Al mejor estilo litoraleño comenzamos la tarde compartiendo una mateada que permitió que muchos que venían por primera vez se sintieran enseguida como en familia. Para algunos conocerla y para otros ahondar en la fecunda vida de Chiara fue un verdadero regalo, coronado por el testimonio directo de Chicca Coriasco (la mejor amiga de Chiara Luce) que contó hechos inéditos y profundos momentos compartidos con ella a través de una conexión Skype que se pudo realizar esa misma mañana. Antes de empezar la comunicación surgieron varios inconvenientes técnicos, ante los cuales Chicca nos dijo: “es una broma de 
Chiara Luce, es para decirnos que está”. Y así lo sentimos. Cada vez constatamos que ella se hace presente, es más, organiza la fiesta, ya que nunca sale lo que en principio pensamos sino que nos sorprende con su intervención. ¡Y siempre supera nuestras expectativas!
El resto de la tarde se desarrolló con un juego inspirado en la idea que Chiara tenía de ser azafata. Así en tres grupos “subimos a un avión” que hizo distintas escalas haciéndonos recorrer algunos sueños de Chiara Luce: misionar en África, ser deportista o cantar y bailar. Cada etapa nos interpeló personalmente. Finalizamos el viaje con un momento de interioridad y reflexión que, a través de cantos y oraciones, permitió que realizáramos ante Jesús nuestro personal propósito de vida, y pudiéramos “despojarnos de aquellos pesos que nos impiden ir tras Él”- como afirmó uno de los presentes.
La tarde concluyó con la S. Misa, enriquecida por los cantos de los grupos musicales Viven y Da da da. Durante la homilía el celebrante puso en luz su experiencia personal con Chiara Luce. Encontró eco en los presentes cuando la definió como su “amiga y confidente” y como “una gurisa que enamora.”
Nos despedimos con la profunda alegría que Chiara Luce nos dejó en el corazón y animados con su ejemplo para continuar la carrera, jugándonos con radicalidad por la vida del Evangelio como lo hizo ella y con una íntima convicción de que la santidad puede ser posible para todos y estar de moda también en estos tiempos.
La simpleza con que Chiara me lleva de la mano a Jesús, mi amistad con ella.
Fue un encuentro bello con nuestra amiga. Fue hermoso presentársela a otros
Un día pleno, de reflexión silenciosa y a la vez profunda, rodeada de gente bella
Gracias por ese momento compartido y todo lo que aprendimos de Chiara, me sentí muy conectado con su vida como joven
Me fue de ayuda para poder conocerla y así poder aprender de su ejemplo e incorporarlo a mi vida cotidiana. La predisposición de todos fue muy buena
Es una chica con la que me identifico por ser fiel seguidora de Cristo y el nunca rendirse. Pude aprender que con Él, nada es imposible
Ha sido una hermosa tarde. Chiara es una amiga y mi ejemplo de Santidad. He escuchado su historia cientos de veces pero cada vez me vuelve a emocionar. Gracias-Focolares
Muy lindo el compartir con jóvenes, niños y adultos. El momento más emocionante fue el despojarnos de nuestros pesos. Gracias
