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Una nueva primavera en el Reino Unido
«Encontré la solución para mi vida». «Es un privilegio ver como el carisma de la unidad transforma a las personas». «Cada uno era verdaderamente feliz». Una jornada así no se olvida fácilmente en la historia de los Focolares de Gran Bretaña. Los quinientos provenientes de Inglaterra, Escocia, Galles y una representación de Irlanda se reunieron alrededor de la presidente María Voce y del co-presidente Giancarlo Faletti en el marco de la Friend’s Meeting House de los Cuáqueros de Londres en el sector de Euston. Hay quien necesitó hasta diez horas de viaje con tal de no faltar a la cita. Lesley, una focolarina anglicana, en su introducción a un documental que ilustró las visitas de Chiara Lubich al Reino Unido, recordó el shock vivido por la reciente revuelta en los barrios londinenses, enmarcándola en la época de una cultura secularizada, de “exaltación del yo”, que a menudo conduce a consecuencias desastrosas. Y subrayó como Gran Bretaña contiene las semillas de una cultura diferente sembrada hace más de 40 años, y cuyas raíces han penetrado profundamente a través del mensaje de Chiara Lubich quien vino a Liverpool en 1965, en la primera de sus ocho visitas que dejaron una huella en la historia de todo el Movimiento de los Focolares, cuando a través del Reverendo Canónico Bernard Pawley fue invitada a hablar de la espiritualidad de la unidad en la catedral anglicana para empezar a remover la montaña de incomprensiones y encaminar el diálogo ecuménico. Siguieron los testimonios de Eddie de Escocia, de Lucy y David de Gales, de Ann de Inglaterra. Aun siendo historias de ámbitos muy diferentes –diálogo ecuménico, diálogo interreligioso, cuidado espiritual de los ancianos- incidieron por la profundidad y concreción. Una pareja del Congo, que ahora vive en Inglaterra, en cambio, recorrió su propia aventura hecha de fugas por la guerra, dificultades para integrarse y de su relación de pareja superada y vivida en el descubrimiento siempre nuevo del amor recíproco propuesto por el Evangelio vivido. En la tarde el momento clou con la intervención de María Voce y Giancarlo Faletti, quienes respondieron a las numerosas preguntas de los participantes, tocando muchos puntos neurálgicos del país. Sobre todo se refirieron a cómo dar un nuevo impulso al ecumenismo. «Quizás – dijo – María Voce – se necesita un impulso» e invitó a cada uno a despertar en su propia iglesia de pertenencia «el deseo de experimentar el don que Dios nos ha hecho y suscitar el deseo, la sed de fraternidad». En sus viajes por todo el mundo María Voce y Giancarlo Faletti han encontrado que por lo general el Movimiento ecuménico avanza aun en medio de las diferencias. En Budapest, Chicago, incluso en Tanzania, se pueden citar episodios de experiencias positivas de ecumenismo y la gratitud por parte de los representantes de las varias iglesias hacia los Focolares por su apoyo y compromiso. El otro gran tema fue el de los desórdenes, los saqueos, la revuelta iniciada en la periferia de Londres y extendida a todo el país. Después de años de trabajo para construir la unidad a algunos les parecía haber perdido todo, como si la violencia hubiese borrado todo avance positivo. ¿Cómo mantener esperanza en esta situación? «A pesar de todo – subrayó con confianza María Voce – yo sigo teniendo esperanza. Me parece que la violencia lo que manifiesta es un gran vacío, una necesidad de amor, es una necesidad extrema que ha de ser considerada, a pesar de que han recurrido a medios equivocados». En suma, se trata de un desafío, «y si respondemos con nuestro amor podremos crear un bien más grande», tal y como ha sido para «tantas personas que hay reaccionado y que se han unido para transmitir señales positivas. «La sociedad – prosiguió Giancarlo Faletti – se debe cuestionar acerca de cuáles valores y modelos culturales está proponiendo y nosotros podemos aportar nuestros valores. Es una invitación a dar más».
Parecía que las preguntas no se agotaban nunca: se habló del rechazo de Dios por parte de la sociedad y María Voce: «Nunca he encontrado a nadie que diga que no quiera ser amado. Se puede dar a Dios sólo a través del amor». «Estamos llamados a dar juntos este testimonio, para todos los hombres, todas las religiones, también para los no creyentes. Los valores que consideramos válidos los ponemos a disposición de los demás para construir la fraternidad». Otra cuestión muy importante se refiere al tema del sacrificio: la idea del “saber perder”, presente en la espiritualidad de la unidad, puede asumir para la cultura anglosajona connotaciones negativas. En la espiritualidad focolarina «se habla del saber perder- explicó María Voce- , pero también de plenitud. Si donas algo, pierdes, pero como hiciste un acto de amor te enriqueces. Quien da gana. La matemática de Dios no se deja vencer en generosidad». La alegría en la sala era tangible y María Voce habría querido que «de todo el mundo vinieran a ver esta célula viva de los Focolares para saborear los frutos, la fidelidad, la preciosidad que ha sostenido en más de 40 años a todo el Movimiento. La familia del focolar está viva en el amor y con la presencia de Jesús entre nosotros, podemos llevar el Amor de Dios al mundo». Muchos se acercaron a María Voce y Giancarlo Faletti para un saludo, un beso, un abrazo, una foto de recuerdo. «Es una nueva fase, hay un futuro», «la explicación del significado del sacrificio personal me iluminó acerca de un accidente que tuve siendo joven y que nunca comprendí», «a veces me siento pesimista, pero el optimismo de María Voce y de Giancarlo Faletti me contagiaron», «será una nueva primavera». Son algunas de las impresiones de los participantes. del enviado Aurelio Molè [nggallery id=64] Mayor información Servicio de Informaciones Focolares:
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Jóvenes en Londres: una revolución que no pasa
Desde la terraza del quinto piso del Cafod Building, el edificio de Cáritas internacional de Londres, se alcanza con una única mirada el espléndido panorama de toda la ciudad. Sin embargo no es la vista lo que me impresiona, sino el crisol de razas, los rostros de más o menos 85 jóvenes londinenses, pero también provenientes de otras ciudades de Gran Bretaña, quienes se encontraron el sábado 3 de septiembre para hablar sobre el tema: “La fuerza de la Palabra”, estaban presentes la presidente de los Focolares, María Voce y el co-presidente Giancarlo Faletti. Mientras la cálida jornada se enrumba hacia el ocaso, el sol penetra por los vitrales e ilumina el rostro de los jóvenes presentes, quienes mediante juegos, canciones, experiencias, grupos de diálogo, afrontan con gran libertad temas para nada sencillos, bastante candentes. La palabra de la que se habla, de hecho, es la palabra de Dios, que, explica Chris, es: “Capaz de revolucionar nuestra vida y el mismo mundo”. Una Palabra propuesta con valentía y claridad, sin diluirla, que ha generado vida y luz, no sólo en los siglos pasados sino también hoy, precisamente en Londres, la ciudad de los recientes tumultos. Es un encuentro inesperado por el interés, la atención, la participación que involucró a todos. “Las personas buscan el sentido de la vida –dice Joanna, una joven londinense quien es profesora de inglés- y se plantean muchos interrogantes, pero no encuentran un lugar donde poder hallar respuestas”. “Se siente cierto embarazo –agrega Oliver- a la hora de tratar ciertos temas con mis amigos porque hay una actitud generalizada contra los temas religiosos”. Pero no es sólo en la terraza del Cafod Building. Al escucharlos hablar del tema, y, sobre todo viendo a estos jóvenes tan unidos, Londres ofrece una esperanza para el futuro. Hay profundidad, frescura, apertura, “colorida” por diversas etnias, culturas, nacionalidades con distintos acentos de un único idioma inglés. “Leer en la mañana las palabras del Evangelio y recitar las oraciones –cuenta Ranjith,- me hace afrontar con más serenidad el estresante trabajo que hago y experimentar una alegría nunca antes conocida”. “Vivir el Evangelio –interviene Carlos, de origen panameño- ha dado un nuevo estilo a mi vida sin que me diera cuenta. Algunos me critican porque me dono demasiado a los demás, pero, en el fondo, vivir el Evangelio es sencillo, no es complicado. ¡Basta amar!”. “Desde hace poco tengo un nuevo trabajo –prosigue Edel, una chica de Irlanda del Norte- pero no era feliz. He empezado a vivir el arte de amar y, después de algunos días, mi jefe me agradeció por estar allí”. Con gran libertad y confianza María Voce compartió algunas de sus impactantes experiencias juveniles cuando descubrió con los Focolares que las palabras del Evangelio se podían poner en práctica, hasta cambiar completamente su vida y dar frutos de alegría, paz y libertad incluso en situaciones difíciles como cuando vivía en Estambul en un contexto de gran mayoría musulmana, o extremo como cuando Líbano estaba en plena guerra. “Vivir el Evangelio –concluyó- no sólo cambia la vida, sino que pone en movimiento una revolución que nació hace dos mil años y todavía no ha terminado. De hecho, ha habido tantas revoluciones a lo largo de la historia, pero ¿quién las recuerda? La revolución cristiana está todavía viva porque Jesús está vivo y sus palabras son para todos. Es una maravillosa aventura en la que nos lanzamos sin miedo porque Jesús está con nosotros”. Después de haber invitado a todos al próximo Genfest del 2 de septiembre de 2012 en Budapest y después de una pizza juntos, encontraron en la vitrina de la terraza post it con sus impresiones. Entre otras cosas se lee: “Siempre puedo recomenzar”, “no tengas miedo: no estás solo” y “piensa en el Evangelio como en una carta de amor de Dios por ti”. Es difícil describir la alegría, la atmósfera cálida de unidad entre todos, el deseo de hacer conocer a los demás la felicidad experimentada. del enviado Aurelio Molè [nggallery id=63] Más informaciones Servicio de Informaciones Focolares
Vivir el Carisma: Unidad y medios de comunicación
Un aspecto emblemático del Movimiento de los Focolares es la comunión, la unidad. Es la consecuencia de la Palabra vivida y comunicada.Escribía Chiara: «El Movimiento antes no existía, después existió. Y como sabemos lo hizo nacer el Espíritu Santo, quien actuó de una manera muy precisa. Puso a las primeras focolarina en condiciones de dar el máximo relieve, quisiera decir, el único relieve, al Evangelio; iluminó sus palabras y las impulsó a vivirlas». «¿El efecto? –se preguntó Chiara –. Lo sabemos, inesperado y maravilloso: por la Palabra vivida radicalmente, por la Palabra tomada en serio, surgió muy pronto una comunidad numerosa, que rápidamente se extendió a más de un centenar de pequeños pueblos de Trento: era el Movimiento de los Focolares. Personas que antes no se conocían, se convirtieron en una familia; cristianos, antes indiferentes el uno hacia el otro, se unieron entre ellos. Por lo tanto la Palabra de Dios obra este milagro: da origen a una comunidad visible ». “Unidad” es la palabra que más caracteriza al Movimiento de los Focolares. Unidad que es de por sí comunión y comunicación. Unidad que tiene necesidad de una comunicación continua para ponerse al día. También así los medios de comunicación social están al servicio de la unidad. Las 38 ediciones de la Revista Ciudad Nueva, en 24 idiomas, junto con otras revistas, como Gen’s para el mundo sacerdotal y Unidad y Carismas para los religiosos, son realizaciones que tienen como objetivo la unidad. Así como los “Centros Santa Chiara” audiovisuales. En el 2000 Chiara Lubich, dirigiéndose a una asamblea de comunicadores, les ofreció cuatro “principios” de la comunicación mediática: «Para ellos es esencial comunicar. El esfuerzo por vivir cada día el Evangelio, la misma experiencia de la Palabra de vida, siempre ha estado y está indisolublemente unida al acto de comunicarla, a la narración de sus pasos y frutos, dado que la ley es amar al otro como a uno mismo. Pensamos que lo que no se comunica, se pierde. De este modo, sobre la vivencia se enciende una luz para quien narra y para quien escucha, y la experiencia parece fijarse en la eternidad. Podemos decir que tenemos casi una vocación a la comunicación». Segundo principio: «Para comunicar, sentimos el deber de «hacernos uno» –como decimos nosotros– con quien escucha. Incluso cuando uno habla o desarrolla un tema, no nos limitamos a exponer lo que pensamos. Primero, sentimos la necesidad de saber a quién tenemos delante, de conocer al que escucha o al público, sus exigencias, sus deseos, sus problemas. Y también nos damos a conocer, explicamos por qué queremos tratar ese tema, qué nos ha impulsado, los efectos en nosotros mismos, y así creamos cierta reciprocidad. De ese modo los demás no sólo reciben el mensaje intelectualmente, sino que también participan de él y lo comparten». Y todavía: «Subrayar lo positivo. Siempre ha formado parte de nuestro estilo poner de relieve lo que es bueno, convencidos de que es infinitamente más constructivo destacar el bien, insistir en las cosas buenas y en las perspectivas positivas en lugar de pararse en lo negativo, aunque denunciar oportunamente errores, carencias y culpas es obligatorio para una persona responsable». Por último: « Lo que importa es la persona, no el medio, que es un simple instrumento. Para difundir la unidad, hace falta ante todo ese medio imprescindible que es el hombre, un hombre nuevo, en palabras de San Pablo, que ha acogido el mandato de Cristo de ser levadura, sal y luz del mundo ».
[:it]I Focolari in Gran Bretagna [:en]The Focolare Movement in the UK[:de]Die Fokolar-Bewegung in Großbritannien[:zh]英國的普世博愛運動
Utrecht
De “rebelde” a constructor de unidad
Hago parte de la generación de los “rebeldes”, educado en la fe católica, pero sin comprenderla ni vivirla coherentemente. Ya desde joven me hacía muchas preguntas. Sobre todo me costaba ir a Misa todos los domingos. Encontré la solución: dejé de creer, manteniendo igualmente como referencia el mensaje de amor de Jesús.
Conocí a M. Angels, mi mujer, y comenzó una larga y benéfica transformación para ambos. Ella creyente y del Movimiento de los focolares. En realidad, con el pasar del tiempo, descubrí que me había casado con una “activista” del Movimiento.
Nos tuvimos que confrontar enseguida sobre las decisiones que debíamos tomar para el rito del matrimonio. Nos casamos por la Iglesia. A pesar de esto, por mi parte no renuncié a nada. No solo acepté el rito religioso, sino que participé con el máximo interés y respeto.
La otra decisión importante fue la educación que habríamos tenido que dar a nuestros hijos. Nuevamente aplicamos un sencillo principio que, para estas cuestiones difíciles, ha funcionado muy bien: “la formación en la fe católica será un plus para nuestros hijos que les hará más sensibles, más completos, más felices». Le decía a mi mujer: «Tú tienes la fe, yo el vacío”.
No ha sido todo fácil como puede parecer. De hecho, no comprendía el entusiasmo de mi esposa por participar a las reuniones de los Focolares: Era quizás un secta? Admito que estabe un poco celoso. Poco a poco, esforzándonos mutuamente, llegamos a un pleno equilibrio. Tenía una cierta curiosidad por el Movimiento y ella discretamente me lo hacía conocer.
Un hecho significativo sucedió cuando participé a una reunión. Recuerdo la acogida que recibí y la atmósfera que se respiraba. Comencé a conocer la espiritualidad de Chiara Lubich e intenté hacerla coincidir con mis convicciones personales. Un aspecto importante fue comprender con una luz nueva el significado de la palabra amor, que hoy día ha perdido su importancia.
Había encontrado una espiritualidad que ponía al centro el mensaje de Jesús da una manera radical y manifiesta; que se concretizaba cotidianamente y en las pequeñas cosas. Creció mi interés por esta espiritualidad así como el deseo de vivirla: con los amigos, los desconocidos, los compañeros de trabajo, y sobre todo en familia.
Había solo un obstáculo. Me parecía que el Movimiento fuese reservado a las personas creyentes cristianas. Fui sorprendido cuando supe que era abierto también a personas de convicciones non religiosas y no sólo, sino que me invitaban a participar activamente.
He aprendido a ver al otro como a un hermano, a pensar y actuar de consecuencia, y que no es necesario ser un héroe; he experimentado que es necesario un ejercicio continuo, pero que en esto uno es ayudado por una espiritualidad que tiene un alto componente comunitario.
En los últimos años he tenido la fortuna de poder dirigir un grupo musical de jóvenes. Es una riqueza, porque estando con ellos he podido participar a su crecimiento, non sólo musical sino también espiritual. Esto ha exigido por mi parte una grande dosis de trabajo y mucha paciencia para adaptarme a sus exigencias, conocimientos, edad y a las ganas que tienen de jugar y de vivir.
Ahora miro mi vida como una trayectoria que me ha permitido crecer en el terreno espiritual, y llenar el vacío que me parecía tener respecto a la plenitud de fe de mi mujer. Una evolución que hace necesario que me impulsa a pasar de espectador a actor.
Jordi Illa
Septiembre 2011
«Pero ahora tenemos que hacer fiesta y alegrarnos, porque tu hermano estaba muerto y ha vuelto a la vida; se había perdido y lo hemos encontrado».
Estas palabras son una invitación que Dios te dirige a ti y a todos los cristianos para gozar junto con Él, para celebrar y participar de su alegría por el regreso del hombre pecador, antes perdido y luego hallado. Y estas palabras, en la parábola, se las dirige el padre al hijo mayor, que había compartido toda su vida pero que, después de un día de duro trabajo, se niega a entrar en casa, donde se está festejando el regreso de su hermano. El padre sale al encuentro del hijo fiel como fue al encuentro del hijo perdido, y trata de convencerlo. Pero es evidente el contraste entre los sentimientos del padre y los del hijo mayor: el padre, con su amor sin medida y su gran alegría, que quisiera que todos compartieran con él; el hijo, lleno de desprecio y de envidia por su hermano, a quien no reconoce como tal. De hecho, al hablar de él, dice: «Este hijo tuyo que se ha gastado tus bienes». El amor y la alegría del padre por el hijo que ha vuelto ponen todavía más de relieve el rencor del otro, que evidencia una relación fría y, se podría decir, falsa con su propio padre. A este hijo lo que le importa es el trabajo y cumplir con su deber, pero no ama a su padre como un hijo. Se diría que más bien le obedece como a un amo.
«Pero ahora tenemos que hacer fiesta y alegrarnos, porque tu hermano estaba muerto y ha vuelto a la vida; se había perdido y lo hemos encontrado».
Con estas palabras Jesús denuncia un peligro en el que también tú puedes caer: vivir la vida para ser una persona respetable, buscar tu perfección y considerar a tus hermanos peores que tú. De hecho, si estás «apegado» a la perfección, te afirmas tú mismo, te llenas de ti mismo, estás lleno de admiración por ti mismo. Haces como el hijo que se quedó en casa, que enumera a su padre sus muchos méritos: «Desde hace muchos años vengo trabajando para ti sin desobedecerte en nada».
«Pero ahora tenemos que hacer fiesta y alegrarnos, porque tu hermano estaba muerto y ha vuelto a la vida; se había perdido y lo hemos encontrado».
Con estas palabras Jesús se opone a esa actitud que basa la relación con Dios sólo en observar los mandamientos. Pero una observancia así no es suficiente. La tradición hebraica también es consciente de esto. En esta parábola Jesús pone de relieve el Amor divino y muestra que Dios, que es Amor, da el primer paso hacia el hombre sin tener en cuenta si se lo merece o no, pues quiere que el hombre se abra a Él para poder establecer una auténtica comunión de vida. Naturalmente, como puedes comprender, el mayor obstáculo para Dios-Amor es precisamente la vida de quienes acumulan acciones, obras, cuando Dios querría su corazón.
«Pero ahora tenemos que hacer fiesta y alegrarnos, porque tu hermano estaba muerto y ha vuelto a la vida; se había perdido y lo hemos encontrado».
Con estas palabras Jesús te invita a ti a tener con el pecador el mismo amor que el Padre le tiene. Jesús te llama a no juzgar con tu medida el amor que el Padre tiene por cualquier persona. Al invitar al hijo mayor a compartir su alegría por el hijo hallado, el Padre te pide también a ti un cambio de mentalidad: debes acoger como hermanos y hermanas también a aquellos hombres y mujeres que solamente te inspirarían sentimientos de desprecio y de superioridad. Esto provocará en ti una verdadera conversión, porque te purificará de la convicción de ser mejor, te hará evitar la intolerancia religiosa y te hará recibir como puro regalo del amor de Dios la salvación, que Jesús te ha procurado. Chiara Lubich
Vivir el Carisma: Sabiduría y estudio
En una carta de los años Cuarenta, Chiara Lubich escribía una frase fulgurante: «Yo soy un alma que pasa por este mundo. He visto tantas cosas bellas y buenas y siempre me he sentido atraída sólo por ellas. Un día (un día indefinido) vi una luz. Me pareció la más bella y la he seguí. Me di cuenta de que era la Verdad». Recién graduada como maestra su aspiraba a frecuentar la Universidad Católica de Milán. Pensaba: «Es católica, hablarán de Dios, me enseñarán muchas cosas sobre Él». Un concurso permitía a 33 candidatos entrar becados. Chiara se calificó trigésimo cuarta y tuvo la sensación de que había perdido una gran oportunidad. Sin embargo, en medio de las lágrimas y de su corazón atribulado, una voz interior se abrió paso: «¡Yo seré tu Maestro!». El aspecto del estudio tiene en esta respuesta interior su punto de referencia. Más adelante, en 1980, sigue explicando: «Ya en 1944 Jesús me pedía que dejara los estudios y que guardara los libros en la buhardilla (…). Sedienta de verdad había visto lo absurdo que era buscarla en la Filosofía, cuando la podía encontrar en Jesús, Verdad encarnada. Dejé de estudiar para seguir a Jesús. (…) En ese episodio hay un preludio de lo que, con el tiempo habría de florecer en el Movimiento. Habíamos visto resplandecer una luz y ella sería el alma de una vida nueva. (…) Después de esa renuncia, o mejor dicho, después de esa elección que Dios me pidió que hiciera, la luz llegó en abundancia. Nos iluminó sobre la espiritualidad que Dios quería para nosotros, y fue plasmando día a día la Obra…, nosotros llamamos a esa luz “Sabiduría”. (…) Comprendimos que la sabiduría sería la esencia de nuestros estudios, del estudio de todos los miembros de la Obra de María (…). Aunque había dejado los estudios, en 1950 advertí la necesidad de retomar los libros y estudiar Teología. Sentía la necesidad de sustentar muchas intuiciones de ese período sobre una base segura.» Son numerosos los lugares en donde se realiza la cultura de la unidad, por ejemplo en la así llamada “Escuela Abbá”, que se dedica a la doctrina que brota del carisma de la unidad. Es la fuente de numerosas iniciativas que impregnan los varios campos del pensamiento y de la vida. O la Universidad Popular Mariana, que tiene como objetivo ofrecer una formación teológica básica para los miembros del Movimiento. Además de otras escuelas y cursos orientados a los fines específicos del Movimiento. Se desarrolla la Editorial Ciudad Nueva, en sus varias ediciones lingüísticas, con numerosas publicaciones. La revista cultural Nuova Umanità (Nueva Humanidad), entre otras. En el 2008 nace el Instituto Universitario Sophia, con sede en Loppiano (Florencia – Italia).
Se concluye el IV Simposio Hebreo-Cristiano
“…Tuvimos que esperar que aparecieran tres estrellas en el cielo, el signo de que había terminado el Sábado. Sólo entonces pudimos empezar. La cita era frente un gran hotel del centro de Buenos Aires donde estaban alojados algunos amigos hebreos venidos de los Estados Unidos, Europa e Israel. Después de tres horas de viaje llegamos a la «>Mariápolis Lía, en plena noche.
“…primera jornada del IV Simposio Hebreo-Cristiano. Eran unos ochenta los participantes provenientes de varias partes del mundo. El clima era muy alto, por la escucha recíproca, las relaciones de amistad. Con tantos nos habíamos encontrado en los simposios anteriores, sobre todo en el de Jerusalén. El tema elegido fue el de la identidad y el diálogo, dos realidades que se compenetran: la identidad es fruto de la relación. Hubo intervenciones muy profundas con enfoques desde el punto de vista filosófico, antropológico, psicológico, con nombres que vuelven como los de: Martin Buber, Emmanuel Lévinas, Viktor Frankl, Paul Ricoeur…”
“…Cada vez me doy más cuenta de que el diálogo interreligiosos no se puede improvisar; hace falta preparación y delicadeza de alma. Es participar a esa obra de mediación obrada por Jesús entre Cielo y tierra, y entre las divisiones de los seres humanos. Para colmar toda separación y traer la unidad se hizo esa “nada” de amor que permitió la reunificación sin que existiera ningún diafragma”.
“…Si la noche en la Pampa argentina es silenciosa, con las estrellas que brillan sigilosas, el día es un canto de mil pájaros. La naturaleza parece participar en la fiesta que hay entre nosotros en este simposio. Se advierte un crecimiento con respecto a los tres anteriores: un conocimiento más profundo, más confianza, un amor más sincero. Parece un sueño. Hoy, junto a las acostumbradas conferencias, hay encuentros de diálogo para diferentes ámbitos: el mundo de la justicia, de la comunicación, de la educación…”.
“…La fuerte afirmación de la propia identidad puede generar conflicto. Sólo el ‘no ser’ recíproco delante del otro, como expresión de amor, hace ‘ser’ al otro y lo hace reencontrarse plenamente consigo mismo en una más profunda identidad religiosa: ser amor. Otra jornada intensa. Casi parece superfluo hablar de diálogo entre nosotros, tal es la profunda unidad alcanzada. Cuando los rabinos hablan se siente toda la sabiduría de los siglos”.
“…Mi intervención: El crucificado ícono del amor extremo. El amor más grande, dijo Jesús, es el que llega a dar la vida por los amigos (Jn. 15, 13). Gracias a este amor extremo cada persona se vuelve amiga. Dar la vida también por quienes son enemigos. Es la mirada nueva exigida para construir la fraternidad universal: ver en todos a hermanos y hermanas por quienes estar dispuesto a dar la vida: cada persona con quien establecemos un contacto es un amigo, una amiga.
Chiara Lubich tradujo este amor extremo de Jesús con una expresión sencilla y exigente: ‘hacerse uno’ con el otro, es decir entenderlo profundamente, entrar en su mundo, compartir sus sentimientos. Es la premisa de todo diálogo. Chiara aplicó esta enseñanza en el campo del diálogo interreligioso, poniéndose en actitud de escucha de los miembros de las diferentes religiones, en modo tal de comprenderlos desde dentro de su cultura”.
“…El simposio se concluyó en la sede del Ministerio de Asuntos Religiosos, en Buenos Aires. Estaban presentes personalidades hebreas y cristianas, civiles y religiosas. Fue un momento de alta representatividad. Volvemos sintiéndonos llamados en primera persona a realizar una obra de mediación entre tendencias, posiciones y experiencias a veces contrastantes entre ellas. El camino –lo entendimos en estos días- es ser sólo una presencia de amor, sin pretender ni juzgar, al servicio, hasta llegar a la ‘nada de amor’ que permitirá el encuentro”.
Del diario de viaje del Padre P. Fabio Ciardi (OMI)
On line el nuevo sitio de Schoolmates
Ideado y actuado por los Muchachos por la unidad de los Focolares, en colaboración con la AMU (Asociación Acción por un mundo Unido – ONLUS) y Humanidad Nueva, Schoolmates es un proyecto nacido en el 2002 que ha involucrado, en estos casi diez años, a cientos de escuelas. El objetivo es permitir a los muchachos de países distintos ponerse en contacto y conocerse, como sugiere el nombre, de un lado o del otro del mundo. Quien participa contribuye después, mediante numerosas actividades, a alimentar un fondo de solidaridad que permite distribuir, cada año, varias becas. En los últimos 12 meses se han asignado 376 en 25 naciones.
La renovación del sitio http://www.school-mates.org/ apunta a mejorar la comunicación, la participación y la interacción entre los salones de clase y los grupos que adhieren a las tres fases del proyecto. Se empieza comprometiéndose a vivir la “Regla de oro” que invita a “hacer a los demás lo que quisiéramos que nos hicieran”, norma presente en los libros sagrados de tantas religiones. La segunda fase permite conocerse: poniendo en red, a través de la web, a salones o grupos de muchachos de distintos países. El proyecto quiere ofrecer la posibilidad de conocer otras culturas creando un diálogo mediante el cual las diferencias se conviertan en fuente de riqueza las unas para con las otras. En esta fase encontramos una novedad en el sitio la posibilidad de administrar, para quien participa en las tres fases del proyecto, un espacio web propio. En éste los muchachos pueden presentar su salón de clase o grupo, dar a conocer su país desde el punto de vista histórico, geográfico y cultural, y compartir experiencias y testimonios de su compromiso en vivir la Regla de oro. Si la clase o el grupo desean ponerse en contacto con otras clases o grupos, esto puede realizarse en un área reservada. La tercera fase está caracterizada por el compartir: los salones de clase y los grupos que adhieren al proyecto se comprometen de hecho a sostener, todos los años, algunos micro-proyectos de solidaridad. El objetivo es permitir, mediante la asignación de becas a muchachos que de lo contrario no tendrían la posibilidad, frecuentar la escuela y completar su formación escolar o profesional. Entre las novedades del nuevo sitio está también una sección dedicada a los maestros, profesores y tutores, ideada para compartir materiales y experiencias didácticas realizadas en varios países y en escuelas de distinto origen y nivel.
Juntos Por México
Como fruto de las relaciones entretejidas durante muchos años sea entre en los movimientos que con las nuevas asociaciones, el próximo sábado 27 de agosto, se llevará a cabo el primer encuentro de “Juntos por México”, que verá reunirse 500 líderes que representan a 8 millones de laicos católicos de todo el país. Un poco de historia: En 2007, la Asamblea de la confrencia Episcopal de America Latina (CELAM) reunida en Brasil, marca una etapa importante para toda la Iglesia de America, lanzando en todo el continente la que fue llamada “misión continental”. Para dar respuesta a este desafío, en México, se empieza a organizar el primer encuentro de todos los movimientos a nivel nacional. Desde el inicio el evento viene concebido como un encuentro festivo, al tiempo que de testimonio del Evangelio vivido, sea a nivel personal que en los diferentes ámbitos de la sociedad. A finales del 2009, se constituyó una comisión central, compuesta por 8 movimientos junto con la Dimensión Episcopal de los Laicos, este grupo es expresión de más de 30 de los principales movimientos y asociaciones mexicanas, y trabajó activamente en la preparación del evento con grande entusiasmo y espíritu de comunión.
El tema que se ha elegido para esta primer edición es la familia, profundizado de manera especial bajo el enfoque de tres grandes temáticas: Formación, Social, Comunicación. Seguirá un diálogo abierto con el objetivo de definir acciones concretas que se puedan realizar conjuntamente. Cerraran los trabajos un espacio dedicado a los jóvenes y la santa Misa presidida de Mons. Javier Navarro, presidente dela dimensión episcopal para los laicos. No pocos ven en este encuentro el abrirse de nuevos caminos de comunión entre los movimientos y las nuevas asocioaciones. Una novedad en la Iglesia mexicana, que sin duda, podrá dar fruto de un mayor protagonismo de los laicos en los diferentes ámbitos de la sociedad.
Argentina: XV Jornada de la Paz
Un centenar de personas pertenecientes a algunas comunidades judías de Argentina y del Movimiento de los focolares se encontraron, el 21 de Agosto, para celebrar la XV Jornada de la Paz, como cada año, en la ciudadela argentina de los Focolares, a 250 Km. de Buenos Aires, sumergida en la Pampa. La iniciativa tiene como objetivo afianzar el recíproco compromiso en el campo del diálogo judeo-cristiano en ese país. Cada año se comparten reflexiones y, sobre todo, experiencias de vida, con el momento más esperado: reunirse alrededor del olivo plantado en la ciudadela hace ya 15 años, proveniente directamente de Israel. Este árbol se ha transformado en el símbolo de la relación de amistad y de compromiso en la construcción de la paz, juntos, judíos y cristianos. También se recordó, durante una breve síntesis del camino recorrido en estos años, del impulso que representó para todos la visita de Chiara Lubich en el 1998, y su intervención en la sede de la Institución Judía B’nai B’rith, en ocasión de la cual Chiara evidenció los puntos comunes existentes en la espiritualidad de los Focolares y en la tradición judía. Mientras tanto, 180 jóvenes participaban a tres mesas redondas sobre la tolerancia, la paz y la libertad, comunicando sucesivamente a todos los participantes las conclusiones y los compromisos asumidos.
Llegaron muchos mensajes de adhesión al evento; entre ellos, el del cardenal de Buenos Aires, Jorge Mario Bergoglio, que evidenciaba e impulsaba la labor de los Focolares en el diálogo interreligioso en todo el mundo. Esta edición de la Jornada de la Paz ha sido caracterizada por la internacionalidad, por la presencia de los participantes al IV Simposio Judeo-Cristiano, en programa del 22 al 25 de Agosto, siempre en la ciudadela de los Focolares. Los participantes provienen de Israel, Suiza, Italia, Estados Unidos, México, Perú, Uruguay, y de varias ciudades argentinas.
JMJ: !Nos vemos en Rio de Janeiro!
“El 19 de agosto se ha realizado el Via Crucis en el centro de la ciudad utilizando las magníficas imágenes tradicionales de las procesiones de Semana Santo (conocidas como “los pasos”) que han llegado de las distintas regiones españolas. Era increíble ver llegar, a pesar del calor y el cansancio, los centenares de miles de jóvenes de todas partes. Un momento muy familiar: la comida en la Nunciatura del Papa Ratzinger con 12 jóvenes de los distintos continentes. Estaban contentísimos y conmovidos, a pesar de que todo se desarrolló con extrema simplicidad. Todos repetían que el Papa había escuchado más que hablado; quería saber con qué actitud vivían los jóvenes la JMJ y cuáles eran sus intereses y los de sus coetáneos. En realidad, quería conocer de ellos mismo la realidad de los jóvenes de las diversas partes del mundo. Sólo al final, los jóvenes le han preguntado al S. Padre qué es lo que se esperaba de ellos: “Que seáis testimonio de la fe en vuestros propios ambientes – ha respondido- radicados en Cristo, siendo siempre fuente de entusiasmo y de alegría”. Y es lo que hemos experimentado por la noche durante el “Get together” -momento de oración y adoración-, organizado por los Jóvenes por un mundo unido en una enorme iglesia dedicada a la Vírgen del Carmelo. Es imposible describir la alegría y , al mismo tiempo, la solemnidad que reinaban. Sin esperarlo, ya media hora antes de iniciar, la Iglesia estaba llena; se ha tenido que improvisar y acomodar la gran cripta, conectada a través de video. El programa se ha desarrollado en español, inglés e italiano. Los cantos se intercalaban entre la banda de los Jóvenes por un mundo unido españoles y el conjunto internacional Gen Rosso, que luego del trabajo que han hecho juntos en las últimas noches, estaban muy bien amalgamados. El encuentro inició con Rafael, de Puerto Alegre y Natalia (China) que han contado sus experiencias sobre cómo viven el Evangelio en sus ambientes. Después, Chiara Lubich – por medio de un video donde se dirige a los jóvenes reunidos
en La Coruña durante la JMJ de 1989- nos ha llevado a otro plano. Era como si ella misma hubiera estado entre nosotros para hablarnos del inmenso proyecto de Dios sobre la vida de cada uno de nosotros. Y con este altísimo respiro, era natural adorar a Jesús presente en la Eucaristía expuesto por Mons. Andrés Carrascosa, Nuncio apostólico de Panamá. Entre cantos y espacios musicales, hemos tenido un maravilloso e intimo ‘tu a tu’ con Dios. Nos hemos saludado dándonos cita para el día siguiente en “Cuatro Vientos” (el aeródromo militar en la periferia de Madrid) para la tan esperada Vigilia con Benedicto XVI la cual, como muchos han podido ver, se ha desarrollado entre la lluvia y la tormenta, sin interrumpir en lo más mínimo el ardor y el entusiasmo de los jóvenes, todos concentrados en la oración. Tanto es así que el Papa ha exclamado: “Gracias por vuestra alegría y vuestra resistencia. Vuestra fiesta ha sido más fuerte que la lluvia”. Las TV de todo el mundo han transmitido las extraordinarias imágenes de aquel mar de jóvenes bajo el sol (cerca de dos millones, según los organizadores), atentos a las palabras de Benedicto XVI durante la S. Misa: “Respondedle con generosidad y valentía, como corresponde a un corazón joven como el vuestro. Decidle: Jesús, yo sé que Tú eres el Hijo de Dios que has dado tu vida por mí… Tú me conoces y me amas. Yo me fío de ti y pongo mi vida entera en tus manos. Quiero que seas la fuerza que me sostenga, la alegría que nunca me abandone…Comunicad a los demás la alegría de vuestra fe». Y su invitación para la próxima edición de la JMJ en el año 2013 en Río de Janeiro, ha sido acogida con mucho entusiasmo”. De nuestra corresponsal Dolores García
Bruselas: Juntos por Europa 2012
Bruselas 2012. Un lugar simbólico – sede de importantes instituciones de la Unión Europea-, una fecha importante- la del año europeo de la solidaridad entre las generaciones. Bruselas 2012 es también la próxima etapa de ese libre encuentro de Movimientos y comunidades que, manteniendo la propia autonomía, actúan juntas en determinadas ocasiones para fines compartidos, llevando el aporte del propio carisma y de su espiritualidad. Un camino que –iniciado el 31 de octubre de 1999- ha asumido el nombre de Juntos por Europa. Una red de la que forman parte 250 Movimientos y comunidades cristianas. Católicos, evangélicos, anglicanos, ortodoxos, miembros de las iglesias libres y de comunidades pentecostales. Juntos colaboran a favor del bien común del continente, avanzando por el camino de reconciliación en acto. 10 años por Europa
Son varias las iniciativas y manifestaciones previstas para el 2012 en múltiples ciudades europeas, ya sea previas al evento de Bruselas como en contemporánea. Para tener una panorámica de esta red, se puede consultar el sitio oficial, que está muy documentado, allí se encuentra también la historia de Juntos por Europa. Hay que recordar especialmente los dos grandes eventos de Stuttgart del 2004 y del 2007, con sus relativos mensajes programáticos, el último pasó a la historia como el mensaje de los 7 SÍ.

Stuttgart 2004 - Chiara Lubich con Evmenios Tamiolakis
Armonía y ambiente
«Para nosotros cada objeto debe tener un sentido», repetía Marilen Holzhauser, una de las primeras focolarinas. La sobriedad, la esencialidad, fueron para las primeras compañeras de aventura de Chiara Lubich, el estilo de vida, la decoración, el vestir. La belleza revela así el misterio de una flor que sólo consume lo que necesita y muestra de esta forma su auténtica belleza. La belleza se convierte en esplendor de la verdad. La armonía de la esencialidad hace descubrir que «la belleza salvará al mundo» y qué belleza salvará al mundo. En la Carta a Diogneto, se lee a propósito de los primeros cristianos: «Viviendo en ciudades griegas o bárbaras, donde está cada uno, y adaptándose a las costumbres locales en el vestido, en la comida y en todo el resto, dan un testimonio de vida social admirable y sin duda sorprendente». Todo esto se refleja en la vida concreta de aquellos que se adhieren al “espíritu de la unidad”. Por ejemplo, los “Centros Mariápolis”, que acogen congresos y cursos de formación y las Ciudadelas de vida común, 22 en todo el mundo, son realidades concretas que se proponen restaurar en su integridad humana las relaciones sociales. De igual modo, la producción de los Centro Ave y Azur, y las reuniones de “Art’è”, así como las obras de arte de pintores, músicos, pianistas, bailarines,… quieren expresar la continua novedad de Dios, fuente de belleza y armonía.

JMJ: Musical Chiara Luce – short video clip
Chiara Luce en la JMJ
En el marco de la amplia agenda cultural preparada para esta JMJ, una cita que, a decir de algún medio de comunicación era “imprescindible”, el musical “Life, love, light” sobre la vida de la beata Chiara Luce Badano. 50 jóvenes de los Focolares se propusieron un objetivo muy ambicioso: ofrecer este musical, que únicamente se había hecho en el Aula Pablo VI coincidiendo con la beatificación de la joven italiana, como respuesta a las palabras del Papa Benedicto XVI: “Os invito a conocerla: su vida ha sido breve, pero el mensaje es estupendo… Diecinueve años llenos de vida, de amor, de fe. Dos años, los últimos, llenos también de dolor, pero siempre en el amor y en la luz, una luz que irradiaba a su alrededor y que nacía de dentro: ¡de su corazón lleno de Dios!” Meses de preparación, de esfuerzo, junto con una fuerte y profunda experiencia de Dios… y lo que parecía un reto sólo alcanzable por “un milagro”, ayer noche en el Auditorio “Pilar García Peña” (Madrid), era una espléndida realidad. Los amateurs de hace unos meses, anoche sobre el escenario eran auténticos profesionales. Antes de comenzar el espectáculo una de las gen del grupo de la coreografía se expresaba en estos términos:“Queremos transmitir que todos podemos hacer su mismo camino. Era una de nosotros”. El Auditorio, con una capacidad de 5000 personas, estaba totalmente abarrotado y muchas personas seguían el musical sentadas en el suelo o de pie. “Life, love, light” presenta en un ágil entrelazarse de coreografías, recitados y canciones las principales etapas de la vida de Chiara Badano: su infancia, la relación con sus padres, amigos y con la fundadora de los Focolares, Chiara Lubich, las ilusiones, conquistas y también los fracasos de esta joven, hasta llegar al momento crucial de la enfermedad. “¿Por qué, Jesús?”, pregunta ante este inmenso dolor y ella misma exclama: “Si lo quieres tú, también lo quiero yo”. Momento de especial hondura y emoción, el testimonio en vivo de Mª Teresa y Ruggero Badano, sus padres y de Chicca Coriasco, su mejor amiga. Además, se dio la palabra a jóvenes presentes que compartieron sus vivencias, su compromiso en vivir en el día a día el Evangelio como Chiara Luce. Entre el público se probó una fuerte conmoción, al escuchar el recitado con algunos fragmentos de las cartas que ella dirigió a Chiara Lubich: “He descubierto que Jesús abandonado es la clave de la unidad con Dios, y quiero elegirlo como mi primer esposo y prepararme para cuando llegue. ¡Preferirlo!”. Del musical muchos resaltaron también la belleza con la que estaba presentado, la magnífica puesta en escena, el lenguaje impactante, actual, moderno. Algunos jóvenes presentes que se declararon no creyentes, afirmaron estar de acuerdo con el mensaje “de amor y unión” que transmitía. “Yo no puedo correr más, y quisiera pasarles la antorcha, como en las Olimpíadas… Porque tenemos una vida sola, y vale la pena gastarla bien”. Son algunas de las últimas frases de Chiara Luce que reflejan cuanto vivido durante la velada de anoche: ahora toca a cada uno llevar esta antorcha. Video Clip – YouTube [nggallery id=61]
Ciudad Nueva radio: desde Argentina para todo el mundo
Está por cumplir dos años el programa radio «Ciudad Nueva» producido por la redacción de Cn revista. Es un programa semanal que se emite desde los estudios de Radio María de Buenos Aires, que ofreció generosamente el espacio del viernes, de 20,00 a 21,30 hs. La estructura del programa es muy simple y el formato es el del programa periodístico. Primero se presenta un pantallazo de la semana a nivel nacional, internacional y deportivo en colaboración con los columnistas de Cn revista entrevistados por los conductores del programa, Yanina Dandan y Santiago Durante. Luego se encaran dos temas de actualidad y, una vez por mes, se dedica un espacio a la Palabra de Vida y las experiencias de los oyentes. El público se estima entre 150.000 y 200.000 oyentes semanales que, además, intervienen muy activamente con llamados telefónicos, sms, mail o con mensajes en el perfil de
facebook del programa. Aunque Radio María cubre gran parte del territorio nacional de la Argentina, muchos oyentes prefieren seguir el programa vía internet, www.radiomaria.org.ar, y otros más pueden descargarlo grabado desde el portal web del grupo editorial www.ciudadnueva.org.ar
Bienvenidos a Madrid!
Queridísimos jóvenes, llegó el día tan esperado: la inauguración de la vigésimo sexta Jornada Mundial de la Juventud. Tras un largo camino de preparación finalmente estáis aquí, en Madrid, bellísima y moderna metrópolis que en estos días será la capital de la juventud católica del mundo entero… «¡Bendito el que viene en nombre del Señor!» (Sal 118, 26). Con estas palabras del salmista os doy una cordial bienvenida y un saludo afectuoso de parte del Pontificio Consejo para los Laicos, el dicasterio de la Santa Sede al cual el Papa confía la organización de estas reuniones mundiales de jóvenes. Un saludo agradecido a vuestros obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, así como a los formadores laicos que os han acompañado y guiado en el proceso de preparación espiritual para la gran aventura de la fe que viviremos juntos en estos días.
Habéis traído a esta cita con el Santo Padre Benedicto XVI vuestros proyectos, vuestras esperanzas y también vuestras inquietudes, la preocupación por las decisiones que os esperan… Serán días inolvidables de importantes descubrimientos y de decisiones determinantes para vuestra vida… Nuestra reflexión y nuestra oración en estos días estarán guiadas por la palabra de San Pablo que ya todos conocéis: «Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe…» (Col. 2,7). ¡Es una palabra que nos compromete porque contiene un claro programa de vida para cada uno de nosotros! En estos días la fe estará en el centro de nuestra reflexión; porque la fe es un factor decisivo en la vida de cada hombre. ¡Si Dios existe o no existe, todo cambia! La fe es la raíz que nos nutre con la savia vital de la Palabra de Dios y los sacramentos; es el fundamento, la roca sobre la cual construir la vida, la brújula segura que guía nuestras decisiones y da a nuestra vida la orientación decisiva. Sin embargo, muchos hoy se preguntan: en nuestro mundo, que tan a menudo rechaza a Dios y vive como si Dios no existiera, ¿es aún posible la fe? …
¡Queridísimos jóvenes! Os habéis reunido aquí, en Madrid, desde los rincones más remotos del planeta, para decir en voz alta a todo el mundo – y en particular a esta Europa que está dando signos de profunda desorientación – para decir vuestro firme “sí”! “Si”, ¡la fe es posible! Es más, es una aventura maravillosa que nos permite descubrir toda la grandeza y la belleza de nuestra vida. Porque Dios, que se ha revelado en el rostro de Jesucristo, no disminuye al hombre sino que lo enaltece mas allá de toda medida, mas allá de toda imaginación! En estos días, junto con los Apóstoles, queremos todos gritar al Señor: «¡Aumenta nuestra fe!» (Lc 17,5)… Queremos también nosotros orar con las palabras de San Anselmo: Señor, «enséñame a buscarte, muéstrate al que te busca, porque no puedo buscarte si no me enseñas el camino. No puedo encontrarte si no te haces presente.» (Proslogion 1,1)
Mientras esperamos la llegada del Papa Benedicto XVI hemos acogido esta noche a un huésped especial de la JMJ de Madrid: el Beato Juan Pablo II. Él ha regresado entre vosotros, los jóvenes a los que tanto amó y que tanto lo han amado: ha regresado como Beato patrón vuestro y como protector al que podéis confiaros; ha regresado como amigo – un amigo exigente, como le gustaba a él mismo definirse… Ha venido a deciros una vez más, con muchísimo afecto: ¡No tengáis miedo! ¡Optar por Cristo en la vida es adquirir la perla preciosa del Evangelio por la cual vale la pena darlo todo! ¡Queridísimos jóvenes! ¡La JMJ de Madrid ha empezado! De nuevo os digo: ¡Bienvenidos todos a Madrid! Plaza Cibeles, 16 de agosto de 2011 Card. Stanisław Ryłko, Presidente del Pontificio Consejo para los Laicos Fotogallery JMJ
JMJ: fiesta en Barcelona con el Gen Rosso
En el contexto de la Jornada Mundial de la Juventud, el conjunto internacional Gen Rosso se presentó, el 13 de agosto, delante de más de 30.000 jóvenes que llegaron a España de todo el mundo para la preparación de la XXVI edición del gran evento juvenil en curso, junto a los jóvenes catalanes y de toda España. “La mayoría de los jóvenes que transcurrieron estos días de convivencia en Barcelona –escriben los músicos del Gen Rosso- provienen de Francia, Italia, Alemania, República Checa, Polonia, Bélgica…; pero también de Australia, Indonesia, Brasil, Canadá, Uganda, Siria…”. El cardenal de Barcelona, Luis Martínez Sistach acababa de lanzar un reto a los jóvenes: “Estar presentes en todas partes, amando a todas las personas sin distinción alguna, pero con un amor preferencial por los pobres”, ayudándolos a amar a Jesús según el ejemplo de María. «Amar a las personas sin hacer ningún tipo de distinción – dicen los del Gen Rosso- nos pareció el mejor boleto de entrada para nuestro concierto de la noche» Para el conjunto no son nuevas en las Jornadas mundiales de la Juventud, les preguntamos qué esperan de esta de Madrid: “Hoy muchos jóvenes reaccionan contra un sistema que no piensa como ellos; la JMJ es otra expresión de rebelión, pero no contra algo o alguien sino a favor de los valores evangélicos que Jesús nos dejó”.
Al regreso de una gira por Cuba, Jamaica, China y Marruecos… les pedimos que dieran una breve impresión: “Habría mucho que decir… ¡pero damos sólo un msj! Un denominador común que hemos encontrado, también aquí, es el constatar que un mundo unido es posible, que no es utopía. Hemos encontrado jóvenes, en estos países tan distintos, muy disponibles a compartir nuestros valores, a sumarse al ideal de la fraternidad universal”. El concierto que presentaron es nuevo: “Dimensión indeleble”. ¿De qué se trata y que querrían transmitir a los espectadores? «Como siempre, el Gen Rosso trata de donar su identidad mediante los conciertos. “Dimensión indeleble” tiene algo más: quiere transmitir los mil signos que han quedado en nuestra alma al entrar en contacto con tantísimos jóvenes de todo el mundo. Muchos de ellos han entrado a formar parte de nuestra vida y nosotros en la de ellos. Esta “dimensión” también llega al corazón del espectador». Un periódico catalán, el día después del concierto del 13, subrayó la internacionalidad del grupo, vivida en la fraternidad, como el elemento más necesario en estos tiempos para construir una sociedad cohesionada. “Nos dejaron el corazón lleno de gratitud a Dios –concluyen los ‘genrossinos’- por habernos donado este primer momento tan bello con los jóvenes de Barcelona. ¡Hemos encontrado una Iglesia joven y viva! Ahora nos espera Madrid”.
Chiara Lubich a la Jornada Mundial de la Juventud en Polonia 1991
Queridísimos jóvenes En esta primera parte, debemos llevar a cabo una tarea que nos dio la Iglesia, es decir, profundizar el tema que caracteriza esta Jornada, y presentar nuestro Movimiento, al menos su sector juvenil, a quien no lo conociera. Profundizar el tema, ‑y ya lo escucharon mencionar en las canciones‑ que dice así: han recibido un espíritu de hijos» (Rom. 8, 15); y además presentar el Movimiento. El carisma del Movimiento de los Focolares, de hecho, consiste fundamentalmente en esto: despierta en los corazones una conciencia nueva de la realidad de ser hijos de Dios, y de serlo hoy, según los planes que El tiene pensados para nuestro tiempo. «Han, nos repite este carisma, han recibido un espíritu de hijos».
Recordemos el inicio del Movimiento. En el marco de la segunda guerra mundial, que sembraba por doquier destrucción completa, aquí está, por decirlo así, la gran revelación que el Espíritu ofreció a nuestro espíritu: Resplandece sobre vuestras cabezas un sol radiante: es Dios, Dios que es Amor, Dios que los ama inmensamente, que tiene contados incluso los cabellos de vuestra cabeza… El es el Padre y ustedes son sus hijos. Y una fe formidable en Dios que nos ama entró, desde ese momento, en el alma de los primeros miembros del Movimiento. Fe que después, cuantos en los años siguientes se fueron agregando, sintieron también ellos irrumpir con fuerza en sus corazones. Fe que les dio la fuerza de arriesgarlo todo en la vida con tal de ser fieles a esta extraordinaria vocación: comportarse como hijos de Dios. Llevar una vida en unión con el propio Padre del Cielo; ver en Dios Padre, en Dios Amor, el Ideal de la propia vida. El está por encima de todos sus pensamientos y El ocupa el primer lugar en sus corazones. Y haciendo así, todas sus aspiraciones fueron satisfechas completamente. Con El encontraron la plenitud de la alegría, la felicidad, aquella felicidad que hoy los jóvenes de todas las latitudes anhelan como ideal, pero que raramente alcanzan porque la buscan, muchas veces, en el afán de poseer, en el tener más que en el ser, la buscan en las diversiones o en simples metas terrenas.
Nuestros jóvenes tratan de aspirar a mucho más y lo que otros piensan no alcanzar, ellos confían en hacerlo y trabajan para conseguirlo. Pueden dar testimonio al mundo entero (y quieren darlo, antes que nada, a sus coetáneos, como ustedes) que, porque viven como hijos de Dios, poseen el talento por excelencia, una fuerza interior superior, una nueva confianza, que los ayuda a ver accesibles las metas a las que los jóvenes hoy aspiran. Además nuestros jóvenes, sabiendo que Dios no sólo es creador del universo y de sus personas, sino que está presente y conduce la historia, están convencidos de que El tiene también proyectos maravillosos para cada uno de ellos. Entonces, mientras que los jóvenes de hoy, en su mayoría, únicamente piensan en un futuro inmediato, toman decisiones a corto plazo y posponen las opciones más serias, nuestros jóvenes programan sus vidas, pero no siguiendo únicamente sus propios criterios. Tratan, en cambio, de armonizar su actuación personal con la intervención de la providencia de Dios en el mundo; por consiguiente, se sintonizan con su divina voluntad y la viven plenamente, conscientes de haber emprendido junto a los demás una divina y maravillosa aventura.
Proyecto Ratan, Brasil
“Me llamo Sandra, soy empresaria desde los 30 años; actualmente, propietaria y directora de tres empresas del campo artesanal. Trabajo como diseñadora con fibras tropicales de la Amazonia, y desarrollo una investigación en esa zona. Fui siempre sensible a las necesidades de las personas menos favorecidas. Diría que forma parte de mi naturaleza dedicarme a aquellos que tienen mayormente necesidad de ayuda y de solidaridad. Ya desde muy joven trabajé con los detenidos en una cárcel, después, como directora de una empresa. Siempre traté de transmitir mis conocimientos para la promoción de otras personas, ofreciendo una formación profesional y oportunidades de trabajo. En 1999, una tragedia familiar cambió completamente mi vida. En un momento, la “isla” maravillosa en la cual vivía se derrumbó. De golpe, me faltó la tierra debajo de los pies. Estaba desesperada. En ese momento de gran sufrimiento, se profundizó la relación con algunas amigas del focolar, que había conocido tres años antes. Encontré un gran apoyo de parte de ellas y de a poco comencé a levantarme nuevamente. Habiendo conocido la experiencia de Chiara Lubich, sentí que un reflejo de su luz me daba la esperanza de encontrar una salida al final de aquel túnel. Comprendí que era un ejemplo que me contagiaba. Así, tuve fuerza para comenzar de nuevo. En el 2009 participé del Congreso del Diálogo con personas de convicciones no religiosas en la Mariápolis Ginetta, la ciudadela de los Focolares que está cerca de San Pablo. Me sentí motivada y comencé a colaborar concretamente con ellos. Se dio la posibilidad de abrir un curso para realizar trabajos hechos a mano con fibra de coco y de palmas de “buriti”, plantas originarias de Brasil. Viniendo de una familia de artesanos especialistas en el uso de fibras vegetales, traté de desarrollar un trabajo que, además de valorizar la mano de obra, pueda garantizar la conservación del ambiente. Nació el proyecto Ratan. Actualmente, nuestro taller trabaja tres veces por semana y a él asiste un grupo de ocho jóvenes. Lo lleva adelante una ejecutiva de la empresa y yo hago la supervisión y la orientación en los diseños. Son productos que sirven para la decoración, como vasijas, cajitas, etc., en las que se utiliza la técnica del tejido de hilos. A fin del año pasado, vivimos una tarde cultural, con la presentación de los trabajos y la venta de algunas piezas. Este año ya comenzó una segunda etapa, con una ampliación en la gama de trabajos. Siendo un curso profesional, los jóvenes podrán inserirse después en el mercado laboral. Las inscripciones siguen en aumento. Esta actividad es un don para mí. Comprendo que también yo recibo, y, a veces, mucho más que ellos. Siento una alegría enorme en el poder colaborar. Desde que comencé a dedicarme a esto renací, y mientras viva quiero seguir trabajando por esta causa.” S.G.
Papa Benedicto a los jóvenes de la JMJ
Miles de jóvenes de todo el mundo se han dado cita en Madrid en ocasión de la JMJ 2011.
El Santo Padre ha elegido como título y argumento para profundizar durante estos días una frase del apóstol Pablo: «Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe» (cf. Col 2, 7). Retomamos algunos pasajes de su Mensaje, fechado el 6 de agosto del año pasado, y que vale realmente la pena de leerlo integralmente.
«…Nuestra mirada se dirige ahora a la próxima Jornada Mundial de la Juventud, que tendrá lugar en Madrid, en el mes de agosto de 2011. Ya en 1989, algunos meses antes de la histórica caída del Muro de Berlín, la peregrinación de los jóvenes hizo un alto en España, en Santiago de Compostela. (…) quisiera que todos los jóvenes, tanto los que comparten nuestra fe, como los que vacilan, dudan o no creen, puedan vivir esta experiencia, que puede ser decisiva para la vida: la experiencia del Señor Jesús resucitado y vivo, y de su amor por cada uno de nosotros.
(…) Muchos manifiestan la aspiración de construir relaciones auténticas de amistad, de conocer el verdadero amor, de fundar una familia unida, de adquirir una estabilidad personal y una seguridad real, que puedan garantizar un futuro sereno y feliz… Sí, la cuestión del lugar de trabajo, y con ello la de tener el porvenir asegurado, es un problema grande y apremiante, pero al mismo tiempo la juventud sigue siendo la edad en la que se busca una vida más grande. Al pensar en mis años de entonces, sencillamente, no queríamos perdernos en la mediocridad de la vida aburguesada. Queríamos lo que era grande, nuevo. Queríamos encontrar la vida misma en su inmensidad y belleza… Desear algo más que la cotidianidad regular de un empleo seguro y sentir el anhelo de lo que es realmente grande forma parte del ser joven. ¿Se trata sólo de un sueño vacío que se desvanece cuando uno se hace adulto? No, el hombre en verdad está creado para lo que es grande, para el infinito. Cualquier otra cosa es insuficiente. San Agustín tenía razón: nuestro corazón está inquieto, hasta que no descansa en Ti. El deseo de la vida más grande es un signo de que Él nos ha creado, de que llevamos su “huella”. Dios es vida, y cada criatura tiende a la vida; en un modo único y especial, la persona humana, hecha a imagen de Dios, aspira al amor, a la alegría y a la paz.
(…) Vosotros sois el futuro de la sociedad y de la Iglesia. Como escribía el apóstol Pablo a los cristianos de la ciudad de Colosas, es vital tener raíces y bases sólidas. Esto es verdad, especialmente hoy, cuando muchos no tienen puntos de referencia estables para construir su vida, sintiéndose así profundamente inseguros. El relativismo que se ha difundido, y para el que todo da lo mismo y no existe ninguna verdad, ni un punto de referencia absoluto, no genera verdadera libertad, sino inestabilidad, desconcierto y un conformismo con las modas del momento. Vosotros, jóvenes, tenéis el derecho de recibir de las generaciones que os preceden puntos firmes para hacer vuestras opciones y construir vuestra vida, del mismo modo que una planta pequeña necesita un apoyo sólido hasta que crezcan sus raíces, para convertirse en un árbol robusto, capaz de dar fruto.
Para poner de relieve la importancia de la fe en la vida de los creyentes, quisiera detenerme en tres términos que san Pablo utiliza en: «Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe» (cf. Col 2, 7). Aquí podemos distinguir tres imágenes: “arraigado” evoca el árbol y las raíces que lo alimentan; “edificado” se refiere a la construcción; “firme” alude al crecimiento de la fuerza física o moral. Se trata de imágenes muy elocuentes.
(…) Queridos amigos, construid vuestra casa sobre roca, como el hombre que “cavó y ahondó”. Intentad también vosotros acoger cada día la Palabra de Cristo. Escuchadle como al verdadero Amigo con quien compartir el camino de vuestra vida. Con Él a vuestro lado seréis capaces de afrontar con valentía y esperanza las dificultades, los problemas, también las desilusiones y los fracasos.
(…) “La fe es ante todo una adhesión personal del hombre a Dios; es al mismo tiempo e inseparablemente el asentimiento libre a toda la verdad que Dios ha revelado” (Catecismo de la Iglesia Católica, 150). Así podréis adquirir una fe madura, sólida, que no se funda únicamente en un sentimiento religioso o en un vago recuerdo del catecismo de vuestra infancia. Podréis conocer a Dios y vivir auténticamente de Él, como el apóstol Tomás, cuando profesó abiertamente su fe en Jesús: «¡Señor mío y Dios mío!».
(…) “Cada creyente es como un eslabón en la gran cadena de los creyentes. Yo no puedo creer sin ser sostenido por la fe de los otros, y por mi fe yo contribuyo a sostener la fe de los otros” (Catecismo de la Iglesia Católica, 166).
(…) La victoria que nace de la fe es la del amor. Cuántos cristianos han sido y son un testimonio vivo de la fuerza de la fe que se expresa en la caridad. Han sido artífices de paz, promotores de justicia, animadores de un mundo más humano, un mundo según Dios; se han comprometido en diferentes ámbitos de la vida social, con competencia y profesionalidad, contribuyendo eficazmente al bien de todos. La caridad que brota de la fe les ha llevado a dar un testimonio muy concreto, con la palabra y las obras. Cristo no es un bien sólo para nosotros mismos, sino que es el bien más precioso que tenemos que compartir con los demás. En la era de la globalización, sed testigos de la esperanza cristiana en el mundo entero: … si creéis, si sabéis vivir y dar cada día testimonio de vuestra fe, seréis un instrumento que ayudará a otros jóvenes como vosotros a encontrar el sentido y la alegría de la vida, que nace del encuentro con Cristo.
(…) La elección de creer en Cristo y de seguirle no es fácil. Se ve obstaculizada por nuestras infidelidades personales y por muchas voces que nos sugieren vías más fáciles. No os desaniméis, buscad más bien el apoyo de la comunidad cristiana… Queridos jóvenes, la Iglesia cuenta con vosotros!
BENEDICTUS PP. XVI
Vaticano, 6 de agosto de 2010
Vivir el Carisma: Naturaleza y Vida física
Recita el salmo: “Enséñanos a contar nuestros días y adquiriremos un corazón sabio” (Sal. 90, 12). Esta sabiduría es la madre que nos enseña a reconocer lo que no pasa nunca y lo que se manifiesta de la eternidad a través del tiempo. Sana los temores, deshace la ansiedad, colma los vacíos, abre nuestro corazón hacia el prójimo. “La enfermedad me ha sanado –escribe una madre- me ha dado una visión completa de la existencia que el frenesí de la vida me había quitado. Ahora me parece que sé amar a mi familia”. Caridad que se perpetúa en el tiempo son las biografías que nos recuerdan a los que han pasado por esta tierra antes que nosotros y permiten que el mensaje de su existencia llegue hasta nosotros. Es la comunión de los santos. Este aspecto subraya la relación del hombre no sólo con la Vida sino también con la Muerte. Chiara Lubich en 1973 escribió: “Si hoy tuviese que dejar esta tierra y me pidiesen una última palabra para expresar nuestro Ideal, les diría -segura de que me comprenderán en el sentido más exacto- : “Sean una familia”.¿Hay entre ustedes quienes sufren por pruebas espirituales o morales? Compréndanlos como y más que una madre, ilumínenlos con la palabra o con el ejemplo. No dejen que les falte, es más, incrementen alrededor de ellos el calor de la familia.¿Hay entre ustedes quienes sufren físicamente? Que sean los hermanos predilectos. Sufran con ellos. Traten de comprender hasta el fondo sus dolores. Háganlos partícipes de los frutos de su vida apostólica para que sepan que ellos han contribuido más que los demás.¿Hay quien muere? Imaginen que ustedes están en su lugar y hagan cuanto desearían que les hicieran a ustedes hasta el último instante.¿Hay alguien que goza por un logro o por cualquier motivo? Gocen con él para que su consolación no se vea entristecida y el ánimo no decaiga, sino que la alegría sea de todos.¿Hay alguien que se va? No dejen que se vaya sin haberle llenado el corazón de una sola herencia: el sentido de la familia, para que lo lleve adonde lo han destinado.No antepongan nunca ninguna actividad de ningún tipo, ni espiritual ni apostólica, al espíritu de familia con los hermanos con los que viven”.
IV Simposio Internacional de Diálogo Judeo-Cristiano
“Es un honor para nosotros – dicen los promotores del simposio – que Argentina haya sido elegida como país organizador, y en particular la ‘ciudadela Lia Brunet’ (a 250 km de Buenos Aires), punto de encuentro anual de judíos y cristianos”. El simposio será precedido por una serie de actividades, a comenzar por la “Jornada de la Paz”, que se celebrará el 21 de agosto, siempre en la ciudadela de los Focolares. Estas Jornadas se realizan desde el año 1997 y se fueron sucediendo con creciente participación de miembros de las comunidades judías y cristianas de Argentina y también del Uruguay. Cada Jornada presenta un lema que es desarrollado por representantes judíos y cristianos, con espacios de reflexión, testimonios, diálogo y recreación. Es una de las expresiones de los vínculos que establece el Movimiento de los Focolares con integrantes de la comunidad judía de Argentina.
La segunda actividad, destinada a los adolescentes, se desarrollará en forma paralela a la “Jornada de la Paz”, con el título «Conocí gente que quiere un mundo unido… ven a conocerla tú también». La propuesta está organizada por los movimientos Chicos y Jóvenes por un Mundo Unido de los Focolares y el Centro Ana Frank, Argentina. Los adolescentes y jóvenes de ambas instituciones en estos últimos meses están participando activamente en la construcción de esta jornada. Será un programa muy dinámico que contará con: talleres, juegos, debates, paneles de intercambio, muestras. Objetivo: promover la integración en la diversidad cultural, social, política y religiosa; el respeto por el otro, con todo lo que implica; y el abordaje de problemáticas juveniles que hacen a todo tipo de violencia, discriminación y exclusión. Tiene como destinatarios a adolescentes y jóvenes provenientes de Argentina y otros países como Chile, Uruguay, México, Estados Unidos, Italia, Jerusalén, entre otros. La serie de eventos culminarán con el IV Simposio Internacional de Diálogo Judeo-Cristiano, desde el 21 al 25 de agosto, con el auspicio del Ministerio de Culto argentino. Previstas las intervenciones de académicos judíos y cristianos de varias partes del mundo que profundizarán sobre el argumento elegido para esta edición: “Identidad y Diálogo: una experiencia que continúa”. El cierre está previsto en la Cancillería argentina.
Eslovenia: religiosos de todo el mundo con María Voce
Al final de su visita a la comunidad de Eslovenia, María Voce y Giancarlo Faletti se encontraron con las secretarías de los religiosos, adherentes al Movimiento de los Focolares y reunidas para su tradicional encuentro de agosto, que ya desde el año pasado tiene lugar en esta nación. Eran setenta religiosos: seis de Asia, siete de África, cinco de Brasil, uno de Canadá; el resto de casi todos los países de Europa. Es la tercera vez que la Presidente de los Focolares se reúne con los dirigentes de esta consistente parte del Movimiento y por lo tanto el conocimiento es cada vez más profundo, sencillo y familiar. Se reunieron en el “Centro Mariápolis Spes” (Upanje, Eslovenia), reconstruido con buen gusto y fantasía a partir del antiguo edificio del correo, cuando todavía se usaban caballos. Tanto que el establo se transformó en un comedor de ladrillo ¡que daría envidia tantos restaurantes típicos! El encuentro empezó con una serie de experiencias de algunos religiosos que pusieron en evidencia los efectos positivos de su relación con el Movimiento y los frutos de la espiritualidad de la unidad vivida por ellos, en especial entre los jóvenes y en la comunión entre ellos y con otros religiosos. Las preguntas que dirigieron a la presidente y al co-presidente de los Focolares, se referían a las varias situaciones de la vida religiosa hoy. “¿Cómo nos puede ayudar ante estos retos la espiritualidad de la unidad?”, “Después de tres años de la partida de Chiara, ¿a qué punto estamos?”, preguntan. La respuesta de María Voce no se hizo esperar: “Siento que tengo que agradecer a Dios porque está actuando. Nuestra tarea consiste en actualizar el mensaje de Chiara Lubich. Miremos atrás sólo para ir a las raíces de lo que tenemos que hacer hoy”. Sobre las nuevas generaciones: “Dejar la iniciativa a los jóvenes, en unidad entre la primera y la segunda generación”. Un misionero, proveniente de África, hizo presente las dificultades de la reinserción: “No hay novedad más grande que Jesús, que nos pide un don cada vez mayor, a cada momento –subrayó María Voce- Él no pierde el encanto, el atractivo, pero es necesario vivir con radicalidad y concretamente”. Se concluyó con un compromiso para llevar adelante juntos: “Que la comunión sea cada vez más efectiva, afectiva, explícita, sin reservas”. La Eucaristía selló este deseo común. De C. Donegana [nggallery id=60]
Congreso Panafricano de los Sacerdotes de los Focolares
110 sacerdotes, provenientes de 20 países africanos, se reunieron en Nairobi del 27 de julio al 4 de agosto para la “Panafrican Conference of Focolare Priests”. “En la Iglesia Familia de Dios: un camino para los sacerdotes hoy” es el título del encuentro. Con reflexiones, talleres y plenarias se afrontaron algunos de los desafíos más álgidos para la Iglesia en el Continente. ¿Qué tienen en común estos sacerdotes, de tan distinta extracción, llegados a la ciudadela de los Focolares “Piero Pasolini”, en los alrededores de Nairobi (Kenia)? Contribuir al redescubrimiento y a la actuación del designio de Dios sobre este continente, a la luz de la propuesta evangélica del Movimiento, presente en tierra africana desde hace casi cincuenta años. «Deseo de corazón que la presencia del Resucitado en medio de ustedes pueda ser una luz para entender cómo Jesús desea al sacerdote en nuestros días y cuál puede ser su servicio a la Iglesia de África, tan amada por todos nosotros y que tanto puede dar al mundo entero», escribió María Voce, presidente del Movimiento, en un mensaje enviado para la inauguración de la Conferencia. El Congreso expresó con la vida las grandes potencialidades de los sacerdotes africanos. Lo subrayó también la edad promedio de los presentes -35 años más o menos- muchos de los cuales ya con encargos de responsabilidad.
En África, definida por alguno de los mismos participantes como el “África de las crisis”, la realidad de la familia, tan fundamental en la cultura social y eclesial africana, ha asumido nueva luz e intensidad desde la óptica del amor recíproco y de la unidad del Evangelio. El descubrimiento de Jesús crucificado y abandonado, como clave de la reconciliación y la paz, llevó a no sentir que fuese utopía este reto, a entrar dentro de las heridas y a sentirse protagonistas de un camino de renovación y de comunión que tiene como medida el amor sin medida de Cristo. Todo se desarrolló según un ritmo de escucha e intercambio, con meditaciones y reflexiones, momentos de comunión y de estudio en grupos y plenarias para comunicar y tratar de integrar dicha visión en una propuesta cultural y vital para la Iglesia en África. Todo enriquecido con experiencias de vida ya en acto “donadas –como escribió uno de los participantes- bajo la forma de narraciones ciertamente no científicas y sin embargo con un estilo familiar, ordenado, que llevaba a meditar”.
Se renovó así la conciencia del llamado, a redescubrirse en el fondo del corazón como hombres de Dios llamados a evangelizar África con las armas del espíritu del amor y de la unidad. Con la capacidad de ir contra la corriente, como subrayó durante su intervención en el Congreso, el Nuncio Apostólico de Kenia, Mons. Paul Alain Lebeaupin. Mientras que el Arzobispo de Mombasa, Boniface Lele, invitó a los presentes a tener una gran apertura y a ayudarse recíprocamente entre sacerdotes, para ser, con toda la humanidad, coherentes servidores de la “Familia de Dios”.
Las naciones de proveniencia iban desde el Atlántico hasta el Mar Índico, abrazando la parte central y austral de África: Guinea-Bissau, Burkina Faso, Costa de Marfil, Sierra Leona, Togo, Benín, Nigeria, Camerún, República Centroafricana, Gabón, República Democrática del Congo, Angola, Zambia, Sudáfrica, Kenia, Tanzania, Uganda, Ruanda, Burundi y Madagascar. A cargo del Centro Sacerdotal de los Focolares
Vivir el Carisma: espiritualidad y oración
Contaba Natalia Dallapiccola, la primera chica del núcleo inicial que siguió a Chiara Lubich en la aventura del focolar: «Una noche alrededor de una mesa, la única superviviente de varios muebles, a la luz de la vela, porque por los apagones no se podía usar la luz eléctrica, Chiara leyó en el Evangelio: “Ámense los unos a los otros como yo los he amado. De esto reconocerán que son mis discípulos: si se aman los unos a los otros”. Estas palabras –prosiguió Natalia- cayeron como gasolina sobre el fuego. Nosotros queríamos saber cuál era el deseo más profundo de Jesús, una palabra que nos dijera enseguida lo que Él quería de nosotros. Y he aquí la palabra síntesis, el eureka de nuestra búsqueda». Y concluía: «Entonces, antes de ir a la escuela, antes del trabajo en la oficina, antes de comprar algo, incluso antes de ir a los pobres, antes de rezar, es necesario que tengamos entre nosotros el mismo amor de Jesús –nos dijimos- porque esto es lo que Él quiere. Cuando salimos de allí sentíamos que la vida había cambiado, tenía un sabor diferente, había encontrado su verdadero sentido».
Eslovenia: se concluye la visita de María Voce
Miércoles 3 de agosto. En una límpida jornada María Voce y Giancarlo Faletti visitaron el centro histórico de Liubliana y el Parlamento, recordando la visita efectuada por Chiara Lubich en 1999, allí saludaron al vicepresidente el Dr. Vasja Klavora. Los acogió con exquisita cordialidad, haciéndolos visitar después las aulas del Senado y de la Cámara: una mirada a la historia pasada y presente de Eslovenia. Seguidamente María Voce y Giancarlo Faletti se reunieron con el pastor evangélico Geza Filo. Les agradeció por el aporte de los Focolares a la causa ecuménica y social del país, y definió a Chiara Lubich, a nombre de su obispo, como una persona “enviada por Dios”. Un momento realmente lleno de significado fue el encuentro en el gimnasio de Medvode, a pocos kilómetros de la capital, con alrededor de 1200 personas, provenientes de todas partes del país, como prueba de la vitalidad de tantas comunidades locales, resaltaban numerosas parejas jóvenes con un enjambre de niños vivaces. Un “pueblo” ordenado y compuesto se presentó ante María Voce y Giancarlo Faletti con cantos y la narración de la historia de los Focolares en Eslovenia: un acontecimiento luminoso, que conoció también etapas de sufrimiento. No hay nada superfluo en los testimonios ofrecidos por representantes de las distintas generaciones, al calor de una familia que se reúne para celebrar una fiesta, por largo tiempo esperada.
Después le tocó a María Voce y a Giancarlo Faletti entretejer un diálogo con los presentes mediante una densa red de preguntas planteadas por jóvenes y adultos, por sacerdotes y parejas, sus respuestas ofrecieron un aporte rico de experiencia y sabiduría. “¡Ánimo!”, concluyó María Voce en idioma esloveno. Sus intervenciones estuvieron caracterizadas por esta exhortación. Han sido las naciones del Este de Europa, dijo, “las que han podido experimentar un tipo de unidad con ciertos valores, pero que se resquebrajó porque no estaba construida en Dios”, son precisamente ellas quienes, ante la agresividad materialista, deben “hacer descubrir a las otras naciones de Europa que no se puede construir una unidad auténtica si no está basada en Dios”. “Ustedes –agregó- con su experiencia pueden decir que la única revolución con frutos positivos es el Evangelio”. De allí surge la necesidad de “vivir y hablar” de “mejorar” el testimonio mediante la vida y la palabra radicada en el Evangelio, sin temor. Es una auténtica consigna la que María Voce ofrece al pueblo esloveno, en esta tierra donde pudo encontrar tanta armonía. “Esta vida de comunión –concluye- que sentimos apenas llegamos, y que caracterizó esta visita –fruto del amor recíproco- sea total con todos y cada uno. Llevémosla al mundo entero”. La mañana siguiente, 4 de agosto, la Presidente de los Focolares visitó a Mons. Anton Stres, Arzobispo de Liubliana y Presidente de la Conferencia Episcopal Eslovena. Después se encontró con los sacerdotes del Movimiento y los religiosos que viven la espiritualidad de la unidad, concluyeron con la celebración de la Santa Misa en el Santuario de Brezje, a 50 km de la capital. ¡Hasta la vista Eslovenia! Una visita bajo el signo del “vivir las palabras del Evangelio con la radicalidad de los orígenes del Movimiento, y hacerla conocer a todos”. Una consigna fascinante para este pequeño pueblo valiente. Del enviado Mario Dal Bello
Giordani: Implantar a Dios en el alma
[…] Masas de jóvenes se reúnen para recuperar el valor de la vida, que es la religión, y encuentran gracias a su colaboración la energía para renacer de las acciones ordinarias, sociales, amenazadas por múltiples aberraciones, como el uso homicida de la energía nuclear, las tiranías y las guerras, la droga y la práctica de la pornografía.
Se dirá que la nueva conciencia de los jóvenes se queda enredada en corpúsculos, que reducen la fe a un relicario de ideologías cargadas con programas de violencia, forma típica de la exteriorización de la fuerza, bajo la presión de la superficialidad. Pero a pesar de estos corpúsculos que son un revoltijo de política y anarquía se puede conocer la sustancia de la fe con tan sólo observar el comportamiento de los obispos en los países donde está amenazada la libertad, en la vida misma; de creyentes serenos y fuertes que están promoviendo una reacción basada en sus convicciones, después de que la lujuria y el terror de gobernantes violentos y cobardes han ofrecido la demostración más potente de que, sin la fe en Dios, no se vive: se muere. Se muere espiritualmente y a menudo también físicamente, como se puede ver con angustia en los países del tercer mundo.
La tarea de la evangelización radica por lo tanto en implantar a Dios en el alma […] Si Él es todo, también las acciones de nuestra existencia, a favor de los hermanos y no de nosotros mismos, manifestarán toda su inspiración.
[…] La jornada entonces ya no estará hecha solo de acción laboral y de relaciones humanas y de culto hacia la propia persona; sino que se verá enriquecida por una vida íntima más alta, la del espíritu, de la que proviene una dignidad comparable a la libertad que nos garantiza el ser hijos del Omnipotente. Toda la jornada será una íntima presencia Suya, que nos da fuerza en las pruebas, alegría en medio del esfuerzo. De ella nace una evangelización espontánea, de la que tiene necesidad gran parte de la sociedad, la cual no es atea, pero no conoce el Evangelio.
[…] También la existencia del cristiano es vista por él, como quizás también por la mayoría, como una existencia exterior, para ganar, crecer, aprender, divertirse y quizás también para realizar alguna acción interior para desarrollar las virtudes y acercarse a Dios. Pero en la medida que él advierte la necesidad de encauzar todas las acciones de la jornada a la relación con Dios, y por lo tanto de realizarlas en forma distinta, prosiguiendo la encarnación de Cristo, en esa medida él vivirá.
Cada uno, incluso la última criatura enferma, miserable, impotente, puede dar sanidad, enriquecer la humanidad, darle fuerza a los hermanos. Así nada se desperdicia: todo pensamiento, toda palabra, toda acción, dentro de esta perspectiva de la vida creada por Dios, sirve como materia prima para la construcción de Su Reino; y así toda la jornada asume un valor sacerdotal, la vida del hombre asocia las necesidades de la tierra a la vida del cielo.
[…] La interiorización del cristianismo en el alma moderna es por lo tanto, no tanto un problema de reformas institucionales […] cuanto un problema de “metanoia” es decir de continuo renacimiento cotidiano en la medida que se penetra el misterio de Dios, donde el alma está sumergida en su potencia que es el amor.
Città Nuova, n.13, 10/07/1977, p.29.
Iglesia, formar a los formadores
En la sugestiva Abadía de Vallombrosa (Italia), del 17 al 30 de julio pasados, se concluyó la segunda parte del itinerario de estudios iniciado el año pasado y frecuentado por 24 formadores de seminarios de 13 naciones (Paquistán, India, Corea, China, Venezuela, Uruguay, Argentina, Brasil, Polonia, Austria, Suiza, Portugal, Italia). Un “taller abierto” que sorprendió a los participantes, día tras día, por la riqueza de estímulos y contenidos. Teniendo como hilo conductor del curso el trinomio oración-vida-pensamiento, se realizó un trabajo de mucha colaboración entre los participantes y los relatores que intervinieron. Ante los profundos cambios que afectan la vida de la persona en el mundo moderno –pensamos en la gran influencia de la revolución digital- se vuelve necesario una constante actualización también por parte de los formadores ya sea por lo que respecta a la temática, que por lo que se refiere al enfoque educativo de los candidatos al ministerio.
Ya en la Novo millennio ineunte (n. 43) Juan Pablo II invitaba a la Iglesia a convertirse en “casa y escuela de comunión”, también refiriéndose a los “lugares donde se forman los ministros del altar”. Y es para responder a esta expectativa, que los sacerdotes del Movimiento de los Focolares desde hace algunos años promueven este Curso teológico-pastoral para los Educadores de los seminarios, a los que la Congregación para la Educación Católica (organismo de la Santa Sede al servicio de los seminarios de todo el mundo), expresó su pleno apoyo y aprecio desde su primera edición. Fue el mismo subsecretario de la Congregación, Mons. Vincenzo Zani, quien dio inicio a las sesiones de trabajo de este año con un discurso programático sobre “La dimensión comunitaria de la formación”.
El Curso se articula en cuadro semanas presenciales en un bienio. El primer año se presentan las bases del paradigma de comunión aplicado a la delicada tarea de la formación de los futuros sacerdotes. En el segundo, se pasa a la realidad concreta de los varios y complejos aspectos de la formación, subdividiéndola en siete grandes áreas que se refieren: al don de sí y la comunión, el diálogo y el testimonio, la oración, la vida como cuerpo místico, la animación de la comunidad, el estudio y, finalmente, la comunicación al servicio de la comunión. Es por el intercambio de estas áreas que se puede constituir un válido enfoque para una formación no fragmentada sino unitaria del seminarista, integral y armoniosa.
El estudio de cada una se desarrolló mediante una ponencia de apertura, algunos talleres para profundizar los temas relacionados e identificar las líneas formativas de aplicación concreta y una plenaria para compartir el trabajo elaborado por cada grupo. Fue importante el aporte de expertos en el campo teológico, pedagógico y de otras ciencias humanas, junto a la contribución de cada uno de los participantes a partir de su propia competencia y experiencia como formador. A partir de este año el curso está acreditado por el Instituto Universitario Sophia de Loppiano, por lo que los participantes, previa presentación de un trabajo final, obtienen créditos formativos. El interés suscitado y la necesidad de “formación para los formadores” hacen que se prevea la prosecución en los siguientes años.
Entre pupitres y competencias: una mentira no dicha
«Estábamos más o menos a mediados del año escolar, en medio de las actividades extra-curriculares que organiza la escuela en las tardes, pero, para mí que practico atletismo, también en medio de la preparación de una temporada de competencias que estaba por iniciar. Desde hacía tiempo la profesora de italiano había organizado un encuentro con la autora de un libro que habíamos leído. Pocos días antes de la cita mi entrenador me propuso unas competencias que eran precisamente el día del encuentro literario. Empezó el dilema entre las dos elecciones, entre lo que prefería hacer y que era correcto hacer. Traté de fijar mi atención, más que en mis sensaciones en las de ellos dos, de basar mi comportamiento en las consecuencias que habría traído para estas dos personas.
Dado que en el encuentro con la autora no estaba involucrada activamente en ninguna cosa sino sólo como oyente, decidí ir a las competencias. Pero al tratar de comunicar a la profesora mi futura ausencia mi decisión de “tratar de amar” se volvió a presentar fuertemente. De hecho temía que pudiera sentirse mal porque le daba mucha importancia a esta cita, por lo tanto, también por sugerencia de algunas de mis amigas, pensé en inventarme una excusa, una cita médica o un malestar físico, para no asistir al evento evitando correr riesgos. Pero, gracias a la forma como había asumido la cuestión desde el inicio, además de sentir claramente que dicha elección era errada, sentí el valor para afrontar este pequeño reto. Con gran sorpresa de mi parte y de toda la clase, la profesora no tuvo ninguna reacción negativa, es más, me habló de su pasado deportivo y me dio ánimo para la competencia. Las competencias que siguieron fueron las más lindas que haya tenido, por la alegría experimentada y porque la cuestión me demostró cuán importante es que toda decisión se tome por amor, decisión que Dios recoge y multiplica a través de la felicidad que nos dona. La pequeña atención de respetar al prójimo y una pequeña mentira no dicha para hacer triunfar la sinceridad, la lealtad –y de consecuencia también la libertad- y me hicieron sentir ese día una auténtica gen 3! ¿Quiénes son los gen3 para Elena? «Muchachos que tratan de vivir el Evangelio y de llevar la unidad a través de su forma de actuar. La vida gen 3 es la vida cotidiana, normal, pero esa cotidianidad que fija cada momento en la eternidad, una normalidad en donde cada gesto se vuelve excepcional porque está dirigido a Dios y tiende a la conquista del Paraíso».