Igino Giordani: La familia – un templo, una pequeña iglesia

 
En octubre de 1968, Giordani se pronunció ante un grupo de Nuevas Familias.

En octubre de 1968 se dirigió así a un grupo de Familias Nuevas:  “el amor conyugal legítimo está contenido en el amor divino”. Nada menos: el amor que pasa entre esposa y esposo entra en el circuito del amor de la Santísima Trinidad, es el mismo fluido que pasa entre las tres Personas, porque el verdadero amor es Dios, es el Espíritu Santo.

Por lo tanto, amándose entre ustedes, se devuelven el Espíritu Santo: ¡otro sacerdocio! Siempre están en un estado de sacralidad: ¿El sacerdocio que quiere decir?

Estado en el que se da lo sagrado a la sociedad, a la humanidad: y la familia entonces,  da lo sagrado, santifica la sociedad y se santifica a sí misma [1].

 

Octubre de 1969: “El amor conyugal genuino está contenido en el amor divino”, es decir, se incluye en el amor de la Santísima Trinidad.

Cuando amo a mi esposa y mi esposa me ama a mí, cuando amamos a los hijos y los hijos aman a sus padres, pero sobre todo cuando los dos cónyuges se aman, el Espíritu Santo pasa entre ellos como entre el Padre y el Hijo.

Es amor, es la Santísima Trinidad en ellos, es Dios Amor quien vive en ellos. Es por eso que es un ‘gran sacramento’, porque los esposos son los sacerdotes de este sacramento y confieren la gracia del sacramento. Y la gracia se expresa sobre todo en este don, este carisma, de convertirnos en los vehículos del amor de Dios.

Es enorme. Yo amo a mi esposa y actúa el Amor de Dios. Es decir, este amor que pasa entre mi esposa y yo, es el mismo que pasa entre el Padre y el Hijo en la Santísima Trinidad: es el Espíritu Santo. En consecuencia, la vida matrimonial se convierte en una Misa completa, un sacerdocio completo, una Iglesia completa [2].

 

Octubre 1978: Si se vive el sacramento del matrimonio, la familia es un templo, es una “pequeña iglesia”, y lo que pasa entre esposa y esposo es el Espíritu Santo, es el espíritu de Dios. Dios es amor, y visto cristianamente, el amor es un intercambio de Dios entre los miembros de la familia.

Yo digo que el marido se puede santificar amando a su mujer, la mujer se puede santificar amando al marido y ambos se pueden santificar amando también a sus hijos [3].

A Familias Nuevas, 12 de octubre de 1969: Basta con que yo ame a mi esposa, basta con que mi esposa me ame, para que en ella y en mí esté Dios: Nuestra cocina, nuestra sala de trabajo, nuestro comedor se convierten inmediatamente en un templo, un tabernáculo, donde está Dios.

 

(Fuente: LOS ESPOSOS Y LA FAMILIA EN IGINO GIORDANI – (Los esposos y la familia en Igino Giordani) – C. Kim, Città Nuova 2011)

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