Movimiento de los Focolares

A un año del terremoto en Italia central

Por una semana, desde e 26 al 2 de setiembre, en Amatrice y Borbona, dos de los centros golpeados por el terremoto en Italia central, se tendrán iniciativas para niños, chicos y ancianos a cargo del los jóvenes del Movimiento de los Focolares en el ámbito de un programa que Cáritas italiana lleva adelante para sostener con continuidad a la comunidad local. Prevista la participación de 25 jóvenes de varias ciudades de Italia.

Historias de Ostiense#X

Historias de Ostiense#X

ostiense 11RE-tornar, RE-conocer, RE-ver, RE-abrazar, RE-cordar. Vuelvo a Ostiense sintiendo un cosquilleo en el estómago. Busco a mis amigos como una desesperada. En estos meses en los que no estuve en Roma y dejé de ver su gran belleza (la que se encuentra en los bordes de las estaciones ferroviarias), para consolarme, algunos usaron expresiones alentadoras como “pero a tantos pobres y últimos, gente sin techo, los encuentras por cualquier lado…”. Yo no amé a los pobres y a los últimos…. Yo amé a Samir, Fulvio, Gian Paolo, Gabriele, Jazmín (…). Se llama amistad, señoras y señores. Claudio me trata con la ternura de un soplo, siendo conocido popularmente como el más rudo, el más colérico y agresivo de todos. A distancia de un océano me doy cuenta de cuánto la amistad lo ha transformado, pero sobre todo me ha transformado a mí. Hablo, escucho, me acomodo, me encuentro en mi casa de verdad. Este sentido de re-entrar y de re-tornar tiene tal vez el sabor de lo que llamamos paraíso… re-encontrarnos después de habernos perdido. Re-escucho sus historias y sus absurdos. Yo que en estos meses desperté dentro de mí preguntas inquietantes sobre el sentido del camino de mi vida, sobre lo paradójico de ciertas decisiones, la interrupción de proyectos, el temor ante mi misión… yo, que me pierdo en todas estas exigencias, veo que mis amigos no tienen ni programas, ni misiones, ni elecciones, ni siquiera saben expresarse. Yo que me pierdo en todas estas preguntas burguesas, yo, aquí y ahora, dejo de perderme. Ellos son mis amigos y sería injusto tener para mí algo que ellos no pueden permitirse. Se llama amistad, señoras y señores. Mientras me bajo de mi yo, de mis deseos, de mis pretensiones, no dejo de pedir para ellos, para mí, para todos, el hilo…  ese hilo que vincula todo bajo este cielo, las propias y las historias de todos en un Único proyecto. Lo pido humildemente. Me re-abrazo a mí misma, me saludo con los ojos húmedos y me digo: ¡Hola Paula, bienvenida!    

Nigeria: El Alba de un nuevo día

Nigeria: El Alba de un nuevo día

2017-05 Casa Alba Feast 3«Estaba casada desde hace poco tiempo cuando mi marido se enfermó gravemente. Al mismo tiempo me di cuenta de que estaba esperando un hijo». Comienza así el relato de una joven mujer nigeriana. Lejos de su propia familia y sola, llama a la familia del marido. Pero encuentra la puerta cerrada. «Lo que vivimos después fue un infierno». Afortunadamente, a continuación, otras puertas se le abrieron. Las de Casa Alba. Y para ella, como para tantas otras jóvenes mujeres en dificultades, comenzó un nuevo día. «No sé cómo habría sobrevivido de otra forma. Ahora, gracias a Dios, las cosas se mejoraron». Casa Alba es un proyecto del Movimiento de los Focolares en Nigeria. En el inicio, durante muchos años, se llamaba simplemente “Casa Gen” (Generación Nueva). Posteriormente, Chiara Lubich, propuso llamarla “Alba”, con el auspicio de que pueda convertirse en una verdadera casa para muchas chicas en dificultades procedentes de toda Nigeria. Aquí, muchas provienen de la calle y encuentran hospitalidad y aprenden un oficio. Las actividades de coser (que posteriormente se transformó en un verdadero curso) y del batik (arte de teñir la tela), que en el inicio servían para juntar algún dinero, se convirtieron en un verdadero y auténtico proyecto de recuperación. La formación moral y espiritual es parte integrante del programa. Finales de mayo del 2017. En el Centro Mariápolis de Onitsha se festeja el 25º aniversario de la Casa Alba durante todo un fin de semana y en la conclusión se celebra una misa al aire libre. Los invitados son 400, muchos de los cuales llevan el típico y coloreadísimo traje africano, pintado precisamente con la técnica del batik. La misa la celebra el Obispo Auxiliar, el Rev. Denis Chidi Isizoh.  «Focolar significa fuego – dice durante la homilía-. El fuego de la promoción, de la evangelización, del amor».  Describe los encuentros personales que tuvo con Chiara Lubich, cuando  trabajaba con el Card. Arinze en el Pontificio Consejo para el diálogo interreligioso. Después prosigue: «Un filósofo francés escribió “Pienso, luego existo”. Un africano no diría nunca esto. Los africanos dirían “Somos, por lo tanto soy”. Soy una persona porque pertenezco a una comunidad, a un grupo. Esto es lo que los miembros del Movimiento de los Focolares nos dicen: cuando estamos unidos como una comunidad entonces nos reencontramos a nosotros mismos». 2017-05 Casa Alba Feast 5Un paso atrás. Anteriormente, Elde de Souza, responsable de la Casa Alba, fue a ver al Obispo Denis para informarle sobre algunas dificultades económicas del proyecto y de su inminente cierre. Como respuesta, el obispo renueva su confianza y le dijo que continúen. En lugar del cierre, propone festejar en gran estilo el 25º aniversario de actividades de la Casa: «¡El Focolar en Nigeria está demasiado silencioso!». Toda la comunidad se movilizó, no quedando insensible a esta propuesta. Todos, grandes y pequeños, se pusieron  a trabajar. El entusiasmo del Obispo Denise es contagioso: «Nigeria es un lugar feliz. Nosotros somos gente feliz. Algunos sin embargo, no lo son. Están verdaderamente en dificultades. Ésta es la experiencia de la vida», pero todos podemos unir nuestros sufrimientos a los de Jesús en la Cruz, concluye. Todas las “chicas” de la Casa Alba están presentes. Algunas son adolescentes, otras ya son abuelas. La fiesta es la ocasión para reentrelazar vidas e historias. «Me cambió a mí y a mi vida». «Antes yo era una persona colérica, aquí me tranquilicé». «Lo que viví aquí me ayudó para toda la vida». «Es una maravilla escuchar cómo esta pequeña semilla dio tantos frutos», comenta “Mama Regina”, de 83 años, una de las primeras educadoras. Al día siguiente, el periódico de la arquidiócesis de Onitsha (donde hay dos millones de católicos) define el aniversario como «un espectacular evento colorido». Se lee: «El Movimiento de los Focolares ha secado las lágrimas de jóvenes sin esperanza, que ahora viven por encima del umbral de pobreza gracias a las habilidades adquiridas en Casa Alba». Canales de radio y TV hablan sobre el suceso. El periódico de la región  hace un llamado a la población, para recoger fondos para relanzar el proyecto. Comienza un nuevo día también para Casa Alba.

Filipinas: «Ser es más importante que tener o hacer»

Filipinas: «Ser es más importante que tener o hacer»

Eugene es ingeniero, Ann técnica en informática. «Sin embargo – puntualiza ella – luego de 10 años de una carrera exitosa, decidí dedicarme por completo a nuestro proyecto de familia. Al poco tiempo de haber tomado esta decisión, nos llenó de alegría la noticia que estábamos esperando un bebé». En noviembre de 2009, la felicidad por el nacimiento de Erin duró poco. Dos semanas más tarde, el 6 de diciembre, percibiendo una cierta dificultad para nutrirla, decidieron llevar a la pequeña al hospital. Después de algunos exámenes se llegó al diagnóstico: sepsis neonata ly la meningitis, potencialmente letal. Eugen y Ann reviven con emoción esos momentos. «Era el 7 de diciembre – recuerda Eugene – y temprano por la mañana renovamos nuestro “sí” a la voluntad de Dios. Poco tiempo después el médico nos informó que la infección estaba en una fase avanzada y la niña en condiciones críticas. Por la tarde, Erin fue bautizada». Al día siguiente, los latidos eran débiles, los ojos insensibles a la luz. Los médicos aconsejaron trasladarla a un hospital mejor equipado y lógicamente más caro. Sigue Eugene: «Ann me ayudó a hacer un acto de fe, aceptando hacer todo lo que nos sugerían y sólo después preocuparnos por los gastos. Le pedí a Dios: “¿Por qué?”. En la ambulancia trataba de estimularla, acariciándola y cantándole canciones de cuna. Los latidos estaban desapareciendo. Pero en el fondo seguíamos creyendo que había alguna razón, aunque fuese incomprensible para nosotros. Una vez más pronunciamos nuestro “sí”. En Urgencias, viendo su cuerpecito lleno de agujas y tubitos, no podíamos evitar de llorar, dándonos cuenta de la gravedad de la situación. Era el 8 de diciembre, fiesta de la Inmaculada Concepción de María. En la capilla del hospital Le entregamos a nuestra bebé». Ann: «La situación era crítica, la infección parecía haber alcanzado el cerebro. Los médicos nos dijeron que anteriormente otros pacientes, en condiciones similares, no habían sobrevivido o habían quedado discapacitados. Podíamos sólo esperar y rezar. Más exámenes, transfusiones, otros análisis. Erin parecía un pequeño Jesús crucificado, sufrido e impotente. Podíamos sólo estar también nosotros, como María, “a los pies de la cruz”». Passa 2Agrega Eugene: «Nos mirábamos, asegurándonos recíprocamente nuestro amor y el deseo de permanecer unidos. Esa noche, nos preguntamos si realmente estábamos dispuestos a aceptar cualquier cosa. Ann se acordó de Abraham, dispuesto a sacrificar a su hijo Isaac. Y de Job, que permaneció fiel aun cuando lo perdió todo: “El Señor da, el Señor toma”. Erin no era nuestra, pertenecía a Dios». Ann se ilumina: «Sin embargo, con el pasar de los días, notábamos unas mejorías. Erin respondía bien a los tratamientos. Un examen muy exhaustivo reveló que la actividad cerebral era normal, a pesar de la gravedad de la infección. Rápidamente los médicos y los enfermeros lo definieron un pequeño milagro. Día tras día, ella se volvía cada vez más fuerte, una pequeña mujer que luchaba valientemente para vivir. Gracias a ella, aprendimos que “ser” es más importante que “tener” o “hacer”. Nos estaba enseñando la vida». Eugene: «Pasamos nuestra primera Navidad, siendo tres, en el hospital. En medio de tanta incertidumbre nos recordamos lo que Chiara Lubich dijo: “Solo Dios es fuente de alegría y de felicidad plena”. Nos sostenían la presencia de Jesús en medio nuestro, la comunidad de los Focolares, la familia y los amigos. 23 días después volvimos a casa. Erin estaba completamente curada». Concluye Ann: «Al igual que todos, nosotros también tenemos nuestras preocupaciones. Pero sabemos que nuestras hijas antes que nada pertenecen a Dios. Nuestra tarea como padres es acompañarlas en el descubrimiento del diseño que Dios tiene sobre ellas». Mientras hablaban, Erin, muy vivaz, jugaba alegre con su hermanita Anica. 7 y 5 años de alegría e inocencia.  

Jornada mundial de Oración por la Creación

La Jornada Mundial de la Oración por el cuidado de la Creación (1˚ de setiembre) fue instituída por la Iglesia Ortodoxa en el 1989. Desde entonces, muchas otras Iglesias cristianas se han unido a la celebración, entre ellas la Iglesia Católica, después de la Carta Encíclica del Papa Francisco “Laudato sí” sobre el cuidado de la casa común. La tutela y salvaguardia del ambiente, la responsabilidad y la atención hacia cada persona y hacia el ambiente en el que vive, con especial atención hacia los pobres y olvidados, serán los temas al centro de las iniciativas y de la oración común que se desarrollarán en diferentes Países.

El ser humano ora con la Creación

El ser humano ora con la Creación

Luca 3El orar no consiste, precisamente, en el hecho de dedicar un tiempo, durante el día, a la meditación o en leer algún texto de la Sagrada Escritura o de santos, y en tratar de pensar en Dios o en sí mismos para una renovación nuestra interior. Esto no es, en su esencia, orar. Lo mismo podemos decir por lo que se refiere a rezar el rosario o las oraciones de la mañana y de la noche. Sin dudas, todas ellas son expresiones aptas para entrar en relación con Dios y manifestar su realidad íntima, sin embargo jamás coinciden totalmente con ella. Paradójicamente, una persona puede haber hecho estas cosas durante todo el día y no haber orado ni un solo minuto. De hecho, entre la oración y las oraciones hay una diferencia sustancial que trataré de explicar empezando por la oración más inconsciente, pero no por esto menos esencial. Cuando, por la noche, nuestros ojos se levantan para mirar el cielo estrellado, ven un universo de inagotable belleza que encanta y asombra en su tácita obediencia a una ley: la ley de vida y de armonía que desde el inicio lo ha constituido y que en cada momento lo sostiene; ley que por sí sola testimonia el Creador. Si es así con respecto a los astros del cielo, lo es también con respecto a las plantas y a las flores, que ‘saben’ cuándo brotar y florecer, cuándo dar fruto y morir. Por lo tanto, una profunda relación une a todos los seres vivientes con Dios; relación que – me atrevo a decir – es profunda oración porque ellos, sólo con su existir, inconscientemente lo reconocen y lo siguen y “cuentan su gloria”. (Sal 18,2). Pero esta recóndita oración encuentra su expresión – y la más alta, porque es consciente y libre – también en el ser humano. Es la oración que nace cuando él, aun antes de entrar en diálogo con Dios, lo reconoce como Padre que lo ha creado y lo sostiene poniéndolo en condición de igualdad con todo el universo. La relación con Dios se define entonces en su realidad de fundamento vital y medicinal al mismo tiempo. Una relación, por lo tanto, que el ser humano está llamado a establecer cotidianamente con Él o a pedírsela, tal como invitan a hacer algunos maestros del espíritu, en una original exégesis de la invocación del Padre Nuestro: “Danos hoy nuestro pan de cada día”. El orar, para que sea realmente auténtico, exige antes que nada una relación con Jesús: ir con el espíritu más allá de nuestra condición humana, de nuestras ocupaciones, de nuestras oraciones, aun hermosas y necesarias, y establecer esta relación íntima, personal con Él. […] Veamos entonces las distintas maneras en las que se puede desarrollar esta relación. Empiezo por una forma de oración que puede parecer impropia. Es la oración de ofrecimiento. La vive quien, prostrado por los sufrimientos físicos o espirituales, incapaz de todo, incluso de hablar, le ofrece a Dios toda su existencia, aunque sea en un espacio de un solo instante. Es por esto que dicha forma de oración puede considerarse como la más profunda, porque inserta el alma en ese punto donde el contacto con Dios se hace inmediato y directo. Pero también el trabajo puede asumir la forma de una oración de ofrecimiento. Pienso de manera especial en aquéllos que durante el día están agobiados por el esfuerzo físico, hasta tal punto que se les vuelve casi imposible recoger las fuerzas necesarias para dedicarse a la oración. Y bien, incluso ellos advertirán que viven en una continua relación con Él si por la mañana, con una simple intención, le ofrecen a Dios su jornada. Y por la noche, en el silencio del recogimiento, aunque sea breve, encontrarán la unión con Él. En el fondo, la humanidad de hoy se muestra especialmente sensible precisamente a esto, es decir a que todo el universo y lo que en él se realiza, se pueda transformar en una gran oración que incesantemente se eleva a Dios. Pasquale Foresi, de “Luce che si incarna” – Ed. Città Nuova, Roma 2014, pagg. 31-32-33

Los de las pulseras blancas

Los de las pulseras blancas

¿teens 2Quién, como yo, aun queriendo dar siempre lo mejor de sí, no se ha encontrado en dificultad? Queríamos tratar bien a quienes nos rodeaban y en cambio contestamos mal, queríamos ayudar y en cambio resultamos estorbando, queríamos dar y en cambio prevaleció el egoísmo. Es por esto que algunos amigos y yo pensamos en una posible solución. Todo empezó por dos de nosotros que habían encontrado cierta dificultad en dar siempre lo mejor de sí, entonces entendieron que la mejor manera de empeñarse era una ayuda recíproca. Es más fácil querer y respetar a los demás sabiendo que alguien en alguna parte está intentando hacer lo mismo. Estaba empezando a nacer una primera forma de “pacto” por el cual cada uno se comprometía en su ambiente a ser constante en el desafío de dar lo mejor de sí en las relaciones con los demás. Sin embargo, esta promesa no se limitó a ellos dos. Poco tiempo después nos la contaron y, dialogando nos identificamos todos con sus dificultades. teens 3A ese punto, nosotros también quisimos involucrarnos en esa promesa y le agregamos algo. De hecho, encontramos un símbolo que nos ayuda a recordar cotidianamente el “pacto” y, por consiguiente, nos fortalece: una pulsera de cuerda blanca. Interiorizamos este “pacto” y lo insertamos en nuestra vida. Dado que nos ha ayudado mucho, decidimos difundirlo en nuestra ciudad contando la experiencia a todos aquellos que conocemos. A partir de ahí se activó una reacción en cadena y la noticia de este “pacto” empezó a extenderse por toda Italia. En el último mes recibimos muchas fotos y relatos de experiencias por parte de personas que adhirieron. Por lo tanto, ahora queremos invitar a quien esté interesado a que se ponga en la muñeca la pulsera blanca y empiece con nosotros este desafío. Si desean recibir mayores informaciones o bien compartir con nosotros lo que viven, las cosas lindas que les han pasado viviendo así, dando lo mejor de ustedes en cada momento, escribanos a: ilpattobraccialetto@gmail.com. Los testimonios más lindos encontrarán espacio también en nuestra revista “Teens”. De Teens online

Evangelio vivido: la ternura del Señor

Evangelio vivido: la ternura del Señor

VenezuelaConstructores de paz «En la situación de grave crisis que nuestro país está atravesando, queremos ayudarnos a vivir como cristianos coherentes. En Valencia, la ciudad más afectada por los saqueos, vivimos días de confusión e histeria colectiva. Varios sectores industriales fueron saqueados salvajemente sin que los policías intervinieran. Más aún, vimos a los mismos militares que incitaban al saqueo de las tiendas, trayendo camiones y herramientas. Ciudad bloqueada, detenciones, clima de tensión, rabia y hambre. En esta situación, en familia y con otros amigos, tratamos de ser un apoyo los unos por los otros y comunicar esperanza, sin juzgar a aquellos que se llevaron de las tiendas cualquier cantidad de cosas, incluso estufas y repuestos para autos. Asistimos también a la continua intervención de la providencia que hace llegar medicinas y alimentos para familias enteras. Es impresionante el amor de Dios que cuida de sus hijos». (O.T. – Venezuela) Chef «Soy chef y me gusta pensar que la vida es un ejercicio para llegar al banquete del Cielo. ¿Tal vez Jesús no empezó su vida pública en un almuerzo de boda en Caná? ¿No participó en muchos convites, hasta la última cena, prometiéndonos un banquete final en el cual, seguramente, también los chefs como yo tendrán su lugar? En mi servicio en la cocina el objetivo no es tanto el plato en sí mismo, sino las personas que saborearán el fruto de mi empeño. Trato de no trabajar sólo para hacer carrera, ser un buen marido y un buen padre, sino por Dios». (V. – Italia) El “truco” «En el apartamento donde vivo con otros estudiantes, no siempre es fácil la convivencia, porque tienen costumbres distintas de las mías. Un día, desanimado, estaba pensando en buscarme otro alojamiento, cuando mi novia me sugirió que tomara yo la iniciativa e hiciera algo para mis coinquilinos. Ella misma me ayudó a preparar un postre. ¡Un gesto tan sencillo! Sin embargo sirvió para desbloquear las relaciones, tanto que empezó entre todos una especie de competencia para salir el uno al encuentro del otro. Ahora ya sé el “truco”: cuando se presenta alguna dificultad, puedo empezar siendo el primero en amar». (B. C. – República Checa) Verdadera pobreza «Tengo un amigo inválido que recibe una jubilación mínima y es marginado por sus hermanos y hermanas. Un día me contó: «Le compré un par de zapatos a G., cada día le brindo el desayuno en la cafetería. Ahora pienso pagarle la dentadura postiza». Diariamente él hace gestos de este tipo, sin embargo lo tachan de asocial, incluso dicen que no tiene capacidad de entender y querer. En cambio a mí me conmueve siempre la bondad de ese hombre, quien aun en sus difíciles condiciones sabe captar las necesidades de los demás. Un día me decía: «Cuando alguien sufre, yo lo siento muy parecido a mí. Poderlo ayudar me hace sentir vivo y realizado»».  (T. – Italia)  

María: la perfecta cristiana

María: la perfecta cristiana

Maria 1«Ante el pensamiento de hablar de María siento que el alma tiembla y el corazón late. Es éste un tema que supera todas nuestras facultades y en el lugar de la palabra sería mejor guardar silencio. «¡María! La extraordinaria entre todas las criaturas, la excelsa hasta el punto de poseer el título y la realidad de ser Madre de Dios y por lo tanto, la Inmaculada, la Asunción, la Reina, la Madre de la Iglesia. María está más cerca de Dios que del hombre, y sin embargo es una criatura como nosotros que somos criaturas, y así es ante el Creador. De aquí la posibilidad para Ella de ser para nosotros como un plano inclinado que toca el cielo y la tierra y por lo tanto, aún en su ser extraordinario, niña, jovencita, novia, esposa, viuda… igual que nosotros, cada uno en la propia edad y en la propia condición, podemos encontrar un vínculo con Ella y por lo tanto, un modelo.[…] «En lo que se refiere a poseer una verdadera devoción a Ella – aún magnificando las diversas devociones que fueron floreciendo en el transcurso de los siglos para dar al pueblo cristiano el sentido de un amor maternal seguro, que piensa en todos los pequeños y grandes problemas que la vida ocasiona- te aconsejaría un camino que permite que en el corazón nazca un amor por María semejante y del tipo del que Jesús tiene hacia Ella. Es así, si María tiene todas esas magníficas y extraordinarias cualidades que sabes, Ella es también “la perfecta cristiana”. «Y es así porque, como se puede deducir del Evangelio, Ella no vive su propia vida, sino que deja que la ley de Dios viva en Ella. Es Ella la que mejor que todos puede decir: “No soy yo que vivo, sino que es Cristo quien vive en mí” (Gal 2, 20). María es la Palabra de Dios vivida. Si quieres entonces amarla de verdad, “imítala”. ¡Debes ser también tu palabra de Dios viva! «La imitación de Ella te hace semejante a Ella y te lleva a amarla, porque si un dicho dice: “El amor o encuentra a sus semejantes, o los hace semejantes”, es verdad también que los que son semejantes se aman. […] «Imitemos pues a María, hagámonos semejantes a Ella y nacerá espontáneamente en nuestro corazón el amor hacia Ella» Chiara Lubich   “Diálogo abierto”. Pubblicado in Città Nuova, 1976,  n. 9, p. 33. Ver también Centro Chiara Lubich:    

Giordani: fraternidad entre las generaciones

Giordani: fraternidad entre las generaciones

Foco 4Igino Giordani trataba a los jóvenes con ese amor que brota de la unidad entre las generaciones. Era un hermano para cualquiera, para los pequeños y para los grandes, porque la fraternidad nos recoge en uno, ante la presencia del único Padre: «Jesús utilizó las más vivas expresiones para afirmar su íntima fraternidad con los hombres. Es posible imaginar cuánto amaba a su madre y a sus primos, compañeros de su infancia y confidentes de su juventud. Sin embargo, una vez que le dijeron que lo buscaban mientras enseñaba, respondió: “¿Quién es mi madre y quiénes son mis hermanos? –Y extendiendo su mano hacia los discípulos dijo; quien quiera que haga la voluntad del Padre mío, que está en los cielos, es mi hermano, mi hermana y mi madre” (Mt 12, 48-50). El significado de la respuesta es obvio: quien quiera que acepte la paternidad de Dios, que es el objeto de la predicación evangélica, entre a formar parte de la familia de Jesús, se convierte en hermano, hermana, madre de Él. El cristianismo emparienta con Cristo y, por Él, con Dios, con el primer grado de parentela, que es la fraternidad». [de: Igino Giordani, Il messaggio sociale del cristianesimo, (El mensaje social del cristianismo) 2001, p. 87] Paragonaba la unidad entre las generaciones al manejo de un auntomóvil: la juventud es como un motor, la ancianidad es un manejo prudente; ¡ambas indispensables para llegar a la meta! Entre las numerosas personas con las que se escribía, en 1979, un año antes de morir, encontramos un niño de 9 años, apodado Sandokan, el cual estableció una profunda relación con Igino y lo llamaba “abuelito con corazón de gen”: «Querido abuelito, desde que supe que estabas enfermo trato de rezar más por ti. Con mi mamá y mi papá le pedimos a un sacerdote que te recordara en la Misa y a Jesús en mi corazón le pedí que te ayude y que te esté cerca en este momento. Recuerdo que en una carta te escribí que iría a tu casa, pero no he podido, pero lo importante es que te tengo en mi corazón y yo estoy en el tuyo. ¿Cuándo nos dejes a nosotros puedes saludarnos a Jesús? Sabes lamento que te vayas porque te quiero mucho, pero estoy contento que tú puedas ver a Jesús quien ha sido todo para ti. Un gran beso de tu Sandokan». «Queridísimo Sandokan, conocido como Ferdinando, te recuerdo muy bien: tú y yo somos hijos del mismo Padre, Jesús. Yo paso los días junto a ti, sin importar si vivimos lejos. Tu papá te explicó bien: soy un abuelito, con el corazón de un gen. Por lo tanto somos coetáneos y hermanitos. Salúdame a tus hermanitos, también ellos hijos de Jesús; ámalos como amas a mamá y a papá y como amas a Jesús… Un besito en tu naricita de tu abuelito». En un banco del Centro Mariápolis, el centro de los Congresos del Movimiento de los Focolares, los jóvenes se reunían a su alrededor, cantando y danzando, se detenían para hacer coloquios íntimos; cada uno se sentía amado y estrechaba con él el pacto de seguir y vivir el ideal de la unidad propuesto por Chiara Lubich. Giordani reseña uno de estos encuentros alegres en su Diario: «Aun estando sin voz, hoy, me pidieron que hablara a la escuela de los gen y de las gen: trescientas personas. Improvisé, hablando de varias cosas, pero polarizándolas alrededor del misterio de amor, en el que actúa la triada: Dios-el Hermano-Yo. El entusiasmo, embellecido por los cantos, explotó entre las y los gen, como manifestación de la alegría de los presentes». [del: Diario di fuoco, (Diario de Fuego) 25 de abril de 1979].  

Encontrarse con un Carisma

Encontrarse con un Carisma

Assisi-1El primer acontecimiento de la vida de la Virgen que recoge el Evangelio es la Anunciación (Lc 1,  25ss). María fue elegida por Dios desde siempre, pero en la Anunciación sucedió algo muy particular para Ella: el ángel se le presenta con un mensaje de Dios, que María acepta. Por este  “sí” suyo florece inmediatamente en Ella una realidad nueva: la encarnación del Verbo en su seno. Si tratamos de comprender la vida de algunos santos, vemos que algo análogo a lo que sucedió en María sucede también espiritualmente en ellos cuando se tropiezan con un carisma que Dios ha dado para el bien de la Iglesia. Conocemos la historia de santa Clara de Asís, la discípula más perfecta de san Francisco. Cuando uno visita la iglesia de san Damián en Asís, donde ella vivió, puede suceder que el guía, al explicar ese lugar sagrado diga: “Aquí Cristo se encarnó en el corazón de Clara”; lo cual no son simples palabras, sino que revelan una profunda verdad. Aunque Clara de Asís – por lo que sabemos – vivía ya desde antes una vida cristiana ferviente, su encuentro con san Francisco, que era la personificación de una palabra que Dios volvía a decir al mundo, la palabra pobreza, provocó en ella algo nuevo: hizo que Cristo se desarrollara y creciera en su alma  hasta convertirla en una de las santas más grandes de la Iglesia Católica. Y ¿acaso no piensan los Papas, los santos y los Padres de la Iglesia que la Palabra engendra a Cristo en las almas? Así, cuando alguien, en un momento dado de su vida, se tropieza a través de una persona, un escrito o una reunión con el carisma de la unidad y siente la llamada a hacerlo suyo, si dice su “sí”, sucede también en él algo semejante a lo que sucedió en María y en estos santos. Cristo en su corazón puede desarrollarse verdaderamente y crecer espiritualmente como por una actualización del bautismo. He leído que santa Clara de Asís, pronunció antes de morir una frase maravillosa: “Tú, Señor, seas bendito porque me creaste” Quiere decir: “porque habiéndome creado,  realmente Tú has buscado tu gloria”. Y la suya fue una muerte de amor. ¡Quiera el Cielo que también a nosotros nos suceda algo así! Si somos fieles, tampoco nuestra muerte será simplemente una muerte física, sino una muerte de amor. Entonces subiremos también nosotros a saludar a nuestra Madre, a nuestra santa,  a nuestro modelo, Aquella que aquí en la tierra ha sido nuestra Guía, Reina y Madre. Y veremos la gloria de María, Reina del cielo y de la tierra. Y la veremos rodeada sobre todo por todos los que la han amado. De Chiara Lubich,  “María – Transparencia de Dios”, 2003 Ciudad Nueva – págs. 58,59,73.

Filipinas: una pequeña ciudad llamada “Paz”

Filipinas: una pequeña ciudad llamada “Paz”

SOR Taal vulcan e lago1Llegando a Manila (a 60 Km) la primera sensación que se advierte al acercarse a la zona que rodea el Lago de Taal (en la isla de Luzón, en la parte septentrional del archipiélago de Filipinas) es la de una profunda paz. El visitante queda encantado ante la vista de un espectáculo único en su género: el lago, que con sus aguas llenó una antigua caldera volcánica, que tiene dentro una isla. Esta isla, a su vez, dentro de un nuevo cráter tiene un nuevo lago mucho más pequeño. Y en el centro de este pequeño espejo de agua hay un escollo. Un efecto “matrioska” de lagos, uno dentro del otro. Desde la cima del volcán, la vista se extiende hacia las verdes colinas cubiertas de bosques y prados, cultivos de piña, café, banano y una infinita variedad de flores tropicales. Tagaytay 2En las cercanías del Lago Taal, desde 1982 esta misma sensación se respira entre las edificaciones y las calles de la Mariápolis de Tagaytay. “Paz” es la aprimera ciudadela del Movimiento en Asia. «Tengo un sueño», había exclamado Chiara Lubich aquel año, observando las colinas de Tagaytay, que precisamente aquí crezca una de las ciudades de los Focolares, que son lugares donde se vive permanentemente el Evangelio, para presentar un boceto de cómo sería el mundo si todos los vivieran. Pero la presencia de los Focolares en Tagaytay es todavía más antigua. Ya en 1966, de hecho, tuvo lugar en estos lugares un primer encuentro de personas adherentes al Movimiento. En esa ocasión, los presentes, impresionados por la belleza del lugar, pidieron que precisamente allí pudiera surgir un centro de formación, una “casa para todos”. Al año siguiente, gracias a una primera donación, ese deseo empezó a volverse realidad, tomando forma en 1975. Después, los acontecimientos y el sueño de 1982, coincidieron con la invitación que le dirigió la Conferencia episcopal filipina al Movimiento para que construyera, precisamente en las adyacencias de Tagaytay, un “escuela” para sacerdotes asiáticos. Desde entonces el desarrollo ha sido inesperado. En especial, entre las decenas de realidades que han surgido, es importante señalar una escuela para el diálogo con las grandes religiones de Asia, dirigida especialmente a musulmanes y budistas, pero también a hindúes, sintoístas. Todos los años convergen de estos lados, para experimentar la alegría de la convivencia, los jóvenes budistas de una asociación laica japonesa. Recientemente, el pasado mes de mayo, 200 miembros de grandes religiones de 13 países asiáticos distintos, participaron en la Escuela de las Religiones Orientales (SOR). SOR3Desde su fundación, la ciudadela Paz ha asumido también un fuerte perfil social y de promoción humana, y se ha convertido en una de las sedes de la Bukas Palad Foundation, ONG sin fines de lucro, fundada en las cercanías de Manila en 1983 para responder a las necesidades sociales y sanitarias de los sectores más pobres de la población, especialmente de zonas rurales. Familias enteras, en condiciones habitacionales precarias (a menudo en casas con una sola habitación de piso de tierra, sin agua) con difícil acceso a los servicios socio-sanitarios y escasas oportunidades laborales. Bajo el tema “libremente hemos recibido, libremente donamos”, Bukas Palad (que en idioma tagalo significa “manos abiertas”) ha hecho ya un recorrido de más de treinta años, mejorando la calidad de vida de miles de personas, no sólo en el aspecto de la salud, sino también en la parte humana y espiritual, desde un enfoque integral y global, dirigido a la promoción humana y de la salud de las personas. Actualmente en la ciudadela tienen especial relevancia las empresas que adhieren al proyecto por una economía de comunión, las actividades de los voluntarios hospitalarios en varias instituciones públicas de salud, el vivo testimonio de los empleados de los medios de comunicación y las distintas iniciativas a nivel educativo. En Tagaytay las experiencias de diálogo y comunión crecen y se multiplican, como el agua del lago que se replica en otros espejos de agua. Pero los reflejos de Paz no se pueden contar.

¿Quiénes son los “voluntarios de Dios”?

¿Quiénes son los “voluntarios de Dios”?

Gennaro e Lucia PiccoloDe chico amaba sintonizar en la noche la Radio Vaticana que transmitía noticieros en varias lenguas extranjeras. Naturalmente, no conocía ninguna de ellas pero esa escucha me fascinaba, tenía la impresión de que mi corazón se dilataba a la humanidad, a los pueblos y a su cotidianidad. Fue una de esas noches que escuché al Papa Pio XII invocar el nombre de Dios tres veces: ¡Dios, Dios, Dios!”. Ese “grito” se imprimió en mi conciencia, aunque con el pasar del tiempo, terminó debilitándose y perdiéndose en la memoria. Era el año 1956. Nueve años después, en enero  de 1963, estaba haciendo el servicio militar en Turín. Un compañero de habitación me invitó a un Congreso del cual, extrañamente, no pedí ninguna información. Sin embargo al pedir permiso a mis superiores, les dije que se trataba de un Congreso del que dependía toda mi vida. Gracias a un inesperado consentimiento de mis superiores, partí hacia Ala di Stura, un pueblito en la montaña en un marco natural estupendo. Fui recibido como si me conocieran desde siempre. Fue allí donde conocí a Chiara Lubich –fundadora del Movimiento de los Focolares- y a Igino Giordani, co-fundador. Fue una realidad fuerte para mí encontrarme por primera vez con personas de culturas y religiones distintas. En esos días tuve la posibilidad de conocer, porque era huésped de los Focolares, a Assunta Roncalli, la hermana del Papa Juan XXIII, quien murió el 3 de junio de ese mismo año, 1963. Una mañana Chiara Lubich habló de una nueva vocación nacida dentro del Movimiento. Y fue sólo cuando Chiara indicó el año y las circunstancias de ese nacimiento, que volvió a florecer imperiosa en mi conciencia aquella invocación de Pio XII: «¡Dios, Dios, Dios! Dios los ayudará. Dios será su fuerza. Resuene este inefable nombre, fuente de todo derecho, justicia y libertad, en los parlamentos, en las plazas, en las casas, en los talleres…». Así se expresó el Papa en el radiomensaje del 10 de noviembre de 1956 durante la represión de la revolución de Hungría. Y Chiara comentó: «Por lo tanto, si ha habido una sociedad capaz de suprimir el nombre de Dios, la realidad de Dios, la Providencia de Dios, el Amor de Dios del corazón de los seres humanos, debe existir una sociedad capaz de volver a ponerlo en su lugar. ¿Es posible que el demonio tenga seguidores fidelísimos, totalitarios, pseudo-mártires de sus ideas, y que Dios no tenga un ejército compacto de cristianos que lo den todo para reconquistarle a Él la tierra?». A esta invocación del Papa, Chiara respondió con la intuición de reunir a mujeres y hombres de todas las edades, nacionalidades, condiciones, vinculados por un único lazo, el de la fraternidad universal, para que formaran un ejército de voluntarios, “Los Voluntarios de Dios”, expresión del Movimiento de los Focolares que hoy día está presente en 182 naciones del mundo. Una vocación moderna, totalitaria, a la que Chiara Lubich dio un ulterior toque de encanto cuando la describió como el atractivo del tiempo moderno: «Penetrar en la más alta contemplación permaneciendo mezclados entre todos, hombre junto al hombre… para diseñar en la multitud un bordado de luz y, al mismo tiempo, compartir con el prójimo la deshonra, el hambre, los golpes, las breves alegrías».  Igino Giordani la compara con una «santidad con overol del obrero que impulsa a llevar a Dios al Parlamento, a los Consejos Comunales, a los hospitales, escuelas, talleres, laboratorios, oficinas, a la casa, a los campos deportivos, pero también al mundo del arte, de la comunicación, de la ciencia, de la economía…»,  porque, agrega, «¡¡llevar a Dios a todos estos lugares significa transformarlos en Abadías, transformarlos en lugares sagrados en donde se celebra todos los días una Misa especial!!» Han pasado 54 años desde aquel día en cuando yo sentí el llamado a enrolarme con “Los Voluntarios de Dios”, nacidos de un carisma que, porque es auténtico, se pueden medir también sus implicaciones concretas que se reflejan en la cultura, en lo social, en la economía, en la política… Para que los distintos ámbitos de la vida no permanezcan en la mediocridad, sin valor, incapaces de unir, insensibles, sino que se abran para acoger la profunda presencia de Dios. Gennaro Piccolo – Centro Igino Giordani “Un camino para la unidad” (Andria, Italia)  

Francisco y su segunda vértebra cervical (C2)

Francisco y su segunda vértebra cervical (C2)

Bici 10Francesco es un deportista tenaz, especialmente con su bicicleta. Recorre, cada día, varios kilómetros por tortuosos y pintorescos caminos de las colinas romanas para mantenerse entrenado. En efecto parece aún un jovencito, sin embargo hace muchos años que decidió donar su vida por amor a Dios en los hermanos con quienes se encuentra cada día. Y también en las situaciones difíciles ya sean las propias o ajenas. Entonces quiere con razón, mantenerse ágil. Hace pocos días, durante uno de sus habituales entrenamientos, su bici chocó contra una piedra y perdió el control del volante, arrojándolo por el aire.  El aterrizaje no fue para nada suave… y su cuello fue el primero que chocó con el asfalto, con el resultado de un vértebra cervical (exactamente la C2) dañada. En un momento le cambia el panorama: de una intensa actividad física se encuentra inmovilizado en una cama de hospital con un “jaula” de hierro desde el cuello para arriba, sostenida con tornillos que se apoyan en su cráneo. El singular arnés debería servir para impedir cualquier movimiento y asi esperar que lentamente se suelde la vértebra lesionada. Es desde la cama del hospital que escribe, no sin dificultades, en su celular: «C2, entraste con prepotencia a cambiar mi jornada y no sólo eso. No sabía ni siquiera que existías, y si existías, ¿dónde estabas? Después de ese brusco aterrizaje en el asfalto de la calle, y entre las varias cosas rotas, tú entraste enseguida en la cabeza y en las preocupaciones de todos. Tenías el poder de darme matarme, de dejarme inmóvil en una silla de ruedas. Solo te alcanzó la advertencia rompiéndose “el diente del axis”… trocito de hueso sobre el que se basa todo el movimiento de la cabeza. Esperamos que después de este golpe no cambie la visión del mundo y que tú puedas, también a través de un aparato moderno, volver a ser el perno donde mi cabeza se pueda mover. Gran C2, trato de recuperar mi relación contigo, y que no sea sólo por interés, sino para conocer algo de las maravillas de cómo estamos hechos. ¡Cuánto valor tiene cada pequeña cosa! Que estos momentos me ayuden a descubrir todo el valor que, dentro mío, es fruto de Tu amor» Francisco (Italia)

España: deporte, inclusión social y reciprocidad

España: deporte, inclusión social y reciprocidad

IMG_20170713_171000El Palau Robert de Barcelona, con sus jardines, es una especie de refugio verde reparado de las caóticas calles de la ciudad. Allí fueron acogidas, a partir del 13 de julio pasado, unas setenta personas, provenientes de distintos lugares de España, Italia y Croacia, reunidas para el Simposio Internacional “Escuelas inclusivas: innovación social, infancia y deporte”, organizado por el Laboratorio de Investigación Pro-social Aplicada (LIPA), por la Universitat Autònoma de Barcelona y por la red internacional Sportmeet. Docentes, fisioterapistas, deportistas se reunieron para un intercambio sobre proyectos de inclusión, modelos de intervención ante la discapacidad a partir de una óptica de inclusión social, partiendo de la convicción de que todas las etapas de la vida son dignas de ser vividas. La vida misma tiene necesidad de espacios de debilidad para experimentar en sí misma su propia capacidad de recuperación. Los días siguientes, el Centro Mariápolis “Loreto” de Cartell d’Aro (Girona) acogió la Escuela de Verano, un espacio de intercambio y aprendizaje sobre el tema del deporte inclusivo. Fueron unos veinte los participantes, bajo la guía experta de Eugenio Jiménez y de Javier Lamoneda, quienes experimentaron, a través de los juegos, qué significa “ponerse en el lugar de la persona discapacitada”. La experiencia deportiva, que es de por sí una posibilidad de confrontación con el límite, ofrece argumentos para la reflexión sobre la relación de la vida misma con los obstáculos, el sufrimiento, el malestar. Mediante las reflexiones, Paolo Crepaz de Sportmeet llevó a los participantes a preguntarse sobre el concepto del límite, como barrera, obstáculo, sufrimiento o malestar en términos generales, desde la óptica (contraria, respecto al sentir común) según la cual, la presencia misma de un límite podría convertirse en una potencialidad, en la posibilidad de “tender constantemente y por hábito adquirido a la fraternidad universal” (Chiara Lubich). IMG_20170714_115356Sorprende la capacidad que tiene la actividad deportiva de afrontar y superar los obstáculos, de incluir e integrar, de abatir barreras en todas las latitudes y en todos los contextos sociales. Por ejemplo, ¿cuánto puede hacer un balón para unir, en una soleada plazoleta en las vacaciones o dentro de un campo de refugiados? Los participantes dialogaron en un clima de confianza y estima recíprocas. Javier Lamoneda Prieto, profesor de Educación Física de Jerez de la Frontera (Cádiz, España) compartió su experiencia: “Parece que se forjó, en estos días, un equipo que quiere hacer de la actividad física un recurso para el encuentro entre distintos actores y profesionales del deporte, trazando principalmente dos ámbitos de acción: el académico y el social. Por primera vez se desarrolló un programa formativo en conjunto con una Universidad pública”. Roberto Nicolis, técnico socio-deportivo de Verona (Italia) dijo: “El ´limite que yo a menudo experimento es el que separa a las personas unas de otras, la discapacidad, precisamente. Reducir la distancia mediante el compartir, el conocimiento y las experiencias nos hace sentir más cercanos”. Roberto Macri, Presidente de la Fundación Obra Santa Rita, de Prato (Italia), expresó: “Han creado sobre todo una posibilidad de reflexión sobre nosotros mismos y los valores que le dan un sentido a nuestro compromiso. No sólo a nuestro compromiso profesional o de voluntariado, sino más en general a lo que puede dar un sentido más profundo a nuestro ser hombres y mujeres”.  

El esplendor de la naturaleza

El esplendor de la naturaleza

Natura 1«Contemplando la inmensidad del universo, la extraordinaria belleza de la naturaleza y su potencia, me remonté espontáneamente al Creador de todo y adquirí una nueva comprensión acerca de la inmensidad de Dios. La impresión que tuve fue tan fuerte y tan nueva que enseguida me habría arrojado a tierra de rodillas para adorar, alabar y glorificar a Dios. Sentí la necesidad de hacerlo como si ésta fuese mi vocación actual. Y casi como si ahora se abrieran mis ojos, comprendí como nunca Quién es el que hemos elegido como ideal; o mejor dicho, Quién es el que nos ha elegido a nosotros. Lo vi tan grande, tan grande, tan grande que me parecía imposible que hubiera pensado en nosotros. Esta impresión de su inmensidad ha permanecido en mi corazón durante algunos días. Ahora, al rezar: “Santificado sea tu nombre” o “Gloria al Padre, al Hijo, al Espíritu Santo” es otra cosa para mí: es una necesidad del corazón. (Rocca di Papa, 22.1.87) «[…] Contemplar, tal vez, la infinita extensión del mar, una cadena de montañas altísimas, un glaciar imponente, o la bóveda del cielo punteada de estrellas… ¡Qué majestuosidad! ¡Qué inmensidad! Y a través del esplendor deslumbrante de la naturaleza, nos remontásemos a Aquél que es su autor: Dios, el Rey del universo, el Señor de las galaxias, el Infinito. […] Él está presente en todas partes: está en el centelleo de un arroyo, en una flor que se abre, en una aurora clara, en un rojo atardecer, en una cumbre nevada … En nuestras metrópolis de cemento, construidas por la mano del hombre entre el ruido del mundo, la naturaleza pocas veces se ha salvado. Y sin embargo, si queremos, basta con un retazo de cielo azul descubierto entre los tejados de los rascacielos, para acordarnos de Dios; es suficiente un rayo de sol, que no deja de penetrar ni siquiera a través de los barrotes de una cárcel; es suficiente una flor, un prado, el rostro de un niño… […] Esto nos ayudará a regresar entre los hombres, donde tenemos nuestro sitio, sintiéndonos fortalecidos, igual que se sentía Jesús cuando, después de haber rezado al Padre durante toda la noche en los montes, bajo el cielo estrellado, volvía entre los hombres a hacer el bien». (Mollens, 22.9.88)   De Chiara Lubich – “Buscando las cosas de arriba” – Editorial Ciudad Nueva, Madrid 1993, págs. 18 – 20

El Evangelio vivido: “El Señor es bueno con todos”

El Evangelio vivido: “El Señor es bueno con todos”

Un libro para el examen «AsVangelo vissuto 2isto a la Facultad de Arquitectura. Tenía que dar un examen muy importante para el cual me faltaba un libro fundamental, pero como era un libro español costaba cuatro veces más del precio normal. Era el último día para inscribirse en ese examen y estaba desesperado. Saliendo de la Universidad, corrí a una iglesia cercana y le pedí ayuda a Jesús, pidiéndole que me ayude conseguir ese libro “antes de mediodía”. Poco después, en la facultad, sentí que me llamaban: era un colega que no veía hacía tiempo. Cuando supo mi problema, insistió para acompañarme a la casa de una estudiante que apenas conocía. Ella tenía ese libro, y además estaba contenta de prestármelo. Era mediodía. Algunos días después, cuando vi en ese texto errores tipográficos y que faltaban algunas páginas importantes, le avisé a la casa editorial con un e-mail. Para agradecerme, una semana después la editorial me mandó por correo urgente un libro gratis. ¿Cómo no descubrir en todo esto el Amor de Dios?» (S.G. – Argentina) En el lugar de mi marido «A menudo, después del trabajo, mi marido se acuesta en el sofá a mirar una película. A mí, que espero un poco de ayuda después de una jornada de tareas y compromisos con los hijos, esta actitud suya me crea tensión y rencor. Un día, impulsada por el consejo de algunos amigos que me sugirieron que me pusiera a amarlo en primer lugar sin esperar nada, probé ponerme en su lugar: pensé que su trabajo era muy esforzado y que necesitaba encontrar en casa ternura y comprensión. Así, dejando de lado mis ocupaciones, me senté a su lado a ver una película y a intercambiar opiniones» (G. G. – Siberia) Ayuda recíproca «El marido de mi vecina fue operado de urgencia y en la casa quedó solo el hermano de 70 años, que no tiene habilidad con el horno. A pesar de que en ese momento mi marido y mi madre estaban enfermos, me ofrecí para auxiliarlo. Durante 15 días, mientras cuidaba a mis enfermos, cociné también para él. Y el domingo lo invité a almorzar en nuestra casa. Él intercambiaba trayendo algunos alimentos que tenía. Se convirtió ya en un familiar nuestro». (C. – Italia) Pedir disculpas «Con mi temperamento fuerte, autoritario e independiente tenía la tendencia a juzgar a las personas. Este modo de ser hacía que fuera difícil relacionarme con los demás y también con mi marido. Hace tiempo me pasó que asistí a un encuentro en el cual se profundizaba la Palabra del Evangelio. Allí mis certezas recibieron una fuerte sacudida. Decidí hacer mi primera experiencia en el trabajo, donde soy responsable del personal de un gran negocio con más de treinta empleados. En especial sentía una gran antipatía hacia uno de ellos. Cuando llegaba su turno de recibir el sueldo, le tiraba el sobre con la plata en su escritorio. ¿Y ahora? Probé mirarlo de forma distinta a como lo veía antes, como si me hubiese puesto los lentes. Esforzándome, me acerqué y delante de todos le pedí disculpas. Fue una de las alegrías más grandes experimentadas en mi vida» (D. – Brasile)

El Derecho como instrumento de comunión

El Derecho como instrumento de comunión

Emmaus 3

Foto A. Dimech – © CSC Audiovisivi

“El Derecho ¿puede ser un instrumento de integración en la sociedad?” Participando en un seminario de estudios en Malta el pasado 2 de mayo, María Voce, Presidente del Movimiento de los Focolares, primera mujer abogada en su ciudad de origen (Cosenza, Italia), responde convencida. «Puede serlo si superamos una visión exclusivamente formalista y buscamos el Derecho como medio indispensable para contribuir a la creación de una realidad de comunión dentro de la sociedad. El Derecho, en efecto, se pone frente al ansia de justicia presente en cada hombre y le ayuda a realizarla. Nos enseña cómo vivir, cómo construir rectamente las relaciones entre las personas, los grupos, las organizaciones, los Estados», pero al mismo tiempo tiene un objetivo más alto: «la consecución del bien común y la edificación de la fraternidad universal». En un momento en el que las guerras, los actos terroristas y el miedo a quien es diferente parece que borran esta visión del Derecho, María Voce recuerda: «la Declaración Universal de los Derechos humanos (1948), después de la catástrofe de la Segunda Guerra Mundial y de la Shoah, evidencia desde el preámbulo: la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana”. También las Constituciones europeas sucesivas lo subrayan. La Carta Constitucional alemana (1949-1990) en su primer artículo proclama: “La dignidad humana es intangible. Cada poder estatal tiene el deber de respetarla y de protegerla”. La Carta polaca (1997) afirma: “La natural e inviolable dignidad del ser humano es la fuente de la libertad y de los derechos del individuo y del ciudadano. El Gobierno tiene el deber de tutelar su inviolabilidad (art. 30)”. También la Carta de los Derechos fundamentales de la Unión Europea, invocada en el Tratado de Lisboa de diciembre de 2009, señala la dignidad como valor preliminar a la libertad, la igualdad, la solidaridad, la ciudadanía y la justicia: “La dignidad humana es inviolable. Tiene que ser respetada y tutelada (art. 1)”». A 60 años de la firma de los Tratados de la Unión Europea, prosigue María Voce, «sabemos las dificultades que la Unión está atravesando, y siento que puedo afirmar que el motivo de esta crisis parece ser la misma crisis de las relaciones. Se ha tratado de construir un mercado común, confiando en las leyes del capitalismo, pero hemos permanecido distantes, incluso indiferentes los unos respecto a los otros. La crisis impone una severa verificación del significado profundo de integración que, especialmente para la Unión Europea, debe afirmarse sobre un patrimonio compartido, fruto del encuentro entre la herencia greco-romana y la judeo-cristiana, sin olvidar las múltiples contribuciones que han dado todas las culturas del Mediterráneo». Durante su intervención, María Voce ofrece el compromiso del Movimiento de los Focolares para la defensa de los principios de paz y de unidad que habían inspirado a los fundadores de la Unión europea. «Es la experiencia de “Juntos por Europa”. Se trata de una red de personas de varios Movimientos de inspiración cristiana, con citas plurianuales, continentales y locales. En tales encuentros se señalan, entre otras cosas, algunos valores compartidos por todos: la familia, la vida, la paz, el ambiente, una economía equitativa, la solidaridad con los últimos. Quieren testimoniar que es posible la unidad entre personas de Europa del Norte y del Sur, del Este y del Oeste. Querríamos, juntos, multiplicar las experiencias positivas que ya se están realizando y extraer líneas de pensamiento y de acción que puedan contribuir, en el campo del Derecho, de la política, de la economía, de la educación, a la edificación de una sociedad que se hace familia».

La “ley” de los sistemas

La “ley” de los sistemas

Le sfide dei massimi sistemiEl término “sistema” está quizás entre los más utilizados de nuestro lenguaje. Casi sin darnos cuenta, siempre aparece, ya sea que hablemos de elecciones administrativas, de totogol, de estrellas, de unidades de medida, de política, de irrigación, de las tareas de álgebra de los hijos, seguridad, transporte, atención médica o cadenas montañosas. Sencillo o complejo, nervioso o monetario, un “sistema” (proviene del griego siìstema, reunión, colección) está siempre en la boca de todos. En 1937, y en una forma más “sistemática” en 1945, un biólogo austríaco, Ludwig von Bertalanffy (Viena, 1901 – Búfalo, NY, 1972) fue el primero en enunciar la Teoría General de los Sistemas (TGS), un método de lectura e interpretación de todo el mundo existente: «Todo organismo es un orden dinámico de procesos recíprocamente interactivos». A su Teoría ha dedicado una escrupulosa atención el catalán Jordi Marjanedas, generación 1940, en su reciente volumen “Los desafíos de hoy a la luz de la Teoría General de los Sistemas” editado por Città Nuova. El texto va, desde las ciencias biológicas a la vida del universo, de la ecología a la antropología, de la historia a la ética, de las ciencias sociales a la religión, buscando en cada campo del saber elementos de integración y coherencia, según una visión unitaria de la persona y de la creación. ¿Dónde reside la importancia de la Teoría? El desarrollo de la ciencia moderna ha llevado a una proliferación de saberes parciales, fragmentados, hiper-especializados. Tanto que, irónicamente, el escritor G. K. Chesterton dice: «Llegará el día en que lo sabremos todo de nada». Esta fragmentación empaña la visión unitaria del todo. Por ejemplo, en la medicina, la persona no sólo es hígado o articulaciones, sino un conjunto armónico y unitario de espíritu, alma y cuerpo. En filosofía, se han sucedido innumerables teorías y sistemas “cerrados”, que pretendían explicar la totalidad de la realidad bajo un único significado (los totalitarismos son un ejemplo). El mismo Aristóteles, había admitido que: «El todo es más que la sencilla suma de las partes». Santo PadreA finales del ‘900, la sistemática se desarrolló a nivel universitario como la ciencia que tiene como fin buscar en las varias disciplinas el sentido unitario de la existencia, aun en sus múltiples dimensiones. De este modo, por ejemplo, el desarrollo científico no puede ser un fin en sí mismo, sino que ha de estar en función de un bien superior. Lo mismo vale para la relación entre las culturas, que ha de caracterizarse por el diálogo y el respeto recíprocos. Por eso –afirma Marjanedas- se debe subrayar la importancia de las relaciones constructivas con los demás en función de un bien total. «Es necesario abrirse y promover un diálogo sincero entre las personas y los grupos culturales diferentes». La actualidad de la Teoría consiste por lo tanto en su posible aplicación en todos los ámbitos. «La idea de sistema ofrece un instrumento para integrar y estructurar coherentemente la comprensión de las distintas disciplinas. La educación, por ejemplo, no puede referirse solamente a los valores científicos, sino también a aquellos éticos y a aquellos artísticos para lograr un desarrollo global de la personalidad, teniendo en cuenta la totalidad de los componentes del mundo educativo y los distintos roles de los estudiantes, profesores, padres de familia, personal administrativo y de la comunidad». «El pensamiento, en su acepción más noble y alta –escribe Jesús Morán en la presentación del libro de Marjanedas – está siempre abierto y en continua evolución, en una constante actualización. Éste capta la realidad y, sin por ello encerrarla en esquemas predeterminados y fijos, permite moverse en ella en una continua sensación de estupor, si bien está dentro del marco de un horizonte. La realidad es algo que nos precede y nos supera». La visión de la realidad como sistema puede ser no sólo un ejercicio intelectual, sino una propuesta de ponerse en juego, una aventura de continua humildad y creatividad. Es realmente un auténtico desafío.                                                                                                                                                                                     Un sacerdote regala el libro al Papa Francesco

Nuestros amigos de Mae Sot

Nuestros amigos de Mae Sot

goc30_01Desde el inicio de mi aventura en el focolar de Tailandia en 1984, el contacto con los pobres ha sido constante. En 1985, hice mi primer viaje al país que entonces se llamaba Birmania (actualmente Myanmar) y me quedé impactado palpando la más extrema miseria. Hasta ese día nunca la había visto personalmente. Luego, con la guerra civil que estalló en 1988, los refugiados empezaron a llegar a  Tailandia, sobre todo a la región fronteriza. ¿Sus condiciones? Enfermedades, soledad, desesperación, explotación y muchas ganas de una vida verdadera. Para nosotros focolarinos, era un rostro de Jesús crucificado y abandonado que intentamos aliviar y amar. En estos 32 años, nuestra ayuda ha sido  seguramente insuficiente, comparada con una verdadera catástrofe humanitaria de la que se habla poco. Ante el dolor, ante los que mueren, jamás estás preparado. Desde hace unos 6 años, nuestro compromiso se ha intensificado en la zona de Mae Sot, al noroeste de Tailandia, en una ciudad fronteriza. Retomamos el proyecto puesto en marcha por Padre Justine, birmano, que falleció luego de una larga enfermedad. Él había empezado a ocuparse de los niños de los migrantes que se quedaban solos en casa todo el día, reuniéndolos en una pequeña “escuela” (una choza). Se había quedado sin soporte económico, así que le dimos lo que nos quedaba de dinero para que pudiera recibir nuevamente a los niños. Hoy en día la escuela se llama “Gota tras Gota, el puente Latina Mae Sot”: una colaboración entre nuestros niños de Mae Sot de origen birmana y Karen y los de una escuela en Latina, Italia, donde trabajan algunos miembros de los Focolares. Es un puente de solidaridad que une las dos ciudades ubicadas a unos 10,000 km de distancia, y que ahora se ha extendido involucrando a algunos centenares de personas de muchos otros lugares. Una multinacional del transporte nos ayuda trayendo con sus contenedores las ayudas recolectadas, pagando todos los gastos aduaneros (1000 euros para cada carga), para así hacerlas llegar hasta Mae Sot, en las montañas de Tailandia. goc6_02Actualmente,  a través de Padre Joachim de Myanmar, ayudamos a unas 200 personas que no viven en los campos oficiales para refugiados, son indocumentados y a menudo no tienen qué comer. Como dice el Papa Francisco, hacemos la experiencia de “tocar la carne di Cristo”, uno de los numerosos rostros de Jesús Abandonado. Además de la comida, se necesita amor, calidez, afecto … Chiara (Lubich) y nuestra espiritualidad nos impulsan a ‘hacernos uno’ con todos. Uno de ellos nos dijo: “Gracias por todo lo que nos hacen llegar, pero sobre todo porque nos hacen sentir amados. Esto nos da esperanzas para vivir”. Tenemos una asociación formada por algunos de nuestros amigos de Poschiavo (Suiza), que fue reconocida por el gobierno, y financia los proyectos en curso en tres países: Tailandia, Laos y Vietnam. ¡Después de 6 años vemos que es realmente un milagro! IMG_7324En Vietnam, los proyectos están situados en la zona sur, hacia el Delta del Río Mekong, centrados en una parroquia. Construimos pequeñas viviendas o las reparamos; pozos para el agua potable para quienes no tienen acceso; y construimos puentes que son realmente útiles para facilitar las comunicaciones entre los islotes. Los así llamados “puentes de los monos”, hechos sólo de una decena de cañas de bambú, se transforman en puentes para las personas, hechos de cemento y hierro. Ahora empezamos a trabajar también en las montañas, en el centro de Vietnam, en la zona de Gia Lai (conocida por los combates durante la guerra) con un grupo de las minorías étnicas. La Iglesia está muy comprometida en esa zona y la pobreza alcanza niveles realmente preocupantes en los países de la montaña, sobre todo para las poblaciones étnicas. En Laos llevamos ayuda a los niños a través de los sacerdotes que vivieron un tiempo en la “escuela sacerdotal” de Tagaytay (Filipinas). La ayuda es respaldada por relaciones de verdadera amistad, mucha fantasía y ganas de trabajar. El amor es como un puente que une a todos con un sueño común: vivir concretamente la fraternidad universal. ¿Nuestros fondos? Donaciones espontáneas, de parte de mucha gente común e incluso pobre. Estamos convencidos de que si Dios quiere este proyecto, Él nos hace llegar lo que necesitamos. Luigi Butori  Website: www.gocciadopogoccia.ch Facebook

Palabra de vida – Agosto 2017

Este salmo es un canto de gloria para celebrar la realeza del Señor, que domina sobre toda la historia: es eterna y majestuosa, pero se expresa en la justicia y en la bondad y se parece más a la cercanía de un padre que al poder de un dominador. Dios es el protagonista de este himno, que revela su ternura sobreabundante como la de una madre: Él es misericordioso, piadoso, lento a la ira, grande en el amor, bueno con todos… La bondad de Dios se ha manifestado hacia el pueblo de Israel, pero se extiende sobre todo lo que ha salido de sus manos creadoras, sobre cada persona y sobre toda la creación. Al final del salmo, el autor invita a todos los vivos a unirse a este canto para multiplicar su anuncio, en un armonioso coro de muchas voces: «Bueno es Yahvé para con todos, tierno con todas sus criaturas». Dios mismo confió la creación a las manos laboriosas del hombre y de la mujer, como libro abierto en el que está escrita su bondad. Y ellos están llamados a colaborar en la obra del Creador y a añadir páginas de justicia y de paz caminando según su designio de amor. Pero, por desgracia, lo que vemos a nuestro alrededor son las muchas heridas infligidas a personas muchas veces indefensas y al entorno natural. Y es debido a la indiferencia de muchos y al egoísmo y la voracidad de quienes explotan las grandes riquezas del entorno solo para sus intereses, en perjuicio del bien común. En los últimos años se ha abierto camino en la comunidad cristiana una nueva consciencia y sensibilidad en favor del respeto a la creación; desde esta perspectiva podemos recordar muchos llamamientos autorizados que nos animan a redescubrir la naturaleza como espejo de la bondad divina y patrimonio de toda la humanidad. Así lo expresa el patriarca Bartolomé I en su Mensaje para la Jornada de la Creación del año pasado: «Se requiere una vigilancia continua, formación y enseñanza, de modo que quede clara la relación de la crisis ecológica actual con las pasiones humanas […] cuyo […] resultado y fruto es la crisis ambiental en que vivimos. Por tanto, el único camino  lo constituye el retorno a la belleza antigua […] de la moderación y de la ascesis, que pueden llevar a gestionar sabiamente el entorno natural. En particular la avidez, con la satisfacción de las necesidades materiales, lleva con certeza a la pobreza espiritual del hombre, la cual comporta la destrucción del entorno natural»1. Y el papa Francisco ha escrito en el documento Laudato si’: «El cuidado de la naturaleza es parte de un estilo de vida que implica capacidad de convivencia y de comunión. Jesús nos recordó que tenemos a Dios como nuestro Padre común y que eso nos hace hermanos. El amor fraterno solo puede ser gratuito […]. Esta misma gratuidad nos lleva a amar y aceptar el viento, el sol o las nubes aunque no se sometan a nuestro control. […] Hace falta volver a sentir que nos necesitamos unos a otros, que tenemos una responsabilidad por los demás y por el mundo, que vale la pena ser buenos y honestos»2. Así pues, aprovechemos algún rato libre de las tareas laborales, o todas las ocasiones que tengamos durante el día, para dirigir la mirada a la profundidad del cielo, la majestad de las cimas y la inmensidad del mar, o si no a una simple brizna de hierba que ha brotado a la orilla del camino. Nos ayudará a reconocer la grandeza del Creador amante de la vida y a encontrar la raíz de nuestra esperanza en su infinita bondad, que todo lo envuelve y acompaña. Elijamos para nosotros y para nuestra familia un estilo de vida sobrio, respetuoso con las exigencias del entorno y proporcionado a las necesidades de los demás, para enriquecernos de amor. Compartamos los bienes de la tierra y del trabajo con los hermanos más pobres y testimoniemos esta plenitud de vida y de alegría haciéndonos portadores de ternura, benevolencia y reconciliación en nuestro entorno. LETIZIA MAGRI ______________________________

  1. Cf. BARTOLOMÉ I, Mensaje para la Jornada de la Creación, 1-9-2016.
  2. Cf. FRANCISCO, carta encíclica Laudato si’, 24-5-2015, nn. 228-229.
Siguiendo las huellas del  Gen Verde

Siguiendo las huellas del Gen Verde

Gen-Verde-PalermoA partir del pasaje de la banda internacional Gen Verde por la ciudad, en la escuela donde Tiziana es profesora,  se vieron efectos positivos en las relaciones entre ella y los alumnos. En especial cuando terminó el curso, sabiendo Tiziana que uno de ellos se manifestaba como no creyente, quiso escribirle. La respuesta del estudiante no se hizo esperar. «Querido Luca, ya terminamos el curso escolar.  Siento el deseo de escribirte algunas líneas pues me faltó la posibilidad de intercambiar opiniones contigo. Así, sin un motivo preciso, sólo porque me gusta mucho el diálogo. Me gustaría también preguntarte el porqué de tu “ateísmo”, como diría Checco Zalone… [un cómico italiano, ndr], pero no hubo tiempo. Estoy convencida de que no existen ateos, sino sólo “personas diversamente creyentes”. Es demasiado fuerte el deseo de infinito que nos invade el alma. Hice un descubrimiento fundamental en mi vida, que me cambió radicalmente:  Dios ama al punto de la locura, a mí y a cada uno de nosotros.  Tal vez yo sea diversamente atea si no hubiese conocido a este Dios. El amor nos interpela a todos, estamos locamente sedientos de amor. Si tú crees como yo en el amor, entonces, ambos somos diversamente creyentes. Si el ateísmo te lleva a no creer en un Dios cruel, justiciero, frío, indiferente, Motor inmóvil, gran aquitecto, Ser supremo, etc, etc, entonces ¡también yo soy atea contigo! Puedo sólo creer en un Dios de carne y hueso, que por amor nació, se hizo hombre, murió y resucitó. ¡Chau Luca, quiero agradecerte por estos años que vivimos juntos!» 2017-07-28«Querida profe me da un grandísimo gusto saber que también fuera del contexto escolar Ud. quiera tener el deseo de escucharme (no es que no lo supiera, sino que ésto fue una confirmación ulterior). También a mi me hubiera gustado discutir con usted los argumentos más disparatados, desde la política hasta la religión. Siempre admiré su disponibilidad y su apertura mental, su capacidad de diálogo, de escucha, de comprensión, de aceptación de las opiniones de los otros, aunque sean totalmente diferentes de las suyas. Siempre consideré su opinión como algo muy importante. Entre las numerosas cosas, me enseñó que cambiar el punto de vista es fundamental para comprender a los demás, pero sobre todo a sí mismo. Este año participé junto con otros compañeros de la escuela en “PULSE”,  el 1º de mayo en la ciudadela de Loppiano. Durante nuestra estadía fuimos alojados en el Instituto Universitario Sophia, en el cual diversos jóvenes provenientes de todo el mundo continúan sus estudios después de graduarse. Fue allí, en lo que a mi se refiere, que encontré en mi propia persona, el significado de la igualdad, hermandad. Y esto fue gracias al magnífico recibimiento de los jóvenes y de los profesores del Instituto, que me trataron como si nos conociéramos de toda la vida. Lo que me impresionó más fue lo que ocurrió la noche del segundo día, cuando cenamos junto con los jóvenes que nos alojaban. Ellos cocinaron juntos apasionadamente, sólo para nosotros, todo lo que tenían en la cocina. En ese momento a pesar de que estuviese a más de 1000 km de distancia de mi ciudad, me sentí en mi casa. Me encontré en la mesa hablando del más y del menos con dos libaneses, con un alemán, con un cubano, un argentino, un colombiano y un boloñés delante de un plato de carne, espinaca, papas y cebollas. Después nos quedamos despiertos hasta tarde conversando sobre nuestras experiencias, nuestros proyectos, tocando la guitarra, cantando canciones y tomando un poco de vino que provenía de la selva negra alemana. En ese momento el objetivo de “PULSE”, por lo menos para mí, fue alcanzado. Gracias profe y… ¡hasta la próxima!    

EdC: “Operación 1-2-5- en la libertad”

EdC: “Operación 1-2-5- en la libertad”

Gennaro e Lucia Piccolo-aFue en abril de 2013. Estábamos paseando mi esposa Lucía y yo, cuando observamos en el suelo una monedita de 5 centavos, pero nos dio vergüenza agacharnos para recogerla. Después de recorrer otro tramo del camino, un señor con gran delicadeza, acercándose a los transeúntes, les mostraba una monedita de 5 centavos, como para indicar que se conformaría con ese monto. No sabemos decirlo bien: nos avergonzamos. Algunos días después, volviendo a pensar en ese episodio, afloró una chispa inspiradora: lanzar en nuestro pequeño mundo una iniciativa: “Operación 1-2-5- en la libertad”, así quisimos llamarla. Consiste en considerar libremente como superfluo 1, 2 ó 5 centavos que recibimos como vuelto cuando hacemos nuestras compras diarias, para invertirlos en gestos de fraternidad en apoyo a situaciones de pobreza cerca de nosotros o en naciones pobres. Una primera pequeña confirmación de que la Operación era fruto de una imborrable exigencia de amar, nos llegó cuando – tímidamente – llevamos las primeras 150 moneditas de un centavo, 36 de 2 centavos y 64 de 5, al dueño de un supermercado quien, intrigado, nos preguntó acerca de su proveniencia; se la explicamos y su respuesta fue que también él quería hacer algo para las necesidades de los pobres. Desde ese día, el señor Antonio empezó a donar siempre algo más de cuantas moneditas le llevábamos. Animados por ese gesto suyo, y por el apoyo de la familia, en el condominio, empezamos a hablar de ello con más amigos, de tal suerte que la iniciativa terminó por involucrar a varias familias de Andria y traspasó sus confines: ¡Lecce, Bari, Bríndisi, Santa María a Vico, Nápoles, Roma, Spinazzola, Trani, Corato, Barletta, Bolzano, Varese, Trento! Pero el amor concreto, el de recolectar moneditas, se demostró incluso “bello”. Vimos que la entrega de los centavos estimulaba la fantasía de muchos al entregarlos en envoltorios que el amor inspiraba: centavos recogidos en una bolsita de tul blanco; sobrecitos elegantes y de flores… Supimos que esta iniciativa empieza a realizarse en algunas escuelas y entre colegas de trabajo. Cuatro años después del nacimiento de la Operación, los centavos recogidos suman 5.225 euros, ya todos han sido donados. Pocos centavos que humanamente se pueden considerar insignificantes, los “sentimos sagrados” porque nos impulsan a amar, nos recuerdan varios textos del Evangelio: el óbolo de la viuda; los cinco panes y los dos peces; las migajas que la mujer cananea le pedía a Jesús como limosna. A nosotros nos parece vislumbrar que, paso tras paso, ésta del 1-2-5- es una iniciativa que, más allá de cualquier monto, puede contribuir al crecimiento de una comunión entre personas, talentos, capacidades… Y a propósito de comunión, nos impactó profundamente – en concomitancia con el inicio de la Operación – encontrar en un viejo cuaderno de apuntes de 1991, un pensamiento de nuestro amigo focolarino y sociólogo, el profesor Tommaso Sorgi quien – hablando de Economía de Comunión – decía: “El concepto de comunión es algo más profundo que el concepto de solidaridad. La hace viva, la ilumina, la pone en movimiento y también hace que sea posible, porque si no hay esta comunión de almas, tampoco la comunión de las economías se realizará jamás”. En conclusión, sentimos una alegría especial: hoy “la Operación 1-2-5- en la libertad– ha sido asumida por el Centro Igino Giordani de Andria – cada vez más tiene como motivación sólo el amor. Ese amor que, como un pequeño rayo de luz pasando a través de un prisma se refracta en los colores del arco iris, así la Operación 1-2-5- lo hace en los colores de la Fraternidad y de la Comunión. Gennaro y Lucía Piccolo (Centro Igino Giordani)        

El Evangelio vivido: aliviar al que sufre

El Evangelio vivido: aliviar al que sufre

ClassroomEn el preescolar «Sonia tiene 5 años. Un día le dice a la mamá: «No quiero ir más al preescolar, no tengo ninguna amiga». Después de algunos días su actitud cambia y va al colegio con gusto. «¿Qué  cambió?», le pregunta la mamá. «Vi que hay una niña siempre en silencio y apartada. Nadie quiere jugar con ella. Entonces yo fui con ella y le dije que la quiero mucho. Ella me sonrió, después comenzó a jugar. Sabes, mamá, el amor calienta a todos». (Sonia – Eslovaquia) El amigo más pobre «Partiendo de Roma, dejé a Nicu, el más pobre de mis amigos, obligado a pedir limosna en espera de un trasplante de riñón. Permanecimos vinculados por teléfono. A menudo me preguntaba cómo hacía para seguir ayudándolo, dado que puedo contar sólo con una “pago” mensual de 20 euros. Recordando el episodio de Zaqueo, que dio la mitad de sus bienes a los pobres, comencé cada mes a poner aparte 10 euros para Nicu. Después de haber juntado 70, a través de un amigo se los hice llegar. Supe que él estuvo feliz más por el hecho de que me había acordado de él, que por la cantidad recibida». (Angiolino – Italia) Carrera de generosidad «Desde hace tiempo la situación económica no marcha bien. En un encuentro de vecinos, después de horas de quejas, propuse comenzar a realizar en nuestro edificio una “comunión de bienes”. Una señora que se quedó sola, ofreció su apartamento para recolectar los alimentos y la ropa y todos contribuimos con lo que pensábamos que era superfluo o dando aún algo que nos servía. Nació una verdadera carrera de generosidad y una oleada de optimismo entró en nuestras casas». (L. D. C. – Argentina) Trabajo y casa «Con mi esposa conocimos a una familia de emigrantes. El marido perdió el trabajo, posteriormente encontró otro, pero era precario y precisaban ayuda en alimentos y dinero. Hace tres meses tuve la ocasión de encontrar un trabajo mejor para él. Tiempo después esta familia me llamó pues la casa de una hermana se había deteriorado por lluvias torrenciales. Fui enseguida a ver cómo llevar un primer auxilio y ver qué precisaban. Los propietarios de la nueva vivienda no les tenían confianza y entonces debían pagar anticipadamente dos meses de alquiler y un mes de depósito. Yo sólo no podía ayudarlos pero con la comunidad del Movimiento en tres días pudimos recolectar el dinero necesario». (Juan Ignacio – España)    

Para que cada niño crezca y no sea descartado

Para que cada niño crezca y no sea descartado

Papa 1Dar a todos, niños y adolescentes, la educación necesaria para rescatar la propia dignidad y construir el propio futuro. Éste es el compromiso que vincula a las numerosas actividades de Scholas Occurentes (escuelas de diálogo) y a la AFNonlus de los Focolares, con actividades e programas dirigidos a chicos de todo el mundo con una metodología basada en valores. Las raíces de Scholas, organización internacional que el pasado 9 de junio inició sus actividades en Italia, con una ceremonia inaugural oficial de su nueva sede en el Palacio San Calixto de Roma, se remontan a veinte años atrás. Jorge Mario Bergoglio era arzobispo de la ciudad de Buenos Aires y había intuido el valor de las así llamadas “escuelas de vecinos”. En el 2013 el Papa Francisco transformó esas escuelas de vecinos en una Fundación Pontificia para promover el modelo a nivel mundial. La red actualmente comprende más de 400 mil escuelas vinculadas entre ellas en los cinco continentes, de todas las confesiones religiosas y también laicas, públicas y privadas, presentes en 190 países. En la ceremonia, conducida por Lorena Bianchetti de Rai1, en la que participamos, el Papa quiso estar presente, y ante numerosas autoridades religiosas e institucionales y representantes del asociacionismo, dialogó espontáneamente en español con jóvenes de varios países del mondo conectados por Internet. “En esta sociedad” a menudo “instruir” es sinónimo de “seleccionar”, subrayó, en cambio es necesario “darse la mano: abrazar, no agredir y reconocer que ninguna persona en un ‘no’, todos con un ‘si’ y tienen un significado. A veces en la educación, “seleccionamos mal, creamos grupos cerrados”. “Somos incapaces ­–dijo el Papa-, de pensar con el otro, incapaces de trabajar con el otro”.  La educación, en cambio es la capacidad de hablar “el lenguaje de la mente, del corazón, de las manos”. Por lo tanto, es necesario “unidad” dentro de cada uno de nosotros” dijo todavía Francisco: “Si creo en aquello que siento, en aquello en lo que pienso, en aquello que amo, entonces me comunico”. “Estamos en un mundo en el cual domina la globalización y la globalización es buena, -explicó el Papa-, pero el peligro es concebir la globalización como bola de billar, toda homogénea: una esfera donde todo es equidistante del centro, pero en la cual se anulan las características personales de los jovenes”. En cambio, “la auténtica globalización es un poliedro”, donde encontramos la unidad, pero cada uno mantiene su propia peculiaridad, su propia riqueza. Afn 1El presidente de Scholas, José María Del Corral, explica por qué este paso “es fundamental en el camino de crecimiento internacional de la fundación”.  Es más, la cercanía del Santo Padre es un estímulo para “intensificar los esfuerzos en el frente de la educación participativa de los jóvenes”. También en Italia, agrega, “Scholas hace un llamado a todas las fuerzas vivas de la sociedad para unir esfuerzos y colaborar constructivamente”. Este es el desafío de Scholas y el desafío de AFNonlus de los Focolares, como compañeros en la iniciativa, con casi un centenar de intervenciones en cincuenta países del mundo y programas educativos a favor de los jóvenes menos favorecidos. “Se trata de un proyecto comprometedor, pero fascinante,  dijo Andrea Turatti, presidente de AFNonlus. La realización de un aula global mediante la web, ayudará a desarrollar estrategias educativas y acciones de promoción humana en el espíritu de subsidiaridad en la perspectiva de la fraternidad universal.” Giovanna Pieroni Fonte: AFNonlus online

El oído de Dios está sobre tu corazón

El oído de Dios está sobre tu corazón

Klaus 1Agustín nos regala una de las más preciosas intuiciones del misterio de la oración: «El oído de Dios está sobre tu corazón» (comentario del Salmo 148). Dejar que el oído de Dios se pose sobre nuestro corazón, abrir nuestro corazón al oído de Dios. De esto se trata, éste es el arte de la oración; un arte, en verdad, para todos; de hecho, no es nuestro, sino del Espíritu que Dios nos da y que ora en nosotros, porque nosotros no sabemos cómo y por qué cosas tenemos que rezar (cf. Rm 8, 26s). […] Orar es elevar el corazón a Dios. Pero ¿somos capaces de ello? ¿Acaso no es demasiado limitado el radio de nuestra percepción, para que nuestro corazón pueda por sí solo elevarse hacia Dios? ¿El impulso de nuestro corazón no es demasiado débil? ¿No están colgados a nuestro corazón unos pesos que, gravando sobre él, lo paralizan y lo arrastran hacia abajo? ¿Qué es lo que nos da el valor de afirmar: Tenemos el corazón dirigido hacia el Señor? Su oído. Él lo inclinó hacia nosotros. El Padre escucha al Hijo. Y Éste descendió entre nosotros, en nuestra carne, en nuestro corazón. En el corazón del Hijo, el Padre oye cada latido de nuestro corazón, en el corazón del Hijo encuentra nuestro corazón. En Él, en el cual hemos sido creados, amados, sostenidos, acogidos, Él nos escucha. Elevar nuestro corazón significa dejarlo ahí donde está, y descubrir que, ahí donde está, cerca nuestro, está el corazón de Dios en el corazón de su Hijo. Abandónate en Él y te sostendrá. En Él, el oído de Dios está sobre tu corazón; en Él, tu corazón está atento al oído de Dios. […] Lo contrario también es válido: Dios tiene su corazón cerca de tu oído. Él te ha revelado, transmitido, donado no algo de Sí mismo, sino Sí mismo. Si crees en Él, si te adhieres a Él, si lo escuchas, entonces no escuchas una noticia, una directriz, un mandato: tú oyes su corazón. Permanece a su lado hasta que descubras este corazón suyo. Él necesita de tu paciente escucha para abrirte su corazón; de hecho, sólo la paciencia comprende el amor y aprende el amor. A quien lo ama, a éste Él se le revelará y hará morada en él (cf. Jn 14, 21-23). […] Dios tiene su corazón atento a tu oído, para que, a través de tu oído, su corazón penetre en tu corazón, llegue a ser tu corazón. El oído de Dios sobre tu corazón – el corazón de Dios atento a tu oído: alternancia de la oración. Sólo el que ora conoce a Dios. Sólo el que ora conoce al ser humano.   De Klaus Hemmerle, “Con l’anima in ascolto, Guida alla preghiera”, Città Nuova Ed., Roma 1989, pagg. 9-11.

Del infierno a artistas de la esperanza

Del infierno a artistas de la esperanza

Gen Rosso 2Cada vida tiene esperanza”: estas palabras encierran el leitmotiv que llevan adelante las Fazenda da Esperança en todo el mundo. “Hemos visto y vivido el infierno; en estos días fuimos transformados en artistas”. Esta es una de las expresiones recogidas durante el intercambio de experiencias después de cinco días de trabajo que concluyeron con dos representaciones de Campus – The musical. 110 jóvenes de la Fazenda da Esperança y de Puglia (región del sur de Italia), se prepararon en talleres de danza, canto, teatro y percusión, para después aparecer como actores junto con el Gen Rosso en el palco del Teatro Kennedy de la ciudad de Fasano en algunas escenas del Musical Campus, durante los días 7 y 8 de julio. “Gen Rosso 1Era necesario aprender bien y rápido a pesar del calor y de los propios límites”. Fue fundamental compartir el lema “Recibir al diferente”. Había en efecto, personas procedentes de 15 países y diferentes por su cultura, edad, experiencias de vida… La adrenalina subió a mil, cuando se encontraron lanzados en el palco ofreciendo lo mejor de sí mismos, mientras que los miedos y las preocupaciones desaparecían alentándose recíprocamente. Algunos decían: “Sentíamos una fuerza superior que nos sostenía y que nos daba confianza en nosotros mismos”. “Aprendí fue que no me debía detener durante la exhibición por culpa de un error: esto me hizo reflexionar mucho. Llevo este ejemplo en mi vida yendo adelante siempre, a pesar de mis fracasos” Gen Rosso 3 El domingo 9 de julio en Monópoli se realizó la inauguración de una nueva Fazenda da Esperança. Estaban presentes algunos jóvenes conocidos en la cárcel y que ahora están comprometidos en primera persona a ayudar a otros jóvenes como ellos. “Para nosotros del Gen Rosso – explica Franco-, colaborar con la Fazenda, como lo hacemos desde hace varios años, representa siempre un fuerte enriquecimiento y nos da un impulso decisivo para captar en cualquier lugar del mundo señales fuertes de esperanza”. La fiesta concluyó cantando “Yo estaba allí”, la canción que el Gen Rosso compuso como homenaje a la Fazenda da Esperança. Gustavo Clariá

México: 20° del doctorado h.c. a Chiara Lubich

México: 20° del doctorado h.c. a Chiara Lubich

1944. Chiara Lubich deja sus amadísimos libros en la buhardilla para entrar en la escuela del único Maestro, Jesús, abandonado el sueño de estudiar Filosofía en la Universidad Católica, donde pensaba que había podido conocer a Dios. 53 años después, una Universidad Católica de Ciudad de México le otorga el Doctorado hc en Filosofía. Chiara Doctorado A 20 años de distancia, la comunidad de los Focolares en México organizó un triple evento, como memoria y actualización de su mensaje: Filosofía del ser, Iglesia comunión e inculturación. 29 de junio de 2017: “El rostro de Dios Comunión es el título del simposio que tuvo lugar en la Universidad Pontificia de México. El Dr. Piero Coda, rector del Instituto Universitario Sophia (IUS) desarrolla dos conferencias: “Papa Francisco: 4 puntos para una Iglesia en salida” y “Chiara Lubich: una mística del nosotros para vivir el cambio”. Dos reflexiones que suscitan en los presentes, en su mayoría sacerdotes, religiosos y religiosas, la urgencia de una ‘conversión pastoral’ que haga visible el rostro de una Iglesia misericordiosa, sinodal, pobre y abierta. Universidad Pondificia 1«Surgió – afirma Mons. Coda – la necesidad de mantener un diálogo abierto con las fuerzas vivas de la Iglesia mexicana, para asumir con fuerza el desafío de la conversión pastoral lanzada por el Papa Francisco. Promoviendo el compromiso de los laicos a nivel cultural y social, el acompañamiento a los jóvenes y el camino sinodal de la Iglesia donde los Carismas puedan ofrecer su aporte”. 30 de junio. En una acogedora sala de la Universidad de La Salle, en Ciudad de México, el Dr. Enrique Alejandro González Álvarez, rector del ateneo, explica la importancia del doctorado hc conferido en 1997 a Chiara Lubich: “No fue una distinción que la Universidad le hizo a ella, sino una distinción que ella le hizo a la Universidad al aceptar el Doctorado que la Universidad le estaba proponiendo”. Subrayó además la profunda sintonía entre el Carisma de la Unidad y el carisma lasallista: “La Universidad se siente muy identificada con el Movimiento de los Focolares, porque de manera conjunta estamos luchando por implantar el Reino de Dios en la tierra, y esta fue sin duda la misión principal que tuvo Chiara (…) Ojalá que sigamos estrechando lazos y que consideren a la Universidad como su casa, no sólo para Chiara Lubich, sino para todos los que llevan el espíritu de ella en esta vida. Porque hoy Chiara debe de seguir viva en cada uno de sus seguidores”. En dicha ocasión el Dr. Piero Coda desarrolló una conferencia titulada “El aporte de Chiara Lubich a una nueva filosofía del ser”. “El discurso de Chiara de hace 20 años –dijo Coda- se reveló profético para México, porque se percibe a nivel sociocultural una nueva exigencia de sentido, de luz y la necesidad de un nuevo paradigma cultural. Por lo tanto su discurso resultó orientador y vinculado con el compromiso del Instituto Universitario Sophia”. De hecho entre el Instituto Universitario Sophia, la Universidad Pontificia de México y la Universidad La Salle se han abierto en estos días nuevas perspectivas de colaboración. Festa2 de Julio. Las comunidades de los Focolares del país celebran con una gran fiesta el aniversario. Presentes el Nuncio Apostólico, Mons. Franco Coppola y el Rector de la Universidad Pontificia de México, el Dr. Mario Ángel Flores Ramos. Música, danzas, videos y el testimonio de que estaba presente ese día memorable son el marco más apropiado para redescubrir el alcance del mensaje de Chiara Lubich. “En la Basílica de Guadalupe –dijo María Voce, en su mensaje a la Comunidad Mexicana  delante de la ‘Morenita’, Chiara puso en evidencia los maravillosos símbolos con los que María se revistó, presentándose como un ejemplo extraordinario de inculturación”. La consigna de Chiara, eco trasparente del ‘mensaje guadalupano’ resonó una fuerza extraordinaria. “En estas palabras –dijo uno de los presentes- muchos de nosotros mexicanos, descubrimos el valor de nuestro origen, nuestra dignidad de hijos de Dios y sobre todo, la altísima vocación a la cual nuestra madre María de Guadalupe nos invitó hace quinientos años, pero también hoy”.Confiémonos a Ella, ícono de la cultura del encuentro’, –concluyó la presidente de los Focolares-, para vivir plenamente el hacerse uno y llevar a cada ambiente la espiritualidad de comunión”.    

Familias Nuevas cumple 50 años

Familias Nuevas cumple 50 años

Chiara Lubich con A e D Zanzucchi e G FumagalliDurante la primera Escuela de focolarinos casados, Chiara Lubich, parafraseando una expresión que el día antes, en la audiencia general, Pablo VI había dirigido a los jóvenes de los Focolares, anunció que en esa fecha (19 de julio de 1967) nacía en el seno de los Focolares “un Movimiento explosivo, apostólico y difusivo” orientado al mundo de la familia. Cincuenta años después se puede muy bien decir que las Familias Nuevas ciertamente concretaron esas palabras con su vida. En estos años, miles de parejas de casados, novios y todos los que están relacionados con el mundo de la familia, viviendo el Carisma de la Unidad han experimentado que el vínculo entre ellos se vigorizaba gracias al amor que brota del Evangelio, transformándolo en testimonio del amor de Dios por la humanidad. Chiara_Famiglie002 Argentina 1998 Un amor que ha generado, como consecuencia, la difusión del Movimiento en la mayor parte de los países del mundo, llegando inclusive hasta las islas Fiji (Océano Pacífico). Familias Nuevas está comprometida en dar una respuesta a las necesidades de la familia de hoy, en línea con la exhortación “Amoris Laetitia”. No son palabras, es el fruto de la vida de una multitud de familias que en su testimonio cotidiano de unidad y en la realización de un centenar de proyectos de cooperación internacional mediante el apoyo a distancia a la infancia menos favorecida, contribuyendo así a la renovación de la sociedad y a la realización del testamento de Jesús: “Que todos sean una sola cosa”.

Evangelio vivido: “Les daré descanso”

Evangelio vivido: “Les daré descanso”

PdV 1El alcalde «Yo no estaba de acuerdo, pero mi marido aceptó postularse como candidato a alcalde, seguramente no por ambición, sino por el mero deseo de servir a la comunidad. Mi oposición se debía al temor de que, siendo el nuestro un pueblo muy difícil, semejante compromiso podía traer consecuencias negativas a la familia. No sirvieron de nada las amenazas y las peleas. Cuando, un sábado a la mañana, me enteré por el periódico de que él había firmado su candidatura, empecé a estar realmente mal. Al día siguiente, en la misa, el Evangelio hablaba de la higuera estéril. En ese momento me sentí como esa higuera, incapaz de fructificar. No sólo yo, sino que con mi actitud le impedía incluso a mi esposo que diera fruto para la comunidad. Entendí que Jesús me pedía que le donara también a mi familia, a pesar de los temores. Volviendo a casa, les comuniqué a mi esposo y a nuestras hijas la experiencia que había vivido y todos de acuerdo decidimos apoyarlo. Desde ese momento lo acompañé a todos los eventos públicos y las asambleas, y, ahora que es alcalde, lo sigo haciendo en todas sus visitas institucionales». (F.D. – Italia) Tensiones en la familia «Mi esposo y yo habíamos llegado a casa tan cansados y tensos que, perdimos el control y discutimos en forma violenta, hasta el punto de que parecía que nuestro matrimonio se hubiese acabado. Hice todo lo que pude para “recomponer” la situación, pero él seguía muy enojado por mi manera de actuar. Al día siguiente, tenía que ir a ayudar a una familia muy pobre. Pero ¿no era ésta una escapatoria, si antes no restablecía la concordia y la paz con mi esposo? Aunque me volvían continuamente a la cabeza todas mis buenas razones, traté de superarme. Entre otras cosas, ese mismo día él tenía programado un encuentro importante. Yendo más allá del temor por su reacción, lo llamé y le pedí perdón. Todo quedó borrado, experimenté la libertad de sentirme amada y esto le dio sentido incluso a mi trabajo en favor de los demás». (F. – Panamá) Pedazos de vidrio «Desde la ventana de mi oficina, puedo ver la calle. Un día veo que pasa Miguel, un indigente que, cuando está borracho, pelea con todo el mundo. Se detiene, recoge los fragmentos de una botella y los deposita en un basurero. Luego se aleja. Yo también los había notado, pero no me había detenido a recogerlos por la prisa. ¡Qué lección! Y además precisamente por parte de uno que es clasificado como marginado. Me imaginé a Miguel en el examen final del Evangelio, cuando Jesús le dirá: “Entra en mi reino: recogiste unos vidrios que podrían herir a un hermano mío. ¡A mí me lo hiciste!”». (P. O. – Italia) Medias sucias «En el vestidor de la piscina, un señora anciana, un poco descuidada, estaba sentada en un banco y a su lado había un par de medias más bien sucias. Todas las demás, incluida yo, nos quedamos bastante lejos. No lograba ponerse la camiseta por la espalda todavía húmeda, así que me acerqué para ayudarla. Agradecida, me preguntó si podía también ponerle las medias. Ay Dios mío, ¡precisamente aquéllas! Y en seguida un pensamiento: «Jesús, eres tú que quieres encontrarme en ella». Me arrodillé y le puse las medias y luego los zapatos. Todavía hoy tengo el recuerdo de la alegría que experimenté». (Rosemarie – Suiza)  

El hoy de Venezuela

El hoy de Venezuela

Venezuela 5Supe por la TV… Estaba mirando el informativo, interrumpido continuamente por noticias de “interés público”. La última por ejemplo decía: “Se busca urgentemente el medicamento…” ¡Dios mío! Escribí rápidamente el número de teléfono y llamé. Me respondieron que quien necesitaba ese medicamento era una anciana y que de verdad era urgente, vivían en mi misma ciudad. Me puse en contacto inmediatamente con la hija de la señora, pero en ese momento la situación en las calles del centro no me permitió salir. Nos pusimos de acuerdo para encontrarnos el día siguiente, de mañana temprano, frente a un centro social de salud. Cuando efectivamente nos encontramos, la señora me preguntó: “¿Cuánto cuesta el medicamento? Lo pedí a los Estados Unidos pero no me lo pudieron enviar”. “Nada, señora”, le respondí. “Rezamos juntas para que la paz llegue pronto a Venezuela”. No nos conocíamos, pero nos dejamos con un abrazo. Hay más alegría en dar que en recibir Me llamó por teléfono una amiga: “¿Por casualidad tienes esta medicina? No logro encontrarla por ningún lado…”. Se trataba justamente de un producto que una persona había donado a mi parroquia. En ese momento había pensado: “Pero, ¿le servirá a alguien? Es un medicamento un poco específico…”. Y sin embargo era justamente eso lo que requería mi amiga, con indicaciones muy precisas y, además, ¡en una presentación de 50 comprimidos! Dios sabe lo que cada uno necesita. Estábamos viviendo una alegría compartida, pero tal vez, mi alegría era mayor. Crear puentes con personas de otras Iglesias. Me llegó un sms: “Estaría necesitando este medicamento, ¿por casualidad lo tienes?”. Sí, lo tenía, y así que le pedí a Armando (mi esposo) que se lo llevara, ya que la persona que me lo había pedido es evangélica como él. Pensé también que le podía proponer: “Si por acaso tienes alguna medicina que no estás utilizando, ¿puedes donarla?”. Ella me manda una que es difícil de encontrar en las farmacias, junto con un nebulizador. El mío se lo había dado a otra persona que no lograba expectorar a causa de la fuerte tos. Para mí fue vivir la frase del Evangelio: “Den y se les dará”. Además, el que me llegó es de mejor calidad y con menos efectos secundarios del que tenía yo. Es sorprendente: cuando se da, el amor se transforma en fraternidad. Venezuela 2Domingo, día de descanso… ¡Es domingo! ¡Al fin, descanso! Tenía programado ver una película muy interesante, cuando de forma imprevista tocan el timbre. Comienzo a temer que mi descanso peligra. Mi hijo, viendo mi reacción, me pregunta si quiero que diga a quien tocó el timbre que pase en otro momento. Casi, casi, le digo que sí… pero no… abro yo. Frente a mí me encuentro con una conocida que me pregunta si estoy ocupada. La expresión de su rostro indica que el tema es urgente. La hago pasar. “Tengo que verdad hablar con Ud…”. “De acuerdo, adelante. Está también mi marido: ¿le parece bien si hablamos también con él?”. Estamos tres horas escuchándola. Nos dice que quiere divorciarse, pero antes de comunicarlo a su marido y comenzar con los trámites pensó en hablar con nosotros. No es fácil escuchar su desahogo, lleno de dolor, incomprensiones, rabia… Al final, se le aclaran muchas dudas. Concluimos con una oración y con su decisión de ponerse a amar en primer lugar. Así que vuelve a su casa con una nueva fuerza, dispuesta a luchar para salvar su matrimonio. Fue un domingo vivido como “el día del Señor”, en el que hicimos lo que creemos habría hecho Jesús: amar sin juzgar.

Giordani: era el verano de 1949

Giordani: era el verano de 1949

con-Chiara-5a«En medio de juegos, a la sombra de las coníferas, bajo las rocas, Chiara a los suyos les hablaba siempre de Dios, de la Virgen, de la vida sobrenatural: la sobre-naturaleza era su naturaleza. Convivía siempre con el Señor: efecto de la caridad, que la edificaba completamente, molécula por molécula. Y entonces, cuando iban a los campos, esas selvas alpinas se transfiguraban en catedrales. Esas cimas parecían cumbres de ciudades santas, flores y prados se coloreaban de la presencia de ángeles y santos: todo se animaba en Dios. Se derrumbaban las barreras de la materia. Ésta también era una forma de aquella reconciliación de lo sagrado y lo profano, por la cual, eliminado lo feo, el mal, lo deforme, se recuperaban de todas partes los valores de la belleza y de la vida de la naturaleza, en todos sus aspectos. Los discursos y las obras de ella, resultaban ser frecuentemente un desalojo de escombros mortuorios para restablecer la comunicación, de por sí tan sencilla, de la naturaleza con la sobre-naturaleza, de la materia con el espíritu, de la tierra con el cielo. Una duplicación de los valores de la existencia en la tierra; la apertura de un pasaje hacia el paraíso. Era el verano de 1949. Ese descanso había sido posible gracias a una casita en Tonadico de Primiero, que Lia [Brunet] había recibido en herencia. En el mes de julio subieron allá Chiara [Lubich], Foco [Igino Giordani] y las focolarinas, para pasar unos días de vacaciones, estar un poco solas y descansar físicamente, después de los trabajos, realizados durante el año, para los pobres y para sí. La casita estaba compuesta por un granero superior, al que se accedía por una escalera de mano desde la planta baja, compuesta por una habitación con una pequeña cocina. Arriba se ubicaron algunos catres y un armario que se subió con una polea, y se transformó así en su dormitorio. Foco se hospedó en el Hotel Orsinger y tuvo ocasión de hablar en la sala de los Capuchinos. En esta iglesia, Foco expresó el deseo de vincularse estrechamente con un voto de obediencia que a Chiara, sin embargo, no le pareció conforme a los usos del focolar. Le propuso más bien un pacto de unidad, en el sentido que a la siguiente Comunión eucarística, sobre la nada de las almas, Jesús en ella pactaría con Jesús en él. Por la mañana, en la misa, al comulgar, los dos dejaron que Jesús pactara con Jesús. Fue, para ella, el inicio de una serie de iluminaciones».   Igino Giordani, Historia del Movimiento de los Focolares, texto inédito.  

Venezuela: mensaje urgente

El 12 de julio los obispos venezolanos se dirigen en un “mensaje urgente a los católicos y personas de buena voluntad”. Piden al Gobieron “que retire su propuesta de una Asamblea Constituyente, posibilite la realización de las elecciones establecidas en la Constitución” y que “reconozca la autonomía de los Poderes públicos; abandone la represión inhumana de las manifestaciones de quienes disientan, se desmantelen y sancionen los grupos armados” y libere “todos los privados de libertad por razones políticas”. Además de “avocarse a solucionar los gravísimos problemas de la gente y de permitir la apertura de un canal de carácter humanitario para que puedan llegar medicinas y alimentos a los más necesitados”. A la Fuerza Armada Nacional, piden que “cumpla su deber de estar al servicio de todo el pueblo en el respeto y garantía del orden constitucional”. A la dirigencia política exigen que “esté siempre comprometida sólo con el pueblo y nunca en la búsqueda de propios intereses”, respetando “la voluntad democrática de todo el pueblo venezolano”. A las Instituiciones Educativas y Culturales solicitan que colaboren a “derribar todo muro de división existente en nuestro país”, alentando “todos los esfuerzos que se puedan realizar a favor de la paz y la convivencia, basados en la ley del amor fraterno”. El mensaje se concluye con una invitación dirigida a “nuestros hermanos en la fe y a otros creyentes a una Jornada de Oración y Ayuno el próximo 21 de julio, a fin de pedir a Dios que bendiga los esfuerzos de los venezolanos por la libertad, la justicia y la paz”. Lea el Mensaje

Filipinas: Genfest 2018

Filipinas: Genfest 2018

Logo GenfestUn proyecto que ya es una experiencia de vida y de acción social, una invitación a construir puentes de fraternidad y contribuir a hacer caer las barreras de la indiferencia, los prejuicios, del egoísmo. Nacido en 1973 a partir de una idea de Chiara Lubich, fundadora del Movimiento de los Focolares, el Genfest es un encuentro de jóvenes provenientes de todas las latitudes. La de Manila será la 11ª edición. El Genfest se consolidó en el tiempo como un gran festival de ideas, pensamientos e iniciativas que han inspirado a miles de jóvenes, de culturas, etnias y religiones, distintas a cambiar y orientar sus vidas hacia los ideales de la fraternidad y del mundo unido. El programa central se desarrollará en el World Trade Center Metro Manila, mientras que todos los talleres tendrán lugar en la “Universidad de La Salle”. BEYOND ALL BORDERS (Más allá de cualquier frontera), es el título de la próxima edición, que quiere subrayar los límites por superar, a nivel personal y social, para construir un mundo más unido y feliz, para respirar, amar, trabajar y vivir con una mirada abierta e inclusiva. Serán distintas las manifestaciones artísticas y musicales, los foros, los momentos de exposición previstos. El logo del Genfest 2018 se puede resumir en una palabra: esencialidad. “Less is more”, menos es mejor. En un mundo en donde la comunicación y la información son sobreabundantes y excesivas, el mensaje de Manila estará orientado a la simplicidad, a la potencia que cada palabra puede ofrecer al mundo. Por este motivo el logo del Genfest está hecho sólo con letras y una sencilla línea bajo el título. Un signo esencial que recuerda el ir más allá, del otro lado de los confines, para subrayar que lo único cuenta en la vida es ir hacia todos para llegar juntos a realizar la fraternidad universal. Contáctanos: info@y4uw.org Las inscripciones estarán abiertas a partir de octubre de 2017   Fuente: Y4UW International http://y4uw.org/it/    

Todo es distinto, pero nada cambió

Todo es distinto, pero nada cambió

ElisaNuinElisa vive en el Focolar de Welwyn Garden City, 35 Km al norte de Londres, en el condado de Herfordshire. Una “ciudad-jardín”, fundada en los años Veinte, con hermosos edificios de estilo neo-georgiano, rosas rodeando las entradas, calles arboladas. Nos cuenta: «Nací en el norte de Italia, en un pequeño pueblo de la provincia de Novara. Tengo dos hermanos más chicos. Mi familia nos transmitió los valores cristianos, como por ejemplo “pensar en los demás”. A los veinte años, habiendo terminado los estudios de francés e inglés, estaba buscando un trabajo. Pero en una pequeña ciudad era difícil encontrarlo, estaba muy desalentada. Una amiga mía me invitó a un encuentro en el que se estaba organizando un viaje a Roma, para asistir al Genfest, una gran manifestación de los jóvenes del Movimiento de los Focolares  que se iba a realizar en el estadio Flaminio. Estábamos en mayo del ‘80.  Fui, pero solamente para pasar un fin de semana distinto. En cambio me quedé sorprendida y conmovida de la escena que vi: los posters que hablaban de un mundo unido, el entusiasmo de decenas de miles de jóvenes.  Tuve la clara sensación de haber encontrado algo precioso. Volviendo, seguí vinculada con estas personas. Había algo que me atraía en ellos. Comencé a frecuentar el focolar, mientras que dentro se me aclaraba lo que quería hacer en la vida. Hasta que comprendí: donarme a Dios y a los hermanos, precisamente a través del Focolar. Encontré un buen trabajo en Caritas, la acción social de la Diócesis. Un trabajo interesante y de responsabilidad. Después de tres años, tuve que trasladarme a Boloña, pero el sacerdote responsable de Caritas trataba con insistencia de convencerme para que no me fuera. Ese día el Evangelio hablaba justamente que “aquellos que no dejan madre, padre y campos… no pueden… ser mis discípulos”. Pensé que Jesús dirigía esas palabras a mí. Me fui sin dudar. Desde 1985 a 1987 estuve en la escuela de formación de la ciudadela de Loppiano (cerca de Florencia, Italia). Y después… ¡África!. Mi primera impresión fue la de encontrarme dentro de una película, todo era nuevo y distinto. El día después de mi llegada, en una capilla, delante del tabernáculo, Le dije: “Tu eres el mismo Jesús, di mi vida por Ti y ahora te encuentro también aquí”. Pasé el primer mes en Fontem, en Camerún. Después me fui a Nigeria, donde me quedé veinte años. En 1989, en Lagos, comenzamos un proyecto para un grupo de chicas. Para alojarlas, una religiosa nos ofreció dos habitaciones dentro de su misión, después una familia nos dio una casa gratis durante cinco años. Finalmente encontramos un terreno y muchas personas nos ayudaron a construir el primer focolar de Nigeria. Todo sucedía gracias a la inesperada ayuda de Dios a través de la gente. Encaminamos una pequeña empresa de producción de trabajos en batik, una técnica tradicional de pintura en cera aplicada a la tela. El proyecto ayudó a una innumerable cantidad de chicas a lo largo de los años. En el 2002, en Jos, en Nigeria septentrional, casi un millar de personas perdieron la vida en un combate entre musulmanes y cristianos. Hasta ese momento los dos grupos habían vivido siempre en paz. Justamente en Jos quisimos hacer una Mariápolis, porque era necesario experimentar el diálogo, la paz, la reconciliación, especialmente en un lugar que tenía heridas profundas, no solamente físicas. Las personas habían perdido sus empresas, los lugares de culto habían sido destruidos. Una señora, que anteriormente había incitado a los jóvenes de su pueblo a combatir contra los rebeldes, al final de la Mariápolis formó un grupo que viajó durante un mes, como gesto de reconciliación, de pueblo en pueblo, como lo deseaba el obispo de la localidad. Posteriormente durante seis años estuve en Douala, en Camerún. Después, desde el 2013, estoy en Welwyn Garden City (Gran Bretaña) donde, el primer año, nevó ¡desde febrero hasta abril! Afuera todo era distinto, pero nada había cambiado. Donde Dios te quiere, ¡ésa es tu casa!».   Fuente: New City Magazine (Londres)

Constantinopla 1967 – 2017: una herencia de oro

Constantinopla 1967 – 2017: una herencia de oro

Mariapoli IstambulSí, verdaderamente de oro. De hecho, han pasado 50 años desde ese primer discreto encuentro, que produciría una inimaginable apertura entre el Patriarcado Ecuménico de la Iglesia Ortodoxa y el Movimiento de los Focolares. Hace pocas semanas, así se expresaba el Metropolita Gennadios Zervos: “Todavía hoy ese momento no ha sido apreciado adecuadamente en todo su alcance” (cfr Ese diálogo querido por Dios). Algo de la fuerza vital de esa semilla lo logramos intuir si pensamos en el primer Doctorado honoris causa en “cultura de la unidad” con el que fue distinguido el Patriarca Bartolomé por parte del Instituto Universitario Sophia (Loppiano, Italia) en octubre. Allí nació el proyecto, hoy realidad, de enriquecer la oferta formativa del Instituto, con una Cátedra permanente sobre el diálogo entre la Iglesia ortodoxa y la Iglesia católica, dedicada al Patriarca Atenágoras y a Chiara Lubich. El 13 de junio, día del aniversario, algunos de nosotros nos reunimos espontáneamente en el Fanar, la sede patriarcal. Ante el bellísimo ícono de María concluimos con el Magníficat nuestra oración de acción de gracias: “Grandes cosas ha hecho el Omnipotente, Santo es Su Nombre”. Pero el oro obligaba hacer una celebración que tuvo lugar aquí en Estambul, en el marco de la Mariápolis local. Así como el año pasado el Papa Francisco visitó una Mariápolis, la de Roma, este año los participantes de la Mariápolis de Estambul, recibieron la sorpresa, la alegría, el honor de hospedar al Patriarca Bartolomé. La Escuela Teológica de la isla de Halki, con su espléndido parque, fue el marco de una jornada inolvidable. Instanbul 2El domingo 25 de junio, los 65 ‘mariapolitas’ de distintas confesiones, nacionalidades, lenguas subieron a la sala de las audiencias donde el Patriarca Bartolomé hizo su discurso: «Ahora hablemos de una historia que tiene 50 años, de un vínculo espiritual muy fuerte entre el Patriarcado Greco y el Movimiento de los Focolares. Y ya podemos hablar de una tradición porque nuestro predecesor Patriarca Demetrio continuó la relación con Chiara y el Movimiento. Y nosotros hemos seguido y llevado adelante durante 26 años esta tradición. Estamos muy felices y es una gran alegría para nosotros que la mayor parte de los años de esta tradición haya transcurrido con nosotros». No son nuevas las manifestaciones de afecto y estima del Patriarca, pero siempre logra sorprendernos. La expresión de su alegría no es una formalidad… ¡dice estar orgulloso de su parte de 26 años de los 50! y agrega espontáneamente: «Pero ya antes de ser Patriarca, en el trabajo junto a mis predecesores he servido con amor esta relación». Y continuó: «Veo que el buen Dios les ha bendecido porque su número y su servicio han crecido, porque con el testamento de Chiara que han acogido, dan un servicio a la humanidad con el mismo corazón puro, con la misma fe, con el mismo amor, con la misma laboriosidad. […] Como la bendición del Papa Francisco, así nuestra bendición y nuestra oración es siempre por ustedes, para que siembren semillas de paz y de amor en el corazón de las personas. Que Dios conduzca siempre sus pasos hacia las buenas obras». Foto Nikos ManghinaDespués del discurso tuvo lugar la entrega de dones, entre los cuales una foto enmarcada de Atenágoras y Chiara durante uno de sus encuentros. Y después una canción “Ama y comprenderás”, en distintas lenguas (también en griego), que sabemos que era muy amada por el Patriarca Atenágoras y que expresa la esencia de la Mariápolis: la luz que proviene del amor hecho vida. En el comedor contiguo el Patriarca ofreció a todos un exquisito almuerzo y la mañana se concluyó con fotos oficiales, selfie y momentos de diálogo donde Bartolomé se entretuvo con uno y otro. En fin es de oro la herencia que nos dejan el Patriarca Atenágoras y Chiara, protagonistas e iniciadores del “diálogo de la Caridad”, “grandes artífices del diálogo del pueblo (…) iniciadores de una nueva Era ecuménica; han enseñado a los pueblos, han dado aliento,  fuerza, paciencia, fidelidad, disponibilidad, amor y unidad”. (Metropolita Gennadios Zervos).  

Día Mundial de la Población

Como resultado del interés generado por el “Día de los cinco mil millones”, que se celebró el 11 de julio de 1987, la Asamblea General de las Naciones Unidas, decidió continuar con la iniciativa para aumentar la concienciación sobre las cuestiones relacionadas con este ámbito, incluidas sus vinculaciones con el medio ambiente y el desarrollo. El Día Mundial de la Población se celebró por primera vez el 11 de julio de 1990 en más de 90 países.

Líbano: más fuerte que la guerra

Líbano: más fuerte que la guerra

Lebanon«Mi país, Líbano, durante muchos años vivió bajo el control de Siria. Por esta razón entre los dos países se desarrolló una fuerte tensión, empeorada por la llegada de un gran número de refugiados sirios, casi dos millones de personas más que se sumaron a los cuatro millones y medio de habitantes, es decir casi la mitad de la población. Al comienzo de la guerra en Siria, algunas familias de la comunidad de los Focolares de Alepo se radicaron en Líbano para alejarse durante algún período de la guerra. A continuación, habiendo empeorado la situación en su país, no pudieron más volver a su patria y fueron recibidas en un centro del Movimiento. En el clima de hostilidad general que los rodeaba, ayudarlos era una decisión en contra de la corriente, que exigía que hiciéramos el esfuerzo de cancelar todos los prejuicios que el pueblo libanés tenía hacia los sirios. Queríamos testimoniar la paz y el amor entre nosotros. Comenzamos a visitarlos, construyendo con ellos un fuerte vínculo. Padres, jóvenes y niños, todos nos comprometimos en esto, para que estas familias no se sintieran solas en un momento tan difícil. Pasábamos juntos cada día, organizando veladas con ellos, tratando de aliviar sus angustias, de comprenderlos y escucharlos. No podíamos resolver los problemas de los Estados, pero podíamos por lo menos construir un oasis de paz a nuestro alrededor. No teníamos nada, ellos llegaron sin traer objetos ni ropa. Hicimos entre nosotros la comunión de bienes, juntando sobre todo ropa, que les ofrecimos con delicadeza, no era fácil para ellos aceptar ayuda material. Las condiciones de vida para ellos eran duras. Estaban sin trabajo, en tierra enemiga, a menudo a la espera de noticias de sus parientes o amigos. Nosotros los jóvenes íbamos con ellos a la playa, para tratar de calmar la atmósfera de tensión. Lo hacíamos a menudo. Comenzamos a conocernos, a transcurrir mucho tiempo juntos, también leyendo con ellos la palabra de vida, para compartir nuestras vidas y experiencias. Comenzamos a sentirnos integrantes de una única familia. Un año más tarde, estas familias tuvieron que comenzar a buscar una vivienda. Estaban angustiadas y con grandes dificultades financieras. Pero creímos juntos en la providencia de Dios. Buscando casa y trabajo junto con ellos, éramos conscientes de las dificultades que íbamos a encontrar. Entrábamos en las casas para buscar alojamiento “para nuestros amigos sirios” y recibíamos en cambio reacciones muy duras. Por ejemplo, los propietarios de los apartamentos nos proponían alquileres excesivamente caros, para no recibirlos. Antes de dejar el centro, el último día, sólo una familia no había encontrado ni casa, ni muebles. Una de nosotros nos recordó que teníamos que tener confianza en la intervención de Dios. Con gran alegría por parte nuestra, al día siguiente encontramos gratis una casa y otra persona que debía mudarse les regaló todos sus muebles. También encontramos escuelas cuasi gratuitas para sus hijos. Con un grupo de docentes comenzamos una escuela de francés, que les permitió a los niños de las familias sirias comenzar a asistir a la escuela. Ahora todas estas familias dejaron Líbano y se mudaron a Canadá, Bélgica, Holanda. Nos escribieron para decirnos que en Líbano se sintieron apoyados, en su casa. Una familia dijo: «Sin el apoyo de las familias libanesas no hubiéramos nunca podido recomenzar todo desde cero tan fácilmente». Cuando se fueron, dejaron todo lo que tenían para las familias que habrían llegado después. Ahora disponemos de tres alojamientos que usamos para ayudar a las familias sirias e iraquíes que están de paso por Líbano para emigrar, tratando de estar siempre dispuestos a amarlos y custodiando esta relación de paz».  

Encuentro con lo Absoluto

Encuentro con lo Absoluto

¡Chiara 4Te he encontrado en muchos lugares, Señor! Te he sentido palpitar en el silencio profundo de una ermita alpina, en la penumbra del sagrario de una catedral vacía, en el palpitar unánime de una muchedumbre que te ama y llena las arcadas de tu iglesia de cantos y de amor. Te he encontrado en la alegría. Te he hablado más allá del firmamento estrellado, mientras, de noche y en silencio, volvía del trabajo a casa. Te busco y a menudo te encuentro. Pero donde siempre te encuentro es en el dolor. Un dolor, cualquier dolor, es como el sonido de la campanilla que llama a la esposa de Dios a la oración. Cuando aparece la sombra de la cruz, el alma se recoge en el sagrario de su intimidad y, olvidando el tintineo de la campana, te «ve» y te habla. Eres Tú, que vienes a visitarme. Soy yo que te respondo: «Heme aquí, Señor. Te quiero. Te he querido». Y en este encuentro mi alma no siente su dolor, sino que está como embriagada por tu amor, invadida por ti, impregnada de ti: yo en ti, Tú en mí, a fin de que seamos uno. Luego, abro de nuevo los ojos a la vida, a la vida menos verdadera, divinamente aguerrida, para conducir tu guerra. De Chiara Lubich, “La doctrina espiritual”, Editorial Ciudad Nueva, Madrid 2002, págs.140-141.

África: la paz a pesar de todo

África: la paz a pesar de todo

Gen BurundiDespués de una violenta guerra civil que duró unos largos 12 años, Burundi, está actualmente sufriendo una crisis política que produce una gran fractura entre las instituciones y los ciudadanos. Hay numerosas manifestaciones de protesta en contra del gobierno y muchos jóvenes fueron arrestados. Se producen homicidios y secuestros, y muchos huyen dejando los propios pueblos o inclusive el país.

Los gen, jóvenes de los Focolares, se comprometieron en “vivir por la propia gente”,  reconociendo en cada dificultad o persona que sufre un rostro de Jesús crucificado y abandonado, para amarlo concretamente. «Fuimos a socorrer a muchos heridos – cuenta Lewis. Durante una de las visitas a un hospital de la capital lavamos la ropa de los enfermos y compartimos comidas con algunos de ellos. Fuimos a visitar a los niños de un asilo de huérfanos. Jugamos y compartimos la tarde con ellos, tratando de que estén contentos. Aprovechamos también para ayudar en la limpieza». Los gen, muchos de ellos estudiantes universitarios, organizaron una “Conferencia de paz” en la Universidad de Burundi,  que estuvo muy concurrida. «La sala estaba llena y  esto nos confirmó que las personas aspiran de verdad a la paz. Nuestro grupo musical, el “Gen Sorriso”  cantó algunas canciones que fueron muy bien recibidas por parte de los presentes. En especial la canción “I Believe” (ver el video) compuesta por ellos, alienta a los jóvenes de nuestro pueblo a ir contra la corriente, siendo sensibles al sufrimiento de los demás, con la invitación de hacer la propia parte para cambiar el mundo. Cuando hicimos las tomas de este videoclip nos tuvimos que esforzar para ir más allá de las situaciones adversas que nos rodeaban y creer, que, a pesar de todos,  la paz es siempre posible». Para que sea más visible y eficaz su compromiso, junto con la comunidad local de los Focolares, los jóvenes comenzaron el proyecto “TOPA” (Proyecto por la paz en Burundi), que incluye una serie de iniciativas en favor de la paz y de la reconciliación. «A través de conferencias temáticas, programas de radio, actividades de beneficiencia, concursos de arte, de poesía y de canto y una gran fiesta de clausura, iniciativas que fueron siempre difundidas en las redes sociales, tratamos de involucrar al mayor número de personas a que se comprometan con nosotros para construir la paz en nuestro país». https://www.youtube.com/watch?v=Q2fobgsqI7c

Europa, “Familia de pueblos”

Europa, “Familia de pueblos”

Malta 3«El pasado 25 de marzo se conmemoró el 60° aniversario de los Tratados de Roma, que hicieron nacer concretamente aquella “comunidad de pueblos” que Robert Schuman había entrevisto plenamente. El 7 de mayo de 1950, de hecho, había propuesto a Adenauer una solidaridad de producción” de carbón y acero, que hiciera imposible cualquier forma de guerra entre Francia, Alemania y los demás Países que adhirieran. Un acto extraordinario para reconciliar a pueblos postrados por el más terrible conflicto experimentado hasta el día de hoy. Europa estaba devastada, más de 35 millones de muertos, no sólo escombros, sino también destrucción social, política, moral. Sin leyes, sin orden público, sin servicios… En aquellos estremecedores días ya habría sido mucho salvaguardar la seguridad de los confines y vigilar sobre los acuerdos de paz. ¿Cómo se ha llegado, en cambio, a imaginar la curación profunda de las heridas de tal modo que de tantos pueblos  en contraposición formen un solo pueblo europeo? ¿Quién inspiraba a Schuman, Adenauer, De Gasperi y a otros más? Queremos pensar que ha sido Dios quien suscitó las ideas y la fuerza para Europa. Dios que testimonió su amor por los hombres hasta morir por ellos con una muerte atroz e infame, que se identificó con todos los dolores de la Humanidad, comprendidos los que derivan de las violencias y las guerras. Dios, que también hoy puede pedir a los pueblos que se reconcilien y formen una única familia universal. Los fundadores de Europa hicieron esa experiencia. No se dejaron aplastar por lo absurdo del mal, de las dictaduras deshumanas, del conflicto, de la Shoah… Chiara Lubich, la fundadora del Movimiento de los Focolares, a propósito de la cultura que nace de una profunda reconciliación, decía: “…Cada persona puede aportar una propia, típica contribución a todos los ámbitos: a la ciencia, al arte, a la política, a las comunicaciones y así sucesivamente. Y su eficacia será mayor si trabaja juntamente con otros, unidos en el nombre de Cristo. Es la Encarnación que continúa, encarnación completa que se refiere a todos los miembros del Cuerpo místico de Cristo. Así nace y se difunde en el mundo, la que podríamos llamar “cultura de la Resurrección”: cultura del Resucitado, del Hombre nuevo y, en Él, de la Humanidad nueva”. Y si ésta fue en cierto modo la aventura de los fundadores de Europa, podemos – y diría: debemos – aspirar a continuar su obra. Todos estamos llamados a ello. La unidad de los pueblos de Europa es un itinerario educativo, cultural, espiritual, y al mismo tiempo, también político, económico, social, comunicativo. He aquí, por tanto, algún posible paso ulteriorante todo se nos pide a nosotros los cristianos no sólo la reconciliación sino un camino de común testimonio, camino que ha visto recientes encuentros históricos: en Lund, en Suecia; en Lesbo, en Grecia; en Cuba. A todos nosotros nos toca la tarea de contribuir en los pasos hacia la plena y visible comunión, sabiendo que esto será muy determinante para la unidad de Europa y para servir mejor a la Humanidad. Queremos además ensanchar la mirada a toda Europa  – del Atlántico a los Urales – y esto significa el reconocimiento recíproco de los valores y los espacios de colaboración entre el Norte y el Sur, entre el Este y el Oeste. Las guerras, los regímenes totalitarios, las injusticias, han dejado heridas que hay que curar. Para ser verdaderamente constructores de la unidad europea, debemos lograr reconocer que lo que hoy somos es fruto de una historia común y de un destino europeo que tenemos que tomar  íntegramente en nuestras manos. Si como consecuencia se renovaran las relaciones entre la Unión Europea y los Países europeos que no adhieren a ella, éste sería un paso importante para la paz, particularmente para Oriente Medio. También en Europa hay una fuerte necesidad de participación de los ciudadanos en la vida de la ciudad y de todo el continente. En otras palabras, hay que regenerar la democracia que nació en Europa que, sin embargo, hoy tiene necesidad de una nueva dimensión, más efectiva, más densa, más adecuada a este siglo. Malta 4Y prosigue: En un contexto europeo multicultural y multireligioso hay una gran necesidad de una nueva capacidad de diálogo. Diálogo que puede sustentarse en la “Regla de oro“, que dice: “Haz a los demás lo que querrías que te hicieran a ti” (Cf. Lc 6,31); regla común a todas las principales religiones de la Tierra y que acogen con gusto también quienes no tienen un referente religioso. Sería necesario además revisar y aplicar, también a nivel institucional, el lema elegido por la Unión Europea “unidad y diversidad”. Sería un don también para los pueblos que, en otros continentes, están buscando caminos para unirse. En la visión de los fundadores, nunca se pensó en una Europa cerrada en sí misma, sino abierta a la unidad de la familia humana. Es significativo reafirmarlo aquí en Malta, el Estado europeo más al Sur, inmerso por alimentación, lengua y, sobre todo, por vocación, en el Mediterráneo, que de ‘tumba azul’ debería volver a ser “Mare nostrum”: de Europa, de África y de Oriente Medio unidos. Las muchas crisis internacionales actuales nos dan la nítida percepción de que es muy largo el camino para llegar verdaderamente a ello. Decía todavía Chiara Lubich: “Hace falta un estudio paciente, hace falta sabiduría, hace falta sobre todo no olvidar que hay Alguien que sigue nuestra historia y desea – si colaboramos con nuestra buena voluntad – realizar sus designios de amor sobre nuestro continente y sobre todo nuestro planeta”. Podemos concluir que para un fin tan alto vale la pena, sin duda, comprometer toda nuestra existencia. Que también este Forum contribuya a poner en pie aquella “Europa familia de pueblos” que, según el Papa Francisco, es “capaz de dar a luz un nuevo humanismo basado en tres capacidades: la capacidad de integrar, la capacidad de dialogar y la capacidad de generar”». María Voce Malta, St John’s Cathedral, 7 de mayo de 2017  

Un largo camino en Medio Oriente

Un largo camino en Medio Oriente

Il lungo cammino...Se viaja por varios motivos: por curiosidad, por sed de conocer, por espíritu de aventura, para encontrar respuestas o para conocerse a sí mismos. No es así para Gianni Ricci, autor junto con Delfina Ducci de un volumen editado por Cittá Nuova, El largo camino del “hacerse uno”, quien ha recorrido muchos kilómetros. Su vida es una “vida en viaje”, se podría decir, pero para acercarse a las infinitas modalidades de la humanidad que sufre. Nace en Ripalta, Cremasca, en el Norte de Italia, en una familia sencilla pero digna, crece en la autenticidad de los valores cristianos. A los veinte años conoce el Ideal de la unidad de Chiara Lubich, que revoluciona su modelo de vida cristiano, a tal punto que comprende que el camino del focolar es un camino para recorrer durante toda la vida. En 1964 parte para Loppiano (Florencia, Italia), ciudadela del Movimento que estaba en sus inicios, a la que se dedica durante más de veinte años con gran empeño. Después de Loppiano, su adhesión a los planes de Dios lo lleva a trasladarse, primero a Turquía, para seguir los desarrollos de la comunidad naciente, después va a Líbano, Tierra Santa, Argelia, Jordania, Iraq, Egipto, Siria, Túnez, Marruecos. «¡Cuántos cambios imprevistos en mi vida! ¿Qué posibilidades o gracias me faltan para hacerme santo? Aquí hay mucho trabajo por hacer» Gianni Ricci, globe trotter del alma, anota todo lo que encuentra, desglosando detalles en las dificultades encontradas, especialmente en la forma de relacionarse con pueblos tan distintos. Inclusive mostrando la tragedia de las guerras, que causan heridas profundas en la población y empañan las esperanzas de un posible futuro de estabilidad y paz, no busca soluciones o posibles explicaciones en la historia. Simplemente vive al lado de quien encuentra, con el corazón libre y abierto hacia una humanidad “esparcida”, que habla el mismo idioma del corazón y del sufrimiento. «A fines de enero de 1986, con Aletta (focolarina de los primeros tiempos), comienza el primer viaje desde Estambul a Ankara y desde allí a Beirut, en Líbano. ¡El aeropuerto está casi destruido por las bombas! Líbano había sido sacudida por la guerra civil (…). Los controles son implacables, las autoridades sospechan de todo y de todos. Cada cabina de control es manejada por facciones distintas. Después de ocho días, Gianni parte para Estambul. A lo largo de los 120 Km que separan Beirut de la frontera con Siria, lo esperan 13 puestos de control. En la primera arriesga la vida. Gianni se detiene delante de un puesto, donde un soldado armado hasta los dientes le pide los documentos. Se los da y parte. Después de pocos metros un joven le pide que vuelva atrás y le hace notar que el guardia tiene el fusil apuntándolo y que no le había dado el permiso para proseguir. No apretó el gatillo, gracias a Alá, le dice». No es un relato político, sino exquisito y “solamente” humano. La humanidad de la que habla no tiene color o idioma, no tiene pasaporte, fronteras, leyes o costumbres. En cada lugar donde fue destinado, Gianni cuida especialmente la relación con las Iglesias locales, con el Islam, con el mundo judío, se dedica a sostener a las personas que encuentra desafiando el miedo, la incertidumbre por el mañana, la tensión provocada por la guerra. Una sucesión de recuerdos en la perspectiva de la unidad. Esta es la “lógica” que todavía mueve a Gianni, una persona que observa con asombro las cosas de Dios.   Las citas son extraídas de “El largo camino del `hacerse uno´”. Experiencias en Medio Oriente, Cittá Nuova, 2016.  

Kilómetros de esperanza

Kilómetros de esperanza

Gen Rosso-aToda vida conlleva una esperanza. También en el oscuro túnel de la dependencia se puede encender una luz. En 1983, en la ciudad de Guaratinguetá, en el Estado de San Pablo (Brasil), Nelson Giovanelli se acercó a un grupo de drogadictos, animado por el Padre Hans Stepel, franciscano alemán. Nelson se conquista su confianza. Uno de ellos, Antonio Eleuterio, pide ayuda para salir del círculo de la droga. Son los primeros pasos de la gran familia de la Fazenda da Esperança. En1989, Iraci Leite y Lucilene Rosendo, dos jóvenes chicas de la misma parroquia, siguiendo el ejemplo de Nelson, dejan todo para dedicarse totalmente a esta nueva misión. En el 2007, el papa Benedicto XVI visita la primera comunidad en Pedrinhas, en Brasil, cerca del Santuario de Aparecida. Desde entonces la propuesta de vida de la Fazenda da Esperança empieza a difundirse en todo el mundo. Los trabajadores de las actuales 118 Fazendas, esparcidas en 17 naciones, son personas voluntarias, a menudo provenientes de un pasado de droga y alcohol, quienes después de un camino de recuperación han advertido el llamado de Dios a ser también ellos portadores de la esperanza para cuantos han precipitado en su misma oscuridad. Los primeros días de mayo de 2017, 60 voluntarios de varias Fazendas del mundo fueron a Asís, la ciudadela de San Francisco y Santa Clara, y a Loppiano (Italia), para iniciar una nueva “misión esperanza” a lo largo de las vías de Europa. Durante dos semanas con ellos estuvo también el conjunto internacional Gen Rosso. Alemania, finales de mayo. Cuentan algunos miembros del conjunto: «Cada mañana una caravana de automóviles y camionetas partía para un nuevo destino, en un área de 400 kilómetros: escuelas, comunidades, grupos, cárceles. Los chicos y las chicas de la Fazenda comparten el testimonio de sus vidas atormentadas; suscitan interrogantes, responden a las preguntas. Sobre todo encienden la esperanza, si ellos lo lograron ¿por qué yo no? Son historias de droga, desesperación, soledad, temor, crímenes, cárcel. Cuando la oscuridad era total, una luz se encendió en sus vidas: Dios me ama, así como soy, así como estoy reducido. ¿A qué aferrarse para renacer? A la “Palabra de vida”, al amor recíproco, pan cotidiano para volverse a levantar y recomenzar». Un mensaje detonador, que va con el sonido de las palabras, pero también al ritmo de la música y siguiendo los pasos de la danza, haciéndose cada vez más atrayente. Primero suscita simple interés y momentos de suspenso, Después la duda se disipa, en la boca de muchos chicos se abre la sonrisa. Hasta llegar a momentos de profundo intercambio. «También hoy el anuncio de la esperanza se ha abierto brecha en muchos corazones». El tourEvery Life Has Hope” recorre kilómetros, atraviesa ciudades y regiones, dando testimonio de la presencia de Dios en el hoy de la sociedad, y de la posibilidad para todos, sin excluir a nadie, de volver a empezar. En la cárcel de Bielefeld, la “caravana” se encuentra con cien detenidos. En Arnsberg, ciudad del noreste de Alemania, se reúne con los miembros del Movimiento Shalom. El día de Pentecostés, en Colonia, el viaje prevé una etapa en una comunidad parroquial, en la tarde tiene lugar el encuentro con la Cáritas. Por invitación del obispo auxiliar, el conjunto canta la misa en la Catedral, proponiendo “Yo estaba allí”, una canción compuesta para esa ocasión. En Gut Hange festejan los primeros 5 años de la apertura de una Fazenda femenina. Y todavía: visitas a lugares de acogida de mendigos, enfermos terminales, encuentros con estudiantes y con chicos drogadictos que están en una institución pública, con una congregación de hermanas que se dedica a la acogida de chicas en serias dificultades. El tour hace una etapa en Bélgica, en la comunidad de Peer, una ciudad donde pronto se abrirá una nueva Fazenda. Después de dos semanas intensas y alegres, el grupo de la Fazenda prosigue hacia Berlín y Polonia, mientras que el Gen Rosso regresa a Loppiano en vista de las próximas etapas del musical “Campus” en Puglia (en el sur de Italia), donde se inaugurará una nueva Fazenda. Nuevamente juntos para encender una nueva esperanza.    

El Evangelio vivido: ir contra la corriente

El Evangelio vivido: ir contra la corriente

20170703-01¿Cuántas veces se debe perdonar? «Hace tres años mi hermanastro mayor vino a nuestra casa y ofendió a mi esposa cuando yo estaba afuera, en el trabajo. Cuando volví a casa me enojé mucho, pero juntos decidimos no reaccionar. Después supimos que su hija, que vivía con nosotros en ese período, había vuelto a su casa diciendo que debía prepararse ella sola el almuerzo. Además, ante nuestra gran sorpresa, mi hermano comenzó a contar a las personas de nuestra comunidad que lo habíamos insultado y que nos perdonaría solamente después que le expresáramos nuestras disculpas. En ese momento, para nosotros, era demasiado y durante un año no le dirigimos más la palabra. Un día me acordé que Jesús nos enseñó que debemos perdonar hasta setenta veces siete, cualquiera sea la situación que se presente y además rezar por nuestros enemigos. Así, el último día del año, organicé una reunión de reconciliación entre nosotros, con la presencia de toda nuestra gran familia. Fui el primero en hablar. Les dije a los miembros de la familia que no estábamos allí para hacer grandes discursos, ni para juzgar al otro, sino simplemente para pedir perdón a mi hermano mayor y que estábamos entristecidos por haberlo ofendido. Después me levanté y me arrodillé delante de él, un gesto que significaba humildad y magnanimidad, dos virtudes cristianas. Los miembros de la familia, incluido mi hermano, quedaron asombrados por este gesto y ninguno de ellos se animaba a decir ninguna palabra.  Después de un momento, él dijo que me había perdonado. Volvimos a casa felices y serenos por haber restablecido la paz entre nuestras familias.»  (Christopher e Perpetua Idu – África) Pearl_resizedUna perla de gran valor «Estaba viviendo un matrimonio verdaderamente duro. Mi marido, que en un tiempo era un hombre amable, inteligente y culto, se había vuelto alcohólico debido al período en que había vivido bajo las armas. Cuando volvió del frente (de guerra) a Inglaterra, retomó la vida de forma normal, pero pronto le apareció una úlcera duodenal que le dolía mucho. Era incurable y muy a menudo no estaba en condiciones de trabajar. Fue en ese momento que descubrió el alcohol como una eficaz solución para no sentir el dolor… Bebía mucho. Viví con él este momento terrible. Fue un verdadero trauma tanto físico como mental: ¡no podía más! Pedí consejo a varios médicos y profesionales pero sin éxito. Después de algunos años encontramos el Movimiento de los Focolares. Escribí a una persona a la que le tenía mucho respeto y confianza. Su respuesta me asombró: «Gracias por compartir conmigo tu “perla de gran valor”…». ¿Cómo podía llamarse a la enorme dificultad que estábamos viviendo, una “perla de gran valor”? Se necesitaron años para comenzar a comprender de qué modo podría transformar el sufrimiento en amor, saber perder todo lo que creía que era necesario para nosotros, ser aceptados socialmente, y no fingir que todo estaba bien. En el fondo se trataba de decir “sí” en vez de “no”. Al final me rendí, permitiendo que Dios me envolviera entre Sus brazos. Y Él se manifestó. En el último período de su vida, mi marido hizo una experiencia profunda del amor personal de Dios y no tomó más. También yo logré liberarme de la depresión. Es cierto que llegar a esta meta me llevó una gran parte de mi vida. Pero era, y es, mi “perla de gran valor”.» (Fuente: New City – Londres)

El esplendor de la naturaleza

El esplendor de la naturaleza

«Contemplando la inmensidad del universo, la extraordinaria belleza de la naturaleza y su potencia, me remonté espontáneamente al Creador de todo y adquirí una nueva comprensión acerca de la inmensidad de Dios. La impresión que tuve fue tan fuerte y tan nueva que enseguida me habría arrojado a tierra de rodillas para adorar, alabar y glorificar a Dios. Sentí la necesidad de hacerlo como si ésta fuese mi vocación actual. Y casi como si ahora se abrieran mis ojos, comprendí como nunca Quién es el que hemos elegido como ideal; o mejor dicho, Quién es el que nos ha elegido a nosotros. Lo vi tan grande, tan grande, tan grande que me parecía imposible que hubiera pensado en nosotros. Esta impresión de su inmensidad ha permanecido en mi corazón durante algunos días. Ahora, al rezar: “Santificado sea tu nombre” o “Gloria al Padre, al Hijo, al Espíritu Santo” es otra cosa para mí: es una necesidad del corazón. (Rocca di Papa, 22.1.87) «[…]  Contemplar, tal vez, la infinita extensión del mar, una cadena de montañas altísimas, un glaciar imponente, o la bóveda del cielo punteada de estrellas… ¡Qué majestuosidad! ¡Qué inmensidad! Y a través del esplendor deslumbrante de la naturaleza, nos remontásemos a Aquél que es su autor: Dios, el Rey del universo, el Señor de las galaxias, el Infinito. […] Él está presente en todas partes: está en el centelleo de un arroyo, en una flor que se abre, en una aurora clara, en un rojo atardecer, en una cumbre nevada … En nuestras metrópolis de cemento, construidas por la mano del hombre entre el ruido del mundo, la naturaleza pocas veces se ha salvado. Y sin embargo, si queremos, basta con un retazo de cielo azul descubierto entre los tejados de los rascacielos, para acordarnos de Dios; es suficiente un rayo de sol, que no deja de penetrar ni siquiera a través de los barrotes de una cárcel; es suficiente una flor, un prado, el rostro de un niño…  […] Esto nos ayudará a regresar entre los hombres, donde tenemos nuestro sitio, sintiéndonos fortalecidos, igual que se sentía Jesús cuando, después de haber rezado al Padre durante toda la noche en los montes, bajo el cielo estrellado, volvía entre los hombres a hacer el bien». (Mollens, 22.9.88) De Chiara Lubich – “Buscando las cosas de arriba” – Editorial Ciudad Nueva, Madrid 1993, págs. 18 – 20