Movimiento de los Focolares
Bajo la cruz, María

Bajo la cruz, María

Ave Cerquetti Crocifissione Lienz 1975

Ave Cerquetti “Crocifissione” Lienz (Austria) 1975

«El trágico misterio de la muerte en la cruz, se volcó sobre las pobres mujeres que se encontraban a los pies del patíbulo cuando también cielo y tierra horrorizados se oscurecieron y temblaron. El Padre había abandonado al Hijo; el Hijo había abandonado a la Madre: todo se derrumbaba en el horror y en la tiniebla: sólo aquella mujer quedaba de pie, y a ella se le confió la humanidad abandonada. Nuestro destino quedó en las manos de ella como en el lejano y tranquilo día cuando dijo su primer fiat. Cuando el Padre dirigió la mirada sobre esa colina horrorosa, que se había convertido en el centro sangriento del universo, vio a la humanidad aferrada a esa mujer, bajo el sacrificio cruento del hombre-Dios.

  • Mártir, y más que mártir, – dice san Bernardo.

Bajo la cruz, María. Verdaderamente se puede decir, en cierto sentido, que Jesús tuvo necesidad de ella, no sólo para nacer, sino también para morir. Hubo un momento en el cual desde la cruz, abandonado en la tierra por los hombres, se sintió también abandonado por el Padre del Cielo: entonces se dirigió a la madre, a los pies de la cruz: a la madre que no lo había abandonado y vencía la naturaleza para no caer en esa prueba bajo la cual cualquier mujer se habría derrumbado. Como intuyó Goethe, en el Fausto, el padecer de María y de Jesús en el Calvario fueron un «único dolor». Después, habiendo muerto el hijo, la madre siguió sufriendo. Él, muerto, fue depositado en el regazo de ella: más impotente que cuando era niño. Un Dios muerto ¡en el regazo de una madre! Entonces, sí, ella fue reina. Porque Jesús recapitulaba a la humanidad, era la humanidad completa de todos los tiempos, custodiada en el regazo de María, quien en esa desolación se presenta como la madre y la reina de la familia humana que camina por las calles del dolor. Su grandeza fue similar a su angustia. Pero, como se ve, su majestuosidad fue un primado en el sufrimiento: el único modo para ser la más cercana, inmediatamente próxima, al Crucificado. Si pensamos en el desgarro de María bajo la cruz, en el dolor de la madre por el tormento del Hijo, víctima voluntaria de todas las culpas del mundo y de todos los sufrimientos de los hombres, se intuye la inmensidad de la tragedia padecida; una tragedia cósmica. Y es la medida de nuestra pobreza cuando a ella le dedicamos alguna frase de estampita, alguna pobre jaculatoria … Nos parece que perdemos tiempo sólo meditando, o llorando, por ella: y corremos el riesgo de perder la eternidad, Injertarnos en ese dolor significa incluirnos en la redención. Coloquémonos junto a ella al lado del Crucificado, eligiendo el rol de víctimas y no el de verdugos, abrazando el dolor en contra de las insinuaciones que el dinero nos ofrece, la cruz contra el vicio: para estar después con María sosteniendo sobre el regazo, en medio del abandono, el cuerpo exangüe de Jesús, el cuerpo místico que las persecuciones desangran. Siempre, en los momentos en que la Iglesia esdesgarrada y Cristo sufre en los cristianos, se ve nuevamente a María que recoge en su regazo Su cuerpo llagado. Y porque Cristo reasume a la humanidad, se identificó con la humanidad, he aquí que la Iglesia se asemeja a la misma María que acoge a los pueblos en medio de las guerras» (Igino Giordani, Maria modello perfetto, Città Nuova, Roma, 2001, pp.124-129)

Jesús Abandonado: el Hombre-Mundo

Jesús Abandonado: el Hombre-Mundo

 ©Ave Cerquetti, 'Lunico Bene' - Mariapoli Ginetta (Brasile) 1998

©Ave Cerquetti, ‘L’unico Bene’ – Mariapoli Ginetta (Brasile) 1998

Al inicio de los años ’70 el mundo se encontraba ya interconectado para el “irreversible encuentro entre los pueblos y las civilizaciones del mundo entero, gracias a una verdadera explosión de los medios de comunicación social y del inmenso desarrollo tecnológico”. Chiara Lubich, aun reconociendo lo positivo de esta novedad, advierte a los jóvenes que “no siempre el hombre de hoy está preparado para este encuentro”, a menudo desestabilizador, porque se piensa que el propio modo de pensar sea el único. Y les invita a no confundir los valores absolutos, vinculados a lo Eterno, con las propias estructuras mentales. Ante la pérdida de las certezas, Chiara propone a los jóvenes un modelo a seguir, una llave que les abrirá las puertas para la construcción de un mundo nuevo. “¿Cómo vivir entonces este terrible hoy, en el que parece que por un misterioso cataclismo los más altos valores se tambalean como enormes rascacielos que se doblan y se hacen añicos? ¿Existe una respuesta (…), un medio seguro a tener en cuenta para cooperar con los demás para engendrar el mundo que vendrá?. ¿Existe en la práctica un tipo de Hombre-Mundo que siente, que ha sentido en sí ese terrible terremoto que amenaza con no salvar nada de cuanto hasta ahora se había creído intangible? ¿Que casi duda que la misma verdad absoluta lo abandone a su propio destino, hundiéndolo en la mayor de las confusiones? ¿Existe este Hombre-Mundo que ha sabido superar tan enorme prueba, pagando así por un mundo nuevo que ha vuelto a encontrar en sí y ha generado para los demás? Sí, existe. Pero se intuye inmediatamente que este hombre no podía ser solamente un hombre, sino que tenía que ser “el Hombre”: es Jesús Abandonado. Su humanidad perfecta, pero también débil y sujeta al dolor y a la muerte, es símbolo de toda estructura humana que, aun en sus límites, ha logrado contener en diversas circunstancias algo ilimitado, como la verdad.  En la cruz, próximo a la muerte física y en el abandono, a su muerte mística, Jesús advierte el derrumbe de toda su humanidad, de su ser hombre; de su estructura humana, por decirlo de algún modo, y, en el culmen de ese derrumbe, el Padre permite misteriosamente que dude y que la presencia de Dios en Él, casi se desvanezca. Y por eso grita: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? (Mt 27, 46) Pero precisamente en ese grito, Jesús, porque es Dios, tiene la fuerza para superar ese infinito dolor y da a su carne sufriente la potencia de la inmortalidad, insertándola resucitada en el seno de la Trinidad inmortal.    Y más aún, con este acto fenomenal de aceptación de la más espantosa destrucción que el Cielo y  la Tierra hayan conocido, Jesús da a los hombres la posibilidad de resucitar, en la otra vida, con la resurrección corporal y, en esta vida, con la resurrección espiritual – cuando amamos a Jesús Abandonado- de cualquier muerte, de cualquier destrucción en la que el hombre pudiera encontrarse. “Es Jesús Abandonado (…) el líder seguro para cada joven de este siglo.     Cuando se le ama, Él ofrece a quien le sigue el Espíritu de la verdad, del mismo modo que, después de su muerte en el Calvario, hizo descender sobre los apóstoles al Espíritu Santo”. Los jóvenes, afirma Chiara “siguiéndolo, encontrarán la posibilidad de no temblar frente a cualquier situación, más aún, podrán afrontarla con la seguridad de que toda verdad humana y el Reino de los Cielos, es decir, la Verdad, podrá encontrar -también por su contribución- las nuevas estructuras mentales a nivel mundial”. Y concluye: “A ustedes les corresponde acogerlo profundamente en su corazón como la perla más preciosa que hoy se les puede entregar para su alma, para los pueblos que aquí representan, pero sobre todo para ese mundo nuevo que tiene que ver a todos los hombres unidos. Para ese mundo nuevo que acogerá no a muchos pueblos sino al único pueblo de Dios”. Fuente: Chiara Lubich, Chiara a los Gen – 1970/1974, Ciudad Nueva, ed. 1975, págs. 69-80

Que todos sean uno

Que todos sean uno

20160324-02«Las líneas del Evangelio de Juan, y no sólo de ése, convergen en la frase que para mí, desde hace ya mucho tiempo, ha asumido un significado profundo e infinito: “Que todos sean una sola cosa, como tú, Padre, estás en mí y yo en ti, para que el mundo crea” (cf. Jn 17,21). Así es como deberíamos vivir. […] Éstas son las coordinadas de la unidad que me interesan de manera especial. La unidad en nuestras parroquias, la unidad de los distintos servicios y ministerios, la unidad entre clero y laicos, la unidad entre los presbíteros. La unidad se vuelve creíble sólo si demuestra que no somos nosotros los amos, sino que sólo Él es el Señor. Esta unidad en el ámbito del ministerio sacerdotal me interesa de manera particular. Al mismo tiempo debo mencionar la unidad de la Iglesia, la unidad con aquéllos que se encuentran fuera de los confines de nuestra Iglesia católico-romana, la unidad entre todos aquéllos que se reconocen en la fe en el único Dios, el Viviente, y por lo tanto, con los judíos y los musulmanes. Esa unidad entre la Iglesia y la sociedad, donde la una no está al lado de la otra de forma paralela o ni se contrapone a la otra, sino una Iglesia y una sociedad entran en una relación recíproca, evidenciando que la unidad que Dios dona es la levadura para la sociedad, es la levadura que hace que el ser humano sea libre. Es la unidad la que hace al ser humano plenamente humano, porque puede ser humano en su pleno sentido sólo allí donde Dios tiene derecho a ser Dios plenamente, y por lo tanto, puede donarnos todo lo que quiere donarnos. Y Él quiere donarnos nada menos que Su íntimo misterio: la unidad trinitaria. Sin embargo éste no es un simple programa, porque con los programas no se avanza mucho. Más bien debe convertirse en vida […]. También yo tengo que empezar a vivir esta unidad. Y por esto confío en el hecho de que también ustedes, queridos hermanos y hermanas, puedan ayudarme, y que podamos hacerlo juntos en la reciprocidad». Mons. Klaus Hemmerle De: W. Hagemann, Klaus Hemmerle. Innamorato della Parola di Dio, Città Nuova, Roma 2013, pp. 337-338

La Paz, más allá de la utopía

La Paz, más allá de la utopía

Easter_2016

«Si miramos el mundo con las mil heridas que lo afectan, la unidad y la paz pueden parecer sólo una utopía.

Que la fuerza del Resucitado, que ha vencido para siempre la muerte, y por tanto cada muerte, refuerce en nosotros la valentía de creer, de esperar y de obrar para que, en el mundo, la fraternidad sea la regla de la convivencia entre los diferentes pueblos y culturas.

“¡Deseo a todos una Feliz Pascua, con Jesús resucitado en medio de nosotros!”.

Maria Voce (Emmaus)

   

En Bruselas, Dios llora con nosotros

En Bruselas, Dios llora con nosotros

Dieu-pleure-avec-Bruxelles-© MICHEL-POCHET

“A Bruxelles, Dieu pleure avec nous” © Michel Pochet

En un comunicado intitulado «En Bruselas, Dios llora con nosotros», el Movimiento de los Focolares en Bélgica así se expresa: «Los terribles atentados perpetrados en la mañana del martes (22 marzo) en el aeropuerto de Zaventem y en el subte de Maelbeek, en  el corazón del barrio europeo de Bruselas, nos llena de consternación. Solidarizamos con las víctimas y sus familiares que lloran sus seres queridos y los sostenemos con la oración. Rezamos también por todos los que sufren a causa de la violencia en muchas partes del mundo y por los responsables de estos actos insensatos, en antítesis con la paz. De frente a algo tan absurdo nos surge del corazón una pregunta: ¿Dios mío, nos has abandonado?. La Pasión de Cristo, que conmemoramos el Viernes Santo, nos ayude a creer que cada sufrimiento encuentra eco en el grito de abandono de Jesús en la Cruz y que la resurrección nos hace esperar en el alba de un mundo mejor. Los atentados del martes 22 de marzo son una señal elocuente que nos invita a redoblar nuestro compromiso para que triunfe la paz, fruto de la solidaridad y de la fraternidad. Una propuesta: encontrarnos cada día, en donde estemos, para el TIME_OUT: un minuto de recogimiento por la paz, a mediodía». Fuente: Focolares Bélgica online

¿Armas? No, gracias

¿Armas? No, gracias

20160322-02Ante la situación cada vez más insostenible del conflicto armado difundido en varias partes del mundo, amplios sectores de la sociedad civil siguen movilizándose para frenar la acción de los gobiernos que mantienen con sus decisiones el tráfico de armas, identificado como una de las causas de impiden la solución de los conflictos. Sobre este tema también está comprometido desde hace tiempo el Movimiento de los Focolares en Italia, que a través de la revista Città Nuova y el Movimiento político por la Unidad, especialmente a través de sus escuelas de participación política, siguen desenmascarando la participación de Italia en la producción bélica. De hecho, el país es la sede de bases militares estratégicas y sigue produciendo armas de alta tecnología que llegan también a los países del Medio Oriente, como fue referido por Città Nuova. De los puertos de Cerdeña se embarcan bombas destinadas a Arabia Saudita, un país interesado en el conflicto sirio y líder de una coalición involucrada en la guerra en Yemen, condenada por la ONU, que ya cuenta con miles de víctimas 20160322-01¿Qué se puede hacer? El trabajo de un año, acompañado por expertos en geopolítica internacional ha llevado a la redacción de un manifiesto con solicitudes concretas y ha sido presentado a los diputados y senadores disponibles: • El respeto de la ley 185/90, sobre el «control de la exportación, importación y tránsito de material bélico». Específicamente se pide que se interrumpa la exportación y el tránsito en el territorio nacional de armas dirigidas a países en conflicto o que están cometiendo graves violaciones a los derechos humanos. • La asignación de fondos para la reconversión de la industria bélica para fines civiles, según lo que señala el art. 1,3 de la ley 185/90. • La transparencia y el control de las transacciones bancarias relativas a las importaciones, exportaciones y tránsito de armamento. A estas peticiones se suma también la solicitud de insertar en la agenda política el tema de la integración y la acogida de los prófugos de guerra, y de la inversión de mayores recursos en la cooperación internacional. Los jóvenes promotores del evento del 16 de marzo son muy conscientes de los poderes en juego y de la aparente consideración, aunque benévola, de que sus peticiones sean consideradas ingenuas, pero, como ellos mismos dijeron, «consideramos que tenemos una responsabilidad, que se deriva de los ideales que nos motivan, y por lo tanto, no nos podemos quedar callados ni mirar pasivamente la realidad que nos rodea. Trabajamos en nuestra vida cotidiana para construir la fraternidad y a partir de ello interpelamos a los gobernantes». La reflexión en el Parlamento se vio enriquecida por el aporte de Pasquale Ferrara, diplomático y docente universitario de relaciones internacionales, de Shahrzad Houshmand, teóloga islámica quien da clases en la Pontificia Universidad Gregoriana, del director de Cittá Nuova Michele Zanzucchi, y del profesor Maurizio Simoncelli, co-fundador del Instituto de investigaciones internacionales ‘Archivo desarme’. 20160322-03En la raíz está la espiritualidad de Chiara Lubich, quien cuando vivía todavía ­ en su ciudad natal, Trento, vio los horrores de la Segunda Guerra Mundial, y durante toda su vida sembró semillas para una convivencia pacífica, a través del diálogo con personas de credos y culturas diferentes. Chiara, cuanto tenía apenas 28 años, fue al Parlamento italiano para encontrarse con Igino Giordani, en 1948. «El augurio es que los jóvenes puedan incidir en la agenda política, como habitantes del presente y del futuro» declaró Silvio Minnetti, presidente del Movimiento político por la Unidad de Italia (MPPU). «Los jóvenes nos plantean preguntas, provocadoras, exigentes, y quien está en el quehacer político quiere acogerlas, comprometiéndose en primera persona mediante las decisiones que tiene que votar, pero también iniciando una reflexión seria para dar respuestas concretas». Para poder incidir todavía más en la agenda política, el MPPU de Italia tiene programado organizar en Montecitorio, en los próximos meses, un taller de escucha recíproca e intercambio sobre el manifiesto de los jóvenes, con la participación de parlamentarios, expertos, jóvenes y representantes del Gobierno. Leer también: Construir la paz, cada día (texto del llamamiento)

Gen Verde: tournée en el Extremo Oriente

Gen Verde: tournée en el Extremo Oriente

GV_IMG_3041_resized“Fue el más hermoso, el más conmovedor concierto que viví en mi vida”, “La música de ustedes hace bien al alma”. “Ya no puedo ser indiferente ante mundo que me rodea: debo hacer algo”. Con estos y otros mensajes, los espectadores expresaron su aprobación a “On the other side” (Desde el otro lado), como han titulado al último concierto de la banda internacional Gen Verde, presentado en Hong Kong, Macao y en 4 ciudades de Taiwán (Hualien, Taipéi, Kaohsiung y Taichung) El Gen Verde es una banda de chicas compuesta por una veintena de personas que proceden de 14 países de 4 continentes. Son mujeres que cubren entre ellas todos los roles: son autoras, cantantes, músicas, bailarinas, especialistas en la iluminación, en la cónsola audio-video, en la gerencia, etc. Mujeres que en teatros y estadios repletos y con mucha participación del público, ofrecen un repertorio donde se entrelazan historias personales, llamados, evocaciones, con el cual dan voz a su ideal de unidad, presentado como elemento base para que la humanidad se dirija hacia la fraternidad universal. Al contagioso ritmo de la música pop con los más variados matices, las piezas se completan con coreografías que refuerzan su significado; mientras que al mismo tiempo en la pantalla se encienden algunas palabras clave, ilustradas por gráficas e imágenes de gran impacto artístico. GV_IMG_2761_resizedSerá porque algunos pasajes fueron presentados en los idiomas locales logrando que el mensaje llegue directamente a cada persona; será tal vez porque en los días precedentes al concierto, en tres de estas ciudades, con el apoyo de la comunidad local de los Focolares se involucraron estudiantes de las escuelas superiores y universidades, en el proyecto “Start Now” y con el lenguaje universal de la música condujeron a los jóvenes a un diálogo que iba más allá de las diversidades para construir “juntos” el espectáculo. El hecho es que en cada presentación, la participación y el entusiasmo del público fueron vitales, en el sentido de que los participantes quisieron comprometerse con las artistas en el mensaje que ellas estaban transmitiendo. GV_IMG_3417_resizedLos jóvenes asiáticos demostraron gran sensibilidad para acoger el mensaje del Gen Verde. También en esta latitud se confirmó la expectativa de las nuevas generaciones de querer compartir lo que viven, saliendo de los estereotipos que la sociedad les presenta, en búsqueda de vínculos orientados a la confianza y al altruismo. “Muchos de ellos – cuenta una artista del grupo- nos confesaban el esfuerzo que hacen para vivir en una sociedad competitiva en la cual se vive siempre bajo presión. Al mismo tiempo demostraban una aguda sensibilidad hacia los temas del ambiente, de la paz, de la fraternidad, universal, del diálogo con todos”. “Nos dieron ánimo, energía, entusiasmo, esperanza”, dejó escrito uno de estos jóvenes. Y una chica decía: “Por todos lados nos empujan a que seamos los primeros de la clase; a través de ustedes aprendimos que debemos seguir nuestra conciencia y ser auténticos”. Y un empresario decía: “Mirando a los jóvenes esta noche digo: con jóvenes así, ¡Hong Kong está salvada!” Después de las sangrientas manifestaciones que pocos días antes habían traumado a la ciudad, el concierto reencendió en él la esperanza. Vivir por un mundo más unido allí donde estamos. Es este el mensaje que queda en el fondo del corazón de quienes se encuentran con el Gen Verde, de cualquier cultura y creencia sean. Creo que esto ocurre porque en cada uno de ellos permanece la convicción de que juntos tendrán verdaderamente la fuerza para lograr que el mundo sea mejor.   Foto galleria Hong Kong Foto galleria Taipei  

Algunos eventos en el mundo por el 8° aniversario (14.3.2016) de la muerte de Chiara Lubich

5.3.2016 – Brescia (Italia) En la Universidad católica, congreso “Pablo VI y Chiara Lubich, la profecía de una Iglesia que se vuelve diálogo”, organizado con la colaboración del Instituto Pablo VI en continuidad con las “Jornadas de estudio” que tuvieron lugar en Castel Gandolfo en noviembre de 2014. Entre los relatores estarán: Mons. Vincenzo Zani, Secretario de la Congregación para la Educación Católica; Lucía Albignente, responsable del sector ‘historia’ del Centro Chiara Lubich; el Pbro. Angelo Maffeis, presidente del Instituto Pablo VI; Franco Monaco, político y periodista; Alberto Lo Presti, profesor de Teoría política del Instituto Universitario Sophia. 6.3.2016 – Vicenza (Italia) ‘Más allá de las fronteras’, congreso interreligioso en el Centro A. Onisto – Borgo S.Lucia, 51. Hablarán el obispo emérito de Alepo Mons. Armando Bortolaso, el imán de las comunidades islámicas del Véneto, Dr. Kamel Layachi y Rita Moussallem del Centro para el diálogo interreligioso de los Focolares. El evento se concluirá con un flashmob en la Plaza de los Señores. 6.3.2016 – Olomouc (República Checa) En la sala del arzobispado se desarrollará un programa cultural dedicado a la figura de Chiara Lubich como promotora de paz. Al terminar, el arzobispo Mons. Jan Graubner celebrará la Santa Misa en la catedral. 8.3.2916 – Ischia (Italia) En el auditorio multifuncional de la isla, a las 19.30, velada sobre el tema Trabajo y temas correlativos (dignidad, legalidad, mujer, etc.) Participarán Patience Mollè Lobè (ingeniero civil de Camerún), Antonio Diana (empresario). Moderador Carlo Cefaloni (periodista de Città Nuova experto en problemáticas laborales). 11.3.2016 – Caserta (Italia) Entre música, testimonios, teatro, en el Palacio Real de Caserta (a partir de las 19,30) tendrá lugar una reflexión sobre el pensamiento y la vida de Chiara Lubich con el título: “El atractivo del tiempo moderno”. Con la colaboración de la Diócesis y de la Dirección del Palacio. 12.3.2016 – Sarajevo (Bosnia Herzegovina) La facultad teológica realizará una Jornada abierta sobre Chiara Lubich con el título: “El mensaje de diálogo y de paz”. Estarán presentes personas de otras confesiones cristianas, de otros credos, y de confesiones no religiosas. En la catedral el Card. Vinko Puljić, arzobispo de Sarajevo, presidirá la Eucaristía. 12.3.2016 – Castel Gandolfo (Roma, Italia) Ante la presencia de personalidades eclesiásticas y civiles se realizará en el Centro Mariápolis (Vía de La Salle), a las 17.30 una reflexión sobre el tema: “La cultura del diálogo como factor de Paz”. Además de numerosos testimonios, tomará la palabra la presidente de los Focolares Emmaus María Voce. 12.3.2016 – Manfredonia (Italia) 7ª edición del ‘Premio Chiara Lubich Manfredonia’. Estarán presentes Vera Baboun, alcalde de Belén y Pasquale Ferrara (diplomático y Secretario general del Instituto Universitario europeo de Florencia). Info 12.03.2016 – Solingen (Alemania) En el Centro Mariápolis “Zentrum Frieden”: Con el título “Vivir juntos en la diversidad” el MPPU (Movimiento Político por la Unidad) alemán, invita a una mesa redonda con políticos y funcionarios públicos de la ciudad. Seguidamente se abrirá el diálogo con los ciudadanos sobre el problema de la integración de los refugiados. 12.3.2016 – Milán (Italia) ” Yo a través de ti”. El título subraya cómo el buscar la paz nos hace estar cerca del otro y, al mismo tiempo, nos hace más cercanos de lo que verdaderamente estamos. El evento comprenderá tres momentos distintos, cada uno de los cuales tendrá una duración de media hora, y se repetirá en tres lugares diferentes y en horarios diferentes, para dar la posibilidad de participar en los tres: la Basílica de San Ambrosio, el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, el Instituto Gonzaga. Info 12.3.2016 – Génova (Italia) Siguiendo el itinerario de profundización en la encíclica ‘Laudato si’, en la sala del Consejo Menor del palacio Ducal se tratará el tema: “Las religiones dialogan por la Paz y por el ambiente”. Participarán Huseim Salah (presidente de la Comunidad Islámica de Génova), Giuseppe Momigliano (Rabino jefe de Génova) Gnanathilaka Mahauswewe (monje budista), Andrea Ponta (ingeniero ambiental), Roberto Catalano (centro del Diálogo interreligioso de los Focolares). 13.3.2016 – Bujumbura (Burundi) En el Liceo Scheppen de Nyakabiga, diálogo sobre el tema: “Misericordiosos como el Padre celeste, constructores de paz”. Entre los relatores estará el arzobispo de Bujumbura Mons. Evariste Ngoyagoye. 13.3.2016 – Vung Tau (Vietnam) Durante el congreso anual de los Focolares en Vietnam (la Mariápolis), ante la presencia del obispo Mons. Joseph Tran Văn Toan, quien presidirá la celebración eucarística, se presentará el documental sobre Chiara Lubich: “Historia, carisma, cultura”. 14.3.2016 – Verona (Italia) En el Palacio Gran Guardia se otorgará el “Premio Fraternidad Chiara Lubich por una cultura de paz”, estarán presentes Sharharzad Houshmand (teóloga musulmana) Giuseppe Milán (docente de la Universidad de Padua), Aurora Nicosia (periodista). 14.3.2016 – Trento (Italia) En la Fundación Demarchi, presentación del libro de I. Pedrini: “El otro Novecientos: en el testimonio de Duccia Calderari”. La biografía de Duccia, una de las primeras testigos junto a Chiara Lubich del nacimiento de los Focolares, le permitirá a los relatores: Monica Ronchini investigadora, Giuseppe Ferrandi, director del Museo histórico del Trentino, Lucia Fronza Crepaz, ex diputada, profundizar en la figura de Chiara como constructora de paz. 14.3.2916 – La Habana (Cuba) En el Centro cultural Fray Bartolomé de las Casas, presentación de la figura di Chiara en relación a la paz, estará presente el Nuncio Apostólico Mons. Giorgio Lingua. Seguirá un concierto del Grupo de Música Antigua ‘Ars Longa’. 14.3.2016 – Houston, Texas (USA) “Unidad en la diversidad”. Es el título de la conferencia interreligiosa que tendrá lugar el 19 de marzo, en la Universidad de San Thomas.Será presidida por la celebración en la capilla de San Basilio, de la Misa católica que será celebrada por el Arzobispo de Galveston-Houston, Mons. Joseph Anthony Fiorenza. Entre los relatores estarán, además del arzobispo, el imán Qasim Ahmed (del Instituto Islámico), el rabino Steve Morgen (de la Congregación Beth Yeshurun) y Therese Lee (de los Focolares). Info 14.3.2016 – Manila (Filipinas) En el marco de las celebraciones del 50º de la llegada de los Focolares a Asia, se realizará, en la Universidad de La Salle, un simposio sobre el tema: “El carisma de la unidad una herencia fuera del tiempo”. Numerosas personalidades religiosas conducirán la reflexión sobre el aporte de Chiara Lubich a la unidad entre las Iglesias, entre las religiones y en la sociedad, y sobre la reciprocidad evangélica, que es su estilo de vida característico y crea fragmentos de fraternidad. 14.3.2016 – Roma – Santuario Divino Amor A las 18,30 Santa Misa. Será celebrada por el Card. João Braz de Aviz, prefecto de la Congregación para la vida consagrada. Info 16.3.2016 – Roma – Cámara de diputados. Presentación de un manifiesto con propuestas concretas por la paz, el desarme y la reconversión industrial. Para recibir en el Parlamento a los Jóvenes por un Mundo Unido, quienes junto al Movimiento Político por la Unidad y las Escuelas de participación han promovido la iniciativa, además de varios diputados. Estará presente la presidente de la Cámara, Boldrini y el Ministro de Asuntos Exteriores, Gentiloni. 16.3.2016 – Sevilla (España) En el Seminario Metropolitano, el prof Manuel Palma, vicedirector del centro de Estudios Teológicos de Sevilla, hablará de Jesús príncipe de la paz en la espiritualidad de Chiara Lubich. Seguirá un excurso sobre la paz en el Islam presentado por el Imán Allah Bashar de la mezquita del rey Abdul Aziz Al Saud de Marbella, Málaga), quien hablará también de su relación con Chiara Lubich. 18-20.3.2016 –Milano (Italia) – Fieramilanocity Dentro de la feria internacional se preparará una exposición del proyecto de Economía de Comunión en el cual, en formas distintas, se presentará el mensaje de paz que Chiara Lubich sigue dando al mundo. Info 19.3.2016 – Perth (Australia) En la Plaza de Northbridge, estreno de un video clip sobre la Paz realizado por los jóvenes y recolección de firmas para el llamado #Signup4peace. Habrá programas de animación también para los más pequeños. Estará presente el obispo auxiliar de Perth, Mons. Donald George Sproxton.

Dos empresas, una única historia de comunión

Dos empresas, una única historia de comunión

02_fam blv«Desde hace más de 40 años –se presenta Livio de la provincia de Cuneo (Italia) – llevo adelante la empresa de la familia, en la dirección están también mi esposa, nuestros cuatro hijos y, desde el extranjero, mi hermana. Junto a 28 empleados trabajamos en el sector de tratamientos de galvanización de manivelas, tanques, silenciadores para motocicleta, partes automotrices, implementos para hacer gimnasia, etc. Es un revestimiento estético pero sobre todo es resistente a la corrosión. Desde hace algunos años tratamos de regirnos según los principios de la Economía de Comunión, un proyecto que conjuga la necesidad de generar ganancias con la aspiración de ayudar a quien pasa necesidad, poniendo en el centro a la persona. Y así también con los empleados, entre socios, con los clientes, los proveedores y también con la competencia. Después de un largo período de constante desarrollo, surgió inesperadamente una grave crisis que todavía hoy afecta a muchas empresas como la nuestra. Naturalmente no quisimos darnos por vencidos y seguimos haciendo todo lo que está a nuestro alcance para tratar de encontrar nuevos clientes. Sin dejar de creer nunca en este nuevo modo de concebir la economía. 06_Bertola srlEn el 2014 hospedamos, como potenciales clientes, a tres exponentes de un importante grupo automovilístico alemán. Después de la presentación técnica, a cargo de mis hijos y otros colaboradores, viendo que los visitantes estaban bien impresionados y curiosos, hablamos de la Economía de Comunión y de su desarrollo en el mundo. Les contamos también del nacimiento en Europa de AIEC y en Italia de AIPEC (de la que soy presidente): dos asociaciones de empresarios cuya gestión empresarial está inspirada en la “cultura del dar”. Al final, al proponernos un interesante contrato, que se mantiene todavía, declararon: “Estamos sorprendidos al constatar que, a pesar de que su realidad productiva tiene fuerzas limitadas, logran realizar un proceso de galvanización que es de por sí muy complejo”. Lo que hace la diferencia será seguramente el sistema de elaboración que en tantos años hemos logrado desarrollar, pero también el relato de algunas experiencias entre las cuales la de la contratación, en un momento de poco trabajo, de algunos inmigrantes y de dos jóvenes que por motivos distintos atravesaban una serie de dificultades y del esfuerzo de todos nosotros de establecer con ellos relaciones de fraternidad también fuera del horario laboral. Otro factor que nos diferencia pensamos que es que “privilegiamos las relaciones” en el sano desapego de querer hacer negocios a toda costa». 20160321-02«Soy la administradora de una empresa que fabrica piezas mecánicas–prosigue Enrica de Turín (Italia)-. También nosotros tenemos 28 empleados. Mi padre, con quien muy temprano empecé a trabajar, me transmitió los valores de la solidaridad y del espíritu de sacrificio; el compromiso de mejorar siempre. En el 2000 los contratos se redujeron al mínimo, pero no despedimos a nadie y en Navidad, por falta de liquidez, decidimos pagar los aguinaldos con nuestros ahorros personales. En el 2003 surge un trabajo importante para el extranjero. Con mi padre lo asumimos con valentía, involucrando y responsabilizando a todos los empleados. Trabajamos mucho para ganarnos la confianza de los bancos, de los proveedores, de los clientes y la cohesión de nuestro personal fue la clave del éxito. Tres meses después, nos vimos muy afectados por la gran crisis y la enfermedad de mi padre. Gracias a Dios pude contar con la ayuda de muchas personas y después de un año y medio de recurrir al fondo de desempleo, todos los empleados regresaron a la empresa. Pero estaba cansada y me sentía oprimida por todo esto. Economia_di_Comunione_AIPEC_01Fue en este momento que supe de AIPEC, que se constituyó en el 2012, y de estos empresarios que sentía cercanos porque sumaban a su forma de trabajar el valor agregado de la “cultura del dar”. Así empecé a participar en sus encuentros, confrontándome con ellos y con varias categorías sociales. Me sentí acogida, estimulada, aconsejada, hasta aceptar, recientemente, un cargo directivo en AIPEC. Junto con los otros elegidos, descubro cada vez más la belleza y la responsabilidad de llevar adelante una empresa en la cual trabajar al máximo para mantener la estabilidad económica y al mismo tiempo compartir relaciones, ponerse a la escucha, dar una ayuda concreta. Porque el donar da frutos y el fruto permanece».  

Maria Voce: La cultura del diálogo como factor de paz

Maria Voce: La cultura del diálogo como factor de paz

«El deseo que nos anima no es el de recordar sino el de releer juntos, después de 20 años, los contenidos y el método que Chiara Lubich expuso en la UNESCO el 17 de diciembre de 1996, sobre un objetivo más que importante en este momento para las relaciones internacionales: la educación a la paz. En aquella ocasión, la UNESCO concedió a la fundadora del Movimiento de los Focolares el premio especial pensado para cuantos contribuyen con su obra a crear caminos y condiciones para que la paz sea algo real.». Lo recuerda la presidente de los Focolares, Maria Voce, en su intervención del pasado 12 de marzo en Castel Gandolfo, durante la tarde dedicada a Chiara Lubich y la paz, en presencia de embajadores, representantes del mundo de la cultura y del mundo ecuménico. «Mirando la realidad de hoy, aquel episodio parece tener una gran actualidad: ¿Qué hay más importante que la educación para alcanzar tal objetivo? La actualidad dominante, la que cotidianamente se impone ante nuestros ojos, nos ofrece imágenes de una paz violada, a menudo ironizada. Parece casi que, desde la realidad de los individuos hasta la dimensión internacional, el “vivir en paz” no pertenezca a las generaciones del Tercer Milenio. Y sin embargo, ¿cuántas veces invocamos la paz o tratamos de reanudar el hilo roto en las relaciones entre las  personas, entre los pueblos, entre los Estados? No podemos negar que logramos más fácilmente erigir barreras, pensando quizás que puedan defendernos, que actuar para construir la unidad en las relaciones, entre las ideas, en la política, en la economía, entre posiciones religiosas. Y la paz se escapa, se aleja. En la sede de la UNESCO, Chiara Lubich ofrecía un método de educación a la paz: la espiritualidad de la unidad, que es un nuevo estilo de vida capaz de superar las divisiones entre las personas, entre las comunidades, entre los pueblos y por ello, capaz de contribuir a reencontrar o a consolidar la paz. _MG_2370Esta espiritualidad la viven personas provenientes de diferentes experiencias y condiciones: cristianos de distintas Iglesias, creyentes de distintas Religiones y personas de culturas diferentes. Todos ellos animados por el deseo de hacer de la humanidad una sola familia, conscientes de deber afrontar problemas y situaciones que se presentan cotidianamente a todos los niveles y en todos los campos, tendiendo a ser, al menos, allí donde se encuentran – cito a Chiara – gérmenes de un pueblo nuevo, de un mundo de paz, más solidario sobre todo con los más pequeños, los más pobres; de un mundo más unido» (Discurso de Chiara Lubich  en la UNESCO, 17.12.1996), en el que sea posible no sólo llamarse hermanos sino serlo. Si éste es el método, ¿cuál es el «secreto de su éxito»? Es un secreto que Chiara define como el arte de amar, es decir «ser los primeros en amar, sin esperar que se nos ame. Significa saber “hacerse uno” con los demás, es decir, hacer nuestros sus pesos, sus pensamientos, sus sufrimientos, sus alegrías. Pero, si este amor al otro lo viven más personas, se hace recíproco» (Ibid.). Reciprocidad, palabra que tiene mucho peso en las relaciones internacionales, pero, a menudo, limitada a garantizar la tregua en los conflictos, no a prevenirlos o a resolverlos. Quien tiene responsabilidad y funciones relevantes en la convivencia internacional sabe bien qué difícil es la tratativa, cuántos obstáculos se encuentran para llegar a acuerdos que satisfagan a todas las partes. Hacer del amor un instrumento de negociación, respecto al gran objetivo de la paz, serviría para sentirse parte de la misma familia, para vivir esa dimensión auténtica de la fraternidad no restringiéndola sólo a la coexistencia o a la forzada cohabitación, sino abriéndola a las exigencias de los más débiles, de los últimos, de quienes están excluidos por la dinámica política o por una economía que tiene como única ley la ganancia. Amar, por tanto, es actuar para el otro y con el otro; es contribuir a superar las barreras puestas por intereses contrapuestos, por el deseo de manifestar la potencia, por la desigualdad en los niveles de desarrollo y la falta de acceso al mercado o a la tecnología». Al hablar de educación a la paz nos encontramos frente al gran desafío de concertar un método, el de la unidad fruto del amor recíproco, con la fragmentación que envuelve ya todos los ámbitos de nuestra cotidianidad. Chiara Lubich era consciente de esto y por eso ofreció a los Representantes de los Estados miembros de la UNESCO casi una clave, una buena práctica según el lenguaje usado en las relaciones internacionales. De hecho dijo: «No se hace nada bueno, útil, fecundo en el mundo sin conocer, sin saber aceptar la fatiga, el sufrimiento, en una palabra, sin la cruz» (Ibid.). El compromiso por la paz es difícil de realizar si no se está dispuesto a perder las certezas y las comodidades, aventurándose hacia nuevos caminos, inexplorados; siendo creativos sin improvisar; escuchando la voz de los que piden un futuro de paz e individuando dónde emergen las posibilidades para realizarlo. […] Han pasado veinte años desde que Chiara en la UNESCO indicó el amor como «la más potente arma para donar a la humanidad su dignidad más alta: la de sentirse no tanto un conjunto de pueblos, uno al lado del otro, a menudo en lucha entre ellos, sino un solo pueblo» (Ibid.). También hoy, a pesar de afrontar múltiples y recurrentes dificultades, es éste el Ideal que queremos realizar con la colaboración de todos».

Venezuela, un país en la cuerda floja

Venezuela, un país en la cuerda floja

paesaggio andino«En este Venezuela fragmentado y dividido, queremos vivir el Evangelio con radicalidad, allí donde cada uno desempeña su trabajo o estudia, para construir puentes de unidad y de paz. En el Consejo Municipal, por ejemplo, hay tres personas que viven la espiritualidad de la unidad, uno del partido de Gobierno y dos de la oposición, sin embargo se respetan y se ayudan». Quien habla es Ofelia, de la comunidad de los Focolares de un barrio marginado de la ciudad de Valencia, llamado Colinas de Guacamaya. «Una amiga me pidió que la acompañara al médico – cuenta –. Empezó el largo trámite para recibir las medicinas: en la farmacia nos encontramos a un anciano en búsqueda de su tratamiento para la diabetes, a un señor que pedía una pastilla para el dolor de cabeza, a un chico que necesitaba de paracetamol. Sólo un comprimido, pero el dinero que tenía no era suficiente». Ofelia, en el auto, tenía una bolsa que lleva siempre consigo, llena de medicinas que le llegan de la «Providencia de Dios», como ella misma cuenta, y pudo ofrecerlas gratuitamente a cada uno. Miradas incrédulas y gratitud. Betty y Orlando tienen 4 hijos y se trasladaron al Centro Mariápolis “La Nubecita”, en la localidad Junquito, en los alrededores de Caracas. «Para servir a quienes lo necesitan – cuenta Betty –, organizamos la pastoral social con algunas personas de la comunidad. Queríamos responder a las necesidades de alimentación, vestuario y vivienda de algunas familias de la parroquia. Así, con la ayuda del Consejo Municipal, logramos construir una casa digna para un anciano que vivía en la indigencia». «La actual crisis social, con los altos índices de inseguridad que registra el país, nos ha abierto aún más a las necesidades de las familias de nuestra comunidad que viven en el terror de perder incluso la vida. Cuando nos enteramos de que el papá de un chico estaba en graves condiciones, porque le habían disparado, fuimos en seguida al hospital. Estaba internado en cuidados intensivos y falleció pocos días después. Ahora, a través de atenciones, cuidados y protección, seguimos dando nuestro amor concreto a madre e hijo, a quienes recibimos en nuestra casa». panorama«Por pedido del párroco – nos cuenta María Carolina de la Comunidad del Junquito –, fuimos a un sector rural donde se puede llegar sólo en jeep. Ahí nos esperaba la comunidad de La Florida, que tiene muchas carencias materiales, incluso, hasta hace pocos meses, les faltaba la corriente eléctrica. Una comunidad de personas sacrificadas, dedicadas a la agricultura, que recorren kilómetros a pie para ir a la Misa, una vez al mes. Fue una experiencia que nos involucró a todos y se activó una comunión de bienes. De muchas partes llegaron vestidos, medicinas, juguetes, zapatos, comida… Con camionetas cargadas de cosas, pero sobre todo de esperanza, llevamos nuestro amor a esta comunidad. Aunque no faltaban las dificultades, cuando nos vieron llegar salieron de sus casas, los niños corrían, había aplausos, ¡en seguida se sintió un clima de familia!». La comunidad de Puerto Ayacucho, en el Estado Amazonas, ubicada en una zona de frontera, está habitada por comunidades indígenas. Son graves las problemáticas que la afectan: la presencia de la guerrilla, la explotación de minas de oro, el alto índice de madres solteras. Recién vivieron una experiencia muy fuerte con la muerte de Felipe, un chico de los Focolares asesinado a tiros hace dos meses. Es algo muy frecuente en Venezuela, sobre todo en esta región. Murió para salvarle la vida a su hermano, buscado por la guerrilla. Juan, su entrañable amigo, nos cuenta que «Felipe había fijado una cita para inscribirse en el catecismo, pero nos dejó el día anterior… Juntos habíamos hecho muchos programas para el futuro». La muerte de Felipe dejó una huella en esta comunidad: un compromiso nuevo para vivir por la construcción de la paz, para dar nuevos horizontes y esperanza sobre todo a los jóvenes.

De la comunidad de los Focolares de Atenas

De la comunidad de los Focolares de Atenas

20160318-03Desde hace meses el flujo de refugiados no se detiene: viven en un estado de emergencia en las islas de Lesbos, Kos, en Atenas y en Idomeni. Son numerosas las asociaciones laicas o religiosas –ortodoxas, católicas, protestantes- y las ONG que no cesan de estar presentes para socorrer y aliviar los grandes sufrimientos de estas personas. La comunidad del Movimiento de los Focolares, aunque es pequeña, tanto en Atenas como en Salónica (Grecia),, ha abierto los brazos y el corazón, colaborando con varias asociaciones, entre las cuales la Cáritas, la Comunidad Papa Juan XXIII y otras. «Especialmente en Atenas –escriben- fuimos a varios campos de refugiados que se abren y se cierran según es el flujo migratorio. Hemos involucrado a colegas y amigos en la recolección de comida e indumentaria para llevar a los varios centros de acogida. Desde Salónica todas las semanas, varias personas de la comunidad de los Focolares van a la frontera con Macedonia para llevar socorro y ayudas urgentes, con la colaboración de Cáritas». 2010318-01«Fui con algunos amigos y colegas de trabajo a un campo donde todos los días llegan entre 500 y 1000 personas –escribe Mariangela, del focolar de Atenas-. Ayudamos en la distribución de las comidas, en la selección y clasificación de las cosas, jugamos con muchos niños. Dan ganas de decirles alguna palabra para compartir sus pesos, pero a veces el idioma nos lo impide. No nos queda más que comunicarnos con la sonrisa, con una caricia, con gestos concretos. Al final sentimos que algo pasa. Todo paree poco en este mar de desesperación, pero intentamos dar al menos una gota de amor». Maristella Tsamatropoulou, trabaja en el equipo nacional de Cáritas Griega: «La actual emergencia de los refugiados no hace más que ampliar el panorama de ayudas que la Cáritas ya había activado para aliviar la crisis socio-económica griega». Se trata, explica «de ayuda humanitaria que se distribuye a través de comidas, artículos de primera necesidad tanto en las islas como en donde los asentamientos lo requieren… Pero nos encargamos también del hospedaje en albergues, donde es muy importante también la presencia de animadores para los niños, de psicólogos y el ofrecimiento de la posibilidad para asearse. Los programas estructurados y apoyados financiariamente por el exterior no podrían concretarse sin la cadena de solidaridad de los voluntarios que participan en primera fila o en la retaguardia (sensibilizando y recogiendo lo necesario)». 20160518-02En la isla de Siros, en una cafetería los propietarios involucraron a los clientes en actividades de solidaridad, recogiendo medicinas, comida, ropa y en la iniciativa “un café pendiente…” con la que se puede dejar un café pagado para quien no puede. ¡Para Navidad llegaron a 235! Siguiendo el ejemplo, algunos panaderos han lanzado la idea de “un pan pendiente…”. «Estamos impresionado por la generosidad y la solidaridad de la gente» – escriben todavía de la comunidad de los Focolares- «el pueblo griego, a pesar de la grave crisis que vive, está sacando todo su potencial de fraternidad, hacia los más pobres, encontrando energías inesperadas y creatividad para aliviar a muchas personas. ¡Es una verdadera lección de humanidad!».

Un relato desde la frontera macedónica

Un relato desde la frontera macedónica

1458313908Los miles de refugiados que están esperando poder pasar la frontera entre Grecia y Macedonia, viven en tiendas de campaña en medio del fango. El “milagro” es llegar a Europa. Dolores Poletto es croata, hace sólo dos semanas trabaja en la Cáritas de Macedonia y vive en la comunidad del Movimiento de los Focolares de la ciudad de Skopie (capital de Macedonia). Es ella quien cuenta lo que ha visto con sus ojos, a lo largo de la frontera: «Fui al campo de refugiados de Gevgelija (Macedonia) con los colegas de Cáritas. Era una visita informal. Del otro lado de la señal fronteriza se ve una marea de gente. Cruzamos la frontera oficial de Grecia a Idomeni». Fronteras cerradas. La situación humanitaria que los refugiados están viviendo en Grecia, Macedonia y Serbia es el resultado de la clausura de de las fronteras de los países que se encuentran a lo largo de la ruta balcánica. Desde el miércoles 9 de marzo las autoridades eslovenas cerraron las fronteras. También Croacia anunció el cierre de los confines y enseguida después las autoridades de Serbia. Según los últimos datos –pero los números son siempre aproximados- en la frontera de Macedonia se encuentran actualmente alrededor de 14 mil refugiados. En Grecia son más de 34 mil. En Idomeni hay una especie de embudo. Se está repitiendo lo que desde hace meses se está viviendo en Calais, en la frontera francesa hacia el canal de la Mancha. Los emigrantes llegan, después de haber atravesado Grecia y el Mar Egeo en una barca. «Es una multitud de gente –cuenta Dolores-. Llegan en las condiciones más precarias… Están en la frontera por donde antes se pasaba a Macedonia. La gente quiere estar lo más cerca posible, por eso las tiendas están montadas al lado de la línea del ferrocarril». A la lluvia se le agrega el frío. «Si hay buen tiempo, de día la temperatura puede llegar a 18 grados, pero de noche baja a 2-3 grados». Las condiciones de vida en el campo se deterioran día tras día. Al frío, hay que sumar la escasez de alimentos y las insostenibles condiciones higiénico-sanitarias. «Muchos hacen fila para recibir la comida», sigue contando Dolores. «Es difícil describir el estado psicológico en el que se encuentran. Muchos dicen que vienen de Siria. Todos quisieran ir a Alemania, Austria. La única pregunta que nos hacen es: cuándo abre la frontera». Están dispuestos a todo con tal de llegar a la meta, incluso a costa de la vida. «¿Sabes? precisamente ahora escuché la noticia –dice Dolores- que hay tres muertos ahogados en el río entre Macedonia y Grecia cuando trataban de pasar ilegalmente. Es una tristeza». Cáritas está presente desde el inicio de la crisis, como muchas ONG. «Están esperando, esperan poder pasar la frontera –explica Dolores- por eso, no quieren ir a campos más apropiados. Es difícil ayudarlos». Está la policía fronteriza que vigila para que no pase ninguno, según los acuerdos tomados con Europa. Delante de este “impasse”, «sientes la impotencia de no poder hacer nada». Dolores quedó profundamente impresionada por esta experiencia en la frontera. «Se puede estar con ellos en la cruz, no logro olvidar esas imágenes. Hay muchísimos periodistas. Hablé con algunos de ellos y regresando a casa vi los servicios noticiosos que hicieron. Me decía que si los hubiese visto sin haber visitado ese lugar, habrían sido una de las muchas noticias que pasan todos los días, pero habiendo palpado esta realidad, siento que se trata de una herida de la humanidad». Fuente: SIR

En la estación de Roma, entre los sin techo

En la estación de Roma, entre los sin techo

image2«Comencé dando una mano – cuenta Annette, focolarina alemana – en el mes de diciembre de 2014. El frío ya llegaba y era urgente conseguir frazadas. Tratando de saber qué era mejor hacer, alguien de RomAmoR ONLUS me propuso: “Más que las frazadas, sería mejor que tú vinieras a darnos una mano para estar con ellos”. La semana siguiente ya estaba en la estación Ostiense. Fue una emoción muy fuerte. Acercándome a esas personas descubría, que, paradójicamente, ¡eran ellos los que me recibían! Me daba cuenta de que no se trataba un grupo social incómodo que era mejor evitar, sino de personas que deseaban relacionarse, capaces de dar ellas mismas calor humano. Después de un poco de tiempo llegaron los voluntarios con la cena caliente y la estación dejó de ser un lugar anónimo, frío y gris, y se convirtió en un lugar cálido». Desde ese lunes la vida de Annette cambió. Las primeras noches no lograba dormirse pensando en Giovanni, Stefan, Mohamed que no tenían una cama caliente como la suya. Comenzó a revisar su armario, viendo si había todavía algo para compartir, a pesar de que en el focolar se trata de vivir con solo lo necesario. Pero sobre todo continuó yendo a la estación todos los lunes. Una noche, consultando el cuaderno donde se anotan las necesidades de los sin techo, vio que necesitaban zapatos de hombre. En la casa no tenía. Pero se acordó de la experiencia de Chiara Lubich durante la guerra que le pedía a Jesús, presente en los pobres que precisaban algo. «Así hice también yo y en el plazo de dos semanas – cuenta Annette- ¡me llegaron 10 pares!»

20160317-01

Foto © Dino Impagliazzo

Con la llegada del otoño se repitió la necesidad de frazadas. Dos amigas de Roma que en el mes de noviembre festejaban su cumpleaños pensaron pedir como regalo: “frazadas”. Llegaron bastantes, pero no alcanzaban. No pudiendo dar las de casa (ya que tenían sólo las estrictamente necesarias), Annette se las pidió nuevamente a Jesús, de modo que El pudiese calentarse en esos pobres. «En pocos días – cuenta sorprendida- de un Centro de estudiantes de Teología que se estaba mudando nos llegaron 4 grandes bolsas que tenían dentro 30 frazadas y una decena de colchonetas de campamento. Sin contar las frazadas que recibieron otros voluntarios». El compartir se difunde como una mancha de aceite. El vecino de una colega, que había perdido la confianza en las actividades de solidaridad, donó mucha ropa abrigada e involucró en esta acción también a un amigo. «Pero más fuerte aún que estas intervenciones de la Providencia- confiesa Annette- es la experiencia que hacemos. Es gente que no tiene nada para comer, que no tiene un techo, pero que poco a poco adquiere dignidad, ya sea porque se viste mejor y están limpios, ya sea porque juntos vivimos relaciones de fraternidad. Cada vez que los veo trato de recibirlos de verdad, disponiéndome a ser un pequeño instrumento del amor de Dios. Y ellos me dan la oportunidad de testimoniar el Evangelio “por la calle”, compartiendo las ideas y las opiniones más variadas con personas de todo el mundo. En esta reciprocidad, la realidad cambia, la ciudad cambia su rostro y el amor se puede palpar…. incluso sólo con una cena caliente. En Navidad tuvimos un regalo especial: dos amigos de la estación vinieron a festejarlo con nosotros al focolar, con gran alegría de parte de todos».

Roma: Aldea para la tierra – Vivir juntos la ciudad

Roma: Aldea para la tierra – Vivir juntos la ciudad

Villaggio per la terraDel 22 al 25 de abril de 2016, se llevará a cabo, en el corazón verde de la capital italiana, en Villa Borghese, en el Galoppatoio, una manifestación que tendrá como título “Aldea para la Tierra. Vivir juntos la ciudad. Roma en Mariápolis”. Earth Day Italia y el Movimiento de los Focolares de Roma son los que promueven el evento. Se inaugurará con la celebración de la 46° edición de la Jornada Mundial de la Tierra, que este año asume un relieve aún mayor debido a que el Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki-moon eligió el 22 de Abril como primer día para la firma del histórico acuerdo sobre el clima de Paris – COP21 en el que participarán todos los Estados del mundo. A la luz de la Encíclica Laudato Si’, en la que Papa Francisco invitó a todos a cuidar la Casa común, y en el marco del Jubileo de la Misericordia, “La Aldea de la tierra – Roma en Mariápolis”, aspira a hacer redescubrir la específica vocación de Roma a la fraternidad universal que la convierte en una ciudad única en el mundo. De hecho, el evento quiere ser una aldea temporal dentro de la ciudad. Estarán involucradas numerosas realidades que trabajan día tras día en el territorio de muchas formas, para transformar nuestra Capital en un lugar mejor donde vivir, en el que cada ciudadano o turista – de cualquier edad, estrato social o cultura – puede experimentar su contribución irremplazable a la vida de la ciudad. Objetivo de la manifestación es el de crear puentes de diálogo entre las diversidades – centro y periferia, jóvenes y adultos, romanos y ciudadanos “en tránsito” – mostrando todo lo bello que hay en Roma porque encontrarse en la diversidad es posible, y la solidaridad es un valor universal. Vivir JUNTOS la ciudad se articulará en cuatro días de actividad – talleres, exposiciones, seminarios, intercambio de buenas prácticas, performance artísticas, debates, momentos de juego, reflexiones o el simple compartir el tiempo y las vivencias – destinados a incrementar el conocimiento recíproco y la acogida. Para mayores informaciones acerca del evento: www.villaggioperlaterra.it

Bruselas: «Fraternidad en Coro» entre musulmanes y cristianos

«Hace tres meses que esta velada debía hacerse aquí. La locura de los hombres nos hizo cambiar de ruta». Así abre la velada Noufissa Boulif, musulmana, organizadora del evento: al día siguiente de los atentados de París del 13 de noviembre de 2015, Bruselas no se reconocía. Algunos de los terroristas implicados tenían allí su base, y por motivos de seguridad el concierto fue anulado y trasladado para el 20 de febrero de 2016. Un encuentro entre música y cultura musulmana y cristiana. Se convirtió en una plataforma de encuentro entre musulmanes, cristianos y también agnósticos, que creen en el diálogo y que, sabiendo recibir al otro descubren en él cualidades y virtudes escondidas. Pero no te parece que el riesgo ¿era igualmente alto para un evento islámico-cristiano justo en el centro de Bruselas?. Le preguntamos a Noufissa. «Si el concierto se pudo realizar es gracias a la increíble solidaridad entre musulmanes y cristianos, y seguramente bajo la divina protección. Afortunadamente todo el programa pudo desarrollarse sin incidentes o tensiones» El concierto fue dedicado a todos los niños que sufren, poniendo la velada «bajo el signo de la infancia y de la juventud, pero también bajo el signo de la diversidad que caracteriza nuestro país». Noufissa conoce y vive la espiritualidad de la unidad, nacida de Chiara Lubich desde hace más de veinte años. Ella quisiera testimoniar a todos que la fraternidad entre musulmanes y cristianos es posible aunque sean dos culturas a menudo antagonistas. En esta perspectiva organizó su primer concierto islámico-cristiano en el mes de octubre de 2014. https://vimeo.com/114886056 «Es un trabajo que lleva ya su tiempo», cuenta Noufissa. «Con mi marido y los hijos estamos involucrados en el diálogo interreligioso. Éste forma parte de nuestra vida. Para mí, como musulmana que lleva el velo, no es algo descontado el vivir en armonía con los demás, porque sientes que atraes las miradas curiosas o actitudes evidentes de desconfianza. Pero, cada vez, trato de acercarme al otro sin prejuicios, con la sonrisa. La Regla de Oro, que está presente en casi todas las grandes religiones, me ayuda muchísimo: “Nadie de ustedes es un verdadero creyente si no desee para su hermano lo que desearía para sí mismo” (Mahoma, Hadith 13 de al-Nawawi). Se pueden comprender las reacciones islamofóbicas y la influencia, no siempre constructiva de los medios de comunicación, pero estoy convencida, como musulmana, que es esencial superar todo esto. El profeta Mahoma, en un hadith subraya que “La sonrisa es una ofrenda” (es decir un don gratuito para el otro)». Volvamos al 20 de febrero de este año. Varios coros actuaron uno detrás del otro en el escenario: niños, jóvenes, cristianos y musulmanes, blancos y negros, de lengua holandesa o francesa- también éste es uno de los desafíos de Bélgica. “Rissala”, “Los pequeños coristas”, “Las Voces de los 4 Horizontes”, “L TOUCH”, un grupo de chicas musulmanas con capacidades diferentes. Hacia el final también estuvieron los “rapper” – “Mc Youns, Antis y Mamz-I”- que con sus palabras incisivas invitaban a todos a no desmayar, sino continuar creyendo en la vida. La asociación La luz del corazón nace despues de 25 años de compromiso en el diálogo interreligioso de Noufissa, y 10 años de servicio de una amiga suya musulmana que se encuentra ahora en cuidados paliativos. Juntas visitan a los enfermos en sus casas, yendo al encuentro de la sed de relación en esta fase particular de la vida. Con estas asociaciones, después de un año de duro trabajo para la preparación de “Fraternidad en coro”, están ya trabajando en un próximo evento islámico-cristiano que se realizará el 23 de abril, cuyo título es “Juntos con María”, en Bruselas, en la Catedral de Saint Michel.  

Líbano: Chiara nos llevaba a vivir el Evangelio

Líbano: Chiara nos llevaba a vivir el Evangelio

Nadine-01«Tenía 17 años -cuenta Nadine, focolarina libanesa, ahora en Argelia- cuando estalló la guerra en Líbano: escuelas cerradas, calles minadas, bombas día y noche, francotiradores, heridos, muertos…Con otros jóvenes fascinados por la espiritualidad de Chiara Lubich, en medio de los trágicos eventos que empezaban a arreciar nuestro país escuchábamos resonar las mismas palabras de los primeros tiempos de los Focolares, durante la segunda guerra mundial en Trento, Italia: “todo cae, sólo Dios permanece”. También nosotros como Chiara y las primeras focolarinas, podíamos morir de un momento a otro y también nosotros, como ellas, habríamos querido presentarnos a Dios “habiendo amado hasta el final”. Habíamos aprendido que amar significa prestar atención a las necesidades de quienes teníamos alrededor. En esos instantes no era tan fácil, pero cuando lo lográbamos sentíamos que el corazón se liberaba del temor y casi no nos dábamos cuenta de la tormenta de odio y de violencia que nos rodeaba. Así pudimos ayudar a muchos a seguir adelante. A menudo le escribíamos a Chiara para contarle lo que vivíamos y ella nos respondía personalmente todas las veces». «Recuerdo todavía los episodios de violencia y los secuestros cuando empezaron las discriminaciones por la pertenencia religiosa. También mi papá fue secuestrado dos veces. Chiara nos hablaba de los primeros cristianos y de su valentía de dar testimonio de la fe también delante de los persecutores romanos. Uno de nuestros amigos, Fouad, había logrado participar en un congreso Gen en Roma. Regresando a Líbano, mientras recorría el camino del aeropuerto a la ciudad, fue detenido por algunos hombres armados. Era la zona musulmana y en su cédula de identidad estaba escrito: cristiano maronita. “Sí, soy cristiano –admitió Fouad- y estoy regresando a casa”. “Tú vienes con nosotros”, le dijeron. Siguió un largo interrogatorio y al final la sentencia: “¿Tú sabes lo que te espera?”. El chico entendió que para él todo había terminado. Uno de los militares se lo llevó a un puente donde ya habían sido asesinados muchos cristianos. Mientras caminaba trataba de calmar la agitación interior y pensó en qué podía querer Dios de él en ese momento. “Amar a este prójimo”, fue lo que se le ocurrió. Trató de hacerle sentir a ese hombre todo su amor: “Debe ser difícil –le dijo Fouad-, debe ser feo hacer este trabajo, hacer la guerra”. Llegando delante del puente, el militar se detuvo, lo miró y exclamó: “Regresemos”. Recuerdo que Chiara, particularmente impresionada por el testimonio de este joven, quiso divulgar el episodio para la edificación de todo el Movimiento». 20160315-a«Cada vez que había un “cese al fuego” volvíamos a reunirnos, a frecuentar el focolar… Nuestros padres tenían miedo por nosotros, pero no podíamos detenernos. Estrechar la unidad entre nosotros era la energía vital que después nos permitía amar a todos. Y fue precisamente en los años de la guerra donde muchos de nosotros sentimos el llamado a donarnos totalmente a Dios. Chiara nos sostenía con su ejemplo, con su palabra. Seguía con afecto las peripecias de las familias probadas por muchas restricciones y por el cansancio. Algunas habían perdido el trabajo, la casa. Otras vivían desde hacía años en los refugios y deseaban dejar el país para poder ofrecer un futuro a sus hijos, algunos habían sido heridos… Para todas ellas Chiara abrió las casas del Movimiento, para darles la oportunidad de pasar un período en el extranjero para que se recuperaran o para establecerse en otro lugar definitivamente. También lanzó una campaña para recoger fondos para cubrir los gastos del viaje. Y como el aeropuerto de Beirut permaneció cerrado durante años, nos mandó a nosotras focolarinas a abrir un punto de apoyo en Chipre – la única vía de acceso al exterior por mar – para facilitar la salida de quienes se iban». 20160315-01«Este amor concreto de Chiara iba siempre acompañado con su fuerte estímulo espiritual. Después de años de una vida extenuante, a menudo nos sentíamos débiles e impotentes. Entonces Chiara, refiriéndose a la nubecita con la que Dios se hizo presente al pueblo judío, nos sugería que nos lanzáramos a vivir de forma nueva la Palabra. La vida del Evangelio, -nos decía- es “la nubecita” con la que Dios se hace presente en el desierto de esta absurda guerra que estábamos sufriendo. Y desde esta “nubecita”, seguía diciendo- no sólo atraerán a muchos a vivir el Evangelio, sino que sacarán la fuerza para seguir amando… hasta el final».  

Colombia: personas capaces de paz

Colombia: personas capaces de paz

Cristina-Montoya

Cristina Montoya

«El antónimo de paz, en Colombia, es el conflicto armado que dura ya más de 50 años, el segundo más largo de la historia actual. Un enfrentamiento de múltiples dimensiones, nacido de la desigualdad y de la asimetría política, maximizado hasta el extremo por el establecimiento de lógicas de economías ilícitas como el narcotráfico. Más de 4.500.000 los desplazados, 220.000 los asesinados y 25.000 los desaparecidos, oficialmente registrados. Pero no se puede pensar que el conflicto sea sólo el que se combate en el frente. El conflicto lo afecta todo, se adueña de los procesos sociales y culturales, del espacio público, de las interacciones cotidianas, impregna la vida de las familias. Cuando se vive en un país que por 3 generaciones ha conocido la violencia como protagonista del vínculo social, se enfrenta un verdadero cambio antropológico: la lógica del donar, de la confianza, de la gratuidad, parece desvanecerse. Sin embargo la guerra no acaba con todo; son numerosas las iniciativas, la creatividad, las agrupaciones que trabajan para reconstruir el tejido social y además está la fidelidad de Dios, que nunca falta en cada momento histórico. Una revista, que un religioso colombiano encontró tirada en una papelera, le trajo la buena noticia de que existía gente que realmente creía en el Evangelio y lo vivía. Sus casi 78 años se llenaron de vida, una vida que enseguida se volvió contagiosa. La historia de Chiara Lubich y de sus primeras compañeras y de aquellos – que como ellas – vivían en otras partes del mundo, activó la esperanza. Son historias y rostros como el de Rosa, quien vive en un barrio marginado de Medellín, una de las ciudades más afectadas por la violencia. Su hijo fue asesinado por una amigo; la respuesta normal hubiera sido la venganza, pero creer en el amor significa tener el valor del perdón. Una herida que sigue doliendo, pero su respuesta ha sido vivir por la gente de su barrio. Y esto es paz O Nubia, quien tuvo que huir al amanecer porque la guerrilla había tomado su pueblo. Dejó detrás suyo la casa y los campos, todo lo que tenían. Embarazada, con un hijo pequeño y uno adolescente, recién llegada a la nueva ciudad perdió el marido y el hijo mayor, en una obra de construcción con condiciones precarias. Algo absurdo, incluso difícil de imaginar. El amor de una comunidad de los Focolares la apoya durante años, dándole la fuerza de empezar una nueva vida. La paz no es un bien aislado, para construirla es necesario garantizar la justicia, luchar contra las causas que la entorpecen, y es esto lo que hicieron Gabrielina y Macedonio, donando su casa humilde, para construir un centro social, que luego se convirtió en consultorio, aula para el apoyo escolar, sede de proyectos de renovación urbana arquitectónica. Es necesario también crear otros escenarios futuros, educar a otros mundos posibles. Con los bienes puestos en común, nació un jardín infantil para acoger a los niños más pobres; hoy se ha transformado en un colegio con más de 400 estudiantes y una propuesta educativa centrada en el amor y la generosidad para construir una Colombia en paz y pluralista. Son muchas las iniciativas concretas, porque ningún pueblo puede entrar en contacto con Chiara Lubich y permanecer como antes. Su carisma, que lleva a descubrir y creer en el Amor, produce un cambio de mentalidad, uno se da cuenta de que es capaz de amar y se vuelve sujeto capaz de paz. Tal como afirma Rafael Grasa, Presidente del Instituto Internacional por la paz de Cataluña y profesor invitado a Medellín, «la paz empieza por las personas, continúa con las relaciones interpersonales, los grupos. La paz es dinámica, para lograrla hay que involucrar toda la armonía del ser humano con sigo mismo, con los demás, con la naturaleza». Pero ahora, que antes de finales de mes, se prevé la firma en La Habana, del tan anhelado acuerdo de paz con las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) se necesita reaprender a vivirla; tal vez el país – como la creación que espera con los dolores de parto – espera una manifestación aún más fuerte de los hijos de este Carisma.    

Guerra en los Balcanes: Chiara estaba a lado nuestro

Guerra en los Balcanes: Chiara estaba a lado nuestro

Cuando cayó el muro de Berlín, parecía que todo estaba solucionado. Nadie podía imaginar que los muros de la desconfianza, del odio, del prejuicio seguirían levantándose en la ex Yugoslavia, obstaculizando lo que las comunidades de los Focolares allí presentes habían intentado construir durante muchos años, es decir la unidad entre todos, a pesar de la variedad de etnias, idiomas, religiones. Diversidad que todos ellos habían logrado percibir como riqueza. El anuncio del conflicto fue un verdadero shock, pero también un impulso para seguir creyendo que el inmenso amor de Dios no desaparecería, aún en lo absurdo de una guerra fratricida. 20160314-02«Era agosto de 1991 – cuenta Minka Fabjan en nombre de la comunidad de Zagreb, experta en administración y activa en el ámbito de la Economía de Comunión – y entre miles de peripecias un grupo fuimos a Katowice (Polonia) porque sabíamos que allá nos encontraríamos con Chiara Lubich. Ella nos invitó a dar testimonio del Evangelio con todos los medios posibles, a ‘gritarlo desde los tejados’. En Croacia empezaban ya los primeros atisbos de la guerra: las escuelas cerradas, las carreteras interrumpidas… En este clima de guerra, impresionaba mucho escuchar en la televisión y en las emisoras radiofónicas, nuestros mensajes de paz que habíamos enviado a los medios de comunicación, según la exhortación de Chiara. No obstante, las hostilidades seguían intensificándose. Chiara a menudo nos llamaba para saber cómo estábamos y para animarnos: “Demuestren con su vida que el amor lo vence todo”. Fue ella quien nos sugirió recoger firmas por la paz: en las escuelas, delante de las iglesias, en las plazas, en Eslovenia, Serbia, en todas partes. En Croacia, debido a las alarmas, las recogíamos en los búnkeres. En pocos días enviamos a varios Jefes de Estado unas 65.000 firmas». «Mientras tanto nuestras casas se llenaban de refugiados: eran nuestros familiares, amigos, pero también personas desconocidas. Entonces Chiara invitó a los miembros del Movimiento en el mundo a que se movilizaran para enviar ayudas. En otoño llegó el primer conteiner con víveres y productos de primera necesidad, una acción que duró años. Sótanos, casas en construcción, la sede de la Cruz Roja, salas para conferencias, etc. se transformaron en almacenes para clasificar lo que llegaba y compartirlo con vecinos y refugiados, tanto serbos, como musulmanes o cristianos. Hacíamos incluso 300 cajas en un día. Con estas ayudas humanitarias, logramos apoyar con regularidad a unas 7000 personas». «Ya nos pesaba el cansancio, cuando el papa Juan Pablo II, en 1993, nos pidió que abriéramos nuestros corazones y nuestras casas a las mujeres bosniacas que llegaban a Zagreb después de las indecibles crueldades que sufrían en los campamentos. Sentíamos que Chiara estaba a lado nuestro, así que todos nos movilizamos. En el Familyfest de 1993, lanzamos en mundovisión una recaudación de fondos que permitió dar una casa a 50 familias refugiadas y ayudar a más de 150 mujeres. A través del programa de apoyo a distancia, se pudo socorrer también a miles de niños. Algunas de estas mujeres, víctimas de violaciones, encontraron la fuerza heroica de llevar a término el embarazo. En Serbia habían sido enrolados en el ejército federal unos 700 hombres, entre ellos muchos del Movimiento. Cuando Chiara lo supo, nos invitó a todos a pedir por ellos, para que tuvieran la fuerza de oponerse a la violencia y no disparar. Y las oraciones fueron escuchadas: a los ‘nuestros’ les asignaron un servicio civil». La guerra había comprometido también Kosovo y Belgrado; a pesar de ello, Chiara quiso viajar a la cercana Croacia. Ante la pregunta de un periodista (Ottone Novosel de Večernji list, el periódico de mayor difusión) si tenía una palabra para estas poblaciones, Chiara no titubeó: «Demuestren que el milagro de la unidad es posible también entre maneras distintas de pensar, entre pueblos distintos, entre religiones distintas. Es Dios quien guía la historia. Por reacción, esta guerra podría suscitar una gran corriente de amor que podría convertirse en un ejemplo para muchos pueblos» (12.4.99). Este mensaje de Chiara Lubich es de una impresionante actualidad también pensando en los numerosos conflictos que aún hoy siguen deturpando el planeta y deshonrando nuestra humanidad.  

Un entramado de voces por la paz

Un entramado de voces por la paz

20160313-02La espiritualidad de la unidad nacida de Chiara Lubich tiene una fuerte relevancia para la paz. Resuena con fuerza este mensaje desde el evento de Castel Gandolfo (Roma) el 12 de marzo pasado, donde 1000 personas se reunieron para releer, a la luz de hoy, la herencia de Chiara Lubich en el campo de la construcción de la paz. Estuvieron presentes embajadores y representantes del cuerpo diplomático ante la Santa Sede y ante el Estado italiano de 20 países: de Marruecos, Libia, Benín; de Gabón a Turquía y Taiwán, de Argentina, Venezuela, Cuba, Uruguay y Paraguay, de Estados Unidos y Guatemala, y varias naciones europeas, como Ucrania, Lituania, Albania, Eslovenia, Portugal y Malta. Pero la actualidad que se impone ante nuestros ojos ofrece imágenes de “una paz violada, a menudo burlada”, hasta llegar a pensar que “vivir en paz ya no le pertenece a las generaciones del Tercer Milenio, dijo María Voce, presidente del Movimiento de los Focolares, en su saludo. ¿Cómo restablecer el hilo roto en las relaciones entre las personas, entre los pueblos, entre los Estados? MariaVoce_12.3.206“En la sede de la UNESCO Chiara Lubich ofreció un método para educar a la paz”, recordó María Voce. Es la espiritualidad de la unidad, que pone las bases para una cultura del diálogo. Lo demuestran las 4 experiencias contadas a continuación: desde la sencillez del “dado de la paz”, que se ha convertido en la base para el desarrollo de Living Peace, un proyecto en las escuelas del Cairo que hoy ha llegado a 300 escuelas en 110 países, involucrando a más de 100 mil niños y adolescentes; al diálogo entre musulmanes y cristianos en Italia en el marco de las tensiones que atraviesan el continente; hasta la “milagrosa” historia de Fontem, en Camerún, en donde Chiara Lubich preveía el futuro de la unidad entre los pueblos, simbolizado en el pacto estrechado entre los dos jefes de la tribu; y todavía su gran sueño de influir en la sociedad a través de la cultura y el pensamiento, que la llevó a hacer nacer el Instituto Universitario Sophia (Loppiano, Florencia). GenVerde_12.3.2016Desde el palco del Centro Mariápolis de Castel Gandolfo habló también el Gen Verde: las canciones de su nuevo espectáculo “On the Other Side” – que recientemente presentaron en una gira por Hong Kong y Taiwán – van en esta dirección. Las canciones mencionan el sacrificio de los monjes de Tiberina en Argelia, la canción de cuna para una niña sin nombre que se ahogó durante uno de los tantos viajes de la esperanza, la voz de la verdad de Oscar Romero, el obispo salvadoreño, hoy beato, asesinado por mano criminal, el grito de la selva amazónica que se va empobreciendo. El trabajo del Gen Verde quiere poner bases sólidas a la construcción de la paz, a partir de los miles de jóvenes involucrados en sus talleres. También ellos se han encaminado a ser, allí donde se encuentran, “semillas de un pueblo nuevo, de un mundo más solidario, sobre todo hacia los más pequeños, los más pobres” como dijo Chiara Lubich en la UNESCO, de “un mundo más unido”; sin esconder que el secreto para realizarlo radica en tener el valor de saber padecer, de saber aceptar el esfuerzo y el sufrimiento que esto conlleva. “Si algunas personas aceptaran el sufrimiento por amor, el sufrimiento que el amor exige –como había dicho Chiara-, éste podría convertirse en el arma más potente para donar a la humanidad su más alta dignidad: la de sentirse no tanto un conjunto de pueblos uno al lado del otro, a menudo en disputa entre ellos, sino un solo pueblo”.    

Siria: Dios puede vencer el Mal

Siria: Dios puede vencer el Mal

20160312-04Alepo, 8 de marzo de 2016 – Me desperté a las 4 de la mañana por el ruido de los bombardeos y no logré dormir más. Trataba de no creer a mis oídos. ¡No es verdad, Señor! ¡Otra vez los bombardeos!¡Ahora que se esperaba que la situación empezara a mejorar, que la electricidad había regresado después de 5 meses y el agua después de 45 días! ¿Por qué? ¡Esta tregua tenía que durar y volverse definitiva! Era una súplica que subía desde lo más profundo al Señor de la Historia pidiéndole ayuda para que se consolide el cese al fuego proclamado sólo hace una semana en toda Siria. Pero el ruido de los combates en el frente que divide la ciudad de Alepo en dos, crecía con fuertes explosiones que se escuchan muy bien de noche. Mientras esperaba que amaneciera y que volviera la calma trataba de rezar, y reflexioné: Ciertamente todos queremos la Paz, pero ¿creemos en ella verdaderamente, o pensamos que se puede comprar a buen precio? ¡Hay gente convencida de que el camino que hay que seguir es la guerra! Están dispuestos, no sólo a sacrificar su vida sino también la de los demás porque lo creen, y las potencias sacan provecho de esto que sucede, y por lo tanto, no quieren que se acabe la guerra, es más, atizan el fuego. 20160312-02Y nosotros, la gente que cree en grandes ideales, en una vida civil y pacífica, de respeto entre las culturas y de solidaridad, ¿lo creemos realmente? ¿Qué precio estamos dispuestos a pagar? Verdaderamente la guerra en Siria no es poca cosa. ¿Quiénes pueden tener la fuerza para destruir un país que hace seis años crecía lleno de vida y de esperanzas, donde convivían musulmanes y cristianos de distintas confesiones y de muchos grupos étnicos en el respeto y en paz entre ellos? Seguramente no son simples individuos. Vino a mi mente una respuesta que Chiara Lubich le dio en el 2002 a uno de nuestros amigos musulmanes que le preguntó con respecto a la esperanza de que el amor y la paz venzan sobre la guerra. Ella le contestó –recordando los atentados del 11 de septiembre de 2001- que «el terrorismo es fruto de las fuerzas del Mal con la M mayúscula, contra el cual no bastan las fuerzas humanas […]. Se necesitan las fuerzas del Bien, con la B mayúscula […] las de quienes aman a Dios. Y entonces, ¿qué hay que hacer? ¡La oración! Nosotros debemos conjurarnos, todos nosotros de la fraternidad universal, unidos rezando para que verdaderamente sea derrotado el terrorismo. Nosotros lo podemos hacer. Jesús dice que donde dos o tres están unidos en Su nombre, en su amor, todo se les concederá. Y nosotros somos muchos más que dos o tres […], tenemos que salir de aquí con esa idea; nosotros juntos nos unimos a rezar. Pero no basta. La causa principal del terrorismo es la intolerancia hacia un mundo medio pobre y medio rico. Ellos quisieran –y tienen razón- que hubiese un poco más de comunión de bienes […], un poco más de solidaridad. Tenemos que cambiar los corazones. Sólo si nosotros hacemos una obra de fraternidad universal, lograremos convencernos y convencer de que es necesario poner juntos los bienes, y primero empezaremos como pueblo, pero después las ideas van entrando y suben hasta los Jefes de Estado. Debemos tener esta seguridad de que con Dios son posibles las cosas imposibles, de que con Dios –si empezamos por la fraternidad entre nosotros- llegaremos también a este grandioso objetivo de hacer de toda la humanidad realmente una familia. […]. Éste es nuestro objetivo». 20160312-03No nos ilusionemos: la Paz depende de nosotros. No podemos esperar que los demás hagan algo. ¡Nosotros también somos responsables! Si creemos que realmente Dios puede vencer el Mal y que nos escucha, tenemos que rezar incesantemente al Padre con fe que nos ayude, de lo contrario pecamos de omisión. Todos recordamos cómo hace dos años se detuvieron los bombardeos en Siria gracias a la influencia del ayuno y de la oración hechos por el Papa y tantas otras personalidades. ¡Y Dios nos escuchó! Y lo puede seguir haciendo. Hagámoslo entonces y siempre, para que venga el reino de la Paz, no sólo en Siria sino en toda la Tierra. CFR: Chiara Lubich, Castel Gandolfo, 3 de noviembre de 2002, respuestas a los amigos musulmanes de los Focolares.      

Chiara Lubich y su mensaje de paz

Chiara Lubich y su mensaje de paz

ChiaraLubich_b«Mujer de intrépida fe, humilde mensajera de esperanza y de paz», así Papa Benedicto XVI describía a Chiara Lubich en el mensaje enviado con motivo de su fallecimiento, hace ocho años. Y el Papa Francisco, durante el inicio de la causa de beatificación en enero de 2015, exhortó a «dar a conocer al pueblo de Dios, la vida y obra de quien, aceptando la invitación del Señor, ha encendido para la Iglesia una nueva luz en el camino de la unidad». Son muchas las iniciativas que, en el mundo, recuerdan su mensaje de paz. Son más de 200 eventos promovidos por las comunidades de los Focolares en Europa. En Minsk, Bielorrusia, una jornada con el título Vivimos por la unidad. En Suecia, reuniones familiares en las seis ciudades donde existen comunidades del Movimiento. En Múnich, Alemania, el primer “Chiaratag”. En Lisboa, Portugal, una mesa redonda sobre Chiara y la paz con periodistas y miembros de la Comisión Justicia y Paz. En Sevilla, España, se centrará en Chiara Lubich, educadora de la paz, con el apoyo del imán Allal Baschar de la mezquita del Rey Abdul Aziz al Saud de Marbella y del sacerdote Manuel Palma Ramírez, vicedirector del Centro de estudios teológicos de Sevilla. En Sarajevo, Bosnia y Herzegovina, la comunidad de los Focolares conformada por católicos, ortodoxos, musulmanes y personas de convicciones no religiosas verá, en el encuentro El mensaje de diálogo y de paz el resultado de años de trabajo conjunto. Abierto a la ciudad, con la participación del arzobispo, cardenal Vinko Puljić. Una convicción que atraviesa el diálogo constante también en los otros países de los Balcanes y el reconocimiento mutuo de las tradiciones y nacionalidades. Lo demuestra el programa educativo Perle de Skopje, en Macedonia: un jardín de infantes, vinculado a la Universidad, que recibe niños de diversas etnias, involucra a las familias y basa su proyecto educativo en los ideales de fraternidad de la Lubich. Una iniciativa del profesor Aziz Shehu, musulmán, ex catedrático y decano de la Facultad de pedagogía. Que se trate de un proceso irreversible, lo han testimoniado también los 110 jóvenes serbios croatas, húngaros, albaneses y macedonios con otros de Bulgaria y Rumania, juntos por primera vez a principios de marzo, bajo el lema Balcanes: nosotros somos uno. Innumerables son en las Américas las reuniones, simposios, conferencias y conciertos, de dimensión espiritual y de oración, interreligiosa o ambiental, desde Nueva York y San Francisco, en Estados Unidos, a Santiago de Chile, pasando por La Habana, en Cuba, Neza, en el estado de México de Nezahualcóyotl, Caracas, en Venezuela, Río de Janeiro, en Brasil, Mendoza, Argentina. En el Pacífico, significativas reuniones en Honolulu, en las islas Hawai y en Numea, Nueva Caledonia. En Medellín, Colombia, no hay ninguna familia que no haya perdido en estos 50 años de conflicto, por lo menos uno de sus miembros. Lo mismo ocurre entre las personas de las comunidades de los Focolares: tres generaciones con historias como la de Rosa que, después del asesinato de su hijo a manos de un amigo, no se abandonó a la venganza, sino que con todas sus fuerzas ejerció el valor del perdón, trabajando en el centro social del barrio para difundir reconciliación, cuidado, cultura. Proyectos de capacitación en varias ciudades de Colombia, Ecuador, Venezuela y México ven la alternancia de generaciones de niños, que ya profesionales y docentes, asumen la tarea de la formación de los nuevos ciudadanos a la cultura de la fraternidad y a la paz. En Australia se centrará en la paz y la acogida, con citas en Canberra, Melbourne, Sídney y Perth, este último preparado por los jóvenes y celebrada al aire libre en la Plaza de Northbridge. En Nueva Zelanda encuentros en Wellington y Christchurch sobre Politics for Unity: Making a World of Difference. En Corea del sur reuniones animadas por treinta y una comunidades en las diversas áreas para profundizar en el vínculo entre Chiara Lubich y la paz. En Filipinas, en La Universidad de La Salle de Manila, el simposio Carisma de la unidad, un legado sin tiempo, investigará en los caminos que se abrieron en los 50 años de vida del Movimiento de los Focolares en Asia. En Vietnam, en Vung Tau, 300 personas de todo el país se reunirán algunos días para compartir en el espíritu de la unidad. En Pakistán, están programadas reuniones de espiritualidad y Misas por la paz en siete ciudades.  Reuniones también en Burkina Faso, Costa de Marfil, Camerún, Nigeria, Kenia, Uganda, para nombrar sólo algunos. En Burundi, en estado actual de tensión social, se reunieran alrededor del tema Misericordiosos como el Padre celestial, somos constructores de paz. En la República Democrática del Congo una conexión telefónica unirá las grandes ciudades del país: Lubumbashi, Goma, Kikwit y Kinshasa. Aquí 1500 personas, ante embajadores, miembros de la UNESCO, representantes de diferentes denominaciones cristianas, autoridades musulmanas, reflexionarán sobre cómo vivir la paz en la familia. En Italia, la presencia generalizada de la comunidad de los Focolares suscita numerosas iniciativas locales. En Roma, 280 jóvenes se reunirán en el Parlamento con la presidenta de la cámara, Laura Boldrini, el ministro de Relaciones exteriores, Gentiloni y otros parlamentarios. Pasquale Ferrara, diplomático, Michele Zanzucchi, director de la revista Città Nuova, Shahrzad Houshmand, teóloga musulmana, serán los interlocutores para discutir los contenidos de un manifiesto con propuestas concretas sobre la paz, el desarme y la reconversión industrial de las armas. En la Universidad de Pisa, una conferencia de Antonio Maria Baggio en la Facultad de derecho: El amor de los amores. Inspiración religiosa y laicidad de la política en Chiara Lubich. En el Palacio Ducal de Génova una profundización en Laudato si’ durante el evento Las religiones dialogan por la paz y por el medio ambiente, con Husein Salah, presidente de la comunidad islámica, Giuseppe Momigliano, rabino, Gnanathilaka Mahauswewe, monje budista, Andrea Ponta, ingeniero ambiental, Roberto Catalano, centro diálogo interreligioso de los Focolares. Yo a través de ti es el título de un evento itinerante en Milán, una especie de “abrazo” a la ciudad y la interacción entre los diferentes grupos. Y también diálogo, integración, perdón para el ciclo de eventos ¿Mi mundo es como el tuyo? … pasos para llegar a conocernosEn el Auditorio del Centro Mariápolis de Castel Gandolfo, en Roma, se reunirán los miembros del cuerpo diplomático, acreditado en Italia y en la Santa Sede y representantes del mundo de la cultura; serán recibidos por la presidente de los Focolares, Maria Voce, para recordar a Chiara Lubich bajo el perfil La cultura del diálogo como factor de paz. En Medio Oriente, mientras que los conflictos armados continúan sembrando destrucción y matando la esperanza, las comunidades de los Focolares en Siria afirman que «de la paz somos responsables también nosotros. Si creemos que Dios, el Señor de la historia, puede vencer el mal y nos escucha, pecamos de omisión si no oramos sin cesar a Él, para el cual son posibles las cosas imposibles y nos puede apoyar para alcanzar la meta grandiosa de hacer de toda la humanidad una sola familia. Por tanto, orar, mientras que cambiamos nuestros corazones y hacemos circular los bienes». El significado del 14 de marzo de 2016 radica precisamente en esto: hacer converger los esfuerzos y las oraciones de muchos, desde muchos puntos de la tierra, para hacer el mundo más unido. En paralelo, la Causa de beatificación de Chiara Lubich, iniciada el 27 de enero de 2015, está siguiendo el procedimiento previsto por la legislación vigente. Son muchas personas que han podido ofrecer su testimonio, de varias Iglesias y de convicciones no religiosas. Un mosaico que pone de relieve el ejemplo de su vida, comprometida con los que Dios ponía en su camino para «hacernos santos juntos». Comunicado de prensa

Argentina: una comunidad abierta

Argentina: una comunidad abierta

001Saliendo de la capital de Argentina por la autopista hacia el sur, después de media hora de viaje se llega a Plátanos, barrio de la periferia con casi 20.000 habitantes. Son personas trabajadoras que construyeron sus propias viviendas con mucho esfuerzo y poco dinero. La parroquia, dedicada a Santa Isabel de Hungría, es una parroquia que tiene mucha actividad. Hace casi 30 años el Padre Francesco Ballarini, italiano, llevó allí el espíritu de los Focolares. Hoy son los laicos los que continúan viviendo este espíritu de unidad junto con otras parroquias de la Diócesis. «Comenzando este año – cuentan- organizamos una fiesta para los niños de la zona más periférica de Plátanos, cuyos habitantes no asisten con asiduidad a la Parroquia. Invitamos a cada uno a poner en común sus propios talentos: había alguno que enseñaba a hacer pan, otro a pintar, había también un taller de cerámica, un papá catequista que era mago, algunas señoras del barrio prepararon el mate (la típica bebida que se toma en el Cono Sur)». En esta oportunidad conocieron a una chica quinceañera embarazada, a punto de dar a luz. «Precisaba de todo. Comenzó una carrera de solidaridad para lograr cubrir las necesidades suyas y las del bebé, que nació después de pocos días. Llegando a su casa quedamos impresionados del ambiente pequeño, sin piso, sin ventanas, con la puerta rota, donde vivían además de ella y el recién nacido, 6 hermanitos y los padres. La comunidad nuestra se enteró de esta situación, y comenzó hacerles llegar mucha ayuda. Ya casi estamos listos para colocar las ventanas, la puerta, una estufa y otras personas han ofrecido la mano de obra. Algunas señoras fueron a enseñarle a M como cuidar lo mejor posible al bebé. Esta jovencita M, a quien conocimos triste e irascible, ha comenzado a sonreír. Es la caridad vivida juntos la que hace estos pequeños milagros». «Otra iniciativa que estamos llevando adelante juntos – continúan- es el proyecto “Sachetera”: consiste en fabricar con las bolsitas de leche toldos para los que no tienen techo. Como parroquia queremos seguir sosteniendo este proyecto y, si bien este trabajo lo puede hacer cada uno en su propia casa, preferimos trabajar juntos: muchachos, jóvenes y adultos. En una jornada de fuerte lluvia, dudábamos si lograríamos reunirnos, pero pen 003«Nos encontramos más adelante en Bernal (otro barrio) con personas de otras parroquias y con jóvenes de los Focolares que conducen proyectos de auxilio a los más necesitados. Para nosotros es importante compartir nuestras experiencias con otras parroquias, también para no cerrarnos solo en “nuestra” periferia y, en cambio, aprender de los demás». En el mes de septiembre se incendió la casa de una familia de un barrio vecino, destruyendo todo, «entramos en acción para ayudar, llevando lo necesario de nuestras casas. Con la comunión de bienes comunitaria logramos reconstruir las paredes. Así, con mucho entusiasmo, ellos pudieron reconstruir su casita. Solo más tarde supimos que la familia pertenece a la iglesia pentecostal, y él es Pastor. Nos conmovimos porque el Amor no hace distinción, una vez más, ni en la confesión religiosa, ni en otras diferencias». En los días siguientes el Pastor, albañil de profesión, se ofreció a pasarle la cal a las paredes de la iglesia destinada a la construcción de un altar para la imagen de la Virgen de Luján. «Les agradezco por el amor que ustedes dieron sin pedir nada – dijo el Pastor a la comunidad católica reunida para la misa dominical en la que quisieron participar- me ayudaron a vencer los prejuicios que muchos de nosotros (pentecostales) tenemos hacia los católicos, también ustedes son mis hermanos».  

Fontem: Un Jubileo de agradecimiento

Fontem: Un Jubileo de agradecimiento

VISITA DI MONS LYSINGE E MONS ANDREW INSIEME A 40 PELLEGRINI DELLA DIOCESI DI MAMFE«No podemos hablar de evangelización en Fontem sin hablar del Movimiento de los Focolares», afirma Mons. Nkea delante de las cámaras, concluyendo su visita al Centro Internacional de Rocca di Papa el pasado 8 de marzo. «Hace 50 años Chiara Lubich vino a Fontem y trajo el Ideal [de la unidad]. Por este motivo vinimos aquí: para agradecer a Chiara y al Movimiento por todo lo que hicieron por nosotros en estos 50 años. Es una peregrinación de agradecimiento». Hace 50 años la Diócesis de Mamfe no existía. Y Fontem era una aldea perdida en la selva camerunense, difícilmente alcanzable. No se pueden comprender las palabras del Obispo sin referirse un poco a la historia de esta región, que ha sido descrito por alguna persona como “un milagro en la selva”. Fontem es la primera de las ciudadelas africanas: en 1966 algunos focolarinos médicos viajaron al pueblo Bangwa, diezmado por la enfermedad, con una mortalidad infantil del 98%. Pocos meses después la misma Chiara Lubich viajó a Fontem: «Aquella gran masa de personas reunidas en una vasta explanada delante de la vivienda de su rey, el Fon,- contará en 1995me pareció tan unida y tan sediente de ideales grandes, que sentí que era un pueblo ya preparado desde hacía tiempo por María para el cristianismo, por su forma de ser tan integral y genuina». «Ellos creyeron en los focolarinos porque los Bangwa sintieron que lo que hacían con ellos lo hacían a Jesús, dando en primer lugar el testimonio del amor entre ellos y luego hacia todo el pueblo». 20160310-01Hoy en Fontem existe un hospital, Mary Health of Africa, que atiende a gran parte de la región. También hay un colegio, Mary Seath of Wisdom, en el cual se forman los muchachos de las escuelas superiores. Surgieron parroquias en Menji, Fotabong, Fojumetaw, que comenzaron con la ayuda de los focolarinos. «Principalmente aprendimos el amor recíproco y la unidad- declara aún el obispo Nkea-. También yo soy Bangwa por lo tanto estoy hablando en nombre de mi pueblo». «Hemos aprendido el diálogo interreligioso: lo que importa ahora es amarnos unos a otros, cristianos o no, vivir la unidad entre nosotros». Quienes rendían homenaje a Chiara Lubich eran una delegación compuesta por obispos – Mons. Nkea y el obispo emérito Mons. Lysinge, – que cumplía 50 años desde su ordenación sacerdotal- sacerdotes, religiosas y muchos laicos, testigos de esa comunión activa en la diócesis, que ambos obispos propician. Fueron recibidos por la presidente María Voce, del Centro Internacional de los Focolares – quien en enero del 2009 realizó su primer viaje a Fontem como nueva presidente de los Focolares- y el copresidente Jesús Morán, quien en cambio visitará la ciudadela del Camerún por primera vez en el próximo mes de diciembre. La visita de la delegación dio comienzo a las celebraciones del 50º aniversario de la llegada de la espiritualidad de la unidad a Fontem (1966-2016). Las celebraciones durarán todo el año. Un momento particularmente impresionante fue la visita a la casa donde Chiara Lubich vivió en los últimos decenios. Como conclusión se realizó una Misa muy recogida y solemne en la capilla donde descansan sus restos. 20160310-02«Vuestra “peregrinación” hasta aquí demuestra los frutos de aquella primera visita de Chiara, que daba comienzo a una aventura Divina que nadie imaginaba – afirma María Voce en su intervención de bienvenida a la delegación-. Ustedes son el fruto de la vida de estos 50 años. Para nosotros es una gran alegría: nos permite ver la gran vitalidad de África. Ya pasaron 50 años. El augurio ahora es el de comenzar un nuevo período, esperamos que sea largo, para ofrecer a Dios árboles plenos de flores y frutos maduros». «Con África –comenta Jesús Morán- vivimos un intercambio de dones: el carisma de la unidad don para África. El continente africano don para todo el Movimiento».   https://www.focolare.org/news/2013/02/11/50-dei-focolari-in-africa/ EL testimonio del Fon de Fontem Lucas Njifua https://vimeo.com/91699633  

Un médico sirio en el campo de refugiados

Un médico sirio en el campo de refugiados

medico_siria_01«Hace cinco años, antes de que estallara el conflicto en Siria, con toda la familia proyectamos realizar, todos juntos, una experiencia full time en la ciudadela internacional de los Focolares en Loppiano (Florencia). Violet y yo asistiríamos a la Escuela Loreto en la cual, junto con otras parejas de varias partes del mundo, podríamos profundizar diversos temas sobre la familia a la luz de la espiritualidad de la unidad, mientras que los cuatro hijos se integrarían en las escuelas del lugar. Después de varios años de trabajo –soy médico- queríamos reservar un año de nuestra vida para dedicarlo a Dios. Nos preparamos para partir cuidando todos los detalles, con responsabilidad, sin saber lo que iba a ocurrir poco tiempo después: el estallido de conflictos en nuestra tierra. En el tiempo que faltaba para partir hacia Loppiano, pude ser útil de mil modos, socorriendo a los heridos, haciendo también largos y arriesgados viajes en auto para buscarlos. Inclusive el viaje a Italia fue arriesgado por los desórdenes que lamentablemente continuaban. medico_siria_04Estando ya en Loppiano seguían llegando noticias, cada vez más trágicas, que nos atemorizaban y al concluir el curso, nuestros familiares nos rogaron que no volviéramos. Imaginen la angustia con la que tomamos esta decisión y el desconsuelo de no poder hacer nada por nuestros compatriotas. Nos sentíamos como un automóvil: con el motor encendido a mil por hora pero frenado a la fuerza. También quedarse en Italia no era algo simple. Delante nuestro no veíamos futuro. Aunque nos encontrábamos en un ambiente acogedor, por no tener mi título revalidado no podía ejercer la profesión. Me fui adaptando a realizar otros trabajitos como carpintero u otra cosa, en espera de alguna solución. medico_siria_02Pero finalmente se dio la ocasión de poder hacer algo por mi gente. Me enteré de un proyecto de acogida para prófugos en Eslovenia atendido por Médicos Sin Fronteras en el que hacía falta un médico que hablara árabe. De este modo me fui enseguida, sin saber exactamente qué sucedería. Llegando me puse inmediatamente al servicio de mucha gente que llegaba al Centro de acogida, que había viajado por mar o realizando un largo recorrido a pie. Muchos de ellos provenían de Irán, de Iraq, de Afganistán… y ¡muchos eran de Siria! Verlos llegar y poder recibirlos hablando nuestro idioma, fue para mí una fuerte emoción: las lágrimas me caían por el rostro. Desde ese momento no me preocupé de la hora de ir a dormir, de la hora de comer… quería estar todo el tiempo con ellos, aliviar sus sufrimientos, cuidarlos, hacer que se sintieran ‘en su casa’. Tengo todavía en el corazón y en los ojos a la primer niñita que atendí: lloraba continuamente, no lográbamos tranquilizarla. Auscultándola me di cuenta que sólo tenía dolor de barriga y comencé a hamacarla y hablarle en árabe… la niña poco a poco se tranquilizó y se durmió en mis brazos. Cuando los otros se acercaban para tomarla, ella se agitaba y no quería dejar mis brazos… fue para mí una experiencia muy fuerte. Aquí la llegada de gente es continua. Llegan tres trenes por día con casi 2.500 personas. En solo cuatro días nos tuvimos que ocupar de tanta gente como no había ocurrido en un mes. En nuestro equipo somos seis: los otros son de otros lugares. También ellos se dieron cuenta enseguida de lo impactante que fue para mí ver llegar a mis compatriotas en esas condiciones. Cuando los recibo, les digo mi nombre (Issa=Jesús), veo que sus ojos brillan. Para cada uno de ellos quisiera ser otro Jesús que está allí para recibirlos, que los cuida a través de mí. Esta posibilidad que se me dio es para mí como una respuesta de Dios».  

Igino Giordani: Ésta es la hora de la mujer

Igino Giordani: Ésta es la hora de la mujer

20160308-a (2)«Se podría decir que ésta es la hora de la mujer: no porque la prensa no haga más que hablar de divorcios y de chismes y de lo que las divas han puesto de moda, sino porque se siente que en la convivencia, que es fruto de la dialéctica hombre-mujer, sea más que nunca necesaria, la presencia de la que es o será madre; naturalmente o espiritualmente. El organismo social sufre como nunca antes, por la carencia de la femineidad plena, sana, normal, es como un vuelo en donde una de las alas está demasiado agitada, la otra apagada, y se avanza entonces en el desorden. La conciencia del pueblo es que ésta es la hora de la mujer; pero de una “mujer, mujer”, y no de una contaminación o rival del hombre, casi como un hombre . La historia de los últimos siglos, en los cuales el tipo del hombre fuerte- del superhombre- fue forjado con el desprecio de la femineidad, ha sufrido el exceso de masculinidad. No equilibrada con la femineidad. Un defecto igual y contrario de la femineidad que no está integrada y ni sostenida por la virilidad. Hoy las mujeres tienen derecho al voto, conquistan puestos de trabajo en las oficinas, invaden la vida pública. Pero su influencia sigue siendo descolorida, como antes o peor que antes, porque al entrar en la competencia política, se alinean con los varones, asimilan sus ambiciones, se adecuan a sus métodos, se vuelven machos de segunda categoría. Suman sus votos, sin discriminación considerable, a los votos de los hombres de modo que el juego de los varones continúa como antes, sin la corrección, sin la integración, sin la iluminación del otro factor que es indispensable. Se sigue volando (o se cae en picada) con una sola ala. Pensemos en lo que ha sido y en lo que es el atractivo de María: sólo su nombre significa sublimación de la mujer, la mujer que se convierte en el punto de inserción de lo divino en lo humano y como ianua coeli, (Puerta del Cielo), movimiento de ascensión de lo humano hacia la vida de Dios. La sociedad requiere la presencia de la mujer, para que ella aporte a la sociedad las instancias de la maternidad, es decir, de la vida y por lo tanto, del alimento material y moral, de la educación, del amor en la paz y en el trabajo, de la familia que se reúne en la pureza y por lo tanto de la condena de los totalitarismos y de la guerras: pues la mujer por naturaleza significa generación de vida y no producción de muerte, para el bien de los hijos: y éstos serán el Estado y la Iglesia del mañana, serán la humanidad de siempre». (Igino Giordani, «Fides», 1961)  

Evangelio vivido: 4 sillas y 2 calabazas…

Evangelio vivido: 4 sillas y 2 calabazas…

20160307-01«Hemos conocido una familia de burundeses que –por la terrible y desconocida situación actual del país- se refugiaron, con otras muchas familias, aquí en Kampala donde vivimos nosotros», nos escriben desde Uganda. El padre regresó a Burundi para mantener su trabajo que le permite pagar un costoso alquiler de su casa ugandesa, y la comida para sus hijos todavía pequeños y para la recién nacida, de apenas tres semanas. La madre no lograba quedarse ahí cuando recomenzaron los disparos en la ciudad, para ella era muy fuerte el recuerdo de lo que había vivido en primera persona en los años ’90, cuando estalló otra crisis en Burundi. Se libró de la muerte milagrosamente, después de que por dos días consecutivos el director de la escuela que frecuentaba logró salvarla de los soldados que fueron a buscarla a ella y a otras chicas, dándoles un poco de dinero. Ahora ante los primeros atisbos de horror, decidieron escapar dejando todo lo que tenían en Buyumbura. Con ellos viven también otros parientes: son en total 8 personas. Supimos que el alquiler no incluía el mobiliario y que en la sala tenían sólo cuatro sillas: ¿qué hacer? Se nos ocurrió que quizás cuatro de nuestras sillas plegables, que usamos en casa de vez en cuando, cuando somos muchos, podían seguramente ser utilizadas en forma más provechosa en esa casa: que por lo menos cada uno pudiera tener una silla para sentarse y comer más cómodamente. Saliendo de casa agarramos también dos calabazas del huerto, que habíamos sembrado casi por casualidad, hacía algunos meses, y que habían crecido después de la última estación seca, y en estos últimos meses, en más de una ocasión, han resultado ¡muy útiles! Además, precisamente el día anterior habíamos recibido de regalo algunas provisiones: la Providencia no nos ha faltado nunca en estos meses, pero precisamente es asi si seguimos compartiendo, que esa promesa –“Den y se les dará”- escrita en el Evangelio, se sigue realizando y se multiplica. Entonces agregamos también dos Kg. de azúcar, dos de arroz, uno de sal y un litro de aceite, y fuimos a visitarlos. La casa nueva estaba limpia, había también algunas terminaciones inusuales, en el cielorraso había una linda lámpara, pero en las habitaciones no había camas, solo algunos colchones. En la sala una pequeña mesa redonda de plástico y cuatro sillas, un pequeño televisor en la esquina, puesto en el piso, con el cable de la antena que colgaba volando encima de las cabezas de los visitantes. No vimos alrededor ni juguetes ni otros muebles. Entramos con nuestras sillas y transcurrimos dos horas muy agradables conociéndonos más profundamente, compartiendo el pasado y las esperanzas en el futuro. Los chicos por el momento interrumpieron los estudios: los más grandes quisieran ir a la universidad, pero en Uganda los costos son mucho más altos que en Burundi. Aquí es imposible para ellos, por lo menos por ahora. Además encontrar trabajo es difícil, la desocupación es alta y siendo extranjeros, si no se conoce a alguien, es prácticamente imposible. Además no hablan el luganda, el idioma local, y el inglés no es su lengua madre. Pero, me dicen: “…¡Nosotros confiamos en Dios!”. A las 7.30 de la noche, teníamos que regresar. Nos despedimos. Estaban muy felices con nuestra visita, pero en cuanto les dijimos que se quedaran con las sillas, y que nos las podían devolver cuando ­ dejaran esa casa, sus rostros se iluminan: ¡siguen saludándonos y agradeciéndonos todavía! ¡Antes de subir al automóvil, quieren darnos también su bendición! Regresando a casa, pienso que también 4 sencillas sillas y dos calabazas, si se donan, pueden contribuir a llenar de alegría el corazón de quien las recibe y de quien las da…». (S.M. Uganda)    

Chiara Lubich: Para que vuelva la paz

Chiara Lubich: Para que vuelva la paz

20160306-01«Lo que no debía suceder ha sucedido; ha estallado la aterradora guerra y en el mundo entero estamos en suspenso ante la duda de que pueda extenderse e involucre a otros pueblos». Estamos a pocas semanas de la invasión de Estados Unidos en Irak (17 de enero de 1991) como respuesta a la invasión de las tropas iraquíes en Kuwait (2 de agosto de 1990). En las páginas de Città Nuova, Chiara Lubich vuelve a hablar de la paz. Las que publicamos son sus palabras en un editorial de febrero de1991. «No obstante las muchas oraciones, Dios ha permitido la guerra. ¿Por qué? Porque la voluntad de alguno de los responsables no ha coincidido con la suya, expresada por la voz coral de aquellos que tenían mayor razón y que el Santo Padre, la más grande autoridad espiritual y moral del mundo, resume y concentra en sus continuos llamamientos a la paz, a la inutilidad de la guerra para resolver cada problema, y evitar así sus consecuencias catastróficas. Esperamos solamente que, en los misteriosos planes de Dios, Él, con su infinito amor, sepa y quiera sacar algún bien de este inmenso mal. No lo mereceríamos, pero conocemos la inmensidad de su misericordia. Por esto y sobre todo para que vuelva la paz, no dejemos de rezar. Deberá ser aún más intenso el time-out cada día a las 12 (hora italiana) para pedir, unidos, la paz. En este momento, además, todos debemos sentirnos llamados a seguir con decisión una línea de vida que corrija, al menos dentro de nosotros (pero por la comunión de los santos, en muchos), el error que se ha cometido. Los hombres no han hecho la voluntad de Dios, del Dios de la paz, han hecho la propia. Debemos imponernos, como nunca lo hemos hecho, para cumplir perfectamente su voluntad. «No se haga mi voluntad, sino la tuya». Estas palabras de Jesús deben asumir para nosotros, hoy, una importancia muy particular. Frente a éstas, cualquier otra cosa debe ser secundaria. No tiene que importarnos tanto en nuestra vida, por ejemplo, estar sanos o enfermos,  estudiar o servir, dormir o rezar, vivir o morir. Lo importante es que hagamos nuestra su voluntad, que seamos su voluntad viva. Así vivíamos en los primeros tiempos de nuestro Movimiento cuando, precisamente en medio de otra guerra, el Espíritu apenas nos había iluminado acerca del valor de las cosas. Frente al derrumbe provocado por el odio, Dios se había revelado como el único ideal que no muere, que ninguna bomba puede hacer caer. Dios Amor. Este gran descubrimiento era una bomba espiritual de tal magnitud, que nos hizo olvidar literalmente todas las que caían alrededor, por la guerra. Descubríamos que más allá de todo y de todos, está Dios que es Amor, está su providencia que, para aquellos que lo aman, hace que todo coopere al bien. Descubríamos la huella de su amor en todas las circunstancias, también bajo los azotes del dolor. Él nos amaba inmensamente. Y nosotros ¿cómo corresponder a su amor? «No quien dice Señor, Señor, sino quien hace mi voluntad, ése me ama». Podíamos, por tanto, amarlo haciendo su voluntad. Viviendo así nos habituamos a escuchar con creciente atención “la voz” dentro de nosotros, la voz de la conciencia que nos subrayaba la voluntad de Dios expresada de las más diferentes maneras: a través de su Palabra, los deberes del propio estado, las circunstancias, las inspiraciones. Teníamos la certeza que Dios habría llevado nuestra vida hacia una divina aventura, antes desconocida para nosotros, donde, espectadores y actores al mismo tiempo de su designio de amor, dábamos, momento tras momento, la contribución de nuestra libre voluntad. Poco después nos hizo entrever destellos sobre nuestro futuro, haciéndonos captar con seguridad el fin para el cual el Movimiento estaba naciendo: realizar la oración del testamento de Jesús: «Padre, que todos sean uno», colaborar a la realización de un mundo más unido. También ahora podemos vivir de este modo. ¿Hemos tenido un brusco y doloroso cambio de vida? ¿Debemos correr muy a menudo a los refugios, exactamente como en aquellos lejanos tiempos? ¿Vivimos momentos de miedo, de angustia, de duda incluso de que nos quiten la vida? O ¿llevamos la vida de siempre, con nuestras tareas de cada día, lejos todavía del peligro? Valga para todos lo que más vale: no esto o aquello, sino la voluntad de Dios: ponernos a la “escucha”, ponerla en el primer lugar en nuestro corazón, en la memoria, en la mente; poner, antes que cualquier otra cosa, todas nuestras fuerzas a su servicio. Rectificaremos así, al menos en nosotros, el error que se ha cometido. Cristo permanecerá en nuestro corazón y así, estaremos todos más compactos, más unidos, seremos más “uno”, compartiendo cada cosa, rezando con eficacia los unos por los otros y para que vuelva la paz». Chiara Lubich: Attualità leggere il proprio tempo, Città Nuova Ed., pag.85-87. Originalmente publicado en Città Nuova n. 4/1991

Bruni: la felicidad es demasiado poco

Bruni: la felicidad es demasiado poco

Luigino-Bruni«Un día te diré que renuncié a mi felicidad, por ti». Las primeras palabras de la canción de los Stadio, que ganó el último Festival de Sanremo [festival de la canción italiana ndr], nos brinda una buena ocasión para reflexionar acerca de la felicidad nuestra y la de los demás. Nuestra civilización colocó la búsqueda de la felicidad individual en el centro del propio humanismo, dejando otros valores y la felicidad de los demás – a menos que no sean un medio para aumentar nuestra felicidad – cada vez más en segundo plano. De tal suerte que ya no tenemos las categorías para poder comprender las elecciones (que todavía existen) de quienes renuncian, conscientemente, a la propia felicidad en pos de la de otra persona. […] La historia de la felicidad es muy larga. Desde un inicio, el humanismo cristiano, innovando mucho con respecto a la cultura griega y romana, propuso una visión de la “felicidad limitada”, donde la búsqueda de nuestra felicidad no era considerada como la última finalidad de la vida, porque estaba supeditada a otros valores, como la felicidad de la comunidad, de la familia, o el paraíso. Durante siglos pensamos que la única felicidad digna de ser alcanzada era la de los demás y la de todos. […] 20160305-aEn la edad moderna, esta antigua y arraigada idea de felicidad ha entrado en una profunda crisis, y en su lugar se abrió paso la idea, que era propia del mundo pre-cristiano, según la cual nuestra felicidad es el bien último y absoluto […]. La economía contemporánea, con su matriz cultural anglosajona, se casó perfectamente con el ideal de la felicidad individual. […] Para la economía, el mundo está habitado sólo por personas que quieren satisfacer al máximo la propia felicidad. […] Esta descripción de las elecciones humanas logra explicar muchas cosas, pero resulta inútil o engañosa cuando tenemos que explicar aquellas pocas, pero decisivas elecciones de las que depende casi toda la calidad moral y espiritual de nuestra vida. Cuando Abraham decidió encaminarse con Isaac hacia el Monte Moriá, seguramente no pensaba en su propia felicidad […] pero ciertamente estaba siguiendo una voz, dolorosísima, que lo llamaba. Y, como él, muchos siguen subiendo los Montes Moriá de su vida. Los momentos, los actos y las elecciones a lo largo de nuestra existencia no son todos iguales. […] Hay muchas cosas buenas en nuestra vida que no se miden en el eje de nuestra felicidad, y algunas ni siquiera en el eje de la felicidad de los demás. Las elecciones más importantes son casi siempre elecciones trágicas: no elegimos entre un bien y un mal, sino entre dos o más bienes. Y hay también decisiones en las que salimos del rango normal. Y otros momentos en los que no logramos ni siquiera elegir, sino tal vez, siendo dóciles, pronunciar sólo un “sí”. La tierra està habitada por muchas mujeres y muchos hombres quienes, en ciertos momentos decisivos, no buscan la propia felicidad. […] 20160305-02Felicidad, verdad, justicia, fidelidad, son todos bienes primarios, originarios, que no se pueden reducir a uno solo, aunque éste fuera la felicidad. Podemos tener una idea clara de cuál es la elección que nos hará más felices, podemos incluir en esa felicidad casi todas las cosas bellas de la vida, también las más altas, sin embargo, a pesar de esto, podemos decidir libremente no elegir nuestra felicidad si hay otros valores en juego que nos interpelan. Y de pronto, al final, descubrir una palabra nueva: la alegría, que a diferencia de la felicidad no puede ser buscada, sino sólo acogida como regalo. Quienes han dejado su propia marca positiva en la tierra, no han vivido la vida persiguiendo la propia felicidad. La han considerado demasiado pequeña. A veces la vieron, pero no se detuvieron a recogerla; prefirieron seguir caminando detrás de una voz. Al final de la carrera no quedará la felicidad que acumulamos, sino que, si algo quedara, serán cosas mucho más verdaderas y serias. Somos mucho más grandes que nuestra felicidad. […] Luigino Bruni La voz de los días/1 – Para leer el texto completo en italiano (Fuente: Avvenire)  

Jeque Khaled Bentounès: Sueño con una Academia de paz

Jeque Khaled Bentounès: Sueño con una Academia de paz

20160304-02Khaled Bentounès, argelino, nacido en 1949, es guía espiritual del Sufismo Alâwiyya. Es un hombre de paz. Vive en Francia desde los años ’60 y ha dado vida a numerosas iniciativas, originales y de mucho relieve, como la fundación de los Scout musulmanes de Francia, la Asociación Tierras de Europa, los coloquios internacionales ante la UNESCO por un Islam de paz, la convocatoria –a través de la Asociación Internacional Sufí Alauita, por él fundada – a una campaña de movilización internacional para que la ONU instituya la jornada mundial del “Vivir juntos”. El pasado 26 de febrero estuvo de visita en el Centro internacional de los Focolares, y sostuvo un coloquio con la presidente María Voce y el copresidente Jesús Morán. En el curso de la visita fue posible hacerle algunas preguntas. La primera, a partir de los numerosos proyectos de estos años, se refiere al hoy. «Para responder rápidamente a la pregunta» – ahora en qué está trabajando – afirma Bentounès, «trabajo en convertirme todavía más, y convertirme a mí mismo a la visión de un mundo más fraterno, más en armonía, un mundo más justo; trabajo para este ‘circulo’ de fraternidad, para que pueda verlo antes de dejar esta tierra, que pueda ver realizado el sueño que tiene gran parte de la humanidad. No sé si lo veré, pero al menos tengo la convicción de que habré dado mi aporte». Sobre los motivos de esperanza, en un tiempo en el cual la fraternidad entre los pueblos parece no tener lugar, Khaled Bentounès dice que ha encontrado razones para esperar «primero que nada, en la riqueza de la herencia espiritual recibida de mis antepasados, en la que la fraternidad es imprescindible. Cuando veo de donde provengo, veo una única línea ininterrumpida». «Me ha sucedido que cuando me encuentro con personalidades políticas y del mundo de la economía –agrega- que describen un mundo que va hacia problemas insuperables, yo les repito lo que decían nuestros maestros: “Si les dijeran que mañana va a ser el fin del mundo, ¿qué harían? ¡Sigan plantando y sembrando! ¡No se preocupen demasiado!” Entonces, ¡hagamos lo que tenemos que hacer! Plantemos y sembremos el amor, la esperanza y la fraternidad, ¡sin importar lo que suceda! Aunque mañana fuera el fin del mundo. Mientras quede un minuto, hay que usarlo. Podría ser que mañana sea otro día, otro mundo. Y: ¡perseveren!». Khaled Bentounès, quien en 1986 participó en el encuentro de Asís con Juan Pablo II y los líderes religiosos mundiales por la paz, conoce a los Focolares desde los años ’80 cuando se encontró con Chiara Lubich. Su relación prosiguió en Francia, hasta la reciente colaboración cuando le otorgaron el premio Chiara Lubich por la Fraternidad 2015, a la asociación “Vivre ensemble à Cannes”, de la que es uno de los promotores. <20160304-01strong>¿Cuál es hoy su relación con los Focolares? ¿Cuál la sintonía con sus ideales? «Pienso que el tiempo –responde el jeque- ha fecundado esta relación y el encuentro de hoy es también fruto del pasado. Esta amistad ha permanecido constante. Mi presencia hoy en el Centro internacional y mi encuentro con la presidente María Voce y con el copresidente confirma esta continuidad. Hemos hablado de la confianza recíproca, del proyecto de llevar una visión más fraterna al mundo que nos rodea; de cómo los Movimientos espirituales de tradición cristiana y de tradición musulmana pueden trabajar para ofrecer su testimonio a quienes deseen escucharlos. No pretendemos cambiar el mundo solos, pero es un hecho que entre las distintas tradiciones religiosas hay seguramente vínculos que reforzar para poder caminar juntos, hacia un porvenir que se construye el uno con el otro y no el uno contra el otro». La entrevista concluye con la comunicación de un sueño de Bentounès: «Existen academias de ciencias, matemática, música, filosofía, militares –dice Khaled Bentounès – y no hay academias de paz. ¿Por qué? No basta el compromiso espiritual. Tenemos necesidad de enseñarla. La paz no es algo que baja del cielo, es algo alrededor para lo cual se ‘trabaja’. Es un estado existencial, una visión del mundo, un comportamiento. Existe la paz económica, la paz social, la paz política. La paz se refiere a todas las cosas. La ecología es una forma de paz con la naturaleza». «Es necesario aprender cómo hacer la paz – continúa- ¡Éste es el proyecto que tengo en el corazón! ¿Cómo vincular la paz y el arte, la paz y la arquitectura? ¿La paz puede ser transmitida mediante el arte a las generaciones futuras? ¿Cómo se puede crear, mediante una economía solidaria, la comunión de saberes, de riquezas, en modo justo, más allá de los países? ¡Se trata de un ‘sacrosanto’ taller! Esta academia no es una palabra, es un trabajo concreto que debe acompañar nuestro operar en todos los campos». «Ésta es, pienso –dijo concluyendo- nuestra espiritualidad, que nutre la conciencia para ir más lejos y hacer que todos participen».

Algunos eventos en el mundo por el 8° aniversario (14.3.2016) de la muerte de Chiara Lubich

5.3.2016 – Brescia (Italia) En la Universidad católica, congreso “Pablo VI y Chiara Lubich, la profecía de una Iglesia que se vuelve diálogo”, organizado con la colaboración del Instituto Pablo VI en continuidad con las “Jornadas de estudio” que tuvieron lugar en Castel Gandolfo en noviembre de 2014. Entre los relatores estarán: Mons. Vincenzo Zani, Secretario de la Congregación para la Educación Católica; Lucía Albignente, responsable del sector ‘historia’ del Centro Chiara Lubich; el Pbro. Angelo Maffeis, presidente del Instituto Pablo VI; Franco Monaco, político y periodista; Alberto Lo Presti, profesor de Teoría política del Instituto Universitario Sophia. 6.3.2016 – Vicenza (Italia) ‘Más allá de las fronteras’, congreso interreligioso en el Centro A. Onisto – Borgo S.Lucia, 51. Hablarán el obispo emérito de Alepo Mons. Armando Bortolaso, el imán de las comunidades islámicas del Véneto, Dr. Kamel Layachi y Rita Moussallem del Centro para el diálogo interreligioso de los Focolares. El evento se concluirá con un flashmob en la Plaza de los Señores. 6.3.2016 – Olomouc (República Checa) En la sala del arzobispado se desarrollará un programa cultural dedicado a la figura de Chiara Lubich como promotora de paz. Al terminar, el arzobispo Mons. Jan Graubner celebrará la Santa Misa en la catedral. 8.3.2916 – Ischia (Italia) En el auditorio multifuncional de la isla, a las 19.30, velada sobre el tema Trabajo y temas correlativos (dignidad, legalidad, mujer, etc.) Participarán Patience Mollè Lobè (ingeniero civil de Camerún), Antonio Diana (empresario). Moderador Carlo Cefaloni (periodista de Città Nuova experto en problemáticas laborales). 11.3.2016 – Caserta (Italia) Entre música, testimonios, teatro, en el Palacio Real de Caserta (a partir de las 19,30) tendrá lugar una reflexión sobre el pensamiento y la vida de Chiara Lubich con el título: “El atractivo del tiempo moderno”. Con la colaboración de la Diócesis y de la Dirección del Palacio. 12.3.2016 – Sarajevo (Bosnia Herzegovina) La facultad teológica realizará una Jornada abierta sobre Chiara Lubich con el título: “El mensaje de diálogo y de paz”. Estarán presentes personas de otras confesiones cristianas, de otros credos, y de confesiones no religiosas. En la catedral el Card. Vinko Puljić, arzobispo de Sarajevo, presidirá la Eucaristía. 12.3.2016 – Castel Gandolfo (Roma, Italia) Ante la presencia de personalidades eclesiásticas y civiles se realizará en el Centro Mariápolis (Vía de La Salle), a las 17.30 una reflexión sobre el tema: “La cultura del diálogo como factor de Paz”. Además de numerosos testimonios, tomará la palabra la presidente de los Focolares Emmaus María Voce. 12.3.2016 – Manfredonia (Italia) 7ª edición del ‘Premio Chiara Lubich Manfredonia’. Estarán presentes Vera Baboun, alcalde de Belén y Pasquale Ferrara (diplomático y Secretario general del Instituto Universitario europeo de Florencia). Info 12.03.2016 – Solingen (Alemania) En el Centro Mariápolis “Zentrum Frieden”: Con el título “Vivir juntos en la diversidad” el MPPU (Movimiento Político por la Unidad) alemán, invita a una mesa redonda con políticos y funcionarios públicos de la ciudad. Seguidamente se abrirá el diálogo con los ciudadanos sobre el problema de la integración de los refugiados. 12.3.2016 – Milán (Italia) ” Yo a través de ti”. El título subraya cómo el buscar la paz nos hace estar cerca del otro y, al mismo tiempo, nos hace más cercanos de lo que verdaderamente estamos. El evento comprenderá tres momentos distintos, cada uno de los cuales tendrá una duración de media hora, y se repetirá en tres lugares diferentes y en horarios diferentes, para dar la posibilidad de participar en los tres: la Basílica de San Ambrosio, el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, el Instituto Gonzaga. Info 12.3.2016 – Génova (Italia) Siguiendo el itinerario de profundización en la encíclica ‘Laudato si’, en la sala del Consejo Menor del palacio Ducal se tratará el tema: “Las religiones dialogan por la Paz y por el ambiente”. Participarán Huseim Salah (presidente de la Comunidad Islámica de Génova), Giuseppe Momigliano (Rabino jefe de Génova) Gnanathilaka Mahauswewe (monje budista), Andrea Ponta (ingeniero ambiental), Roberto Catalano (centro del Diálogo interreligioso de los Focolares). 13.3.2016 – Bujumbura (Burundi) En el Liceo Scheppen de Nyakabiga, diálogo sobre el tema: “Misericordiosos como el Padre celeste, constructores de paz”. Entre los relatores estará el arzobispo de Bujumbura Mons. Evariste Ngoyagoye. 13.3.2016 – Vung Tau (Vietnam) Durante el congreso anual de los Focolares en Vietnam (la Mariápolis), ante la presencia del obispo Mons. Joseph Tran Văn Toan, quien presidirá la celebración eucarística, se presentará el documental sobre Chiara Lubich: “Historia, carisma, cultura”. 14.3.2016 – Verona (Italia) En el Palacio Gran Guardia se otorgará el “Premio Fraternidad Chiara Lubich por una cultura de paz”, estarán presentes Sharharzad Houshmand (teóloga musulmana) Giuseppe Milán (docente de la Universidad de Padua), Aurora Nicosia (periodista). 14.3.2016 – Trento (Italia) En la Fundación Demarchi, presentación del libro de I. Pedrini: “El otro Novecientos: en el testimonio de Duccia Calderari”. La biografía de Duccia, una de las primeras testigos junto a Chiara Lubich del nacimiento de los Focolares, le permitirá a los relatores: Monica Ronchini investigadora, Giuseppe Ferrandi, director del Museo histórico del Trentino, Lucia Fronza Crepaz, ex diputada, profundizar en la figura de Chiara como constructora de paz. 14.3.2916 – La Habana (Cuba) En el Centro cultural Fray Bartolomé de las Casas, presentación de la figura di Chiara en relación a la paz, estará presente el Nuncio Apostólico Mons. Giorgio Lingua. Seguirá un concierto del Grupo de Música Antigua ‘Ars Longa’. 14.3.2016 – Houston, Texas (USA) “Unidad en la diversidad”. Es el título de la conferencia interreligiosa que tendrá lugar el 19 de marzo, en la Universidad de San Thomas.Será presidida por la celebración en la capilla de San Basilio, de la Misa católica que será celebrada por el Arzobispo de Galveston-Houston, Mons. Joseph Anthony Fiorenza. Entre los relatores estarán, además del arzobispo, el imán Qasim Ahmed (del Instituto Islámico), el rabino Steve Morgen (de la Congregación Beth Yeshurun) y Therese Lee (de los Focolares). Info 14.3.2016 – Manila (Filipinas) En el marco de las celebraciones del 50º de la llegada de los Focolares a Asia, se realizará, en la Universidad de La Salle, un simposio sobre el tema: “El carisma de la unidad una herencia fuera del tiempo”. Numerosas personalidades religiosas conducirán la reflexión sobre el aporte de Chiara Lubich a la unidad entre las Iglesias, entre las religiones y en la sociedad, y sobre la reciprocidad evangélica, que es su estilo de vida característico y crea fragmentos de fraternidad. 14.3.2016 – Roma – Santuario Divino Amor A las 18,30 Santa Misa. Será celebrada por el Card. João Braz de Aviz, prefecto de la Congregación para la vida consagrada. Info 16.3.2016 – Roma – Cámara de diputados. Presentación de un manifiesto con propuestas concretas por la paz, el desarme y la reconversión industrial. Para recibir en el Parlamento a los Jóvenes por un Mundo Unido, quienes junto al Movimiento Político por la Unidad y las Escuelas de participación han promovido la iniciativa, además de varios diputados. Estará presente la presidente de la Cámara, Boldrini y el Ministro de Asuntos Exteriores, Gentiloni. 16.3.2016 – Sevilla (España) En el Seminario Metropolitano, el prof Manuel Palma, vicedirector del centro de Estudios Teológicos de Sevilla, hablará de Jesús príncipe de la paz en la espiritualidad de Chiara Lubich. Seguirá un excurso sobre la paz en el Islam presentado por el Imán Allah Bashar de la mezquita del rey Abdul Aziz Al Saud de Marbella, Málaga), quien hablará también de su relación con Chiara Lubich. 18-20.3.2016 –Milano (Italia) – Fieramilanocity Dentro de la feria internacional se preparará una exposición del proyecto de Economía de Comunión en el cual, en formas distintas, se presentará el mensaje de paz que Chiara Lubich sigue dando al mundo. Info 19.3.2016 – Perth (Australia) En la Plaza de Northbridge, estreno de un video clip sobre la Paz realizado por los jóvenes y recolección de firmas para el llamado #Signup4peace. Habrá programas de animación también para los más pequeños. Estará presente el obispo auxiliar de Perth, Mons. Donald George Sproxton.

En Bangui ya nada es como antes

En Bangui ya nada es como antes

20160303-02En Bangui, capital de la República Centroafricana, que el papa Francisco definió en noviembre pasado como “capital espiritual del mundo”, «ya nada es como antes». Quien lo afirma es Fidelia, focolarina congolesa, que vive en Bangui desde hace siete años, y que desde 2012 hasta septiembre pasado, vio con sus ojos la continua sucesión de conflictos armados que, en varias etapas, devastaron ciudades y pueblos, sembrando terror y muerte. Ahora la situación ha cambiado completamente y el pensamiento común es que fue precisamente la visita papal la que marcó esta inversión de ruta. «En todos lados, – sigue Fidelia-, también en las provincias, se habla ‘de un antes y de un después’. Por ejemplo, el domingo pasado se produjo la segunda vuelta de votaciones para la elección del nuevo presidente y todo se desarrolló de la mejor manera. Fue así también durante toda la campaña electoral. Sin embargo, tanto la campaña electoral como las elecciones hubieran podido ser ocasión de violencia. En cambio no. Aquí nadie quiere ceder a la violencia. Dicen que al venir el Papa es como si hubiera venido Dios mismo, y por lo tanto, no se puede volver atrás. Sienten que el Papa nos hizo ‘pasar a la otra orilla’ y que debemos ir adelante, hasta lograr la paz verdadera y firme. Estamos todos convencidos de que para llegar a una cohesión social debemos vivir el perdón, la misericordia, la reconciliación. Se advierte que bajo estas palabras existe un verdadero cambio de mentalidad, de comportamiento. También el modo de hablar unos de otros (los cristianos de los musulmanes y viceversa) ¡ha cambiado!» Las expresiones de Fidelia transmiten una gran esperanza, no sólo para la República Centroafricana, sino para todos los puntos de la Tierra donde es sumamente urgente que las armas callen para encontrar soluciones en el diálogo. 20160303-01Fidelia nos hace conocer también otros matices de la realidad Centroafricana. Nos cuenta, por ejemplo, que en un reciente fin de semana, con otras tres personas de Bangui recorrieron 400 km para llegar a la pequeña ciudad de Bambio, donde hace unos veinte años, alrededor de un misionero capuchino, se formó una comunidad que vive el espíritu de los Focolares. «Hemos encontrado allí distintas familias, muchos jóvenes, todos estaban aún muy motivados- cuenta Fidelia-. Y aunque el padre Umberto tuvo que volver a Italia, ellos durante todos estos años han seguido reuniéndose para animarse recíprocamente a vivir el Evangelio, ayudándose con un libro de Chiara Lubich que él les había dejado». Ellos se llenaron de estupor y alegría al conocer esta comunidad, que durante veinte años supo mantener la llama del Evangelio encendida. Pero no imaginaban que otra sorpresa los esperaba en ese viaje. En los alrededores de Bambio hay algunos pueblos donde viven Pigmeos. Es una población característica por su baja estatura, que vive principalmente en los bosques y que vive leyes y costumbres propias. «Muchos piensan que no es fácil establecer una relación con ellos – sigue explicando Fidelia- pero teniendo que pasar a través de su población, resultó espontáneo detenernos a saludarlos y explicarles por qué razón nos encontrábamos en esa zona. Animados por su apertura y disponibilidad, nos presentamos, dialogamos con ellos intercambiando los valores en los que creemos. Algunos de ellos demostraron una gran sensibilidad por todo lo que les contamos sobre la espiritualidad de la unidad. Nos pusimos de acuerdo para volver en la época de Pascua para continuar conociéndonos e intercambiar nuestras vivencias recíprocas».    

La Iglesia de Siria se niega a morir

La Iglesia de Siria se niega a morir

20160301-01La paz como prerrequisito de cualquier otra acción a favor de Siria. Ésta es la idea de Mons. Samir Nassar, arzobispo maronita de Damasco, presente en el congreso de los Obispos amigos de los Focolares que se llevó a cabo en Castelgandolfo del 23 al 26 de febrero, es decir en vísperas del cese al fuego en el país. Mons. Nassar llega por segunda vez a las colinas romanas para esta cita: «La primera vez recibí tanto que decidí volver – contó -. Vengo de Damasco, lugar atormentado por la violencia y la guerra. Esta estadía aquí me permite mirar más lejos, tener una visión más global sobre el futuro del mundo, de la Iglesia, de los cristianos en Medio Oriente, junto con mis hermanos obispos y gracias a la atención de los Focolares. Por lo tanto esta permanencia aquí me da un apoyo fraterno para la vida de mi diócesis». Ante la situación de guerra en la que vive su país, Mons. Nassar recalca con fuerza que «la Iglesia de Siria se niega a morir y se aferra a la esperanza, que se manifiesta en signos concretos. En 2015, por ejemplo, empezamos la construcción de tres capillas precisamente cuando la gente se iba, para dar confianza a los fieles de los barrios periféricos, desde los cuales las personas ya no vienen hasta la catedral por motivos de seguridad. Mantenemos viva la esperanza también a través de las vocaciones: hay jóvenes sacerdotes y seminaristas que llegan, y también éste es un signo de vitalidad y esperanza para el porvenir». 20160301-02El arzobispo expresó también su gratitud hacia la obra del Movimiento de los Focolares, que sigue estando presente en Siria a pesar del conflicto: «Realmente el Movimiento, de manera especial por lo que yo veo en Damasco, hace un trabajo excelente con jóvenes, familias y niños – afirmó – . Anima a la gente para que miren hacia el futuro con fe y esperanza, y esto es un apoyo para todas las comunidades, un signo del Espíritu que nos ayuda a proseguir por este camino». Con respecto al anuncio de la llegada de otra focolarina a Damasco dijo: «Es un signo más de que en Siria hay una Iglesia que mira hacia el futuro y no tiene miedo de morir. Vuestra presencia es un símbolo de esperanza y de renovación y estoy muy agradecido por ello». Un signo aún más importante en un país en el cual «la gente está cansada, vive la guerra, el sufrimiento, la indigencia, y las noticias no animan a nadie. Nuestra misión como Iglesia y como Focolares es infundir valor». Finalmente, por lo que concierne a la comunidad internacional, Mons. Nassar constata con pesar como «el mundo dice interesarse mucho por Siria, pero cada uno lo hace a su manera: tanto que al final nadie hace nada realmente por los intereses del país». Y lanza un llamado: «Detengan la guerra. Si la guerra no se detiene, todo lo que hacemos es inútil. Volvamos a traer la paz y luego reconstruiremos el país, cristianos y no cristianos. Todos los ciudadanos han perdido y sufrido mucho, y merecen la caridad y el amor de la Iglesia. Como dice el mismo papa Francisco: los pobres no tienen religión, lo que importa es sólo el ser humano. Esperamos antes que nada unos pasos hacia la paz, todo lo demás es secundario».

Tesis de graduación Nº 100 en Sophia

Tesis de graduación Nº 100 en Sophia

SophiaUniversity_01«Cuando la Secretaría nos comunicó que estábamos ya en la tesis Número 100, caí en la cuenta de que debía ser así. Cada tesis marcó un momento importante de nuestro recorrido, pero el hecho de que estuviésemos en la Número 100 y de que se trataba de la tesis de Akie Otomo, nos impresionó mucho». Quien se expresa de este modo es Judith Povilus, vicerrectora del Instituto Universitario Sophia (IUS), que acompañó los estudios de Akie Otomo y de Yukie Ohi, dos estudiantes del movimiento budista Rissho Kosei-kai que culminaron el curso de maestría en Fundamentos y Perspectivas de una Cultura de la Unidad. Yukie Ohi se graduó en el período de verano, mientras que el pasado 11 de febrero tuvo lugar la graduación de Akie Otomo. El éxito de su investigación fue saludado con un caluroso aplauso, subrayando el aprecio de la comunidad académica por el resultado de sus estudios. El tema de la tesis, una comparación entre “La Hoza en la Rissho Kosei-kai y la vida de unidad en la espiritualidad del Movimiento de los Focolares”, fue madurando en un clima de recíproca escucha y acogida con una activa integración de los dos docentes que, en calidad de tutora y co-tutora, siguieron a la candidata. Los docentes que calificaron su tesis fueron Anna Pelli, docente de Filosofía y Antonella Deponte, docente de Psicología. «El punto central y el más interesante es el que trataba de indagar cómo dentro de realidades distintas, como la Rissho Kosei-kai y el Movimiento de los Focolares, late un ritmo de vida análogo: la comunión. Y esto ocurre porque ponen en acción dos prácticas muy especiales: por un lado, la Hoza, característico “círculo de compasión”, constituido por un grupo de personas que se reencuentran para compartir sus problemas personales y encontrar ayuda recíproca a la luz de las enseñanzas de Buda; y por otro lado, la “comunión espiritual” guiada por las Palabras del Evangelio, en que se hace posible el compartir las experiencias vividas, para caminar juntos hacia Dios». Conforme se avanzaba en el trabajo, era cada vez más claro que éste podía ser entendido sólo si se colocaba en el marco de aquella profética experiencia de diálogo que brotó en el encuentro entre Nikkyo Niwano y Chiara Lubich, eminentes figuras del siglo XX: el primero, un líder budista, fundador de la Rissho Kosei-kai, único observador no cristiano en el Concilio Vaticano II; y la segunda, una personalidad del mundo católico que inspiró un movimiento mundial de renovación espiritual que tuvo el don de saber hablar a los hombres y mujeres de fe y culturas distintas. Con el correr de los años, numerosas semejanzas los condujeron a colaborar concretamente en favor de la paz y de la comprensión recíproca entre los hombres y los pueblos, llegando a donar la propia y peculiar experiencia de fe. Entre otras cosas, la tesis documenta la correspondencia epistolar mantenida entre ellos, haciendo referencia a algunos párrafos que le permitieron a la estudiante japonesa profundizar de forma sorprendente algunos puntos relevantes de la cultura de la unidad, que, según su opinión, abren profundos espacios de diálogo y comunión. Sophia University_02«Es sobre esta raíz – comenta la profesora Pelli- que tomó cuerpo la intuición por la cual Akie fue guiada en su investigación. En este camino, cada uno vio que se encontraban lo verdadero que habita en sí mismo con lo verdadero que habita en el otro: hemos descubierto que tal encuentro era algo que en cierto modo ya existía, y, que, al mismo tiempo se abría a perspectivas más amplias. Estoy convencida de que esta experiencia fue posible realizarla gracias a este lugar privilegiado que es Sophia, en su cotidiana tendencia a la vida y al pensamiento, a la búsqueda intelectual y al enfoque existencial a fin de que éstos se traduzcan en una sustancial convergencia hacia el bien, a través del don recíproco de nuestra diversidad». «Estoy muy agradecida por el período que viví en Sophia – con estas palabras concluyó Akie su presentación-. No sólo pude aproximarme más al pensamiento de Chiara Lubich que aprecio mucho, sino que también pude conocer más en profundidad la vida y el mensaje de Nikkyo Niwano. Ahora llevaré adelante la investigación. Quisiera comprometerme cada vez más en la vida cotidiana de modo que con la contribución de todas las religiones podamos llevar al mundo la armonía, la unidad y la paz» Fuente: IUS online  

Evangelio vivido: fragmentos de fraternidad

Evangelio vivido: fragmentos de fraternidad

20160229-01Reinhard, austriaco de 55 años, nos cuenta su experiencia: «Hace algunos años – durante mi turno de trabajo en el correo –, un joven con trastornos síquicos me acuchilló. Las heridas fueron 27. El joven se detuvo sólo cuando, mirándolo a los ojos, ya con la seguridad que me iba a morir, le dije: “Yo te perdono”. Sólo entonces el joven dejó caer el cuchillo que tenía en la mano. Los psicólogos sostienen que no sufrí ningún trauma. Tuvieron que operarme, perdí un pulmón y ahora camino con la ayuda de unas muletas, pero estoy milagrosamente vivo. Hoy en día muchos me invitan a contar lo que pasó y por qué lo perdoné: docentes, sacerdotes, jóvenes, cristianos, musulmanes y ateos. Hasta ahora encontré a unas dos mil personas. Y siempre hablo del arte de Amar, porque desde hace años todas las mañanas, incluido ese fatídico día, tiro el dado del amor. Muchos jóvenes, al finalizar los encuentros, me piden conocer mejor esta forma de vida. Cada vez que me invitan, es una ocasión maravillosa para difundir el ideal de la fraternidad, la Regla de oro, en la región del Vorarlberg en donde vivo. Hace un tiempo, un joven ateo me dijo: “Sabes, a mí no me interesa la religión. Pero ¡tu manera de vivir me interesa muchísimo!”». (Feldkirch, Austria) «Una noche, hablamos por teléfono con Lina, una amiga nuestra que vive en Damasco (Siria). Nos contaba de lo difícil que es vivir en un contexto de guerra: los riesgos por los numerosos disparos de mortero; las dificultades debidas a la falta de alimentos, de agua y de ropa; los frecuentes cortes de energía y de calefacción… En fin, ella no nos pedía nada. Pero escuchando sus palabras, sentíamos en el corazón que ese grito de dolor no podía pasar desapercibido… aunque estábamos lejos, ¡teníamos que hacer algo! En seguida compartimos esta idea con otros amigos… Desde el primer momento nos sorprendió la gran cantidad de ayudas que llegaron… ¡cada uno contribuía como podía! Familias, parejas jóvenes, adolescentes, niños, comunidades, parroquias, otras asociaciones… Sin que nos diéramos cuenta, se había activado una competencia de amor. Por ejemplo, una señora vendió algunos objetos de oro y puso a disposición el dinero; un chico celebró su cumpleaños y en lugar de los regalos pidió una contribución para sus hermanos sirios; una familia compartió los ahorros de una vida porque “lo guardábamos para una ocasión especial. Y ¡ayudar a alguien es precisamente esto!”… En fin, en poco tiempo, recolectamos € 20.000. Con este monto, pudimos ayudar a muchas familias sirias que estaban en dificultad, entregándoles comida, ropa, bienes de primera necesidad… pero, sobre todo, les llevamos un abrazo grande como el mundo, haciendo nuestra parte para que no se sintieran abandonados, sino que hacían parte de una gran familia». (Rossana y Emanuele, Italia) Fuente: United World Project

Maria Voce: La relevancia del diálogo en el mundo de hoy

Maria Voce: La relevancia del diálogo en el mundo de hoy

20160117Después de haber esbozado algunos desafíos del mundo actual – amenaza para la paz y búsqueda de la afirmación de la propia identidad – Maria Voce ofrece algunas reflexiones a partir de la experiencia carismática de diálogo propuesta por Chiara Lubich. Es el 26 de enero, en el India International Centre de Nueva Delhi. «Si tratamos de captar cuáles son las características específicas que el diálogo del Movimiento propone, nos parece que la primera es su fundamento. Chiara [Lubich] nos ha enseñado siempre a mirar a Dios como Padre de todos, por consiguiente, a mirar a cada hombre y mujer que encontramos como hijo o hija suya, y por tanto, como a un hermano o hermana nuestra. Ella misma lo revelaba, escribiendo a sus compañeras ya en 1947: “Dirigir siempre la mirada al único Padre de muchos hijos. Después, mirar a las criaturas como a hijos del único Padre. Sobrepasar siempre con el pensamiento y con el afecto del corazón, cualquier límite puesto por la naturaleza humana y tender constantemente, por hábito adquirido, a la fraternidad universal en un solo Padre: Dios”[i]. Recuerdo con cuánta alegría Chiara nos refirió el comentario de nuestra queridísima hermana, la profesora Kala Acharya, después de que se habían encontrado en India en 2001: “Cada uno había crecido cerrado dentro de sus propios muros para admirar su propio jardín, sin saber que al otro lado de estos muros altísimos, hay bellísimos jardines que hay que contemplar. Es la hora de derribar estos muros y descubrir el jardín del otro”. Si éste es el fundamento, el método del diálogo que Chiara nos enseña ¡no puede ser otro que el amor! Es un diálogo entre hermanos, por tanto, un diálogo entre personas, no entre ideologías o sistemas de pensamiento. Es un diálogo que necesariamente debe sostenerse y sustanciarse con la misericordia, con la compasión, con la caridad, así como sintetiza la Regla de Oro [Haz a los demás lo que te gustaría que te hicieran a ti]. El amor y la misericordia, puestos a la base del diálogo, no sólo nos permiten ver con una nueva luz a quien tenemos al lado, sino que nos hacen descubrir la diversidad, cualquiera que sea, como un don. “Quien está a mi lado – decía Chiara – ha sido creado como un don para mí y yo he sido creada como un don para quien está a mi lado. En la Tierra, todo está en relación de amor con todo: cada cosa con cada cosa. Pero es necesario ser el Amor para encontrar el hilo de oro entre los seres”[ii]. Actualmente los contactos, en virtud de las grandísimas posibilidades ofrecidas por los medios de comunicación, se multiplican, pero son breves, efímeros, privados de sentido, mientras que se resquebrajan o disminuyen las relaciones. Sólo cuando se inserta en la relación yo-tú un amor que supera la dimensión puramente natural, los contactos pueden transformarse en relaciones, es decir, podemos construir redes de fraternidad verdadera. Y en esto la religión tiene mucho que ver para dar un sentido, un alma, respuestas verdaderas y satisfacientes a la humanidad confundida, traumatizada y perdida de hoy. Y en estos años hemos constatado el papel insustituible de las religiones para llevar a sus seguidores a reconocerse recíprocamente, a respetarse, a colaborar y a hacerse verdaderos protagonistas en la construcción de un mundo de paz, donde reinen la justicia y el respeto por la persona humana. También Chiara Lubich, fundadora del Movimiento de los Focolares, ha vivido y ha contagiado a cuantos se inspiran en ella, en esta extraordinaria aventura, en la cual no basta un amor cualquiera, sino que es necesario aprender un arte, como ella misma lo ha definido: el “arte de amar”. (…) Si todo vivimos este “arte”, actuaremos también algunos principios indispensables en el diálogo entre las religiones. Cito algunos: Unidad en la diversidad. Es necesario que cada religión sea acogida con pleno respeto de todo lo que ella considera sagrado, según su tradición. Proselitismo y sincretismo son incompatibles con la paz. (…) Reciprocidad. En el compartir la espiritualidad vivida cada uno se enriquece, no sólo sin peligro de comprometer la propia fe, sino con la posibilidad de profundizarla. (…) Igualdad en la común dignidad humana. Es la llave para cualquier relación armoniosa de colaboración en el construir sociedades democráticas fundadas en la paz. Muchos saben cómo el carisma de Chiara Lubich, fundadora del Movimiento de los Focolares, puede resumirse en una sola palabra: unidad. Es la vocación específica de todo el Movimiento que, este año, en el mundo entero, se compromete a vivirla con una particular intensidad: trabajar, comprometerse en todos los frentes para contribuir en la construcción de un mundo unido, en llevar la unidad, la paz y la reciprocidad en cada ambiente. Lo exige la fidelidad a nuestro Carisma, a aquella primera intuición que Chiara expresaba así desde 1946: “En nuestro corazón una cosa está clara: la unidad es lo que Dios quiere de nosotros. Nosotros vivimos para ser uno con Él y uno entre nosotros y con todos. Esta espléndida vocación nos une al Cielo y nos sumerge en la fraternidad universal. Nada más grande. Para nosotros, ningún ideal lo supera”[iii]». Nueva Delhi, 20 de enero de 2016   [i] C. Lubich, L’arte di amare, Città Nuova, Roma 2005, p. 29 [ii] C. Lubich, Scritti Spirituali 1, “L’attrattiva del tempo moderno”, Città Nuova, Roma 1978, 140. [iii] C. Lubich, L’unità e Gesù Abbandonato, Città Nuova, Roma 1984, p. 28.  

Tregua en Siria

Después de la primera noche del cese al fuego, recibimos este mensaje de esperanza de la comunidad de los Focolares en Siria. «Con el cese al fuego, una noche de calma envuelve toda la ciudad de Aleppo».  Escribe Pascal Bedros, focolarino de Aleppo. «Hasta el último momento nadie esperaba que se lograra. Es el primer ladrillo para construir la paz con el diálogo. Gracias a Dios y a los hombres de buena voluntad por este regalo. Un regalo para todos los niños que han dormido una noche tranquila entre los brazos de sus padres. Este fin de semana nos reuniremos en Aleppo, después de mucho tiempo en el que ha sido imposible hacerlo, para un congreso de profundización en la espiritualidad de la unidad de los Focolares, que nos ha mantenido vivos en estos largos años y que ilumina también nuestro compromiso social». El cese al fuego en Siria, el primero desde el inicio del conflicto en el 2011, negociado por Rusia y Estados Unidos, entró en vigor el 26 de febrero a medianoche. Las negociaciones de paz se podrían retomar el 7 de marzo, si la tregua se mantiene, como anunció el enviado especial de las Naciones Unidas Staffan De Mistura.   Testimonio de la comunidad de los Focolares en Siria (mayo 2015). https://vimeo.com/127010123

Lublín (Polonia) – Conflicto, diálogo y cultura de la unidad

En 1996 Chiara Lubich recibió el doctorado h.c. en Ciencias Sociales por su contribución y fuerte impulso dado a la comprensión del diálogo como elemento clave para la construcción y el mantenimiento de la paz y la unidad de la familia humana. Hoy, a la luz de esta experiencia, la teoría y la praxis del diálogo –característica específica del “carisma de la unidad” de Chiara Lubich- son la piedra fundamental de la vida de muchas personas, de culturas y religiones distintas. En un mundo donde las diferencias étnicas y religiosas a menudo conducen a conflictos violentos, la difusión del carisma de Chiara Lubich está contribuyendo al diálogo constructivo entre personas, generaciones, clases sociales y naciones. Es así que surge la idea, promovida por la Universidad Católica de Lublín, el Instituto Universitario Sophia de Loppiano junto con el Centro para el diálogo con la cultura del Movimiento de los Focolares, de realizar un congreso que analice el significado del diálogo. Este congreso tendrá lugar el 3 y 4 de junio próximos en Lublín, a partir del call for papers (método académico para la recopilación de ponencias) que se difunde en estos días y al cual hay que responder antes del 30 de marzo. Los promotores invitan a todos los interesados que quieran proponer contribuciones originales a explorar, desde distintas perspectivas y prácticas, los caminos hacia el respeto, el manejo de las diferencias, la comprensión recíproca, la resolución de conflictos y la construcción de la paz. Se identificaron cinco áreas de interés. Se le dará preferencia a aquellas contribuciones que ofrezcan un enfoque multidisciplinario, que provengan desde la psicología, la economía, la pedagogía, la politología, la sociología y las ciencias de la comunicación. Las propuestas de intervenciones  deberán tener el objetivo de llenar el vacío entre la teoría y la práctica. Serán seleccionadas sólo las presentaciones inéditas, que aporten un valor agregado a la comprensión teórica y práctica del tema ‘el conflicto y el diálogo’. Para inscribirse y proponer un “paper”, escribir a:  congresslublin2016@gmail.com ÁREAS TEMÁTICAS:

  1. El diálogo en las comunidades: entre carisma e institución
  2. La resolución de conflictos a través del diálogo
  3. Los actores del cambio político y los procesos de participación
  4. Los procesos individuales, interpersonales e intergrupales en la gestión y en la prevención de conflictos
  5. El diálogo entre las disciplinas y la transdisciplinaridad.

Es posible  intervenir en el congreso con una contribución propia, respondiendo al siguiente call for papers antes del 30 de marzo. Algunos de los principales expositores del congreso son:

  • Adam Biela, prof. de psicología y sociología (Universidad Católica de Lublín Juan Pablo II, Polonia)
  • Catherine Belzung, neurobióloga (Universidad       François Rabelais de Tours, Francia)
  • Mauro Magatti, sociólogo (Universidad Católica del Sacro Cuore, Milán, Italia)
  • Katarzyna Olbrycht, pedagoga, (Universidad de Silesia, Katowice, Polonia)
  • John Raven, prof. di psicología (Universidad de Manchester, Escocia. Universidad Católica de Lublin Juan Pablo II, Polonia)
  • Marina Santi, pedagoga (Universidad de Padua, Italia)
  • Bogusław Śliwerski, pedagogo (Presidente del Comité de Ciencias Pedagógicas PAN, Polonia)
  • Krzysztof Wielecki, sociólogo (Universidad Cardenal Stefan Wyszynski, Varsovia, Polonia)
  • Stefano Zamagni, economista (Universidad de Boloña, Italia)

 

Claretta Dal Rì y la aventura de la unidad

Claretta Dal Rì y la aventura de la unidad

Claretta_dal_Ri-04«Diciembre 1948. Esta noche, en la oficina de mi padre se ha reunido la crema y nata del ambiente católico de Rovereto: los presidentes de las asociaciones juveniles de la Acción Católica, de San Vicente, de las Hijas de María, de la Tercera Orden franciscana y el párroco naturalmente. Y estoy yo, con 18 años, presidente de la Juventud estudiantil. La oradora es Valeria Ronchetti. Hay algo en ella que me sorprende, habla de Dios, pero no como había oído hablar hasta ahora a otras personas; no hay nada externo o estudiado, ¡Valeria lo posee! Ella expresa algo que le quema en el corazón, y que desborda con fuerza… Quedé impresionada. Es un relato de guerra, cuenta experiencias sobre lo que ha encontrado, junto con sus compañeras, en el Evangelio, sobre cómo han descubierto que Dios es Amor; es un torrente de agua viva que me sumerge. A la luz de las velas, porque se fue la luz, un señor entrado en años y muy serio le pregunta irónicamente: «Pero señorita, ¿no tiene miedo de entusiasmar así a la juventud? ¿Y si fuera un fuego de paja?». Valeria es una persona llena de entusiasmo, cuando habla está llena de fuego y así son sus respuestas. Se pone de pie y con vehemencia dice: «¿Cómo? Si no tenemos miedo de entusiasmar a la juventud con el deporte, la pintura, la montaña, todas cosas bellas pero que pasan; ¿cómo vamos a tener miedo de que la juventud se entusiasme con Dios que es el único que permanece?». Claretta_dal_Ri-02Un gran silencio. Yo quedo literalmente conquistada. La montaña, la música, la pintura… ¡Todo eso lo he experimentado! Todas las cosas sanas y bellas las he probado, y me he dedicado a ellas por años, pero nunca me han llenado verdaderamente. En esta búsqueda siempre había quedado insatisfecha. Pero entonces éste es el punto, es esto lo que busco: es Dios la respuesta a este último período de insatisfacción, de soledad, de confusión en mis relaciones, de activismo, de aburrimiento. Todos se van del lugar, saludando a Valeria con jovialidad y sonrisas. Pero no me parece que hayan entendido nada de lo que dijo. Me pregunto: ¿si ella puede tener eso de lo que ha hablado –y se ve evidentemente- por qué no puedo tenerlo yo también? A este punto viene a mi mente un dicho de San Agustín: «Si ellos, y aquellos, ¿por qué no yo?». Le doy la mano a Valeria: «¡Quiero hacer como tú, ayúdame!». Nos despedimos y nos damos cita para el día siguiente. Empieza así la aventura». Fuente: Città Nuova online

Los refugiados en mis bicicletas de montaña

Los refugiados en mis bicicletas de montaña

20160225-01«Soy un funcionario público y vivo en Catanzaro. Participando en un encuentro de amigos que trabajan en el ámbito social, conocí algunos jóvenes extranjeros que viven en un centro de refugiados, que necesitaban bicicletas para ir al trabajo. Me acordé que en el garaje tengo dos bicicletas de montaña en buen estado, que yo aprecio mucho, pues me traen buenos recuerdos por las largas excursiones en la montaña que hice junto con mi hijo. Sin dudar levanté la mano para ofrecerlas. Era necesario, sin embargo, superar las dificultades para que llegaran a su destino. Poco tiempo después me enteré de que estos amigos organizaban, para fines de enero, un congreso de tres días en un pueblo turístico cercano de la vivienda de los refugiados. Me invitaron a participar en el congreso. No se pueden imaginar lo grande que fue mi alegría cuando recibí esta invitación. Yo mismo podía transportar las bicis – ahorraba tiempo y costo- y además podría entregarlas personalmente a los interesados teniendo así la oportunidad de conocerlos. Existía sin embargo otra dificultad: las bicis eran demasiado grandes y no lograba que entraran en el portaequipajes de mi auto. No sabiendo cómo resolver esto, le pedí ayuda a un vecino que es comerciante de objetos usados. Le pregunté si podía ayudarme a encontrar una solución. Cuando supo que quería dar las bicis a unos refugiados comenzó a decir que era mejor que se las diera a él, que de ese modo podría ganar algo y que no le parecía “que había que ayudar a estas personas desconocidas que llegan a nuestro país a sacarnos el poco trabajo que existe y que crean muchos problemas y tensiones sociales”. Dándose cuenta de que yo permanecía firme en mi decisión me dijo que un amigo nuestro tenía dos porta bicicletas que me iban a venir muy bien. Fui a ver a este amigo, que se mostró en cambio disponible enseguida, muy contento de prestar sus porta bicicletas. Todo estaba saliendo bien. El día establecido, 4 jóvenes refugiados llegaron al lugar donde se desarrollaba nuestro congreso a retirar las bicis. Apenas las vieron, todavía cargadas en el techo del auto me di cuenta que les brillaban los ojos. Tal vez pensaban que iban a encontrar viejas bicis herrumbradas, en cambio eran lindas, nuevas y marchaban bien. Me quedé muy contento de verdad y lleno de alegría; luego tímidamente y con gran dignidad agradecieron diciendo que ellos eran pobres y no tenían nada para darme, pero que esa misma noche iban a volver para cantarnos sus canciones al compás de los tambores, durante la celebración eucarística. Estoy convencido que la relación de amistad que nació, permanecerá…» (Domenico, Italia)    

Palabra de Vida de marzo de el año 2016

Era lo que esperaban los judíos de su tiempo. Jesús comenzó a anunciarlo en cuanto se puso a recorrer los pueblos y ciudades: «El Reino de Dios está cerca» (cf. Lc 10, 9). E inmediatamente después: «El Reino de Dios ha llegado a vosotros»; «El Reino de Dios está en medio de vosotros» (Lc 17, 21). En la persona de Jesús, Dios mismo se establecía en medio de su pueblo y tomaba en mano la historia con decisión y fuerza para guiarla a su meta. Los milagros que Jesús hacía eran signo de ello. En el pasaje del Evangelio del que está tomada esta palabra de vida, Jesús acaba de curar a un mudo liberándolo del diablo que lo tenía prisionero. Es la prueba de que ha venido a vencer el mal, cualquier mal, y a instaurar por fin el reino de Dios. En el lenguaje del pueblo hebreo, esta locución, «reino de Dios», se refería a Dios que actúa en favor de Israel, lo libera de toda forma de esclavitud y de todo mal, lo guía hacia la justicia y la paz y lo inunda de alegría y de bien: un Dios que Jesús revela como «padre» misericordioso, amoroso y lleno de compasión, sensible a las necesidades y a los sufrimientos de cada uno de sus hijos. También nosotros necesitamos escuchar el anuncio de Jesús: «El Reino de Dios ha llegado a vosotros». Mirando a nuestro alrededor, con frecuencia tenemos la impresión de que el mundo está dominado por el mal, que los violentos y los corruptos llevan la delantera. A veces nos sentimos dominados por fuerzas adversas, hechos amenazantes que nos sobrepasan. Nos sentimos impotentes ante guerras y calamidades ambientales, matanzas y cambio climático, migraciones y crisis económica y financiera. Y aquí se sitúa el anuncio de Jesús, que invita a creer que Él, ya desde ahora, está venciendo el mal y está instaurando un mundo nuevo. En el mes de marzo de hace 25 años, hablando a miles de jóvenes, Chiara Lubich les confesaba su sueño: «Hacer que el mundo sea mejor, poco menos que una sola familia, como si perteneciese a una única patria, un mundo solidario; es más, un mundo unido». Entonces, como hoy, esto parecía una utopía. Pero para que ese sueño se hiciese realidad los invitaba a vivir el amor recíproco con la certeza de que de ese modo tendrían entre ellos «a Cristo mismo, el Omnipotente. Y de Él os lo podréis esperar todo». Sí, Él es el Reino de Dios. ¿Cuál es nuestra tarea? Hacer que Él esté siempre entre nosotros. De ese modo –seguía Chiara– «será Él mismo quien actúe con vosotros en vuestros países, pues Él volverá en cierto modo al mundo, a todos los lugares en los que os encontráis, gracias a vuestro amor recíproco y a vuestra unidad. Y os iluminará en todo lo que tengáis que hacer, os guiará, os sostendrá, será vuestra fuerza, vuestro ímpetu, vuestra alegría. Por Él el mundo a vuestro alrededor se convertirá a la concordia, toda división se suturará. […] Amaos entre vosotros, pues, y sembrad el amor en muchos rincones de la tierra entre las personas, entre los grupos, entre los países, con todos los medios, para que se haga realidad la invasión de amor de la que hablamos muchas veces y para que adquiera solidez –con vuestra aportación– la civilización del amor que todos esperamos. A esto estáis llamados. Y veréis cosas grandes»[1]. Fabio Ciardi [1] IV Festival internacional de los Jóvenes por un mundo unido (Genfest), Palaeur de Roma, 31-3-1990: cf. C. Lubich, La doctrina espiritual, Ciudad Nueva, Madrid 2002, pp. 424, 431.

Obispos: “Iglesia que genera unidad”

Obispos: “Iglesia que genera unidad”

Udienza_bSon 60 los obispos, amigos de los Focolares reunidos esta semana en Castel Gandolfo (22 al 26 de febrero), de 31 países[1]. En el centro del Congreso la participación en la Audiencia general del Papa Francisco en la Plaza San Pedro, que en su saludo les instó “a mantener siempre vivo en el ministerio apostólico el carisma de la unidad, en comunión con el sucesor de Pedro”. «Una Iglesia sinodal es una Iglesia de la escucha, consciente que escuchar “es más que sentir”. Es una escucha recíproca en la que cada persona tiene algo que aprender». Este designio de Iglesia, trazado por papa Francisco en la celebración del 50° de la creación del Sínodo de los Obispos, es la plataforma sobre la que camina este Congreso. La elección del título “Iglesia que genera unidad” nace de la convicción que, en el marco de las muchas tensiones de nuestro tiempo y la creciente desintegración, el pueblo de Dios está llamado hoy a contribuir en la reconstrucción, de manera vital, del tejido de relaciones en todos los niveles y en todos los ambientes. Novedad que debe darse primero en la vida de la Iglesia y que tiene su fuente en el corazón de Dios misericordioso. Tema que tiene como centro la comprensión de la unidad, pedida por Jesús al Padre (Jn 17), como “don, compromiso y meta”. Perspectivas ilustradas, a la luz del carisma de Chiara Lubich, por María Voce, presidente del Movimiento de los Focolares y por el co presidente Jesús Morán. Muy esperada la intervención del cardenal Lorenzo Baldisseri que, a través del pensamiento y el testimonio de papa Francisco, profundizará en la orientación hacia “una Iglesia sinodal”. Estimulantes los testimonios compartidos entre los Obispos presentes y ricos de indicaciones, dada la diversidad geográfica y cultural y los talleres y diálogos en plenaria alrededor de dos preguntas: ¿Cómo fomentar la comunión, junto y al servicio del pueblo de Dios? y ¿cómo vivir positivamente los conflictos que acompañan cada camino hacia la unidad?

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Cardenal Lorenzo Baldisseri

En el espíritu de una Iglesia en salida, el Congreso acoge además testimonios e historias concretas de laicos comprometidos en la construcción de puentes en un mundo fragmentado, a lo largo de los caminos del ecumenismo, del diálogo interreligioso, con personas de convicciones no religiosas y del diálogo multifacético con la cultura. Para terminar, la atención se centrará en la figura del obispo como un instrumento de misericordia y de unidad, según la ‘escuela de María’. Los Congresos de Obispos amigos del Movimiento de los Focolares comenzaron en 1977 por iniciativa de monseñor Klaus Hemmerle, obispo de Aquisgrán (Alemania). El moderador actual es el cardenal Kovithavanij Francis X., arzobispo de Bangkok (Tailandia). Leer más: Notas de prensa [1] Países de origen: Iraq, Líbano, Siria, Benín, Camerún, Costa de Marfil, Etiopía, Madagascar, Rep. del Congo, Tanzania, Tailandia, India, Pakistán, Brasil, Venezuela, Panamá, Uruguay. Austria, España, Francia, Gran Bretaña, Irlanda, Italia, Portugal, Rep. Letonia, República Checa, Moldava, Rumania, Ucrania, Hungría.