos como propios. https://www.youtube.com/watch?v=teamVMfAoKw      

Misericordia: un amor dirigido a todos

Misericordia: un amor dirigido a todos

maxresdefault2«Aunque intuíamos que el fundamento del Evangelio es la caridad (el amor al prójimo) y que ésta es el «vínculo de la perfección», no comprendimos inmediatamente cómo había que hacer para vivirla, con quién tenía que ponerse en práctica y en qué medida. Al principio, movidas sobre todo por las circunstancias dolorosas de la guerra, dirigimos nuestro amor hacia los pobres, seguras de que en aquellos rostros demacrados, a veces repugnantes, podíamos reconocer el rostro del Señor. Fue un aprendizaje. Nosotras no estábamos acostumbradas a amar de forma sobrenatural. Nuestro interés había llegado, cuando más, hasta nuestros familiares o amigos, en ese óptimo respeto o sana amistad natural. En cambio ahora, bajo el impulso de la gracia, y confiando en Dios y en su Providencia, que cuida de los pájaros del cielo y de las flores del campo, dedicábamos nuestros cuidados a todos los pobres de la ciudad. Procurábamos hacerles venir a nuestras casas y sentarles a nuestra mesa. (…) Si no podíamos acogerles en casa, nos encontrábamos con ellos en la calle, en determinados lugares y les entregábamos todo lo que habíamos recogido. Los visitábamos en los tugurios más míseros y procurábamos confortarles también con medicamentos. Los pobres eran realmente el objeto de nuestro amor, porque por ellos y a través de ellos podíamos amar a Jesús. Ellos constituían también el interés de todas las demás personas que habían sido atraídas por el mismo Ideal. Al crecer la comunidad en torno al primer núcleo de focolarinas, aumentaban también las posibilidades de ayuda y asistencia para todo el que sufría. Y era un espectáculo, realizado no se sabe si por manos de hombre o de ángel, ver llegar los víveres, ropa y medicamentos: insólita abundancia que, en los últimos años de la guerra, daba la clara impresión a cualquiera, de una intervención especial de la divina Providencia. (…) Eran hechos pequeños que suceden a cualquier seguidor de Jesús que conoce el “pidan y se les dará” (Mt 7, 7) pero que nos dejaban admiradas. A la vez nos estimulaban aquellos otros hechos extraordinarios sucedidos a los grandes hermanos que nos habían precedido. También ellos probaron, cuando todavía no eran santos, las dificultades de la ascensión a Dios, teniendo que fundir la dura personalidad humana en el fuego de la divina caridad. ¿Acaso santa Catalina no había amado tanto a los pobres que dio a uno de ellos su manto y a otro la pequeña cruz de su rosario? ¿Y no es cierto que en las noches siguientes Jesús, en visión, había venido a darle las gracias por los regalos que le había hecho a Él en los pobres? Y san Francisco, ¿no dio unas treinta veces su manto a los pobres? ¿Qué significaba para nosotras quitarnos los guantes en invierno para darlos a quien durante horas tenía que estar pidiendo limosna bajo la nieve, para vivir? (…) Pero, a pesar de la enorme generosidad de cada uno (…) comprendíamos que quizás no era ésta la finalidad inmediata por la que el Señor nos había impulsado a la caridad concreta. Más tarde nos pareció comprender que Él nos había orientado en esa dirección también por un motivo muy concreto: con la caridad, viviendo la caridad, se comprenden mejor las cosas del Cielo y Dios puede libremente iluminar a las almas. Y fue quizás ese amor concreto lo que nos hizo comprender más tarde que nuestro corazón tenía que dirigirse no sólo a los pobres, sino a todos los hombres, sin distinción alguna. Ciertamente había personas a las que había que dar comida, bebida, vestido, pero también había otras a las que instruir, aconsejar, soportar, que tenían necesidad de oraciones… Las obras de misericordia corporales y espirituales se abrieron como un abanico ante nuestro espíritu: éstas eran, además de todo, las preguntas concretas que el Juez de nuestra existencia nos dirigiría a la hora de determinar nuestra eternidad. Esta consideración nos sumergió en adoración, al constatar el amor infinito de Jesús, que nos las había revelado con su venida para hacer más fácil nuestra entrada en el Cielo. (…) Dios nos pedía no sólo el amor a los pobres, sino el amor al prójimo, quienquiera que fuese, así como uno se ama a sí mismo. Y entonces, si alguno lloraba, procurábamos llorar con él, y la cruz se suavizaba; y si alguno gozaba, nos alegrábamos con él, y el gozo aumentaba. «Alégrense con los que se alegran; lloren con los que lloran» (Rm 12, 15)» . Chiara Lubich, Escritos Espirituales/3, Roma 1996, págs. 36-39.

Ecuador: Festival por la paz en la Mitad del Mundo

Ecuador: Festival por la paz en la Mitad del Mundo

SMU2016_02La edición de la Semana Mundo Unido 2016, tendrá a Quito, capital del Ecuador, come sede oficial de todas las manifestaciones que se desarrollarán contemporaneamente en el mundo. El título del encuentro: LINK CULTURES – Un Camino para la Paz. Con la participación de jóvenes provenientes de varios países sudamericanos y de Europa, el tema de la SMU 2016 abarcará la interculturalidad, es decir, entrar en diálogo con las distintas culturas y el reconocerse como iguales. Ecuador es un país de América del Sur ubicado estratégicamente en la “mitad del mundo”. Con una población aproximada de 15 millones de personas, se conforma en cuatro regiones: costa, sierra, oriente y las Islas Galápagos. El País ha sido reconocido por la megadiversidad de su flora, fauna, y también por la multiculturalidad de su pueblo. Desde el año 2008, ha incluído dentro de su constitución la interculturalidad y la plurinacionalidad como rasgos característicos, así como la defensa y promoción del buen vivir y de los derechos de la naturaleza. Por esta razón, la SMU 2016 tendrá dos momentos principales para evidenciar la fraternidad a través de la interculturalidad. Comenzará con la Escuela Móvil (1° – 6° de mayo), a través de la cual los jóvenes visitantes recorreran distintas regiones del Ecuador para poder experimentar la interculturalidad en distintas comunidades ecuatorianas, trabajar y vivir con su gente, conocer la realidad profunda del país sudamericano y enriquecerse a través del intercambio cultural. Los participantes podrán optar por dos rutas diferentes: Costa-Sierra y Oriente-Sierra. La primera, incluirá las provincias de Esmeralda e Imbabura, donde los jóvenes participantes entrarán en contacto con las comunidades de Gualapuro, Agato y Peguche; la segunda en las provincias de Pastaza, Tungurahua y Bolívar, encontrando las comunidades de Shiwacocha, Kisapincha, Salasaka y Bolívar, respectivamente. Cada ruta tiene como objetivo la construcción de relaciones a distintos niveles: con la naturaleza, las demás personas y también con uno mismo. De esta manera, serán los jóvenes, junto con las personas de las comunidades, quienes compartirán, aprenderán, convivirán, experimentarán y serán testigos del trabajo de estas comunidades y del intercambio de culturas. SMU2016_01El segundo momento, el 7 de mayo, se realizará un Festival por la Paz en la ciudad Mitad del Mundo, ícono del Ecuador reconocido a nivel internacional: será un evento masivo en el que participarán jóvenes de distintas edades, culturas, creencias y grupos sociales con el objetivo de evidenciar la fraternidad en un contexto intercultural y de comprometerse a vivir la paz y la unidad en el respeto de las diferencias, a través de la práctica de la Regla de Oro que sugiere “Hacer a los demás lo que te gustaría que te hicieran a ti”. Los JMU de Ecuador promueven dos concursos, de música y de fotografía y apuntan alto: generar una “Escuela de Paz” permanente. Contemporaneamente, en muchas ciudades del mundo se desarrollará la SMU 2016, con modalidades diferentes pero que tendrá a los jóvenes como protagonistas y constructores de paz. Escucha entrevista en SoundCloud Información: info@mundounido2016.com Sito web oficial: www.mundounido2016.com

Semana Mundo Unido y Run4Unity 2016

Semana Mundo Unido y Run4Unity 2016

https://www.youtube.com/watch?v=fmnzghp0ghg&feature=youtu.be La cita anual promovida por los jóvenes de los Focolares tiene como objetivo involucrar al mayor número de personas e instituciones en el camino hacia la fraternidad. Este año su centro será en Quito, Ecuador. El tema es la interculturalidad y se realizará una manifestación juvenil en la así llamada “Mitad del mundo”, donde se puede poner un pie en el hemisferio boreal y el otro en el hemisferio austral. Serán días de diálogo entre jóvenes de distintas culturas, mediante el trabajo, el intercambio y el turismo comunitario en medio de una naturaleza exuberante. En el sitio www.mundounido2016.com se encuentra toda la información sobre el programa ecuatoriano.  “Link Cultures – un camino para la paz” es el título que vincula las más variadas iniciativas de fraternidad que se desarrollarán contemporáneamente en todo el mundo, uniendo generaciones y culturas en un único taller y que se pueden seguir a través del hashtag #4peace. SMU_Run4UnityAlgo de historia. Mayo del ’95, el Genfest – gran cita mundial de los Jóvenes por un Mundo Unido– se concluye con el lanzamiento de la Semana Mundo Unido (SMU): una semana para contribuir a crear relaciones de convivencia pacífica entre pueblos y culturas diferentes, en el respeto de la identidad de cada comunidad y de cada pueblo. Una propuesta dirigida a las instituciones nacionales e internacionales, públicas y privadas, de poner en evidencia y valorar las iniciativas que promueven la unidad en todo nivel. La SMU forma parte integrante del United World Project . Veinte años después de ese histórico evento: son múltiples las iniciativas de jóvenes, chicos y adultos, en estas ediciones de la SMU en donde cada vez más se han abierto espacios en la opinión pública, en los medios de comunicación, entre las instituciones. En todos los puntos del planeta lo que la hace tan fascinante es su fuerte idealidad: convencer al mundo de que es “el tiempo de la fraternidad”. En el 2010, una conexión mundial desde Hungría dio inicio a la SMU; en la edición 2011 la directa mundial partió en cambio de un pequeño pueblo, Sassello (Italia), donde nació y vivió Chiara Luce Badano, joven de los Focolares fallecida en 1990 y beatificada en el 2010. La SMU del 2012 precedió al Genfest que se realizó en Budapest (eran 12000 jóvenes en el estadio Sport Arena y 500 mil los conectados a través de las redes sociales). En el 2013 la directa mundial fue transmitida desde Jerusalén: eran 120 jóvenes de 25 países, musulmanes, cristianos, hebreos, y vivieron una fuerte experiencia de fraternidad: un programa de vida para un futuro de paz. El ‘focus’ de la Semana Mundo Unido 2014 fue Nairobi, donde se realizó el taller de reciprocidad “Sharing with África”, “Fabric, Flavour, Festival – discovering fraternity”, fue el título de la SMU 2015 que desarrolló el tema del diálogo a 360°. El evento central fue animado por los Jóvenes por un Mundo Unido de India, en Mumbay, junto a los jóvenes del movimiento hindú del Shanti Ashram, un signo ulterior de cómo estos días unen a pueblos y religiones diversas. 20160408-01Run4Unity – Otra novedad de este año es la participación de los chicos mediante el evento deportivo mundial Run4Unity, una carrera mundial de relevos por la paz que en las ediciones precedentes ha involucrado a miles de chicos, y que de ahora en adelante se realizará todos los años, en el marco de la Semana Mundo Unido. La Run4Unity 2016 se correrá el próximo 8 de mayo. Los Jóvenes por un Mundo Unido esperan que esta expo internacional itinerante, que ya cumple veinte años, sea reconocida también por la ONU. Las iniciativas que se siguen realizando durante el año, sobre las cuales la Semana Mundo Unido enciende los reflectores, son recogidas en la plataforma del United World Project

Territorios palestinos: “al menos no odiar”

Territorios palestinos: “al menos no odiar”

20160407-01Nasri estudió en Milán (Italia) y seguidamente se especializó en urbanística en Venecia. Regresando a su tierra conoció el Movimiento de los Focolares, hace 20 años. Este encuentro, según lo que él mismo dice cambió su vida. Tiene 3 hijas de 17, 15 y 13 años. Lo encontramos durante el congreso internacional OnCity, sobre el bien común (Castel Gandolfo 1-3 de abril). ¿Cuáles desafíos encuentras cotidianamente en tu tierra? «Trabajo en el sector de la construcción. Por motivos políticos tenemos dificultades para renovar el plan regulador, que está desde los años ’70. Para abrir una calle nueva o modificar una ruta se necesitan permisos, pero la autoridad militar israelí nos la niega». ¿Realmente es posible ‘amar al enemigo’? «No es fácil ser un auténtico cristiano en Palestina. En este campo nuestro enemigo es la autoridad militar israelí, ¡no los judíos! Respeto la religión judía porque somos todos hermanos, hijos de Dios. Pero ¿cómo puedo amar a un soldado israelí que me mata? ¿Qué destruye nuestras ciudades? ¿Cómo hago para vivir el cristianismo? He intentado confrontarme sobre esto con otros cristianos. He entendido que si no soy capaz de amar, al menos puedo empezar por no odiar, y poco a poco el amor llegará. Estas dos palabras, “no odiar”, me las he puesto en la mente y en el corazón y he empezado a vivirlas a mi modo. A menudo me ayudan, por ejemplo, a sonreírle a un soldado. Especialmente en el punto de control, porque lamentablemente nosotros palestinos no podemos movernos libremente. Estamos circundados, estamos en prisión. Una vez un capitán me preguntó por qué yo, árabe palestino, le había sonreído. Le respondí: Jesús nos ha dicho “hay que amar a todos”, y yo te amo. Quedó impresionado, no sabía qué decir. ¡Me dejó pasar sin revisarme demasiado! El amor existe, también en el corazón de los ocupantes israelíes como en cada persona que existe en la tierra. No les echo la culpa, porque son soldados y deben obedecer las órdenes. Dejemos el conflicto a los gobiernos, nosotros como pueblos podemos vivir juntos. Pero para los jóvenes esto es más difícil de aceptar, sobre todo ahora que con internet ven cómo es el mundo fuera de Palestina». ¿Qué hacen como Movimiento de los Focolares en Tierra Santa? «Soy voluntario y comprometido en Familias Nuevas. Promovemos actividades en las distintas iglesias con la comunidad cristiana de Belén. Yo soy greco-ortodoxo, mi esposa es católica. Vamos donde quien tiene necesidad: ancianos, niños abandonados, o personas enfermas mentalmente que tienen necesidad de ser amadas. Tratamos de hacer lo posible…». ¿Hay judíos entre las personas que están en contacto con el Movimiento? «Muchas familias judías son amigas nuestras. Hacemos encuentros juntos. Una de mis hijas juega fútbol. A través del Centro Peres por la Paz su equipo, junto a un equipo israelí, fue invitado por el Real Madrid. Para ella, que por primera vez entraba en contacto con coetáneos judíos, fue una experiencia nueva. A su regreso me dijo: «Todos los jugadores judíos son mis amigos». También estamos en contacto con muchas familias musulmanas: en Palestina los musulmanes son el 99%, el 1% somos cristianos. Como Movimiento de los Focolares tenemos una muy buena relación con los musulmanes, y también con los judíos. Esto nos demuestra que vivir juntos se puede». Si pudieras dar un mensaje a todo el mundo, ¿qué es lo que más desearías para tu tierra? «Recuérdenos. Hay palestinos cristianos que están sufriendo. Éramos más del 10%, pero la emigración de las familias cristianas ha aumentado muchísimo. Tengo miedo de que un día no haya ni siquiera un cristiano. Ayúdenos a resolver el problema palestino. Si se crea la paz en Medio Oriente, habrá paz en todo el mundo. La voluntad de Dios es esa, pero necesitamos la voluntad de los seres humanos. Es un lugar estratégico, rico de espiritualidad. La única cosa que nos hace falta es la unidad. Si existiese la unidad entre estas tres religiones, Medio Oriente estaría en paz y sería un modelo. Este es el único mensaje que puedo dar: vivir las palabras de Jesús, para crear la paz y el amor, porque realmente tenemos necesidad de el. Maria Chiara De Lorenzo

Ecuador: Link cultures – Un camino para la paz

Escuela Móvil: los jóvenes visitantes recorreran distintas regiones del Ecuador para poder experimentar la interculturalidad en distintas comunidades ecuatorianas, trabajar y vivir con su gente, conocer la realidad profunda del país sudamericano y enriquecerse a través del intercambio cultural. Los participantes podrán optar por dos rutas diferentes: Costa-Sierra y Oriente-Sierra. La primera, incluirá las provincias de Esmeralda e Imbabura, donde los jóvenes participantes entrarán en contacto con las comunidades de Gualapuro, Agato y Peguche; la segunda en las provincias de Pastaza, Tungurahua y Bolívar, encontrando las comunidades de Shiwacocha, Kisapincha, Salasaka y Bolívar, respectivamente. Cada ruta tiene como objetivo la construcción de relaciones a distintos niveles: con la naturaleza, las demás personas y también con uno mismo. De esta manera, serán los jóvenes, junto con las personas de las comunidades, quienes compartirán, aprenderán, convivirán, experimentarán y serán testigos del trabajo de estas comunidades y del intercambio de culturas. Festival por la Paz: será un evento masivo en el que participarán jóvenes de distintas edades, culturas, creencias y grupos sociales con el objetivo de evidenciar la fraternidad en un contexto intercultural y de comprometerse a vivir la paz y la unidad en el respeto de las diferencias, a través de la práctica de la Regla de Oro que sugiere “Hacer a los demás lo que te gustaría que te hicieran a ti”. Los Jóvenes por un Mundo Unido de Ecuador promueven dos concursos, de música y de fotografía y apuntan alto: generar una “Escuela de Paz” permanente. Información: info@mundounido2016.com Sito web oficial: www.mundounido2016.com

Burundi, para reconstruir la paz

Burundi, para reconstruir la paz

20160406-a

Foto: Shutterstock

«Mi vida fue muy golpeada por la violencia. En un contexto tan difícil, el deseo de trabajar para la reconstrucción de mi tierra es una pasión que cada día aumenta. Es éste el deseo que me llevó a viajar hasta Italia para estudiar en el Instituto Universitario Sophia (IUS), del cual había escuchado hablar en mi país. El modo en que se enfrentan las diversidades en Sophia me sirve para enfrentar las diversidades de Burundi y aquí he comprendido que no debo esperar a terminar mis estudios para dar mi colaboración». Es así que el joven se compromete a trabajar por la paz. «En Italia tengo la posibilidad de encontrarme con muchos compatriotas y cada vez que los veo trato de expresar mis convicciones, en el espíritu de fraternidad, con los instrumentos que adquirí en el estudio y en la vida que me ayudan a dialogar valorando lo positivo que existe en el otro. Esta actitud mía atrajo la atención de algunos que tienen opiniones diferentes sobre la realidad de Burundi: algunos pertenecen al partido opositor, otros son miembros del partido que está en el poder y otros pertenecen a la sociedad civil. Cuando tengo que intervenir, no hablo de mis ideas políticas, sino que expreso lo que siento dentro de mí, refiriéndome al Papa que afirma que “la violencia no es nunca un camino para la paz”». «Una vez manifesté que entre nosotros había representantes del gobierno, de la oposición, de la sociedad civil, del partido que gobierna, etc. Y que el programa, en esa ocasión en que estábamos reunidos era el de terminar tomando una cerveza todos juntos, como signo de reconciliación y según nuestra cultura. Agregué que aquí, lejos de los conflictos, estamos sentados uno al lado del otro y, que, aunque discutamos apasionadamente, nos saludamos cuando llegamos y también cuando nos vamos, mientras que en Bujumbura se están matando…. Entonces les propuse: ¿Por qué no enviamos a todos nuestro testimonio? ¿Por qué no les decimos a nuestros compatriotas que dialogar y discutir se puede, sin matarse por eso? Aquí hemos comprobado que el diálogo es posible, agregué». «Después de esa intervención pensé que no habría sido comprendido o que me podrían tomar por un soñador que vive en la utopía». En cambio, para su sorpresa, la propuesta fue tomada muy en serio. «Nos encontramos además con una veintena de expertos de la situación de Burundi. Había representantes de los distintos intereses que estaban en discusión y el objetivo era el de debatir sobre la modalidad para lograr un diálogo inclusivo entre el gobierno, la oposición, la sociedad civil, los grupos armados, etc., procurando la pacificación del país. Fue una ocasión importante para escucharnos, muy útil para expresar juntos y con serenidad algunas propuestas para transmitir al gobierno» «Pude constatar que la experiencia de estudiar en Sophia da frutos que van más lejos de nosotros mismos – concluye- Más que nunca estoy convencido de que podemos llevar la luz que viene del Evangelio a las diversas situaciones difíciles que se viven en nuestros países. Espero poder continuar dando mi pequeña contribución para la construcción de la paz, no sólo en Burundi, sino en el mundo».

Carta abierta desde Bélgica

Carta abierta desde Bélgica

Samuel«El 22 de marzo permanecerá siempre como una fecha marcada por actos villanos en el aeropuerto y en el metro de Bruselas. Hechos de individuos que no lograron ver el amor hacia el prójimo como una prioridad en su vida, justamente en los días que precedieron la Pascua, una fiesta que nos enseña que el Amor lo vence todo. Fue una semana en la cual las emociones de odio profundo se alternaban con una sensación de que Dios nos pide que amemos al otro. No es ciertamente fácil hacerlo en momentos como éste. Está en nuestra naturaleza el deseo de encontrar un culpable. Es esto lo que está ocurriendo aquí en Bélgica. Uno se pregunta en qué se ha equivocado, y quién es el responsable del fundamentalismo de estas personas. También para mí fue una semana llena de preguntas nuevas. Es como escribir continuamente cartas a Dios y cada día correr al buzón del correo para ver si ya llegó Su respuesta. Peor aun cuando tus amigos más íntimos te preguntan por qué defiendes a los musulmanes: “Es culpa de ellos”, dicen. “Los tenemos que mandar a su casa”. “¿Por qué brindar a los prófugos hospitalidad,  si ellos después nos desalojan?” Mi di cuenta de que éste es un ejercicio que hay que repetir cada vez. Tengo que saber entrar en la piel de mis amigos, que no tienen la fortuna de experimentar que Dios está al lado de ellos y que es Él el único que puede ofrecer una respuesta. Una respuesta de amor. Ellos sienten miedo, y esto los empuja a que prevalezca su propia seguridad y su propio futuro. Mi esfuerzo de esta semana fue el de hacerles ver el otro lado de la historia: “Esas personas (los terroristas) no son musulmanes. El Islam personifica valores que irradian el Amor”. Pero cuando dices algo así, encuentras enseguida mucha resistencia. La herida está fresca todavía. Esperaba ser capaz de sanar apropiadamente las heridas, pero la curación es un proceso y necesita su tiempo. Volviendo a casa este Viernes Santo estaba cansado y casi harto de curar a “los heridos”. Me puedo imaginar muy bien que ésta fue una semana muy dura para las personas comprometidas en primera línea en brindar los primeros auxilios. Se dice que los jóvenes de hoy no se animan a manifestar su fe.  No nos animamos más a hablar de las cosas en que creemos por miedo a que nos descarten de la sociedad. No nos animamos más a hacer lo que sentimos que es bueno hacer. Tal vez no es miedo de expresarse sino cansancio, consecuencia del hecho de que creer en los ideales cristianos es una aventura trabajosa. La fe en Bélgica es algo ya excepcional y hay que esforzarse cada vez más para apoyar los propios valores. Los jóvenes deciden no creer más, para evitar las críticas. Y aquí comprendía nuevamente la fuerza del ideal de paz y de unidad que Chiara Lubich nos transmitió. Puede actuar como un “café” para nuestro cansancio. Nos ayuda a sonreír cuando alguien critica, dándonos la oportunidad de compartir nuestro mensaje. ¡Es por esta razón que sigo a Jesús! Quisiera pedir a Dios un fuego mayor que el de antes, que pueda encender velas en el corazón de los jóvenes. Que nos haga capaces de mirarnos positivamente, en vez de criticarnos unos a otros. De modo que la espiral que nos lleva abajo se convierta en una espiral que suba y la fe se convierta en una fiesta en lugar de una preocupación. Donde cada uno pueda encontrar la llave para construir un mundo en el cual los atentados como el del 22 de marzo no ocurran más».    

Apoyo a distancia en Myanmar

Apoyo a distancia en Myanmar

20160404-01Durante el último viaje a Taungoo, una de las regiones donde se  ha iniciado el proyecto de Apoyo a Distancia en Myanmar, «nos dimos cuenta cuánto han avanzado los chicos que reciben la ayuda», escribe la responsable local de AfnOnlus en Myanmar Vivienne Arpon. Las visitas de parte del staff local de Apoyo a Distancia a las familias de los chicos beneficiados, son la posibilidad para llevar el amor concreto y entender mejor las dificultades que afrontan. Marta había sido abandonada por el marido cuando sus hijos, Justin y Joseph, eran pequeños. Sólo mediante el proyecto encontraron la fuerza para llevar adelante la familia. Cuando terminó la escuela, Justin ganó un concurso que le permitió tener una beca en gastronomía en un instituto de Yangon, mientras que Joseph se convirtió en asistente del personal en una fábrica de tejidos. La familia de Anna y Philip vivía en un barrio marginal en pésimas condiciones higiénicas. El Apoyo a Distancia les permitió vivir en una casa decente y construir una vida digna. Si bien Philip todavía está estudiando, sus padres generosamente dispusieron que se destinara la ayuda a quien está en peores condiciones que ellos. «Esto nos da alegría –cuenta Vivienne. Constatamos que la mejora de las condiciones de estas familias ha ido acompañada de un crecimiento humano y espiritual». 20160404-02A partir del 2006 el proyecto se amplió, para responder a las solicitudes de ayuda del coordinador birmano Eric. También gracias a la participación de otras ONG, fue posible construir la nueva escuela en Yenanchaung, en la región de Magway y contar con la colaboración de profesores y personal calificado. Los niños que la frecuentan son huérfanos debido al HIV/SIDA o han sido abandonados. Hoy varios de estos chicos, que superaron ya los 20 años, que han podido encontrar un buen trabajo, hasta llegar a ser autónomos, y además ayudan a sus familias. «Confiamos –escribe Vivienne dirigiéndose a los beneficiarios- que el futuro de estos niños esté asegurado, no sólo porque pueden estudiar, sino porque han sentido el amor de parte de ustedes que les han dado seguridad.  Gracias infinitas por  sus sacrificios». De hecho, no siempre es fácil ser solidarios, pero considerar a quien vive en situaciones peores, redimensiona las necesidades y hace descubrir un estilo de vida más sobrio y quizás también más libre. Una familia de Messina (Italia), escribe comunicando cómo la experiencia del Apoyo a Distancia con la AFNsfl que empezaron hace algunos años, ha sido para ellos una riqueza y los ha hecho sentirse abiertos al mundo entero. El niño que fue beneficiado ya es todo un hombre y gracias a la ayuda recibida a través del programa ha logrado encontrar un trabajo. Sin embargo muchos otros niños viven en condiciones de necesidad y esa familia siciliana, a pesar de las dificultades económicas que no les faltan, no se ha echado para atrás y sigue confirmando su compromiso solidario: «Con cuatro hijos no es fácil hacer que cierren las cuentas del presupuesto familiar. Pero a pesar de la incertidumbre, creemos en este proyecto y estamos contentos de ayudar concretamente a quien está peor que nosotros, en este caso al pequeño Vincenzio de Myanmar». 20160404-0El proyecto de Myanmar está esparcido en un territorio que por las condiciones ambientales e históricas  no ha tenido un desarrollo adecuado. Muchas familias y sus niños han sido víctimas de la desnutrición y de otras enfermedades, como la malaria, la tuberculosis y el SIDA. Gracias a la generosidad de los beneficiarios, pretende infundir una renovada esperanza en el corazón de la gente, ofreciendo a las nuevas generaciones un futuro distinto y contribuyendo a la promoción humana de esta población.   Para profundizar: Los Focolares están en distintos países asiáticos desde 1966: eventos de carácter cultural e interreligioso recuerdan estos primeros 50 años de historia.

Congo: la familia y la paz

Congo: la familia y la paz

20160403-02«Cuando la familia sufre es la sociedad la que sufre», afirmó uno de los participantes, yendo al corazón del mensaje del tema elegido “La Familia y la Paz”. Los instrumentos para la Paz en la familia: 5 secretos”. El evento se realizó el pasado 13 de marzo en 8 ciudades de la República Democrática de Congo y en el Congo Brazzaville y contó con una participación consistente. Estuvieron 1.000 personas en el evento que se realizó en Kinshasa, 500 en el de Goma, 600 en el de Lubumbashi, 1.500 en el de Kikwit, reseñan los organizadores. Y también 110 en el de Bukavu, 83 en el de Uvira, para no mencionar las Misas celebradas en otras localidades y 14 en el Congo Brazzaville. En Lolo, 170 adultos y 40 niños “festejaron” –porque en Congo, como en otros países africanos, la celebración del fin de semana pasado era una fiesta para – «Maman Chiara«, como es afectuosamente llamada la fundadora de los Focolares. Accueil 3«El Movimiento de los Focolares, ofreciendo la espiritualidad de la unidad quiso crear una sinergia lanzando una iniciativa de intercambio y comunión con las estructuras de la Iglesia local que trabajan por la familia», escribe Martine de Kinshasa. «Participaron también amigos de la Iglesia de Cristo en Congo y de la comunidad musulmana. La iniciativa despertó entusiasmo y alegría y nos reunimos previamente varias veces para prepararla entre todos: algunos con sus testimonios, otros con cantos y danzas… cada grupo quiso dar su aporte para construir la jornada» También los medios se hiciero eco del evento, que fue difundido por la televisión y los periódicos: L’ Observateur, Le Phare, Le Potentiel, Le Congolais, para citar algunos. «¡En Kikwit también la Radio musulmana quiso participar en esta cita!», escriben. Los “5 secretos” son algunos aspectos del carisma de la unidad aplicados a la vida familiar: el “Pacto de misericordia”, es decir, el perdón entre los cónyuges y los hijos; la comunión de las experiencias vividas de la Palabra de Dios; y como complemento, la comunión de alma y la corrección fraterna. Finalmente, el diálogo con personas preparadas que puedan ayudar en el camino de la vida familiar, si hubiese dificultades. «Estos “secretos” – dicen – recién “revelados” están ya ayudando a varias familias a reencontrar la paz y la armonía». 20160403-04jpgEn los discursos de agradecimiento, Abdourahamane Diallo, representante de la UNESCO en la R.D. Congo, presente en Kinshasa, dijo: «Quisiera felicitar a los organizadores por esta iniciativa en favor de la paz de la familia. También nosotros en la UNESCO pensamos que hace falta defender la paz mediante la educación, el diálogo, la tolerancia y la cultura. Rindo un homenaje a la familia porque es allí donde inicia la educación. Les agradezco por este trabajo». «En este encuentro he descubierto una realidad de Dios a la que estamos llamados a vivir juntos, haciendo todo lo posible para que continúe», declaró el Imán de Kikwit. «Todos tenemos un solo Dios, Aquél que ha enviado el Ángel a María para anunciarle la buena noticia». Y el responsable de la comunidad Vie Nouvelle dijo: «Estoy feliz de descubrir los 5 secretos para construir la paz en la familia. Esta noche llamé por teléfono a mi hijo, que tiene problemas, para compartir todo esto. ¡Necesito este tema!». «El Movimiento de los Focolares, ofreciendo la espiritualidad de la unidad, ha querido crear una sinergia lanzando una iniciativa de intercambio y comunión con las estructuras de la Iglesia local que trabajan por la familia», escribe Martine desde Kinshasa. «Participaron también amigos de la Iglesia de Cristo en Congo y de la comunidad musulmana. La iniciativa suscitó entusiasmo y alegría y nos encontramos varias veces para prepararla juntos, quien con testimonios, quien con canciones y danzas… Cada grupo quiso aportar su propio ladrillo para construir la jornada». «Esta experiencia junto a la Iglesia local –concluye Martine – y a nuestros amigos protestantes y musulmanes, con quienes hemos tejido una relación, representa un paso adelante hacia el sueño de unidad de nuestra “Maman Chiara”».  

Evangelio vivido: a mí me lo hicieron

Evangelio vivido: a mí me lo hicieron

Congreso de matemáticos En un congreso asistía también una pareja de colegas con su hijito. Después de la cena, ellos se alternaban para hacerlo dormir, pero de este modo no lograban nunca pasar una velada juntos. Intuyendo que entre ellos dos las cosas no iban del todo bien, me ofrecí para ayudarlos. Se me ocurrió la idea de ofrecerme para cuidar al niño una noche, pues el niño me conocía. Al día siguiente mi colega me agradeció: desde que nació el pequeño – me dijo- no habían pasado nunca un momento juntos y esa noche había sido para ellos muy importante. M.Z.- Polonia El otro, es otro yo Estudio arte en la universidad. Impresionada por los sufrimientos de muchas familias sirias que habían padecido la guerra, pensé en organizar con otros amigos artistas una exposición. Con la venta de nuestros trabajos, recogeríamos fondos para ellos. El título era: El otro es otro yo. Abatir los muros de la indiferencia”.  Una de las obras principales era una pared compuesta por piecitas. Cada visitante podía llevar una a su casa para recordar que estamos todos vinculados e invitados, en nuestro quehacer cotidiano, a hacer algo por alguna persona que sufre. Organizar la exposición comportó muchos problemas. Una vez estaba realmente cansada pero pensando en las dificultades de los sirios, encontré energía renovada para ir adelante. La venta de las obras proporcionó casi 4000 dólares que entregaremos por completo a algunas familias sirias. J.T. – Usa El beso de las buenas noches. También esa noche papá había descargado las tensiones del día en mamá. Sin responder nada, ella se puso a planchar en la cocina, mientras que él leía en la sala. Un muro se había levantado entre los dos. Percibiendo el ambiente que era cada vez más pesado, después de cena todos nosotros, mis hermanos y yo, nos fuimos a dormir. Yo no lograba dormirme. Una frase me daba vueltas en la cabeza: «Donde no hay amor, pon amor y encontrarás amor». Superando el respeto humano, me levanté y fui a la cocina. «Buenas noches papá», y le di un beso. Después: «Buenas noches mamá», e hice lo mismo. Los dos se miraron y el muro entre ellos se derribó. Regresé a la cama feliz. G.M. Suiza. 137786330_fa036fbd02_b-aUn simple acto de amor Soy un franciscano. Después de haber dado la última azada que tenía a un pobre, le dije a Jesús: «Ahora, ¡ocúpate tú!». Por la radio me enteré que estaba llegando un lote de azadas. Le pedí a una ONG que me consiguiera alguna. Recibí 200 azadas junto con otras herramientas y bolsas de semillas que distribuí. Muchas personas del lugar me pidieron ayuda: protestantes miembros de una secta de kimbangisti y también un brujo, que después me invitó a su casa y delante de 5 litros de vino de palma, me agradeció por todo lo que hice por su gente. Y todo fue por un simple acto de amor. G.B. Angola    

Reunidos en Francia en Paray-le-Monial

Reunidos en Francia en Paray-le-Monial

20160401-02Paray-le-Monial, pequeña ciudad de Borgoña, no está lejos de otros lugares que tienen un rico patrimonio espiritual, como Cluny y Taizé, y lleva en sí la herencia artística de los lugares de culto que allí surgieron (aquí tuvo origen la arquitectura cluniacense e cistercense), que se encuentra por los “caminos de la cultura románica”, las que conducían a los peregrinos a Santiago de Compostela. Aquí, además de las apariciones de Jesús a Santa Margarita María de Alacoque, se generó la espiritualidad del Sagrado Corazón. Eran 14 entre Movimientos y nuevas Comunidades, más de sesenta personas de edades y experiencias distintas que, empujadas por la amistad fraterna y por el deseo de crecer en el conocimiento recíproco, se dieron cita del 3 al 6 de marzo pasados, para un encuentro con el título “Comunión y misericordia – Experiencias y desafíos”. Estaba presente el obispo de Le Mans, Mons. Yves Le Saux. La elección del lugar surgió de la invitación de la Comunidad Emmanuel que aquí, en 1975, empezó una importante etapa para su historia y su difusión a nivel internacional. Algunos venían de la experiencia precedente del año pasado, vivida cerca de Florencia, en Loppiano, para otros en cambio era la primera vez. «La unidad que se vive es como un poliedro –había dicho el Papa Francisco a la Catholic Fraternity en el 2014-. Nos invita a maravillarnos de lo que somos. Es con espíritu de asombro con el que contemplamos los rostros de sus comunidades», dijo Laurent Landete, de la Comunidad del Emmanuel, en su saludo. Misericordia es el mismo nombre de Dios, afirmó el Papa cuando inauguró el Jubileo, es un ámbito donde cada una de las catorce realidades ha entrado para transmitirla mediante su testimonio. Para el Arca:  sanar las heridas de la discapacidad,  la Comunidad debe convertirse en el lugar del perdón: frágiles y vulnerables, podemos experimentar la misericordia del Padre. Para la Asociación Papa Juan XXIII: compartir con los más pobres, aprender el perdón. Para la Familia de la Esperanza, Nuevos Horizontes, Comunidad Cenáculo: bajar a las llagas más profundas de la dependencia y de la fragilidad existencial para llevar la resurrección, misericordia y reconciliación consigo mismo y con el mundo. Podrían parecer meras acciones sociales, pero escuchando el relato de lo que se ha vivido, se trasluce la profunda espiritualidad que mueve la pedagogía del Evangelio. 20160401-01Para la Comunidad Canção Nova, la Misericordia es, usar los medios de comunicación para llevar la alegre noticia a la humanidad.  Para los Focolares: la unidad, , es lo que hay que elegir momento tras momento, hombre junto a hombre, con el inevitable intercambio de luces y sombras. El amor al hermano y un “pacto de misericordia” ayudan a consolidar la meta. Para Vía Pacis: la  reconciliación con las propias heridas y santificarse juntos.  Para la Comunidad Católica Shalom la misericordia es una misión, en situaciones inéditas, como entre las carrozas del carnaval de Río. Para la Comunidad de las Bienaventuranzas: compartir el camino para identificar y expresar mejor la fisonomía eclesial en los Estatutos.  Para Regnum Christi, el acompañamiento en el discernimiento de la Iglesia y la amistad fraterna en Jesús son puntos de luz. Los acontecimientos actuales caracterizan los aportes que enriquecen el encuentro. La Comunidad Emmanuel comunicó a todos sobre sus iniciativas de diálogo interreligioso, especialmente con los musulmanes. Un hecho importante si se piensa en los graves atentados ocurridos en el país. Sobre la misma línea la Comunidad de San Egidio subrayó la importancia de la Paz, de adquirir una visión en donde el mundo se redescubra fraterno y en sinergia consigo mismo. El compartir, en Chemin Neuf, refuerza la comunión, permite experimentar la extraordinaria misericordia del Padre que es la fuente de su misión: la unidad. «Diversos carismas en el caleidoscopio de los testimonios, parecían las manos del Amor de Dios tendidas hacia la humanidad de hoy», declaró Lina Ciampi quien participó en nombre de los Focolares. En todos se sentía fuerte el deseo de volver a encontrarse, y la voluntad de permanecer en contacto y de rezar los unos por los otros. Un pacto de benevolencia entre todos concluyó el encuentro.

Jesús Morán: aspectos antropológicos del diálogo

Jesús Morán: aspectos antropológicos del diálogo

20160331-01

© CSC Audiovisivi

«El diálogo es un verdadero signo de los tiempos, pero representa una realidad en la que debemos ahondar en todo sentido. Conforme al pensamiento de Juan Pablo II y de otros estudiosos contemporáneos, Chiara Lubich describió nuestra época, al menos en el Occidente, con la categoría de “noche cultural”, no una noche definitiva, sino una noche que, según Chiara Lubich, esconde una luz, una esperanza. Podríamos entonces decir que en la noche cultural, que es también una “noche del diálogo”, se oculta una luz, es decir la posibilidad de elaborar juntos una nueva cultura del diálogo. Según mi opinión, lo primero que hay que hacer es redescubrir que el diálogo está tan arraigado a la naturaleza humana, que podemos encontrar en todas las culturas las que yo llamaría “las fuentes del diálogo”. Estas fuentes están recopiladas en las grandes Escrituras y son fundamentalmente dos: la fuente que nace de la experiencia religiosa y la que nace de la búsqueda filosófica de la humanidad. En esta línea tendríamos que hablar de fuente bíblica, coránica, védica, etc. Lo cual significa que en todas las Escrituras de las tradiciones religiosas encontramos fuertemente subrayado el diálogo. Tendríamos que recurrir también a la filosofía griega, a la metafísica islámica, a las Upanishad, al pensamiento budista, etc. En el siglo pasado, se ha desarrollado en Occidente una verdadera escuela de pensamiento dialógico de raíz judía y cristiana. Me remonto, de manera especial, a esta última fuente para ofrecerles algunos principios de una antropología del diálogo. Primero. El diálogo “está inscrito en la naturaleza humana” hasta el punto que se puede decir que es la definición misma del ser humano. Segundo. En el diálogo “cada ser humano es completado por el don del otro”, es decir que necesitamos los unos de los otros para ser nosotros mismos. En el diálogo yo le regalo al otro mi alteridad, mi diversidad. Tercero. Cada diálogo “es siempre un encuentro personal”, por consiguiente no se trata tanto de palabras o de pensamiento, sino de donar nuestro ser. El diálogo no es simple conversación, ni discusión, sino algo que toca lo más profundo de los interlocutores. Cuarto. El diálogo “requiere silencio y escucha”. Esto es decisivo, porque el silencio es importante no sólo para hablar correctamente, sino también para pensar correctamente. Como dice un proverbio: “Cuando hables, haz que tus palabras sean mejores que tu silencio” (Dionisio el Viejo). Quinto. El verdadero diálogo “constituye algo existencial” porque nos exponemos a nosotros mismos, nuestra visión de las cosas, nuestra identidad. A veces sentimos que perdemos nuestra identidad cultural, pero es sólo una transición porque en realidad la identidad resulta enriquecida inmensamente gracias a su apertura. Nosotros deberíamos tener una “identidad abierta”. Esto significa saber quiénes somos; pero también estar convencidos de que “cuando me comprendo con alguien… entonces sé mejor también quién soy yo” (Fabris). Otros principios más. El diálogo auténtico “tiene que ver con la verdad”, es una profundización de la verdad. Para los antiguos griegos, el diálogo era el método para llegar a la verdad. Esto significa que la verdad siempre necesita ser completada. Nadie posee la verdad, es ella que nos posee, por lo tanto no se trata de relatividad de la verdad, sino de “relacionalidad de la verdad” (Baccarini). “Verdad relativa” significa que cada uno tiene su verdad que es válida sólo para sí mismo. “Verdad relacional”, en cambio, quiere decir que cada uno participa y pone en común con los demás su participación a la verdad, que es una para todos. Distinta es la manera en la que nosotros llegamos y participamos de la verdad. Por esto es importante dialogar: para enriquecerse de las varias perspectivas. En la relación, cada uno descubre aspectos nuevos de la verdad como si fueran propios. Como dice Raimond Panikkar: “De una ventana se ve todo el paisaje, pero no totalmente”. Es lo que decíamos antes: tenemos que concebir la diversidad como un don y no como un peligro. Una de las grandes paradojas de hoy es que en este mundo globalizado nos da miedo la diversidad, nos da miedo el otro. Además el diálogo “requiere una fuerte voluntad”. El amor a la verdad me lleva a buscarla y a quererla, y por esto me pongo en diálogo. Los últimos dos principios. El diálogo “es posible sólo entre personas verdaderas”, y sólo el amor nos hace verdaderos. En otras palabras, el amor prepara a las personas al diálogo haciéndolas verdaderas. Lo que hace que el hablar sea fecundo, es la santidad de quien habla y la santidad de quien escucha. Ésta es la responsabilidad del diálogo en todo su potencial: requiere personas verdaderas y hace que las personas sean más verdaderas. Finalmente: la cultura del diálogo “conoce sólo una ley que es la de la reciprocidad”. Se necesita este camino de ida y vuelta para que haya verdadero diálogo. En definitiva, hoy se habla mucho de interculturalidad. Pienso que una verdadera interculturalidad es posible si empezamos a vivir esta cultura del diálogo. Nadie nunca dijo que dialogar es fácil. Se requiere lo que hoy es difícil de pronunciar: sacrificio. Se requiere de hombres y mujeres “maduros para la muerte” (María Zambrano), es decir dispuestos a morir a sí mismos para vivir en el otro».  Jesús Morán , Universidad de Mumbai, 5 de febrero de 2016  

Lahore: un ataque contra el ser humano

Lahore: un ataque contra el ser humano

Credit_Photo_Unit_via_Flickr_CC_BY_NC_20__CNA-01

Foto: Flickr CC / NC_20 CNA

Lahore es la segunda ciudad de Paquistán, se encuentra en la provincia de Punjab, en el noreste del país. «En todo el país, desde hace tiempo, las escuelas y las universidades están siendo protegidas como fortalezas, las iglesias y las mezquitas son vigiladas por guardias armados: ciertamente un parque público no podía ser protegido así. Impresiona que la mayor parte de las víctimas son niños y familias completas, muchas de ellas estaban festejando la fiesta de Pascua», escriben desde la comunidad de los Focolares de Lahore. Eran las 19 horas, hora local, del día 27 de marzo, cuando un kamikaze se hizo explotar en el Gulshan- e- Iqbal Park. Un crimen “vil e insensato”, como lo definió el papa Francisco en el Regina Coeli, recordando la Pascua en Paquistán “ensangrentada por un execrable atentado, que produjo estragos en muchas personas inocentes”, entre ellos 29 niños y muchas mujeres. «Junto con todos – escriben aún desde Lahore- queremos nuevamente abrazar este rostro de Jesús Abandonado para que Él pueda transformar este gran dolor en un nuevo impulso de amor, generar Luz que ilumine las mentes y dar fuerza a todas las personas de buena voluntad. Estamos rezando por todas las víctimas, por los heridos y por todas las familias implicadas y sobre todo para que el odio no produzca más odio». «Estaba yendo con mis nietos al parque y en determinado momento quise volver a casa y hacer un paseo distinto», atestigua una amiga que con este cambio de programa no fue dañada por la tragedia. «Estaban también nuestros parientes en el momento de la explosión, pero no sufrieron daños. Entre ellos, estaba un joven de 18 años que socorrió a un niño que murió poco después entre sus brazos» «Invito a que recemos al Señor por las numerosas víctimas y por sus seres queridos», dijo el Papa, refiriéndose también «a las autoridades civiles y a todas las organizaciones sociales» de Paquistán, «para que realicen todos los esfuerzos posibles para devolver la seguridad y la serenidad a la población, y, en particular, a las minorías religiosas más vulnerables». «Es impresionante ver con que sacralidad y dignidad se vive el dolor – atestiguan desde la ciudad atacada- y cuánta solidaridad existe: los heridos fueron llevados con vehículos particulares, sin miedo, a los hospitales más cercanos. El personal hospitalario trabajó sin pausa. Cuando se produjo un llamado de donantes de sangre, se formaron largas filas en los hospitales. El sufrimiento en que se vive allí, desde hace tiempo, y que parece llegar a su máximo, hace nacer una nueva actitud al soportar y al actuar, una nueva esperanza que se expresa en pequeños gestos que demuestran un único deseo: Paz». «En varios lugares la gente salió a las calles y encendió velas. También las protestas se desarrollaron pacíficamente. En las primeras páginas de los periódicos de todo el mundo se habla del atentado contra los cristianos y tal vez era así, pero aquí lo vivimos como un ataque hacia el ser humano y no existe diferencia. Las víctimas son musulmanas y cristianas. Fueron muy bien recibidos todos los gestos de solidaridad que llegaron del extranjero, como el haber apagado las luces de la torre Eiffel. Hicieron experimentar- concluyen- que Paquistán no está aislado en el sufrimiento de esta tragedia tan dolorosa y absurda». Maria Chiara De Lorenzo

Conexión CH

Conexión CH

CollegamentoCH_Notiziario1En el sitio de la Conexión CH, los días previos a la cita, estará disponible el resumen de las noticias. En el mismo sitio es también posible acceder a las ediciones íntegras y a las noticias particulares de las Conexiones CH anteriores.  

El Salvador, por los derechos de los menores

El Salvador, por los derechos de los menores

20160330-01Proteger a los menores es un deber cívico que se inscribe en el más amplio respeto de los derechos humanos. Un deber, por lo tanto, pero también caracterizado por una importante visión de futuro, precisamente por el valor inestimable que representan las nuevas generaciones. Dando una mirada a los distintos artículos de la ley salvadoreña, entrada en vigencia en 2011, se evidencia toda la novedad con respecto a la anterior, que prestaba atención sólo a los casos de fuertes carencias como sobrevivencia, discapacidad, abandono. En esta nueva normativa, que incorpora las líneas-guía de los tratados internacionales, se prevé la protección a todos los niños, desde la concepción hasta los 18 años de edad, garantizando adecuadas oportunidades para un desarrollo integral y una vida inspirada en los principios de la dignidad humana. Como en muchos otros países, también en El Salvador no faltan fenómenos sociales que a veces comprometen dichos principios, justamente por la característica vulnerabilidad que caracteriza la franja de la infancia y adolescencia. Y como en cualquier otro rincón del planeta, también aquí se necesita que la población colabore activamente con las Instituciones para salvaguardar todos los derechos humanos, pero especialmente esos derechos de los que goza todo niño en el mundo. Es del 2014 un Documento, elaborado por el Centro internacional de los Focolares, “para la promoción del bienestar y la tutela de los menores” que suscitó en todo el Movimiento en el mundo una renovada sensibilización hacia esta responsabilidad. Gracias también a esa iniciativa, la comunidad salvadoreña del Focolar está ahora dando una valiosa contribución para dar a conocer de forma capilar los derechos del niño y de cómo hay que actuar para promover su desarrollo integral y su bienestar psico-físico-espiritual. Desenmascarando también ciertas formas escondidas y sutiles con las cuales, involuntariamente, padres y educadores podrían perjudicar su crecimiento armonioso con su forma de actuar. La de los Focolares es una acción que encuentra el amplio consenso de la Iglesia católica local, que a su vez anima a las asociaciones para que adopten todos los medios para ayudar a prevenir cualquier acción que pueda violar dichos derechos. El programa formativo de los Focolares prevé una lectura de la ley desde la óptica del amor evangélico, en la perspectiva de concurrir a la formación de nuevas generaciones cada vez más conscientes, libres, capaces de hacer elecciones autónomas basadas en los valores. En este programa se enmarca también el reciente “Proyecto Up2me” preparado por los Focolares y adecuado a las distintas franjas de la edad evolutiva. Una propuesta apasionante para poner en práctica con adultos, jóvenes  y niños, para abrir con muchos un diálogo sobre temas muy candentes hoy en día.

Palabra de vida – Abril 2016

¿Por qué estas palabras de Jesús nos son tan queridas y resuenan a menudo en las palabras de vida que elegimos para cada mes? Quizá porque forman el núcleo del Evangelio. Son las que el Señor nos dirigirá cuando al final nos encontremos delante de Él. Sobre ellas versará el examen más importante de la vida, para el cual podemos prepararnos día a día. Jesús nos preguntará si hemos dado de comer y de beber a quien estaba hambriento y sediento, si hemos acogido al forastero, si hemos vestido al desnudo, visitado al enfermo y al preso… Se trata de pequeños gestos que, sin embargo, valen la eternidad. Nada es pequeño si se hace por amor, si se lo hacemos a Él. Pues Jesús no solo se acercó a los pobres y marginados, curó a los enfermos y consoló a los que sufren, sino que los amó con predilección, hasta llamarlos hermanos e identificarse con ellos con una misteriosa solidaridad. Hoy Jesús sigue estando presente en quien sufre injusticias y violencia, en quien busca trabajo o vive en situación precaria, en quien se ve obligado a salir de su patria a causa de las guerras. ¡Cuántas personas sufren a nuestro alrededor por muchas causas e imploran, aun sin palabras, nuestra ayuda! Son Jesús, que nos pide un amor concreto, capaz de inventar nuevas «obras de misericordia» que respondan a las nuevas necesidades. Nadie está excluido. Si una persona anciana y enferma es Jesús, ¿cómo no procurarle el alivio necesario? Si le enseño el idioma a un niño inmigrante, se lo enseño a Jesús. Si ayudo a mi madre a limpiar la casa, ayudo a Jesús. Si llevo esperanza a un preso, si consuelo a quien está afligido o perdono a quien me ha herido, me relaciono con Jesús. Y, cada vez, el fruto será no solo dar alegría al otro, sino sentir nosotros mismos una alegría aún mayor. Cuando damos, recibimos, sentimos una plenitud interior, nos sentimos felices porque, aunque no lo sepamos, nos encontramos con Jesús: el otro, como escribió Chiara Lubich, es el arco bajo el que hay que pasar para llegar a Dios. Así evocaba ella el impacto de esta palabra de vida desde el inicio de su experiencia: «Todo nuestro antiguo modo de concebir y de amar al prójimo se derrumbó. Si Cristo estaba en cierto modo en todos, no podíamos hacer discriminaciones, no podíamos tener preferencias. Se hicieron añicos los conceptos humanos que clasifican a las personas: compatriota o extranjero, viejo o joven, guapo o feo, antipático o simpático, rico o pobre. Cristo estaba detrás de cada uno, Cristo estaba en cada uno. Y cada hermano era realmente “otro Cristo” […]. Al vivir así nos dimos cuenta de que el prójimo era para nosotros el camino para llegar a Dios. Es más, el hermano se nos presentó como un arco bajo el cual era preciso pasar para encontrar a Dios. Así lo experimentamos ya desde los primeros días. ¡Cuánta unión con Dios sentíamos por la noche, en la oración o en el recogimiento, después de haberlo amado todo el día en los hermanos! Y, ¿quién nos daba ese consuelo, esa unión interior tan nueva, tan celestial, sino Cristo que vivía el “den y se les dará” (Lc 6, 38) de su Evangelio? Lo habíamos amado todo el día en los hermanos y ahora Él nos amaba a nosotros»[1].

Fabio Ciardi

   [1] C. Lubich, Escritos espirituales/4, Ciudad Nueva, Madrid 1997, pp. 206-207.

Producción de armas. Un problema de conciencia

Producción de armas. Un problema de conciencia

«A los 19 años dejé mi región – l’Abruzzo (Italia)- para estudiar ingeniería aeroespacial en Pisa. Fue un estudio difícil pero lleno de satisfacciones: en 5 años logré terminar la especialización con la nota más alta, incluida una pasantía en Alemania que enriqueció más mi currículum. Todo esto lo pude realizar con el apoyo y los sacrificios de mi familia. Cuando me gradué esperaba con ansia poder encontrar mi lugar en el mundo laboral. Pero tuve que afrontar la desocupación juvenil, que en nuestro país es del 40% y con empresas que cuando va bien ofrecen solamente contratos por poco tiempo o consultorías con pagos trimestrales o semestrales. Después de algunos meses empleados en enviar en vano mi currículum, comencé a pensar que tal vez debía dedicarme a otras áreas de la industria, o de lo contrario, emigrar. Sin embargo, inesperadamente, recibo una propuesta de una empresa que en Italia representa el principal Consorcio Europeo constructor de misiles y tecnología de defensa. La idea de un verdadero trabajo en una empresa tan importante como ésta, era muy tentadora. Después de una llamada telefónica muy positiva, fui invitado a la entrevista en la casa central con el personal técnico. El ambiente era juvenil y estimulante. La empresa era seria y de elevada profesionalidad. La elaboración de misiles no reflejaba los principios en los que creo pero dentro de mí existía la esperanza de que me ofrecieran un empleo que no me involucrara en la producción de armas. La entrevista salió bien; después de una semana, entre los numerosos candidatos, fui llamado para firmar el contrato de trabajo. En el contrato existía la cláusula de que se trataba de una tarea directamente vinculada a la producción de misiles. Me sentí acorralado. Por un lado era tentador pues se trataba de un trabajo estable, con un contrato por tiempo indeterminado, un sueldo excelente y una posibilidad segura de hacer carrera. Por otro lado estaba mi convicción de ciudadano, pero antes que nada de hombre, comprometido en la construcción de una sociedad no violenta, basada en el respeto de los derechos humanos, en la justicia social, en el justo equilibrio entre las necesidades humanas, el ambiente y la buena utilización de los recursos. Siempre creí en una sociedad en la cual la ambición de algunos no hiera la dignidad del otro y el éxito económico no llevara a olvidar al ser humano. Para complicar esta evaluación se agregaban mis compañeros de estudio que me empujaban a aceptar sin frenarme en estos moralismos. Ellos sostenían la innegable teoría de que un joven de 25 años recién graduado no puede permitirse en estos tiempos, rechazar un trabajo tan ventajoso. Y con miles de argumentos trataban de ponerme frente a la realidad recordándome que yo era una persona privilegiada pero también… ¡inconsciente! Por último, con este trabajo habría podido liberar a mi familia del compromiso de seguir manteniéndome. Además de mi conciencia, un papel decisivo lo jugaron las personas que me rodean más cercanamente: mi familia, mi novia y los Jóvenes por un mundo unido con quienes me he formado. Y que hicieron madurar la idea – que era cada vez más clara- que para construir una sociedad solidaria y no violenta es necesario trabajar concretamente, testimoniando y pagando con la propia persona. Era mi momento de poderlo hacer. Respondí a la empresa que no podía aceptar ese trabajo, expresando con transparencia los motivos. Indudablemente no fue una elección fácil, en especial porque no tenía otro ofrecimiento de trabajo pendiente. Pero no me detuve en esto. Seguí con mi búsqueda y después de algunas semanas, me llegaron otras propuestas de trabajo que me ubicaron donde estoy hoy trabajando, feliz y satisfecho del trabajo que desempeño en Turín como ingeniero aeronáutico en el sector civil». Fuente: Città Nuova Lee también: “Armas, no gracias”

Después de Grand Bassam: un testimonio de la Costa de Marfil

Después de Grand Bassam: un testimonio de la Costa de Marfil

20160329-01«El 13 de marzo pasado la Costa de Marfil y el mundo entero reciberon con estupor la noticia de que la ciudad balnearia de Grand-Bassam había sido duramente atacada por desconocidos y que era aún difícil contar el número de las víctimas», escriben Jeanne Kabanga y Damase Djato, de los Focolares de Abidjan. «Es posible imaginar el estrago porque durante el fin de semana muchas personas llegan a este lugar desde Abijan, ciudad ubicada a 40 km del lugar y llegan también de otras partes de la región, para descansar en esta playa frente al Hotel llamado «La estrella del SUR». Es un lugar muy visitado sobre todo por los turistas de muchas procedencias. Grand-Bassam –recordamos- fue la primera capital de la Costa de Marfil y está clasificada como patrimonio mundial de la UNESCO» MonsJosephSpiteriEse mismo día, 180 personas se habían reunido en Abijan para reflexionar sobre la actualidad del mensaje de Chiara Lubich, quien recibió el premio UNESCO para la educación a la paz, en el año 1996, y el 14 de marzo se conmemoraba el 8º aniversario de su muerte. Entre ellos estaban el Nuncio apostólico de Costa de Marfil, Mons. Joseph Spiteri y el Imán Diara. Cada año, por invitación suya, la comunidad de los Focolares participa en su mezquita en la celebración del Maouloud (conmemoración del nacimiento del Profeta). «De sus palabras –y partiendo de la invitación de Chiara a los actores políticos de vivir el arte de amar como verdadera terapia para nuestra época- hemos descubierto juntos nuestro deber de amar a todos sin distinción, para no perdernos en los fundamentalismos, sino por el contrario cultivando la esperanza y la misericordia». «Nuestra tendencia, en cambio, subrayó el Nuncio, es la de dar lugar a la misericordia antes que al juicio», pues, «si los musulmanes y los cristianos se amaran», subrayó el Imán, «el mundo se salvaría». Los jóvenes y los chicos que estuvieron presentes hablaron sobre su compromiso en la recolección de firmas por la paz.  Después de haber preparado con esmero fragmentos de mensajes de Gandhi, de la Madre Teresa de Calcuta, de Chiara Lubich, del Dalai Lama, salieron a la calle a distribuirlos entre la gente. «No era fácil acercarse a los adultos para presentarles el proyecto – que continuaremos distribuyendo también durante la Semana del Mundo Unido- pero vencimos nuestro temor». El relato de los más pequeños es lo que más impactó a los presentes, también porque estaba impregnado de muchos episodios concretos que hablaban de su compromiso de ser “mensajeros de paz” en su propio ambiente. «Una vez, en casa – cuenta Marie Lucie- mi hermana más chica no había lavado los platos. En el momento del almuerzo por lo tanto no podíamos comer. Le dije que los lavara, pero no quiso. Me dije a mí misma que – si los lavo yo- realizaré un gesto de paz. Hice así y pudimos comer». «En la escuela – cuenta Prince- algunos compañeros se burlaban de otro, que era más débil; lo insultaban y le pegaban. Con otro muchacho decidimos intervenir, hablamos con ellos, explicándoles los ideales de paz en que creemos y pidiéndoles que lo dejen tranquilo. Dejaron de hacerlo y ahora son todos amigos» 160220_Abidjan_06_ridEn este contexto, también la presentación de la Economía de Comunión, que en Costa de Marfil dio ya algunos pasos, resultó como un posible antídoto para la pobreza y la miseria; acciones, aún pequeñas, como la actividad de Firmin que da clases en uno de los barrios de Abijan. Estas acciones asumen – en el trasfondo de la construcción capilar de la paz- un significado mayor. Y la recolección de firmas por la paz expresó la toma de conciencia personal de cada uno. «Cuando volvimos a casa – continúan Jeanne y Damase- supimos por la televisión la noticia del atentado de Grand Bassam. Después de esta jornada en la cual quisimos hablar y experimentamos la paz, está clara la llamada a ser trabajadores por la paz, practicando todo lo que hemos aprendido y sobre todo tratando antes que nada de conservar la paz dentro nuestro, para poder donarla a nuestro alrededor. Solo así, nos parece, podremos dar nuestra contribución para desarmar el terrorismo y toda clase de rencores».      

El Resucitado

El Resucitado

20160327-a«Una circunstancia providencial me llevó a profundizar en la realidad de Jesús, el cual después del abandono y de la muerte en la cruz,  resucitó. Y no sólo eso, además tuve ocasión de meditar intensamente, con la mente y con el corazón, sobre muchos detalles de la resurrección de Jesús y de su vida después de la resurrección. Y me quedé estupefacta (es la palabra exacta) ante la majestuosidad, la grandiosidad que emanaba de este divino acontecimiento: ante la singularidad del Resucitado, este hecho sobrenatural que, como sabemos, es único en el mundo. Por eso, esta vez no puedo dejar de detenerme para subrayarlo nuevamente. […] La resurrección de Jesús es lo que caracteriza principalmente al cristianismo, lo que distingue a su fundador, Jesús. El hecho de haber resucitado. ¡Resucitó de la muerte! Pero no como resucitaron otros, por ejemplo Lázaro, que más tarde, llegado el momento, murió. Jesús resucitó para no volver a morir nunca, para seguir viviendo, incluso como hombre, en el Paraíso, en el corazón de la Trinidad. ¡Y lo vieron 500 personas! Y está claro que no era un fantasma. Era Él, realmente Él: «Acerca aquí tu dedo y mira mis manos; trae tu mano y métela en mi costado» (Jn 20, 27), le dijo a Tomás. Y comió con los suyos y les habló y se quedó con ellos 40 días… Había renunciado a su infinita grandeza por amor a nosotros y se había hecho pequeño, un hombre entre los hombres, como uno de nosotros.  […] Pero, habiendo resucitado, rompió, superó todas las leyes de la naturaleza, del cosmos entero, y de ese modo se mostró más grande que todo lo que existe, que todo lo que había creado, que todo lo que pueda pensarse. Por eso nosotros, con sólo intuir esta verdad, no podemos dejar de considerarlo Dios, no podemos dejar de hacer como Tomás y, arrodillados ante Él en adoración, confesar y decirle de corazón: «Señor mío y Dios mío». […] Y contemplé con otros ojos lo que Jesús hizo durante aquellos extraordinarios días en la Tierra, después que bajase del Cielo un ángel que desplazó la piedra de su sepulcro y lo anunció, el Resucitado se le apareció en primer lugar a la Magdalena, que era una pecadora, porque Él se había encarnado para los pecadores. Lo vemos por el camino de Emaús, grande e inmenso como era, transformado en el primer exegeta y explicando las Escrituras a los dos discípulos. Lo vemos como fundador de su Iglesia, imponiendo las manos a sus discípulos para darles el Espíritu Santo; lo vemos diciendo esas extraordinarias palabras a Pedro, a quien puso como cabeza de su Iglesia. Lo vemos enviando a sus discípulos a todo el mundo para anunciar el Evangelio, el nuevo Reino fundado por Él, en nombre de la Santísima Trinidad, de la cual había descendido a la Tierra y a la cual, después, alcanzaría plenamente con la Ascensión. […] Y por haber resucitado, he aquí que las palabras que había dicho anteriormente, antes de su muerte, adquirían una luminosidad única, expresando verdades irrefutables. Las primeras de todas, aquellas con las que anuncia también nuestra resurrección. Lo sabía y lo creía porque soy cristiana. Pero ahora estoy doblemente segura: resucitaré, resucitaremos. […]». Chiara Lubich, Unidos hacia el Padre, Editorial Ciudad Nueva , Madrid 2005, p.113-116

Bajo la cruz, María

Bajo la cruz, María

Ave Cerquetti Crocifissione Lienz 1975

Ave Cerquetti «Crocifissione» Lienz (Austria) 1975

«El trágico misterio de la muerte en la cruz, se volcó sobre las pobres mujeres que se encontraban a los pies del patíbulo cuando también cielo y tierra horrorizados se oscurecieron y temblaron. El Padre había abandonado al Hijo; el Hijo había abandonado a la Madre: todo se derrumbaba en el horror y en la tiniebla: sólo aquella mujer quedaba de pie, y a ella se le confió la humanidad abandonada. Nuestro destino quedó en las manos de ella como en el lejano y tranquilo día cuando dijo su primer fiat. Cuando el Padre dirigió la mirada sobre esa colina horrorosa, que se había convertido en el centro sangriento del universo, vio a la humanidad aferrada a esa mujer, bajo el sacrificio cruento del hombre-Dios.

  • Mártir, y más que mártir, – dice san Bernardo.

Bajo la cruz, María. Verdaderamente se puede decir, en cierto sentido, que Jesús tuvo necesidad de ella, no sólo para nacer, sino también para morir. Hubo un momento en el cual desde la cruz, abandonado en la tierra por los hombres, se sintió también abandonado por el Padre del Cielo: entonces se dirigió a la madre, a los pies de la cruz: a la madre que no lo había abandonado y vencía la naturaleza para no caer en esa prueba bajo la cual cualquier mujer se habría derrumbado. Como intuyó Goethe, en el Fausto, el padecer de María y de Jesús en el Calvario fueron un «único dolor». Después, habiendo muerto el hijo, la madre siguió sufriendo. Él, muerto, fue depositado en el regazo de ella: más impotente que cuando era niño. Un Dios muerto ¡en el regazo de una madre! Entonces, sí, ella fue reina. Porque Jesús recapitulaba a la humanidad, era la humanidad completa de todos los tiempos, custodiada en el regazo de María, quien en esa desolación se presenta como la madre y la reina de la familia humana que camina por las calles del dolor. Su grandeza fue similar a su angustia. Pero, como se ve, su majestuosidad fue un primado en el sufrimiento: el único modo para ser la más cercana, inmediatamente próxima, al Crucificado. Si pensamos en el desgarro de María bajo la cruz, en el dolor de la madre por el tormento del Hijo, víctima voluntaria de todas las culpas del mundo y de todos los sufrimientos de los hombres, se intuye la inmensidad de la tragedia padecida; una tragedia cósmica. Y es la medida de nuestra pobreza cuando a ella le dedicamos alguna frase de estampita, alguna pobre jaculatoria … Nos parece que perdemos tiempo sólo meditando, o llorando, por ella: y corremos el riesgo de perder la eternidad, Injertarnos en ese dolor significa incluirnos en la redención. Coloquémonos junto a ella al lado del Crucificado, eligiendo el rol de víctimas y no el de verdugos, abrazando el dolor en contra de las insinuaciones que el dinero nos ofrece, la cruz contra el vicio: para estar después con María sosteniendo sobre el regazo, en medio del abandono, el cuerpo exangüe de Jesús, el cuerpo místico que las persecuciones desangran. Siempre, en los momentos en que la Iglesia esdesgarrada y Cristo sufre en los cristianos, se ve nuevamente a María que recoge en su regazo Su cuerpo llagado. Y porque Cristo reasume a la humanidad, se identificó con la humanidad, he aquí que la Iglesia se asemeja a la misma María que acoge a los pueblos en medio de las guerras» (Igino Giordani, Maria modello perfetto, Città Nuova, Roma, 2001, pp.124-129)

Jesús Abandonado: el Hombre-Mundo

Jesús Abandonado: el Hombre-Mundo

 ©Ave Cerquetti, 'Lunico Bene' - Mariapoli Ginetta (Brasile) 1998

©Ave Cerquetti, ‘L’unico Bene’ – Mariapoli Ginetta (Brasile) 1998

Al inicio de los años ’70 el mundo se encontraba ya interconectado para el “irreversible encuentro entre los pueblos y las civilizaciones del mundo entero, gracias a una verdadera explosión de los medios de comunicación social y del inmenso desarrollo tecnológico”. Chiara Lubich, aun reconociendo lo positivo de esta novedad, advierte a los jóvenes que “no siempre el hombre de hoy está preparado para este encuentro”, a menudo desestabilizador, porque se piensa que el propio modo de pensar sea el único. Y les invita a no confundir los valores absolutos, vinculados a lo Eterno, con las propias estructuras mentales. Ante la pérdida de las certezas, Chiara propone a los jóvenes un modelo a seguir, una llave que les abrirá las puertas para la construcción de un mundo nuevo. “¿Cómo vivir entonces este terrible hoy, en el que parece que por un misterioso cataclismo los más altos valores se tambalean como enormes rascacielos que se doblan y se hacen añicos? ¿Existe una respuesta (…), un medio seguro a tener en cuenta para cooperar con los demás para engendrar el mundo que vendrá?. ¿Existe en la práctica un tipo de Hombre-Mundo que siente, que ha sentido en sí ese terrible terremoto que amenaza con no salvar nada de cuanto hasta ahora se había creído intangible? ¿Que casi duda que la misma verdad absoluta lo abandone a su propio destino, hundiéndolo en la mayor de las confusiones? ¿Existe este Hombre-Mundo que ha sabido superar tan enorme prueba, pagando así por un mundo nuevo que ha vuelto a encontrar en sí y ha generado para los demás? Sí, existe. Pero se intuye inmediatamente que este hombre no podía ser solamente un hombre, sino que tenía que ser «el Hombre»: es Jesús Abandonado. Su humanidad perfecta, pero también débil y sujeta al dolor y a la muerte, es símbolo de toda estructura humana que, aun en sus límites, ha logrado contener en diversas circunstancias algo ilimitado, como la verdad.  En la cruz, próximo a la muerte física y en el abandono, a su muerte mística, Jesús advierte el derrumbe de toda su humanidad, de su ser hombre; de su estructura humana, por decirlo de algún modo, y, en el culmen de ese derrumbe, el Padre permite misteriosamente que dude y que la presencia de Dios en Él, casi se desvanezca. Y por eso grita: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? (Mt 27, 46) Pero precisamente en ese grito, Jesús, porque es Dios, tiene la fuerza para superar ese infinito dolor y da a su carne sufriente la potencia de la inmortalidad, insertándola resucitada en el seno de la Trinidad inmortal.    Y más aún, con este acto fenomenal de aceptación de la más espantosa destrucción que el Cielo y  la Tierra hayan conocido, Jesús da a los hombres la posibilidad de resucitar, en la otra vida, con la resurrección corporal y, en esta vida, con la resurrección espiritual – cuando amamos a Jesús Abandonado- de cualquier muerte, de cualquier destrucción en la que el hombre pudiera encontrarse. “Es Jesús Abandonado (…) el líder seguro para cada joven de este siglo.     Cuando se le ama, Él ofrece a quien le sigue el Espíritu de la verdad, del mismo modo que, después de su muerte en el Calvario, hizo descender sobre los apóstoles al Espíritu Santo”. Los jóvenes, afirma Chiara “siguiéndolo, encontrarán la posibilidad de no temblar frente a cualquier situación, más aún, podrán afrontarla con la seguridad de que toda verdad humana y el Reino de los Cielos, es decir, la Verdad, podrá encontrar -también por su contribución- las nuevas estructuras mentales a nivel mundial”. Y concluye: “A ustedes les corresponde acogerlo profundamente en su corazón como la perla más preciosa que hoy se les puede entregar para su alma, para los pueblos que aquí representan, pero sobre todo para ese mundo nuevo que tiene que ver a todos los hombres unidos. Para ese mundo nuevo que acogerá no a muchos pueblos sino al único pueblo de Dios”. Fuente: Chiara Lubich, Chiara a los Gen – 1970/1974, Ciudad Nueva, ed. 1975, págs. 69-80

Que todos sean uno

Que todos sean uno

20160324-02«Las líneas del Evangelio de Juan, y no sólo de ése, convergen en la frase que para mí, desde hace ya mucho tiempo, ha asumido un significado profundo e infinito: “Que todos sean una sola cosa, como tú, Padre, estás en mí y yo en ti, para que el mundo crea” (cf. Jn 17,21). Así es como deberíamos vivir. […] Éstas son las coordinadas de la unidad que me interesan de manera especial. La unidad en nuestras parroquias, la unidad de los distintos servicios y ministerios, la unidad entre clero y laicos, la unidad entre los presbíteros. La unidad se vuelve creíble sólo si demuestra que no somos nosotros los amos, sino que sólo Él es el Señor. Esta unidad en el ámbito del ministerio sacerdotal me interesa de manera particular. Al mismo tiempo debo mencionar la unidad de la Iglesia, la unidad con aquéllos que se encuentran fuera de los confines de nuestra Iglesia católico-romana, la unidad entre todos aquéllos que se reconocen en la fe en el único Dios, el Viviente, y por lo tanto, con los judíos y los musulmanes. Esa unidad entre la Iglesia y la sociedad, donde la una no está al lado de la otra de forma paralela o ni se contrapone a la otra, sino una Iglesia y una sociedad entran en una relación recíproca, evidenciando que la unidad que Dios dona es la levadura para la sociedad, es la levadura que hace que el ser humano sea libre. Es la unidad la que hace al ser humano plenamente humano, porque puede ser humano en su pleno sentido sólo allí donde Dios tiene derecho a ser Dios plenamente, y por lo tanto, puede donarnos todo lo que quiere donarnos. Y Él quiere donarnos nada menos que Su íntimo misterio: la unidad trinitaria. Sin embargo éste no es un simple programa, porque con los programas no se avanza mucho. Más bien debe convertirse en vida […]. También yo tengo que empezar a vivir esta unidad. Y por esto confío en el hecho de que también ustedes, queridos hermanos y hermanas, puedan ayudarme, y que podamos hacerlo juntos en la reciprocidad». Mons. Klaus Hemmerle De: W. Hagemann, Klaus Hemmerle. Innamorato della Parola di Dio, Città Nuova, Roma 2013, pp. 337-338

La Paz, más allá de la utopía

La Paz, más allá de la utopía

Easter_2016

«Si miramos el mundo con las mil heridas que lo afectan, la unidad y la paz pueden parecer sólo una utopía.

Que la fuerza del Resucitado, que ha vencido para siempre la muerte, y por tanto cada muerte, refuerce en nosotros la valentía de creer, de esperar y de obrar para que, en el mundo, la fraternidad sea la regla de la convivencia entre los diferentes pueblos y culturas.

“¡Deseo a todos una Feliz Pascua, con Jesús resucitado en medio de nosotros!”.

Maria Voce (Emmaus)

   

En Bruselas, Dios llora con nosotros

En Bruselas, Dios llora con nosotros

Dieu-pleure-avec-Bruxelles-© MICHEL-POCHET

«A Bruxelles, Dieu pleure avec nous» © Michel Pochet

En un comunicado intitulado «En Bruselas, Dios llora con nosotros», el Movimiento de los Focolares en Bélgica así se expresa: «Los terribles atentados perpetrados en la mañana del martes (22 marzo) en el aeropuerto de Zaventem y en el subte de Maelbeek, en  el corazón del barrio europeo de Bruselas, nos llena de consternación. Solidarizamos con las víctimas y sus familiares que lloran sus seres queridos y los sostenemos con la oración. Rezamos también por todos los que sufren a causa de la violencia en muchas partes del mundo y por los responsables de estos actos insensatos, en antítesis con la paz. De frente a algo tan absurdo nos surge del corazón una pregunta: ¿Dios mío, nos has abandonado?. La Pasión de Cristo, que conmemoramos el Viernes Santo, nos ayude a creer que cada sufrimiento encuentra eco en el grito de abandono de Jesús en la Cruz y que la resurrección nos hace esperar en el alba de un mundo mejor. Los atentados del martes 22 de marzo son una señal elocuente que nos invita a redoblar nuestro compromiso para que triunfe la paz, fruto de la solidaridad y de la fraternidad. Una propuesta: encontrarnos cada día, en donde estemos, para el TIME_OUT: un minuto de recogimiento por la paz, a mediodía». Fuente: Focolares Bélgica online

¿Armas? No, gracias

¿Armas? No, gracias

20160322-02Ante la situación cada vez más insostenible del conflicto armado difundido en varias partes del mundo, amplios sectores de la sociedad civil siguen movilizándose para frenar la acción de los gobiernos que mantienen con sus decisiones el tráfico de armas, identificado como una de las causas de impiden la solución de los conflictos. Sobre este tema también está comprometido desde hace tiempo el Movimiento de los Focolares en Italia, que a través de la revista Città Nuova y el Movimiento político por la Unidad, especialmente a través de sus escuelas de participación política, siguen desenmascarando la participación de Italia en la producción bélica. De hecho, el país es la sede de bases militares estratégicas y sigue produciendo armas de alta tecnología que llegan también a los países del Medio Oriente, como fue referido por Città Nuova. De los puertos de Cerdeña se embarcan bombas destinadas a Arabia Saudita, un país interesado en el conflicto sirio y líder de una coalición involucrada en la guerra en Yemen, condenada por la ONU, que ya cuenta con miles de víctimas 20160322-01¿Qué se puede hacer? El trabajo de un año, acompañado por expertos en geopolítica internacional ha llevado a la redacción de un manifiesto con solicitudes concretas y ha sido presentado a los diputados y senadores disponibles: • El respeto de la ley 185/90, sobre el «control de la exportación, importación y tránsito de material bélico». Específicamente se pide que se interrumpa la exportación y el tránsito en el territorio nacional de armas dirigidas a países en conflicto o que están cometiendo graves violaciones a los derechos humanos. • La asignación de fondos para la reconversión de la industria bélica para fines civiles, según lo que señala el art. 1,3 de la ley 185/90. • La transparencia y el control de las transacciones bancarias relativas a las importaciones, exportaciones y tránsito de armamento. A estas peticiones se suma también la solicitud de insertar en la agenda política el tema de la integración y la acogida de los prófugos de guerra, y de la inversión de mayores recursos en la cooperación internacional. Los jóvenes promotores del evento del 16 de marzo son muy conscientes de los poderes en juego y de la aparente consideración, aunque benévola, de que sus peticiones sean consideradas ingenuas, pero, como ellos mismos dijeron, «consideramos que tenemos una responsabilidad, que se deriva de los ideales que nos motivan, y por lo tanto, no nos podemos quedar callados ni mirar pasivamente la realidad que nos rodea. Trabajamos en nuestra vida cotidiana para construir la fraternidad y a partir de ello interpelamos a los gobernantes». La reflexión en el Parlamento se vio enriquecida por el aporte de Pasquale Ferrara, diplomático y docente universitario de relaciones internacionales, de Shahrzad Houshmand, teóloga islámica quien da clases en la Pontificia Universidad Gregoriana, del director de Cittá Nuova Michele Zanzucchi, y del profesor Maurizio Simoncelli, co-fundador del Instituto de investigaciones internacionales ‘Archivo desarme’. 20160322-03En la raíz está la espiritualidad de Chiara Lubich, quien cuando vivía todavía ­ en su ciudad natal, Trento, vio los horrores de la Segunda Guerra Mundial, y durante toda su vida sembró semillas para una convivencia pacífica, a través del diálogo con personas de credos y culturas diferentes. Chiara, cuanto tenía apenas 28 años, fue al Parlamento italiano para encontrarse con Igino Giordani, en 1948. «El augurio es que los jóvenes puedan incidir en la agenda política, como habitantes del presente y del futuro» declaró Silvio Minnetti, presidente del Movimiento político por la Unidad de Italia (MPPU). «Los jóvenes nos plantean preguntas, provocadoras, exigentes, y quien está en el quehacer político quiere acogerlas, comprometiéndose en primera persona mediante las decisiones que tiene que votar, pero también iniciando una reflexión seria para dar respuestas concretas». Para poder incidir todavía más en la agenda política, el MPPU de Italia tiene programado organizar en Montecitorio, en los próximos meses, un taller de escucha recíproca e intercambio sobre el manifiesto de los jóvenes, con la participación de parlamentarios, expertos, jóvenes y representantes del Gobierno. Leer también: Construir la paz, cada día (texto del llamamiento)

Gen Verde: tournée en el Extremo Oriente

Gen Verde: tournée en el Extremo Oriente

GV_IMG_3041_resized“Fue el más hermoso, el más conmovedor concierto que viví en mi vida”, “La música de ustedes hace bien al alma”. “Ya no puedo ser indiferente ante mundo que me rodea: debo hacer algo”. Con estos y otros mensajes, los espectadores expresaron su aprobación a “On the other side” (Desde el otro lado), como han titulado al último concierto de la banda internacional Gen Verde, presentado en Hong Kong, Macao y en 4 ciudades de Taiwán (Hualien, Taipéi, Kaohsiung y Taichung) El Gen Verde es una banda de chicas compuesta por una veintena de personas que proceden de 14 países de 4 continentes. Son mujeres que cubren entre ellas todos los roles: son autoras, cantantes, músicas, bailarinas, especialistas en la iluminación, en la cónsola audio-video, en la gerencia, etc. Mujeres que en teatros y estadios repletos y con mucha participación del público, ofrecen un repertorio donde se entrelazan historias personales, llamados, evocaciones, con el cual dan voz a su ideal de unidad, presentado como elemento base para que la humanidad se dirija hacia la fraternidad universal. Al contagioso ritmo de la música pop con los más variados matices, las piezas se completan con coreografías que refuerzan su significado; mientras que al mismo tiempo en la pantalla se encienden algunas palabras clave, ilustradas por gráficas e imágenes de gran impacto artístico. GV_IMG_2761_resizedSerá porque algunos pasajes fueron presentados en los idiomas locales logrando que el mensaje llegue directamente a cada persona; será tal vez porque en los días precedentes al concierto, en tres de estas ciudades, con el apoyo de la comunidad local de los Focolares se involucraron estudiantes de las escuelas superiores y universidades, en el proyecto “Start Now” y con el lenguaje universal de la música condujeron a los jóvenes a un diálogo que iba más allá de las diversidades para construir “juntos” el espectáculo. El hecho es que en cada presentación, la participación y el entusiasmo del público fueron vitales, en el sentido de que los participantes quisieron comprometerse con las artistas en el mensaje que ellas estaban transmitiendo. GV_IMG_3417_resizedLos jóvenes asiáticos demostraron gran sensibilidad para acoger el mensaje del Gen Verde. También en esta latitud se confirmó la expectativa de las nuevas generaciones de querer compartir lo que viven, saliendo de los estereotipos que la sociedad les presenta, en búsqueda de vínculos orientados a la confianza y al altruismo. “Muchos de ellos – cuenta una artista del grupo- nos confesaban el esfuerzo que hacen para vivir en una sociedad competitiva en la cual se vive siempre bajo presión. Al mismo tiempo demostraban una aguda sensibilidad hacia los temas del ambiente, de la paz, de la fraternidad, universal, del diálogo con todos”. “Nos dieron ánimo, energía, entusiasmo, esperanza”, dejó escrito uno de estos jóvenes. Y una chica decía: “Por todos lados nos empujan a que seamos los primeros de la clase; a través de ustedes aprendimos que debemos seguir nuestra conciencia y ser auténticos”. Y un empresario decía: “Mirando a los jóvenes esta noche digo: con jóvenes así, ¡Hong Kong está salvada!” Después de las sangrientas manifestaciones que pocos días antes habían traumado a la ciudad, el concierto reencendió en él la esperanza. Vivir por un mundo más unido allí donde estamos. Es este el mensaje que queda en el fondo del corazón de quienes se encuentran con el Gen Verde, de cualquier cultura y creencia sean. Creo que esto ocurre porque en cada uno de ellos permanece la convicción de que juntos tendrán verdaderamente la fuerza para lograr que el mundo sea mejor.   Foto galleria Hong Kong Foto galleria Taipei  

Algunos eventos en el mundo por el 8° aniversario (14.3.2016) de la muerte de Chiara Lubich

5.3.2016 – Brescia (Italia) En la Universidad católica, congreso “Pablo VI y Chiara Lubich, la profecía de una Iglesia que se vuelve diálogo”, organizado con la colaboración del Instituto Pablo VI en continuidad con las “Jornadas de estudio” que tuvieron lugar en Castel Gandolfo en noviembre de 2014. Entre los relatores estarán: Mons. Vincenzo Zani, Secretario de la Congregación para la Educación Católica; Lucía Albignente, responsable del sector ‘historia’ del Centro Chiara Lubich; el Pbro. Angelo Maffeis, presidente del Instituto Pablo VI; Franco Monaco, político y periodista; Alberto Lo Presti, profesor de Teoría política del Instituto Universitario Sophia. 6.3.2016 – Vicenza (Italia) ‘Más allá de las fronteras’, congreso interreligioso en el Centro A. Onisto – Borgo S.Lucia, 51. Hablarán el obispo emérito de Alepo Mons. Armando Bortolaso, el imán de las comunidades islámicas del Véneto, Dr. Kamel Layachi y Rita Moussallem del Centro para el diálogo interreligioso de los Focolares. El evento se concluirá con un flashmob en la Plaza de los Señores. 6.3.2016 – Olomouc (República Checa) En la sala del arzobispado se desarrollará un programa cultural dedicado a la figura de Chiara Lubich como promotora de paz. Al terminar, el arzobispo Mons. Jan Graubner celebrará la Santa Misa en la catedral. 8.3.2916 – Ischia (Italia) En el auditorio multifuncional de la isla, a las 19.30, velada sobre el tema Trabajo y temas correlativos (dignidad, legalidad, mujer, etc.) Participarán Patience Mollè Lobè (ingeniero civil de Camerún), Antonio Diana (empresario). Moderador Carlo Cefaloni (periodista de Città Nuova experto en problemáticas laborales). 11.3.2016 – Caserta (Italia) Entre música, testimonios, teatro, en el Palacio Real de Caserta (a partir de las 19,30) tendrá lugar una reflexión sobre el pensamiento y la vida de Chiara Lubich con el título: “El atractivo del tiempo moderno”. Con la colaboración de la Diócesis y de la Dirección del Palacio. 12.3.2016 – Sarajevo (Bosnia Herzegovina) La facultad teológica realizará una Jornada abierta sobre Chiara Lubich con el título: “El mensaje de diálogo y de paz”. Estarán presentes personas de otras confesiones cristianas, de otros credos, y de confesiones no religiosas. En la catedral el Card. Vinko Puljić, arzobispo de Sarajevo, presidirá la Eucaristía. 12.3.2016 – Castel Gandolfo (Roma, Italia) Ante la presencia de personalidades eclesiásticas y civiles se realizará en el Centro Mariápolis (Vía de La Salle), a las 17.30 una reflexión sobre el tema: “La cultura del diálogo como factor de Paz”. Además de numerosos testimonios, tomará la palabra la presidente de los Focolares Emmaus María Voce. 12.3.2016 – Manfredonia (Italia) 7ª edición del ‘Premio Chiara Lubich Manfredonia’. Estarán presentes Vera Baboun, alcalde de Belén y Pasquale Ferrara (diplomático y Secretario general del Instituto Universitario europeo de Florencia). Info 12.03.2016 – Solingen (Alemania) En el Centro Mariápolis “Zentrum Frieden”: Con el título “Vivir juntos en la diversidad” el MPPU (Movimiento Político por la Unidad) alemán, invita a una mesa redonda con políticos y funcionarios públicos de la ciudad. Seguidamente se abrirá el diálogo con los ciudadanos sobre el problema de la integración de los refugiados. 12.3.2016 – Milán (Italia) » Yo a través de ti”. El título subraya cómo el buscar la paz nos hace estar cerca del otro y, al mismo tiempo, nos hace más cercanos de lo que verdaderamente estamos. El evento comprenderá tres momentos distintos, cada uno de los cuales tendrá una duración de media hora, y se repetirá en tres lugares diferentes y en horarios diferentes, para dar la posibilidad de participar en los tres: la Basílica de San Ambrosio, el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, el Instituto Gonzaga. Info 12.3.2016 – Génova (Italia) Siguiendo el itinerario de profundización en la encíclica ‘Laudato si’, en la sala del Consejo Menor del palacio Ducal se tratará el tema: “Las religiones dialogan por la Paz y por el ambiente”. Participarán Huseim Salah (presidente de la Comunidad Islámica de Génova), Giuseppe Momigliano (Rabino jefe de Génova) Gnanathilaka Mahauswewe (monje budista), Andrea Ponta (ingeniero ambiental), Roberto Catalano (centro del Diálogo interreligioso de los Focolares). 13.3.2016 – Bujumbura (Burundi) En el Liceo Scheppen de Nyakabiga, diálogo sobre el tema: “Misericordiosos como el Padre celeste, constructores de paz”. Entre los relatores estará el arzobispo de Bujumbura Mons. Evariste Ngoyagoye. 13.3.2016 – Vung Tau (Vietnam) Durante el congreso anual de los Focolares en Vietnam (la Mariápolis), ante la presencia del obispo Mons. Joseph Tran Văn Toan, quien presidirá la celebración eucarística, se presentará el documental sobre Chiara Lubich: “Historia, carisma, cultura”. 14.3.2016 – Verona (Italia) En el Palacio Gran Guardia se otorgará el “Premio Fraternidad Chiara Lubich por una cultura de paz”, estarán presentes Sharharzad Houshmand (teóloga musulmana) Giuseppe Milán (docente de la Universidad de Padua), Aurora Nicosia (periodista). 14.3.2016 – Trento (Italia) En la Fundación Demarchi, presentación del libro de I. Pedrini: “El otro Novecientos: en el testimonio de Duccia Calderari”. La biografía de Duccia, una de las primeras testigos junto a Chiara Lubich del nacimiento de los Focolares, le permitirá a los relatores: Monica Ronchini investigadora, Giuseppe Ferrandi, director del Museo histórico del Trentino, Lucia Fronza Crepaz, ex diputada, profundizar en la figura de Chiara como constructora de paz. 14.3.2916 – La Habana (Cuba) En el Centro cultural Fray Bartolomé de las Casas, presentación de la figura di Chiara en relación a la paz, estará presente el Nuncio Apostólico Mons. Giorgio Lingua. Seguirá un concierto del Grupo de Música Antigua ‘Ars Longa’. 14.3.2016 – Houston, Texas (USA) “Unidad en la diversidad”. Es el título de la conferencia interreligiosa que tendrá lugar el 19 de marzo, en la Universidad de San Thomas.Será presidida por la celebración en la capilla de San Basilio, de la Misa católica que será celebrada por el Arzobispo de Galveston-Houston, Mons. Joseph Anthony Fiorenza. Entre los relatores estarán, además del arzobispo, el imán Qasim Ahmed (del Instituto Islámico), el rabino Steve Morgen (de la Congregación Beth Yeshurun) y Therese Lee (de los Focolares). Info 14.3.2016 – Manila (Filipinas) En el marco de las celebraciones del 50º de la llegada de los Focolares a Asia, se realizará, en la Universidad de La Salle, un simposio sobre el tema: “El carisma de la unidad una herencia fuera del tiempo”. Numerosas personalidades religiosas conducirán la reflexión sobre el aporte de Chiara Lubich a la unidad entre las Iglesias, entre las religiones y en la sociedad, y sobre la reciprocidad evangélica, que es su estilo de vida característico y crea fragmentos de fraternidad. 14.3.2016 – Roma – Santuario Divino Amor A las 18,30 Santa Misa. Será celebrada por el Card. João Braz de Aviz, prefecto de la Congregación para la vida consagrada. Info 16.3.2016 – Roma – Cámara de diputados. Presentación de un manifiesto con propuestas concretas por la paz, el desarme y la reconversión industrial. Para recibir en el Parlamento a los Jóvenes por un Mundo Unido, quienes junto al Movimiento Político por la Unidad y las Escuelas de participación han promovido la iniciativa, además de varios diputados. Estará presente la presidente de la Cámara, Boldrini y el Ministro de Asuntos Exteriores, Gentiloni. 16.3.2016 – Sevilla (España) En el Seminario Metropolitano, el prof Manuel Palma, vicedirector del centro de Estudios Teológicos de Sevilla, hablará de Jesús príncipe de la paz en la espiritualidad de Chiara Lubich. Seguirá un excurso sobre la paz en el Islam presentado por el Imán Allah Bashar de la mezquita del rey Abdul Aziz Al Saud de Marbella, Málaga), quien hablará también de su relación con Chiara Lubich. 18-20.3.2016 –Milano (Italia) – Fieramilanocity Dentro de la feria internacional se preparará una exposición del proyecto de Economía de Comunión en el cual, en formas distintas, se presentará el mensaje de paz que Chiara Lubich sigue dando al mundo. Info 19.3.2016 – Perth (Australia) En la Plaza de Northbridge, estreno de un video clip sobre la Paz realizado por los jóvenes y recolección de firmas para el llamado #Signup4peace. Habrá programas de animación también para los más pequeños. Estará presente el obispo auxiliar de Perth, Mons. Donald George Sproxton.

Dos empresas, una única historia de comunión

Dos empresas, una única historia de comunión

02_fam blv«Desde hace más de 40 años –se presenta Livio de la provincia de Cuneo (Italia) – llevo adelante la empresa de la familia, en la dirección están también mi esposa, nuestros cuatro hijos y, desde el extranjero, mi hermana. Junto a 28 empleados trabajamos en el sector de tratamientos de galvanización de manivelas, tanques, silenciadores para motocicleta, partes automotrices, implementos para hacer gimnasia, etc. Es un revestimiento estético pero sobre todo es resistente a la corrosión. Desde hace algunos años tratamos de regirnos según los principios de la Economía de Comunión, un proyecto que conjuga la necesidad de generar ganancias con la aspiración de ayudar a quien pasa necesidad, poniendo en el centro a la persona. Y así también con los empleados, entre socios, con los clientes, los proveedores y también con la competencia. Después de un largo período de constante desarrollo, surgió inesperadamente una grave crisis que todavía hoy afecta a muchas empresas como la nuestra. Naturalmente no quisimos darnos por vencidos y seguimos haciendo todo lo que está a nuestro alcance para tratar de encontrar nuevos clientes. Sin dejar de creer nunca en este nuevo modo de concebir la economía. 06_Bertola srlEn el 2014 hospedamos, como potenciales clientes, a tres exponentes de un importante grupo automovilístico alemán. Después de la presentación técnica, a cargo de mis hijos y otros colaboradores, viendo que los visitantes estaban bien impresionados y curiosos, hablamos de la Economía de Comunión y de su desarrollo en el mundo. Les contamos también del nacimiento en Europa de AIEC y en Italia de AIPEC (de la que soy presidente): dos asociaciones de empresarios cuya gestión empresarial está inspirada en la “cultura del dar”. Al final, al proponernos un interesante contrato, que se mantiene todavía, declararon: “Estamos sorprendidos al constatar que, a pesar de que su realidad productiva tiene fuerzas limitadas, logran realizar un proceso de galvanización que es de por sí muy complejo”. Lo que hace la diferencia será seguramente el sistema de elaboración que en tantos años hemos logrado desarrollar, pero también el relato de algunas experiencias entre las cuales la de la contratación, en un momento de poco trabajo, de algunos inmigrantes y de dos jóvenes que por motivos distintos atravesaban una serie de dificultades y del esfuerzo de todos nosotros de establecer con ellos relaciones de fraternidad también fuera del horario laboral. Otro factor que nos diferencia pensamos que es que “privilegiamos las relaciones” en el sano desapego de querer hacer negocios a toda costa». 20160321-02«Soy la administradora de una empresa que fabrica piezas mecánicas–prosigue Enrica de Turín (Italia)-. También nosotros tenemos 28 empleados. Mi padre, con quien muy temprano empecé a trabajar, me transmitió los valores de la solidaridad y del espíritu de sacrificio; el compromiso de mejorar siempre. En el 2000 los contratos se redujeron al mínimo, pero no despedimos a nadie y en Navidad, por falta de liquidez, decidimos pagar los aguinaldos con nuestros ahorros personales. En el 2003 surge un trabajo importante para el extranjero. Con mi padre lo asumimos con valentía, involucrando y responsabilizando a todos los empleados. Trabajamos mucho para ganarnos la confianza de los bancos, de los proveedores, de los clientes y la cohesión de nuestro personal fue la clave del éxito. Tres meses después, nos vimos muy afectados por la gran crisis y la enfermedad de mi padre. Gracias a Dios pude contar con la ayuda de muchas personas y después de un año y medio de recurrir al fondo de desempleo, todos los empleados regresaron a la empresa. Pero estaba cansada y me sentía oprimida por todo esto. Economia_di_Comunione_AIPEC_01Fue en este momento que supe de AIPEC, que se constituyó en el 2012, y de estos empresarios que sentía cercanos porque sumaban a su forma de trabajar el valor agregado de la “cultura del dar”. Así empecé a participar en sus encuentros, confrontándome con ellos y con varias categorías sociales. Me sentí acogida, estimulada, aconsejada, hasta aceptar, recientemente, un cargo directivo en AIPEC. Junto con los otros elegidos, descubro cada vez más la belleza y la responsabilidad de llevar adelante una empresa en la cual trabajar al máximo para mantener la estabilidad económica y al mismo tiempo compartir relaciones, ponerse a la escucha, dar una ayuda concreta. Porque el donar da frutos y el fruto permanece».  

Conexión CH

Maria Voce: La cultura del diálogo como factor de paz

«El deseo que nos anima no es el de recordar sino el de releer juntos, después de 20 años, los contenidos y el método que Chiara Lubich expuso en la UNESCO el 17 de diciembre de 1996, sobre un objetivo más que importante en este momento para las relaciones internacionales: la educación a la paz. En aquella ocasión, la UNESCO concedió a la fundadora del Movimiento de los Focolares el premio especial pensado para cuantos contribuyen con su obra a crear caminos y condiciones para que la paz sea algo real.». Lo recuerda la presidente de los Focolares, Maria Voce, en su intervención del pasado 12 de marzo en Castel Gandolfo, durante la tarde dedicada a Chiara Lubich y la paz, en presencia de embajadores, representantes del mundo de la cultura y del mundo ecuménico. «Mirando la realidad de hoy, aquel episodio parece tener una gran actualidad: ¿Qué hay más importante que la educación para alcanzar tal objetivo? La actualidad dominante, la que cotidianamente se impone ante nuestros ojos, nos ofrece imágenes de una paz violada, a menudo ironizada. Parece casi que, desde la realidad de los individuos hasta la dimensión internacional, el “vivir en paz” no pertenezca a las generaciones del Tercer Milenio. Y sin embargo, ¿cuántas veces invocamos la paz o tratamos de reanudar el hilo roto en las relaciones entre las  personas, entre los pueblos, entre los Estados? No podemos negar que logramos más fácilmente erigir barreras, pensando quizás que puedan defendernos, que actuar para construir la unidad en las relaciones, entre las ideas, en la política, en la economía, entre posiciones religiosas. Y la paz se escapa, se aleja. En la sede de la UNESCO, Chiara Lubich ofrecía un método de educación a la paz: la espiritualidad de la unidad, que es un nuevo estilo de vida capaz de superar las divisiones entre las personas, entre las comunidades, entre los pueblos y por ello, capaz de contribuir a reencontrar o a consolidar la paz. _MG_2370Esta espiritualidad la viven personas provenientes de diferentes experiencias y condiciones: cristianos de distintas Iglesias, creyentes de distintas Religiones y personas de culturas diferentes. Todos ellos animados por el deseo de hacer de la humanidad una sola familia, conscientes de deber afrontar problemas y situaciones que se presentan cotidianamente a todos los niveles y en todos los campos, tendiendo a ser, al menos, allí donde se encuentran – cito a Chiara – gérmenes de un pueblo nuevo, de un mundo de paz, más solidario sobre todo con los más pequeños, los más pobres; de un mundo más unido» (Discurso de Chiara Lubich  en la UNESCO, 17.12.1996), en el que sea posible no sólo llamarse hermanos sino serlo. Si éste es el método, ¿cuál es el «secreto de su éxito»? Es un secreto que Chiara define como el arte de amar, es decir «ser los primeros en amar, sin esperar que se nos ame. Significa saber «hacerse uno» con los demás, es decir, hacer nuestros sus pesos, sus pensamientos, sus sufrimientos, sus alegrías. Pero, si este amor al otro lo viven más personas, se hace recíproco» (Ibid.). Reciprocidad, palabra que tiene mucho peso en las relaciones internacionales, pero, a menudo, limitada a garantizar la tregua en los conflictos, no a prevenirlos o a resolverlos. Quien tiene responsabilidad y funciones relevantes en la convivencia internacional sabe bien qué difícil es la tratativa, cuántos obstáculos se encuentran para llegar a acuerdos que satisfagan a todas las partes. Hacer del amor un instrumento de negociación, respecto al gran objetivo de la paz, serviría para sentirse parte de la misma familia, para vivir esa dimensión auténtica de la fraternidad no restringiéndola sólo a la coexistencia o a la forzada cohabitación, sino abriéndola a las exigencias de los más débiles, de los últimos, de quienes están excluidos por la dinámica política o por una economía que tiene como única ley la ganancia. Amar, por tanto, es actuar para el otro y con el otro; es contribuir a superar las barreras puestas por intereses contrapuestos, por el deseo de manifestar la potencia, por la desigualdad en los niveles de desarrollo y la falta de acceso al mercado o a la tecnología». Al hablar de educación a la paz nos encontramos frente al gran desafío de concertar un método, el de la unidad fruto del amor recíproco, con la fragmentación que envuelve ya todos los ámbitos de nuestra cotidianidad. Chiara Lubich era consciente de esto y por eso ofreció a los Representantes de los Estados miembros de la UNESCO casi una clave, una buena práctica según el lenguaje usado en las relaciones internacionales. De hecho dijo: «No se hace nada bueno, útil, fecundo en el mundo sin conocer, sin saber aceptar la fatiga, el sufrimiento, en una palabra, sin la cruz» (Ibid.). El compromiso por la paz es difícil de realizar si no se está dispuesto a perder las certezas y las comodidades, aventurándose hacia nuevos caminos, inexplorados; siendo creativos sin improvisar; escuchando la voz de los que piden un futuro de paz e individuando dónde emergen las posibilidades para realizarlo. […] Han pasado veinte años desde que Chiara en la UNESCO indicó el amor como «la más potente arma para donar a la humanidad su dignidad más alta: la de sentirse no tanto un conjunto de pueblos, uno al lado del otro, a menudo en lucha entre ellos, sino un solo pueblo» (Ibid.). También hoy, a pesar de afrontar múltiples y recurrentes dificultades, es éste el Ideal que queremos realizar con la colaboración de todos».

Venezuela, un país en la cuerda floja

Venezuela, un país en la cuerda floja

paesaggio andino«En este Venezuela fragmentado y dividido, queremos vivir el Evangelio con radicalidad, allí donde cada uno desempeña su trabajo o estudia, para construir puentes de unidad y de paz. En el Consejo Municipal, por ejemplo, hay tres personas que viven la espiritualidad de la unidad, uno del partido de Gobierno y dos de la oposición, sin embargo se respetan y se ayudan». Quien habla es Ofelia, de la comunidad de los Focolares de un barrio marginado de la ciudad de Valencia, llamado Colinas de Guacamaya. «Una amiga me pidió que la acompañara al médico – cuenta –. Empezó el largo trámite para recibir las medicinas: en la farmacia nos encontramos a un anciano en búsqueda de su tratamiento para la diabetes, a un señor que pedía una pastilla para el dolor de cabeza, a un chico que necesitaba de paracetamol. Sólo un comprimido, pero el dinero que tenía no era suficiente». Ofelia, en el auto, tenía una bolsa que lleva siempre consigo, llena de medicinas que le llegan de la «Providencia de Dios», como ella misma cuenta, y pudo ofrecerlas gratuitamente a cada uno. Miradas incrédulas y gratitud. Betty y Orlando tienen 4 hijos y se trasladaron al Centro Mariápolis “La Nubecita”, en la localidad Junquito, en los alrededores de Caracas. «Para servir a quienes lo necesitan – cuenta Betty –, organizamos la pastoral social con algunas personas de la comunidad. Queríamos responder a las necesidades de alimentación, vestuario y vivienda de algunas familias de la parroquia. Así, con la ayuda del Consejo Municipal, logramos construir una casa digna para un anciano que vivía en la indigencia». «La actual crisis social, con los altos índices de inseguridad que registra el país, nos ha abierto aún más a las necesidades de las familias de nuestra comunidad que viven en el terror de perder incluso la vida. Cuando nos enteramos de que el papá de un chico estaba en graves condiciones, porque le habían disparado, fuimos en seguida al hospital. Estaba internado en cuidados intensivos y falleció pocos días después. Ahora, a través de atenciones, cuidados y protección, seguimos dando nuestro amor concreto a madre e hijo, a quienes recibimos en nuestra casa». panorama«Por pedido del párroco – nos cuenta María Carolina de la Comunidad del Junquito –, fuimos a un sector rural donde se puede llegar sólo en jeep. Ahí nos esperaba la comunidad de La Florida, que tiene muchas carencias materiales, incluso, hasta hace pocos meses, les faltaba la corriente eléctrica. Una comunidad de personas sacrificadas, dedicadas a la agricultura, que recorren kilómetros a pie para ir a la Misa, una vez al mes. Fue una experiencia que nos involucró a todos y se activó una comunión de bienes. De muchas partes llegaron vestidos, medicinas, juguetes, zapatos, comida… Con camionetas cargadas de cosas, pero sobre todo de esperanza, llevamos nuestro amor a esta comunidad. Aunque no faltaban las dificultades, cuando nos vieron llegar salieron de sus casas, los niños corrían, había aplausos, ¡en seguida se sintió un clima de familia!». La comunidad de Puerto Ayacucho, en el Estado Amazonas, ubicada en una zona de frontera, está habitada por comunidades indígenas. Son graves las problemáticas que la afectan: la presencia de la guerrilla, la explotación de minas de oro, el alto índice de madres solteras. Recién vivieron una experiencia muy fuerte con la muerte de Felipe, un chico de los Focolares asesinado a tiros hace dos meses. Es algo muy frecuente en Venezuela, sobre todo en esta región. Murió para salvarle la vida a su hermano, buscado por la guerrilla. Juan, su entrañable amigo, nos cuenta que «Felipe había fijado una cita para inscribirse en el catecismo, pero nos dejó el día anterior… Juntos habíamos hecho muchos programas para el futuro». La muerte de Felipe dejó una huella en esta comunidad: un compromiso nuevo para vivir por la construcción de la paz, para dar nuevos horizontes y esperanza sobre todo a los jóvenes.

De la comunidad de los Focolares de Atenas

De la comunidad de los Focolares de Atenas

20160318-03Desde hace meses el flujo de refugiados no se detiene: viven en un estado de emergencia en las islas de Lesbos, Kos, en Atenas y en Idomeni. Son numerosas las asociaciones laicas o religiosas –ortodoxas, católicas, protestantes- y las ONG que no cesan de estar presentes para socorrer y aliviar los grandes sufrimientos de estas personas. La comunidad del Movimiento de los Focolares, aunque es pequeña, tanto en Atenas como en Salónica (Grecia),, ha abierto los brazos y el corazón, colaborando con varias asociaciones, entre las cuales la Cáritas, la Comunidad Papa Juan XXIII y otras. «Especialmente en Atenas –escriben- fuimos a varios campos de refugiados que se abren y se cierran según es el flujo migratorio. Hemos involucrado a colegas y amigos en la recolección de comida e indumentaria para llevar a los varios centros de acogida. Desde Salónica todas las semanas, varias personas de la comunidad de los Focolares van a la frontera con Macedonia para llevar socorro y ayudas urgentes, con la colaboración de Cáritas». 2010318-01«Fui con algunos amigos y colegas de trabajo a un campo donde todos los días llegan entre 500 y 1000 personas –escribe Mariangela, del focolar de Atenas-. Ayudamos en la distribución de las comidas, en la selección y clasificación de las cosas, jugamos con muchos niños. Dan ganas de decirles alguna palabra para compartir sus pesos, pero a veces el idioma nos lo impide. No nos queda más que comunicarnos con la sonrisa, con una caricia, con gestos concretos. Al final sentimos que algo pasa. Todo paree poco en este mar de desesperación, pero intentamos dar al menos una gota de amor». Maristella Tsamatropoulou, trabaja en el equipo nacional de Cáritas Griega: «La actual emergencia de los refugiados no hace más que ampliar el panorama de ayudas que la Cáritas ya había activado para aliviar la crisis socio-económica griega». Se trata, explica «de ayuda humanitaria que se distribuye a través de comidas, artículos de primera necesidad tanto en las islas como en donde los asentamientos lo requieren… Pero nos encargamos también del hospedaje en albergues, donde es muy importante también la presencia de animadores para los niños, de psicólogos y el ofrecimiento de la posibilidad para asearse. Los programas estructurados y apoyados financiariamente por el exterior no podrían concretarse sin la cadena de solidaridad de los voluntarios que participan en primera fila o en la retaguardia (sensibilizando y recogiendo lo necesario)». 20160518-02En la isla de Siros, en una cafetería los propietarios involucraron a los clientes en actividades de solidaridad, recogiendo medicinas, comida, ropa y en la iniciativa “un café pendiente…” con la que se puede dejar un café pagado para quien no puede. ¡Para Navidad llegaron a 235! Siguiendo el ejemplo, algunos panaderos han lanzado la idea de “un pan pendiente…”. «Estamos impresionado por la generosidad y la solidaridad de la gente» – escriben todavía de la comunidad de los Focolares- «el pueblo griego, a pesar de la grave crisis que vive, está sacando todo su potencial de fraternidad, hacia los más pobres, encontrando energías inesperadas y creatividad para aliviar a muchas personas. ¡Es una verdadera lección de humanidad!».

Un relato desde la frontera macedónica

Un relato desde la frontera macedónica

1458313908Los miles de refugiados que están esperando poder pasar la frontera entre Grecia y Macedonia, viven en tiendas de campaña en medio del fango. El “milagro” es llegar a Europa. Dolores Poletto es croata, hace sólo dos semanas trabaja en la Cáritas de Macedonia y vive en la comunidad del Movimiento de los Focolares de la ciudad de Skopie (capital de Macedonia). Es ella quien cuenta lo que ha visto con sus ojos, a lo largo de la frontera: «Fui al campo de refugiados de Gevgelija (Macedonia) con los colegas de Cáritas. Era una visita informal. Del otro lado de la señal fronteriza se ve una marea de gente. Cruzamos la frontera oficial de Grecia a Idomeni». Fronteras cerradas. La situación humanitaria que los refugiados están viviendo en Grecia, Macedonia y Serbia es el resultado de la clausura de de las fronteras de los países que se encuentran a lo largo de la ruta balcánica. Desde el miércoles 9 de marzo las autoridades eslovenas cerraron las fronteras. También Croacia anunció el cierre de los confines y enseguida después las autoridades de Serbia. Según los últimos datos –pero los números son siempre aproximados- en la frontera de Macedonia se encuentran actualmente alrededor de 14 mil refugiados. En Grecia son más de 34 mil. En Idomeni hay una especie de embudo. Se está repitiendo lo que desde hace meses se está viviendo en Calais, en la frontera francesa hacia el canal de la Mancha. Los emigrantes llegan, después de haber atravesado Grecia y el Mar Egeo en una barca. «Es una multitud de gente –cuenta Dolores-. Llegan en las condiciones más precarias… Están en la frontera por donde antes se pasaba a Macedonia. La gente quiere estar lo más cerca posible, por eso las tiendas están montadas al lado de la línea del ferrocarril». A la lluvia se le agrega el frío. «Si hay buen tiempo, de día la temperatura puede llegar a 18 grados, pero de noche baja a 2-3 grados». Las condiciones de vida en el campo se deterioran día tras día. Al frío, hay que sumar la escasez de alimentos y las insostenibles condiciones higiénico-sanitarias. «Muchos hacen fila para recibir la comida», sigue contando Dolores. «Es difícil describir el estado psicológico en el que se encuentran. Muchos dicen que vienen de Siria. Todos quisieran ir a Alemania, Austria. La única pregunta que nos hacen es: cuándo abre la frontera». Están dispuestos a todo con tal de llegar a la meta, incluso a costa de la vida. «¿Sabes? precisamente ahora escuché la noticia –dice Dolores- que hay tres muertos ahogados en el río entre Macedonia y Grecia cuando trataban de pasar ilegalmente. Es una tristeza». Cáritas está presente desde el inicio de la crisis, como muchas ONG. «Están esperando, esperan poder pasar la frontera –explica Dolores- por eso, no quieren ir a campos más apropiados. Es difícil ayudarlos». Está la policía fronteriza que vigila para que no pase ninguno, según los acuerdos tomados con Europa. Delante de este “impasse”, «sientes la impotencia de no poder hacer nada». Dolores quedó profundamente impresionada por esta experiencia en la frontera. «Se puede estar con ellos en la cruz, no logro olvidar esas imágenes. Hay muchísimos periodistas. Hablé con algunos de ellos y regresando a casa vi los servicios noticiosos que hicieron. Me decía que si los hubiese visto sin haber visitado ese lugar, habrían sido una de las muchas noticias que pasan todos los días, pero habiendo palpado esta realidad, siento que se trata de una herida de la humanidad». Fuente: SIR

En la estación de Roma, entre los sin techo

En la estación de Roma, entre los sin techo

image2«Comencé dando una mano – cuenta Annette, focolarina alemana – en el mes de diciembre de 2014. El frío ya llegaba y era urgente conseguir frazadas. Tratando de saber qué era mejor hacer, alguien de RomAmoR ONLUS me propuso: “Más que las frazadas, sería mejor que tú vinieras a darnos una mano para estar con ellos”. La semana siguiente ya estaba en la estación Ostiense. Fue una emoción muy fuerte. Acercándome a esas personas descubría, que, paradójicamente, ¡eran ellos los que me recibían! Me daba cuenta de que no se trataba un grupo social incómodo que era mejor evitar, sino de personas que deseaban relacionarse, capaces de dar ellas mismas calor humano. Después de un poco de tiempo llegaron los voluntarios con la cena caliente y la estación dejó de ser un lugar anónimo, frío y gris, y se convirtió en un lugar cálido». Desde ese lunes la vida de Annette cambió. Las primeras noches no lograba dormirse pensando en Giovanni, Stefan, Mohamed que no tenían una cama caliente como la suya. Comenzó a revisar su armario, viendo si había todavía algo para compartir, a pesar de que en el focolar se trata de vivir con solo lo necesario. Pero sobre todo continuó yendo a la estación todos los lunes. Una noche, consultando el cuaderno donde se anotan las necesidades de los sin techo, vio que necesitaban zapatos de hombre. En la casa no tenía. Pero se acordó de la experiencia de Chiara Lubich durante la guerra que le pedía a Jesús, presente en los pobres que precisaban algo. «Así hice también yo y en el plazo de dos semanas – cuenta Annette- ¡me llegaron 10 pares!»

20160317-01

Foto © Dino Impagliazzo

Con la llegada del otoño se repitió la necesidad de frazadas. Dos amigas de Roma que en el mes de noviembre festejaban su cumpleaños pensaron pedir como regalo: “frazadas”. Llegaron bastantes, pero no alcanzaban. No pudiendo dar las de casa (ya que tenían sólo las estrictamente necesarias), Annette se las pidió nuevamente a Jesús, de modo que El pudiese calentarse en esos pobres. «En pocos días – cuenta sorprendida- de un Centro de estudiantes de Teología que se estaba mudando nos llegaron 4 grandes bolsas que tenían dentro 30 frazadas y una decena de colchonetas de campamento. Sin contar las frazadas que recibieron otros voluntarios». El compartir se difunde como una mancha de aceite. El vecino de una colega, que había perdido la confianza en las actividades de solidaridad, donó mucha ropa abrigada e involucró en esta acción también a un amigo. «Pero más fuerte aún que estas intervenciones de la Providencia- confiesa Annette- es la experiencia que hacemos. Es gente que no tiene nada para comer, que no tiene un techo, pero que poco a poco adquiere dignidad, ya sea porque se viste mejor y están limpios, ya sea porque juntos vivimos relaciones de fraternidad. Cada vez que los veo trato de recibirlos de verdad, disponiéndome a ser un pequeño instrumento del amor de Dios. Y ellos me dan la oportunidad de testimoniar el Evangelio “por la calle”, compartiendo las ideas y las opiniones más variadas con personas de todo el mundo. En esta reciprocidad, la realidad cambia, la ciudad cambia su rostro y el amor se puede palpar…. incluso sólo con una cena caliente. En Navidad tuvimos un regalo especial: dos amigos de la estación vinieron a festejarlo con nosotros al focolar, con gran alegría de parte de todos».

Roma: Aldea para la tierra – Vivir juntos la ciudad

Roma: Aldea para la tierra – Vivir juntos la ciudad

Villaggio per la terraDel 22 al 25 de abril de 2016, se llevará a cabo, en el corazón verde de la capital italiana, en Villa Borghese, en el Galoppatoio, una manifestación que tendrá como título “Aldea para la Tierra. Vivir juntos la ciudad. Roma en Mariápolis”. Earth Day Italia y el Movimiento de los Focolares de Roma son los que promueven el evento. Se inaugurará con la celebración de la 46° edición de la Jornada Mundial de la Tierra, que este año asume un relieve aún mayor debido a que el Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki-moon eligió el 22 de Abril como primer día para la firma del histórico acuerdo sobre el clima de Paris – COP21 en el que participarán todos los Estados del mundo. A la luz de la Encíclica Laudato Si’, en la que Papa Francisco invitó a todos a cuidar la Casa común, y en el marco del Jubileo de la Misericordia, “La Aldea de la tierra – Roma en Mariápolis”, aspira a hacer redescubrir la específica vocación de Roma a la fraternidad universal que la convierte en una ciudad única en el mundo. De hecho, el evento quiere ser una aldea temporal dentro de la ciudad. Estarán involucradas numerosas realidades que trabajan día tras día en el territorio de muchas formas, para transformar nuestra Capital en un lugar mejor donde vivir, en el que cada ciudadano o turista – de cualquier edad, estrato social o cultura – puede experimentar su contribución irremplazable a la vida de la ciudad. Objetivo de la manifestación es el de crear puentes de diálogo entre las diversidades – centro y periferia, jóvenes y adultos, romanos y ciudadanos “en tránsito” – mostrando todo lo bello que hay en Roma porque encontrarse en la diversidad es posible, y la solidaridad es un valor universal. Vivir JUNTOS la ciudad se articulará en cuatro días de actividad – talleres, exposiciones, seminarios, intercambio de buenas prácticas, performance artísticas, debates, momentos de juego, reflexiones o el simple compartir el tiempo y las vivencias – destinados a incrementar el conocimiento recíproco y la acogida. Para mayores informaciones acerca del evento: www.villaggioperlaterra.it

Bruselas: «Fraternidad en Coro» entre musulmanes y cristianos

«Hace tres meses que esta velada debía hacerse aquí. La locura de los hombres nos hizo cambiar de ruta». Así abre la velada Noufissa Boulif, musulmana, organizadora del evento: al día siguiente de los atentados de París del 13 de noviembre de 2015, Bruselas no se reconocía. Algunos de los terroristas implicados tenían allí su base, y por motivos de seguridad el concierto fue anulado y trasladado para el 20 de febrero de 2016. Un encuentro entre música y cultura musulmana y cristiana. Se convirtió en una plataforma de encuentro entre musulmanes, cristianos y también agnósticos, que creen en el diálogo y que, sabiendo recibir al otro descubren en él cualidades y virtudes escondidas. Pero no te parece que el riesgo ¿era igualmente alto para un evento islámico-cristiano justo en el centro de Bruselas?. Le preguntamos a Noufissa. «Si el concierto se pudo realizar es gracias a la increíble solidaridad entre musulmanes y cristianos, y seguramente bajo la divina protección. Afortunadamente todo el programa pudo desarrollarse sin incidentes o tensiones» El concierto fue dedicado a todos los niños que sufren, poniendo la velada «bajo el signo de la infancia y de la juventud, pero también bajo el signo de la diversidad que caracteriza nuestro país». Noufissa conoce y vive la espiritualidad de la unidad, nacida de Chiara Lubich desde hace más de veinte años. Ella quisiera testimoniar a todos que la fraternidad entre musulmanes y cristianos es posible aunque sean dos culturas a menudo antagonistas. En esta perspectiva organizó su primer concierto islámico-cristiano en el mes de octubre de 2014. https://vimeo.com/114886056 «Es un trabajo que lleva ya su tiempo», cuenta Noufissa. «Con mi marido y los hijos estamos involucrados en el diálogo interreligioso. Éste forma parte de nuestra vida. Para mí, como musulmana que lleva el velo, no es algo descontado el vivir en armonía con los demás, porque sientes que atraes las miradas curiosas o actitudes evidentes de desconfianza. Pero, cada vez, trato de acercarme al otro sin prejuicios, con la sonrisa. La Regla de Oro, que está presente en casi todas las grandes religiones, me ayuda muchísimo: “Nadie de ustedes es un verdadero creyente si no desee para su hermano lo que desearía para sí mismo” (Mahoma, Hadith 13 de al-Nawawi). Se pueden comprender las reacciones islamofóbicas y la influencia, no siempre constructiva de los medios de comunicación, pero estoy convencida, como musulmana, que es esencial superar todo esto. El profeta Mahoma, en un hadith subraya que “La sonrisa es una ofrenda” (es decir un don gratuito para el otro)». Volvamos al 20 de febrero de este año. Varios coros actuaron uno detrás del otro en el escenario: niños, jóvenes, cristianos y musulmanes, blancos y negros, de lengua holandesa o francesa- también éste es uno de los desafíos de Bélgica. “Rissala”, “Los pequeños coristas”, “Las Voces de los 4 Horizontes”, “L TOUCH”, un grupo de chicas musulmanas con capacidades diferentes. Hacia el final también estuvieron los “rapper” – “Mc Youns, Antis y Mamz-I”- que con sus palabras incisivas invitaban a todos a no desmayar, sino continuar creyendo en la vida. La asociación La luz del corazón nace despues de 25 años de compromiso en el diálogo interreligioso de Noufissa, y 10 años de servicio de una amiga suya musulmana que se encuentra ahora en cuidados paliativos. Juntas visitan a los enfermos en sus casas, yendo al encuentro de la sed de relación en esta fase particular de la vida. Con estas asociaciones, después de un año de duro trabajo para la preparación de “Fraternidad en coro”, están ya trabajando en un próximo evento islámico-cristiano que se realizará el 23 de abril, cuyo título es “Juntos con María”, en Bruselas, en la Catedral de Saint Michel.  

Líbano: Chiara nos llevaba a vivir el Evangelio

Líbano: Chiara nos llevaba a vivir el Evangelio

Nadine-01«Tenía 17 años -cuenta Nadine, focolarina libanesa, ahora en Argelia- cuando estalló la guerra en Líbano: escuelas cerradas, calles minadas, bombas día y noche, francotiradores, heridos, muertos…Con otros jóvenes fascinados por la espiritualidad de Chiara Lubich, en medio de los trágicos eventos que empezaban a arreciar nuestro país escuchábamos resonar las mismas palabras de los primeros tiempos de los Focolares, durante la segunda guerra mundial en Trento, Italia: “todo cae, sólo Dios permanece”. También nosotros como Chiara y las primeras focolarinas, podíamos morir de un momento a otro y también nosotros, como ellas, habríamos querido presentarnos a Dios “habiendo amado hasta el final”. Habíamos aprendido que amar significa prestar atención a las necesidades de quienes teníamos alrededor. En esos instantes no era tan fácil, pero cuando lo lográbamos sentíamos que el corazón se liberaba del temor y casi no nos dábamos cuenta de la tormenta de odio y de violencia que nos rodeaba. Así pudimos ayudar a muchos a seguir adelante. A menudo le escribíamos a Chiara para contarle lo que vivíamos y ella nos respondía personalmente todas las veces». «Recuerdo todavía los episodios de violencia y los secuestros cuando empezaron las discriminaciones por la pertenencia religiosa. También mi papá fue secuestrado dos veces. Chiara nos hablaba de los primeros cristianos y de su valentía de dar testimonio de la fe también delante de los persecutores romanos. Uno de nuestros amigos, Fouad, había logrado participar en un congreso Gen en Roma. Regresando a Líbano, mientras recorría el camino del aeropuerto a la ciudad, fue detenido por algunos hombres armados. Era la zona musulmana y en su cédula de identidad estaba escrito: cristiano maronita. “Sí, soy cristiano –admitió Fouad- y estoy regresando a casa”. “Tú vienes con nosotros”, le dijeron. Siguió un largo interrogatorio y al final la sentencia: “¿Tú sabes lo que te espera?”. El chico entendió que para él todo había terminado. Uno de los militares se lo llevó a un puente donde ya habían sido asesinados muchos cristianos. Mientras caminaba trataba de calmar la agitación interior y pensó en qué podía querer Dios de él en ese momento. “Amar a este prójimo”, fue lo que se le ocurrió. Trató de hacerle sentir a ese hombre todo su amor: “Debe ser difícil –le dijo Fouad-, debe ser feo hacer este trabajo, hacer la guerra”. Llegando delante del puente, el militar se detuvo, lo miró y exclamó: “Regresemos”. Recuerdo que Chiara, particularmente impresionada por el testimonio de este joven, quiso divulgar el episodio para la edificación de todo el Movimiento». 20160315-a«Cada vez que había un “cese al fuego” volvíamos a reunirnos, a frecuentar el focolar… Nuestros padres tenían miedo por nosotros, pero no podíamos detenernos. Estrechar la unidad entre nosotros era la energía vital que después nos permitía amar a todos. Y fue precisamente en los años de la guerra donde muchos de nosotros sentimos el llamado a donarnos totalmente a Dios. Chiara nos sostenía con su ejemplo, con su palabra. Seguía con afecto las peripecias de las familias probadas por muchas restricciones y por el cansancio. Algunas habían perdido el trabajo, la casa. Otras vivían desde hacía años en los refugios y deseaban dejar el país para poder ofrecer un futuro a sus hijos, algunos habían sido heridos… Para todas ellas Chiara abrió las casas del Movimiento, para darles la oportunidad de pasar un período en el extranjero para que se recuperaran o para establecerse en otro lugar definitivamente. También lanzó una campaña para recoger fondos para cubrir los gastos del viaje. Y como el aeropuerto de Beirut permaneció cerrado durante años, nos mandó a nosotras focolarinas a abrir un punto de apoyo en Chipre – la única vía de acceso al exterior por mar – para facilitar la salida de quienes se iban». 20160315-01«Este amor concreto de Chiara iba siempre acompañado con su fuerte estímulo espiritual. Después de años de una vida extenuante, a menudo nos sentíamos débiles e impotentes. Entonces Chiara, refiriéndose a la nubecita con la que Dios se hizo presente al pueblo judío, nos sugería que nos lanzáramos a vivir de forma nueva la Palabra. La vida del Evangelio, -nos decía- es “la nubecita” con la que Dios se hace presente en el desierto de esta absurda guerra que estábamos sufriendo. Y desde esta “nubecita”, seguía diciendo- no sólo atraerán a muchos a vivir el Evangelio, sino que sacarán la fuerza para seguir amando… hasta el final».  

Colombia: personas capaces de paz

Colombia: personas capaces de paz

Cristina-Montoya

Cristina Montoya

«El antónimo de paz, en Colombia, es el conflicto armado que dura ya más de 50 años, el segundo más largo de la historia actual. Un enfrentamiento de múltiples dimensiones, nacido de la desigualdad y de la asimetría política, maximizado hasta el extremo por el establecimiento de lógicas de economías ilícitas como el narcotráfico. Más de 4.500.000 los desplazados, 220.000 los asesinados y 25.000 los desaparecidos, oficialmente registrados. Pero no se puede pensar que el conflicto sea sólo el que se combate en el frente. El conflicto lo afecta todo, se adueña de los procesos sociales y culturales, del espacio público, de las interacciones cotidianas, impregna la vida de las familias. Cuando se vive en un país que por 3 generaciones ha conocido la violencia como protagonista del vínculo social, se enfrenta un verdadero cambio antropológico: la lógica del donar, de la confianza, de la gratuidad, parece desvanecerse. Sin embargo la guerra no acaba con todo; son numerosas las iniciativas, la creatividad, las agrupaciones que trabajan para reconstruir el tejido social y además está la fidelidad de Dios, que nunca falta en cada momento histórico. Una revista, que un religioso colombiano encontró tirada en una papelera, le trajo la buena noticia de que existía gente que realmente creía en el Evangelio y lo vivía. Sus casi 78 años se llenaron de vida, una vida que enseguida se volvió contagiosa. La historia de Chiara Lubich y de sus primeras compañeras y de aquellos – que como ellas – vivían en otras partes del mundo, activó la esperanza. Son historias y rostros como el de Rosa, quien vive en un barrio marginado de Medellín, una de las ciudades más afectadas por la violencia. Su hijo fue asesinado por una amigo; la respuesta normal hubiera sido la venganza, pero creer en el amor significa tener el valor del perdón. Una herida que sigue doliendo, pero su respuesta ha sido vivir por la gente de su barrio. Y esto es paz O Nubia, quien tuvo que huir al amanecer porque la guerrilla había tomado su pueblo. Dejó detrás suyo la casa y los campos, todo lo que tenían. Embarazada, con un hijo pequeño y uno adolescente, recién llegada a la nueva ciudad perdió el marido y el hijo mayor, en una obra de construcción con condiciones precarias. Algo absurdo, incluso difícil de imaginar. El amor de una comunidad de los Focolares la apoya durante años, dándole la fuerza de empezar una nueva vida. La paz no es un bien aislado, para construirla es necesario garantizar la justicia, luchar contra las causas que la entorpecen, y es esto lo que hicieron Gabrielina y Macedonio, donando su casa humilde, para construir un centro social, que luego se convirtió en consultorio, aula para el apoyo escolar, sede de proyectos de renovación urbana arquitectónica. Es necesario también crear otros escenarios futuros, educar a otros mundos posibles. Con los bienes puestos en común, nació un jardín infantil para acoger a los niños más pobres; hoy se ha transformado en un colegio con más de 400 estudiantes y una propuesta educativa centrada en el amor y la generosidad para construir una Colombia en paz y pluralista. Son muchas las iniciativas concretas, porque ningún pueblo puede entrar en contacto con Chiara Lubich y permanecer como antes. Su carisma, que lleva a descubrir y creer en el Amor, produce un cambio de mentalidad, uno se da cuenta de que es capaz de amar y se vuelve sujeto capaz de paz. Tal como afirma Rafael Grasa, Presidente del Instituto Internacional por la paz de Cataluña y profesor invitado a Medellín, «la paz empieza por las personas, continúa con las relaciones interpersonales, los grupos. La paz es dinámica, para lograrla hay que involucrar toda la armonía del ser humano con sigo mismo, con los demás, con la naturaleza». Pero ahora, que antes de finales de mes, se prevé la firma en La Habana, del tan anhelado acuerdo de paz con las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) se necesita reaprender a vivirla; tal vez el país – como la creación que espera con los dolores de parto – espera una manifestación aún más fuerte de los hijos de este Carisma.    

Guerra en los Balcanes: Chiara estaba a lado nuestro

Guerra en los Balcanes: Chiara estaba a lado nuestro

Cuando cayó el muro de Berlín, parecía que todo estaba solucionado. Nadie podía imaginar que los muros de la desconfianza, del odio, del prejuicio seguirían levantándose en la ex Yugoslavia, obstaculizando lo que las comunidades de los Focolares allí presentes habían intentado construir durante muchos años, es decir la unidad entre todos, a pesar de la variedad de etnias, idiomas, religiones. Diversidad que todos ellos habían logrado percibir como riqueza. El anuncio del conflicto fue un verdadero shock, pero también un impulso para seguir creyendo que el inmenso amor de Dios no desaparecería, aún en lo absurdo de una guerra fratricida. 20160314-02«Era agosto de 1991 – cuenta Minka Fabjan en nombre de la comunidad de Zagreb, experta en administración y activa en el ámbito de la Economía de Comunión – y entre miles de peripecias un grupo fuimos a Katowice (Polonia) porque sabíamos que allá nos encontraríamos con Chiara Lubich. Ella nos invitó a dar testimonio del Evangelio con todos los medios posibles, a ‘gritarlo desde los tejados’. En Croacia empezaban ya los primeros atisbos de la guerra: las escuelas cerradas, las carreteras interrumpidas… En este clima de guerra, impresionaba mucho escuchar en la televisión y en las emisoras radiofónicas, nuestros mensajes de paz que habíamos enviado a los medios de comunicación, según la exhortación de Chiara. No obstante, las hostilidades seguían intensificándose. Chiara a menudo nos llamaba para saber cómo estábamos y para animarnos: “Demuestren con su vida que el amor lo vence todo”. Fue ella quien nos sugirió recoger firmas por la paz: en las escuelas, delante de las iglesias, en las plazas, en Eslovenia, Serbia, en todas partes. En Croacia, debido a las alarmas, las recogíamos en los búnkeres. En pocos días enviamos a varios Jefes de Estado unas 65.000 firmas». «Mientras tanto nuestras casas se llenaban de refugiados: eran nuestros familiares, amigos, pero también personas desconocidas. Entonces Chiara invitó a los miembros del Movimiento en el mundo a que se movilizaran para enviar ayudas. En otoño llegó el primer conteiner con víveres y productos de primera necesidad, una acción que duró años. Sótanos, casas en construcción, la sede de la Cruz Roja, salas para conferencias, etc. se transformaron en almacenes para clasificar lo que llegaba y compartirlo con vecinos y refugiados, tanto serbos, como musulmanes o cristianos. Hacíamos incluso 300 cajas en un día. Con estas ayudas humanitarias, logramos apoyar con regularidad a unas 7000 personas». «Ya nos pesaba el cansancio, cuando el papa Juan Pablo II, en 1993, nos pidió que abriéramos nuestros corazones y nuestras casas a las mujeres bosniacas que llegaban a Zagreb después de las indecibles crueldades que sufrían en los campamentos. Sentíamos que Chiara estaba a lado nuestro, así que todos nos movilizamos. En el Familyfest de 1993, lanzamos en mundovisión una recaudación de fondos que permitió dar una casa a 50 familias refugiadas y ayudar a más de 150 mujeres. A través del programa de apoyo a distancia, se pudo socorrer también a miles de niños. Algunas de estas mujeres, víctimas de violaciones, encontraron la fuerza heroica de llevar a término el embarazo. En Serbia habían sido enrolados en el ejército federal unos 700 hombres, entre ellos muchos del Movimiento. Cuando Chiara lo supo, nos invitó a todos a pedir por ellos, para que tuvieran la fuerza de oponerse a la violencia y no disparar. Y las oraciones fueron escuchadas: a los ‘nuestros’ les asignaron un servicio civil». La guerra había comprometido también Kosovo y Belgrado; a pesar de ello, Chiara quiso viajar a la cercana Croacia. Ante la pregunta de un periodista (Ottone Novosel de Večernji list, el periódico de mayor difusión) si tenía una palabra para estas poblaciones, Chiara no titubeó: «Demuestren que el milagro de la unidad es posible también entre maneras distintas de pensar, entre pueblos distintos, entre religiones distintas. Es Dios quien guía la historia. Por reacción, esta guerra podría suscitar una gran corriente de amor que podría convertirse en un ejemplo para muchos pueblos» (12.4.99). Este mensaje de Chiara Lubich es de una impresionante actualidad también pensando en los numerosos conflictos que aún hoy siguen deturpando el planeta y deshonrando nuestra humanidad.